Está en la página 1de 14

,, aportaciones

y publicaciones en el campo del psicoanálisis de orientación


lacaniana. Fue doctorado en la Universidad de Paris VIII; es profesor titular de la
“Los objetos a y el loco”* Cátedra I de Psicopatología en la Facultad de Psicología de la Universidad de

Por Fabian Naparstek. Buenos Aires y profesor a cargo de la materia “Clínica de las toxicomanías”, tema
sobre el que él ha trabajado mucho y publicado numerosas aportaciones. Hoy nos
Santiago Castellanos: Buenas noches a todos los que estais al otro lado de la va a hablar en una conferencia cuyo título es “El objeto a y el loco”. No conocemos
pantalla de diferentes ciudades y lugares en esta actividad con la que iniciamos la su texto, nos va a sorprender. Después de su conferencia intercambiaremos
serie de reuniones del Departamento de Psicopatología de la Sección Clínica de algunas preguntas, Rosa López y yo mismo, y abriremos un poco la posibilidad de
Madrid-NUCEP. Junto con Rosa López, vamos a coordinar esta conferencia que va a que podrais preguntar, intervenir a través del chat con la función de levantando la
presentar Fabián Naparstek. mano del Zoom, para que hagamos una pequeña conversación. Sin más

Rosa López y yo mismo, somos psicoanalistas en Madrid y docentes del Instituto preámbulos, te damos la palabra Fabián, adelante.

del Campo Freudiano en España y coordinadores del Departamento de Fabián Naparstek: Buenas noches, buenas tardes para mí y los que están acá en
Psicopatología. Agradecemos a Fabián por su colaboración y su participación en América del Sur. Quiero agradecer la invitación a la Sección Clínica de Madrid, al
esta conferencia, que en este momento dará desde Buenos Aires. Nucep; al Departamento de Estudios de Psicopatología Clínica; y especialmente a

Como os decía, es un tema organizado por el Departamento de Psicopatología. Este Santiago Castellanos y Rosa López por la invitación y el trabajo previo que hemos

año vamos a abordar el trabajo alrededor de la cuestión de las grandes psicosis: la hecho.

esquizofrenia, la paranoia y la melancolía. Estos tres grandes polos desde el punto De estar en otro momento de la historia, posiblemente estaría en Madrid con
de vista de las enseñanzas de Freud y de Lacan. Vamos a visitar los casos que van Ustedes; pero la situación de la pandemia no lo permite. Cuando Santiago me invitó
desde Aimée1, Schreber2, caso Wagner3, hasta Joyce4 y efectivamente la era otra la situación, así que finalmente estamos por este medio virtual.
psicopatología nos enseña muchas cosas pero vamos a poder, como hacemos cada
año, pensar desde la clínica orientada por el psicoanálisis de orientación Hago una pequeña corrección al título de la conferencia, efectivamente no la tengo

Lacaniana, todas estas categorías en una serie de reuniones. escrita, seguramente iré desarrollando algunas ideas y después podremos debatir.
El título no está puesto en singular −“El objeto a y el loco”−, sino en plural: “Los
Fabián Naparstek es psicoanalista en Buenos Aires, es miembro de la Escuela de objetos a y el loco”. Trataré de fundamentar el plural de “los objetos a”, a partir de
Orientación Lacaniana y miembro de la Asociación Mundial de Psicoanálisis, fue una indicación de Lacan.
Analista de la Escuela (AE) en el período 2002 al 2005 y Presidente de la EOL en el
Para ir directamente a la cuestión, parto de algo que estaba en la convocatoria que
año 2016. Es docente del ICdeBA, autor de varios libros, innumerables
se hizo para esta conferencia, que es una indicación de Jacques-Alain Miller en una
* Conferencia pronunciada en el marco de la inauguración de la actividad 2020-2021 del Departamento conversación clínica recientemente publicada en español, La conversación
de Psicopatología de la Sección Clínica de Madrid – NUCEP, el 12 de noviembre de 2020. Disponible en:
https://www.youtube.com/watch?v=_TOTMjIhZpQ clínica−UFORCA5, donde él se sorprende de que los colegas de nuestra comunidad
1
Lacan, J., “El caso Aimée o la paranoia de autocastigo”, De la psicosis paranoica y su relación con la
no utilizan el objeto pequeño a para dar cuenta de sus casos clínicos. Les leo cómo
personalidad, México, Siglo XXI, 1998.
2
Freud, S., “Sobre un caso de paranoia escrito autobiográficamente”, Obras Completas, Buenos Aires,
Amorrortu, t. XII, PP. 1-76.
3
Gaupp, R., El caso Wagner, Ed. Asociación Española de Neuropsiquiatría, España, 2001
4 5
Lacan, J., El seminario, libro 23, El sinthome, Buenos Aires, Paidós, 2001. AAVV, La conversación clínica−UFORCA, Buenos Aires, Grama, 2020, pp. 117-118.
lo dice en el medio de un debate sobre uno de los casos, el de Sonia Chiriaco, pequeño discurso a los psiquiatras”9. Se trata de una conferencia de Lacan,
titulado “Sobre la línea”. fantástica por muchas cuestiones, no solamente por esto que voy a plantear en este
momento. Respecto de la psicosis, y especialmente acá de la locura, Lacan va a
Allí J.-A. Miller dice: “Lo que me sorprende −desde ya hace un tiempo, pero se
plantear las cosas en términos de “los normalizados” y “los locos”. Es interesante
verifica en este caso− es hasta qué punto la referencia al objeto pequeño a ha
porque el término de ´normalidad` está puesto en cuestión en este momento. Las
desaparecido de nuestro discurso. Uno creería que una epidemia ha erradicado al
nuevas normalidades, las antiguas normalidades, etcétera. Pero en esta
objeto a de nuestras filas (…)”6. Esta referencia a la epidemia es previa a la
conferencia, cuando Lacan habla del normalizado se refiere a aquel que demanda
pandemia, es decir que se anticipaba un poco. Y continúa: “mientras que en una
el objeto a en el campo del Otro. Y respecto del hombre libre, que es cuando se va a
época, los discursos, las exposiciones estaban llenas de referencias al mismo“7. Más
referir a la locura, justamente dice que el loco es el hombre libre porque no precisa
abajo termina diciendo: “Es sorprendente que la palabra objeto a forjada por
demandarle el objeto a al Otro. Les leo cómo lo dice Lacan (en una traducción
Lacan, no se reencuentre en el texto, ni en los comentarios. Como si hubiese tenido
casera que tengo): “Para explicarles las cosas simplemente: hay hombres libres”.
lugar una gran eliminación, a la vez que ocupa en la elaboración de Lacan y en su
Es una referencia a él mismo. Ustedes saben que ésta es una referencia temprana,
enseñanza un lugar absolutamente central, No es algo propio en usted, [le dice a la
la del hombre libre. A mi gusto, una ironía de Lacan. Y allí menciona al Congreso de
autora], es un fenómeno de grupo muy sorprendente”8. Es decir que se refiere a la
Bonneval, que remite a un escrito anterior a esta conferencia10. Una ironía digo yo
comunidad analítica, no se refiere a la autora sino a toda la comunidad respecto a
porque la historia de la psiquiatría habló del loco como del alienado mental,
la referencia sobre el objeto a. Yo les he mandado esta indicación hace quince días,
mientras que Lacan dice: “es el hombre libre” justamente para introducir allí lo
pero hace una semana, en la presentación del libro, alguno de los presentadores
contrario al alienado. Entonces, continúa: “Como lo he dicho desde siempre, (…) los
hizo referencia también a este comentario de J. -A. Miller.
hombres libres, los verdaderos son precisamente los locos”, y agrega, “No hay
¿Por qué parto de ahí? Porque, a mi gusto, hay una clínica para abordar demanda de pequeño a, lo tienen en lo que se llama las voces, por ejemplo”. Y
especialmente a la psicosis en torno al objeto a. Y, así como podemos decir que hay agrega lo siguiente −que después lo voy a retomar−, “Y es por ello que ustedes”,
una clínica de la psicosis alrededor del significante en la primera enseñanza de ̶´ustedes´ hay que entender acá que pareciera ser que se dirige a los psiquiatras,
Lacan, a partir del Nombre del Padre, etcétera; y también hay una clínica muy después habrá que ver si, como solía hacer muchas veces Lacan, cuando le habla a
fuerte para abordar la psicosis alrededor del síntoma, especialmente con Joyce. los psiquiatras le está hablando a los psicoanalistas, siempre un poquito de
costado. Dice: “Y ustedes, están en su presencia justo a título de angustiados, y es
Lo he puesto en estos términos: está el paradigma Schreber, clínica del
porque el loco es el hombre libre”. Es interesante la referencia porque le dice a los
significante; y está el paradigma Joyce, clínica del síntoma. En el camino entre una
psiquiatras que se angustian ante el hombre libre que es el loco.
clínica y la otra encontramos en Lacan una clínica del objeto a, que a mi gusto es
una herramienta central para pensar e intervenir en el campo de la psicosis. Uno Avanzo un poco más en la cita de Lacan y después lo retomo: “No tiene interés, este
de los lugares donde más claramente queda planteada esta clínica a la cual hago hombre libre, al lugar del gran Otro,por el objeto a, el a lo tiene a su disposición, el
referencia, la del objeto a, sobre la psicosis, la encuentran en un texto de Lacan, loco es verdaderamente un ser libre”, y un poco más adelante aparece la cita más
inédito hasta el momento, por lo menos hasta donde yo tengo registro, que es “El conocida por todos nosotros, “Él, (el loco), digamos tiene su causa en el bolsillo, es
9
Lacan, J., “Pequeño discurso a los psiquiatras”, dictado en el Cercle Psychiatrique H. Ey, Sainte Anne,
6
Ibid. p 118. Paris, el 10 de Noviembre de 1967, (inédito).
7 10
Ibidem. Lacan, J., «Acerca de la causalidad psíquica» (28 de Septiembre de 1946 en las Jornadas psiquiátricas
8
Ibidem. de Bonneval), en Escritos 1, Buenos Aires, Siglo XXI.
por ello que es un loco, es por ello que ustedes tienen delante de él un sentimiento como el loco presentifica el objeto a y produce angustia, la mejor solución que se
muy particular”. ´Sentimiento muy particular´ se refiere a esta angustia de la que encontró hasta el momento había sido encerrarlo. Casi que diría como una
hablábamos antes. Esta indicación de Lacan tiene una lógica muy precisa, lo intervención para localizar el objeto a en el lugar del encierro.
podemos decir de esta manera: como el loco tiene el objeto a de su lado, es libre
Por supuesto que esto tiene otras connotaciones también respecto de la
del gran Otro. Es decir, prescinde del gran Otro porque no tiene que ir a buscar el
segregación etcétera, que podemos retomar. De hecho, Lacan en esta misma
objeto a al campo del Otro, como sí lo hace lo que acá llama “el normalizado”,
conferencia piensa que los que podrían hacerle frente a la locura y no encerrar al
aunque podríamos decir el neurótico. El neurótico esta alienado al Otro, porque va
loco serían aquellos que tienen un fin de análisis. Es decir, que habría que arribar a
en busca del objeto a al campo del Otro. Son las posiciones que Lacan ubica en
un fin de análisis para poder hacer frente a la locura sin angustiarse.
contraposición una de la otra.
Doy un paso más, o antes de dar ese paso, ubico lo siguiente: la libertad a la que
La referencia al bolsillo, −es una interpretación que hago del asunto−, es una
hace referencia Lacan acá, ya que no es la primera vez que hace referencia a la
referencia a la época y al capitalismo: tener el objeto a en el bolsillo. Porque
libertad, -habría que revisar en cada momento de la enseñanza de Lacan-, cuál es el
compara la época con el loco, en el sentido de una época loca, pero como
eje sobre el que él plantea la libertad del loco. En este caso no es un concepto
perspectiva estructural del asunto.
positivo, al cual habría que tender a buscar mayores libertades, porque esa libertad
Hay unos párrafos en una conferencia de J.-A. Miller, que se llama “Sobre la lección lo que trae aparejado es el padecimiento del objeto a. Como dice J.-A. Miller: se
de las psicosis”11, donde retoma esta cuestión indicada por Lacan, sin dar la trata de la libertad respecto del Otro pero se padece la tiranía del objeto a. Aquel
indicación precisa, pero a mi gusto retoma estos párrafos de Lacan. Dice “La que es el hombre libre, el libre del gran Otro, no precisa al gran Otro, pero padece
libertad en efecto es su condena, es su destino, ya que no se dirige al Otro buscando la presencia del objeto a, y como indica acá, sus voces lo demuestran. Es decir, no
la causa de su deseo”. “El psicótico [acá ya Miller no dice el loco sino que dice el es una libertad a la que Lacan empuja, no es una libertad a la que hay que tender,
psicótico] no le demanda el objeto a porque para demandar debería haber porque liberarse del Otro tiene como efecto la presentificación tirana del objeto a.
consentido que el objeto sea extraído y en efecto esté en el campo del Otro”12. Con las consecuencias que eso trae aparejado.

