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ORIGINAL

Causas y consecuencias de la atrofia muscular y


desmineralización en los amputados de la extremidad
inferior
M. A. GONZÁLEZ VIEJO* y M. J. CONDÓN HUERTA**
*Hospital Universitari Germans Trías i Pujol (Badalona). **Hospital Virgen del Camino (Pamplona).

drangulares y los CAT-CAM en los amputados femorales y


Resumen.—Material y método: Se ha realizado un estu- los PTB, PTS y KBM en los tibiales y utilizar más los en-
dio prospectivo con 47 amputados de extremidad inferior, cajes de contacto total, mediante silicona y lanzadera.
33 femorales y 14 tibiales, para conocer la atrofia muscular Igualmente deberíamos indicar la práctica rutinaria de os-
y la desmineralización que se produce, a pesar de la prote- teomioplastia y cierre de la cavidad medular para evitar el
tización precoz, a través de la determinación del diámetro proceso de desmineralización.
muscular por tomografía axial computarizada y la densidad
Palabras clave: Amputados. Atrofia muscular. Des-
mineral por absorciometría fotónica dual.
mineralización.
Resultados: Hemos objetivado una atrofia muscular, esta-
dísticamente significativa, en los músculos: Gluteus Maximus,
Gluteus Medius, Gluteus Minimus, Rectus Femoris, Tensor
MUSCULAR ATROPHY AND DEMINERALIZATION
Fasciae Latae y Sartorius en los amputados femorales y en
IN LOW LIMB AMPUTEES. CAUSES AND
el Gluteus Maximus, Gluteus Medius y Rectus Femoris en
CONSEQUENCES
los amputados tibiales, al compararlos con los de la extre-
midad indemne. En ambos niveles de amputación existe pér- Summary.—Material and methods: We have performed
dida de densidad mineral ósea (hidroxiapatita/cm2) signifi- a prospective study with 47 lower limb amputee patients,
cativa en triángulo de Ward, cuello femoral y trocánter, al 33 of them with an above-knee (AK) and 14 with a below-
compararlos con las mismas localizaciones de la extremidad knee (BK) amputation. In order to know the muscular
indemne. En los amputados tibiales además se produce una atrophy and demineralization produced in spite of early
pérdida de densidad mineral significativa en la meseta tibial prothetization, muscular diameter was determined by CT
amputada. No ha podido constatarse que la pérdida de den- scan and mineral density by dual photon absorptiometer.
sidad muscular tenga relación con el tiempo transcurrido Results: We have observed statistically significant muscular
desde la amputación y la protetización definitiva, mientras atrophy in the Gluteus Maximus, Gluteus Medius, Gluteus Mi-
que ha podido determinarse en los amputados femorales nimus, Rectus Femoris, Tensor Fascia Latae and Sartorius
que existe a nivel del triángulo de Ward una relación entre muscles in AK amputees and in Gluteus Maximus, Gluteus
la pérdida de densidad mineral y el tiempo transcurrido Medius and Rectus Femoris in BK amputees when compared
desde la amputación. Sólo se han encontrado diferencias en with the uninjured limbs. There was bone mineral density loss
la densidad muscular de la extremidad amputada entre los (hydroxyapatite/cm2) on both levels of amputation which was
amputados femorales y los tibiales en el Rectus Femoris significant in the Ward triangle, femoral neck and trochanter
(p<0,05) y el Tensor Fascia Latae (p<0,05). No hemos when compared with the same sites of the uninjured limb. In
observado diferencias en la densidad mineral ósea de la ex- the BK amputees, there was also significant mineral density
tremidad amputada, entre los amputados de las dos locali- in the amputated tibial meseta. It was not possible to verify
zaciones, excepto en el cuello femoral (p<0,05) donde exis- that muscular density loss was related with the time since the
te mayor desmineralización en amputados femorales. amputation and final prothethization, however, it was possi-
Para evitar la atrofia muscular y la desmineralización de- ble to determine that there was a relationship between the
bemos indicar que se utilicen con menos frecuencia los en- mineral density loss and time since the amputation in regards
cajes que provocan un by-pass de la carga, como los cua- to the Ward’s triangle. Significant differences were only found
in muscular density of the amputated limb between the Rec-
tus Femoris (p<0.05) and Rensor Fascia Latae (p<0.05). No
differences were observed in bone mineral density of the am-
Trabajo recibido el 13-VII-99. Aceptado el 25-I-00. putated limb between the amputees of the two sites, except

