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REVISTA COLOMBIANA DE ENTOMOLOGIA https://doi.org/10.25100/socolen.v11i1.

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Vol.11 No.2.1985.p.3641

HABITOS DE NIDIFICACION EN
ABEJAS CARPINTERAS DEL GENERO
XYLOCOPA (HYMENOPTERA:
ANTHOPHORIDAE)
Fernando Fernández '
Giomar Nates Parra2

mente de las regiones templadas, a los gastra (= Aculeata) que comprenden


INTRODUCCION euglosinos (neotr opicales}, a las abejas formas libres, parasitoideas y colecto-
sin aguijón (pantropicales) y a la abeja ras de polen (Lanham, 1951; Miche-
melifera (diseminada en todo el mun- ner, 1974). Las abejas, a su vez, se de-
Entre los insectos mas Interesantes se
do por el hombre); esta familia com- rivaron de un grupo de avispas esfe-
encuentran los himenópteros que agru-
prende formas prosociales (abejorros y coideas, considerándose a éstas como
pan formas tan conocidas como las
euglosinos) y formas altamente socia- parafiléticas con respecto a las abejas
hormigas, las avispas y las abejas. Estas
les (Michener, 1974). Las familias Fi- (Lomholdt, 1982). Desde muy tempra-
últimas constituyen la superfamilia
delidae, Megachilidae, Anthophoridae no, la dependencia de las abejas de
Apoidea (Roth, 1973), cuyo número
y Apidae poseen lengua larga y por lo néctar y poien suministrados por flores
de especies pasa de 20.000 (Michener,
tanto están adaptadas para tu Iizar flo- de plantas superiores, inició una com-
1979) agrupadas en 10 familias- (Mi-
res de forma tubular, más evoluciona- pleja evolución dependiente entre abe-
chener, 1969, 1974; Batra, 1984). Las
das dentro de las Angiospermas (Eick- jas y Angiospermas (Baker y Hurd,
abejas se encuentran distribuidas en
wort y Ginsberg, 1980; Kevan y Baker, 1968; Kevan y Baker, 1983).
todo el mundo y las limitaciones para
su distribución se dan sólo por la dis- 1983).
La existencia de diversos grados de
ponibilidad de flora (Michcner, 1979).
Los hi menópteros superiores (Subor- sociabilidad entre las abejas hacen de
Aunque es común considerar a todas
den Clistogastra) se derivaron proba- éstas un grupo ideal para estudios de
las abejas corno insectos sociales, re-
blemente de un grupo parásito de plan- biología social comparada, de incalcu-
sulta que más del 80°(0 de éstas son
tas, parecido a las actuales moscas- lables beneficios para la biología y ge-
solitarias (Batra, 1984).
sierra (Chalastogastra); este grupo pa- nética del comportamiento (Michener,
rásito, que provenía de himenóperos 1969). Los diferentes niveles sociales
Las familias Colletidae, Oxacidae , An- primitivos comedores de plantas. cons- en las abejas se relacionan en la Tabla
drenidae, Ctenoplectridae, Melittidae y tituyó la vía que condujo a los Clisto- 1.
Fidelidae comprenden especies de dis-
tribución restringida, en general solita-
rias y, excepto Fidelidae, de lengua TABLA 1_ Niveles de sociabilidad entre las abejas (Michener, 1969).
corta, que los determina como visitan-
tes de flores abiertas y planas, primi-
tivas dentro de las Angiospermas. La Castas y Colonias Trabajo Hembras Alimentación
familia Haiictidae está ampliamente NIVEL división rnatrifi- cooperativo estructural. progresiva
laboral liales en celdas mente
di tribu ida y comprende formas que
alcanzan el grado social más primitivo
(Michener, 1969); la fam ilia Megachi- Solitario No +
lidae, que incluye las abejas cortadoras
de hojas, es de amplia distribución y Subsocial +

comprende formas solitarias; la fami- Parasocial:


lia Anthophoridae es cosmopolita y
abarca un extenso número de especies Comunal +
sol itarias, sem isociales y parási tas
Cuasisocial +/- + + +/-
(Linslev, 1958). La familia Apidae
comprende a los abejorros principal- Semisocial + + + +/-

Eusocial:

Primitivamente
Estudiante, Oepto. de Biolog(a, Univ. + + + +/ -
Social
Nal. de Colombia, Bogotá.
2 Profesora, Oepto. de Bloloqía, Univ.
Altamente
Nal. de Colombia, A.A. 23227, Bogotá + + + +/-
Social
O.E.

