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FACULTAD DE TOCOA, COLÓN

CARRERA DE DERECHO
ASIGNATURA: DERECHO DE EJECUCIÓN PENAL

PROYECTO DE INVESTIGACIÓN SOBRE


EL SISTEMA PENITENCIARIO EN HONDURAS

CATEDRATICO:
ABOG. RENÉ DAVID DIAZ RODRÍGUEZ

PRESENTADO POR:
ROBERTO LEONEL VARELA HERNANDEZ
319070008

TOCOA, COLÓN, JULIO 2022


INTRODUCCIÓN

En nuestro país actualmente el tema de los Derechos Humanos relacionado con el tema de los
privados de libertad, son de alto debate y estudio fundamental de aplicación para la defensa en
general y aplicación de estos derechos como desarrollo humano.

En esta investigación sobre el SISTEMA PENITENCIARIO EN HONDURAS, se puede


mencionar que posee una adecuada estructura jurídica, que carece de condiciones que permitan
hacer valer los derechos humanos de los privados de libertad; sin embargo, es por esto que hay
un desafío político que se pueda revertir y se convierta en un marco de capacidades que puedan
superar el problema de carencia de una justa aplicación de derecho en el sistema penitenciario.

Es en este trabajo se ha realizado un análisis de las razones por las cuales el sistema penitenciario
representa un desafío, tanto para los representantes del Estado (política-pública), como para los
defensores públicos y privados y también para todos los afectados en este caso los privados de
libertad.

OBJETIVOS
OBJETIVO GENERAL.

Conocer sobre EL SISTEMA PENITENCIARIO en la Republica de Honduras, referente al


sistema penal y situación interna de los privados de libertad.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS.

1.º. Analizar los mecanismos que el Estado aplica en la ley del Sistema Penitenciario para
aplicar a los privados de libertad.

2.º. Identificar si el fin primordial de la Ley del Sistema Penitenciario en Honduras esta
siendo aplicado de acuerdo a lo establecido.

3.º. Relacionar el avance que ha tenido el Sistema Penitenciario en Honduras a través de la


historia de su creación.

4.º. Conocer la organización administrativa del Sistema Penitenciario en Honduras.

5.º. Enlistar los requisitos que deben cumplir los establecimientos penitenciarios en
Honduras.

6.º. Comparar la teoría con la realidad de las condiciones de vida de las personas privada de
libertad establecido en la ley del Sistema Penitenciario en Honduras.

MARCO TEORICO
La investigación comienza con el objeto de estudio, abordando EL SISTEMA
PENITENCIARIO HONDUREÑO, ubicado en el marco de la región y se analiza el contexto
carcelario nacional y sus principales características, resaltando que existen fuertes indicios de
ingobernabilidad y hacinamiento, situación que debe ser priorizada en materia política pública.

Seguido se estudia la situación problemática de los privados de libertad en Honduras; los


aspectos normativos y legales tratando de ver la necesaria articulación entre la normativa
conceptual y las condiciones relacionadas con los derechos humanos, describiendo la situación
problemática que enfrenta el sistema penitenciario nacional cuya población es vulnerable a
diversos aspectos.

SISTEMA PENITENCIARIO DE HONDURAS


1.1.-DEFINICIÓN DE SISTEMA PENITENCIARIO.

El Sistema Penitenciario se encarga de vigilar que las personas, que por alguna razón se
encuentran privadas de su libertad en los distintos centros de readaptación y reinserción social,
establecimientos penitenciarios, separos preventivos y centros de internamiento y atención
juvenil del Estado, se les garantice y gocen de todos sus derechos fundamentales, a excepción
hecha de aquellos que legalmente les han sido limitados.

Además, Supervisa que el lugar o la instancia en que se encuentran las personas detenidas, esté
en adecuadas condiciones estructurales y funcionales, que haya buena iluminación, ventilación,
higiene, y que cuenten con todos los servicios indispensables y necesarios para que puedan vivir
dignamente.

Revisa que se les otorgue alimentación en calidad y cantidad suficiente; atención médica,
psicológica, psiquiátrica, educación, actividades laborales, recreativas y deportivas;
comunicación telefónica con su familia, defensor e Instituciones, visita conyugal y familiar,
etcétera.