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in the femoral neck (p<0.05) in which there was greater de- tivos que nos hemos propuesto son: conocer la atro-
mineralization in the femoral amputees. fia muscular después de la amputación de etiología
In order to avoid muscular atrophy and demineralization, vascular, no traumática; establecer el grado de dispa-
we indicate that the sockets that provoke a by-pass of the load ridad de la atrofia entre amputados femorales y tibia-
and the quadrilateral sockets and CAT-CAM in the femoral les; determinar si se produce desmineralización en el
amputees and the PTB, PTS and KBM in the BK amputees are muñón óseo y en qué medida; evaluar las diferencias
used less frequently and the total contact sockets with silico- de mineralización entre los amputados femorales y ti-
ne and shuttle lock are used more often. In addition, we indi- biales; intentar relacionar la atrofia muscular con la
cate the routine practice of osteomyoplasty and bone marrow mineralización y la atrofia muscular con el tiempo trans-
cavity closure to avoid the demineralization process.
currido entre la amputación y la protetización; y rela-
Key words: Amputation. Muscular Atrophy. Demi- cionar la desmineralización, si la hubiera, con el tiempo
neralization. transcurrido entre la amputación y la protetización.

MATERIAL Y MÉTODO
INTRODUCCIÓN
Se realizó un estudio prospectivo y se selecciona-
Uno de los mayores problemas de los amputados ron 47 pacientes amputados a consecuencia de enfer-
femorales es la colocación del muñón en abducción, medad vascular, que se incluyeron en un protocolo de
que hace difícil el mantenimiento de la inercia de la protetización precoz, mediante la colocación de una
marcha y obliga a sacudidas bruscas de la pelvis para prótesis provisional cuando las circunstancias de la ci-
lanzar la extremidad (1). Otro problema es el efecto catriz lo permitiera, pasando a la prótesis definitiva en
pistón que se produce en todos los niveles de ampu- el momento que el proceso de conformación del
tación, por pérdida de volumen del muñón, lo que dis- muñón lo aconsejara y después de dos controles clí-
minuye la eficacia mecánica de la contracción muscu- nicos sin modificación sustancial del volumen, para evi-
lar e incrementa el consumo energético (2, 3), pro- tar que el tiempo transcurrido entre la amputación y
vocando un importante signo de Trendelemburg du- la protetización pudieran interferir en la densidad
rante el apoyo monopodal en la extremidad indemne. muscular y ósea.
Parece que todo eso tiene que ver con la atrofia mus-
cular que se produce y que estaría en relación con la En las amputaciones de nivel femoral se realizó la
técnica quirúrgica (1). técnica clásica, mediante la práctica de una incisión
mediolateral y el cierre se hizo mediante miodesis. En
La mayoría de los amputados recibe una cirugía
ningún caso se efectuó mioplastia ni cierre de la cavi-
convencional (4-9), sin que se observen, reconstruc-
dad medular ósea. En las amputaciones tibiales se
ciones que mejoren la función. Gottschalk et al. (10)
practicó la técnica sagital con colgajos medio lateral y
se preocupan de conocer la posición que adopta el
siempre se realizó miodesis.
fémur residual dentro del encaje, y muy pocos auto-
res (11-15) han estudiado la atrofia muscular, la fuer- En los amputados femorales la prótesis provisional
za residual y su influencia en la funcionalidad. constaba de un encaje cuadrangular con apoyo isquiá-
Podemos observar que en las amputaciones tibiales tico, de contacto subtotal, con rodilla bloqueada y pie
también aparece el signo de Trendelemburg. Esto no dinámico. La prótesis definitiva estaba formada por un
tiene explicación fácil, pues no parece que la técnica encaje cuadrangular de adherencia muscular y contac-
quirúrgica o la atrofia de la musculatura del muñón si- to total con apoyo isquiático o un encaje tipo CAT-
tuado por debajo de la rodilla pudieran ser los res- CAM. La rodilla se eligió de acuerdo con la edad y lon-
ponsables, sino que sería consecuencia de la atrofia gitud del muñón y el pie fue siempre dinámico. A los
del gluteus medius, que en principio no debería mos- amputados de nivel tibial se les colocó una prótesis
trar ninguna alteración. De la misma manera no se da provisional con sistema de suspensión KBM, con com-
importancia al proceso de desmineralización del presión progresiva del muñón y un pie dinámico. La
muñón óseo residual y no se atribuye a este proceso prótesis definitiva constaba de un sistema de suspen-
ningún efecto sobre la funcionalidad. sión KBM, con la modificación SCG y un pie dinámi-
co en todos los casos. Todos los amputados recibie-
La justificación de este trabajo radica en el intento
ron un programa estándar de rehabilitación.
de conocer cuáles son los parámetros morfológicos
que tienen valor para determinar la atrofia muscular y La determinación de la densidad mineral incluía las
qué grado de desmineralización se produce en las am- mediciones del Contenido Mineral Óseo (CMO) en
putaciones de extremidades inferiores, a pesar de uti- gramos de hidroxiapatita y de la Densidad Mineral
lizarse una protetización provisional precoz. Los obje- Ósea (DMO) en gramos/cm2 de hidroxiapatita y se

