Está en la página 1de 11

Primera guerra mundial

La primera guerra mundial también conocida como la Gran Guerra, fue un conflicto bélico
a nivel mundial que se produjo entre 1914 – 1918. Se enfrentaron grandes potencias
militares e industriales de Europa, posteriormente se sumaron países colonizados de África
y finalmente Estados Unidos, entre otros.

La guerra surge por diversos conflictos entre los Imperios europeos; rivalidades de
naturaleza económica, poder político y por la distribución de las colonias en África. Dos
frentes principales se formaron: La Triple Entente y la Triple Alianza.

Se movilizaron alrededor de 70 millones de soldados y el saldo que dejó la Gran Guerra fue
extremadamente arrollador. Unos 10 millones de soldados perdieron la vida, al igual que
más de 7 millones de civiles. La devastación demográfica y social de este conflicto armado
no tuvo precedentes, tampoco la crisis económica que se experimentó en aquella época.
Esta guerra perseguía objetivos ilimitados, el mundo estaba en juego.

Descubre en este artículo toda la información relacionada con la Primera Guerra Mundial.
Cuando comenzó y cuándo terminó la Gran Guerra, quiénes formaron parte de los dos
principales frentes, las causas del conflicto y las consecuencias de este.

Que periodo abarca la Primera Guerra Mundial

La Primera Guerra Mundial abarca un período de cuatro años. Comienza el 28 de julio de
1914, con el asesinato de Francisco Fernando (archiduque de Austria) y Sofía Chotek (su
esposa). Finaliza el 11 de noviembre de 1918, cuando Alemania finalmente acepta las
condiciones del armisticio.

Triple alianza

Inicialmente se encontraban constituida por el Imperio Alemán y el Imperio


Austrohúngaro. El primer pacto de esta alianza se realizó en 1882. Después se invita a
Rusia para que forme parte de la unión, pero la tensión que existía con Austria – Hungría,
no permitió que el acuerdo se cerrara, al punto de que Rusia cambia su política
internacional y se une a enemigos de Alemania, es decir, hace alianza con Reino Unido y
Francia.

Alemania decide aliarse con Italia y esta acepta firmando en 1887 el acuerdo con los otros
dos imperios. Pero, cuando estalla la Gran Guerra, Italia incumple sus obligaciones y se
declara neutral. Al final de cuentas, interviene después formando parte del bando enemigo,
la Triple Entente.

A este conjunto de países que participaron en la Primera Guerra Mundial, se le conoce


también como Potencias Centrales. Esto es por la posición que Alemania y el Imperio
Austrohúngaro ocupaban en Europa. Posteriormente se le unen Bulgaria y el Imperio
Otomano.
Triple Entente

El segundo bando de esta confrontación bélica mundial fue la Triple Entente, a este bando
se le conoce también como los Aliados. La coalición de este bando se conformaba por tres
países: Francia, Reino Unido y Rusia. La unión se da al principio del siglo XX con el
objetivo de afrontar cualquier conflicto militar que se levantara en Europa, como se
sospechaba que ocurriría.

Surge esta alianza como oposición al Imperio Alemán que crecía cada vez más y se había
posicionado como país supremo en Europa Central, unido al imperio Austrohúngaro. Las
pretensiones de Alemania eran destronar a sus enemigos tradicionales: Reino Unido y
Francia.

El imperio ruso se une a esta alianza por las aspiraciones territoriales que tenía en los
Balcanes, similares a las que también tenía Austria – Hungría. Este conflicto de intereses
impidió una gigantesca alianza de Imperios. A medida que avanzaba la guerra, se unieron
varios países como Estados Unidos, Grecia, Italia, Serbia y Bélgica.

Antecedentes de la Primera Guerra Mundial

A lo largo de los siglos XVII y XVIII, en Europa se habían destacado cuatro países
protagonistas: Inglaterra, Francia, Rusia y Austria. Pero para la segunda mitad del siglo
XIX, se incorporan dos actores más que buscaban también tener un papel importante.

Estos países fueron Alemania e Italia, los cuales en poco tiempo lograron un increíble
desarrollo humano y económico. Como las circunstancias habían cambiado en el continente
europeo, las potencias tradicionales no se sintieron a gusto, pues no querían verse
disminuidas por otras.