Observa que la actuación de los Defensores Públicos en los procedimientos penales, se realice
responsable y adecuadamente.

Está presente en las Reuniones del Consejo Técnico Interdisciplinario.

Ayuda vigilando que se respeten todos los derechos humanos de las personas privadas de su
libertad.

Acude a los centros de internamiento y separos preventivos a recabar las quejas por presuntas
violaciones a derechos humanos, en contra de autoridades y servidores públicos.

Otorga orientación a los internos y familiares.


Gestiona las peticiones de la población interna, ante la Dirección General de Prevención y
Reinserción Social, sobre su situación jurídica, atención médica, beneficios, traslados, entre
otras.

1.2.-ANTECEDENTE HISTORICOS DEL SISTEMA PENITENCIARIO EN


HONDURAS.

El Sistema Penitenciario Hondureño Post Colonial, se inició en la Constitución Federal de 1824,


con marcada dependencia jurídica de los textos heredados de la colonia; hasta hace poco tiempo
fue Reformado el Código Penal mediante Decreto No. 144-83, Publicado en el Diario Oficial la
Gaceta No. 24,264 de fecha 2 de marzo de 1984, y entra en Vigencia a partir del 12 de marzo de
1985, que sustituyo el de 1906, este último se decía que era una copia del español a principios
del siglo XIX.

El Dr. Marco Aurelio Soto, Presidente Constitucional, ordeno mediante Decreto, el 15 de


Noviembre de 1882, la construcción de un establecimiento penal en el barrio "La Hoya", de
Tegucigalpa, denominándola: Penitenciaria Central, en la cual cumplirían las 'penas los reos de
toda la Republica.- En el Decreto se fundamentaba el hecho de que con la emisión del nuevo
Código Penal se debía de contar con una Penitenciaria, donde se cumpliesen las penas que lejos
de degradar y hacer incorregibles a los sentenciados, debería ser un medio de corrección,
enseñanza y rehabilitación moral.

En 1909 se emite la Ley Reglamentaria de Presidios donde se regulan aspectos administrativos,


se hace énfasis en la disciplina que debe privar en esos centros y se define el castigo y corrección
como base para el tratamiento de los reos.

En el transcurso de las décadas siguientes fue notorio que los Gobiernos en el Poder reflejaron su
estilo de mandar en el trato que dieron a los penados, son abundantes las historias que cuentan
los abusos o el buen trato que recibieron de parte de las distintas autoridades; el castigo sin
misericordia, la tortura, la represión y otras formas de "Corrección" son parte del legado
histórico que impregna las paredes de muchos Centros Penitenciarios. Sin embargo, el buen
sentido y la bondad de la sociedad se han hecho sentir en la concepción del problema y se ha
mitigado y cambiado la dureza del tratamiento por nuevas alternativas que conllevan como
finalidad devolver al individuo como elemento útil a la sociedad.

Hasta los años 40 fuera de los presidios construidos en las distintas Cabeceras Departamentales,
funcionaron en los municipios de la República, las cárceles preventivas que consistían en un solo
cubículo, generalmente contiguo a la Alcaldía Municipal, con un solo portón de cuartones
formando cuadrados, una cadena y un candado, custodiados por soldados al mando de un
comandante. - Las personas detenidas, dependiendo de la gravedad de su delito, eran enviados a
la Penitenciaría Central "Por Cordillera", es decir que a falta de vías de comunicación cruzaban
caminos de herradura y montañas a Pie y a lomo de Bestias, para poder llegar a la Capital.

En los años 50 aun servía de reclusorio Penitenciario El Castillo San Fernando de Omoa. La
mayoría de los Centros Penales, llamados presidios, formaban parte en sus instalaciones físicas
de los denominados cuarteles (Véase el caso de Gracias, Juticalpa, Yoro, Yucarán, Santa
Bárbara, Nacaome, La esperanza, Santa Rosa de Copan y Ocotepeque).

A principios de los años 60, durante el periodo de la Segunda República, se tomaron una serie de
medidas para restaurar los Centros Penales en especial la Penitenciaría Central y darles a los
internos un tratamiento acorde a su condición humana, misma que no tuvieron en las décadas 30
y 40. A mediados de los años 60, la firma consultora "León y Asociados", realizó un diseño para
cárcel de mujeres que sería construida en el Valle de Tamara.