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Julio - Diciembre 1985 Fernando Fernández - Giomar Nates Parra

Las abejas carpinteras comprenden es-


pecies de las Tribus Xylocopini y Cera-
tinini, Subfamilia Xylocopinae, Fami-
lia Anthophoridae. Las abejas del gé-
nero Xylocopa se caracterizan por ni-
dificar preferentemente en la madera.
El género Proxylocopa, limitado a las
zonas áridas del su roccidente de la
región paleártica, nidifica en la tierra,
A
considerándose el más primitivo de la
Triby Xylocopini, y el género Lestis
está lirnitadc .¡¡f- oriente australiano.

El género Xylocopa es el más represen-


tativo de la tribu Xylocopini; se en-
cuentra en todo el mundo, principal-
mente en los trópicos; en el Viejo e
Mundo se han descrito especies agrupa- B o 10cm

das en 32 subgéneros y en el Nuevo


Mundo especies de 17 subgéneros
(Hurd y Moure, 1963). Las abejas car- FIGURA 1. A. Hembra de Xylocopa sp, 1. B. Primer nido, con cinco galerias y
pinteras construyen nidos dentro de la ocho celdas selladas.
madera, haciendo galerías en diferen- C. Segundo nido con tres galerías.
tes direcciones a partir de una entrada
común; para tratar la madera utilizan por la serran ía del mismo nombre y miento y nivel social.
secreciones de sus glándulas mandibu- por los ríos Güejar y Ariari al nor-
lares. En las galerías construyen celdas oriente y Guayabera al sur. Su riqueza Los nidos cuya arquitectura interna se
que aprovisionan de alimento; una vez en flora y fauna se evidenció desde las describe fueron, retirados del lugar
colocado un huevo, sellan la celda con primeras expediciones (Philipson, Don- donde se encontraban con todas sus
un tabique de aserrín y saliva (Batra, caster e Idrobo, 1951); riqueza que, en entradas tapadas para ser trasladados al
1984). Entre estas abejas parece haber parte, se explica por los pasados cam- campamento, donde se ·seccionaron.
cuasisociabilidad (Tabla 1) teniendo en bios climáticos (Vuilleumier, 1971). Los adultos se eliminaron con cianuro
cuenta datos sobre xylocopas del Viejo de potasio; las formas larvales y pupas
Mundo (Michener, 1972) y resultados Los trabajos de reconocimiento de la se dejaron en alcohol y el polen se con-
de este trabajo. apifauna y observación de nidos se servó en ácido acético.
efectuaron en la región del río Güejar,
Según Hurd y Moure (1963), el factor próxima a la desembocadura del río en
más importante en la evolución de este el Ariari, en la vereda "Caño Alfa", RESULTADOS
grupo ha sido la disponibilidad de sus- municipio de Puerto Rico. El paisaje
trato para nidificar, más que la dispo- característico está formado por suaves En total se encontraron seis nidos de
nibilidad de fuentes florales. Las abejas elevaciones y extensas llanuras de vege- tres especies de Xylocopa. En el "ba-
carpinteras son generalmente polilécti- tación abierta de escasa cobertura, no jo", en una viga de madera, se encon-
cas (Linsley, 1958, 1961), polinizado- inundable en ninguna época del año; traron dos nidos de Xilocopa sp. 1; en
res principales de algunas plantas como esta zona recibe el nombre local de la "banqueta", en un árbol muerto, se
maracuyá y té (Hurd y Moure, 1963), "banqueta". La vegetación ribereña encontraron cuatro nidos, uno de
y plagas, al dañar flores no adaptadas (selva de inundación) se conoce como Xylocopa sp. 2 y los demás de Xvlo-
para estos insectos y al utilizar madera "bajo" (Vargas, Rivera y Mendoza, en copa sp. 3.
de construcciones para nidificar (Lins- imprenta). El trabajo se efectuó en
ley, 1958; Hurd y Moure, 1963; Kevan Enero de 1985, época seca de la región, Xylocopa sp. l. Dos nidos en el inte-
y Baker, 1983). con escasa humedad y altas tempera- rior de una viga de madera de 170 cm
turas. Los nidos se buscaron en el de altura y 12 cm de diámetro. El pri-
El parasitismo ejercido por avispas de "bajo" y en la "banqueta". mer nido (Fig. 1 B) con una sola entra-
la familia Sapygydae (Hurd y Moure, da, a 100 cm de altura, poseía 8 celdas
1961) y por coleópteros meloideos En la descripción de cada nido se tiene selladas, seis de ellas con larvas en dife-
(L.e. Pardo. Comunicación personal) en cuenta: l. Local ización: en qué rentes estados de desarrollo y dos con
puede afectar el crecimiento de sus po- tipo de zona se encuentra el nido y dos pupas hembra. En el momento de
blaciones (Watmough, 1983). cómo se halla dispuesto. 2. Caracterís- las observaciones se capturaron dos
ticas generales: tamaño y forma del hembras adultas (Fig. 1 A). El segundo
MATERIALES Y METODOS nido, materiales con que está construi- nido (Flg. 1C) localizado a 21 cm del
do y estado en el momento de la ob- primero (altura de la entrada: 121 cm)
El trabajo de campo se llevó a cabo en servación. 3. Estructura interna del contenía una sola celda con una larva,
la Reserva Natural Nacional de "La nido. 4. Población: huevos, larvas, pu- en una galería; en la segunda galería
Macarena", la cual se encuentra en el pas, preadultos, adultos prereproducti- hojas secas y en la tercera tierra. No se
departamento del Meta; está limitada vos, adultos, parásitos. 5. Comporta- capturó ningún adulto.
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ten ía cuatro galerías y cuatro celdas contrados y disectados.


