Está en la página 1de 12

Carta de los Derechos Generales de las y los Médicos

1. Ejercer la profesión en forma libre y sin presiones de cualquier naturaleza.


2. Laborar en instalaciones apropiadas y seguras que garanticen su práctica
profesional.
3. Tener a su disposición los recursos que requieren su práctica profesional.
4. Abstenerse de garantizar resultados en la atención médica.
5. Recibir trato respetuoso por parte de los pacientes y sus familiares, así
como del personal relacionado con su trabajo profesional.
6. Tener acceso a educación médica continua y ser considerado en igualdad
de oportunidades para su desarrollo profesional.
7. Tener acceso a actividades de investigación y docencia en el campo de su
profesión.
8. Asociarse para promover sus intereses profesionales.
9. Salvaguardar su prestigio profesional.
10. Percibir la remuneración por los servicios prestados.

Derecho de los y las Enfermeras

1. Ejercer la enfermería con libertad, sin presiones de cualquier naturaleza y


en igualdad de condiciones interprofesionales.
2. Desempeñar sus intervenciones en un entorno que garantice la seguridad e
integridad personal y profesional.
3. Contar con los recursos necesarios que les permitan el óptimo desempeño
de sus funciones.
4. Abstenerse de proporcionar información que sobrepase su competencia
profesional y laboral.
5. Recibir trato digno por parte de pacientes y sus familiares, así como del
personal relacionado con su trabajo, independientemente del nivel
jerárquico.
6. Tener acceso a diferentes alternativas de desarrollo profesional en igualdad
de oportunidades que los demás profesionales de la salud.
7. Tener acceso a las actividades de gestión, docencia e investigación de
acuerdo con sus competencias, en igualdad de oportunidades
interprofesionales.
8. Asociarse libremente para impulsar, fortalecer y salvaguardar sus intereses
profesionales.
9. Acceder a posiciones de toma de decisiones de acuerdo con sus
competencias, en igualdad de condiciones que otros profesionistas, sin
discriminación alguna.
10. Percibir remuneración por los servicios profesionales prestados.
Código de Conducta y Ética para Personal de Salud

Mi Código tiene como objetivo concienciar sobre la aplicación diaria del código de


conducta para beneficio de todos, enfatizando los principales valores:
 Respeto
 Responsabilidad
 Colaboración
 Compromiso
 Vocación de Servicio
 Orgullo
Bajo estos valores, Mi Código se convierte en un pacto personal, entre los
usuarios y yo, por eso:

 Respeto mi trabajo, sigo el Código de Conducta.


 Soy responsable en mi trabajo, sigo el Código de Conducta.
 Colabora en mi trabajo, sigo el Código de Conducta.
 Me comprometo con mi trabajo, sigo el Código de Conducta.
 Trabajo de tal manera que estoy siempre orgulloso de mi trabajo, sigo
el Código de Conducta.
 Ayudo y sirvo al prójimo, sigo el Código de Conducta.
 Y al mismo tiempo nos obliga a establecer un pacto comunitario, por eso:
 Unamos nuestro esfuerzo, sigamos nuestro Código de Conducta.
 Con nuestro Código de Conducta hacemos mejor las cosas.
 Nuestro Código de Conducta nos identifica y nos une.

El Personal de Salud con Valores de Profesional
Realizar con profesionalismo las tareas que corresponden al puesto sin descuidar
las que le sean encomendadas explícitamente.
Estar dispuesto a aprender y ampliar los conocimientos que obtenga por si mismo
o a través de la capacitación, para mejorar el desempeño de las actividades que
tiene encomendadas.
Reconocer las propias limitaciones y pedir ayuda cada vez que se tenga una duda
o que el enfermo requiera atención especial.
Atender de manera calida y humana al usuario del servicio.
Brindar con mesura, prudencia y calidez al usuario la información que solicita,
respetando la dignidad; en el caso de que no se conozca dicha información, enviar
al usuario hacia un área mejor informada.