La Paz Armada

Por un largo período, desde 1885 a 1914, en casi la mayor parte de Europa reinó la
tranquilidad. Fue una época en la que se presentaron pocos conflicto bélicos entre las
potencias del continente. Existía una especie de paz sin firmas de tratados, a la que se le
conoció como Paz Armada.

Aunque había mucha rivalidad económica por las colonias asiáticas y africanas, la paz
permitió que las potencias continuaran sus actividades sin temor a que otra nación intentara
arrebatarle sus posesiones. La paz dejó que las potencias desarrollaran mejor su industria
bélica. Este hecho causó que, al momento de la Gran Guerra, todas las partes tuvieran
ejércitos grandes y modernizados.

A pesar de esta paz, hay un conflicto en los Balcanes (sureste europeo) que desencadenan


enfrentamientos armados, los implicados serían protagonistas de la Primera Guerra
Mundial. Esto nos deja claro que los intereses de las potencias europeas estaban en tensión
antes de que se iniciase la guerra.
Formación de las alianzas

En el inicio del siglo XX se da un salto de escala en la política, las potencias europeas (que
a causa del imperialismo tenían un poder cada vez mayor y sin precedentes) recurrieron a
formar grandes alianzas. El territorio en disputa y al cual se buscaba controlar era el planeta
en su totalidad.

La Triple Alianza surge por el odio que Alemania, Austria-Hungría e Italia le tienen a


Francia. Las tres naciones estaban molestas con los franceses por las políticas que
mantenían en África. El plan principal de Alemania en la guerra es derrotar a Francia lo
antes posible, de hecho, toman París y mantienen control sobre territorio francés durante la
guerra.

Por otro lado, la Triple Entente, estaba formada por Rusia, Reino Unido y Francia. Fue una
alianza que se hizo como consecuencia del creciente poder que Alemania y sus aliados
estaban desarrollando. La guerra se transforma en una lucha de gobiernos democráticos
(quitando a la Rusia zarista) contra gobiernos de tipo Antiguo Régimen.

Causa detonante de la Gran Guerra

El imperialismo que las potencias involucradas estaban desarrollando décadas atrás fue la


causa subyacente principal. Sin embargo, se conoce como el detonante o Casus belis de la
Gran Guerra, el atentado ocurrido en Bosnia el 28 de junio de 1914. En esta fecha es
asesinado en Sarajevo el archiduque de Austria Francisco Fernando y su esposa Sofía.

Un conjunto de jóvenes nacionalistas planifica el atentado en contra del archiduque, pero el


primer intento falla. Cuando Francisco Fernando se dirigía a visitar a los heridos del
atentado, se encuentra con Gavrilo Princip. El joven integraba la banda nacionalista
llamada Mano Negra, por lo que saca un arma de fuego, hiriendo mortalmente al
archiduque y a su esposa.

Crisis de julio

Francisco Fernando era el heredero al trono del Imperio austrohúngaro, su asesinato genera
una crisis durante el mes de julio de aquel año. Austria-Hungría exige a Serbia que
responda al atentado con alguna aclaratoria.

Al no recibir respuesta de Serbia, el Imperio Austrohúngaro le declara la guerra el 28 de


julio de 1914. Un par de días después, Rusia moviliza sus tropas para apoyar a Serbia.
Comienzan a cumplirse los tratados que se habían firmado anteriormente por estas grandes
potencias.

El segundo día del mes de agosto, el Imperio Otomano se compromete secretamente con
Alemania y el día 3 de agosto el Imperio Alemán le declara la guerra a Francia.
Desarrollo de la Primera Guerra Mundial

Alemania y Austria-Hungría componían un bloque territorial importante, con el fin de


evitar enfrentamientos por cualquiera de los frentes. Alemania decide invadir Bélgica y
poner en práctica el Plan Schlieffen. Este plan buscaba invadir y derrotar a Francia en
agosto de 1914.

Con la invasión de Bélgica, Reino Unido declara la guerra a Alemania. Los alemanes son
detenidos por Francia y por la Fuerza Expedicionaria Británica, después de enfrentarse en
la batalla del Marne en septiembre.