En 1965 se realiza un diseño de reclusorios Penitenciarios para la región central el cual sería
construido en el sitio de San Juan de Liquitimay, jurisdicción de Ojo de Agua, Municipio de
Yuscarán, Departamento de El Paraíso.

En 1966 se diseñó un Centro Penal para San Pedro Sula, que sería construido en la zona de
Calpules en un lote donado por la Tela Railroad Company.

Entre 1967-1968 se realiza el diseño y construcción de los Centros Penales de El Progreso y


Márcala. En 1969 durante la guerra Honduras El Salvador, fue incendiado el cuartel de
Ocotepeque donde también funcionaba el Centro Penal reconstruido este último en 1970.
El Presidente de la República Ingeniero Carlos Roberto Flores Facusse, mediante Decreto
Ejecutivo No. 250-98, de febrero de 1998, considerando que la Secretaria de Gobernación y
Justicia, y la Junta Interventora de la Policía, suscribieron un Convenio en el que se establecen
las obligaciones asumidas por cada uno de ellos, con el objeto de dirigir y apoyar el
funcionamiento de los Centros Penales del País y conociendo que el Subsistema Penitenciario, se
encontraba atravesando una crisis emergente que afecta la tranquilidad pública y la vida normal
de la sociedad, el Presidente de la Republica consideró depositar la confianza en la Fuerza de
Seguridad Pública, para que asumiera el control total de los Centros Penales del País, con el
apoyo de las Fuerzas Armadas, con la misión de evitar las evasiones, crear un clima de seguridad
y estabilidad interna de los Centros Penales, y corregir anormalidades operativas y
administrativas de los mismos.

Mediante Decreto Legislativo No. 156-98, del 8 de agosto de 1998, la Dirección General de
Establecimientos Penales, pasa de la Secretaría de Estado en el Despacho de Gobernación y
Justicia, a la Secretaría de Estado en el Despacho de Seguridad, recayendo la responsabilidad en
la Dirección General de Servicios Especiales preventivos.

El 30 de Octubre de 1998, la tormenta tropical Mitch azotó a Honduras ocasionando enormes


pérdidas humanas y destrucción a la infraestructura, los Centros Penales no fueron la excepción,
principalmente las vetustas instalaciones de la Penitenciaría Central, donde hubo necesidad de
evacuar a los 2800 internos al Estadios Nacional "Tiburcio Carias Andino" y posteriormente a la
nueva Penitenciaria Nacional "Marco Aurelio Soto" con el traslado se produjeron motines en esta
cárcel, donde murieron internos y destruyeron en parte la infraestructura. A partir de 1998, la
situación de los centros penales del país se volvió inestable. Incendios, motines y fugas masivas
comenzaron a caracterizar la “crisis” del sistema penitenciario hondureño.” Por ejemplo, en 2003
se produjo un incendio en la cárcel de El Porvenir en La Ceiba que dejó un saldo de 68 muertos.
Un año después se incendió la cárcel de San Pedro Sula dejando 107 muertos. Y más
recientemente (2012), en el centro penal de Comayagua un incendio dejo más de 300 víctimas.
Otro de los problemas, que, a través de la historia, afectó el sistema penitenciario fueron los
motines.
El Instituto Nacional Penitenciario fue creado mediante Decreto No.64-2012, de fecha 14 de
mayo del 2012, publicado en el Diario Oficial La Gaceta No. 32,990 de fecha 3 de diciembre de
2012, como un órgano desconcentrado del Estado (Artículo 7 de la Ley) y Reglamentada
mediante Decreto Ejecutivo No. 107- 2014, 12 de marzo del 2015.

A partir del 4 de diciembre del 2014, la administración de las cárceles del país pasó a formar
parte del recién creado Instituto Nacional Penitenciario (INP). Dependiente del Ministerio del
Interior y Población (Ahora Secretaría de Estado en los Despachos de Derechos Humanos,
Justicia, Gobernación y Descentralización), la administración de las cárceles estuvo a cargo de la
Dirección Nacional de Servicios Especiales Preventivos, la cual es parte integrante de la
Dirección General de la Policía Nacional, por disposición de la Ley Orgánica de la Policía
Nacional (artículos 2, 11 y 52); y por lo tanto, es parte de la cartera de la Secretaría (o
Ministerio) de Seguridad.

