Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
1
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
Objetivos:
2
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
El 29 de Octubre del año 2016, se llevo a cabo en Lagos del Rocío –Pilar- Buenos Aires –
Argentina, el Primer “Simposio sobre seguridad en competencias de natación aguas abiertas”, estuvo
dividido en dos bloques, marco teórico y práctico, participaron organizadores de competencias,
guardavidas, nadadores de rescate, personal de salud y nadadores, los temas tratados fueron los
siguientes:
En principio anticipamos que este informe no intenta atacar a ningún organizador, ni entidad
en particular que realiza estos eventos, no divulgaremos los datos recabados sobre los lugares que se
realizaron las observaciones de nuestros veedores, pero si remarcaremos claramente las falencias
detectadas para su corrección futura.
3
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
seguridad” en lagunas, pero como adelantamos esto es un trabajo que apunta a no mencionar a los
organizadores en particular, se trata de un diagnóstico general para beneficio de todos.
En los lagos, hemos presenciado varias competencias, la mayoría con resultado general
satisfactorio; En cuanto a las falencias detectadas se mencionan entre otras: Una prueba que por
ausencia de embarcación a motor (moto de agua con sled, o semirrígido) no fue suspendida, tampoco
fue modificado el circuito, tratándose de un lago de mucha profundidad, recorrido 1500 metros y sin
puntos de extracción, salvo la zona de largada, situaciones contempladas en los protocolos
correspondientes, exponiéndose a situaciones límites en forma innecesaria; Los materiales de
salvamento y rescate que se utilizan en la mayoría de las competencias evaluadas, son los adecuados,
kayaks rotomoldeados, tablas convencionales, SUP Rescue, entre otros, también detectamos que
muchos de los guardavidas asignados a la seguridad, no cuentan con la “idoneidad en el uso de
embarcaciones y tampoco tienen en claro los protocolos a seguir”, la ausencia de equipos de
comunicaciones entre el Jefe de guardavidas y el resto de los involucrados en la seguridad es un punto
en común en la mayoría de las pruebas, que influye negativamente en el desarrollo general.
Escenarios Ríos
Debemos diferenciar en principio, los tipos de ríos en donde se realiza la competencia, si bien
no podemos clasificarlos por la ciencia geográfica, vamos a considerar a los efectos de este documento,
los ríos principales con fuerte corriente, profundidad cuyas márgenes se encuentran distantes al menos
300 metros, de los secundarios, de menor caudal, menos profundidad, y márgenes próximas, (algunos
con fuerte corriente). En las pruebas que pudimos evaluar destacamos un cambio positivo en la
seguridad, sobre todo en aquellas competencias donde los guardavidas involucrados estuvieron
presentes en el simposio, una mejora sustancial en los elementos e idoneidad del personal de
seguridad, ajustando sus protocolos a los estándares exigidos; No obstante, aún hay muchas
competencias que mantienen “bajo el nivel de seguridad”, sobre todo en ríos principales, esto nos
inquieta y nos impulsa a seguir insistiendo que todos tomen conciencia. Algunos puntos que todavía se
observan a menudo en este tipo de escenarios son, entre otros: La realización de cruces a nado de
canales de navegación para buques mercantes (prohibido), la práctica habitual de colocar
embarcaciones de remo y de motor “entre” los nadadores, exponiéndolos a que una avería mecánica o
un error de los navegantes generen lesiones o consecuencias indeseadas entre los participantes del
evento. La experiencia indica que las prácticas previas de ambientación al medio incrementan el nivel
de seguridad disminuyendo la situación de riesgo individual y, más importante, las situaciones
colectivas de pánico y/o desesperación; Los familiares, filmadores o fotógrafos del evento, “NO” deben
ocupar las embarcaciones dispuestas para la seguridad del mismo, se debe tener en cuenta la distancia
existente entre el “primero y el último” nadador de la prueba, por ejemplo en una competencia de 9km
en un río con fuerte corriente, la distancia entre ambos puede encontrarse entre 3 y 4 km, no hay
despliegue de seguridad que pueda mantener el contacto visual con nadadores es ese trayecto, en este
caso la ecuación “X guardavidas por X nadadores”, no da resultado, ya que deberíamos hablar de X
guardavidas por X metros lineales de espejo de agua, más aún, diferenciar los eventos “competitivos”
de los “no competitivos”, proponemos se estudien las condiciones y los estándares de seguridad según
el tipo de río del que se trate, a saber: tipo I ( de montaña, mucha velocidad de escurrimiento y gran
4
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
