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Arte poética (1916) El Cisne

Vicente Huidobro Rubén Darío

Que el verso sea como una llave Fue en una hora divina para el género humano.
que abra mil puertas. El cisne antes sólo cantaba para morir.
Una hoja cae; algo pasa volando; Cuando se oyó el acento del cisne Wagneriano
cuanto miren los ojos creado sea, fue en medio de una aurora, y fue para revivir.
y el alma del oyente quede temblando.
Sobre las tempestades del humano océano
se oye el canto del Cisne; no se cesa de oír,
Inventa mundos nuevos y cuida tu palabra; dominando el martillo del viejo Thor germano
el adjetivo, cuando no da vida, mata. o las trompas que cantan la espada de
Argantir.
Estamos en el ciclo de los nervios.
El músculo cuelga, ¡Oh Cisne! ¡Oh sacro pájaro! Si antes la blanca
como recuerdo, en los museos; Helena
mas no por eso tenemos menos fuerza: del huevo azul de Leda brotó de gracia llena,
el vigor verdadero siendo de la Hermosura la princesa inmortal,
reside en la cabeza.
bajo tus blancas alas la nueva Poesía
Por qué cantáis la rosa, ¡oh poetas! concibe en una gloria de luz y de armonía
hacedla florecer en el poema. la Helena eterna y pura que encarna el ideal.

Sólo para nosotros


Prosas Profanas, 1986
viven todas las cosas bajo el sol.

El poeta es un pequeño Dios.

El espejo de agua, 1916

Yo persigo uma forma que no encuentra mi estilo

botón de pensamiento que busca ser la rosa;

se anuncia como un beso que en mis labios se posa

el abrazo imposible de la Venus de Milo

Y bajo la ventana de mi bella durmiente,

El sollozo continuo del chorro de la fuente

Y el cuello del gran cisne blanco que me interroga.

Rubén Darío

Prosas Profanas, 1986

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