Es desde el año 2015 el estado de Honduras cuenta con un nuevo 'Reglamento General de la Ley
del Sistema Penitenciario Nacional', el cual es un instrumento jurídico que regula el
funcionamiento del Instituto Nacional Penitenciario, la vida en los Centros Penitenciarios y
Penitenciarías Nacionales, incluyendo entre otros aspectos el régimen de visitas a personas
privadas de libertad, el trabajo de los internos penales, el acceso a formación, educación y salud,
así como la labor de rehabilitación y reinserción social de quienes se encuentran en condiciones
para recuperar su libertad.

Para ampliar, en términos históricos, fue en la década de los setenta, que el penal conocido como
la PC, alcanzó una de sus mejores épocas. Gracias a la colaboración de dueños de almacenes en
el centro de la capital y la de algunos institutos de segunda enseñanza se logra fundar el primer
colegio al interior del recinto. Por primera vez en su historia, la PC lograr graduar a bachilleres y
peritos mercantiles. También se rehabilitó el olvidado centro vocacional construido durante la
administración Carías. En él, muchos aprendieron a leer y escribir e instruirse en un oficio, como
zapatería, carpintería, sastrería, entre otros, para montar sus propios negocios una vez en libertad.
(IHAH, 2002) luego de la destrucción del penal por las condiciones climáticas en 1998 este fue
abandonado y su población carcelaria que era de 3,500 privados de libertad, se trasladó a
continuar su condena a la actual Penitenciaria Nacional.
Otro dato de interés en términos de desarrollo del sistema penitenciario es que fue hasta el siglo
XX que el Estado de Honduras contó con al menos dos leyes importantes para normar la
organización y funcionamiento de los establecimientos penales: la primera fue la Ley
Reglamentaria de Presidios (Decreto No.129 de 3 de abril de 1909) y la otra, la Ley de
Rehabilitación del Delincuente (Decreto No. 173-84 de 15 de octubre de 1984, vigente desde el
13 de marzo de 1985). (Congreso Nacional de Honduras, 2003) Previo a la modernización del
Estado, entre los años 80 y 90 aún en el escenario de toma de decisiones local no se había
analizado la posibilidad de una política pública encaminada al mejoramiento del sistema. A partir
de 1998, la situación de los centros penales del país se volvió inestable. Incendios, motines y
fugas masivas comenzaron a caracterizar la “crisis” del sistema penitenciario hondureño. Ante
esta situación, el Gobierno Central reaccionó colocando en manos de la policía la dirección y
administración de los establecimientos penitenciarios. Hasta ese momento responsabilidad
exclusiva de la Dirección General de Establecimientos Penales, dependiente de la Secretaría de
Estado en los Despachos de Gobernación y Justicia (Congreso Nacional de Honduras, 2003).

1.3.-ORGANIZACIÓN DE LOS CENTROS PENITENCIARIOS EN HONDURAS.

En el Capítulo II de la Ley de Sistema Penitenciario el Articulo 6 se refiere a la formación del


Sistema Penitenciario Nacional, así:

1. El Instituto Nacional Penitenciario (INP), y


2. Los Establecimientos Penitenciarios.
El INP es un órgano desconcentrado, dependiente de la Secretaría de Estado en los Despachos
del Interior y Población, con autoridad en el territorio nacional al cual le corresponde la
organización, administración y el funcionamiento del Sistema Penitenciario Nacional y los
servicios que le son inherentes. La sede se encuentra en la capital de la República, Tegucigalpa.

1.4.- SISTEMATIZACIÓN OBJETIVA DE LOS CENTROS PENITENCIARIOS EN


HONDURAS.