presencia de hidráulicos), tipo II (intermedio, menos velocidad, escasa visibilidad y menor presencia de
hidráulicos) y tipo III (de llanura, menor velocidad de escurrimiento, muy escasa o nula visibilidad por
solutos en suspensión y muy poca presencia de hidráulicos, muchos de estos ríos se encuentran bajo la
jurisdicción de la Prefectura Naval Argentina, fuerza que ya fijó su posición respecto a su intervención
en el marco de la seguridad perimetral, tema tratado en el apéndice correspondiente, pero es notable
que frente a cualquier situación en las condiciones hidro-meteorológicas, esta fuerza aplica con rigor la
suspensión de las pruebas, situación que no ocurría con tanta asiduidad antes de la tragedia del Paraná
(Pacu-cúa, Posadas), tratada, analizada y discutida en profundidad en el simposio, que
lamentablemente culminó con la condena de un integrante de la Prefectura y el organizador de la
prueba, por lo tanto sugerimos una coordinación temprana con la fuerza, un protocolo presentado en
tiempo y forma, elementos de seguridad apropiados y personal idóneo, seguramente marcarán la
diferencia para que las pruebas se realicen.
Escenarios Marítimos
En los casos de competencias en la franja marítima, notamos que como sucedió en los demás
escenarios, los guardavidas que participaron en el simposio y posteriormente trasladaron las
inquietudes a los organizadores zonales, han variado sustancialmente los protocolos de seguridad, pero
se advierte en muchísimas competencias reconocidas, que aun “continúan con los sistemas
tradicionales de seguridad”, muy pocos guardavidas, pocas embarcaciones, largas distancias, y un
escenario por demás riesgoso en condiciones adversas, por lo que se debe revertir en forma inmediata
la aplicación de los protocolos correspondientes; En este aspecto existe una paradoja muy marcada por
la Prefectura, en lo que respecta a las exigencias en competencias de natación en ríos navegables, con
relación a las llevadas a cabo en el mar, ambas jurisdicción de la fuerza de seguridad, por ejemplo se
observaron competencias en la costa con más de 400 nadadores, con condiciones de mar complejo por
su oleaje y corrientes, que las mismas no son suspendidas, y con poca presencia de la autoridad
marítima, y escaso número de guardavidas, esto se contrapone con las exigencias que la misma fuerza
impone en la presentación por parte de los organizadores de sus protocolos aplicado a las
competencias en los ríos, por lo que intentaremos que exista por parte de la Prefectura un despliegue
equitativo y ajustado en cada evento, que todo se encuadre en protocolos establecidos por zonas con
los mismos criterios de seguridad, atendiendo lógicamente los escenarios, cantidad de participantes y
condiciones hidrometeorológicas favorables.
5
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
este evento para lograr una mejor comprensión de los estándares de seguridad más calificados, dentro
de los temas a mejorar apuntamos a: Selección de guardavidas por idoneidad y experiencia, recurrir en
forma permanente a la capacitación de los mismos, realizar periódicamente prácticas en otras
competencias para adaptarse a los medios y aprendan a desempeñarse eficientemente en la prueba;
Se debe estar preparado para afrontar todo tipo de situación, aplicando las estrategias más acertadas,
por ejemplo en la competencia realizada en marzo de este año en Nordelta, los guardavidas que
tripulaban los kayaks estaban limitados de actuar dentro de un carril de cientos de nadadores, sobre
todo en la zona central, con más de 2200 en el agua, la única forma de “entrar” a realizar una
asistencia era nadando con aletas en busca de quien requería ayuda, la aproximación con kayaks,
tablas o moto de agua, solo podía realizarse cuando los nadadores estaban separados del pelotón, este
ajuste se logro con buen resultado por la preparación intensa de los guardavidas, con entrenamiento y
capacitación permanente, ajustados a protocolos bien definidos, en diciembre del corriente año se
presenta un desafío importante a nivel seguridad en la zona marítima, el “Ironman 70.3 Mar del
Plata”, lo que exigirá por parte de los organizadores, responsables de la seguridad una adaptación en
los protocolos, ya que seguramente estarán involucrados guardavidas de la zona, y la Prefectura Naval
Argentina, por lo que se considera la prueba más importante a nivel nacional en cuanto a la cantidad de
nadadores en el mar, deberán trabajar solo guardavidas con experiencia comprobada en competencias
de aguas abiertas. Las otras pruebas a nivel internacional que se realizan en el país, deberían
replantearse algunos puntos de sus protocolos, sobre todo aquellas de larga distancia, hemos recibido
información de embarcaciones guías que se encontraban con su nadador en el agua, distante de todo el
resto de la seguridad y sin comunicaciones.