El Personal de Salud con Valores como Ser Social


Una persona enferma no tiene siempre la presencia de ánimo para comportarse
con amabilidad. El personal de salud no esta enfermo y si tiene la obligación de
brindar un trato cordial, respetuoso y confidencial.
Aunque no sea medico ni enfermera, el personal de salud puede contribuir, con el
consejo y el ejemplo, a propagar hábitos saludables entre los usuarios.
No es ético demandar o aceptar cualquier tipo de favores que atenten contra el
pudor, la moral y las buenas costumbres.
Carta de los Derechos Generales de las y los Pacientes

Derechos del Enfermo Terminal

1. Ser tratado como un ser humano vivo.


2. Recibir atención médica optima sin que esto implique aumentar su
sufrimiento inútilmente (en lo posible sin dolor y consciente).
3. Conocer la verdad (diagnóstico, procedimientos).
4. Derecho a un diálogo confiable.
5. Participar en las decisiones relacionadas consigo mismo y no ser juzgado
por ellas.
6. Poder expresar sus sentimientos y abrigar esperanzas.
7. Recibir apoyo para lograr sus últimos anhelos.
8. Ser escuchado y respetado en su silencio.
9. Permanecer en compañía de sus seres queridos.
10. Que se respeten sus creencias religiosas.
11. A no morir solo.
12. A morir en paz con dignidad.

Carta de los Derechos Generales de las y los Pacientes

1. Recibir atención médica adecuada.


2. Recibir trato digno y respetuoso.
3. Recibir información suficiente, clara, oportuna y veraz.
4. Decidir libremente sobre su atención.
5. Otorgar o no su consentimiento válidamente informado.
6. Ser tratado con confidencialidad.
7. Contar con facilidades para obtener una segunda opinión.
8. Recibir atención medica en caso de urgencia.
9. Contar con un expediente clínico.
10. Ser atendido cuando se inconforme por la atención medica recibida.
Comisión Nacional de arbitraje Médico
Sabías que la Comisión Nacional de arbitraje Médico (Conamed) se creó, entre
otros aspectos, para que los usuarios de los servicios de salud puedan presentar
una queja por probables actos u omisiones derivados de la prestación de los
servicios médicos y tanto el paciente como el prestador de servicio de salud
quieran resolverla de manera pacífica, mediante acuerdos conciliatorios y el
arbitraje
¿Qué es la CONAMED?
La Comisión Nacional de Arbitraje Médico es un órgano desconcentrado de la
Secretaría de Salud, creado por decreto presidencial, publicado en el Diario Oficial
de la Federación del 3 de junio de 1996, para contribuir a tutelar el derecho a la
protección de la salud, así como a mejorar, la calidad en la prestación de los
servicios médicos. Es por lo tanto, una institución que tiene por objeto contribuir a
resolver en forma amigable y de buena fe los conflictos suscitados entre los
usuarios de los servicios médicos y los prestadores de los mismos; que promueve
y propicia la buena relación, el trato digno, los valores, el apego a la lex artis
médica y la ética en la relación médico-paciente. La CONAMED, es una instancia
especializada que cuenta con autonomía técnica y tiene atribuciones para recibir
quejas, investigar presuntas irregularidades en la prestación de servicios médicos
y emitir sus opiniones, acuerdos y laudos, los cuales permiten solucionar los
conflictos actuando con imparcialidad, confidencialidad y respeto, mediante
procedimientos alternativos para la resolución de los conflictos tales como:
orientación, gestión inmediata, conciliación y arbitraje (Modelo Mexicano de
Arbitraje Médico).
¿Cómo ayuda la CONAMED para resolver los conflictos que conoce?
Permite a los ciudadanos y a los prestadores de servicios de salud, dirimir y
resolver sus diferencias o quejas, en un entorno especializado, con pleno respeto
a sus derechos, obligaciones y con apego a la lex artis médica, la deontología y la
normativa aplicable. El proceso básico se resume en una atención modular que
asegura un servicio especializado y personalizado, a través de personal
competente, tanto médico como jurídico y aplica procesos estandarizados. Ambas
partes, promovente y demandado, deberán aceptar, voluntariamente y de buena fe
el procedimiento institucional; el cual inicia con la presentación de la queja médica.
¿Qué asuntos atiende la CONAMED?
Actos u omisiones derivadas de la prestación de servicios de salud, así como de
presuntos actos de posible mala práctica con consecuencias sobre la salud del
usuario, lo que significa en estricto sentido, que sólo se avoca al conocimiento de
problemas relacionadas con tales servicios o con la negativa de prestación de los
mismos.

¿Qué asuntos no atiende la CONAMED?