De acuerdo al articulo 12 de la Ley de Rehabilitación del Delincuente el país deberá tener los
siguientes establecimientos penales:

1) Las Penitenciarias Nacionales, para el cumplimiento de las penas que excedieren de tres (3)
años.
2) Las Cárceles Departamentales o Seccionales, para el cumplimiento de las penas que
excedieren de tres (3) años.
3) Las Cárceles Locales, para el cumplimiento de las penas de prisión.
Además, se cuenta también con los establecimientos de los batallones donde se garantiza la
detención temporal de destinados a la privación de libertad de involucrados en delitos de alto
impacto o de servidores públicos de alto rango, entre estos centros están:

1) Centro Preventivo Los Cobras


2) 1er. Batallón de Infantería, El Ocotal
3) 3er. Batallón de Infantería, Naco Cortes
4) 2do. Batallón de Infantería Táctico.

En la actualidad tomando en cuenta las sugerencias realizadas por las diversas entidades de
carácter internacional en materia de derechos humanos, se ha enfatizado en la construcción de
centros penales que posean características de modernidad y atención al privado de libertad desde
una óptica distinta a la que se ha venido manejando en años anteriores. Aun es complejo el
escenario, se requiere necesariamente de aspectos organizacionales y estructurales que permitan
el desarrollo de condiciones adecuadas, no obstante, se ha avanzado moderadamente en términos
de desarrollo, siendo así como se han construido centros penales adecuados al nuevo sistema de
seguridad llamándoles Centro Penitenciario de Máxima Seguridad, ubicados en áreas o predios
más amplios y que le den al privado de libertad mayor seguridad.

Honduras tiene una población penitenciaria de más de 22.000 personas, distribuida en los centros
penales y tres anexos en sedes militares, con fallas de infraestructura y en condiciones de
hacinamiento. Según la Organización Caritas Honduras quien trabaja de cerca con los Derechos
Humanos refiere que hay 8761 reos por encima de la máxima capacidad de los penales. Algunos
establecimientos como los de Puerto Cortés o Támara, el hacinamiento supera el 200 por ciento,
lo cual provoca el hacinamiento con falta de higiene e inadecuada ventilación, lo que constituye
una seria amenaza para la salud de las personas detenidas.
LISTA DE CENTROS PENITENCIARIOS CON QUE CUENTA EL SISTEMA
PENITENCIARIO EN HONDURAS.

Año Número
Establecimiento
de de
Penitenciario
construcción Plazas

Centro Penal de Yoro 1870 150

Centro Penal de Trujillo 1890 120


Centro Penal de La Ceiba 1906 100

Centro Penal La Esperanza, Intibucá 1937 100

Centro Penal de Puerto Cortés 1950 50

Centro Penal de Olanchito 1961 60

Centro Penal de Puerto Lempira 1967 20

P.N. Femenina 1974 200

Centro Penal de Marcala 1975 120

Centro Penal de Tela 1975 160

Centro Penal de El Progreso 1976 120

Centro Penal de Comayagua 1978 240

Centro Penal de Nacaome 1978 120

Centro Penal de Danlí 1980 240

Centro Penal de Santa Rosa de Copán 1980 240

P. N. de El Porvenir, La Ceiba 1980 240

P.N. de La Paz 1984 120

P.N. Marco Aurelio Soto 1998 2,500

P.N. de Choluteca 2001 800

Centro Penal de Ocotepeque 2001 153

P.N. de Gracias, Lempira 2002 600

P.N. de Juticalpa 2007 800


C.P. Ilama, Santa Barbara (El Pozo) 2014 1550

C.P. Moroceli, El Paraíso (El Pozo II / La Tolva) 2014 1342

C.P. El Porvenir Francisco Morazán (Valle de Siria) 2015 1500

El Sistema Penitenciario hondureño según datos del Instituto Nacional Penitenciario contabiliza
a 20687 personas adultas privadas de libertad, dentro de las cuales 1,219 son mujeres, sin
embargo, las cárceles a nivel nacional solo tienen capacidad para albergar a 14,780 personas, lo
que indica que todas tienen un 99% de hacinamiento, los casos más graves se dan en el Centro
Penitenciario Nacional de Támara cuya capacidad es de 1,800 privados y en la actualidad albera
a más de cuatro mil. San Pedro Sula con capacidad para 1,300 y tiene casi a tres mil internos, en
Puerto Cortés el centro de reclusión tiene un máximo de ingreso de 226 y hay casi 500. En Santa
Rosa de Copán con un límite de 300 y congrega a 700, misma situación se da en Santa Bárbara
con una capacidad para 150 personas almacenando 391. Lo anterior hace ver que existe una
sobre población en cada centro lo que lleva a una especie de hacinamiento que provoca el
malestar de los privados de libertad en cuanto al sistema psicológico como el físico ya que
provoca actitudes negativas, presiones y mal comportamiento, así como la aparición de
enfermedades y por ende el contagio masivo de las mismas entre la población de los centros
penitenciarios.