Una pequeña digresión al margen, que parece también muy lógica en el Enganches y desenganches
razonamiento de Lacan: si el objeto a está del lado del loco, cada vez que nos
Una vez ubicado en estos términos el campo de la locura, se abre un abanico de
enfrentamos al loco, se presentifica el objeto a y es por eso que quien lo atiende se
posibilidades a la intervención analítica. Porque finalmente es una manera que
angustia. De hecho, Lacan retoma La historia de la locura…13 de Michel Foucault,
tiene Lacan de plantear que el loco esta desenganchado del Otro, se ha soltado del
para dar su interpretación del porqué del encierro a los locos. Es muy irónico
Otro, a partir de la presencia del objeto a. Y entonces, la posibilidad de poner al
Lacan allí, dice: “Todos esos locos han sido tratados de la manera que le llaman
objeto a en el campo de Otro supone un reenganche a dicho campo. Es decir, que es
humanitaria, a saber: encerrados”14. Es decir que la interpretación de Lacan es que
una clínica que anticipa lo que va a venir después y que nosotros en el Campo
Freudiano hemos trabajado, a partir del especialmente en las psicosis ordinarias,
11
Miller, J.-A., “Sobre le lección de las psicosis”, Revista El Psicoanálisis, 30/31, ELP, España, octubre
en términos de enganches y desenganches.
2017.
12
Ibid. p. 60.
13
Foucault, M., Historia de la locura en la época clásica, Buenos Aires, Fondo de cultura económica,
2014.
14
Lacan, J., “Breve discurso a los psiquiatras”, op. cit.
Es así que se puede hacer un esfuerzo de relectura de esta clínica del objeto a en pone el acento en “la condición de toda invención de saber cierto que se verifica en
términos de enganches y desenganches desde la última o ultimísima enseñanza de lo real”16.
Lacan. Podemos rever cómo utilizar esta clínica en esos términos.
Lo interesante del coraje, por lo menos en esta conferencia de Miller, es que está
Cuento una pequeña viñeta clínica que me tocó comentar hace muchos años en una puesto en términos de poder inventar algo más allá del Nombre del Padre. Por eso
Jornada Clínica en Estados Unidos. Una colega de allí se planteaba el problema de habla del coraje de la psicosis, de inventar en ese lugar. Lo compara, también, con
si había que recibir o no regalos de los pacientes y cuenta un caso clínico, que no el coraje del fin de análisis de poder ir más allá del Nombre del Padre. En el caso de
voy a relatar aquí, sino simplemente dos líneas. En la primera entrevista la la psicosis, lo voy a decir ahora en estos términos: se trata de armar un delirio que
paciente le trae un regalo, que la analista decide dejar sobre el escritorio. Ésta no implique poner el objeto a en el campo del Otro.
sabía bien cómo orientar esa cura porque la paciente venía a las sesiones a hablar
Efectivamente, la idea de Lacan de la metáfora delirante estaba puesta en términos
de cosas cotidianas: de cómo estaba el clima, de si estaba lloviendo o no, de algunas
del significante que puede estabilizar el lazo del significante y el significado. Pero
cuestiones que habían pasado en el país en el último tiempo, etcétera. No decía
se ve muy claramente que cuando aparece la metáfora delirante, lo que se hace es
nada de su vida personal pero destacaba que cada vez que venía verificaba si el
poner el objeto a en el campo del Otro, es decir, que caiga, que se sustraiga la voz a
objeto que había regalado estaba arriba del escritorio. Efectivamente, lo que se
partir del sentido. Esto es muy claro en el ejemplo de las frases truncas en
demostraba en ese caso es que la operación que había hecho esa paciente era el
Schreber. Estas no tienen ningún sentido y finalmente presentifican una voz.
intento de pasar el objeto a al campo del Otro y eso la apaciguaba de ciertos
Schreber mismo dice que se encuentra compelido al filo del abismo en esas frases
fenómenos que la analizante había relatado. La recomendación en ese caso fue
truncas, y todo el esfuerzo que él hace para poner el final a la frase. Esto es para
seguir hablando de todas esas cosas y dejar el objeto a en ese escritorio para que
darle un sentido que acallen las voces. Por lo tanto, el sentido es lo que atrapa o lo
cada vez que viniese, la analizante verificase y se tranquilizase con el hecho de que
que deja del lado del campo del Otro, es ese objeto a. Esto pensado desde la
el objeto a había quedado en el campo del Otro.
perspectiva del objeto a, y ya no desde la perspectiva significante y significado. Y
La ética y el goce produce un efecto de sentido que acalla las voces. Y en este caso J.-A. Miller plantea
que el coraje de la psicosis es denunciar la impostura paterna, que no sería la única
Hay un segundo paso a dar y es la cuestión ética del asunto. En esta misma lección,
posibilidad de darle sentido a ese real. Es decir, que se inventa con el bien decir
J.-A. Miller habla del coraje de la psicosis. Lo ubica de manera opuesta a la
delirante una forma, y ahora lo digo de esta manera, de ligarse al campo del Otro.
cobardía, especialmente de la cobardía moral en la melancolía. Está hablando de la
cobardía moral y en un momento dice: “Pero si la palabra «cobardía» permanece, Esquizofrenia, paranoia, melancolía
conservemos también la de coraje para calificar la construcción del delirio que, en
Como ustedes saben, en un Lacan posterior, las cosas quedan divididas en
su esfuerzo, intenta por excelencia el bien-decir, en el sentido del deber”15.
términos de: la psicosis que establece un lazo social, es decir que entra en el
Subrayo el poner el delirio en términos de un bien decir. Y continúa: “La psicosis
discurso; y la psicosis que no. Allí la bipartición es entre la paranoia y la
como un ensayo de rigor no es una cobardía moral”, y fundamentalmente Miller
esquizofrenia. El paranoico lo ubica del lado del lazo social, que le permite ligarse
al Otro dejando la inocencia de su lado y poniéndo el reproche o la persecución en
el campo del Otro. Mientras que el esquizofrénico es invadido por un goce en el

