La vida como baile y el ser humano como bailarín.

LA DANZA
Definición
Pienso que la danza, como la más sincera de todas las artes, nos muestra en bruto al humano
que la crea, reflejando su alma y la energía poética que hay en ella. Trasciende más allá del
espacio que conocemos, transformando la simpleza del cuerpo que, siendo sólo materia y
células, puede llegar a separar al bailarín de la tierra sólida. ¿En qué momento no nos
quedamos asombrados por aquella bailarina que parecía volar entre saltos y vueltas?
¿O del danzarín que con sus rítmicos pasos era capaz de romper el propio suelo? Es
porque la danza es un juego de fuerzas, cambios, devenir y transformación, uno donde la
liberalidad de las emociones y música se combinan para crear. La danza habla sin hablar,
pinta historias sin dibujarlas, la danza es el lenguaje de la no palabra.
Historia
La danza, a diferencia de otras manifestaciones artísticas como las plásticas, no puede ser
separada de su creador-ejecutor, es por eso mismo que esta nos ha acompañado a lo largo de
la historia. Siempre diferentes contextos, diferentes movimientos, diferentes fines, pero con
la misma importancia de siempre; darle al humano la expresividad. La danza se manifestó
desde tiempos prehistóricos, empezando con tribus que se juntaban para ritualizar bailando,
siendo en un principio asociada a las acciones rituales. Fue precisamente en la antigua
Grecia donde la danza comenzó a considerarse como un arte, ya tenía una connotación
popular y, a la vez, artística. Pero su apogeo vendría en el renacimiento, puesto que en este
período el hombre volvió a tener mayor importancia por encima de la religión.
Especialmente en nuestro país, la danza tuvo un nuevo enfoque, con nuevos pasos y estilos
de danza, fusionando la danza tradicional con la danza contemporánea, y pronto nuestros
bailes peruanos crearon vidas que compartieron lo nuestro por el resto del mundo.
Danza como medio de comunicación
La danza, según varios filósofos, es entendida como el primer poema declamado por la
humanidad, uno incapaz de pronunciar, pero rebosado con ritmo que llena silencios, oídos,
movimientos; el divino lenguaje de la no palabra. Con la danza nace el primer lenguaje
complejo, y con eso el primer contacto del hombre con el poder y la capacidad creadora de su
propio cuerpo. El ser humano se descubre, siendo consciente que puede hacer más que crear
fuego y herramientas, ahora puede compartir su sentir, su cultura, puede expresar con la
totalidad de su cuerpo su naturaleza mientras baila el breve recorrido de la vida.