 Actos u omisiones que constituyan delito(s)
 Asuntos que ya se encuentren en trámite ante otras instancias civiles.
 Controversias laborales o competencias de las autoridades del trabajo, en
materia de seguridad social. - Asuntos cuyo objetivo sea obtener pruebas
preconstituidas para el inicio de un procedimiento judicial.
 Cuando la única pretensión sea sancionar al prestador del servicio médico.
¿Por qué la CONAMED es la mejor opción para la solución de conflictos
entre usuarios de los servicios de salud y los profesionales de la salud?
Porque la atención es otorgada por una instancia especializada que cuenta con
profesionales expertos para el desahogo oportuno y expedito del asunto. No se
requieren las fórmulas complejas usuales en los tribunales y todos los trámites son
gratuitos. Todo caso se atiende con imparcialidad según lo alegado y probado por
las partes en el procedimiento, buscando siempre el conocimiento de la verdad, a
fin de lograr justicia en los pronunciamientos que emite. El procedimiento es
confidencial y respetuoso. Se dignifican los trámites, eliminando cualquier cariz
penalístico a situaciones que sólo deben ser atendidas bajo el ángulo del derecho
civil, de seguridad social y del derecho sanitario.
Guillermo Soberón y la creación de la Ley General de Salud
En 1982, bajo el liderazgo del doctor Guillermo Soberón Acevedo, se creó la
Coordinación de los Servicios de Salud de la Presidencia de la República. Esta
coordinación tenía como propósito hacer una evaluación del estado en que se
encontraban los servicios públicos de salud para la población abierta con el fin de
integrarlos a un sistema nacional de salud que diera cobertura a todos los
mexicanos. La implementación de esa propuesta, entre 1982 y 1988, dio origen a
la segunda generación de reformas de salud en México.
La segunda generación de reformas ha sido llamada “el cambio estructural de la
salud” y comprendió una verdadera renovación legislativa y una reforma
administrativa y sustantiva que involucró, sustancialmente, a los servicios que
atienden a la población abierta, es decir la que no es derechohabiente de la
seguridad social.
La renovación legislativa arranca con la inclusión, en la Constitución, del derecho
a la protección de la salud en 1983 y continúa con la promulgación de la Ley
General de Salud.
En diciembre de 1983 el Congreso de la Unión aprobó la Ley General de Salud,
que entró en vigor en julio de 1984. La Ley General de Salud reglamentó el
derecho a la protección de la salud que tiene toda persona, en los términos del
artículo 4o. de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos;
estableció las bases y modalidades para el acceso a los servicios de salud y la
concurrencia de la federación y las entidades federativas en materia de salubridad
general.
En 2003 se reformó la Ley General de Salud, cuyo objeto fue la creación del
Sistema de Protección Social en Salud. En 2019, la Ley General de Salud sufrió
numerosas modificaciones en artículos relacionados principalmente con la
prestación de servicios de salud, la protección social en salud y el control sanitario
de medicamentos.
Sin duda, el liderazgo y visión del doctor Guillermo Soberón Acevedo hicieron
posible la realización de iniciativas tan relevantes como la promulgación de la Ley
general de Salud, así como un permanente impulso a las políticas públicas en
favor del bienestar de los mexicanos.