Existe en Honduras el COMITÉ NACIONAL PARA LA PREVENCION DE LA TORTURA


(CONAPREV), fue creado en el año 2008, para la defensa y aplicación de los derechos de los
privados de libertad; quien a treves de su personal revisa las resoluciones judiciales, visita los
centros penales, da informes, aplica cuestionarios a los recluidos y vela por la atención y trato
que se le dé a los mismos.

La prisión preventiva según el Código Procesal Penal estipula que una persona puede estar en
prisión preventiva hasta dos años con seis meses de prórroga. En cuanto a la mora judicial en
Honduras, según datos del Poder Judicial oscila entre 156,401 y 186,987 casos, la mayoría de
categoría penal que a lo largo de los años han quedado engavetados en los archivos de los
diferentes juzgados, lo que lleva a una conclusión de porque hay tanto atraso en la sentencia de
los privados de libertad en el país.

1.5.- RESPONSABILIDAD DEL ESTADO

La responsabilidad del estado de Honduras no solo es velar porque los reclusos cumplan sus
penas, sino también por la seguridad de los mismos. Sin embargo, el estado no es capaz de
cumplir con este cometido a cabalidad. La CIDH a Honduras, identificó y constató graves
deficiencias estructurales en los establecimientos carcelarios que han conducido a su colapso. Ya
en otras ocasiones los órganos de protección de DDHH del Sistema Interamericano y los órganos
del Sistema Universal de Derechos Humanos de Naciones Unidas, han venido refiriéndose
constantemente a la situación de graves deficiencias estructurales que padece el sistema
penitenciario hondureño.

Entre los graves problemas que padece el sistema penitenciario de Honduras identificados por la
CIDH se encuentran incompatible con las obligaciones internacionales asumidas por el Estado,
son:

1. la delegación del control interno de los centros penitenciarios a los propios reclusos;
2. el hacinamiento;
3. la falta de presupuesto y de un marco normativo adecuado;
4. el personal penitenciario;
5. la falta de separación por categorías.

Cabe mencionar en esta investigación que el Estado de Honduras actualmente esta poniendo
especial atención al sistema penitenciario en cuanto a la aplicación de mecanismos que ayuden a
que se le dé un mejor tratamiento al privado de libertad y que se le aplique el derecho de las
garantías que los derechos humanos exigen, pero al pasar a manos de las autoridades policiales
1.6.- ECONOMÍA PENITENCIARIA

En Honduras, no hay políticas públicas que dicten líneas generales de la actuación de los poderes
públicos en materia penitenciaria, cabe agregar que el presupuesto destinado a los centros es bajo
y no ha evolucionado significativamente, aun con la construcción de nuevos centros de reclusión,
circunstancia que no permite mejorar las condiciones de vida de los privados de libertad.

El abandono en la que el estado de Honduras ha mantenido a los centros penitenciarios a través


de muchísimos años, ha resultado en el desarrollo de una economía informal dentro de los
mismos. En esta economía, la cual es controlada por los mismos reclusos afloran entre otros
negocios la prostitución y la venta de drogas.

En la cárcel de Comayagua, uno de los negocios más productivos económicamente es el de los


encuentros conyugales. En dicho penal hay diez cuartos destinados para las visitas conyugales,
los cuales están controlados por dos reclusos. El alquiler de una habitación durante una hora
cuesta cincuenta lempiras. Por la noche, el precio sube. Entre cincuenta y doscientas lempiras.
Un promedio de cuarenta parejas ingresa en los cuartos conyugales durante los días de visitas. En
fines de semanas esta cifra puede incluso doblarse.

Asimismo, el negocio informal crea espacios para el ingreso de efectos ilícitos, como drogas o
alcohol, cuya circulación en las cárceles es un factor generador de violencia; y puede llegar a
generar una situación de facto totalmente anómala y perjudicial en la que tales negocios ilegales
sustituyen a la administración penitenciaria en la provisión de elementos básicos esenciales para
la vida de los reclusos.