La Guerra de movimientos

El mes de agosto se mantuvo en constantes declaraciones de guerra y recurrentes conflictos


entre las naciones que estaban involucradas. Austria-Hungría ataca Rusia. Reino Unido y
Francia se oponen a Austria. Japón declara la guerra a los alemanes y Austria a su vez se la
declara a Japón. Después se suman otros países, como Estados Unidos y algunas colonias
de África.

Toda esta situación genera el movimiento de las tropas de ambas alianzas en distintos
puntos de Europa, en donde ocurrían los enfrentamientos militares. Por este motivo se le
conoce a esta época la Guerra de movimientos.

Frente occidental

El Frente Occidental se abre después de que Alemania invade Bélgica y Luxemburgo,


consiguiendo el control militar de zonas industriales francesas. El avance del Imperio sufre
un dramático giro después de la batalla de Marne, en donde la alianza anglo–francesa
resulta vencedora.

Tanto las Potencias Centrales como los Aliados se establecen en una línea sinuosa entre
trincheras fortificadas, que se van extendiendo desde el Mar del Norte hasta llegar a los
límites fronterizos entre Suiza y Francia. Esta línea se mantiene estática a lo largo de la
mayor parte del enfrentamiento mundial, siendo la zona donde más muertes ocurren.

Estabilización del Frente Occidental en 1914.

Entre 1915 y 1917, grandes ofensivas se desarrollaron a lo largo de este frente. Los ataques
eran violentos, sangrientos y brutales, pero no se lograban avances significativos. Las
batallas más costosas de estas ofensivas fueron: la de Verdún, del Somme y de
Passchendaele, respectivamente con 700.000, 1.000.000 y 600.000 fallecidos.

Aunque el estancamiento fue marcado en este frente, el escenario resultó decisivo. El


avance ineludible de los Aliados en 1918 fue lo que convenció a Alemania de que era
inevitable la derrota.
Frente Oriental

El Frente oriental o de Europa Oriental, fue otro de los frentes europeos importantes en esta
guerra. Se ubicaban en Europa Central y Oriental y era muchísimo más extenso que el
Frente Occidental.

Después del atentado de Sarajevo (asesinato del archiduque y heredero al trono, Francisco


Fernando de Austria-Hungría, junto a su esposa), el Imperio austrohúngaro invade Serbia
apoyado por Alemania a fines de julio. Rusia, aliada de Serbia, les declara la guerra a
ambas naciones y abre este frente en 1914. Obtiene varias victorias sobre Austria-Hungría,
invade Prusia Oriental, pero es derrotado por alemanes en la batalla de Tannenberg al poco
tiempo. Rusia resiste al ataque alemán pero sus conflictos internos van en aumento, la
Revolución está llegando.

Guerra de las Trincheras (1915-1916)

La Guerra de Trincheras fue una serie de enfrentamientos bélicos que se desarrollaron a lo


largo del Frente Occidental entre 1915 y 1916. Los dos bandos habían formado una línea
de trincheras de difícil acceso que mantuvieron a salvo a muchos combatientes.

Esta decisión hizo que los enfrentamientos se hicieran cada vez más complejos y
prolongados. Las trincheras eran una protección, por lo que debieron usar armamento cada
vez más pesada y los duelos eran más sangrientos.

El conflicto se fue prolongando y se mantuvo estancado por un tiempo. En septiembre de


1916, franceses y alemanes intentan atravesar el frente y se desarrolla un enfrentamiento en
Verdún (donde se enfrentaron dos millones de soldados, un millón perdió la vida), pero la
defensiva francesa no permite que los alemanes tomen la ciudad. A lo largo de este
proceso, Italia se separa de Alemania y Austria-Hungría y se une a la Triple Entente.

Guerra submarina

Para el año 1916 se origina además una guerra submarina entre las potencias. Se
enfrentaron la armada británica y la alemana en una batalla conocida como Jutlandia en el
mes de mayo. Los submarinos se volvieron un arma importante ya que se buscaba atacar a
los barcos que abastecían con armas y alimentos a las potencias enemigas.

Como consecuencia de este enfrentamiento, surgen restricciones en las siguientes guerras


submarinas, debido al hundimiento de varias embarcaciones aliadas, especialmente
Lusitana que pertenecía a Norteamérica. En el año 1917, Estados Unidos le declara la
guerra a Alemania y participa en la Guerra apoyando a la Triple Entente.

Fin de la Primera Guerra Mundial

Una vez que Rusia se retira de los combates, a causa de los conflictos internos generados
por la revolución, Alemania puede desplegarse a sus anchas en el Frente Occidental. Sin
embargo, la entrada de Estados Unidos y la participación de la Fuerza Expedicionaria
liderada por John J. Pershing, hace que la Triple Entente logre sobreponer su poder con
mayor número de soldados, armas y recursos bélicos.

Tropas francesas aseguran una posición

Finalmente, el ejército de la Triple Entente en manos de Ferdinand Foch, se hallaba más


reforzado y mejor equipado que el de la Alianza. Estos últimos estaban muy agotados y no
contaban con recursos suficientes. Las consecuencias fueron que no fueron capaces de
invadir París para junio de 1918 y pierden la segunda batalla del Marne.

Al mismo tiempo, los imperios centrales fueron rápidamente derrocados. El Imperio


otomano no pudo evitar la derrota por los británicos, mientras Italia logra la victoria en
contra de Austria-Hungría en la batalla de Vittorio Veneto. Frente a esta derrota, Austria-
Hungría firma un armisticio.

Por su parte, Alemania estaba atravesando una gran crisis política y social, surgiendo la
insurrección obrera de Berlín. Esto lleva a que el emperador Guillermo II dimitiera y se
estableciera un gobierno de carácter provisional en la República de Alemania. El
nuevo gobierno alemán, el 11 de noviembre de 1918, firma un armisticio (de
Compiègne), dando fin a este descomunal conflicto.

El Tratado de Versalles pone fin formal a la Gran Guerra el 28 de junio de 1919, e impone


un duro castigo a Alemania, ya que la considera la causante de la guerra. Esto generará
conflictos futuros que llevan a la Segunda Guerra Mundial.

Causas de la Primera Guerra Mundial

Se pueden enumerar varios aspectos que causaron la Primera Guerra Mundial. Sin
embargo, puede decirse que la raíz de todo se encontraba en la intrincada red de
alianzas que se produjo entre las grandes potencias europeas y la defensa de sus intereses
egoístas. La desconfianza entre la Triple Entente y la Triple Alianza, además de la
militarización de ambos bandos, fue el caldo de cultivo de este conflicto mundial.

El detonante se adjudica inevitablemente al asesinato del archiduque Francisco de Austria,


porque fue el motivo tangible que encontró Austria-Hungría para declarar la guerra a
Serbia y fue el comienzo de una serie de conflictos entre los distintos bandos.

Los motivos que impulsaban a estas grandes potencias a enfrentarse pueden resumirse de la
siguiente manera:

 La competencia armamentista que las distintas potencias tenían entre sí. Todas querían
poseer la última tecnología bélica y esto se evidenció en la sangrienta guerra que se
desarrolló.
 El deseo intenso de las potencias por colonizar tierras que les permitieran obtener
recursos, todos querían ser los dueños de alguna porción del territorio del contiene.
 El nacionalismo fue otro de los motivos que impulsó la guerra, los países desarrollaron
un espíritu nacionalista que los hacía creer mejores que otras naciones. En el fondo de
este sentimiento estaba la teoría del darwinismo social, cuyo ideólogo es Herbert
Spencer.
 Para proteger sus colonias alrededor del mundo, las grandes potencias
europeas formaron alianzas con otras iguales, haciéndose cada vez más poderosas.

Consecuencias de la Primera Guerra Mundial

Los estragos de la Gran Guerra fueron innumerables y alcanzaron niveles elevadísimos. El


mundo no volvió a ser el mismo después de esta guerra, la historia del siglo XX no puede
entenderse sin este conflicto.  Las consecuencias de este terrible conflicto que oscureció la
historia de la humanidad se pueden dividir de la siguiente manera:

Consecuencias políticas

 El ámbito político fue uno de los más afectados por la Gran Guerra. Cuando finaliza el
conflicto, cuatro de los grandes imperios habían dejado de existir: el alemán, el ruso, el
austrohúngaro y el otomano.
 Nuevos estados ven la luz a causa de la nueva organización política a nivel mundial:
Checoslovaquia, Estonia, Finlandia, Hungría, Lituania, Polonia y Yugoslavia.
 En 1918 la Revolución se enseñoreó de toda la Europa central y suroriental (como
ocurrió en Rusia en 1917).