Aguas frías.
En las denominadas “competencias en aguas frías”, entiéndase por debajo de los 15°C con o
sin protección térmica, actividad que viene creciendo en nuestro país, con un menor número de
nadadores en comparación a las competencias convencionales, la seguridad debe estar a la altura de las
circunstancias, “los riesgos aumentan”, para estos casos los protocolos deben ser perfectamente
delineados, los actores que trabajan en la seguridad (personal médico y guardavidas), deberán
capacitarse y adiestrarse para cumplir eficientemente con la exigencia proyectada, sugerimos realizar
clínicas o jornadas de capacitación para los nadadores y organizadores antes de cada prueba, mantener
los estándares de seguridad apropiados, trabajar con los recursos materiales específicos, disponer de
una carpa o zona de atención a los posibles participantes con hipotermia, con una temperatura
ambiente que supere los 25°C, adecuarse a las directrices específicas para este tipo de eventos.
6
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
Los temas abordados por los disertantes estuvieron a la altura de las circunstancias, cada uno
logró trasladar sus conocimientos y experiencia a los presentes en el auditorio, utilizando distintos
instrumentos técnicos, (diapositivas, videos, planos, elementos), logrando el objetivo con claridad
meridiana, de la encuesta realizada entre los organizadores y guardavidas presentes, todos coincidieron
en este punto, es decir podemos estar conformes con el resultado final, quedando temas pendientes
para futuros encuentros, sobre todo lo relacionado a la unificación de los protocolos de seguridad a
nivel nacional.
Si bien hubo aspectos muy técnicos relacionados a las competencias de aguas abiertas, también
se trataron temas coyunturales ligados a la función de los guardavidas, personal de salud y al resto de
los actores que forman parte de un esquema de seguridad en este tipo de eventos.
Elementos de seguridad:
En este punto por unanimidad estuvieron de acuerdo en la selección de los siguientes
elementos de salvamento a utilizar en la seguridad de competencias de aguas abiertas.
7
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
8
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
tubos de rescate y aletas; Se deben extremar los cuidados con la popa en virtud que la
mayoría de los modelos vienen provistos con quillas rígidas y filosas, lo ideal al igual
que las tablas convencionales es el uso de quillas flexibles.
Aletas- esnorkel-luneta: Se ha considerado al menos que un porcentaje
de las embarcaciones que forman parte de la seguridad se encuentren equipadas con
estos elementos auxiliares, en principio las aletas forman parte del equipo básico de
cualquier guardavidas profesional, hoy no se discute su uso, al contrario de estimula
entrenar con aletas y llevarlas en forma permanente, se recomiendan las aletas “Da-
fin” (EE.UU), Mormai-Rescue (Brasil), que fueron testeadas con excelente resultado.
Para el caso que nos ocupa el tripulante de la moto debe estar con las aletas colocadas
en forma permanente durante la competencia, para el resto es optativo dependiendo
de las circunstancias particulares del evento; el esnorkel y luneta son exclusivamente
para el caso de “código X” (negro), ya que la búsqueda del nadador sumergido no
podrá realizarse eficientemente sin estos elementos, además es importante practicar
este protocolo asiduamente, entrenarse para períodos de apnea repetidos en corto
tiempo.
