Juan 14:1-14, Isaías 9:2-7

EL MEJOR REGALO DE DIOS PARA NOSOTROS: SU HIJO JESÚS

+ En el nombre de Jesús. Amén
INTRODUCCIÓN
Que emoción fue ver a nuestros hijos o nietos abrir sus regalos en la noche de
Navidad. Seguramente ellos se sentían muy felices y contentos por los regalos
que les dieron, independientemente del precio. Aunque siempre buscamos
economizar, regateando y pidiendo rebajas. Por nuestros hijos hacemos un
sacrificio y les compramos algo bonito con mucho amor y cariño. Yo creo que
todos los que recibimos un regalo, me incluyo en esto porque recibí uno de mí
esposa, estábamos muy felices y agradecidos por recibirlos. Y sin duda no nadie
rechazaría un regalo, por ser pequeño o barato ¿verdad? Como dice el dicho “A
caballo regalo no se le mira los dientes”
Esta tarde quiero recordarles que Dios nos ha dado un regalo a todos nosotros.
Y creo que es el mejor regalo de todos. ¿Saben cuál es?
Su Hijo Jesús. Isaías 9:6 nos dice: “Porque un niño nos ha nacido, ¡un hijo nos ha
sido dado!” ¿A quién les ha nacido y a quién se les sido dado?
A nosotros. Jesús no solo les ha nacido a José y María, no solo a ellos les ha sido
dado. Jesús ha nacido también para nosotros y nos ha sido dado como un regalo
de Dios para ser nuestro Salvador. Jesús es el mejor que Dios nos ha podido dar
y les voy a decir porqué.
1) Primero porque lo dio por amor a nosotros
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para
que todo aquel que en él crea no muera, sino que tenga vida eterna. San Juan
3:16
Todos nosotros damos un regalo porque amor, cariño, el aprecio que les
tenemos a nuestros hijos y amigos. Pero comparado con el amor de Dios es algo
insignificante. Porque Dios nos amó tanto que nos dio a su propio Hijo. Yo creo
que todos los padres estamos de acuerdo en que jamás entregaríamos a
nuestros hijos a nadie. Y menos aún a personas que no conocemos. Porque
nuestros hijos son lo más valioso que tenemos y jamás los entregaríamos para
que otras personas se lo queden.
Pero Dios si, él si nos dio a su Hijo por amor. Y no solo esto, sino que nos ha
dado para que él sea el sacrificio de nuestros pecados, para que sea nuestro
sustituto y muera en nuestro lugar. Para salvarnos de todos nuestros enemigos.
Dios si está loco, pero él está loco de amor por nosotros. Miren cuanto nos ama
que es capaz de darnos su mayor tesoro, su propio Hijo.
Y aún más, el Apóstol Pablo dice en Romanos 8:32 “El que no escatimó ni a su
propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará
también con él todas las cosas?” Si Dios ha sido capaz de entregarnos a su
propio Hijo ¿acaso nos va a negar alguna cosa? ¿Acaso va escatimar hacer algo
por nosotros? Al entregarnos a su propio Hijo nos ha dado todo. Su creación, Su
reino, el perdón de nuestros pecados, la paz, la salvación, la vida eterna. Todo lo
que le pertenece a Dios es puesto a disposición de nosotros si sé lo pedimos en
el nombre de Jesús.
Que maravilloso regalo. Sin duda, es el mejor regalo de Dios para nosotros,
porque lo fue con mucho amor, y porque el regalo es su propio Hijo.
Ley: rechazo del regalo de Dios
Aún siendo el mejor regalo de Dios para todo el mundo, Imagínense que hay
personas que rechazaron. El Evangelio de San Juan dice:
9 
La Palabra, la luz verdadera, la que alumbra a todo hombre, venía a este
mundo. 10 En el mundo estaba, y el mundo fue hecho por ella, pero el mundo
no la conoció. 11 La Palabra vino a lo suyo, pero los suyos no la recibieron.