Consecuencias económicas

 Hubo pérdidas estructurales y materiales de gran envergadura en muchos países:


ferrocarriles, carreteras, puentes y otros tipos de infraestructura.
 Aparece la mano de obra femenina a causa de que la masculina estaba sirviendo en el
ejército, esta se destaca en la producción de alimentos para los ejércitos en guerra.
 La guerra causó gastos elevados en los países que participaron, esto afectó directamente
la economía de las naciones.
 Estados Unidos y Japón no se vieron tan involucrados en la guerra y fueron de los
menos afectados, por lo que empiezan a convertirse en potencias económicas que
ofrecían bienes y créditos a los que sí fueron afectados.

Consecuencias sociales

Las consecuencias sociales fueron sencillamente devastadoras y sin precedentes:

 Se perdió la vida de más de 18 millones de personas, entre soldados y civiles.


 La pérdida masculina fue tal que se originó una crisis en la natalidad y superpoblación
femenina, encargada en aquel entonces de los trabajos masculinos.
 Hay fuertes razones para creer que la derrota alamana fue el incentivo de Adolf
Hitler para llevar a cabo el Holocausto Judío. Él culpaba a los judíos de la derrota en la
guerra.
Consecuencias territoriales

Los cambios territoriales fueron grandes, entre los más importantes están:

 Alemania pierde entre el 13% – 16% del territorio.


 Polonia se restablece como estado independiente.
 Se forman nuevos estados, como Austria, Checoslovaquia y Yugoslavia.
 Aparece Hungría como estado independiente.
 El imperio Otomano pierde la zona del Líbano, Palestina, Irak y Siria, quedando solo
con Estambul.

Segunda guerra mundial

La Segunda Guerra Mundial fue un conflicto militar global que se desarrolló entre 1939 y


1945. En ella se vieron implicadas la mayor parte de las naciones del mundo incluidas todas
las grandes potencias, así como prácticamente todas las naciones europeas agrupadas en
dos alianzas militares enfrentadas: Los Aliados, por un lado, y las potencias del Eje, por
otro. Fue la mayor contienda bélica de la historia, con más de 100 millones
de militares movilizados y un estado de guerra total en que los grandes contendientes
destinaron toda su capacidad económica, militar y científica al servicio del esfuerzo bélico,
borrando la distinción entre recursos civiles y militares. Marcada por hechos de enorme
repercusión que incluyeron la muerte masiva de civiles (el Holocausto, los bombardeos
intensivos sobre ciudades y el uso, por primera vez en un conflicto militar, de armas
nucleares), la Segunda Guerra Mundial fue la más mortífera de la historia, con un resultado
de entre 50 y 70 millones de víctimas, el 2,5 % de la población mundial.

El comienzo del conflicto se suele situar en el 1 de septiembre de 1939, con la invasión


alemana de Polonia, cuando Hitler se decidió a la incorporación de una de sus
reivindicaciones expansionistas más delicadas: El Corredor Polaco, que implicaba la
invasión de la mitad occidental de Polonia; la mitad oriental, junto con Estonia, Letonia y
Lituania fue ocupada por la Unión Soviética, mientras que Finlandia logró mantener su
independencia de los soviéticos (guerra de Invierno). El Reino Unido y Francia le
declararon la guerra a Alemania, que esperaban como una repetición de la guerra de
trincheras (guerra de mentira) para la que habían tomado toda clase de precauciones (línea
Maginot) que demostraron ser del todo inútiles. Las maniobras espectaculares de
la blitzkrieg (guerra relámpago) proporcionaron en pocos meses a Alemania el control
de Noruega, Dinamarca, Países Bajos, Bélgica y la propia Francia, mientras que el ejército
británico escapaba in extremis desde las playas de Dunkerque durante la batalla de Francia.
La mayor parte del continente europeo estaba ocupado por el ejército alemán o por sus
aliados, entre los que destacaba la Italia fascista, cuya aportación militar no fue muy
significativa (batalla de los Alpes, guerra greco-italiana).

