CAP 2

Tenían alrededor de una semana antes de que comenzara la escuela de nuevo para todos
en la casa. Leah iría a preescolar. Afortunadamente, había uno en la escuela primaria
donde Somin enseñaba cuarto grado. La escuela era el mismo en el que Jungkook y
Taehyung habían asistido cuando eran pequeños, aunque nunca coincidieron en clases.
Se conocían de vista en el recreo, al menos por sus nombres, pero nunca interactuaron
entre sí. La escuela primaria era grande, con cuatro salones de clases por cada nivel
escolar. Somin había comenzado a darle clases particulares a Jungkook en quinto grado y
lo había seguido haciendo desde entonces, una hora a la semana, durante los últimos
ocho años. Durante los años, había formado una gran relación con la familia Jeon. Al
principio se había dedicado a ayudar a Jungkook con su escuela, pero luego también lo
había ayudado a adaptarse a un nuevo entorno, la escuela privada, hablando con sus
profesores, y ayudándolo a organizarse en los deportes de equipo. Básicamente, Somin
se hizo cargo de todos los aspectos de la vida escolar de Jungkook. Los Jeon estaban
muy enfocados en sus carreras, pero mantenían un buen control sobre todo lo que
Jungkook necesitaba y se aseguraban de que Somin estuviera al tanto de todo.
Dependían de ella y siempre hacía lo correcto por Jungkook.

Cuando las cosas se calmaron con los Jeon, Somin comenzó a trabajar con otras familias
de la nueva escuela secundaria de Jungkook. Todos estaban emocionados. Fue una
situación beneficiosa para todos. Las familias adineradas obtuvieron una maestra
acreditada en su bolsillo, alguien que conocía los detalles del sistema educativo; los
estudiantes obtuvieron un tutor dedicado, amigable y solidario. La escuela estaba
emocionada de hablar con alguien de su propio equipo cuando se trataba de resolver
algunos problemas. A pesar de ser una maestra de escuela pública, sabía exactamente
qué decir y cómo hacer que las cosas sucedieran. Ella se destacó al ayudar a sus "niños",
como ella los llamaba, quienes venían y se iban. Nadie se quedó con Somin tanto tiempo
como Jungkook. Pero todos hablaban maravillas de ella y eso la hacía sentir emocionada,
disfrutando cada minuto de su trabajo; mientras se encargaba de estar en varios comités
en su propia escuela y enseñar en su propia clase.
Taehyung simplemente se sentó y observó todo. Estaba feliz por su madre; podía decir
que enseñar era su pasión de vida. También estaba contento por el dinero extra que traía.
Tratar de vivir con el salario de un maestro en su comunidad era casi imposible. La
mayoría de los compañeros de trabajo de Somin tenían parejas que ganaban mucho
dinero; los salarios de los maestros apoyaban los pasatiempos de sus hijos y tal vez
pagaban unas vacaciones anuales a Hawái o Aspen. Pero Taehyung y Somin pasaron por
períodos en los que solo comían espaguetti durante semanas si el auto de Somin se
descomponía. No había vacaciones para ellos. Pero el dinero de las tutorías mantuvo el
agua y la electricidad fluyendo, pagó por diversas facturas que siempre surgían en el peor
