Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La literatura está compuesta por distintos tipos de géneros literarios, los cuales se utilizan
según las características que debe tener la obra. De entre todos los géneros, hoy vamos a
hablarte del género lírico. Te descubriremos su origen, características, elementos y
subgéneros que engloba. Y recuerda que, si quieres mejorar tus habilidades narrativas,
puedes estudiar el máster en escritura y narración creativa. Su programa formativo te dotará
de los conocimientos necesarios para perfeccionar tus dotes como autor.
El género lírico es uno de los géneros literarios más antiguos. Es aquel en el que el autor
expresa sus sentimientos u emociones en forma de verso o prosa, utilizando un lenguaje
metafórico o poético. Se utiliza la primera persona del singular, ya que en todo momento
el escritor está narrando un hecho desde su punto de vista, así que nunca será un texto
objetivo.
CARACTERÍSTICAS
ORIGEN
El género lírico surge en la antigüedad como forma de expresión de las culturas. Eran los
antiguos griegos los que acompañaban la lírica con el sonido de la lira (un instrumento muy
parecido al arpa) y otros instrumentos musicales. El objetivo de acompañar los textos
musicalmente era que el lector pudiera conectar con las emociones más íntimas del escritor.
Esta forma poética se ha quedado presente en algunos de los textos sagrados y religiosos,
como por ejemplo en episodios bíblicos relacionados con los salmos de David y Moisés.
El poema. Es la base, una obra de longitud variable que debe ser escrita en versos. En ella,
el escritor expresa su realidad utilizando un lenguaje en primera persona del singular.
El verso. Se refiere a cada una de las líneas de las que consta un poema. Su longitud puede
variar y se pueden escribir con o sin rima final.
La estrofa. Se compone del conjunto de versos que se deben leer en conjunto dentro del
poema. Para entenderlo mejor, sería lo equivalente a un párrafo en la prosa.
La rima. Consiste en la similitud fonética que presentan dos o más versos en sus sílabas
finales. Estas pueden ser asonantes, cuando es su letra final la que coincide, y consonantes,
cuando coincide toda la sílaba final.
La métrica. Este elemento estaba más presente antiguamente cuando se empleaba para
estudiar el poema, midiendo la cantidad de sílabas que contenía cada verso mediante unos
criterios fijos.
Dentro del género lírico se encuentran otros subgéneros. Veamos cuáles son:
Con respecto al ritmo y la métrica de una obra poética, dependen en absoluto del autor. Así
como ocurre en todas las formas de arte, existen dos grandes grupos de creadores: aquellos
que le dan mucha importancia a la técnica y aquellos que se dejan llevar por la inspiración e
ignoran cualquier estructura que amenace con quitarles a sus obras la espontaneidad. Entre
estos dos extremos se encuentran quienes se apoyan en los conceptos técnicos para pulir sus
escritos con el propósito de volverlos más impactantes.
Poetas famosos
Entre las principales figuras del género lírico en nuestra lengua, encontramos una larga
lista de mujeres y hombres cuyos aportes fueron inigualables. De España podemos nombrar
a Rosalía de Castro y a Federico García Lorca; de Chile, a Pablo Neruda y Violeta
Parra; en México encontramos a Sor Juana Inés de la Cruz y a Octavio Paz; destaca en
Perú César Vallejo; en Polonia nació la inolvidable Wislawa Szymborska; Argentina nos
dio a Alfonsina Storni.
Es importante resaltar que éstos son tan sólo algunos de los nombres más destacados del
pasado, pero lejos están de ser todos ya que en la actualidad hay decenas de personas que
día a día llevan la poesía en nuevas direcciones. El género lírico es quizás el más difícil de
apreciar, especialmente cuando se trata de obras con un alto grado de abstracción; su
contrapartida es el drama, que nos ofrece situaciones y diálogos que podemos encontrar en
nuestra vida cotidiana.
Esta particularidad del género lírico es su esencia, eso que lo vuelve único y mágico, pero
suele provocar un cierto rechazo en las personas que no se acercan a él por miedo a no
entenderlo y poner en duda su propio intelecto frente a los demás. Los poetas, por otra
parte, aseguran que no es necesario entender cada palabra, cada verso para apreciar una
obra lírica, sino que basta con abrirse y sentirla.
EJEMPLO: