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COMERCIO N°64
ÁREA: C y T 4to Secundaria
ENFERMEDADES DE LA NUTRICIÓN
La mala nutrición es uno de los grandes problemas de la vida moderna, debido a las prisas y a los horarios
complicados se ha generado que la comida chatarra gane terreno y su exceso en grasas saturadas, sal y calorías,
puedan dañar nuestra salud
Trastornos de la alimentación
Los trastornos alimentarios son enfermedades graves que afectan tanto la salud física como la mental.
Estas afecciones incluyen problemas en la forma de pensar sobre la comida, la alimentación, el peso y
la figura, así como en los comportamientos alimentarios. Estos síntomas pueden afectar tu salud, tus
emociones y tu capacidad para desenvolverte en ámbitos importantes de la vida.
Si no se tratan de manera eficaz, los trastornos alimentarios pueden convertirse en problemas crónicos
y, en algunos casos, pueden causar la muerte. Los trastornos alimentarios más frecuentes son la
anorexia, la bulimia y el trastorno alimentario compulsivo.
La mayoría de los trastornos alimentarios implica centrarse demasiado en el peso, la forma del cuerpo
y la comida. Esto puede derivar en comportamientos alimentarios peligrosos. Estos comportamientos
pueden afectar gravemente la capacidad de obtener la nutrición que el cuerpo necesita. Los trastornos
alimentarios pueden dañar el corazón, el aparato digestivo, los huesos, los dientes y la boca. Pueden
llevar a otras enfermedades. También están relacionados con la depresión, la ansiedad, las autolesiones
y los pensamientos y comportamientos suicidas.
Con el tratamiento adecuado, puedes volver a tener hábitos alimentarios más saludables y aprender
formas más sanas de pensar sobre la comida y el cuerpo. También puedes revertir o reducir los
problemas graves causados por el trastorno alimentario.
La alimentación resulta esencial para disfrutar de un adecuado estado de salud. Pese a ello, no siempre
estamos informados sobre esto. Para que aprendas a conocer un poco más este mundo a continuación te
mostramos cuáles son las principales enfermedades nutricionales.
Obesidad y sobrepeso
Bulimia
Diabetes
Anemia
Anorexia
Un trastorno alimentario puede ser difícil de controlar o superar sin ayuda. Cuanto antes recibas
tratamiento, más probabilidades tendrás de una recuperación completa. A veces las personas pueden
tener comportamientos alimentarios problemáticos que son similares a algunos de los síntomas de un
trastorno alimentario, pero los síntomas no cumplen con las pautas para el diagnóstico de un trastorno
alimentario. Sin embargo, estos comportamientos alimentarios problemáticos pueden afectar
gravemente la salud y el bienestar.
Muchas personas que tienen trastornos alimentarios piensan que no necesitan tratamiento. Una de las
características principales de muchos trastornos alimentarios es no darse cuenta de la gravedad de los
síntomas. Además, la culpa y la vergüenza suelen hacer que las personas eviten pedir ayuda.
Si te preocupa algún amigo o familiar, pídele que hable con un proveedor de atención médica de
inmediato. Aunque esa persona no esté lista para admitir que tiene un problema con la comida, puedes
iniciar la conversación expresándole que estás preocupado y deseas escucharla.
Algunas de las señales de alerta que pueden indicar la presencia de un trastorno alimentario son las
siguientes:
Causas
Se desconoce la causa exacta de los trastornos de alimentación. Al igual que ocurre con otras
afecciones de salud mental, puede haber distintas causas, como las siguientes:
Genética. Es posible que algunas personas tengan genes que aumentan el riesgo de desarrollar un trastorno
alimentario.
Biología. Los factores biológicos, como los cambios en las sustancias químicas del cerebro, pueden influir en
estos trastornos.
Factores de riesgo
Cualquier persona puede desarrollar un trastorno alimentario. Los trastornos alimentarios suelen
comenzar durante la adolescencia y la juventud, aunque pueden producirse a cualquier edad.
Ciertos factores pueden incrementar el riesgo de desarrollar trastornos alimentarios, como los
siguientes:
Antecedentes familiares. Los trastornos alimentarios son más probables en personas con padres o hermanos
que han tenido ese tipo de trastorno.
Otros problemas de salud mental. Los traumas, la ansiedad, la depresión, el trastorno obsesivo compulsivo y
otros problemas de salud mental pueden aumentar las probabilidades de tener un trastorno alimentario.
Dietas e inanición. Hacer dieta con frecuencia es un factor de riesgo para desarrollar un trastorno
alimentario, en especial si el peso corporal sube y baja constantemente al iniciar y abandonar nuevas dietas.
Existen pruebas sólidas de que muchos de los síntomas de un trastorno alimentario son síntomas de inanición.
La inanición afecta al cerebro y puede llevar a cambios en el estado de ánimo, pensamiento inflexible, ansiedad
y reducción del apetito. Esto puede hacer que se mantengan la ingesta insuficiente de alimentos o las
conductas alimentarias problemáticas y que resulte difícil recuperar los hábitos de alimentación saludable.