selladas, tres de ellas con pupas y una
con alimento, pero sin huevo. Una
quinta celda estaba en construcción. DISCUSION

El nido G (Fig. 3) contenía cinco gale- Las abejas constituyen un vasto grupo
rías y cinco celdas selladas. Una con con especies solitarias, parasociales y
polen y un huevo, otra con polen y eusociales (Tabla 1). En general, las
una larva alimentándose activamente, formas más primitivas son solitarias y
una tercerca celda con polen y una las más recientes tienen algú n grado de
larva desarrollada devorada hasta la sociabilidad.

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FIGURA 2. Ubicación de los cuatro


nidos de Xilocopa sp, 2 y sp, 3 encon-
trados en un árbol muerto en la "ban-
queta". Cada letra hace referencia a un
agujero.

Xylocopa sp. 2 y X. sp. 3. En la "ban-


queta", en un árbol muerto, se encon-
traron cuatro nidos. Era el único árbol
de más de 25 cm de diámetro en un o.
área grande y aunquc tenía muchos 8cm.
agujeros, sólo cuatro conducían a ni-
dos; los demás estaban en construc- FIG URA 3. Esquema de los nidos encontrados en un árbol muerto en la "ban-
ción, pero algunos mostraban abando- queta". E corresponde al nido de Xylocopasp. 2. A, F Y G corres-
no en la construcción Fig. 2). ponden a nidos de Xylocopa sp, 3.