15 16
Miller, J.-A., “Sobre le lección de las psicosis”, op. cit., p.6o Ibid. p. 61
cuerpo, y tiene que hacer una operación, muchas veces difícil, de extraer ese goce Entonces ahora sí, retomo lo que les planteaba al comienzo en relación a la
del cuerpo. Muchas veces, llegando hasta infligirse un corte para separar ese objeto referencia que hace Lacan a la época actual. La “época actual” es un decir, porque
a del cuerpo. éste es un texto de 1967. Y como ya sabemos, si hay algo de lo actual es que la
época cambia rápidamente. Como lo señala J.-A. Miller: no nacemos y morimos en
Y el melancólico, ̶para traer la triada que se están planteando este año para el
la misma época. No es lo que pasaba en la época de Freud, que uno nacía y moría
trabajo ̶, se identifica totalmente al objeto a, al que hay que eliminar por
en la misma época. En la época actual las cosas van cambiando verdaderamente a
indignidad. J.-A. Miller dice que no es que está identificado al objeto a, sino que
una velocidad impresionante y hay que recalcular en cada momento en qué época
habla de la identidad del melancólico con el objeto a, que no es lo mismo que una
estamos. De hecho mi idea es que siempre es un término un poco resbaladizo
identificación. Esto lo encuentran en el texto de Variaciones del humor17, en la
hablar de la época. ¿Qué decimos cuando decimos “la época”? En todo caso, mi idea
página 155, donde él hace la aclaración de que no se trata tanto de la identificación
del asunto es que la experiencia que tenemos con la época es que nos lleva la
en el melancólico sino de “la identidad con el objeto a”. También podrían encontrar
delantera. Que nos encontramos con la época actual cuando hay algo que irrumpe y
una referencia preciosa, a mi gusto, que es cuando Miller en Le Point hace un
no tenemos la menor idea de qué se trata. Especialmente para aquellos que tienen
comentario sobre los hechos de Dominique Strauss Kahn y allí habla de la
contacto directo con los jóvenes y por ejemplo se encuentran que hablan un idioma
melancolía. Lo pone en términos del raptus melancólico donde el sujeto se
diferente, y en ese gap o en esa brecha, uno encuentra el cambio de época.
destruye en lo real. Dice, “físicamente o moralmente”, como siervo de la pulsión
tiránica. Pero en todo caso lo que plantea Lacan, muy cercano a la locura para la época, lo
dice de esta manera en la misma conferencia que les decía antes, el “Pequeño
Para Lacan hay una manera de plantear las cosas dentro del campo de la psicosis
discurso a los psiquiatras”. Dice: “Cuanto más se somete a las transformaciones de
en términos de ética. Del lado del coraje encontramos la posibilidad de inventarse
la ciencia, más domina toda nuestra vida cotidiana, hasta la incidencia de nuestros
una manera novedosa de engancharse con el Otro que no sea obviamente por la vía
objetos a”. Allí aparece “los objetos a” en plural, que era a lo que hice referencia al
del padre, y del lado de la cobardía encontramos la identidad del melancólico con
comienzo y en el título de la conferencia. “Si hay uno de los frutos más tangibles,
el objeto a. Este enganche con el Otro a partir de poder ubicar el objeto a en dicho
que ahora ustedes pueden tocar todos los días de lo que devenga de los progresos
campo, lo que permite, entre otras cosas, es una localización del goce. Hay que
de la ciencia, es que los objetos a se meten en todas partes. Aislados, solos y
decir que en Miller encontramos una clínica de la localización del goce y una clínica
siempre listos a sorprenderlos en el primer encuentro”. Vean las características
de la deslocalización del goce. A tal punto que él ubica con mucha precisión que, a
que le pone a los objetos a: Aislados, solos y siempre listo a sorprenderlos en el
partir del Seminario 2018 hay en Lacan una concepción diferente del goce que
primer encuentro. Agrega Lacan: “Solo hago alusión aquí a la existencia de lo que se
supone ya no un goce localizado como lo era en el Seminario 719, La ética del
llama la mass media, a saber esas miradas errantes y esas voces caprichosas de las
psicoanálisis, sino que habla de la omnipresencia del goce, el goce por todos lados.
cuales están destinados muy naturalmente a estar rodeados cada vez más. Se los
De hecho, va de la mano de lo que decíamos del loco, porque efectivamente si el
mete por los ojos y por las orejas”.
objeto a no está localizado en el campo del Otro, aparece por todos lados.
En lo personal, no deja de sorprenderme la indicación de Lacan, impactante para
La época actual
1967. Hoy a cada uno de ustedes no le cabe la menor duda de lo preciso de esta