momento posible. Sin ese dinero extra, quién sabe lo mal que estarían las cosas.
Sí, Taehyung estaba orgulloso de su madre. Simplemente nunca la veía. Y cuando lo
hacía, ella estaba tan cansada de ayudar a todos sus "hijos" que generalmente se iba a
dormir tan pronto como llegaba a casa. Pero él era autosuficiente. Sabía cómo usar el
microondas. Vivían a cuatro cuadras de su escuela secundaria, por lo que no necesitaba
conducir. Había un pequeño centro, algunas tiendas, y unos cuantos sitios de comida
rápida a unos 15 minutos a pie. Pero normalmente no iba en esa dirección. Era una
persona hogareña.
Le encantaba leer. Tal vez no podía ir a otros países como algunos de sus compañeros de
clase, pero podía pasear por Lothlorien o visitar el submundo de Londres. Su madre era
maestra, así que su casa estaba llena de libros. Cada vez que un maestro se retiraba o
simplemente quería deshacerse de algún libro, Somin estaba encantada de recogerlos
todos. Cada pared de su sala de estar estaba cubierta de estantes desbordantes. Libros
para jóvenes adultos, clásicos, libros de cocina, libros para niños, no ficción.
Mientras algunos de sus compañeros de clase en la escuela secundaria tenían trabajos
en restaurantes locales o como cajeros en las tiendas del centro, para Taehyung tenía
sentido trabajar en la escuela. Se quedaba después de clases durante una hora y media,
como asistente general del maestro, haciendo copias, calificando papeles, organizando la
biblioteca. La mayoría de las personas en el distrito escolar conocían a su madre; Todos
los maestros lo conocían desde que estaba en el vientre de su madre. Aunque no pasó
mucho tiempo directamente con su madre, desde pequeño, tuvo la fortuna de crecer y
convivir con un gran número de tías y tíos cercanos a él, lo que lo diferenciaba de la
mayoría de los niños. Todos ellos, incluyendo los maestros de la escuela, lo conocían
desde que estaba en el vientre de su madre, y él solía entrar y salir de sus aulas desde
que aprendió a caminar. En ocasiones, incluso era llevado a los días de formación
docente porque su madre no podía pagar una niñera.
Su vida cotidiana podría parecer aburrida para muchas personas. A veces él también se
sentía aburrido y honestamente, un poco solitario. Era callado, inteligente y le gustaba
mantener su nariz en un libro. Hablaba con sus compañeros en la escuela, por supuesto,
no se sentaba solo a comer ni nada por el estilo; pero realmente eran solo conocidos,
hacían pequeñas charlas, pero nadie se acercaba a pasar el rato. La mayoría de los
alumnos en su escuela estaban realmente interesados en los deportes, pero él no. No era
horriblemente descoordinado ni nada, simplemente no le veía el sentido. Un año hizo
atletismo, pero los uniformes eran realmente caros y tenía que pedir constantemente que
lo llevaran a las competencias. Así que lo dejó. A veces corría en un parque natural
cercano. De todos modos, no le gustaba la competencia.
Así que sus días eran bastante estáticos. Ir a la escuela. Leer. Cenar. Leer. Ir a la cama.
Despertar. Para luego de nuevo repetir la rutina