https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf_mov/Ley_General_de_Salud.pdf
Negligencia Medica
Aunque vivimos en una época de grandes avances médicos, los errores médicos
graves se cobran un enorme número de vidas. Según el último recuento, estudios
independientes sugieren que entre 200.000 y 400.000 personas mueren cada año
en Estados Unidos por errores médicos evitables. Eso sin contar los millones de
mutilados y heridos.
¿Por qué se producen continuamente estos errores? ¿Por qué mueren personas
cada día por errores médicos evitables?
Al examinar algunos de los casos más famosos de negligencia médica -muchos
de los cuales aparecieron en las noticias-, a veces podemos ayudar a los
profesionales de la medicina a mejorar la seguridad y a cambiar sus
procedimientos. Pero nada puede ayudar cuando simplemente se presta una
atención incompetente. Algunos de estos incidentes son sencillamente
espeluznantes y hacen que nos preguntemos "¿cómo pudieron cometer errores
médicos tan terribles?"
1. No obtener el tipo de sangre
El Hospital de la Universidad de Duke es un centro médico prestigioso y
respetado. En 2003 fue objeto de noticias nacionales cuando realizaron un
trasplante de corazón y pulmón a Jesica Santilian, de 17 años, sin comprobar
nunca el tipo de sangre de los donantes de órganos para ver si eran compatibles.
Se trata de un procedimiento médico estándar. Después de que los médicos de
Duke trasplantaran los órganos, Jesica sufrió graves daños cerebrales y su cuerpo
entró en shock y se apagó. Fue entonces cuando los sanitarios se dieron cuenta
de que el donante de los nuevos órganos no tenía el mismo tipo de sangre que
Jesica.
Para empeorar las cosas, el hospital encubrió este error durante 11 días y luego
hizo pública la búsqueda de otro donante. Para entonces era demasiado tarde, ya
que Jesica había sufrido un daño cerebral fatal. El médico asumió la
responsabilidad del error y el hospital puso en marcha un nuevo sistema de doble
control de los trasplantes para evitar que se produjeran errores similares.
2. Cirugía en el lado equivocado de la cabeza
La cirugía en el lugar equivocado es lo que se denomina un "evento de nunca" en
medicina, porque se supone que nunca debe ocurrir. Sin embargo, ocurre con una
frecuencia alarmante incluso hoy en día. Los neurocirujanos del Hospital de Rhode
Island cometieron no uno, sino tres errores médicos catastróficos al realizar
cirugías en lugares equivocados en la cabeza de tres pacientes diferentes en
2007.
Dos de los errores se detectaron con la suficiente antelación como para cerrar los
agujeros iniciales y tratar el lado correcto, pero la otra operación mató a un
paciente de 86 años. Aunque parezca mentira, al cirujano que cometió estos
errores sólo se le suspendió la licencia médica durante dos meses. Así es como
los médicos se vigilan a sí mismos.
3. Extirpación de un testículo equivocado
Un veterano de las Fuerzas Aéreas acudió para recibir tratamiento por un posible
cáncer de un testículo. Cuando Benjamin Houghton entró en quirófano para
extirpar su testículo izquierdo enfermo en el West Los Angeles VA Medical Center,
los cirujanos le extirparon por error el testículo derecho, que estaba sano.
El error médico se remonta a la historia clínica del paciente, donde el cirujano no
marcó el lado correcto antes de emprender la operación. El Sr. Houghton y su
esposa presentaron una demanda por negligencia médica contra el Centro Médico
de Veteranos por 200.000 dólares.
4. Amputación de la pierna equivocada
En uno de los errores quirúrgicos más trágicos, a Willie King, de 52 años, se le
debía amputar una pierna enferma en 1995. En lugar de ello, el cirujano le quitó la
pierna equivocada. Como en muchos casos de cirugía en lugares equivocados,
hubo una serie de errores que llevaron a la amputación de la pierna equivocada.
La pierna incorrecta figuraba en varios lugares clave, como la pizarra de la sala de
operaciones, el sistema informático del Hospital y el horario de la sala de
operaciones. El personal había esterilizado y preparado la pierna incorrecta para
la cirugía antes de que el cirujano, el Dr. Rolando Sánchez, apareciera en el
quirófano.
La defensa del médico fue posteriormente que las dos piernas no estaban sanas y
que habría que amputarlas. Se le impuso una multa de 10.000 dólares y se le
suspendió la licencia médica durante seis meses. Los casos contra el cirujano y el
hospital se resolvieron por 1,15 millones de dólares.
5. Esperma equivocado en la clínica de fertilidad: el bebé nace de una raza
diferente
Una pareja que buscaba ayuda para la fertilidad se sorprendió al enterarse de que
la clínica de fertilidad utilizaba esperma de otro hombre para inseminar sus óvulos.
Durante la fecundación in vitro, New York Medical Services for Reproductive
Medicine utilizó el esperma de otra persona en los óvulos de Thomas y Nancy
Andrews. No tenían ni idea hasta que nació su bebé en 2004. Fue entonces
cuando se dieron cuenta de que la piel del bebé era drásticamente más oscura
que la de los Andrews.