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efectuó mediante la técnica de la Densitometría o Ab- TABLA 1. Características de los amputados femorales (33
sorciometría Fotónica Dual (AFD), realizándose con casos) y tibiales (14 casos).
el Densitómetro Lunar DPX. En los amputados femo- Amputados Amputados
rales se realizó en tres diferentes localizaciones del femorales tibiales
fémur: cuello femoral, triángulo de Ward —imagen de
baja densidad radiológica situada en la base del cuello Edad (en años) 64 ± 12,4 59 ± 12,6
femoral— y trocánter, tanto en la extremidad ampu- Tiempo amputación-TAC
(en días) 619 ± 742,4 980 ± 2.072,9
tada como en la indemne, utilizándose ésta como
Tiempo amputación-AFD
grupo control. En los amputados tibiales, además de (en días) 589 ± 709,8 1.071 ± 2.047,7
las áreas mencionadas, se cuantificó también la densi- Tiempo prótesis-TAC
dad mineral en la meseta tibial, realizándose en las dos (en días) 402 ± 645,3 846 ± 2.057,2
extremidades y utilizándose de igual manera la in- Tiempo prótesis-AFD
demne como grupo control. (en días) 427 ± 648,3 942 ± 2.032,6
La determinación de la densidad muscular consistía
Valores expresados en media ± DE.
en la cuantificación de los diámetros transversos má- TAC: Tomografía axial computarizada.
ximos de los músculos: gluteus máximus (GM), gluteus AFD: Absorciometría fotónica dual.
medius (GMD), gluteus minimus (GMN), tensor fascia
latae (TFL), sartorius (S) y rectus femoris (RF) en
ambas extremidades. Se efectuó mediante la realiza-
ción de una Tomografía Axial Computarizada (TAC) a DMO, tanto en la extremidad indemne como en la
nivel pelvitrocantéreo a través de 24 cortes axiales amputada, y la varianza de un factor para determinar
entre la cresta ilíaca y el área situada 10 centímetros si el diámetro muscular de los músculos estudiados y
por debajo del trocánter mayor del fémur. De cada la DMO de los niveles evaluados tenían relación con
uno de los músculos se eligió el corte principal, aquel el tiempo transcurrido desde la amputación y la pro-
en el que puede observarse el máximo volumen mus- tetización.
cular. Se determinó el diámetro transversal máximo,
mediante el marcaje del punto tangencial al períme-
tro externo, realizándose la cuantificación numérica RESULTADOS
por el sistema de software del ordenador del tomó-
grafo axial. Se utilizó siempre el mismo nivel de corte La serie estaba compuesta por 33 amputados fe-
para cuantificar el diámetro máximo de cada múscu- morales, 26 varones y 7 mujeres con una edad media
lo en las dos extremidades. De esta forma se com- en 64 años (DE 12,4) y un rango entre 28 y 82 años
paran partes simétricas de los músculos y los diáme- y por 14 amputados tibiales, 9 varones y 5 mujeres,
tros de la extremidad indemne servían como grupo con una media de 59 años (DE 12,6) y un rango entre
control. 30 y 75 años (tabla 1). En los amputados femorales la
El momento elegido para ambas determinaciones causa de la amputación fue en todos los casos, ex-
fue cuando el paciente era portador de la prótesis de- cepto en uno, por isquemia arterial aguda provocada
finitiva y, por tanto, independiente para la deambula- por arteriopatía diabética. En el caso excepcional la
ción. amputación tuvo su origen en una arteriopatía se-
Los datos recogidos se ordenaron en una base de cundaria a homocistinuria. En los tibiales fue conse-
datos según el programa de sotfware Dbase III Plus® cuencia de isquemia arterial aguda por arteriopatía
y se trasladaron al paquete estadístico SPSS-PC Plus®. diabética.
Se utilizó la t de Student para muestras independien- El 82% de los amputados femorales se protetizó de
tes, para comparar la significación de las variables forma definitiva dentro del primer año, un 40% (13
cuantitativas de la densidad muscular y de la DMO pacientes) antes de los 100 días, un 36% (12 pacien-
entre los amputados de nivel femoral y tibial. Se utili- tes) entre 100 y 200 días y un 6% (2 pacientes) entre
zó la t de Student para datos apareados, para compa- 200 y 300 días. El tiempo transcurrido entre la am-
rar la significación de las variables cuantitativas de la putación y la TAC varía entre 76 y 3.662 días, con una
densidad muscular y de la DMO entre ambas extre- media de 619 días (DE 742,4), aunque en 77% (24 pa-
midades, en cada uno de los niveles de amputación es- cientes) la tomodensitometría se efectuó dentro de
tudiados. En ambos casos se fijó el nivel de riesgo para los 600 días posteriores a la amputación (tabla 1). El
dos colas, con un valor de significación de p<0,05 tiempo transcurrido entre la amputación femoral y la
(nivel de confianza del 95%). Se utilizó la correlación AFD varía entre 98 y 3.650 días, con una media de
de Pearson para analizar la relación existente entre las 589 días (DE 709,8) y en el 80% se efectuó dentro de
variables cuantitativas de la densidad muscular y de la los 600 días posteriores a la amputación (tabla 1). La