Bueno, al menos sus días habían sido así. Hasta que los Jeon se mudaron.

Ahora, su última semana de verano lo encontró sin tiempo para sí mismo. Somin tenía
que preparar su clase y asistir a reuniones. La escuela de Leah no empezaba hasta que
empezaba el suyo. Así que se encontró cuidando a Leah todo el día hasta que Somin
llegó a casa. Jungkook realmente no ayudó mucho, solo jugaba videojuegos en su
habitación. Somin dijo que el traslado sería más difícil para él, ya que tendría que dejar su
escuela privada, dejar atrás a todos sus amigos y asistir a una escuela pública. Ella
sugirió que Taehyung le diera espacio a Jungkook. Fácil, excepto...
¡Buenos días, Taehyung!", dijo la alegre voz de la niña. Abrió los ojos y la encontró
mirándolo fijamente con sus ojos azules como el cielo.
"Ugh", se quejaba Taehyung con voz adormilada. "Por favor, para", pedía mientras ella
saltaba sobre su estómago tras subirse a su cama.

“Tengo hambre! ¡Necesito panqueques! ¡Panqueques! Y el tocino es súper bueno

también. ¡Vamos, Taehyung!" exclamó ella emocionada antes de saltar de la cama y
correr por las escaleras, dejando escuchar el sonido de sus pequeños pies.
“No corras!” gritó, saliendo de la cama. Miró, como hacía todas las mañanas, para ver si
Jungkook se levantaría con su hermana, pero ya sabía la respuesta. Todo lo que vio
enfrente de su cama eran mechones de cabello castaño asomándose de la cobija azul.
Probablemente no se levantaría hasta las 11 como muy temprano. Se quedaba despierto
bastante tiempo jugando tarde.
Taehyung estiró su pequeño cuerpo y bostezó, frotándose el cabello rubio arenoso hasta
que sobresalió en todas direcciones. No había necesidad de arreglarlo ni siquiera
cepillarlo. No estaba tratando de impresionar a nadie en particular. Una rápida mirada a la
ventana y el reloj le indicó que era antes de las 7 de la mañana. Leah era una verdadera
madrugadora. Probablemente su madre aún estaba dormida. Ella no tenía que trabajar
hasta las 8.
Después de desayunar, Taehyung vistió a Leah con unos adorables overoles morados y la
llevó a dar un paseo al parque cercano. Él sostenía la mano de Leah mientras cruzaban
las pocas calles y entraban al parque. Realmente era uno de sus lugares favoritos. Lo
había sido desde que era un niño pequeño.

"¿Qué quieres hacer primero, Leah?"

"¡Columpios!" Él se acercó y la puso en el columpio para niños y la empujó suavemente

mientras ella hacía ruidos de alegría y miraba hacia el cielo azul. Estaba tranquilo. Eran
los únicos en el parque ese martes por la mañana. El sol acababa de empezar a calentar
los bancos y el túnel de concreto que Leah amaba fingir que era una nave espacial.
Después de jugar en la zona de juegos de arena, fueron a caminar por los senderos
naturales detrás del parque. No caminaron muy lejos, ya que Leah tenía piernas de bebé
y se cansaba con facilidad.
"¡Ven a ver los caracoles, Taehyung!" Él se asomó junto a ella, agachándose en silencio
mientras seguían el progreso de dos caracoles que Leah proclamó como sus nuevos
mejores amigos. Encontraron algunas salamandras y muchos insectos.
Taehyung se acomodó en un asiento en el banco que estaba debajo de su árbol preferido.
Leah se subió a su regazo mientras él sacaba un libro de su mochila.

"Me gusta, ¿podrías leerlo por favor?"

Taehyung le leyó el libro infantil corto y hablaron un poco sobre las ilustraciones. Leah
hizo muchos comentarios excelentes sobre el arte. Luego guardó el libro y se levantó para
caminar de regreso al parque infantil
“Siempre veo que llevas libros en tu mochila, pero me pregunto por qué no tienes amigos.
¿Hay alguna razón en particular?”

Al oír lo que Taehyung escucho que leah dijo sobre sus amigos y libros, pensó que los
niños suelen ser sinceros en sus palabras.
Bajó la mirada hacia ella, respondiendo su pregunta con seriedad. Nunca hablaba
condescendientemente con los niños.
"Supongo que los libros son mis amigos. Siento que los personajes de los libros que leo
son como amigos cercanos para mí. Cuando leo, me sumerjo en su mundo y siento que
es tan real como si estuviera allí"
"Qué tontería”. Dijo Leah acercándose un poco a Taehyung. “Los amigos de los libros no
son amigos reales. Necesitas amigos reales” Ella lo miró ligeramente disgustada por su
ignorancia.

"Bueno... tú eres mi amigo, ¿verdad?"

"Taehyung", dijo ella, poniendo su manita en su cadera. "Soy solo una niña pequeña.
Necesitas amigos grandes. Jungkook tiene muchos amigos. Vienen a jugar conmigo,
comemos palomitas de maíz, pizza, y corremos por todos lados como locos".
Simplemente encogió los hombros, sin saber realmente qué responder.

"Sería bueno que te hicieras amigo de Jungkook. Podrías conocer a sus amigos."
CAP 1

"¡Solo sube esa caja arriba!" La voz alegre de Somin resonó mientras abría la puerta principal y
llamaba desde atrás. Entró apresuradamente en la habitación con una pequeña niña de ojos
grandes en sus brazos. Las piernas regordetas de la niña rodeaban la cintura de Somin, quien
llevaba puestos unos jeans.