Embarcaciones Inflables (IRB): Indudablemente todos los protocolos de
seguridad deben involucrar al menos una embarcación a motor, en lo posible
semirrígidos, inflables, con motor fuera de borda, protector de hélice, con los
elementos de seguridad correspondientes (acorde Ordenanza Marítima 1/73 (PNA),
documentación en regla, para los casos específicos de rescate actualmente pueden
hacerlo con habilitación de conductor náutico, pero se está trabajando para que a
partir del año próximo todos los conductores de embarcaciones de rescate posean la
habilitación especial de rescate expedida por Prefectura Naval Argentina, tema que ya
iniciamos en Mar del Plata y estamos trabajando con las autoridades de la fuerza para
extenderlo a nivel nacional, cuyos elementos de seguridad deberán variar en función a
la tarea específica. Se aconseja realizar cursos de navegación orientados al salvamento.
Moto de agua con sled: La moto de agua con sled, ha sido determinado
cómo el mejor elemento para prestar apoyo en las competencias de aguas abiertas,
siempre que se encuentre equipada con “ sled de rescate” en buenas condiciones, que
la tripulación posea la habilitación correspondiente, (ídem punto anterior) e idoneidad
para el rescate, podemos mencionar entre las características principales de la moto, su
versatilidad, rapidez, y facilidad de maniobra entre otros aspectos positivos , permite
una asistencia efectiva en corto tiempo. El piloto debe utilizar chaleco salvavidas de
rescate, casco, y equipo de comunicación con pulsador, el tripulante equipado con
casco (opcional), aletas y tubo de rescate.
Tubos de rescate: Elemento de flotación utilizado para el salvamento
apto para el uso en las embarcaciones que forman parte del protocolo de seguridad,
sus características particulares lo posicionan como el más apropiado para este tipo de
eventos, todos los modelos son aptos, hasta el denominado -piletero-, que es más largo
y no tiene mosquetón, posee más flotabilidad y puede ser utilizado en asistencias
múltiples, sus materiales constructivos eliminan riesgos de lesiones por golpes,
consideramos también su uso en las tablas de rescate convencionales. En el simposio
tuvimos la oportunidad de testear los tubos nacionales “Aquafloat” con excelente
resultado, junto con el último tubo de rescate americano “e-lifeguard”, que presenta
9
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
Personal Interviniente
Guardavidas Idóneos: Es aquel habilitado, egresado de escuelas de
guardavidas habilitadas, aprobados en las pruebas de suficiencia física y técnica, que se
encuentre entrenado, con capacitaciones permanentes, actualizado en las técnicas de
RCP, idóneo en el manejo de Kayaks, Kayaks con sled, tablas de rescate convencionales,
tablas de SUP Rescue, tubos de rescate, embarcaciones a motor, o al menos idoneidad
como tripulante en el sled, entrenado con el uso de aletas, luneta y esnorkel. Manejo
en comunicaciones por señales manuales (de brazos), y equipos portátiles tipo HT.
Además debe respetar el uso de indumentaria que lo represente, todos uniformados
con gorros o sombreros para sol, riñonera con mascarilla RCP, y silbato para las señales
establecidas en los códigos correspondientes, protector solar, anteojos para sol,
hidratación.
Buzo de rescate: En necesario que al menos uno, se encuentre presente
en la zona de operaciones junto a su asistente, para responder ante la activación de
un “Código X”, debe contar con equipo completo alistado, siempre dependiendo de
las variables que se presenten, zona de sumersión, y condiciones hidrometeorológicas;
Sugerimos que los guardavidas se capaciten en esta actividad.
Personal de Salud: Médicos, Técnicos Superior en emergencias médicas
conductores de ambulancias, enfermeros, deben involucrarse en los protocolos de
seguridad y realizar simulacros en forma permanente, conocer perfectamente su
función dentro del rol que le corresponde. La ambulancia contratada debe ser
medicalizada y de soporte avanzado de vida, deberán tener un punto fijo cercano a la
costa para realizar las atenciones, y traslado en caso de ser necesario, conocimiento de
las salidas de emergencia y recorrido al centro hospitalario más cercano.
Fiscalización: En caso de que la prueba así lo considere, éste debe
conocer perfectamente los protocolos de seguridad establecidos y verificar su
cumplimiento.
