Escribir… y a veces te preguntas porque escribir que hace que sea especial el escribir o

dejar por escrito lo que sientes, lo que quieres decir, si gritarlo o simplemente apoyarlo
en letras que en algún momento posiblemente se vayan a extinguir, creo que las
palabras y cada letra con el tiempo se extinguen, muchas veces me pregunto es verdad
que duele mas lo que te dicen que lo que te hacen, acaso el dolor no queda siendo dolor
por el hecho que algo en ti te dolió, he escuchado mucho que los golpes sanan y las
palabras perduran pero que dirán las mujeres que han sido violentadas físicamente,
acaso cuando se ven al espejo no les duele las marcas que dejó cada golpe, no les
lastima ver aquella cicatriz y las palabras que le dijeron tan solo se fueron, pudieron ser
producto de un mal enojo, resentimiento y solo resaltadas desde el dolor y si a la final
no son lo que quisiste decir, en fin cosas que marcan y marcan.
Recuerdo cuando tuve la intención de querer escribir estaba llena de dolor mis papis se
habían quemado pues la casa se incendió y nos quedamos con mis tías, son de las partes
de la vida que no me gusta mucho recordar… ya no había mamá que te preparara el
desayuno, ni te peinara ni papá que te vaya a dejar a la puerta del jardín, ahora mi
familia eran mis dos tías mis primas y mis hermanas, obviamente mí una tía su atención
era para con mi prima y mi hermana la mayor y la segunda mi otra tía le daba atención a
mi prima sentía un vacío en el corazón de esos en los que quieres entender si volverás a
ver a tus papás, era feo visitarlos abajo muuuy abajo en el patio del Eugenio Espejo y
solo alzar la mirada y divisarlos a lo lejos, años más tarde cuando ya pude escribir lo
comencé hacer poco a poco fueron ideas, fueron sentimientos, a veces hasta cosas sin
sentido pero tenía esa necesidad de escribir de poder ponerle esa chispa a lo que podía
pasar.
Fue en un día de la madre que escribí mi primer poema ese día fue triste jajaja
ciertamente porque en la escuela celebrábamos día de la madre días antes y en esa
noche mi mami viajaba a Portovelo a visitar a mis abues, antes los hacía dos veces al
año y en ese día de la madre ella lo iba hacer pero en el fondo yo quería que ella leyera
lo que escribí y que me llevara a Portovelo hasta antes de entrar al jardín lo hacía jaja y
fue después del almuerzo cuando la leyó, vi caer lágrimas de sus ojos y me abrazó fue
esa sensación de amor y alegría de un cierto orgullo y sorpresa pero era así es mi
Silvanita un ser que tiene tanto en su corazón y que siente orgullo por sus hijas, sentí
que lo hice bien y que fueron palabras sinceras, de esas que en serio en serio son
importantes para alguien y fueron importantes para mamá.
Con el tiempo lo seguí haciendo en casa nunca hemos sido unidos, más bien creo que
somos un tanto ariscos mi mami la defino como amor mi papi el es muy distante y mis
hermanas bueno ellas son ellas, a veces creo que somos muy iguales pero tan diferentes
mi niñez y adolescencia estuvo acompañada con la Eri siempre la vi como ese ejemplo
que debes seguir aparte que es guapasa yo creo que tiendo a ser una mezcla de ambos
una pizca de amor y otra de amargura y eso que con el tiempo aun no he podido
equilibrar a ciencia cierta bien ambas cosas. Bueno como siempre me desvío esta fue la
ocasión jajajaja.
Antes de comenzar a escribir y de idealizarlo de pequeña como lo haría me encantó la
lectura, “Sangre de campeón, Sara tomate, María, metamorfosis, el perfume (que saica)
jajaja, Alicia en el país de las maravillas (amo al sombrero y al conejo) (cuando tenga
un conejo de mascota su nombre será Copito, si es hembra Ramona), han notado la
tristeza dentro de la alegría del sombrero esa locura tan peculiar tan llena de incógnitas
tan lleno de un no sé qué, pero a pesar de ello no pierde su muchosidad en fin me
encanta leer en el colegio específicamente la Provi cuando nos sacaban por no pagar la
pensión me la pasaba leyendo ahí fue cuando sentí que amo mucho a García Márquez
tanto como Benedetti me amara a mi pero un poco menos como sería Cortázar, sé que
Borgues me dedicaría unos cuantos poemas tal vez “El amenazado”.
Simplemente yo al terminar estas cuantas letras me quede palpitando y a un unísono
sentada frente a la vista que me trae paz a ese rinconcito allí abajo donde se esconde una
iglesia, divisas las vías, los árboles, puedes observar a lo lejos la monotonía de los
automóviles, si justo ahí alado de un árbol que se vuelve frondoso con una mezcla de
lluvia y calor, donde cada vez llega un picaflor llevando y trayendo un poco de si,
aquella estrecha vereda que atrás encuentras amores que posiblemente hoy tengan un
felices para siempre o tal vez acaecieron con las puestas de sol y quedaron en neblina tal
cual, el paisaje de mi lugarcito cuando lo visitas por la noche, justo ahí donde brindas
por un futuro venidero o donde solo llegaste a llorar sabiendo que no veras más a esa
persona especial 22:45 justo ahí en medio de todo y nada yo solo declame con el
corazón La sed insaciable de José Ángel Buesa.
