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VIOLENCIA SOCIAL

El análisis de la Violencia Social desde el punto de vista político y jurídico nos lleva a
explicar y sustentar el tema tomando para el efecto teorías y ejemplos de las instituciones
internacionales, por ser un tema general y crítico. Como se puede observar la descripción
formulada por la Revista de la Facultad de Psicología de la UNAM, y específicamente de
los autores: Chávez, M.F. y Hernández, J.A., quienes manifiestan que: “La violencia se
define jurídicamente desde dos ángulos distintos; en la teoría de las obligaciones, consiste
en la coacción física o moral que una persona ejerce sobre otra, con el objeto de que
ésta le otorgue su consentimiento para la celebración de un acto jurídico que, por su
libre voluntad, no hubiera otorgado. Por otro lado, la violencia se entiende como la
conducta de una persona (agresor), que atenta o ataca a otra u otras, en su
integridad física, psíquica o ambas”. (La violencia familiar en la legislación mexicana,
México 2000).

En los años recientes, la violencia ha llegado a ser reconocida como un objeto de


preocupación, tanto dentro de la esfera nacional como la internacional. En nuestros días,
los crímenes violentos afectan varios aspectos de la vida moderna, por ejemplo: la
calidad de vida y los niveles de salud de los individuos, así como la situación
económica, política y social de los países. De acuerdo con los diferentes organismos
internacionales, vivimos en una de las regiones más violentas del mundo en una época
particularmente peligrosa. (Organización de las Naciones Unidas, 1998)

En general la violencia social tiene su explicación en la alteración de las diversas y


complejas manifestaciones económicas, sociales y políticas. En consecuencia, Rueda
Romero P. al explicar los fundamentos de la violencia social nos manifiesta:
“Sociológicamente vivimos tiempos de crisis envueltos en violencia, las causas son
variadas, entre las que podemos indicar las crisis económicas, de valores, la falta de ética
en la convivencia social y política, crisis de las instituciones y la formación de una red de
violencia alrededor de los mandos en las sociedades y Estados políticos. La violencia es
un juicio de desvalor sobre conductas humanas, incluidas las modalidades de
omisión, que transgrede los derechos humanos para controlar y dominar a los
destinatarios de la violencia, poniendo en peligro o causando daños a la salud, concebida
como el resultado de la interacción de factores biopsicosociales”.

Afirma Rueda Romero, que la violencia está estrechamente vinculada al poder, la manera
en que se ejerce el poder en la sociedad. Luego cita al filósofo francés Foucault, quien
expresa: que existen redes sociales en las cuales el poder circula y el ejercicio del poder
se fue modificando a lo largo de la historia. Antiguamente se ejercía el poder sobre la
totalidad de la sociedad, pero al complejizarse la red de relaciones, hay elementos que
escapan su control; se hace necesario, entonces, un nuevo mecanismo que controle las
cosas y las personas en cada detalle, de esta forma el poder se ejerce sobre el individuo y
no sobre el cuerpo social en su totalidad.

Como se puede comprender la violencia social en su mayor efecto se produce por acción
y ejercicio del poder, así nos describe las acciones producidas a lo largo del tiempo en las
experiencias y los índices de violencia de los estados y sociedades del mundo. Al respecto
Shrader, E.: Propone un esquema de clasificación de la violencia basado en los factores
motivacionales subyacentes a la misma, Las tres dimensiones sugeridas no son
necesariamente excluyentes entre sí, sino que representan un continuo a través del cual
los actos violentos son perpetrados por razones múltiples, usualmente complejas:

Violencia Política. Es la comisión de actos violentos motivados por la obtención o


mantenimiento de poder político.

Violencia Económica. Es la comisión de actos violentos motivados por la obtención o


mantenimiento de poder económico.

Violencia Social. Es la comisión de actos violentos motivados por la obtención o


mantenimiento de poder social. La primera se manifiesta por fenómenos como la guerrilla
y los asesinatos políticos; la segunda por crímenes callejeros, robos de autos y tráfico de
drogas, y la tercera por violencia doméstica, ataques sexuales y racismo.