Se debe de Identificar los métodos de búsqueda de evidencias en el lugar de los hechos, que
permitan un adecuado manejo de la escena, Buscar técnicamente las evidencias que hacen parte
de la escena, aplicando los métodos técnicos para tal fin, Asegurar, proteger y preservar las
evidencias halladas en la escena del Delito, Recolectar técnicamente las evidencias de acuerdo a
las características de las mismas conjuntamente con su documentación fotográfica, así como su
ubicación planimétrica en la escena, Aplicar la clasificación de las evidencias para lograr la
adecuada preservación, embalaje y por último el Manejo de la cadena de custodia.
1.7.- PARTE LEGAL

El Sistema Penitenciario hondureño tiene como fuentes la Constitución de la República, la Ley


de Rehabilitación del Delincuente, la Jurisprudencia de la Sala de lo Constitucional de la Corte
Suprema de Justicia.

El Articulo 87 de la Constitución de la Republica es el fundamento de esta materia y dice: “las


cárceles son establecimientos de seguridad social. Se procurará en ellas la rehabilitación del
recluido y su preparación para el trabajo”. En ese mismo orden de ideas los artículos 68, 83, 97 y
98 de la Constitución de la Republica desarrollan los derechos específicos para los privados de
libertad en la forma siguiente:

1. Toda persona tiene derecho a que se respete su integridad física, psíquica y moral
2. Nadie debe ser sometido a torturas, ni penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.
3. Toda persona privada de libertad será tratada con el respeto debido a la dignidad
inherente al ser humano.

Corresponde al Estado nombrar procuradores para la defensa de los pobres y para que velen por
las personas e intereses de los menores e incapaces.

Darán a los privados de libertad asistencia legal y los representarán judicialmente en la defensa
de su libertad individual y demás derechos.

Son entes relacionados con la parte legal en el Sistema Nacional Penitenciario:

1. Secretaria de Estado en los Despachos de Seguridad.


2. Ministerio Publico
3. Comisionado Nacional de los Derechos Humanos

El Estado de Honduras ha ratificado diversas normas internacionales entre ellas:

1. Convención Americana sobre Derechos Humanos


2. Convención contra la tortura y otros Tratos o Penas crueles, Inhumanas y Degradantes.
3. Protocolo facultativo de la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles,
Inhumanos y Degradantes.
4. Tratado entre el Gobierno de la Republica de Honduras y el Gobierno de los Estados
Unidos Mexicanos, sobre la Ejecución de Sentencias Penales.
5. Tratado entre la Republica de Honduras y la Republica de Panamá sobre traslado de
Personas Condenadas.
6. Tratado sobre el Traslado de Personas Condenadas entre la Republica de Honduras y el
Reino de España.

La institución competente en materia penitenciaria es la SECRETARIA DE ESTADO EN EL


DESPACHO DE SEGURIDAD, de la cual depende la Policía Nacional, que cuenta con cinco (5)
Direcciones Generales, entre ellas:

DIRECCIÓN GENERAL DE SERVICIOS ESPECIALES PREVENTIVOS

Responsable de:

(1) Atender la seguridad, administración y custodia de los establecimientos penales.


(2) Mantener la seguridad de los Centros de Reinserción Social de menores
infractores y de conducta irregular, de conformidad con las leyes especiales en la
materia.

No existen comisiones parlamentarias que atiendan específicamente el tema penitenciario, por lo


que es atendido por la Comisión Ordinaria de Seguridad y Narcotráfico.

Fuera de la Secretaría de Seguridad, no se realiza supervisión del Sistema Penitenciario, sin


embrago si hay control judicial con la vigencia del Código Procesal Penal en el que se crea la
figura del Juez de Ejecución que es el encargado de la vigilancia y control de la ejecución de las
penas y de las medidas de seguridad.

Existen cuerpos legales modernos que garantizan el respeto a todos los derechos y a iguales
condiciones de vida y a un buen trato a los privados de libertad.