17
indicación. Hoy salimos a la calle y estamos llenos de cámaras que nos miran,
Miller, J.-A., Variaciones del humor, Buenos Aires, ICdeBA-Paidós, p. 155.
18
Lacan, J., El seminario, libro 20, Aun, Buenos Aires, Paidós, 2001. entramos a cualquier ámbito y está repleto de pantallas que hablan solas, cada una
19
Lacan, J., El seminario, libro 7, La ética del psicoanálisis, Buenos Aires, Paidós, 2011.
por su lado. Así que, efectivamente, esto que llama “esas miradas errantes y esas significantes. Con el GPS, la voz comanda y uno le tiene que creer. En nuestro caso,
voces caprichosas” están por todas partes. Y va del lado de esta indicación de debo decir, es muy habitual que los GPS que llegan a la Argentina están
Miller de la omnipresencia del goce, a la que hay que agregarle la omnipresencia de programados para que sean una voz femenina, y además hablan en español, en un
los objetos a aislados y sueltos. español de España. Y me interesa este aspecto, el lazo entre la creencia y el objeto
a, porque Lacan advertía en el Seminario 2221, en la clase del 21 de enero de 1975
Mi interpretación del asunto es que cuando dice “aislados y solos”, es que no se
"lo que puede llevar a la creencia en el objeto a, en las voces". Es una clase que es
trata del objeto a singular de cada sujeto ligado en su fantasma. Es más, siguiendo
conocida porque al final es donde habla de creer en el síntoma, lo que implica creer
esta formulación de Lacan, la ciencia va en contra del fantasma de cada quien. Lo
en el síntoma y el comienzo de análisis. Pero en un momento él plantea una
digo de otra manera: la ciencia, ligada al capitalismo, va en contra de la perversión
diferencia. Lo leo: "Es sin embargo manifiesta entre creer allí en el síntoma o
singular de cada sujeto. Va en contra de esa ligazón que uno tiene tan firme en su
creerle, es lo que hace la diferencia entre la neurosis y la psicosis. En la psicosis las
fantasma, cuando se liga el sujeto con el objeto a de una manera singular. Más bien,
voces, no solamente el sujeto cree allí sino que las cree, todo está ahí en ese límite".
acá habla de una invasión de objetos a plural, aislados y sueltos, que se nos meten
Por supuesto, este párrafo habría que trabajarlo más detenidamente, pero en
por los ojos y por las orejas. Y es lo que acerca la época actual a la locura. Se
principio “las cree” está ligado a la manera en que Lacan, a mi gusto, en esta época
entiende también siguiendo esta lógica por qué la época actual es la época del Otro
del Seminario 22, habla de la certeza psicótica. Cuando dice “las cree”, a las voces, y
que no existe. Y es porque la presencia de los objetos a por todas partes nos libera
uno es comandado por esas voces a cualquier lado como única referencia.
del Otro. Nos libera del Otro, al padecer la tiranía del objeto a.
Con el GPS uno tiene una experiencia, por supuesto no de certeza, por lo menos en
Esto responde a la indicación que ha aislado muy fuertemente J.-A. Miller respecto
lo que respecta a mí no me ha sucedido de tener ninguna certeza con el GPS, pero
de poner el objeto a en el cenit de la civilización. Cuestión que, junto con Éric
uno no sabe dónde está, llegó supuestamente al lugar indicado siguiendo a una voz.
Laurent, retoman en el curso El Otro que no existe y sus comités de ética20. Ahí
escriben cómo el objeto a es mayor que el ideal (a > I). En ese sentido, me parece Derecho al síntoma
que podemos hablar de una época de la deslocalización del goce generalizada. Y
Para finalizar y abrir un momento de debate y de conversación con Ustedes,
que cuando el goce se deslocaliza, uno se libera del Otro; con las consecuencias que
entiendo que el análisis en el caso de una neurosis lleva a que uno pueda conmover
eso implica. En cambio la localización del goce permite un enganche al Otro
el modo en que está ligado a ese objeto a, y encontrar una manera novedosa de
singular en cada caso y liga la clínica del objeto a con la del sinthome como un
ligarse al Otro. Pero en el caso de la psicosis, se trata de cómo hacer la operación de
cuarto que anuda.
localizar el objeto a en el campo del Otro y ligarse entonces, engancharse a ese
La brújula y el GPS Otro a partir del propio síntoma. Finalmente Lacan planteaba que cada quien tiene
derecho al síntoma. Es decir, que es por la vía del síntoma que uno puede
Doy un ejemplo más que he utilizado en su momento para ubicar esta cuestión. Se
encontrar una manera novedosa de articularse al Otro.
trata de la diferencia entre la brújula y el GPS. La brújula, antiguamente, marcaba el
norte. Es una referencia simbólica. Podemos decir “el norte del Nombre del Padre”. Bueno, hasta aquí lo que quería plantearles y por supuesto abrimos para conversar
Y uno sabía, uno se ubicaba, uno se localizaba en referencia al norte, en referencia e ir planteando diferentes cuestiones.
al Nombre del Padre, o al norte paterno. Es una relación respecto de coordenadas