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TABLA 2. Diámetros musculares máximos en mm en los amputados femorales.


Extremidad Extremidad Reducción
indemne amputada porcentual P
Gluteus Maximus 35,1 ± 6,1 26,9 ± 6,7 23,3 <0,0001
Gluteus Medius 35,2 ± 6,4 27,9 ± 8,1 20,7 <0,0001
Gluteus Minimus 13,0 ± 2,8 10,3 ± 3,5 20,7 <0,0001
Rectus Femoris 23,1 ± 6,0 15,8 ± 4,6 31,6 <0,0001
Tensor Fascia Latae 19,7 ± 6,4 15,0 ± 5,6 23,8 <0,0001
Sartorius 13,3 ± 3,4 10,3 ± 2,2 22,5 <0,0001
Valores expresados en media ± DE.

totalidad de los amputados tibiales se protetizaron de (p<0,0001), y el triángulo de Ward, con reducción del
forma definitiva en el año posterior a la amputación 13,1% (p<0,05), sufren una pérdida menor (tabla 5).
y el 36% dentro de los 100 días posteriores a la in- En los amputados femorales existe correlación
tervención. entre el diámetro máximo del GM y la DMO del trián-
La determinación del diámetro transversal máximo gulo de Ward (r=0,44 p<0,05) y entre el diámetro del
de los músculos varía entre los 157 y 8.110 días desde GMD y la DMO del triángulo de Ward de la extre-
la amputación, con una media de 980 días (DE 2.072,9). midad indemne (r=0,55 p<0,05). También existe co-
En el 72% (10 pacientes), se efectuó dentro de los 600 rrelación entre el diámetro máximo del GMD y la
días posteriores a la amputación (tabla 1). La determi- DMO del cuello femoral, tanto en la extremidad in-
nación de la densitometría ósea mediante AFD se efec- demne (r=0,60 p<0,001) como en la amputada
tuó entre 110 y 8.100 días desde la amputación, con una (r=0,46 p<0,05), y de este músculo, el GMD con la
media de 1.071 días (DE 2.047,7) (tabla 1). En el 57% DMO del trocánter de la extremidad amputada
de los casos la AFD se realizó en los primeros 600 días. (r=0,61 p<0,001) y la indemne (r=0,66 p<0,001). Fi-
Los resultados de la densidad muscular se muestran nalmente, se ha encontrado correlación entre el diá-
en la tablas 2 y 3. En ellas se observa una reducción es- metro máximo del S de la extremidad amputada y la
tadísticamente significativa en el GM, GMD, GMN, RF, densidad mineral del trocánter en dicha extremidad
TF y S de los amputados femorales y en el GM, GMD (r=0,48 p<0,05). En los amputados tibiales no existe
y RF de los amputados tibiales, al compararlos con la correlación entre la densidad muscular de los múscu-
extremidad indemne. los estudiados y la mineralización de los distintos ni-
veles, ni en la extremidad indemne ni en la amputada,
En los amputados femorales la pérdida de DMO (hi-
excepto entre la densidad muscular del TFL y la DMO
droxiapatita/cm2) se cifra en la extremidad amputada,
del trocánter en la extremidad amputada (r=0,64
al compararla con la extremidad indemne, en 26,6%
p<0,05) y la densidad muscular del GM y la DMO del
para el cuello femoral (p<0,0001), en 46,7% para el
trocánter en la misma extremidad (r=0,62 p<0,05).
triángulo de Ward (p<0,0001) y en 33,3% para el tro-
cánter (p<0,0001) (tabla 4). En los tibiales, en la me- No ha podido constatarse que exista relación entre
seta tibial la reducción de la DMO es del 27,1% la atrofia muscular, en ambos niveles de amputación, y
(p<0,0001) y del 22,8% (p<0,0001) en el trocánter, el tiempo transcurrido desde la amputación y hasta la
mientras que el cuello femoral, con pérdida del 13,9% protetización definitiva. Ha podido determinarse que a