Complementarios:
10
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
11
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
características del lugar para un fondeo seguro sin garrear, los cabos que se encuentran
cerca de la superficie deben encontrarse bien adujados, no debe permitirse el uso de
material cortante (flejes) o pesos para equilibrarlas cerca de la superficie, una idea que
hemos puesto en funcionamiento con buen resultado fue el uso de conos flotantes con
aros salvavidas para delimitar el circuito entre boyas, además de brindar orientación en
el recorrido, los nadadores cansados pueden asirse con facilidad.
Zona de largada y arribo: Debe considerarse una zona apta para que
los participantes no sufran lesiones, no se aglomeren, puedan ingresar al agua en forma
ordenada, será extensa, con fondo en lo posible arenoso o lodo, evitar zona de piedras
u objetos sumergidos, declive suave, si eventualmente por la cantidad de participantes
se determina un ingreso “poco seguro” sugerimos dividirla por distancias, sexo o
categorías, se aconseja que la primer boya del circuito se encuentre al menos 200
metros de distancia del punto de partida, para evitar golpes entre los nadadores al
virarla; La zona de salida debe encontrarse debidamente señalizada en agua y tierra, ser
segura, reducir el uso de recursos complementarios (muelles, tarimas etc) para la salida
de los nadadores, contar con guardavidas que asistan a los participantes al finalizar la
prueba.
Cantidad de guardavidas por nadadores: Este es un punto por demás
controversial, ya que es muy complejo determinar el número de guardavidas idóneos,
con respecto a los nadadores intervinientes, debemos mencionar que a nivel
internacional solo encontramos sugerencias al respecto, en la “Recomendaçao Sobrasa,
segurança em eventos aguas abertas”- David Szpilman e outros” (2014), donde asignan un
número “X final de guardavidas” cómo mínimo, teniendo en cuenta distintas variantes.
En la Argentina no existe ninguna recomendación al respecto, todo se basa en
decisiones del organizador de la prueba. Por lo expuesto sugerimos para la asignación
de la cantidad de guardavidas tener en cuenta lo siguiente: Característica del espejo de
agua; Situación hidro-meteorológica; Nivel, cantidad y cualidad de participantes;
Extensión del circuito; Evaluar los protocolos establecidos; La idoneidad de los
guardavidas asignados; Los elementos de salvamento disponibles; Una regla que se
cumple generalmente en las competencias de mayor seguridad es la (15 x 1), es decir
cada 15 nadadores “1 guardavidas”, pero en contrapartida también hemos observado
pruebas en ríos interiores de llanura de larga distancia, que la cantidad de guardavidas
es “ínfima”, punto que ya hemos comentado - la distancia entre el primer y último
nadador puede extenderse a 4 kilómetros -, esta regla si puede aplicarse en un lago,
laguna o espejos de aguas confinados, o bien en competencias cuyo circuito -(vuelta)-
no supere “un kilómetro”, es decir la cobertura de un guardavidas teniendo en cuenta
su ángulo de depresión, se extenderá a no más de 80 metros, entendiéndose cómo la
distancia mínima para un control efectivo y llegar a tiempo ante una asistencia; La
pregunta es: ¿Quien puede aplicar con criterio justo y ecuánime la cantidad de
guardavidas que hacen falta para una prueba segura?; medidas de seguridad extremas,
análisis erróneos de la situación con poco criterio y conocimiento , pueden llevar a
elevar injustificadamente los costos de una competencia, y puede ocurrir que por esta
causa los organizadores decidan “no realizar la prueba”, esto debe evitarse haciendo un
razonamiento lógico con todos los actores involucrados, no podemos darnos el lujo de
perder espacios de natación en aguas abiertas por estrategias mal proyectadas,
12
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
anteponemos una seguridad justa, evaluando en forma correcta todas las variables
tratadas en este simposio.