"¡Taehyung! ¡Ayuda! ¡Ahora!"

Su madre lo miró con expresión seria. Esa mirada que casi era como un hechizo. tiró el libro que
tenía en las manos y corrió hacia su madre, agarrando a la pequeña que estaba a punto de caerse.
Su madre forcejeaba con la caja grande que llevaba, pero perdió el equilibrio cuando también se
desplomó con un ruido sobre el suelo cubierto con un tapete fino. Somin hizo una mueca de dolor
y se mordió el labio, mirando por encima del hombro al chico alto que entraba detrás de ella por la
puerta.

"¡Lo siento mucho Jungkook ¡No escuché nada romperse!"

La pequeña niña se retorció en los brazos de Taehyung. Él la miró a los ojos azules. Eran grandes y
relucientes. El asintió hacia ella, le acarició la espalda y le dijo en una voz baja. "Hola”

"Jungkook, él es mi hijo Taehyung. Quizás lo recuerdes de la escuela primaria", dijo Somin

mientras levantaba la caja de nuevo y se dirigía hacia las escaleras, mirando hacia atrás para
presentarlos.

Taehyung miró al chico que estaba de pie en su pasillo mientras cambiaba a Leah a una posición
más alta en su cadera. El pobre chico parecía medio dormido, probablemente debido al estrés.
Pero Jungkook ni siquiera hizo contacto visual con él mientras siguió a Somin por las escaleras, sus
botas haciendo ruidos pesados cuando se movía.

Taehyung puso los ojos en blanco y los siguió.

En el piso de arriba podía oír ruidos fuertes procedentes de su habitación, ruidos que prefirió
ignorar por el momento. Llevó a Leah a lo que ahora era su dormitorio. Había sido una habitación
vacía donde Taehyung había guardado sus libros y un viejo reproductor de discos, un sofá y un
televisor. Pero cuando Somin le dijo que iba a cuidar a los hijos de Jeon Dong wook, ella y
Taehyung pasaron todo el verano transformándolo en una pequeña habitación de niñas. Lo habían
pintado de verde y amarillo (porque su madre insistió en que no todas las chicas aman el rosa y el
morado). El armario ya tenía algo de la ropa de Leah, pues habían podido trasladar sus cosas
antes. Unas cuantas estanterías bajas estaban repletas de libros de los amigos profesores de
Somin, unos hermosos peluches de animales y una variedad aleatoria de juguetes.

"Está agotada, pobrecita." Susurro su madre entrando a la habitación. "La llevaré a la cama. ¿Por
qué no vas ayudar a Jungkook a mover el resto de sus cosas a tu habitación?"

Taehyung asintió, pero se inclinó y le dio a Leah un beso en las mejillas antes de marcharse. Fue
recompensado con una pequeña sonrisa.

"Buenas noches, pequeña", le dijo alborotándole el cabello castaño. "Te veré mañana por la
mañana. Incluso te haré panqueques de chocolate con crema batida. '

Afortunadamente, durante el mes anterior a la mudanza, Leah había visitado a Somin y Taehyung
algunas veces, acompañada por la niñera, por lo que al menos estaba un poco familiarizada con la
casa y todo lo demás. Taehyung encendió la luz y ayudó a Leah a sentarse en su nueva cama

"Buenas noches, Taehyung." dijo la pequeña con voz cansada.

Asintió a su madre y salió de la habitación.

Jungkook se cruzó con él bajando las escaleras y no dijo nada. Taehyung siguió al chico más alto
por la puerta principal. Su madre había pedido prestada una camioneta a un compañero de
trabajo para que le ayudara con la mudanza. Jungkook estaba subiendo al asiento trasero,
moviendo las cajas de la parte trasera hacia los asientos del medio, mientras Taehyung esperaba
afuera, listo para tomar una caja. Jungkook se retiró del auto, se giró de repente y se sobresaltó al
ver a Taehyung.
"¡Mierda, hombre! ¡Eres muy callado!"