TABLA 3. Diámetros musculares máximos en mm en los amputados tibiales.


Extremidad Extremidad Reducción
indemne amputada porcentual P
Gluteus Maximus 36,6 ± 8,8 30,7 ± 8,4 16,1 <0,0001
Gluteus Medius 36,2 ± 7,6 30,9 ± 8,6 14,6 <0,0001
Gluteus Minimus 12,1 ± 4,1 10,8 ± 3,8 10,6 NS
Rectus Femoris 32,0 ± 3,8 19,6 ± 3,1 14,7 <0,0001
Tensor Fascia Latae 19,5 ± 6,8 18,3 ± 6,6 6,1 NS
Sartorius 14,1 ± 4,2 12,9 ± 4,2 8,5 NS
Valores expresados en media ± DE.

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EN LOS AMPUTADOS DE LA EXTREMIDAD INFERIOR 289

TABLA 4. Densidad mineral ósea en gramos de hidroxiapatita/cm2 en las distintas localizaciones en los amputados femorales.
Extremidad Extremidad Reducción
indemne amputada porcentual P
Cuello femoral 0,75 ± 0,15 0,55 ± 0,19 26,6 <0,0001
T. Ward 0,62 ± 0,17 0,43 ± 0,19 46,7 <0,0001
Trocánter 0,69 ± 0,16 0,46 ± 0,18 33,3 <0,0001
Valores expresados en media ± DE.

nivel del triángulo de Ward la desmineralización en los mantener el trofismo del mismo (20, 21). Los múscu-
amputados femorales está en relación con el tiempo los del deltoides glúteo (22) son requeridos en el con-
transcurrido desde la amputación (F=3,6181, p<0,05), tacto del pie con el suelo para estabilizar la pelvis, si-
de forma que a mayor tiempo transcurrido mayor des- tuación que se produce entre el inicio de la marcha y
mineralización se producirá, sin que la protetización, el 15% del ciclo de la misma, cuando la pelvis se halla
más o menos inmediata, influya en limitar el proceso. en rotación interna con respecto al pie que carga y en
Cuando se comparan las extremidades amputadas rotación externa con respecto al pie que contacta con
de los dos niveles de amputación, podemos observar el suelo. Entonces debe estabilizarse gracias al deltoi-
diferencias en el grado de atrofia del RF (p<0,05) y del des glúteo para no sufrir pérdidas de inercia e incre-
TFL (p<0,05), pero no del resto de los músculos eva- mento del gasto energético, pero como los amputados
luados. El diámetro de los músculos de la extremidad femorales utilizan de forma rutinaria las muletas dis-
amputada es mayor en los amputados tibiales que en minuye la necesidad de acción del GM, al compensar
los femorales (tabla 6). La comparación de la minera- con ellas la rotación pélvica y los cambios de posición
lización en el cuello femoral, el triángulo de Ward, el del centro de gravedad. Así nos encontramos con so-
trocánter y la meseta tibial de la extremidad amputa- licitaciones musculares menores y con disminución del
da, entre ambos niveles de amputación, muestra un trofismo de este músculo (23).
proceso similar con diferencias significativas en el cue- Como explican Gottschalk et al. (8), en los ampu-
llo femoral (p<0,05), pero no en el trocánter ni en el tados femorales las fuerzas tensionales o, lo que es lo
triángulo de Ward (tabla 7). mismo, los vectores de tracción de los músculos ab-
ductores de la cadera, en concreto el GM a través de
la cintilla iliotibial, el GMD y el TFL, ven comprome-
DISCUSIÓN tida su función por la ausencia de los antagonistas na-
turales, los adductores, que han sido seccionados en
El perfeccionamiento de las unidades de TAC ha el acto quirúrgico por su inserción más distal. La au-
permitido en los últimos años aumentar la fiabilidad sencia de osteomioplastia, y la realización únicamente
de este método morfológico para determinar la den- de miodesis de este grupo adductor, provoca una exa-
sidad muscular (16-18), del mismo modo que la me- gerada rotación externa y abducción del muñón, por
dición cuantitativa de la mineralización con la AFD la mayor fortaleza del GMD, lo que lleva a una posi-
(19) tampoco plantea problemas. ción anómala del muñón que impide un vector ade-
La atrofia del GM en los amputados femorales cuado y no puede mejorarse por la aplicación de en-
puede estar en relación con la escasa utilización de la cajes que reduzcan el diámetro frontal como ocurre
extensión del muslo, ya que ésta es necesaria para con el CAT-CAM (8).