El objetivo de este documento está orientado a mejorar la seguridad de los nadadores de aguas
abiertas, solicitamos a aquellos organizadores que aún no tienen en cuenta los puntos aquí tratados,
que se comuniquen con nosotros, simplemente trabajamos en conjunto para mejorar la actividad; En
muchas ocasiones son los propios nadadores que se acercan a ofrecer información respecto de las
pruebas, nos hablan de la falta de seguridad, de elementos, de guardavidas etc, son ellos los que
buscan competencias “más seguras”, por lo tanto tarde o temprano, quien no se ajuste a estos
protocolos, no solo se expone a serias consecuencias legales, también verá disminuida la cantidad de
nadadores en sus pruebas, no podemos negar que en esta actividad tanto a nivel internacional como
nacional hubo fallecimientos de nadadores, la mayoría por muerte súbita, otros por pérdida de
consciencia, que por encontrarse en el agua sin una asistencia urgente sufre como consecuencia el
ahogamiento; Pero estamos convencidos que frente a protocolos de seguridad de calidad, minimizamos
los riesgos, si sucediera por un caso fortuito, seguramente , aquellos que tienen el poder de juzgar
nuestras acciones, entenderán que hicimos todo lo posible, ellos analizan pormenorizadamente los
13
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
Tampoco debemos soslayar temas trascendentales como la calidad de las aguas recreativas,
tratado en el simposio por representantes del Ministerio de Salud de la Nación, alertándonos sobre los
riesgos a la exposición, o ingesta accidental de aguas contaminadas, estas variables a corto plazo hará
que en algunas zonas especiales, no se permita nadar, hay evidencia científica al respecto y muchos
trabajos realizados por el Departamento Salud que pueden ser consultados.
Sin lugar a dudas los nadadores son los protagonistas principales en todo este análisis,
justamente en el simposio uno de los disertantes focalizó su exposición en los aspectos físicos y
psíquicos del participante, es decir basado desde otra perspectiva distinta a la nuestra, que somos
agentes externos en la organización y seguridad, el nadador vive su propia competencia, en ocasiones
con dudas, fobias o sensaciones encontradas por falta de información, estado del espejo de agua donde
se realiza la prueba, tipo de boyado, variables del circuito, cantidad de participantes, cómo largar, virar
boyas y hasta de su propio equipo personal (gafas-gorra etc), le debemos brindar apoyo desde el
primer momento en que llega a la zona donde se disputará la prueba, otorgándole un lugar apropiado,
sin sobresaltos, facilidad en la acreditación, con los circuitos claramente detallados en gráficos,
brindarle información precisa y constante, sobre temperatura del agua, corrientes, vientos, variables,
boyado, ingreso y egreso de la prueba, tipo de fondo en la zona que hace pie, fauna y flora que puedan
afectarlos (si las hubiera), calidad de las aguas en función a la contaminación y su uso recreativo, como
debe pedir asistencia, debe ser informado de los protocolos básicos, puntos de extracción, la charla
técnica debe ser clara, concreta y que despeje todo tipo de dudas para que el nadador se sienta más
relajado, está comprobado que cuanto más información se les brinde, mayor tranquilidad, y sabemos
muy bien que nadar relajado nos permite un mejor rendimiento físico, y por ende psicológicamente nos
predispone para lograr el objetivo, muchos nadadores iniciales o intermedios, que no tienen
experiencia en aguas abiertas, están pendiente de la seguridad; Otro factor importante que hemos
detectado mediante las observaciones en distintas zonas, es la práctica frecuente de clínicas de aguas
abiertas, los resultados obtenidos en los distintos escenarios nos permiten asegurar que este tipo de
clínicas “resultan la mejor prevención para las aguas abiertas”, los nadadores de “natatorios” tienen la
oportunidad de pasar a las aguas abiertas de una manera más adecuada, “adaptándose al medio”
mediante la introducción de la teoría y prácticas aplicadas de manera gradual, teniendo en cuenta la
capacidad de cada nadador, el resultado se puede comprobar con la menor cantidad de asistencias en
las pruebas, este tipo de clínicas deben alentarse en todos los natatorios para que puedan tener la
oportunidad de cambiar de escenario sin complicaciones, el apoyo psicológico en ocasiones es
importante pero solo en casos específicos; También es necesario resaltar la importancia de los