20 21
J.-A., Miller, É. Laurent, El Otro que no existe y sus comités de ética, Buenos Aires, Paidós, 2005. Lacan, J. Seminario 22 (1974-75), RSI, clase del 21 de enero de 1975, (inédito).
Rosa López: Muchísimas gracias Fabián. Espectacular el recorrido que has ido Esa especie de certeza, de delirio, que quería realizar lo conseguí con mucha
haciendo, nos abre muchas cuestiones. Cuando empezaste, ordenaste muy bien los dificultad. Convertir en un deseo asintótico por venir y mientras hacíamos un
distintos abordajes de la psicosis en referencia a las dos grandes diferencias trabajo donde él rescataba, en un país como es España y como era España hace
teóricas. Entonces, la clínica del significantes es la clínica Schreber, la del síntoma muchos años, donde la verdad que el psicoanálisis prácticamente no existía;
es la de Joyce; y es verdad que para la clínica del objeto a, lo ignoro y por eso te lo rescataba las pequeñas notas de prensa, los pequeños objetos a donde aparecían
pregunto, no tenemos un paradigma tan claro como lo es Schreber para una y Joyce las cinco letras, e íbamos juntándolos todos en un apartado que tenía ahí siempre
para la otra. Salvo esto último que tú has ido mencionando respecto a la época, en la consulta, en un cajoncito, entonces era la manera de transferir el objeto a.
¿verdad? La época de una cierta locura generalizada por la proliferación y la Pero bueno se me ocurría eso, que me parece crucial.
elevación al cenit del objeto a. Pero no tenemos un caso que tenga la entidad, me
Hace poco supervisé en un Centro de Salud, un hombre que le dio una psicosis que
parece, de demostrarnos la clínica de lo que tratan nuestras viñetas. Y si lo hay, a lo
decían que era una histeria porque no paraba de enredar, de molestar a todos.
mejor sí lo hay y nos puedes sugerir alguno.
Entonces molestaba porque la comida que le daban no la quería por la textura del
Fabián Naparstek: No, no hay un paradigma como lo han sido Schreber y Joyce. Es objeto a, de la comida. Solo podía comer cosas muy blandas o cosas que se
evidente que no lo hay. Por eso partí de la indicación de Miller de que nos queda a pudieran contabilizar. Y luego que estaba lleno de recortes que él iba haciendo de
nosotros hacer el trabajo sobre esa clínica, y cómo no quedar atrapados totalmente cosas que iba cogiendo en la calle, de objeto a, que para reinsertarlo en la sociedad
en la clínica del síntoma, que por supuesto, es la clínica de la última enseñanza de se los quitaba. Se ve claramente estos personajes que hay en la calle, vagabundos
Lacan. Pero el abordaje por la vía del objeto a tiene herramientas muy potentes con sus objetos, los granos de sus objetos a.
para abordar la psicosis. Y me parece que lo que plantea Miller en esta última
Y respecto a la clínica de la psicosis, de la locura generalizada, en Nueva York se
conversación a la que hacía referencia, es una invitación a la comunidad a elaborar
palpa, está en todas partes, no sé si en otras partes de Estados Unidos. Ahí sí que se
esa clínica, a no dejar el objeto a como una herramienta impotente para abordar el
ve la época. Nada, ideas.
campo de la psicosis. Eso me parece que es un trabajo que nos toca a nosotros.
Santiago Castellanos: En el comienzo de tu conferencia has sugerido este texto de
R. López: En eso estoy absolutamente de acuerdo. Me parece que es crucial
Lacan del año 1946, “Acerca de la causalidad psíquica”22, donde él hace la polémica
mantener esto porque es verdad que son esos fenómenos grupales que se van
con Henry Ey y toma la famosa referencia sobre la libertad. Leo literalmente la cita,
produciendo y que no nos damos cuenta pero vamos borrando determinadas
dice Lacan: “Y al ser del hombre no solo puede comprenderse la locura, sino que ni
herramientas que son muy importantes, como la clínica del objeto a. Yo recuerdo
aun seria el ser del hombre, si no llevara en sí la locura como limite a su libertad”23,
casos de psicosis donde se iba haciendo una transferencia de los objetos a del
termina la frase diciendo “no se vuelve loco quien quiere”24.
psicótico hacia el analista. Recuerdo un señor mayor que a partir del significante
“Freud”, que lo llamaba “las cinco letras divinas”, porque él había tenido una Que al mismo tiempo es también la referencia que hace Lacan en “De una cuestión
psicosis muy grave de joven, etcétera. Y había leído a Freud en las primeras preliminar…”25 sobre la insondable decisión del ser. Entonces me interesa mucho
traducciones al español. Entonces, estableció toda una relación conmigo como
22
Lacan, J., “Acerca de la causalidad psíquica”, Escritos 1, op. cit.
analista en la que estaba basada en un delirio en el que de nuestra relación se iba a 23
Ibid.166.
24
concebir una nueva generación de hombres freudianos, libres, felices, etcétera. Ibidem.
25
Lacan, J., “De una cuestión preliminar a todo tratamiento posible en la psicosis”, Escritos 2, Buenos
Aires, Siglo xxi, 2003.
esto que has subrayado de que cuando hablamos de la relación del loco con la F. Naparstek: Acuerdo plenamente en el comentario que haces Santiago. De hecho,
libertad y con la idea del hombre libre, no es en el sentido de una visión idealista lo que vos ubicas como la neurosis, en esa conferencia Lacan lo llama el
de la locura, de la acepción común de la libertad sino que en el fondo hay que “normalizado”. Mi idea del asunto es que a quien le va a demandar al Otro el objeto
tomar en cuenta esta cuestión que subraya muy bien. Lo digo ya como referencia a, lo llama “el normalizado”. Efectivamente eso localiza el goce pero como lo decía
para los que estáis en la conferencia, hay un texto de J.-A. Miller que está publicado Lacan en un momento, el neurótico tiene una falta en ser. Se hace de un falso ser en
en la revista Freudiana número 80 que se titula “Consentimientos”26, está en la el fantasma y eso se transforma en las desgracias del ser, y por eso nos vienen a
página 24. Y en este texto él desarrolla un poco esta parte que ha trabajado consultar. Porque ese objeto a al cual están aferrados se transforma, en algunos
también al principio Fabián de la relación del loco, de la locura y la libertad, y habla casos, en la desgracia del ser y vienen a analizarse para ver cómo se desembarazan
del tema del consentimiento en el sentido, agregando otro elemento más, a que de esa desgracia del ser a la cual están tan agarrados.
finalmente hay una insondable decisión del ser.
Pero en la neurosis también tenemos fenómenos de deslocalización, y más en la
Hay una posición subjetiva muy primaria del loco en relación a si rechaza o no la época actual. Una de las maneras en que Lacan habla de esos fenómenos de
incorporación del orden simbólico y su relación con el significante. Y las deslocalización en las neurosis es el estrago. Cuando él compara el estrago con el
consecuencias subjetivas que eso tiene para él. Porque, lo que te quería preguntar, síntoma, donde el estrago muestra algo de la deslocalización del goce. El término
¿tú qué opinas? En el fondo, en relación al tema del objeto a, todos pagamos su estrago tiene esa particularidad de algo que es deslocalizado. Y entonces ahí
precio: el del loco y también el del neurótico. En la neurosis, de alguna forma, se tenemos fenómenos de deslocalización en la neurosis.
escribe una pérdida de goce, hay una extracción del objeto a, pero al mismo tiempo
De hecho, mi idea del asunto es que una manera de pensar el insomnio en la
se instala el aparatito del fantasma que de alguna manera coloca al objeto a en el
psicosis es por la presentificación del objeto a. Freud decía que para irse a dormir
Otro, como tu bien has dicho. Pero establece un cierto guion que determina un
hay que apagar la realidad un poco. Cuando uno puede hacer la operación de dejar
cierto funcionamiento del goce en la neurosis. Y que se trata de atravesar en un
el objeto a en el campo del Otro, entonces se puede ir a dormir tranquilo. En la
final del análisis. Pero se paga un precio porque si el loco es el hombre libre, el
psicosis hay momentos en que el sujeto no puede dormir, porque el objeto a
neurótico podría decirse, es un poco un hombre esclavo, entre comillas, de la
irrumpe por todos lados. Y entonces, tenemos maneras diferentes del sufrimiento.
determinación del fantasma.
Efectivamente, no es que la neurosis no sufre, pero sufre de una manera y el
Entonces, el loco es un hombre libre porque no tiene esa determinación, no ha psicótico sufre de otra manera. Y me parece muy bien el planteo del programa de
encontrado la consistencia en el objeto a. Pero paga un precio también porque en trabajo que tienen este año: “Paranoia, esquizofrenia, melancolía”, porque son
la locura lo que aparece en la medida en que no se localiza el goce, no encuentra modos de sufrimiento diferentes dentro de la psicosis. Entonces, en un caso la
consistencia en el objeto a, lo que se produce son los fenómenos de deslocalización cuestión está puesta en el campo del Otro y el Otro se le viene encima. En otro caso,
y de disrupción del goce en el cuerpo, bien por medio de las voces, etcétera. esa invasión está en el goce corporal e invade en el cuerpo y hay que hacer una
operación para extraer eso del cuerpo. Por eso tenemos esos pasajes al acto de la
Es decir, al final todo el mundo paga un precio en relación al tema de la posición
esquizofrenia que en muchos casos momentáneamente tranquilizan y alivian al
subjetiva primaria que cada uno establece con el significante o con el objeto a.
sujeto hasta el próximo pasaje al acto. Y en el caso de la melancolía, que siempre es
muy difícil porque hay una identidad con el objeto a que hay que hacer
desaparecer. Entonces ahí tenemos modos de sufrimiento diferentes que marcan
26
Miller, J.-A. “Consetimientos”, Revista Freudiana, 80, Barcelona, ELP-Cataluña, 2017, p. 24.
también una orientación en la clínica, y que en algún caso el solo hecho de poder la ciencia va en contra del fantasma, la ciencia en sus relaciones con el capitalismo,
hacer pasar ese objeto a al campo del Otro, eso ya supone toda una operación me pareció que lo han nombrado también que va en contra del fantasma
analítica que orienta la cura. Y a partir de ahí, se tratará de cómo mantener ese individual. ¿A ti no te parece que la realidad ya es fantasmática? ¿A ti no te parece
objeto a en el campo del Otro. que lo que está en juego también, a propósito de Joker, más que la psicosis
generalizada es la perversión generalizada? ¿Qué piensas tú de eso? Muchas
S. Castellanos: Efectivamente, lo que vamos a explorar en el trabajo del
gracias.
Departamento este año, a fin de cuentas, es la relación del sujeto con el goce. En la
dimensión de la esquizofrenia con el retorno del goce en el cuerpo; en la dimensión F. Naparstek: Muy interesante el caso de las migajas, muy claro respecto de salir a
de la paranoia, el Otro goza pero hay una respuesta del lado del delirio (S2); y en la la calle a localizar dónde está el objeto a y qué se hace con eso. Me parece muy
de la melancolía, con la identificación del sujeto al objeto. Este es un poco el punto interesante para pensar ese tipo de operaciones que se hacen en ciertas psicosis.
y ahí vamos a explorar también la puntuación que tú has hecho en relación a los Respecto de la película Joker, no para analizar la película, pero efectivamente en la
objeto a en concreto. Porque es cierto que normalmente pensamos la clínica más psiquiatría hay todo un recorrido respecto de lo que se llamó en su momento las
bien desde la perspectiva del significante. Es la vía del delirio y la metáfora risas inmotivadas. Es un fenómeno que la psiquiatría clásica ubicaba con mucha
delirante. O bien desde la perspectiva del síntoma. claridad. Inmotivada significa por fuera del sentido, por fuera de lo simbólico. Es
decir que si la risa se anuda al sentido en el caso del chiste, eso queda localizado.
Te agradecemos mucho este punto de reflexión porque lo incluiremos en el trabajo
La estructura mínima que Lacan describe del chiste, por ejemplo, es decir que hace
del Departamento este año.
falta la puntuación para que se largue el objeto a que es la risa. En cambio, la risa
Jesús Ambel: Buenas noches, buenas tardes Fabián, gracias por la conferencia que inmotivada es la presencia del objeto a, y por eso aparece la angustia de quien está
ha sido muy estimulante. Dos cosas: cuando vi el titulo me acordé de una paciente frente a ese loco con la risa inmotivada.
de hace muchos años, que una vez por año me llama para saber si todavía estoy
Coincido plenamente con el comentario. Mi idea del asunto es que no se trata de la
aquí. Ella me contó que uno de sus pasatiempos favoritos era salir a la calle, acudir
perversión generalizada. La perversión o las perversiones, que como decía Lacan,
a algún bar que otro, −recuerdo que Miller dijo en una ocasión que en España los
son pocas. Más bien, localiza un modo de goce muy preciso, y la perversión es una
lugares de socialización de la locura eran los bares, con los problemas que ahora
orientación. He dado en su momento el ejemplo cuando Freud y Lacan hablan del
mismo tenemos porque nos los han cerrado−, pero esta paciente me contó que uno
“perversamente orientado", es decir alguien que tiene una condición erótica, dicho
de sus pasatiempos favoritos era localizar a los mendigos que iban andando por la
en términos freudianos. Y esa condición le determina a quién va a elegir como
calle y si se iban comiendo un bocadillo, coger las migajas que caían del bocadillo
partenaire sexual. Hace varios años atrás estaba en el Comité de Acción en el
de los mendigos. Me pareció una manera brillante de presentificar el objeto a
Congreso de los Nombres del Padre en Italia, y di el ejemplo del príncipe y la
andando por la calle.
cenicienta. El príncipe es alguien perversamente orientado, es alguien que tiene
Pero hay otro, he pensado también en algo más actual y más contemporáneo en el una condición erótica, que quiere hacer encajar al otro sexo en un zapato y anda
sentido de más cinematográfico, acerca de la reciente película del año pasado: por la vida buscando una mujer que encaje en ese zapato. Es alguien totalmente
Joker. Yo he interpretado que en esta película el objeto a es la risa, y justamente la orientado. Pero al perverso no hay que cambiarle el zapato.
risa es lo que ese sujeto no puede colocar en el campo del Otro. Y a propósito de
En cambio, el capitalismo actual quiere que uno cambie los zapatos todos los días.
Joker, es una observación, una pregunta que te hago, Fabián. Cuando has dicho que
Va en contra de la perversión. El perverso quiere el mismo objeto a todo sucio y
oloroso, pero el mismo siempre. En cambio, la ciencia anudada al capitalismo del Otro? Porque el psicótico tiene el objeto a y el Otro tiene el goce, como en la
quiere que uno abandone eso. Entonces, no se trata de una perversión paranoia.
generalizada, sino que eso va en contra de la orientación que era la perversión
Y hay otra cosa sobre esto que me llamó mucho la atención. Algo que Lacan escribe
antiguamente. Y entonces tenemos, como dice Miller, a los “desbrujulados”, los
en el Seminario 10, La angustia, con respecto a la perversión y a la psicosis. Dice:
desorientados.
“Para manejar la relación transferencial, en efecto, tenemos que incluir en nosotros
De hecho, todo esto que estoy diciendo me surge a raíz de un paciente que me el objeto a en cuestión, a la manera de un cuerpo extraño, de una incorporación en
decía que él no sabía cómo abordar al otro sexo, no sabía si era homosexual o la que nosotros somos el paciente, ya que el objeto en tanto causa de su falta, le es
heterosexual, si le gustaban los transexuales, si le gustaban los travestis. Y absolutamente ajeno al sujeto…”27. Esto de la incorporación del objeto a en el
agregaba “yo sé lo que es alguien lindo o linda estéticamente, es como si me fuera a analista me llamó mucho la atención, porque Lacan nos da después indicaciones de
comprar un par de zapatos y no supiese cuál es mi horma, se cuál es el zapato que la dirección de la cura a partir del síntoma, como localización del goce, pero esto es
quiero pero no cuál es mi horma”. Y ahí es cuando me surge el ejemplo del previo a esa formulación. ¿No sé qué puedes comentar al respecto?
príncipe. Adonde apunta la ciencia, el capitalismo, es hacia la horma del Nombre
F. Naparstek: Si, por supuesto que el lugar del analista en el discurso analítico hay
del Padre, y del fantasma. Son problemas diferentes, ni mejores, ni peores. Pero
que ponerlo entre paréntesis respecto de la psicosis. Habría que ver en qué casos
diferentes. Es importante poder ubicar como se presntan los problemas en cada
puede convenir o no estar en el lugar del agente en el discurso analítico como
momento.
objeto a para la psicosis. Hay que ver cada caso y en qué punto es conveniente o no.
R. López: Hay una pregunta en el chat que dice así: ¿Se podría pensar tal vez desde
En los casos que intentaba trasmitir antes y que Rosa también comentó y que traía
algunos artistas del body art o carnal art algo del orden de la clínica del objeto a?
Jesús Ambel, se trata de la localización fuera del consultorio o dentro del
F. Naparstek: Y si, en el caso clínico al cual hice mención en la conversación de consultorio pero no identificado con el analista. Es decir que ese campo aloje el
UFORCA y que Miller interviene respecto del objeto a, es un paciente que produce objeto a, no es tanto que el analista vaya al lugar del objeto a, sino que sea un
un objeto a que lo llaman “móvil”, que además lo puede vender. Y se ve cómo a campo para alojar el objeto a. Es interesante también el caso que traía Jesús Ambel
partir de ese hecho de llevar ese objeto a al campo del Otro, produce los efectos que llama cada tanto para ver si el otro todavía está ahí. En el medio de la
que produce. Hay que debatir allí si se trata de la sublimación o se trata de otra pandemia, uno cuando no escribe hace mucho a alguien, le pregunta cómo esta.
cuestión. Pero me parece que sí, que en ciertos casos la recuperación del objeto a Pero si no estamos en el medio de la pandemia, uno supone al Otro, verifica que
perdido, para meterlo en el campo del Otro, puede tener esas características y ese esté el Otro, y después, una vez que verificó que el Otro está, dice “encontré el
efecto singular. objeto a en el campo del Otro”. Es decir que hay una distinción que no
necesariamente es que el analista esté en el lugar del objeto a, que en algunos
Gerardo Réquiz: La dirección de la cura del psicótico me interesa particularmente.
casos puede traer consecuencias no muy buenas.
El psicótico disputa con el analista el lugar del objeto a, porque tiene el objeto a de
goce y el analista es semblante de objeto a. Hay constantemente una dificultad. Por Castellanos: Tiene la palabra Dolores Castrillo
supuesto, son dos funciones del objeto a distintas. Una es un objeto a de goce y
otro, de causa del deseo. Entonces, ¿se podría pensar que en la medida en que se
extrae algo del objeto a del psicótico, también eso redunda en la economía de goce
27
Lacan, J. El Seminario, libro 10, La angustia, Buenos Aires, Paidós, 2004, p. 153.
Dolores Castrillo: Yo quería plantear una pregunta en relación a estos tres libidinales. Toda la libido recae sobre Schreber y se desliga del mundo. Y el delirio,
abordajes de la psicosis por el lado del significante, por el lado del objeto a y por el para Freud, es curativo porque vuelve a reengancharse con el mundo.
lado del sinthome. Porque me parece claro que el objeto a debe estar incluido en la
Entonces tenemos una clínica del enganche y del desenganche en términos
clínica del sinthome. Por ejemplo en el tema que Lacan llama el síntoma de
significantes, en términos del objeto a y en términos del síntoma. Y hay que ver qué
palabras impuestas en Joyce a partir de las cuales él logra construir su sinthome
aporta cada una de estas clínicas. Desde Freud está planteado así.
escritura.
Hay algo que he comentado en Barcelona, en el último Congreso de la AMP28. Y es
Pienso si, en cierto modo, estas palabras impuestas no suponen una clínica del
que partimos de la idea, una idea que me parece propia de Lacan, que el enganche
objeto a. O sea, no serían una especie de equivalente a las voces y no logra Joyce
al Otro, en el caso por supuesto de la psicosis, tiene un beneficio para el sujeto. Y
con su sinthome escritura engancharse al Otro, precisamente a través de ese objeto
no solamente en el caso de la psicosis, también en el caso de la neurosis −pero no
a que podrían ser las palabras impuestas.
me quiero detener en esto porque es otra temática. Pero Lacan no pensaba un fin
F. Naparstek: Acuerdo plenamente con esa lectura, es decir que a partir de la clínica de análisis con desenganchados del Otro. El pase y todo el dispositivo del pase es
el objeto a podemos leer a Joyce. Desde esa perspectiva, eso le permite para que uno se reenganche al Otro nuevamente. Pero sacando eso de costado, lo
engancharse al Otro. Todo lo que Lacan dice acerca de la publicación, que es el que comenté en Barcelona, y algunas de las cuestiones que se pudo escuchar en ese
cuarto que anuda. Es decir, que es lo que le permite a Joyce engancharse con el Congreso, es que en algunas psicosis a veces el desenganche con el Otro produce
campo del Otro, con esa esperanza que tenía Joyce de que los universitarios lo un alivio. Hay que estar advertidos también de esto, que el enganche con el Otro es
vayan a leer doscientos años seguidos, etcétera. Y lo que hace es extraer las tan problemático que más bien conviene mantenerlo desligado de ciertas maneras
epifanías que le aparecen con su libretita donde va anotando. Pero que no alcanza con el Otro o con ciertos enganches frágiles. Y que lo pueden mantener aliviado de
con anotarlas en la libretita, sino que le hizo falta, además, publicar. Por eso Lacan ese enganche problemático al Otro. Hay que evaluarlo en cada caso.
se pregunta por qué Joyce quiere publicar. ¿Quiere publicar algo? La pregunta
S. Castellanos: Me parece muy importante porque al final está la clínica de la
tiene un sentido, ya que era algo impublicable. Entonces, ¿por qué quiere publicar
dimensión del significante, la del objeto a o la del síntoma, y finalmente es en el
eso que no se entiende nada? Como dice Lacan, es todo el intento de Joyce de pasar
caso por caso. No se contrapone la una a la otra, sino que tienen uso.
eso al campo del Otro y que eso, además, permanezca. No solamente pasarlo al
campo del Otro sino que permanezcan en el campo del Otro por doscientos años. Antonio Ceverino: Muchas gracias, Fabián, por este recorrido que has hecho del
Así que, efectivamente, uno puede releer a Joyce desde la perspectiva del objeto a lugar del objeto a en la psicosis. Con la falta de extracción de este objeto a en la
en estos términos, con fenómenos en Joyce, que hay que decirlo también, locura, uno no puede evitar recordar el cuadro de El Bosco “La extracción de la
fenómenos muy fuertes en el cuerpo. piedra de la locura”29. Como este año queremos dedicar el Departamento a analizar
las distintas polaridades de la psicosis, me gustaría resumir en lo que he entendido
En algún momento Lacan habla del lazo que tenía Joyce con su propio órgano.
de tus palabras y hacer un par de preguntas. En la esquizofrenia, decías, el objeto a
Bueno, se podría trabajar todo eso pero mi idea del asunto es que en Freud está
a veces en su dimensión xenopática está en el cuerpo, y esto permite explicar, por
esto porque hay una clínica que es del enganche y desenganche del Otro. Cuando
Freud habla de lo que llama en Schreber la “represión propiamente dicha”, que es 28
XI Congreso Mundial de Psicoanálisis, “Las psicosis ordinarias y las otras, bajo transferencia”,
el momento que quita las catexias del mundo. Y Schreber dice: “los hombres Barcelona, 2018.
29
Cuadro de El Bosco, “Extracción de la piedra de la locura” (1475.1480), Museo del Prado, Madrid,
hechos a la ligera”. Eso es un desenganche del Otro. Freud lo toma en términos España.
ejemplo, las automutilaciones en esquizofrénicos como una extracción salvaje del salvaje del síntoma”, en los últimos seminarios. Así que habría que ver cómo
objeto a. Recuerdo algún caso que vimos en el Departamento en años anteriores. precisarlas. Quizás en el trabajo que hagan ustedes podrán avanzar en ese sentido.
La paranoia, dijiste, representa el coraje y el esfuerzo de situar el objeto a en el
Acuerdo con el comentario de la paranoia, de que el objeto a veces va al lugar del
campo del Otro y así hacer existir algún tipo de lazo social en el delirio. Pero si en
semejante en el gran Otro. Es el ejemplo del ventrílocuo. Ahí el que habla
la neurosis este objeto a ha sido extraído al campo del gran Otro, en los delirios
verdaderamente no es el gran Otro, sino que el semejante se achata con el Gran
paranoicos al uso, no hablo de los delirios logrados de la metáfora delirante, el
Otro. Creo que la imagen que da Lacan en el Seminario 331 es que se achata el
objeto a se sitúa en el otro con minúscula; en el otro como semejante; en el otro en
esquema Lambda y donde tendría que el semejante ser hablado por el Otro, desde
el eje imaginario; en esos otros fantasmales intercambiables que se encarnan en la
el semejante directamente habla el Otro y tiene esas consecuencias. Es decir que
figura de los perseguidores. En la melancolía has dicho que hay una identidad
acuerdo plenamente en eso.
entre el sujeto y el objeto a y así, a diferencia de la neurosis, donde el objeto a
forma parte de la estructura del fantasma, está velado por la imagen narcisista. El Y respecto de la manía, la idea de Lacan es que el objeto a no cumple la función de
melancólico en el pasaje al acto suicida necesita pasar a través de su propia imagen lastre, no cumple la función de anclaje. Entonces el sujeto vuela por todos lados,
para alcanzarlo. porque no está anclado al objeto a, que lo tira siempre al mismo lugar. Cuando en
la neurosis uno le dice a un sujeto “usted hable y diga lo que quiera”, Miller lo ha
Mi pregunta, ya por terminar el recorrido, es por la manía. La única referencia que
señalado en muchas ocasiones, cuando uno le dice “asocie libremente”, sabemos
se me viene es la de “Televisión”30, donde Lacan se refiere a la falta de función del
que no existe “libremente”. Volvemos al término de “libre”, porque el neurótico va
objeto a en la manía, con el retorno y la invasión de goce que se produce. Entonces
a decir varias cosas y va a volver siempre al mismo punto. A tal punto, que el
te agradecería alguna palabra sobre esto. Y gracias también por el comentario
neurótico cada vez que viene a su sesión se queja de que está hablando siempre de
sobre la fijeza en la perversión como estructura, sobre la monotonía de la
lo mismo, es decir que ahí se ve el lastre del objeto a, que el objeto a lo lleva
perversión, que me parece de una gran figura clínica.
siempre al mismo lugar y siempre el mismo lugar.