TABLA 5. Densidad mineral ósea en gramos de hidroxiapatita/cm2 en las distintas localizaciones en los amputados tibiales.
Extremidad Extremidad Reducción
indemne amputada porcentual P
Cuello femoral 0,79 ± 0,12 0,68 ± 0,12 13,9 <0,0001
T. Ward 0,61 ± 0,16 0,53 ± 0,14 13,1 <0,05
Trocánter 0,7 ± 0,17 0,54 ± 0,14 22,8 <0,0001
Meseta tibial 0,71 ± 0,17 0,59 ± 0,16 27,1 <0,0001
Valores expresados en media ± DE.

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290 EN LOS AMPUTADOS DE LA EXTREMIDAD INFERIOR

TABLA 6. Comparación de los diámetros musculares máxi- TABLA 7. Comparación de la densidad mineral ósea en gra-
mos en mm, en las extremidades amputadas entre ambos ni- mos de hidroxiapatita/cm2 en las extremidades amputadas
veles de amputación. entre los dos niveles de amputación.
Amputados Amputados Amputados Amputados
femorales tibiales P femorales tibiales P
Gluteus Maximus 26,9 ± 6,7 30,7 ± 8,4 NS Cuello femoral 0,55 ± 0,19 0,68 ± 0,12 <0,05
Gluteus Medius 27,9 ± 8,1 30,9 ± 8,6 NS T. Ward 0,43 ± 0,19 0,53 ± 0,14 NS
Gluteus Minimus 10,3 ± 3,5 10,8 ± 3,8 NS Trocánter 0,46 ± 0,18 0,54 ± 0,14 NS
Rectus Femoris 15,8 ± 4,6 19,6 ± 3,1 <0,05
Tensor Fascia Latae 15,0 ± 5,6 18,3 ± 6,6 <0,05 Valores expresados en media ± DE.
Sartorius 10,3 ± 2,2 12,9 ± 4,2 NS
Valores expresados en media ± DE.
A nivel tibial la atrofia de los glúteos es del 15%
(tabla 3). Sin embargo, al no estar seccionados los ad-
ductores, la posición del muñón no es en abducción y
La atrofia del GM en los amputados femorales se rotación externa, lo que conlleva un mejor vector de
explica por la ausencia de la rodilla ya que el tracto tracción. También hay, en este nivel de amputación
iliotibial, formado por la coalescencia del TFL, GM y signo de Trendelemburg durante la marcha y la clau-
GMD, tiene como función capital actuar como freno dicación de Duchenne en el apoyo monopodal.
a la subluxación lateral de la rótula (24) y ser, junto
con la cápsula y el ligamento anteroexterno de la ro- La atrofia del GM, GMD y del TFL en los amputa-
dilla, un mecanismo estabilizador de ésta (25-27). La dos tibiales, estaría relacionada con una disminución
exéresis de la rodilla implicaría, entonces, la falta de en la necesidad que tienen como estabilizadores an-
necesidad de parte de las funciones de los GM y GMD. terolaterales de la rodilla, dado que pasa a las orejas
del encaje KBM que estabiliza la articulación en el
En los amputados femorales la atrofia del 20% para plano frontal. La atrofia del RF (tabla 3) sería respon-
GM, GMD y TFL (tabla 2) trae como resultado la clau- sable de la dificultad para realizar la carrera o el salto,
dicación de Duchenne en el apoyo monopodal y el especialmente si no utilizan pies dinámicos capaces de
signo de Trendelemburg durante la marcha. En los am- absorber energía. Además, como ya mostró Renström