Antecedentes de acoso por el peso. Las personas que han sido acosadas o sujeto de burlas por su peso son
más propensas a desarrollar problemas con la alimentación o trastornos alimentarios. Entre ellas, se incluyen
las personas a quienes han avergonzado por su peso sus compañeros, profesionales de atención médica,
entrenadores, maestros o familiares.
Estrés. Los cambios pueden causar estrés, ya sea el comienzo de la universidad, una mudanza, un trabajo
nuevo o problemas familiares o de pareja. Y el estrés puede aumentar el riesgo de presentar un trastorno
alimentario.
Complicaciones
Los trastornos alimentarios causan complicaciones muy variadas, algunas de las cuales ponen en riesgo
la vida. Cuanto mayor es la gravedad del trastorno o cuanto más perdura, más probable es que se
presenten complicaciones graves. Estas pueden ser algunas de ellas:
Prevención
No hay una forma segura de prevenir los trastornos alimentarios, pero puedes tomar medidas para
desarrollar hábitos alimentarios saludables. Si tienes un hijo, puedes ayudarle a reducir el riesgo de que
desarrolle trastornos alimentarios.
Adultos
Elige una dieta saludable rica en granos o cereales integrales, frutas y verduras. Limita el consumo de sal,
azúcar, alcohol, grasas saturadas y grasas trans. Evita las dietas extremas. Si debes perder peso, habla con el
proveedor de atención médica o con un dietista para crear un plan que satisfaga tus necesidades.
No uses suplementos alimenticios, laxantes ni productos herbarios para bajar de peso.
Haz suficiente actividad física. Cada semana, haz al menos 150 minutos de actividad aeróbica, como caminar
a paso ligero. Elige actividades que disfrutes para que sea más probable que las hagas.
Busca ayuda para los problemas de salud mental, como depresión, ansiedad o problemas con la autoestima y
la imagen corporal.
Para ver más pautas sobre alimentos y nutrición, así como actividad física, ingresa a health.gov.
Habla con el proveedor de atención médica si tienes inquietudes sobre tus conductas alimenticias. El
tratamiento temprano puede evitar que el problema empeore.
Niños
Estas son algunas maneras de ayudar a tu hijo a desarrollar conductas alimentarias saludables:
Evita hacer dieta en presencia de tu hijo. Es posible que los hábitos alimentarios familiares influyan en las
relaciones que los niños desarrollan con la comida. Comer en familia te da la oportunidad de enseñarle a tu hijo
sobre los peligros de hacer dietas. También te ayuda a observar si tu hijo come suficiente cantidad y variedad
de alimentos.
Habla con tu hijo. Existen muchos sitios web y otros espacios en las redes sociales que fomentan ideas
peligrosas, como proponer que la anorexia es la elección de un estilo de vida y no un trastorno alimentario.
Algunos sitios alientan a los adolescentes a comenzar dietas restrictivas. Es importante corregir este tipo de
ideas erróneas. Habla con tu hijo sobre los riesgos de tomar decisiones poco saludables en cuanto a la
alimentación.
Alienta y refuerza una imagen corporal saludable en tu hijo, independientemente de su figura o talla. Habla
con tu hijo sobre la imagen que tiene de sí mismo y tranquilízalo diciéndole que las formas del cuerpo pueden
ser diferentes. No critiques tu propio cuerpo delante de tu hijo. Los mensajes de aceptación y respeto pueden
ayudar a desarrollar una autoestima sana. También pueden desarrollar resiliencia, la capacidad de recuperarse
con rapidez de situaciones difíciles. Estas habilidades pueden ayudar a los niños a sobrellevar los momentos
desafiantes de la adolescencia y la juventud.
Pide ayuda al proveedor de atención médica de tu hijo. En las visitas del niño sano, los proveedores de
atención médica podrían identificar los signos tempranos de un trastorno alimentario. Pueden preguntar al
niño sobre sus hábitos alimentarios. Estas consultas incluyen el control de los percentiles de estatura y peso y
del índice de masa corporal, que pueden advertirles a ti y al proveedor de atención médica de tu hijo de
cualquier cambio importante.
Trabajo en aula
1. ¿Cuáles son algunos de los problemas de la vida 8. ¿Qué es la desnutrición y cuáles son algunas de las
moderna que contribuyen a la mala nutrición? posibles causas?
2. ¿Qué consecuencias pueden tener los trastornos 9. ¿Cuáles son los síntomas y características de la
alimentarios si no se tratan adecuadamente? bulimia?
3. ¿Cuáles son los trastornos alimentarios más 10. ¿En qué consiste la diabetes y cómo se relaciona
comunes mencionados en el texto? con la obesidad?
4. ¿En qué partes del cuerpo pueden tener un impacto 11. ¿Qué es la anemia y cuál es una forma de prevenir
negativo los trastornos alimentarios? la falta de hierro en el organismo?
5. ¿Qué se puede hacer con el tratamiento adecuado 12. ¿Cuál es la diferencia entre la anorexia y la
para los trastornos alimentarios? bulimia?
6. ¿Cuáles son algunas de las principales 13. ¿Cuándo se debe consultar a un médico respecto a
enfermedades nutricionales mencionadas en el los trastornos alimentarios?
texto?