En la manía lo que se ve es que se suelta ese lazo con el objeto a y el sujeto va a
F. Naparstek: Acuerdo plenamente con la lectura que hace Antonio. Me gustó el todos lados, no tienen un anclaje y entonces eso da el punto de la manía.
sintagma extracción salvaje. Y en el caso de la esquizofrenia, una extracción salvaje
S. Castellanos: Si había una pregunta de Laura antes: que distinga la identidad con
del objeto a, quizás habría que ponerla como una operación sobre lo real, desde lo
el objeto a de la identificación al objeto a.
real. Es decir, que es una operación que como lo simbólico no termina de producir
el corte en lo real para extraer el objeto a, precisa hacerlo en lo real. Entonces se F. Naparstek: Es un tema a trabajar. Ustedes lo van a trabajar a lo largo del año y
produce ahí una operación de ese orden. Habría que trabajar qué tipo de espero el trabajo que hagan. Entiendo en la identificación, es una indicación muy al
operaciones hace cada sujeto: si hace una operación simbólica, si hace una pasar de Miller, pero entiendo que en la identificación hay una distancia, porque la
operación imaginaria o se hace una operación real. Me gusta el término salvaje, identificación siempre es la alienación al significante. En esa alienación al
porque es un término que utiliza Lacan en varias oportunidades, por ejemplo para significante hay cierta distancia con el mismo, que en la identidad no hay. Es decir
hablar del acting out dice transferencia salvaje, y también habla de “la operación que en la identificación, al menos en el caso de la neurosis, apenas alguien