El Evangelio de Juan llama a Jesús “La Palabra” “La vida” “La Luz verdadera”.
Que son nombres importantes para enseñarnos quien es Jesús. Y nos dice que
Jesús vino a este mundo, pero el mundo no lo conoció. Vino a suyos, pero los
suyos no lo recibieron. Hubo personas que vieron la humildad de Jesús, y su
procedencia y decían: que bueno puede salir de Nazaret, él no puede ser el Rey
Mesías. Pensaron que era un pobre hombre que se creía Dios. Que hacía
milagros en el nombre de diablo. Que engañaba a la gente con sus palabras y
sus obras. No creían en él sino que buscaban matarlo. Y lo consiguieron. Con
engaños lograron que lo crucificaran junto a dos ladrones. Lo que no sabían y no
querían creer, es que Jesús es el Salvador del mundo. Un regalo de Dios también
para ellos. Y así como hubo personas que no recibieron a Jesús, hoy también
hay personas que no lo reciben, Y rechazan el mayor regalo de Dios.
1) Puede ser porque no lo conocen verdaderamente. Capaz conocen que él
nació de la Virgen María, que fue concebido por el Espíritu Santo, pero
no saben que nació por ellos. Que vino a este mundo a Salvarlos de sus
pecados.
2) Otra razón es porque rechazan a Jesús, es porque rechazan la Palabra de
Dios. Puede ser que no creen que la Palabra de Dios es verdadera, o no
tienen tiempo para estudiarla. Pero la Palabra de Dios es Jesús mismo, y
 cuando no la leemos, ni la estudiamos, o queremos venir a la iglesia para
escuchar la predicación, estamos rechazando a Jesús.
3) Otra razón por la gente no recibe a Jesús, La luz del Mundo, es porque
viven en la oscuridad y quieren permanecer en tinieblas. Jesús dice: “Y
ésta es la condenación: que la luz vino al mundo, pero los hombres
amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.” Las
personas viven en pecados, pero no quieren confesarlos a Jesús, no
quieren recibir su perdón. Prefieren vivir en malas obras, en las tinieblas.
4) Y una ultima razón, pensamos que la felicidad, la vida plena, y el gozo,
están en tener posesiones o mucho dinero. Ser exitosos, o saber
muchísimo. Pero la verdadera vida, la felicidad, y el verdadero gozo, es
tener a Jesús. Recibirlo, creer en él. Como les dije al principio, es tenerlo
todo. Su paz, su perdón, la salvación, su bendición, tener la vida eterna.
Evangelio
Escuchen lo que dice El Evangelio de Juan:
12 
Pero a todos los que la recibieron, a los que creen en su nombre, les dio la
potestad de ser hechos hijos de Dios; 13 los cuales no son engendrados de
sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.
A los que recibimos el regalo de Dios, a los que creemos en su nombre, lo que él
hizo por nosotros, siendo nuestro Salvador. Les dio el privilegio de ser hijos de
Dios. Ya no esclavos del pecado, o enemigos de Dios, sino Hijos de Dios.
Por la fe en Jesús, somos hijos de Dios. Podemos acercarnos confiados a nuestro
Padre. Y él nos escuchará. Podemos tener todo lo que le pertenece. Somos sus
herederos. Fíjense que tener a Jesús, es tener el mayor regalo de Dios. Porque
podemos conocer a Dios, poder tener la gracia y el favor de Dios. No esta
molesto por nuestros pecados, sino tiene misericordia. Nos perdona, nos salva,
nos limpia de toda maldad.
Gracias a Dios por este regalo maravilloso, y por su gran amor por nosotros.
Creamos en él, confiemos en su Palabra. Y vivamos en la luz, como él esta en la
luz. Siendo luz para el mundo, con buenas obras, proclamando su nombre.
Siendo hijos de Dios dentro y fuera de la iglesia. Disfrutando de este regalo
maravilloso.