En el nido E (Fig. 3) correspondiente mitad por una larva no identificada; En la Introducción se señaló la impor-
a la especie Xylocopa sp. 2, se en con - las dos últimas celdas canten ían pupas. tancia de las flores para las abejas: el
tró una sola galería con dos celdas, Se encontraron celdas abandonadas, 2 néctar y el polen que éstas poseen son
cada una con una pupa de cada sexo. machos y 3 hembras adultas y 2 hem- esenciales para la nutrición de estos
Se capturaron dos adultos, macho y bras recién emergidas. insectos (Michener, 1974). Las abejas
hembra. Este nido, como todos los están dotadas de adaptaciones morfo-
descritos, ten ía una sola entrada. La El nido A (Fig. 3) contenía 11 galerías, fisiológicas únicas para la explotación
galería del nido E estaba a pocos milí- una masa de polen en una de ellas y de las flores (Thorp, 1979); por ello la
metros de una de las galerías del nido tierra en otra. Se captu raron dos hem- evolución del grupo está íntimamente
G. bras y un macho adulto. unida a la de las plantas con flores
(Baker y Hurd, 1968) llegando a ex-
Los nidos F, G Y A corresponden a La Tabla 2 muestra el contenido de tremos sorprendentes de dependencia
Xylocopa sp. 3. El nido F (Fig. 3) con- todos los nidos de Xylocopa spp. en- insecto-planta como puede observarse
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TABLA 2. Contenido de los nidos de Xvlocopa spp.

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5 8 o o o 2 2 2 O O O O O 2 O O Xvlocops sp, 1

2 3 O O O O O O O O O O O O O O O 2 Xvlocopa sp, 1

E 2 O O O O O O O O O O O O O O O Xylocopa sp, 2

F 4 4 O O O O O O O O 2 O O Xylocopa sp. 3
Xylocopa
6 5 5 3 3 O O O O 2 O 3 2 O Xylocopa sp. 3

A 11 O O O O O O O O O O O O O O 2 Xylocopa sp , 3

Total 6 29 20 3 2 6 3 2 2 3 4 3 O 9 3 3 3 spp.