putados femorales la atrofia del RF es del 30% (tabla (14), la reducción de la fuerza isométrica e isocinéti-
2) y condiciona el lanzamiento dificultoso de la pró- ca es mayor que la reducción del área de la sección
tesis que es responsabilidad del psoas y del cuádriceps transversal de este músculo en este nivel de amputa-
y la gran masa muscular de éste se encuentra seccio- ción, indicando que además de la atrofia muscular
nada, en concreto el vastus fibularis, el vastus tibialis existen otros factores causales, como los cambios en
y el vastus intermedius mientras que el resto que el reclutamiento la de las fibras motoras y en su sin-
queda del RF está muy atrofiado. El psoas, que no se cronización (32) y ausencia de anclaje de estos mús-
ve implicado en la amputación mantiene su morfolo- culos en el extremo distal óseo (1). Como conse-
gía (15) y asociado a la atrofia del GM (tabla 2) pro- cuencia de esto podemos indicar que cuanto más alto
voca que el muñón adopte una posición en flexión, es el nivel de amputación más músculos se ven incur-
situación que se ve favorecida por las posiciones ha- sos en la misma (15) y más cambios aparecen en éstos,
bituales de estos pacientes en sedestación. La ausencia especialmente en los flexores y extensores de cadera.
de anclaje de la cintilla iliotibial en el muñón óseo tiene
también relación con la posición en flexión. Se ha de- Como médicos rehabilitadores debemos trasmitir la
mostrado que cuando se realiza éste existe la misma necesidad de realizar en el acto quirúrgico una serie de
actividad electromiográfica que en los sujetos norma- medidas. Primero el anclaje del tracto o cintilla iliotibial,
les (1). De esto se infiere que la posición de partida para evitar la contractura en abducción de la cadera y
de la palanca femoral no es la más favorable para la la atrofia en los músculos GM, GMD y TFL en los am-
flexión del muslo y, por tanto, el lanzamiento de la putados femorales. Segundo, que deben fijarse los ad-
prótesis es difícil porque la fuerza isométrica máxima ductores (9, 10), para evitar la pérdida de momento
para la flexión de la cadera se realiza con la articula- mecánico del deltoides glúteo, especialmente del GMD.
ción en un ángulo a 0°, es decir, en posición neutra Finalmente, deberíamos también indicar la necesidad de
(28-31). Estas circunstancias adquieren su dramatismo preservar la máxima longitud del muñón, para evitar la
en la subida de escaleras y rampas y en el freno de la atrofia y favorecer las transferencias (9, 15).
inercia necesario para bajarlas, lo que provoca que En los amputados tibiales hemos objetivado que la
muchos amputados femorales no puedan ejecutarlo y atrofia se produce fundamentalmente en el deltoides
que otros sufran caídas al intentarlo. glúteo, de tal forma que deberían usarse más los en-

