Está en la página 1de 3

Profesor Sergio

Regina Villarreal Moran


Historia
10/5/2023
Decena Trágica
El 9 de febrero de 1913 nuestro país se encontraba envuelto en una disputa entre hermanos,
producto de una lucha armada llamada Revolución Mexicana; Ese día, estalló el llamado
“Cuartelazo” de La Ciudadela, en el que el Colegio Militar repite sus gloriosas hazañas de 1840,
1847 y 1858.
La Decena Trágica fue un periodo de diez días, en el que un grupo de inconformes, se levantaron
en armas contra el gobierno del Presidente Francisco I. Madero.

En 1910, después de haber sido el iniciador del movimiento armado y de representar a todos
aquéllos que querían derrocar a Porfirio Díaz, Francisco I. Madero reunió su fuerza revolucionaria.
Para 1913, Madero perdió buena parte del enorme apoyo que alguna vez tuvo del general Díaz.,
cuando éste subió a la Presidencia, había muchas expectativas de revolucionarios, de campesinos
y de obreros, en torno a las medidas que tomaría su gobierno, que no cumplió. La posición
moderada y conciliadora, con los porfiristas, que Madero adoptó, desanimo a quienes esperaban
que la Revolución trajera consigo transformaciones radicales. Muchos revolucionarios se sintieron
defraudados y traicionados por Madero, pidiendo así su oposición.
Durante los quince meses que duró su gobierno, Madero enfrentó múltiples problemas:
rebeliones armadas, huelgas, conspiraciones e intrigas contrarrevolucionarias.

El 9 de febrero de 1913, la Escuela Militar de Aspirantes de Tlalpan y la tropa del Cuartel de


Tacubaya, se levantaron en armas contra el gobierno, la Ciudad de México por primera vez
durante la contienda, conoció la muerte de civiles en sus calles, Pretendían capturar al ministro de
Guerra, Ángel García Peña, y lograr la liberación de dos de los generales Bernardo Reyes, quien
estaba preso en la cárcel de Santiago Tlatelolco, y Félix Díaz, encarcelado en la penitenciaría de
Lecumberri. El grupo, de antecedentes porfiristas, había comenzado a planear su golpe de Estado
desde 1912, y contaba además con el apoyo del gobierno de los Estados Unidos.

La primera movilización hacia el Palacio Nacional tuvo cierto éxito, y la avanzada de cadetes logró
la toma del lugar, haciendo prisioneros al ministro de Guerra, a Gustavo A. Madero, hermano del
presidente, y al intendente Adolfo Bassó. En la segunda parte del plan Reyes y Díaz habían sido
liberados, y encabezando otra avanzada se dirigieron al Palacio nacional para volver a tomarlo. Al
llegar al Zócalo capitalino fueron frenados por el general Villar. Al negarse a unirse a los
conspiradores, fue atacado por Reyes. El defensor de Madero y su causa resultaba herido.

cuando Francisco I. Madero supo de los hechos, dejó el Castillo de Chapultepec se dirigió al Palacio
Nacional en una acción conocida por la historia como Marcha de la Lealtad, nombrando
comandante militar de la plaza a Victoriano Huerta, en sustitución del herido general Villar, sin
saber que Huerta se aliaría con Félix Díaz y, simulando defender la causa, terminaría
traicionándolo y haciéndose con el poder.

Hacia el día 16 de febrero, con el pensamiento puesto en las necesidades de la población general
se dieron 24 horas de tregua: de 2 am de ese día a la misma hora del día 17. Para ese momento, la
casa particular de Madero ya había sido incendiada. la tregua no fue respetada se retomó el fuego
a discreción a las 2 pm de ese día, todo bajo la complacencia de Huerta quien fue descubierto por
el secretario particular de Madero, en pláticas con el enemigo, pero el presidente no valoró la
situación en toda su gravedad y el golpe avanzó.
El 18 de febrero, el golpe de Estado triunfó definitivamente. Ese día fueron aprehendidos en
Palacio Nacional Francisco I. Madero y José María Pino Suárez. Finalmente, para dar aspecto de
legalidad al entuerto, se negoció un pacto entre los golpistas con la intervención del embajador
Wilson, en la embajada estadounidense. A este encuentro se le llama Pacto de la Embajada,
aunque es mejor conocido como Pacto de la Ciudadela. En él se desconoció a Madero y Pino
Suárez, y se estableció un gobierno provisional bajo el mando de Victoriano Huerta, con un
gabinete mezcla de seguidores de Bernardo Reyes y Félix Díaz. Sería la embajada japonesa la que
asilaría esa trágica noche a la familia del presidente, salvo su hermano Gustavo, quien fue
entregado a la tropa golpista, humillado y torturado hasta la muerte.

Familiares y amigos de Madero y Pino Suárez intentaron su libertad por todos los medios, pero los
golpistas no iban a ceder. Serían asesinados el 22 de febrero de 1913. Con este magnicidio, la
llamada Decena Trágica finalizo.

Consecuencias

Como consecuencias tendríamos el derrocamiento y asesinato de Madero y Pino Suárez, y de


varios funcionarios, militares leales y allegados del presidente.

La asunción de Victoriano Huerta como presidente de facto de México.

El reconocimiento del nuevo gobierno por el caudillo revolucionario Pascual Orozco, que pese a
haberse opuesto anteriormente al Porfirito, unió sus fuerzas al nuevo régimen. Provocando la
ruptura con su antiguo aliado, Pancho Villa, que combatió a la dictadura militar.

El inicio de un movimiento opositor liderado por Venustiano Carranza, quien consideró ilegal al
nuevo gobierno. El accionar de Carranza, que se sustentó en el Plan de Guadalupe, logró desplazar
del poder a Huerta en agosto de 1914.

Fuentes

https://www.cndh.org.mx/index.php/noticia/inicio-de-la-decena-tragica

https://www.sedena.gob.mx/pdf/momentos/fasciculo_5.pdf

https://enciclopediadehistoria.com/la-decena-tragica/

También podría gustarte