Los resultados del laboratorio y las pruebas de ADN revelaron que Thomas era el
padre biológico del bebé. El bebé era de una raza diferente a la de sus padres.
Los Andrews presentaron una demanda contra el propietario de la clínica y el
embriólogo que procesó el óvulo y el esperma para la inseminación.
6. Órgano incorrecto extraído
En 2006, una paciente acudió al Centro Médico Regional de Milford, en
Massachusetts, para que le extirparan la vesícula biliar. El cirujano Patrick M.
McEnaney extrajo en su lugar el riñón derecho de esta mujer de 84 años.
Esto fue causado por el error de McEnaney en leyendo mal las pruebas de
laboratorio. El cirujano fue puesto en libertad condicional durante 5 años por la
junta médica estatal.
CONSENTIMIENTO INFORMADO
El consentimiento informado es la expresión tangible del respeto a la autonomía
de las personas en el ámbito de la atención médica y de la investigación en salud.
El consentimiento informado no es un documento, es un proceso continuo y
gradual que se da entre el personal de salud y el paciente y que se consolida en
un documento.
Mediante el consentimiento informado el personal de salud le informa al paciente
competente, en calidad y en cantidad suficientes, sobre la naturaleza de la
enfermedad y del procedimiento diagnóstico o terapéutico que se propone utilizar,
los riesgos y beneficios que éste conlleva y las posibles alternativas. El documento
escrito sólo es el resguardo de que el personal médico ha informado y de que el
paciente ha comprendido la información. Por lo tanto, el consentimiento informado
es la manifestación de la actitud responsable y bioética del personal médico o de
investigación en salud, que eleva la calidad de los servicios y que garantiza el
respeto a la dignidad y a la autonomía de las personas.
Debido a que los valores u objetivos de las personas varían, la mejor elección no
siempre es la que prioriza a la salud, sino la que prioriza el máximo bienestar de
acuerdo a los valores u objetivos de cada persona. Por lo tanto, no es ya el
médico el único que decide la mejor alternativa.
El consentimiento informado consta de dos partes:
a. Derecho a la información: la información brindada al paciente debe ser clara,
veraz, suficiente, oportuna y objetiva acerca de todo lo relativo al proceso de
atención, principalmente el diagnóstico, tratamiento y pronóstico del padecimiento.
De la misma manera es importante dar a conocer los riesgos, los beneficios físicos
o emocionales, la duración y las alternativas, si las hubiera.
El proceso incluye comprobar si el paciente ha entendido la información, propiciar
que realice preguntas, dar respuesta a éstas y asesorar en caso de que sea
solicitado.
Los datos deben darse a personas competentes en términos legales, edad y
capacidad mental. En el caso de personas incompetentes por limitaciones en la
conciencia, raciocinio o inteligencia; es necesario conseguir la autorización de un
representante legal. Sin embargo, siempre que sea posible, es deseable tener el
asentimiento del paciente.
b. Libertad de elección: después de haber sido informado adecuadamente, el
paciente tiene la posibilidad de otorgar o no el consentimiento, para que se lleven
a cabo los procedimientos. Es importante privilegiar la autonomía y establecer las
condiciones necesarias para que se ejerza el derecho a decidir.
Cuando se trata de un procedimiento de riesgo mayor al mínimo, el
consentimiento debe ser expresado y comprobado por escrito, mediante un
formulario firmado y será parte del expediente clínico. Las situaciones en que se
requiere el consentimiento informado escrito, de acuerdo a la Norma Oficial
Mexicana del Expediente Clínico son las siguientes:
Hospitalización en pacientes psiquiátricos, por mandato judicial, urgencia, peligro
de quienes viven con él y riesgo de suicidio, entre otros.
 Intervención quirúrgica.
 Procedimientos para el control de la fertilidad.
 Participación en protocolos de investigación.
 Procedimientos diagnósticos o terapéuticos que impliquen riesgos físicos,
emocionales o morales.
 Procedimientos invasivos.
 Procedimientos que produzcan dolor físico o emocional.
 Procedimientos socialmente invasivos y que provoquen exclusión o
estigmatización.
En los casos de urgencias en los que no existe la oportunidad de hablar con los
familiares, y tampoco es posible obtener la autorización del paciente, el médico
puede actuar por medio del privilegio terapéutico hasta estabilizarlo y entonces
poder informarle al paciente o a sus familiares. Esto debe quedar bien
fundamentado en el expediente clínico. No debe llevarse a cabo un procedimiento
en contra de la voluntad de un paciente competente, aún cuando la familia lo
autorice.
Existen pronunciamientos claros acerca de la obligatoriedad del consentimiento
informado en: Ley General de Salud, Reglamento de la Ley General de Salud,
Leyes Estatales de Salud, Reglamento de Servicios Médicos del IMSS, Normas
Oficiales Mexicanas, Comisión Nacional de Certificación de Establecimientos de
Salud y Cartas de los Derechos de los Pacientes (CONAMED).

También podría gustarte