La batalla de Inglaterra, la primera completamente aérea de la historia, mantuvo durante el


periodo siguiente la presión sobre el nuevo gobierno de Winston Churchill, decidido a la
resistencia (sangre, sudor y lágrimas) y que finalmente venció, entre otras cosas gracias a
una innovación tecnológica (el radar) y al decisivo apoyo estadounidense, que negoció en
varias entrevistas con Franklin D. Roosevelt (Carta del Atlántico, 14 de agosto de 1941).
En 1941, la necesidad estratégica de ocupar los campos petrolíferos del Cáucaso impulsó a
Alemania a invadir la Unión Soviética (operación Barbarroja), inicialmente exitosa, pero
que se estancó en la batalla de Moscú y los sitios de Leningrado y Stalingrado. Al mismo
tiempo, Japón, en su campaña de expansión por Asia y en venganza por el embargo
económico que el gobierno estadounidense les había impuesto, atacó Pearl Harbor el 7 de
diciembre de 1941; la agresión precipitó la entrada de Estados Unidos en la guerra. Pocos
meses después, la batalla de Midway (en julio de 1942) marcaría un punto de inflexión en
la guerra del Pacífico ante el debilitamiento de la capacidad de combate japonesa frente a
los estadounidenses. En el norte de África, los británicos frenaron el avance de los Afrika
Korps alemanes desde Libia hacia Egipto en la batalla de El Alamein (1942), después de
la invasión italiana al canal de Suez (1940).
El periodo final de la guerra se caracterizó por las complejas operaciones necesarias para
los desembarcos aliados en Europa (Sicilia, en julio de 1943; Anzio, en enero de
1944; Normandía, en junio de 1944) y por el hundimiento del frente oriental, en el que se
libraron las operaciones con tanques más encarnizadas de la historia (batalla de Kursk,
especialmente en Projorovka, julio de 1943), mientras en el frente occidental los alemanes
experimentaban armas tecnológicamente muy desarrolladas (misiles V-1 y V-2) y
soportaban bombardeos destructivos sobre sus ciudades a una escala nunca antes vista
(bombardeo de Dresde, en febrero de 1945) y la destrucción total de su capital (batalla de
Berlín, entre abril y mayo de 1945).
En el frente del Pacífico, los estadounidenses tuvieron que desalojar isla a isla a los
japoneses, tanto en el sur del Pacífico (Guadalcanal, en agosto de 1942) como
en Filipinas (Manila, en febrero de 1945); tras librar las mayores batallas navales de la
historia (batalla del Mar del Coral, en mayo de 1942; batalla del Golfo de Leyte, en octubre
de 1944), alcanzaron tierras niponas (Iwo Jima, en febrero de 1945 y Okinawa, en abril de
1945). En agosto de 1945, el presidente de Estados Unidos, Harry S. Truman ordenó
bombardear con las recién inventadas armas nucleares las ciudades de Hiroshima y
Nagasaki. La devastación causada por el ataque, que a la larga se cobraría la vida de 250
000 personas, precipitó la capitulación de Japón.
A diferencia de la Primera Guerra Mundial, la rendición (tanto la japonesa como
la alemana) se produjo por derrota incondicional, sin pasar por ningún tipo de negociación.
Las conversaciones decisivas fueron las que plantearon la división de Europa en zonas de
influencia entre los aliados, y que se negociaron en sucesivas cumbres (conferencia de
Teherán, el 1 de diciembre de 1943; conferencia de Yalta, en febrero de 1945;
y conferencia de Potsdam, en julio de 1945).
La Segunda Guerra Mundial alteró las relaciones políticas y la estructura social del mundo.
Tras la conflagración, se fundó la Organización de las Naciones Unidas con el fin de
fomentar la cooperación internacional y de prevenir potenciales conflictos. La Unión
Soviética y Estados Unidos se erigieron como superpotencias rivales, estableciéndose el
escenario para la Guerra Fría, que se prolongó durante los siguientes 46 años. Al mismo
tiempo, la influencia de las grandes potencias europeas entró en decadencia, materializada
en el inicio de la descolonización de Asia y África. La mayoría de los países cuyas
industrias habían sido perjudicadas abordaron la recuperación económica con la ayuda
financiera del país americanos (plan Marshall), mientras que la integración política emergía
como un esfuerzo para establecer las relaciones de posguerra.
Causas de la Segunda Guerra Mundial
Como toda guerra, la Segunda Guerra Mundial se debió a razones variadas y
complejas, que pueden resumirse en:

 Los términos del tratado de Versalles. La rendición de Alemania y sus aliados al


término de la Primera Guerra Mundial les impuso un tratado de rendición
incondicional sumamente opresivo, que le impedía a la nación devastada por la
guerra volver a tener un ejército, le arrebataba el control de sus colonias africanas y le
imponía una deuda impagable con los países victoriosos.
 El surgimiento del fascismo. Adolfo Hitler en Alemania (nazismo) y
Benito Musolini en Italia (fascismo), principalmente, aprovecharon el descontento
popular y construyeron movimientos nacionalistas extremistas, buscando recuperar las
glorias nacionales mediante la militarización de amplios sectores sociales, la
instauración del totalitarismo y la expansión de las fronteras nacionales.
 Las tensiones chino-japonesas. Después de la Primera Guerra Sino-japonesa (1894-
1895), Japón se había convertido en una potencia imperial que no veía con buenos ojos
a China y la Unión Soviética. Aprovechando en 1932 la debilidad en que la Guerra
Civil entre comunistas y republicanos había dejado a China, Japón inició una Segunda
Guerra Sino-japonesa y ocupó Manchuria, expandiéndose luego por el Asia menor
hasta verse enfrentado por los Estados Unidos.
 La invasión alemana de Polonia. Alemania inició su expansión territorial tomando
Austria y parte de Checoeslovaquia, sin que hubiera mayores conflictos. Cuando en
1939 Hitler estableció un pacto con la URSS para repartirse el territorio polaco y
procedió a invadirlo, las naciones occidentales europeas le declararon la guerra, dando
inicio al conflicto como tal.

Consecuencias de la Segunda Guerra Mundial


Las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial fueron particularmente atroces. Algunas
de ellas fueron:

 Devastación casi total de Europa. Se dieron extensos y devastadores


bombardeos aéreos de las principales ciudades europeas, primero cuando los alemanes
conquistaban el continente y luego cuando los aliados lo liberaban, lo cual se tradujo en
una destrucción casi total de las mismas. Esto requirió luego grandes inversiones
económicas para su paulatina reconstrucción, como el llamado Plan Marshall propuesto
por los Estados Unidos.
 Inicio de un mundo bipolar. Las potencias europeas tanto Aliadas como del
Eje quedaron, al final del conflicto, tan debilitadas económica y políticamente que la
conducción de la política mundial pasó a las dos nuevas superpotencias: los Estados
Unidos y la Unión Soviética, dando así inicio a la llamada Guerra Fría.
 División de Alemania. Una vez derrotada Alemania, su territorio pasó a control de los
países aliados y de la URSS,  por lo que se dividió al país en dos naciones
completamente distintas: la República Federal Alemana, con sistema capitalista y bajo
control norteamericano, y la República Democrática Alemana, con sistema comunista y
bajo administración soviética. Alemania volvería a unificarse en 1991, tras la caída del
muro de Berlín.
 Surgimiento de nuevas tecnologías. Tecnologías hoy comunes como la televisión,
las computadoras, el sonar, el vuelo a reacción o la energía atómica deben su
descubrimiento a esta cruenta guerra.
 Descolonización. La pérdida de poder político y económico de Europa llevó a la
pérdida de control de sus colonias en el Tercer Mundo, permitiendo así numerosos
procesos de independencia.
 La muerte de entre 55 y 70 millones de personas. Contando militares y
civiles, indistintamente, millones de los cuales lo hicieron en condiciones infrahumanas
en campos de concentración y exterminio.

Países participantes
Los dos bandos enfrentados fueron:

 Las potencias del eje. Conducidas por la Alemania nazi, la Italia fascista y el Japón
imperial, junto a sus socios de Bulgaria, Hungría, Rumanía, y estados co-
beligerantes como Finlandia, Tailandia, Irán e Irak.
 Los países aliados. Integrados por Francia, Gran Bretaña, Estados Unidos y la Unión
Soviética, así como Polonia, China, Noruega, Dinamarca, Bélgica, Luxemburgo, Países
Bajos, Grecia, Yugoslavia, Canadá, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Australia y,
posteriormente, algunos países de participación minoritaria, pero apoyo diplomático a
los aliados.

También podría gustarte