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EN LOS AMPUTADOS DE LA EXTREMIDAD INFERIOR 291

cajes de contacto total, con sistema de silicona y lan- Todo lo anterior nos lleva a hipotetizar que la des-
zadera, que los de apoyo en el tendón rotuliano como mineralización que se produce en el segmento óseo
los PTB, KBM o PTS (33), para evitar que las aletas la- de la extremidad amputada tiene varios orígenes. En
terales de éstos reduzcan las necesidades mecánicas los amputados femorales se debe, en primer lugar, a
de la cintilla iliotibial y, por tanto, se produzca atrofia la desaparición de las fuerzas gravitacionales a lo largo
del deltoides glúteo. del axis óseo, debido a que la propia constitución del
En relación con la desmineralización ósea y de encaje protésico hace que las fuerzas gravitacionales
acuerdo con las clásicas leyes de Wolff (34) y con Cha- pasen desde la rodilla ortopédica al isquión, sin ha-
may y Tschantz (35), cuando un hueso se ve sometido cerlo por el axis femoral, trocánter, cuello y cabeza fe-
a cargas mecánicas se hipertrofia en las áreas bajo morales, al no haber apoyo en el extremo distal del
compresión, y la alteración estructural es proporcional segmento óseo amputado (53, 54). En segundo lugar,
a la fuerza de compresión. En sentido inverso, si el a la ausencia de fuerzas tensionales de los músculos
hueso recibe una carga reducida, como ocurre en los (55, 56) provocada por la falta de osteomioplastia, de
vuelos espaciales, en el reposo prolongado, en la in- forma que algunos músculos como el S, los adducto-
movilización y en la parálisis se provoca una disminu- res y el cuádriceps son ineficaces en su contracción,
ción de la densidad mineral. Son numerosos los estu- quedando las fuerzas tensionales reducidas a las deri-
dios clínicos y experimentales que muestran como se vadas de las acciones del psoas, GM y GMD, con una
adapta el hueso (35-41). Trabajos de hace sesenta años notable disminución de la fuerza por la reducción de
(36) indicaban cambios importantes en la geometría la masa muscular, como ya se ha explicado previa-
del hueso de las extremidades inmovilizadas o dener- mente. En tercer lugar, y no por ello menos impor-
vadas, ya que la disminución de la actividad física re- tante, se debe a las fuerzas hidrostáticas (55) deriva-
duce el tamaño y la masa ósea (37). Hay otros que ex- das de la falta de cierre de la cavidad medular del
plican la reducción significativa del contenido mineral fémur y a la ausencia de la mioplastia, que da como
óseo en los pacientes inmovilizados en cama durante resultado un drenaje venoso difícil (57), con formación
largo período de tiempo (38, 39), o en animales de ex- de edema por acúmulo de líquido en el espacio in-
perimentación sometidos a la ausencia de carga (40). tersticial, debido a un incremento de la presión veno-
La composición de la matriz permanece inalterable en sa (58) que favorece la resorción ósea. También puede
la inmovilización o en el reposo en cama, con una deberse a la neurectomía del nervio ciático, que se
completa recuperación del contenido mineral óseo efectúa de forma rutinaria en las amputaciones femo-
entre los 20 y 70 días después de iniciarse la deambu- rales, pues se ha demostrado que ésta provoca una in-
lación (41, 42). La disminución de la resistencia ósea se hibición del hueso cortical, disminuyendo la formación
ha implicado en el incremento de la incidencia de las ósea e incrementando la resorción ósea (59).
fracturas del cuello femoral en los ancianos (43) y en La gran desmineralización que se produce en los
la reducción de la resistencia a la fatiga del hueso (44). amputados femorales (tabla 4) a nivel del trocánter
Las fuerzas encontradas durante el reposo prolongado tiene que ver con la atrofia existente en el GMD y de
en cama, la parálisis o la inmovilización se han compa- ahí el grado tan alto de correlación que existe entre
rado con el ambiente de ingravidez de los vuelos es- ambos (r=0,61 p<0,0001). En los amputados tibiales
paciales (40, 45). La ingravidez en astronautas produce puede atribuirse la desmineralización de la meseta
osteoporosis (46) similar a la observada con el desu- tibial (tabla 5) a la ausencia de fuerzas tensionales gra-
so, el reposo y la inactividad (47, 48). vitacionales a través del axis de la tibia, pues el enca-
Ha podido demostrarse que el contenido mineral je KBM del que son portadores estos amputados rea-
estaba reducido de forma notable en los miembros de liza la carga en los cóndilos y no en el extremo distal
la tripulación de Skylab cinco años después del vuelo del muñón. También podemos atribuir parte de la
(41) y el seguimiento de los tripulantes del segundo desmineralización a las fuerzas hidrostáticas por el in-
vuelo ha permitido conocer una recuperación compa- cremento de la presión venosa, ya que al no haberse
rable en el tiempo a la duración de la misión (48, 49). cerrado la cavidad medular se favorece el edema y la
Los efectos de los vuelos son mayores en los huesos resorción ósea (55, 60) y en menor medida al vector
que no soportan carga y no tienen fuerzas muscula- muscular, pues aunque no hay desinserción del ex-
res, por ser la gravedad cero (49-51). En estudios ex- tremo distal si existe una severa atrofia del cuádri-
perimentales durante los vuelos espaciales, ha podido ceps, representada por la atrofia del RF.
observarse que después de 18 días los animales de ex- El resultado de la desmineralización es una reducción
perimentación exhiben una formación femoral perios- de la resistencia efectiva del hueso, por eso debemos in-
tal reducida, con pérdida notable de las propiedades dicar que se utilicen con menos frecuencia los encajes
mecánicas de la resistencia ósea, comparada con el que provocan un by-pass de la carga, como los cuadran-
grupo control en tierra (45, 52). gulares y los CAT-CAM en los amputados femorales y

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los PTB, PTS y KBM en los tibiales y utilizar más los en- 16. Clark JM, Haynor DR. Anatomy of the abductor mus-
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falta de carga. Igualmente deberíamos indicar la práctica 17. Smith KE, Comean PK, Bathia G, Vannier MW. Validation
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