Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
No sé por dónde empezar a contar esta historia, tal vez desde el inicio de todo, cuando solo
éramos amigos y no podías lastimarme, cuando me agradaba todo de ti, lo que hacías y con
quien lo hacías me daba igual, cuando teníamos esos cinco segundos de conexión, pero los
ignorábamos porque solo éramos amigos. O puedo empezar por el beso, el beso que cambio
todo, el beso que no tenía que pasar, el beso que me hizo verte de otra manera y a ti verme de
otra manera, pero no de la misma forma en la que yo lo hacía. O mejor cuento la historia desde
el momento en que todo cambio, desde el momento que dejaste de cuidarme, desde el
momento de que dejaste de intentar tener algo conmigo y empezaste a utilizarme. O
simplemente empiezo desde el final, el cual aún no llega, pero puedo empezar contando todo
lo que ese beso trajo consigo, puedo empezar contando como me destruiste poco a poco, como
arruinaste mi confianza y autoestima porque sentí que no era suficiente para ti, porque veías a
otras chicas y eras tan lindo con otras chicas y no conmigo.
Ya no quiero seguir con esto, pero debo sacarlo, estoy enojada, me enojas, porque no fuiste
alguien que llego me destrozo el alma y se fue, no, eres alguien que llego me destrozo el alma y
sigue aquí, no se va ¿por qué no te vas? Por favor vete, tal vez si te vas pueda volver a ser la de
antes, no te necesito en mi vida, no te quiero en mi vida, no quiero que me recuerdes cada
minuto que he cambiado, que antes era dulce y ahora no, que solo paso enojada porque todo
eso lo sé y todo eso lo causaste tú. Quiero gritarlo, quiero gritártelo en la cara, pero no puedo,
porque no es tan sencillo, no puedo sacarte de mi vida sin perder a otras personas.
¿Sabes qué es lo más irónico? Lo que más me duele, no es el hecho de que no me hayas amado,
o que hablaras de como te gustaba y te morías por alguien más sin importante que me tuvieras
al frente, tampoco es el hecho de que vinieras a mí solo cuando tú querías y teniendo la
conciencia que era tu segunda opción. Eso solo duele al principio, cuando aún tenía esperanzas
en ti, porque no eres un mal chico, no eras un mal chico cuando solo eras mi amigo. Pero te
besé, y me lastimaste, me cambiaste, no de una buena manera, no me hiciste más fuerte, eso lo
hice yo tratando de sanarme. ¿Por qué pensamos que un beso es más? No lo es, no es más, no
significa que serán algo más, no significa que me vas a querer, cuidar y elegir como se supone
que pasa en las historias bonitas, lo nuestro no fue una historia bonita y aunque no debemos
arrepentirnos de nuestros errores porque de ellos se aprende, yo me arrepiento de ti, no
necesitaba una lección o una enseñanza, ahora solo necesito que te vayas y la esperanza de que
puedo volver a ser la de antes.
Texto literario 2
Ha pasado una semana, o eso creo, me he sentido perdido, los días pasan muy rápido y casi no
duran. Hace una semana vi tus ojos cerrarse, tu respiración detenerse, tu risa desaparecer y tu
cabeza caer en mi pecho, justo en el instante en que decía la última frase “me sonrió y supe que
era suyo”, es la primera vez que me permito llorar libremente, sin contenerme o reprimirme,
solo llorar hasta agotar mis lágrimas.
¿Por qué ahora? ¿Por qué no en tu funeral? ¿Por qué no la primera noche en que dormí solo?
¿Por qué no en la mañana siguiente cuando no percibí el olor de tu café? Lo cierto es que no
parecía real, creí que yo sería el primero en irse, siempre creímos eso, siempre estuvimos
preparados para eso, me preocupe por dejarte una casa y una pensión para que tú y nuestros
hijos tengan una buena vida a pesar de mi ausencia, pero nunca pensé como seria si la que
faltara fueras tú.
No sé ser padre, no sé ser abuelo, creí que ser el hombre de la casa era llevar sustento y fortaleza,
se trabajar para llevar la comida, se reparar las cosas que no sirvan, se tapar goteras y reparar
la mesa cuando tambalea, pero vi a mis hijos derrumbarse porque te perdieron y a mi nieta
preguntar por ti y no supe que hacer, no supe como secar sus lágrimas, no supe darles consuelo
porque lo cierto es que yo tampoco lo tenía, no se llevar mi vida sin ti, antes lo sabía, pero nos
volvimos uno solo y quizás por eso siento que la muerte no solo se llevó tu vida, sino también
una parte de la mía.
Me dejaste para el final, fuimos al patio, nos acostamos en la hamaca y te leí la carta que hace
mucho me habías pedido que te leyera, era una de las tantas cartas que le había escrito a mi
hermana cuando me encontraba haciendo el servicio, en esta carta le hablaba sobre ti y la
primera vez que te vi. Cuando empecé a leerla pegaste un pequeño brinco de emoción, brinco
que solo podría notarlo yo que te tenía acurrucada en brazos, con cada frase tu emoción
aumentaba y yo no podía evitar sonrojarme, sin avisarme te diste vuelta justo cuando me
sonrojaba porque te leí, lo que por medio de letras le confesaba a mi hermana, que la primera
vez que te vi me escondí.
¿Por qué lo hiciste? – me dijiste girando y mirándome con esos brillantes ojos cafés.
No lo sé, solo fue un impulso, creo que no estaba listo para hablar contigo – te lo digo
mientras coloco un mechón de cabello canoso atrás de tu oreja.
Cuando te acercaste sin que me diera cuenta a preguntarme una dirección – luego de tantos
años no tenía sentido seguir ocultando mi debilidad hacia ti, siempre supuse que lo sabias,
pero nunca había logrado admitirlo.
Solo me sonreíste y por un instante me olvidé del cáncer, pero la carta debía terminar y con ella,
nuestro tiempo juntos, vi el sol ponerse y vi tus ojos cerrarse.
Desperté y la realidad me golpeo, no estabas y no regresarías, ese día no vi a nadie, los chicos
fueron a la casa para invitarme a salir, pero inventé una excusa, ese día era para ti, para
despedirnos, ese día escribí esta carta, luego de muchos años volví a escribirte una carta, no solo
de amor sino también de despedida.
Fuiste mi fuerza, me diste alegría y siempre serás mi amor. Me niego a creer que no existe otra
vida después de esta y que nuestra historia no tendrá un final juntos, así que querida amada, no
diré adiós, sino, hasta la próxima carta.
Texto no literario 1
MEDIOS DE INVESTIGACION
Texto no literario 2
ASPECTOS PEDAGÓGICOS
Siendo la propuesta, una Guía metodológica, para el retorno de la comunidad estudiantil a las
aulas, en la cual los principales participantes son los docentes y estudiantes en un proceso de
enseñanza-aprendizaje, se establece una práctica educativa con la intención de formar y
reforzar los conocimientos del estudiante en determinado tema o asignatura. La aplicación de
la propuesta se va a enmarcar en diversos elementos que se construyen en el proceso como los
son: los objetivos del aprendizaje, la evaluación, motivación, adecuación de contenidos,
participación de los estudiantes y de los miembros de su entorno, interacción y recursos
adecuados.
Lee el cuento “Algo muy grave va a suceder en este pueblo” de Gabriel García
Márquez y crea un video de tipo booktube.