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Foco de Infección

Se conoce como foco de infección a aquel sitio en donde hay concentraciones elevadas de
algún agente infeccioso, el cual puede llegar a propagarse a zonas mucho más extensas, siendo
su efecto mucho más notable. En el ámbito sanitario este concepto es ampliamente utilizado,
para definir a aquellos lugares desde donde se propaga una enfermedad o cualquier otra gente
infeccioso.

La magnitud en cuanto a dimensiones del foco de infección puede ser variable en gran medida,
ya que el mismo se encuentra estrechamente relacionado a una serie de elementos, como por
ejemplo el origen de la infección, las probabilidades de que la misma se disperse y los
progresos que se alcancen con respecto a la investigación de la misma. Un foco de infección
puede ser tanto de grandes como pequeñas dimensiones, ya que por un lado se puede decir
que un foco de infección podría ser una comunidad entera o en su defecto podría serlo un solo
individuo, el cual es el portador de alguna patología de tipo infecciosa y con respecto a la cual
es necesario que se tomen medias sanitarias, ya que de no ser así dicha enfermedad podría ser
propagada a grandes masas, llegando a convertirse en una epidemia, por tal razón las medidas
preventivas pueden incluir el aislamiento de todo contacto humano de dicha persona o del
grupo de personas que portan dicha infección, todo ello con el fin de que el daño sea el menor.

De igual forma puede ocurrir con algún sitio en específico, es decir que en un lugar en concreto
se encuentra algún tipo de virus, el cual puede ser adquirido por cualquier individuo que se
encuentre en ese lugar y por tanto dicha infección se puede propagar muy rápidamente si no
se detecta a tiempo.

El poder tener conocimiento con respecto al origen de una enfermedad tiene gran
importancia, ya que gracias al conocimiento de ello es posible apreciar el pronóstico de dicha
infección, así como también se pueden llegar a deducir los agentes infecciosos que la causa, lo
que es muy importante ya que con ello se pueden elaborar antimicrobianos, de igual forma
también se pueden crear medida que se enfoquen en controlar directamente al foco y no a la
transmisión de la enfermedad.

Cuáles-son los focos más infecciosos


del hogar y qué hacer para
contrarrestarlo
Mantener la limpieza en el hogar es una tarea complicada y de difícil labor. Reconoce los
lugares más contaminados y como mantener su higiene.

Mantener limpio el hogar no es cosa sencilla. Muchas de las familias creen que con barrer el
piso o lavar los platos se mantiene una casa fuera de focos infecciosos o bacterias, y la realidad
es completamente distinta.

Te mostramos cuáles son las principales fuentes de infección que hay en cada sector de la casa
y que procedimiento se debe seguir para contrarrestarlas.
1) Esponja de cocina
Suena contradictorio creer que la esponja de cocina, la cual sirve para lavar los platos, ollas -y
siempre para húmedo- sea uno de los principales agentes infecciosos de la casa. Para
mantener limpias las esponjas puedes seguir las siguientes recomendaciones: retirar los restos
de comida que quedan en ella, escurrir la esponja al máximo, meterla al horno microondas
(para eliminar las bacterias restantes) por unos 30 segundos o bañarlos en lejía.

2) Tabla de picar
Es uno de los elementos más usados en la cocina porque es empleado para triturar los
alimentos. Una de las soluciones rápidas para eliminar los residuos es lavarla con agua caliente
y detergente, y secarlas con papel toalla. Para lograr una mayor limpieza se debe dejar
remojando en agua con lejía -o vinagre blanco- por 30 minutos.

3) La refrigeradora
A pesar de ser un elemento cerrado, la refrigeradora posee la mayor cantidad de bacterias en
el hogar debido a que se colocan todos los alimentos, muchas de las veces de manera
irresponsable. Para mantener los alimentos seguros, estos tienen que ser guardado en
recipientes cerrados –para evitar su manipulación- y solo deben de ser sacados al momento de
su preparación. Esto ayudará a que no se generen bacterias producto del enfriamiento del
mismo y a que no caigan algunos desperdicios dentro del artefacto. Para mantener la
refrigeradora impecable, esta debe limpiarse con paños húmedos y con detergente sin olor por
un máximo de 30 minutos, puesto que los alimentos congelados solo pueden mantenerse al
aire por ese lapso de tiempo.

4) Las manillas de las puertas


Todos los días manipulamos manillas de las puertas para entrar o salir de un espacio. Una
manera de controlar las bacterias u otros agentes infecciosos es limpiarlo y desinfectarlo todos
los días con vinagre u alcohol.

5) La ducha
Su limpieza es esencial debido a que pueden proliferar hongos, esporas y moho debido a la
alta humedad y a la poca luz. También se tiene que tener en cuenta la limpieza del cabezal de
la ducha, ya que contiene microbacterias resistente al cloro, que pueden ingresar al organismo
causando diversas enfermedades. Para su limpieza, primero se debe de limpiar con agua
caliente la zona, para después lavarla usando vinagre blanco o lejía.

6) Sábanas y cubrecamas
Tu cama alberga una cantidad inmensa de ácaros y bacterias que causa picazón, alergias y
hasta enfermedades como el asma. Es recomendable lavar las sábanas, las frazadas y los
cobertores de almohada con agua, detergente y un desinfectante. También es primordial
cambiar el juego de sábanas y cubrecamas semanalmente para evitar el contagio de
enfermedades.

Ten en cuenta las recomendaciones que te brindamos para que así cuides tú salud y la de tu
familia. Recuerda siempre dejar limpios todos los implementos que uses para evitar que las
bacterias proliferen.

Recuerda que para proteger tu hogar, no hay nada mejor que la prevención. El Seguro de
Hogar de Mapfre te brinda cobertura en casos siniestros, robos y brinda asistencia médica
domiciliaria.

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