30 31
Lacan, J. “Televisión”, Otros escritos, Buenos Aires, Paidós, 2012. Lacan, J., El seminario, libro 3, Las psicosis, Buenos Aires, Paidós, 2001.
reconoce que está identificado a algún progenitor, por ejemplo al padre o a la estamos hablando de una clínica de los enganches y desenganches, partimos de la
madre; el solo hecho de reconocer esa identificación, ya a uno lo distancia de esa perspectiva del último Lacan, que nos permite releer lo anterior desde otro punto
identificación. Es decir, ubica una cierta distancia. Y en la identidad está totalmente de vista. Acuerdo plenamente en plantear cómo pensar estas cuestiones en Joyce
aplanada esa distancia. Pero es una referencia preciosa, que ustedes van a trabajar también.
con la melancolía. Y que habría que abordar y ver los casos clínicos dónde aparece
R. López: Mila, adelante.
esa identidad.
Mila Haynes: Hola, buenas noches. Me encantó lo que estuviste exponiendo. A pesar
Blanca Cervera Rico: Gracias Fabián. Te agradezco especialmente traer toda esa
de lo complejo que es todo, creo que la claridad ha sido espectacular. Mi
cuestión del objeto a de nuevo. Y lo que quería traer a un poco en la línea de lo que
comentario es por algo que me llama mucho la atención cuando hablas de poner el
ya ha traído Dolores, va en el sentido del síntoma como aquello que viene a
objeto a en el Otro. Cómo el psicótico o el loco lo lleva consigo y conseguir que lo
producir un anudamiento, y también, a localizar algo del objeto a. Me parece que
ponga en el campo del Otro. Hablas del enganche, el enganche con el Otro, que
en ese sentido en el Seminario 23, hay algo que, si bien Lacan se está centrando en
ahora al final has vuelto a decir la clínica del enganche. Me llama la atención
esta manera novedosa de pensar el síntoma, en ningún momento deja de lado la
porque me imagino que es lo mismo que el lazo social esto del enganche con el
cuestión del objeto a. La está trabajando todo el rato. Cuando está con el nudo de
Otro. Sin embargo el lazo es una cosa un poquito más suave, ¿verdad? Porque uno
tres trabajando al principio del Seminario, en la página 70, con el nudo de tres
hace un lacito y lo propone, lo quita. Pero el enganche es como muy agresivo. Has
interpenetrado todavía no tiene el cuatro. Ahí sitúa perfectamente el objeto a en
estado todo el tiempo nombrándolo así como enganche, y no sabía si hay algo
ese lugar que los bordes que cada imaginario, real, simbólico establecen. O sea que
peculiar con respecto al enganche o tiene que ver con la clínica de los nudos.
en el propio Seminario 23, él sigue trabajando con el objeto a. Y, como decía
Dolores, de una manera muy clara y muy rápida, no se puede pensar una clínica del F. Naparstek: Si, enganche y desenganche lo tomo especialmente a partir de la
síntoma sin pensar en el objeto. elaboración que hace Miller en las Conversaciones sobre la psicosis ordinaria32, es
ahí donde surgen fundamentalmente los términos de enganche y desenganche.
Incluso me acordaba otra referencia cuando te escuchaba, que está en la página 83
de la edición castellana del mismo Seminario, donde está trabajando toda la Lo del lazo social lo tomo muy específicamente de los cuatro discursos, porque
cuestión de Nora, y en un momento, casi un chiste con lo que tu traías, pero Lacan dice con todas las letras que cada uno de los discursos es un lazo social.
empiezas el párrafo diciendo: ”El objeto que llamé a, no es en efecto más que un Articula un lazo social. Y hay que tener presente que para Lacan hay lazo social si
único y mismo objeto (…)”. Luego agrega: “le apliqué el nombre de objeto debido a hay imposible, si está la imposibilidad, y habría que ligar en ese lazo social donde
que el objeto es un obstáculo a la expansión de lo imaginario concéntrico, es decir va el objeto a en cada caso, en cada uno de los discursos. Es decir que cuando los
englobante”. Me parece que está trabajando justo lo que tú traes de una menciono en esos términos me estoy refiriendo especialmente a los cuatro
localización. Te agradezco mucho la conferencia. discursos.

