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Vas a sentarte a solas donde puedas concentrarte y vas a tomar unas hojas de
papel, o un cuaderno y vas a prepararte para escribir.
Si tienes la foto colócala en frente de ti, mirándola a los ojos, recuerda que
nuestros ojos son el reflejo de nuestra alma, mira a ese niño que ahí está.
(Puedes poner música si quieres, te recomiendo que no tenga letra para que puedas
concentrarte mejor y poder en este momento conectarte con lo sagrado en ti).
Escribe la carta con mucho amor y cariño para tu niño interior, vas a decirle
ahora como adulto, lo siento por haberme olvidado de ti, hoy como adulto
quiero encontrarme contigo, a ti que eres mi niño interior, hoy te voy a escribir
todo lo que siento por ti, te voy a decir todas mis emociones que llevo aquí en
mi corazón, en este momento hoy te explico todos mis aprendizaje, te cuento
mis miedos, mi mal comportamiento, mis dudas, mis tristezas. Hoy vuelvo y
me conecto contigo y te doy las gracias por volver a encontrarme contigo.
Luego, escribe la historia que recuerdes y que viviste cuando eras niño, la que
más te dolió. Solo escribe, deja que tu corazón fluya. (Escribe todo lo que sientes,
no te detengas que solo tú puedes leer la carta) Y cuando termines esa carta,
escribe...
"Así tenía que ser, es la única manera de aprender, yo estoy bien" y desde hoy
empiezo a conectarme contigo".
Gracias padre por ayudarme a sanar lo más preciado que tengo. Mi Niño
interior. ( Llora todo lo que tengas que llorar, recuerda que es la única forma de
ir sanando y liberando esas emociones guardadas de años. No te detengas.