controles médicos, los nadadores deben entender que existen pruebas de todo tipo y en ocasiones la
estrategia que nos proponemos, sobre todo el tiempo que nos demandará la competencia, puede verse
14
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
afectada por factores hidro-meteorológicos adversos, en tal sentido la exigencia puede aumentar el
esfuerzo físico, se necesita un monitoreo permanente, y al menos una vez al año realizar un chequeo
médico, que contemple como mínimo un Ecodoppler, ergometría, entre otros, presentar en cada
prueba el correspondiente certificado expedido por el facultativo que solicitó los estudios; Cómo
medida preventiva, también se está trabajando en el uso de las boyas de seguridad inflables personales
tipo (Chi swim), populares en la mayoría de las competencias de aguas abiertas amateurs, uso masivo
en nadadores de Europa y Asia, entre otros; Estas boyas, muchas descartables, no presenta molestia
para el propio nadador ni para terceros, al ser inflables tampoco existe riesgos de golpes, queda
prácticamente cerca de la cintura del atleta, y nos permite tener un mayor control, individualización y
por sobre todo, en caso de una sumersión por muerte súbita, la víctima quedaría en superficie, fácil
ubicación, extracción, evaluación, atención, y traslado, estaríamos reduciendo el riesgo de “código X” a
una mínima expresión; Otra medida para favorecer la observación de los nadadores, es el uso de
gorras de silicona y pecheras o remeras de lycra, o similares, de colores fluorescentes, con o sin
neopreno. De adoptarse esta medida cómo obligatoria por la autoridad competente, contribuiría a una
“natación en aguas abiertas más segura”, abarcando, no solo las competitivas, también se aplicaría a
la natación de entrenamiento en aguas abiertas, cruces, travesías etc.
Hemos tratado la importancia en la salud del nadador y los posibles desenlaces que pueden
ocurrir durante una competencia, desde una simple asistencia, pasando por, pérdida súbita de
conciencia, arritmias cardíacas, muerte súbita, para mencionar algunos, en ese contexto entendemos
que los guardavidas y personal de salud deben responder a las asistencias aplicando al máximo sus
conocimientos, todos están contestes que la capacitación permanente es unos de los pilares
fundamentales para mantener un estándar elevado en la calificación de un guardavidas, en tal sentido
durante el simposio tuvimos nuestro espacio para actualizar, discutir y analizar profundamente los
protocolos a seguir en cada caso, trasladando la teoría a la práctica, sin embargo somos conscientes
que aún falta aunar criterios, existe todavía una gran confusión en el abordaje RCP para casos de
ahogamiento, no vamos a redactar en el presente documento los lineamientos a seguir, pero queremos
destacar que durante el evento tratamos de dejar en claro esta cuestión, por lo que sugerimos para el
próximo simposio, que estos temas tengan un espacio más relevante, de mayor duración, con el
objetivo de redactar un escrito específico sobre el particular, para que todos puedan trabajar bajo una
misma dirección.
Por último dejamos abierta la propuesta para que los disertantes del “Primer simposio sobre
seguridad en competencias de aguas abiertas”, otros que puedan sumarse, organizadores de todo el
país, nadadores, guardavidas, personal de salud, y sobre todo la Prefectura Naval Argentina, se
interesen en realizar un segundo simposio para tratar los temas que quedaron pendientes, prepararse
para la temporada del año 2017/2018, y seguir sumando para crecer, que todas las competencias se
transformen en espacios más seguros para los nadadores, y que esta disciplina de aguas abiertas no
pierda su encanto, son miles de nadadores argentinos que anualmente se presentan a competir,
nosotros somos los responsables que las pruebas se desarrollen con tranquilidad. A los organizadores
los instamos a formar parte de este equipo de trabajo, que presenten inquietudes, proyectos,
capacitaciones, y por último a los guardavidas en general que se comprometan a “capacitarse y
entrenarse en forma permanente”, sin duda la columna vertebral de una competencia segura.
15
PRIMER SIMPOSIO SOBRE SEGURIDAD EN COMPETENCIAS AGUAS ABIERTAS
Franco Bacigalupi
Posadas, Pcia. de Misiones Eduardo Rugo
Mar del Plata, Pcia. de Buenos Aires
Rogelio Bramajo
R o sa r io , P c ia . S a n ta Fe
Diego Pizzini
Tigre, Pcia. de Buenos Aires
Sergio Ossola
Ciudad Autónoma Buenos Aires
16