F. Naparstek: Si. No tenía presente esa referencia del Seminario 23. Hay que tener La otra cuestión, a mi gusto no hay que perder de vista que cuando Lacan presenta
presente que la relación de Joyce con Nora es especial, por esa falta de extracción la cuestión del objeto a en el Seminario 10, hace la referencia a Winnicott y el
de objeto. Es decir que en esa relación me parece que se verifica algo de esa objeto transicional. Y la idea de Lacan cuando toma el objeto transicional es que, a
cuestión, pero es una muy interesante cita y un trabajo a hacer. Cómo pensar la
clínica del objeto a a partir de la última enseñanza. Porque es evidente que cuando 32
Miller, J.-A. y otros, La psicosis ordinaria, Buenos Aires, ICdeBA-Paidós, 2003.
partir del objeto a puede haber un enganche al Otro. Es por la vía de ese objeto mismo nos ha invitado a hacer un trabajo, el seminario va a continuar. Muchas
transicional que puede haber un enganche al Otro. Lo digo de otra manera: el Otro, gracias a todos, muchas gracias Fabián.
que también tiene sus variaciones a lo largo de la enseñanza de Lacan, ¿a qué
F. Naparstek: Muchas gracias, siempre es un gusto trabajar con ustedes, así que
llamamos Otro? Porque una cosa es el Otro del lenguaje, el tesoro del significante
esperemos que nos veamos pronto.
en la primera enseñanza; después está el lugar del Otro como el deseo del Otro,
etcétera. Todo eso va teniendo sus modificaciones hasta que el Otro es el Otro sexo. Santiago Castellanos: Muchas gracias Fabián, un abrazo
Y finalmente en la ultimísima enseñanza, es el cuerpo el Otro.
Fabián: Un abrazo para ustedes.
Es decir que habría que ir modulando a qué llamamos Otro. Pero en el momento

que Lacan introduce el objeto a en el Seminario 10, el Otro es una abstracción. Es
decir, el Otro no es atrapable, no es palpable con las manos, para decirlo de alguna Desgrabación: Alejo Naparstek
manera. Lo más palpable del Otro que tenemos con las manos es el objeto a. En los Establecimiento y corrección: Dolores Amden
términos que lo presenta Lacan, tomando el objeto transicional de Winnicott;
porque el Otro pensado en esa época es una abstracción total. Después tenemos, a
partir del Seminario 20, que toda la enseñanza de Lacan cambia con la
incorporación del cuerpo, y las consecuencias que eso tiene. Porque la
incorporación del cuerpo tiene una consecuencia respecto del sujeto. Es decir que
Lacan empieza a hablar de parlêtre, en vez del sujeto, pero también tiene un
impacto en el Otro. Ya el Otro no es más el Otro del lenguaje y pasa a ser el Otro
sexo. Ya otra cuestión. Y después hay que ver cómo pensar el Otro en relación con
el cuerpo, es decir que hay ahí una serie o también un trabajo a hacer respecto del
Otro. Pero en todo caso la idea de Lacan es que, a partir del objeto a uno engancha
con el Otro. Y esto es no sin el objeto a. Por eso utiliza, −es mi interpretación del
asunto−, la figura del objeto transicional en Winnicott.

R. López: Querido Fabián, una maravilla. No sé si se pueden agregar los aplausos,


Fue muy, muy bueno por varios motivos. La exposición me ha gustado mucho,
Súper ordenada como lo has planteado, con una lógica. Hemos verdaderamente
palpado la clínica y no es una abstracción. En eso te felicito, es tu estilo y bueno
esto es una gran transferencia de trabajo, ¿Cómo agradecerte? Quedaremos en
deuda y nos encantaría verte por Madrid cuando ya se puedan hacer estas cosas.
¡Ojalá! Respecto al Departamento, que lo presentó Santiago al principio, hemos de
decir que esta es la inauguración. Una inauguración formidable. Con la cantidad de
ideas que ha ido dejando Fabián sobre el tapete, las vamos a ir trabajando. Él

También podría gustarte