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El principio de taxatividad

Es aquel que hace referencia a la exigencia de certeza o determinación de la ley. Este forma
parte de lo que se conoce como el principio de legalidad penal. El principio de taxatividad
pretende, que en la ley penal se describan con la mayor exactitud posible las conductas que
están prohibidas, por constituir delito, y las sanciones aplicables a dichas conductas en caso
de que un sujeto realice la misma aunque hay que tener en cuenta que en la práctica, en
nuestro Código Penal, existen delitos que están más correctamente descritos que otros y
esto depende de la precisión de la descripción, siendo en muchas ocasiones un ejemplo de
ausencia de taxatividad.

 El autor Muñoz Conde nos indica con relación al principio de Taxatividad que “La
exigencia de clara determinación de las conductas punibles se expresa en el
denominado principio de Taxatividad o mandato de certeza, cuyo cumplimiento
plantea uno de los problemas más arduos del manejo correcto de la técnica
legislativa”
 Al respecto el Doctor Pérez de Agreda, expone que “Las normas de derecho
necesitan ser escritas (reserva de ley absoluta). En consecuencia, es imprescindible
al derecho en si que el sea ley. Es una ley scripta. Otra condición elemental, es el
principio de Taxatividad: la ley penal requiere un lenguaje claro, preciso. Cuando
una norma es oscura, indeterminada, da espacio al Juzgador a determinarla según su
criterio personal de interpretación de lo prohibido, entonces ocurre en la práctica
una deslegalización por definición”

Por tanto, el principio de taxatividad exige precisión a la hora de formular los supuestos de
hecho de las normas penales. Y esta precisión viene dada por dos vías diferenciadas:

- Se pretende reducir la imprecisión de los conceptos que se utilizan para fijar


comportamientos que se van a considerar como prohibidos, por considerarse que los
mismos dan lugar a una conducta delictiva.
- Se pretende lograr la preponderancia de los conceptos descriptivos frente a los
conceptos valorativos para la determinación de un delito concreto.
Esto es así, ya que cuanto más cumplimiento se otorgue al principio de taxatividad, menor
será la arbitrariedad órganos de aplicación del derecho penal pueden llevar a cabo y mayor
autonomía tendrán los ciudadanos, que son totalmente conocedores de lo que pueden y no
pueden hacer. El principio de taxatividad está dirigido al legislador (al que le exige que cree
normas claras y precisas), a la policía (para que lo tenga en cuenta cuando realice un
arresto) y a los órganos de aplicación de las normas penales (para que juzguen de acuerdo a
lo recogido expresamente en la ley,

Un claro ejemplo:

En el que se produce el incumplimiento del principio de taxatividad es el que viene dado


por los denominados tipos penales abiertos.

- Se definen los tipos penales abiertos, como aquellos tipos minoritarios, que
realmente no describen de forma precisa la acción considerada como prohibida, ya
que los mismos a pesar de contener elementos del deber jurídico no recogen
claramente cual consideran que es la materia prohibida. Por tanto, lo que hacen los
tipos penales abiertos, es dejar libertad al juez, ya que este tendrá que interpretar la
ley, y completar la descripción típica.

En ese entendido, el principio de taxatividad o certeza en la formulación de las normas


penales, exige que la ley penal, en particular el tipo penal, no sólo sea establecida por el
órgano legislativo mediante una ley. Va más allá. ejemplo, Artículo único: el que cause un
daño a otro, será castigado con la pena que corresponda. Esto no bastaría. ¿Respetaría el
principio de legalidad?... en un sentido amplio sí, porque lo diría la ley; la ley expresaría: el
que cause un daño a otro será castigado. Por lo tanto, ya tendríamos la ley que ampararía
este planteamiento. Pero en el principio de certeza o taxatividad en la formulación del tipo
penal, lo que configura la tipicidad. No basta decir: el que cause un daño a otro. Si no que
se debe exigir que el legislador, describa la clase de conducta que constituye delito, por
ejemplo: Matar, robar, falsificar. O sea que el legislador tiene que decir y describir
detalladamente que clase de conducta, qué especie de conducta, que tipo de conducta se
considera como delito y cuál es su sanción penal. De lo expresado se colige, que el
principio de taxatividad repudia toda construcción de normas penales ambiguas, genéricas o
indeterminadas, que puedan ser susceptibles de una valoración subjetiva y por ello
ineludiblemente desemboquen en una analogía.

Zaffaroni plantea lo siguiente:

a) declarar la inconstitucionalidad de la ley


b) aplicar el principio de máxima taxatividad interpretativa y entender el texto en la
forma más restrictiva de poder punitivo posible. La elección de uno u otro
camino no es arbitraria.

Código Penal

Art. 254. (HOMICIDIO POR EMOCIÓN VIOLENTA). Quien matare a otra u otro en
estado emoción violenta excusable, será sancionada(o) con reclusión de dos (2) a ocho años
(8) años. (Por explicar…)

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