Como efecto de los actos de violencia ejercidas en el mundo, la Organización de las


Naciones Unidas exhorta a sus miembros a implementar medidas apropiadas,
especialmente en los niveles regional y subregional, tomando en cuenta las
características, necesidades, nivel de desarrollo y tradiciones culturales propias de cada
Estado, particularmente en lo concerniente a las interrelaciones de la criminalidad con
aspectos como la estructura poblacional, el crecimiento, la urbanización, la
industrialización, las oportunidades de empleo, la equidad en el reparto de la riqueza y la
migración. En tanto que la tecnología y los nuevos esquemas de participación global han
visto emerger nuevos esquemas transnacionales de violencia y crimen, estas medidas
deberán ser apoyadas por los demás miembros, a través de su conocimiento y pericia en
el campo, así como por medio de tratados bi y multilaterales de combate al crimen,
respetando siempre la soberanía de los países y vigilando constantemente la observancia
de los derechos humanos de los individuos.

De acuerdo a la descripción y análisis del Dr. Rueda Romero P. La violencia se manifiesta


y toma distintas formas en las sociedades, todas ellas alteran la convivencia social y las
relaciones dentro de los Estados y muchas veces, estas alteraciones se suceden entre los
Estados. Las principales manifestaciones de violencia son:

A. El Pandillaje. Agrupación de adolescentes y jóvenes que se enfrentan con sus pares.


La pandilla es parte del fenómeno denominado violencia juvenil, se incluyen las
“barras bravas”, “manchas escolares”, delincuencia, drogadicción y prostitución
juvenil, entre otros. Hoy son parte de la vida cotidiana y han marcado las últimas
décadas creando inseguridad, malestar y conflicto en la población.
B. Los Medios de Comunicación Social. El trato que los medios de comunicación dan
a este tema no ha contribuido a solucionar o disminuir la violencia como el pandillaje.
Al contrario, los titulares sensacionalistas, imágenes y fotografías que magnifican
estos hechos y los hacen protagonistas, contribuyen a que estos jóvenes perciban que
por esta vía “nos hacemos famosos”, “figuramos”, o nos “jamoneamos ante los
demás”, opiniones que expresan cuando se les pregunta sobre los efectos que tienen
ellos los medios de comunicación.
C. Terrorismo Internacional. En las últimas décadas, la sociedad ha sido víctima de
uno de los peores flagelos: el terrorismo. Es un hecho expresivo de violencia y se ver
durante toda la historia con sus variadas formas de expresión y crueldad. El
terrorismo, constituye así tanto en el ámbito interno de cada Estado, como0 en el
mundial, es una vía abierta a todo acto violento, degradante e intimidatorio. Los fines
buscados por esta forma de “guerra” no convencional, pueden tener fines políticos,
religiosos, culturales y la toma del poder por un medio ilícito.
D. Narcoterrorismo. Se llama así, a la utilización del tráfico de drogas para promover
los objetivos de ciertos gobiernos y organizaciones terroristas. El narco-terrorismo
atenta contra los derechos humanos esenciales como el derecho a la vida y la
integridad física; a la tranquilidad y a la honra; a la participación política y a la libertad
de expresión y comunicación, para mencionar solamente los más vulnerados.
E. Terrorismo de Estado. Es el uso sistemático por parte del gobierno de un Estado de
amenazas y represalias, considerando a menudo ilegal dentro incluso de su propia
legislación, con el fin de imponer obediencia y una colaboración activa a la población.
Por su naturaleza es difícil de identificar y los conceptos varían en función del carácter
de las épocas históricas, zonas geográficas y características culturales. Los regímenes
despóticos del pasado utilizaban con frecuencia prácticas de este tipo, que las
democracias modernas condenarían sin necesidad de realizar una crítica
contemporánea rigurosa.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ha condenado en numerosas


oportunidades el terrorismo y señalado que no hay causa o pretexto que pueda invocarse
para justificar, ataques contra civiles y otros actos proscritos por el derecho internacional.
El terrorismo no debe quedar impune. Los Estados tienen el derecho y aún el deber de
defenderse contra este crimen internacional en el marco de las normas internacionales
que requieren la adecuación de sus normas internas a los compromisos internacionales.

BIBLIOGRAFIA:

1. Rueda Romero, Paulino (2011) sociología del Derecho, Fondo Editorial USMP,
Lima.
2. Organización de las Naciones Unidas, Normas sobre el crimen, prevención y
criminalidad de la justicia, 1998.
3. Chávez, M.F. y Hernández, J. A. La Violencia Familiar en la legislación
mexicana, México 2000.
4. Shrader, E.(2000) “Methodogies to Measure the gender Dimensions of Crime and
Violence”

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