"Me llevaré eso". dijo taehyung, extendiendo las manos para la caja que Jungkook sostenía.

Jungkook solo se encogió de hombros y le entregó la caja.

"Creo que eso es mi XBox y los controles, así que no lo dejes caer, vale."

Taehyung se limitó asentir y volvió a entrar en la casa, Jungkook entró detrás de él con otra caja.

"Entonces... ¿puedo jugar en la habitación o tiene que ser en la sala de estar?" preguntó Jungkook
mientras se detenían por un momento en el pasillo.

"No me importa, haz lo que quieras."

"Perfecto, arriba. Me gusta jugar en mi cama."

Asintiendo, Taehyung subió las escaleras con la caja.

La que había sido su habitación durante los últimos diecisiete años, era casi extraña. En lugar de
solo su cama, había dos camas colocadas en el espacio debajo de la ventana con solo una pequeña
mesa en medio. Su escritorio había sido trasladado al piso de abajo, para dar lugar a una nueva
cómoda para la ropa de Jungkook. Un televisor de pantalla plana nuevo colgaba en la pared y
algunas cajas estaban esparcidas en ambas camas.
Taehyung colocó la caja encima de la cómoda. Jungkook dejó la caja que llevaba en la cama de la
habitación. Taehyun miró su cama, arrugó la nariz, pero se mordió el labio para no decir nada.

Somin se quedó en la puerta mirando a su hijo mientras éste observaba su habitación.

"No te preocupes, sólo será por un año. Luego ambos irán a la universidad y la tía de Leah
terminará con su proyecto en Europa y podrá cuidarla. Podemos adaptarnos a la situación, no hay
de qué preocuparse".

Taehyung no la miró a los ojos, pero asintió. En el mes de junio, Somin lo había sentado en la
mesa de la cocina y le había contado que Ji Hyun y Jeon Dong wook habían sido detenidos e iban a
ser juzgados por abuso de información privilegiada. Le habían pedido a Somin que cuidara a sus
hijos mientras estuvieran en prisión, y Taehyung estaba muy conmocionado. Somin había estado
apoyando a Jungkook en su educación y en otros aspectos de su vida durante muchos años. Solía
bromear en las fiestas del personal que tenía dos hijos, y aunque Taehyung nunca había conocido
a Jungkook en persona, ella hablaba de él con frecuencia y lo consideraba como parte de su
familia. En esa hermosa mañana de junio, Somin le había dado a Taehyung la responsabilidad de
tomar la decisión final sobre si aceptar o no cuidar a los hijos de Ji hyun y Dong wook mientras
ellos estaban en prisión, Taehyung se sintió abrumado por la responsabilidad que esto implicaba.

"Quiero cuidar de ellos, taehyung. Pero esto implicaría un cambio enorme. Tendremos a un niño
de cuatro años en casa y tendrás que compartir tu habitación. Voy a necesitar mucha ayuda con
Leah. Pero realmente no tienen ningún otro lugar a donde ir". Somin suspiró mientras bebía su té
de limón habitual en una taza azul agrietada que había tenido desde la universidad. "No tomaré
esta decisión sin tu consentimiento." Se inclinó hacia adelante y agarró sus antebrazos,
apretándolos. "Realmente depende de ti".

Miró por la ventana hacia el pequeño jardín delantero. ¿Qué más podía decir?

"Claro. Supongo que sí." Respondió

Ella sonrió. "Sabía que dirías que sí. Eres un buen chico."

Ahora, dos meses después, miró hacia atrás y se preguntó si había tomado la decisión correcta.

"Entonces... ¿comida rápida para todos esta noche?" dijo Somin mientras los chicos bajaban las
escaleras. ¿Qué tal si pedimos comida rápida para cenar? No creo que Leah tenga problema con
eso y la verdad es que no tengo ganas de cocinar. Taehyung resopló. ¿Cuándo había sido la última
vez que ella había cocinado? Si el microondas alguna vez dejaba de funcionar, probablemente se
morirían de hambre."