Las letras me han acompañado y la utopia de los libros me han cobijado, el soñar ser la
mejor escritora son parte de cada letra en donde he dejado un poco de mí y me he
abierto a soñar, odiar, amar y soltar. Escribir está en mí llevo cada partícula de lo que
me ha dejado los paisajes, la vida, los amigos, los sueños y porque no, el amor.
La poesía te lleva a un mundo donde los versos te conducen a sentir cada palabra como
tuya, siento que las palabras me han sabido acariciar cada parte del ser, le he escrito a
muy pocas personas siento que si haces poesía debe ser selecto porque es del alma al
alma. Mi segundo poema lo escribí y lo leí despacio, con un nerviosismo un tanto
severo a mi gran amor ¡Juan Bottasso! cuando se lo dediqué primero ni él lo imaginó y
una vez más vi como a alguien le brotó lágrimas de esos pequeños ojos, resalté su
inteligencia, su largo andar, lo necio y con un humor muy peculiar, un amor por lo que
hace y una dedicación con todo lo que dices, ese calor de protección era un regazo
seguro, terminé con un Te Amo papá... no faltó un abrazo al modo italiano estrujando
mis brazos y un te amo mi negra, no entendía su silencio después de unos minutos,
cuando me atrevía a querer preguntar si pasó algo el con esa voz enfática no quiero que
te metas en política, sigue escribiendo y seguramente en algún momento le ganarás la
batuta a este viejo con mundo shuar… pero quien soy yo para compararme a tan
hermosa colección como es Mundo Shuar, el haber recogido minuciosamente y
aprendido tanto de esos pueblos no puedo ni pararme de puntillas con mis escritos que
conforme los he ido escribiendo el fuego los ha ido consumiendo como digo a veces
escribo por escribir.
Soy como una oruga en su capullo a veces queriendo ser mariposa, pero otras solo
oruga… escribir me ha hecho conocerme, puedo llegar a ser tan sublime, pero a la vez
tan fuerte, sentí que el capullo se cerraba un 25 de diciembre a las 15:25 faltado 5 min
para las 15:30 antes de lo que llevaran a que sea ceniza le dedique mi poema ¡adiós al
amor! Abarcó dolor, soledad, angustia, amor y suplica de verte abrir los ojos más las
lagrima cayeron al cristal y un nos lo tenemos que llevar hizo eco en ese adiós.
Pasaron días y hasta meses que no podía volver a escribir no encontraba esa vía que me
conectara a las letras, lo iba perdiendo todo, se volvía como aquel juego del Pac – Man
que quieres salir, pero no sabes por donde… lo perdí todo hasta la propia tranquilidad,
no sabes por dónde empezar, recuerdo que en algún momento que quise escribir mi
mente solo sentía que tenía que correr pero ahí está la clave de esto correr con las letras
en algún momento ya la había dicho debes sentirlas y si algo pasaba por mi mente era
porque estaba sintiendo, recuerdo que cuando tomé otro lápiz para hacerlo mis manos
temblaban sin razón se me vino a la mente aquel ser que me estaba acompañando en mis
flagelos de tristeza.
Recordé una alegría que me producía hablar con él ya hacía muchos años que no me
quedaba hablando con alguien, fuimos creando vínculos cercanos tanto que bastaba una
palabra para que él sepa como estaba, era raro cuando algo me sucedía él de alguna
manera lo soñaba, es así que, se fue convirtiendo en esa parte a la que llamas
inspiración, tal vez era muy poco de lo que yo sabía de él pero de alguna forma me
inspiraba su forma de ser, su alegría, su espontaneidad, así que, mi primer escrito para él
fue “ Tú, naufrago de sueños” lo llamé así porque sentía que él iba con la corriente y yo
solo tenía sueños con él, hablar, reír, llorar no me costó tanto escribirlo asimilarlo fue
diferente, como escribes de alguien que no lo ves a diario, pero lo sentía como que si
fuera, dentro de las cosas difíciles por hacer fue quemar aquel escrito, te das cuenta que
las letras albergan sentimientos de aquellos que te cuesta reconocer que ahí han estado y
lo asemejo a la oruga cuando su tiempo de incubación va recorriendo las manecillas del
reloj para volar, imaginé que él tendría las mismas ganas de verme a su regreso pero la
realidad fue otra creo que fui la última en su lista fue ahí cuando el fuego consumió
cada letra y yo fui poniendo los pies sobre la tierra.