en el trópico (Soderstrom y Calderon, nica, procesos en los cuales las plantas Sequoia, Sequoiadendron, Libocedrus,
1971 ). utilizadas para nidificar han sido los Alnus y Juniperus spp , en EE.UU.;
factores responsables (Hurd, 1956). Cedrella mexicana en México; la espe-
En las abejas carpinteras, sin embargo, Sin embargo, la apifauna del neotrópi- cie X. tabaniformis se considera perju-
como ya se señaló, el factor importan- co ha sido objeto de poco estudio des- dicial para la econom ía. El subgénero
te en su evolución es la disponibilidad de este punto de vista. Neoxylocopa, de amplia distribución,
de sustrato para nidificar; el curso de utiliza madera muerta, seca o viva de
la evolución de este grupo está y esta- Acerca del comportamiento nidifica- una gran cantidad de plantas, desde el
rá asociado a aquellos eventos florísti- torio de las abejas carpinteras los datos sur de los EE.UU. hasta Argentina;
cos que afecten el sustrato para son insuficientes para hacer aprecia- también explota postes, tablones, vigas
nidificar (Hurd y Moure, 1963). En ciones generales. Según Hurd y Moure y demás partes de madera de construc-
América sólo el subgénero Xylocopoi- (1963), el subgénero Nanoxylocopa ciones, causando por ello daños a la
des ha sido estudiado con base en su utiliza cavidades de tallos muertos de econom ía Megaxylocopa prefiere la
dependencia al sustrato para nidificar. Eryngium agavifolium, E. alaefolium madera seca; nidifica en Theobroma
Este subgénero parece derivar de un y E. paniculatum en Argentina y Para- cacao, Haemadictyon y postes. El sub-
"stock" del Viejo Mundo, aprovechan- guay; Xylocospila utiliza para nidificar género Stenoxylocopa, que se encuen-
do condiciones favorables que se die- cañas de "taquara" y bambú en el tra desde Arizona hasta Tucumán, ni-
ron en el terciario (Hurd, 1956). El Brasil; Schoenherria, subgénero de am- difica en Arundo donax, Bambusa
subgénero penetró en Norteamérica plia distribución, utiliza partes muertas spp., Chusquea bambusoides, Guadua
siguiendo la invasión hacia el sur de o secas de Populus pyrimidialis (ála- y Merostachys clausseni. En cuanto a
algunas especies de plantas, cuya ma- mo), Salix (sauce), Eucalyptus, Robi- los subgéneros Cirroxylocopa, Dasy-
dera era el sustrato de estas abejas para nia, Ligustrum. También Arundo xdo- xylocopa, loxylocoa, Xylocopoda,
nidificar. Actualmente, en efecto, se nax (bambú) y Eryngium alaefolium, Xylocopsis, Monoxylocopa, Diaxylo-
puede seguir la distribución de estas Algunas especies nidifican en postes y copa, Calloxylocopa y Xylocopina se
abejas dependiendo de la distribución tablones de construcciones, conside- desconocen sus hábitos y sustratos
de la flora de la cual utiliza su madera. rándoseles problema para la econom ía; n idificatorios.
Procesos claros de especiación se Notoxylocopa, también ampliamente
han dado en las especies Xylocopoides distribuido, prefiere la madera blanda. Puesto que existe, según Lindley
californica y X. (Xylocopoides) virgi- Nidifica en madera de Pseudotsuga, (1958), cierta tendencia de la fauna
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del neártico a invadir el neotrópico, se grande en las hembras y en la colora- mente similares y hay alimentación
espera encontrar en Colombia un ción, ya que los machos son claros y progresiva (regurgitación) a los adultos
puente entre las faunas del norte y del las hembras oscuras. Todas las pupas prereproductivos y machos que demo-
sur, una interesante variedad de formas machos encontradas se hallaban en las ran en abandonar el nido, ya que la
y hábitos, teniendo en cuenta la di- celdas más cercanas a la entrada. Si las cría se alimenta siempre masivamente,
versidad de ambientes que ofrece este celdas más internas corresponden a es decir, se lo dota de alimento sufi-
país; sin embargo, la pobreza de estu- hembras, y éstas cuentan con más ciente para todo su desarrollo hasta
dios al respecto en Colombia impide tiempo para su desarrollo, surge el pupa.
en el momento apreciar la magnitud de interrogante respecto a si deben espe-
tal variedad. rar a que los machos se desarrollen y Es posible que en cada nido descrito se
emerjan. Al parecer, el desarrollo de trate de más de un nido, donde las
los machos es más rápido y cuando las hembras simplemente utilicen una mis-
Las abejas carpinteras excavan en la
hembras se transforman en adultos, los ma entrada; sin embargo, en el nido G
madera valiéndose de secreciones de
machos ya han emergido (Linslev, dos hembras y un macho adultos de
sus glándulas rnandibulares y de sus
1958). El rápido desarrollo de los los captu rados se encontraron en una
poderosas mandíbulas; sin embargo,
machos les permite estar listos para la misma galería y en el nido E se encon-