"Voy a regresar la camioneta a casa de Ji woo, pasare por mi auto y comprar algo de comida
camino a casa. ¿Qué prefieren, hamburguesas o tacos?" Dijo Somin

"Tacos", dijo Taehyung.

"Hamburguesa", dijo Jungkook.

Ambos chicos se miraron.

"Realmente no me importa", Taehyung se encogió de hombros, sentándose de nuevo en el sofá y

recogiendo su libro. Jungkook se quedó parado con las manos en los bolsillos, mirando incómodo
hacia el techo.

"Perfecto", dijo Somin, "te veo en unos 20 minutos". Y salió por la puerta.

"Espero que no tengas mucha hambre", dijo Taehyung, aun mirando su libro. Jungkook se sentó en
el otro extremo del sofá y apoyó su cabeza en el respaldo.

"¿Por qué?", preguntó Jungkook.

"Porque cada vez que ella y Ji woo se ven, terminan hablando durante al menos una hora, ya sea
sobre cosas de la escuela o cualquier otra cosa. ¿Qué hora es? Casi las siete en punto ¿verdad? No
esperes que ella regrese antes de las 8:30, esa es la hora más temprana en que podría volver.
Espero que traiga la comida después, o de lo contrario, estará completamente fría. Pero tenemos
manzanas o si prefieres, puedes revisar el congelador para ver si algo te llama la atención. Y
recuerda que ahora esta casa también es tuya"

Jungkook simplemente se encogió de hombros

A pesar de que Taehyung trato leer, no podía evitar pensar en la persona que estaba sentada
cerca de él, una persona a la que no conocía y que iba a estar en su casa, en su vida, incluso en su
dormitorio

Dejó su libro a un lado y se giró hacia Jungkook, juntando sus piernas bajo su sudadera azul,
dejando ver sus calcetines blancos debajo del dobladillo"

"Entonces..." tosió él. Jungkook lo miró con cautela. "Entonces... bueno, sabes, esto es una mierda
¿no? Lo siento mucho por lo de tus padres, sé que nuestra casa es mucho más pequeña que la
tuya, y que tienes que compartir habitación, lo siento por eso. pero espero... se detuvo, sin saber
qué más decir. Simplemente parpadeó.

Jungkook solo lo miró fijamente, y después clavó la mirada en el techo.

"Sí, es una mierda", respondió.

"Bueno...", empezó Taehyung. "Lo entiendo"

"Hey", dijo Jungkook, yendo hacia la puerta. "Si no te importa, voy a ir a dejar mis cosas. No tengo
mucho, solo ropa, pero te lo aseguro, no voy a estorbar ni a dejar la habitación desordenada"
"Claro", respondió Taehyung en voz baja. Jungkook no esperó respuesta, solo se apresuró a subir
las escaleras.

Taehyung llevaba una vida tranquila pero aburrida, hasta que su madre decidió invitar a un
estudiante de diecisiete años que jugaba lacrosse y a su hermanita a mudarse con ellos. Jungkook
termina compartiendo habitación con Taehyung, un chico tímido que siempre está leyendo libros.
Pero cada noche se van a dormir en la misma habitación. Y.… bueno, ya sabes lo que puede pasar.
  Tengo la autorización de la autora original, la cual le doy las gracias por permitirme pueda
adaptar su obra

 Todos los derechos reservados a su autor original © sugainmytee

 ⚠️Queda prohibida totalmente prohibida adaptar esta historia sin el consentimiento

del autor original

Esta es mi primera adaptación por lo cual habrá algunos errores, espero me entiendan
por favor, si encuentras algunos errores, háganmelo saber para poder corregirlo

 Esta es una adaptación sin fines de lucros

 Tengo la autorización de la autora original para poder adaptarla

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS A SU AUTOR ORIGINAL

SUGAINMYTEE

THE INVASION

HOLA