Las organizaciones civiles mas destacadas en la defensa de los Derechos de los Privados de
Libertad son:
1) PASTORAL PENITENCIARIA: organización perteneciente a la Iglesia Católica, que se
dedica a realizar campañas de evangelización, además, da apoyo legal a los privados de
libertad en la tutela del goce efectivo de sus derechos y realiza actividades para mejorar su
calidad de vida, enseñándoles a trabajar en talleres de su propiedad donde enseñan panadería,
sastrería, elaboración de velas, carpintería y otros; en algunos centros coordinan las
actividades de la escuela y cursos libres de inglés.

2) CENTRO DE PREVENCION, TRATAMIENTO Y REHABILITACION DE LAS


VICTIMAS DE LA TORTURA Y SUS FAMILIARES (CPTRT), su área específica es la
capacitación a los privados de libertad y a las personas que laboran en los centros
penitenciarios.

Ambas organizaciones vigilan el efectivo goce de los derechos de los privados de libertad y
coadyuvan con la administración en diversas áreas de trabajo.

Los directores de reclusorio son los gerentes operativos y son responsables de la administración
y buen funcionamiento de un centro reclusorio. Aunque el principal trabajo es el personal de
gestión, muchos de los puestos incluirán trabajo de contacto directo con los presos, es decir,
trabajar en la readaptación social.

En Honduras, no hay políticas públicas que dicten líneas generales de la actuación de los poderes
públicos en materia penitenciaria, cabe agregar que el presupuesto destinado a los centros es bajo
y no ha evolucionado significativamente, aun con la construcción de nuevos centros de reclusión,
circunstancia que no permite mejorar las condiciones de vida de los privados de libertad.

En marzo de 2022, la actual presidenta, ha ordenado la desmilitarización de los Centros Penales,


dando un plazo estimado de 10 meses con la finalidad de trasladar el control de las cárceles y del
Instituto Nacional Penitenciario a la Policía Nacional como estaba anteriormente y que luego del
2020 cuando se reforman varios artículos del Reglamento de la Ley del Sistema Penitenciario se
da la intervención militar en el Sistema Penitenciario así como la suspensión de las autoridades
del Instituto Nacional Penitenciario, es aquí donde intervienen el sistema penitenciario con una
comisión integrada por militares de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional
(FUSINA).
En la actualidad se espera que con el traspaso de mando del Sistema Penitenciario a la Policía
nacional se concluya en la formación de una Policía Penitenciaria independiente de las Fuerzas
Armadas y de la Policía Nacional, y apoyarse en una Policía Comunitaria; ya que en opinión de
los entes de apoyo de estos centros de defensa de los Derechos Humano de los Privados de
Libertad esto seria lo ideal para el desarrollo de lo propuesto en el Sistema Penitenciario
Hondureño y se debe de seguir un sistema progresivo que oriente a civiles al mando del sistema
penitenciario, esto para que la persona privada de libertad pueda irse rehabilitando
progresivamente.
CONCLUSIÓNES

Con esta investigación, se ha comprendido la importancia del estudio del SISTEMA


PENITENCIARIO en Honduras llegando a las conclusiones siguientes:

1. El Sistema Penitenciario Nacional, teniendo como fines primordiales, la protección de la


sociedad, y la rehabilitación, reeducación y la reinserción social de las personas
condenadas.

2. Nuestro sistema Penitenciario está en crisis, se considera que es debido a la ausencia de


una política completa del Estado en cuanto a la exigencia del desempeño de la labor de
cada uno de los asignados a los puestos del sistema penitenciario.

3. El Estado de Honduras es quien debe garantizar la seguridad de los centros penales y el


mantenimiento, pero no se ha dado ni se está dando cumplimiento a lo propuesto en la ley
del sistema penitenciario y cada día se vive más caos e injusticia en los centros
penitenciarios del país.
FUENTES DE INFORMACION (EN INTERNET)

LEY DEL SISTEMA PENITENCIARIO EN HONDURAS

Documento GENESIS DEL SISEMA PENITENCIARIO NACIONAL.

Jefe de Unidad de Transparencia del Instituto Nacional Penitenciario.

PORTAL DEL INSTITUTO NACIONAL DE PENITENCIARIAS DE HONDURAS

INFORME DE CONAPREV

TESIS DOCTORAL

ABOG. ANNY BELINDA OCHOA,

MARZO 2017.

CONGRESO NACIONAL

PODER JUDICIAL

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