El tiempo pasa y me desespera saber que hasta el momento no hay un libro nuevo que
pueda decir aprendí de aquello, me he vuelto más ignorante ya ni los escritos tienen un
tinte de amor o dolor, creo que la gente ya no sentirá esto a lo que llamo “escribiendo”
pero la gente algún momento se detendrá a leerlo seguramente no y probablemente si,
quizá con el tiempo ya no haya inspiración a terceros y el manantial donde emana cada
verso sea yo esa inspiración que veo cada mañana en el espejo, reconozco que las letras
me han acompañado por ya 26 años y que me asusta cuando no lo puedo hacer…. En fin
retomando a los libros me deje cegar por todo menos por lo que me alimenta, ahora
quien leía se dedica hacer tik – tok y me preguntó las conversaciones futuras del mundo
se darán por como haces tal paso o como el mundo se ha vuelto más globalizado,
consumista y poco carente de vida, si esa reflexión algún momento me la hice cuando
iba de camino a casa y dije es en serio que esto es lo que soñabas… me reía
sarcásticamente y me dije este café ha sido el más amargo.
Recobré la confianza con algo que siempre lo ignoré un libro de autoayuda y quien
criticó más a Cohello leyó inquebrantables y dos veces, me atreví hacer frases de lo que
día a día me alimentaba creo que si estaba cayendo en el hoyo y una vez más el café se
hizo más amargo, si bien es cierto, encontrar el camino se me estaba volviendo
complicado, escribir no estaba dentro de mis planes leer mucho menos ahora me
pregunto qué quieres hacer y llego al punto donde todo inició llorar y que absurdo diría
Bottasso llorar ¿para qué? levántate y comete al mundo sin renunciar a quien eres.
Y ahí es cuando entro en conflicto y te dices quien soy y una vez más me río una
pregunta que todos evadimos y solo añadimos características bonitas capaces de reflejar
“lo bello” de nosotros, con el pasar de los meses no me he reconocido en el espejo, es
tonto quedarse con lo que otros dicen que eres, me he llenado de todo aquello (la
gordita, la odiosa, la que le falta criterio, mala hija, rompe hogares, tu hermana es más
bonita que tú, la viuda (este último adjetivo me lo dio un propio sacerdote por llorar por
un sacerdote que era tu papá)) que insensible se vuelve la gente cuando al que le pasa no
es a ti… cuando lo vives en carne propia sabrás cuanto duele y hasta donde puedes
aceptar todo, en fin yo lo he aceptado TODO jajajaja y me veo con todo lo que me han
dicho.
Construirse es parte del objetivo la meta puede variar de acuerdo a como lo vayas
caminando, ahora bien… donde me encuentro no sé si quiero llegar a la meta
inspiración hay, voluntad hay, tiempo hay, pero saben que más hay PEROS quiero
hacer todo aquello, PERO, siento que lo que en realidad me hace falta es leer ir a una
librería y enamorarme de todos los textos, ojearlos, tocarlos, conocer nuevos autores,
aunque en primera fila Márquez sabrá como envolverme, seguido de una buena lectura,
tomar un chocolate y decidir aquí estoy volvamos a escribir o también creo que y si las
ganas se fueron consumiendo en el fuego igual que mis escritos por otra persona o por
lo que sentía o vivía ahí si seguramente regresar sería imposible… he quedado en
cenizas…
Tiempo... ese que el conejo blanco lo resalta en Alicia cuando corre ese mismo tiempo
es el que corre y menos me encuentro, mi inspiración es luz de esas que no has
encontrado, pero sabes que tienes que huir, escribir de él no es lo más prudente quizá si
algún momento lo lea puede huir más rápido que yo, distancia con tiempo no son los
mejores aliados, ¿sinónimos? Es momento de ya no pensar mucho en él y volver al tema
de construirse, pero como no construirse con ese ser que te inspira y volvemos al PERO
no quiero algo pero le veo la solución para que sea así… eso es manipular las
condiciones, al otro, es mejor que las cosas se den sin uno preguntarse y sin ponerle el
PERO por ahora es mejor no mover sentimientos… camina pero no tan deprisa, se
paciente me repito cada mañana.
Me pregunto qué es lo peor que les pasa a los escritores, la perdida de la inspiración o
llegando al fatalismo que les corten una mano, bueno hoy resalto que lo peor que me
puede pasar es quedarme sin memoria como escribir de la nada en la nada, ¡imposible
¡ ya no más PEROS siento que eso entorpece mi sentido crítico de encontrar (me) y si
ya no soy crítica me he vuelto ese parásito y no lo pongo en forma despectiva lo digo en
el sentido que toda sociedad tiene un parásito en su población alguien que no aporta y
solo es el gasto, quizá me he vuelto eso…. Y si le sumamos que tengo un millón de
pretextos que hasta a mi tienden aburrirme, querer no siempre se vuelve poder, uno
cuando crece se vuelve más carente de todo, somos esa parte que queremos recibir todo,
pero dar muy poco.
Hoy decido encontrar los sueños perdidos… hace algún tiempo cuando recorría las
calles de México y me quedé parada en la plaza Garibaldi encontré mi vocación
“ESCRIBIR” pero debe ir más allá ahora que quiero encontrarme esa es la pauta, no
debe ser hoy algo utópico, vamos desde el realismo y el centro de esto no es la falta de
escritura es que no he cogido un libro para decir “no me parece interesante” o “me
enamoré”