De alumno a maestro

Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de
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gran tribulación, con gozo del Espíritu Santo,

Timoteos El salón de clases

Imitemos a alguien la necesidad de un mentor
Todos necestiamos un pastor, alguien que imite a Cristo. Lo fantástico de una comunidad de fe es
que no solo esta el pastor, entre todos nos pastoreamos. En realidad no nos siguen a nosotros
siguen al Señor.

Nos debe hacer conscientes de nuestra de vida, nuestra manera de comportarnos.

En una reunión de pastores alguien me critico porque imito al Pastor Gilberto, su argumento era que
donde queda la individualidad, los dones que me había dado Dios. Un amigo me defendió y le dijo
que nadie era original que desde Adan hasta la fecha todos nos copiamos. Ya no respondí, pero yo
quería decirle que vale la pena imitar aquellos que siguen al Señor, vale la pena imitar lo bueno, vale
la pena tener un modelo que nos impulse a seguir adelante, vale la pena tener un pastor a quien
admirar, vale la pena dejar ser yo para ser como Cristo. Ademas que alegría que alguien diga que te
apreces a alguien que hace bien las cosas. Todo mundo quiere ser Pablo me dijo un maestro en el
seminario, pero nadie quiere ser Timoteo. En el mundo hacen falta Timoteos.

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de tal manera que habéis sido ejemplo a todos los de Macedonia y de Acaya que han creído.
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Porque partiendo de vosotros ha sido divulgada la palabra del Señor, no sólo en Macedonia y
Acaya, sino que también en todo lugar vuestra fe en Dios se ha extendido, de modo que nosotros no
tenemos necesidad de hablar nada;
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porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos recibisteis, y cómo os convertisteis
de los ídolos a Dios,

Pablo El trabajo
Que alguien nos imite la necesidad de trasnferir vida.
Discipulado son mas que datos. Se trata de un ser humano trasnferiendo vida a otro ser humano.
Ya hemos dicho que haecn falta mas timoteos, pero otra verdad es que esos Timoteos necesitaran
Pablos. No esta mal querer ser como Pablo, lo que es equivocado es no ser primero un disicpulo.
Muchos quieren ser maestros o pastores pero no están dispuestos a pagar el precio. En todas las
iglesias del mundo estoy seguro que hay alguien que dice si yo fuera el pastor lo haría diferente. A
mi en varias iglesias incluidas esta me lo ha dicho. No esta mal y no me molesta, algunas veces
quizá tengan la razón, el asunto es que muchos no están dispuestos a estudiar, desvelarse, amar,
dar gracia, dinero, esfuero, tiempo. Muchos creen que solo es dar ordenes, ven al pastorado o
enseñar como un cacicazgo. Debemos entender que se trata de dar ejemplo. El liderazgo cristiano
jamás debería ser impuesto. (A mi mismo me mandaron pero yo ejerci ese poder)
Si los tesaloniceses imitaron a Pablo y este imito a Cristo el modelo no era el típico yo mando aquí,
yo regaño, yo soy el jefe. Su actitud era diferentes, no era como los fariseos, no era como los típicos
rabinos, no era como los centuriones, gobernadores o reyes. En lugar de decir yo mando aquí,
pensaban yo puedo ser útil aquí. En lugar de meter miedo, el cristiano inspira. En lugar de
obediencia, el cristiano motiva. En lugar de ordenar, el cristiano enseña. No se trata de imponer sino
de convencer, no se trata de miedo sino de confianza, no se trata de señalar errores sino encontrar
juntos soluciones. Se trata de estimluar, impulsar, guiar, ayudar, servir, amar, es decir de transferir
vida.
Pablo está tan contento que dice que no hubo necesidar ya de enseñar nada a los discípulos de sus
discípulos. Sus timoteos de habían convertido en Pablos. Comenten un error los predicadores
cuando se paren enfrente solo para enseñar, lo que deben de hacer es modelar.

La paga
para servir al Dios vivo y verdadero, y esperar de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos,
a Jesús, quien nos libra de la ira venidera.
Cristo
Servir y esperar
No esta mal servir y esperar reconocimiento. Creo que es inevitable, pero si es inveitable si es algo
intrínseco de los seres humanos, entonces porque no apuntar más alto.
Si logramos poner nuestros ojos en Cristo, nuestra vida sería mucho más ligera y por supuesto
menos pesada. El lo dijo venid a mi los que estén cansados.
Cuando buscamos los aplausos estamos apuntando muy abajo. Cuando queremos subirn en una
jerarquía estamos apuntando muy bajo. En la iglesia no hay una pirámide o estructura por lo menos
lo de la forma tradicional. Si hubiera estaría al revés, donde todos los más altos funcionarios son
aquellos que solo vienen a recibir ayuda, mientras todos los demás les servimos. Aquellos que no
hacen nada

Resonado como trompeta. Lo común hubiera dsido callar pero gritaban