poco se sabe sobre la composición
emergencia de hembras vírgenes de los traron dos adultos en una única gale-
química de estas secreciones. Lo cierto
nidos. ría. Estudios más detallados sobre el
es que estas abejas son capaces de
comportamiento de estas abejas pue-
abrirse paso aún en maderas duras.
La presencia de adultos prereproducti- den despejar las incertidumbres que
Estas abejas construyen varias galerías
vos (desarrollados totalmente excepto existen al respecto.
que parece seguir un patrón definido.
Partiendo del fondo de cada galería, las alas) y de machos adultos que no
construyen las celdas, cámaras donde abandonan el nido pronto, encontra-
coloca una' masa de polen y néctar dos en los nidos, toca un aspecto muy CONCLUSIONES
mezclados, un huevo, un líquido en importante con respecto al comporta-
todo el piso de la celda que lo prote- miento de estas abejas. En primer La proximidad entre nidos de la misma
gerá de microorganismos y finalmente, lugar, la presencia en un nido de for- especie y de especies diferentes, indica
un tabique de aserrín y saliva mezcla- mas que van desde el huevo hasta el que no hay marcada territorialidad en
dos (Barra, 1984). En este estudio, el adulto, puede implicar la utilización la competencia por el sustrato.
único huevo encontrado en el nido G del mismo nido por generaciones y la
midió 15 x 2 mm, siendo el huevo presencia de varias generaciones en un El sustrato para nidificar fue siempre
más grande entre las abejas y quizás año (multivoltinismo) en oposición a madera muerta. Cada nido poseía una
entre todos los insectos (Michener, una sola generación por año de espe- sola entrada y el númro de galerías
1974). El nido r (Fig. 3) poseía una cies de Xylocopa de regiones templa- fue variable. Se encontraron todos los
celda con alimento pero sin huevo; das (univoltinismo). La presencia de estados de desarrollo.
puesto que estaba sellada, puede tra- adu Itos genéticamente relacionados en
tarse de mortalidad a nivel del huevo un nido trae importantes consecuen-
Se encontró parasitismo, posiblemente
cuya causa puede ser baja lertilidad de cias en la evolución social de las abejas
por una avispa sapigida.
la hembra (Watmough, 1983). Larvas (Lin y Michener, 1972). Igualmente,
jóvenes, intermedias y maduras fueron entre estos adultos existe ya coopera-
tivismo; en varios nidos se captura- Las abejas carpinteras de los nidos des-
observadas en varios nidos alimentán- critos no son estrictamente solitarias;
dose activamente del polen, actividad ron hembras adultas morfológicamente
idénticas retornando al nido impli- deducciones hechas sobre lo encontra-
que continuaron aún lucra de sus do las coloca como parasociales, posi-
nidos. cando una labor conjunta. El que
sean hermanas o madre e hija es difícil blemente en el nivel cuasisocial.
precisarlo a menos que se hagan obser-
En el nido G se encontró una larva de vaciones más duraderas en los nidos. Aunque muchos nidos observados de
Xylocopa sp. 3 devorada progresiva- Las Iorruas adultas que no abandonan Xylocopa son de construcciones hu-
mente por una pequeña larva sin iden- el nido deben ser alimentadas por manas que utilizan madera, no parece
tificar. De acuerdo con la literatura, las regurgitación de las hembras pecorca- haber diferencias significativas entre
avispas sapygidas se cuentan entre los doras como se ha observado en xv!o- estos nidos y los construidos en la
parásitos de nidos de Xylocopa (Hurd copas en la India (Michener, 1972); naturaleza.
y Moure, 1961); se podría agregar el esto demuestra una clara dependencia
parasitismo ejercido por coleópteros entre estas formas y sus alimentadores.
El conocimiento de los hábitos nidifi-
meloideos, encon trados en otros anto- catorios de estas abejas puede despejar
fóridos (Linslev, 1958). El parasitismo Al observar los niveles de sociabilidad incógnitas sobre la evolución v expan-
es un factor que limita las poblaciones entre las abejas (Tabla 1) se puede sión del grupo en el neotrópico, espe-
de Xylocopa (Watmough 1983). deducir que las abejas de los nidos des- cialmente en Colombia, puente entre
critos se ajustan al nivel cuasisocial: no las faunas del norte y el sur de Améri-
En las pupas de Xvlocopa ya pueden poseen castas ni división de labor, las ca. Igualmente, puede crear bases
diferenciarse los sexos, que, como en colonias pueden ser o no matrifiliales, racionales para el diseño de nidos arti-
los adultos, se basa en el mayor tama- puede haber trabajo cooperativo en ficiales para programas de polinización
ño del cuerpo del macho, cabeza más celdas, las hembras son estructural- dirigida.
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Julio - Diciembre 1985 Fernando Fernández - Giomar Nates Parra

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