Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
RESUMEN
La revisión del texto de la quinta edición del Manual Diagnóstico y Estadístico (DSM-5-TR, por sus siglas en inglés) de la
Asociación Americana de Psiquiatría (APA, por sus siglas en inglés) fue publicada en marzo de 2022. La publicación de cada
versión del DSM genera reacciones inmediatas que aumentan la curiosidad, abren nuevos (y viejos) debates y promueven la
discusión entre distintos sectores. En este artículo presentamos un resumen de los principales antecedentes históricos del DSM,
así como algunas críticas y reflexiones que han surgido alrededor de la publicación de cada manual. También, presentamos los
principales cambios incluidos en el DSM-5-TR en comparación con el DSM-5. Por último, hacemos comentarios finales
reflexionando sobre si era necesaria la publicación de una nueva versión del DSM o no.
PALABRAS CLAVE: DSM-5-TR, Diagnóstico, Trastorno mental, Clasificación, Historia.
ABSTRACT
The text revision of the fifth edition of the Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM-5-TR) of the American
Psychiatric Association (APA) was published in March 2022. The publication of each version of the DSM generates immediate
reactions that increase curiosity, open new (and old) debates and promote discussion among different sectors. In this article we
present a summary of the main historical background of the DSM, as well as the criticisms and reflections that have arisen around
the publication of each manual. In addition, we present the main changes included in the DSM-5-TR compared to the DSM-5.
Lastly, we make final remarks on whether the publication of a new version of the DSM was necessary or not.
KEYWORDS: DSM-5-TR, Diagnosis, Mental disorder, Classification, History.
Correspondencia de este artículo debe ser dirigida a Dr. Juan Aníbal González-Rivera, Psy.D. E-mail: jagonzalez@psm.edu
| REVISTA PUERTORRIQUEÑA DE PSICOLOGÍA | V. 33 | No. 2 | PP. 302 – 317 | JULIO – DICIEMBRE | 2022 | ISSN 1946 – 2016 |
DSM-5-TR: Antecedentes históricos y descripción general de los principales cambios
al., 1917), por lo que, con el apoyo del Comité aspectos sociodemográficos como raza, nivel
Nacional de Higiene Mental se publicó el económico y estado marital, entre otros
primer manual estandarizado de nosología (Fischer, 2012). La APA decidió contribuir con
psiquiátrica: Manual Estadístico para el Uso de la reducción del caos clasificatorio existente
las Instituciones para los Enfermos Mentales publicando esta primera versión. Contaba con
(APA, 1918). 132 páginas e incluía 128 categorías
organizadas en un sistema jerárquico que
La Segunda Guerra Mundial (1939-1945) diferenciaba los trastornos de origen orgánico
implicó un reenfoque sobre los trastornos de los funcionales a un precio de tres dólares
mentales, principalmente por las observa- (Blashfield et al., 2014). Tenía un distintivo y
ciones de psiquiatras que servían en la milicia predominante enfoque psicodinámico (carac-
estadounidense. En ese período, se pudieron terístico de la psiquiatría estadounidense de
notar grandes diferencias en los resultados de ese entonces) que enfatizaba en los conflictos
intervenciones realizadas fuera del contexto entre pulsiones y factores estresores. Gran
hospitalario; además, reafirmaron la impor- parte de los diagnósticos contenían termino-
tancia de integrar los modelos psicoanalítico y logías que hoy se consideran problemáticas;
psicodinámico, pues proveían beneficios por ejemplo, cada enfermedad era denomi-
significativos en estados mentales alterados nada una “reacción” (Fischer, 2012), término
por el estrés ambiental de la guerra (Grob, altamente influenciado por una de las más
1991). En la posguerra surgió una mayor notables figuras de la historia de la psiquiatría,
preocupación sobre las enfermedades Adolf Meyer (Pressman, 1997).
mentales y la diversidad de poblaciones que
las padecían, ya que no se limitaban al Su visión psicobiológica de los trastornos
contexto hospitalario. Esto provocó que, en mentales como representaciones de las
1946, se creara el Grupo para el Avance de la reacciones de la personalidad a factores
Psiquiatría con el fin de reorganizar la psicológicos, sociales y biológicos, fue notable
estructura de la APA. Tradicionalmente, los en la redacción del manual (APA, 2022b). El
enfoques diagnósticos eran hacia la patología, DSM-I fue una variante del CIE-6, publicado
sin embargo, psiquiatras de la posguerra, por la Organización Mundial de la Salud (OMS)
aunque no rechazaban esta orientación, y fuertemente influenciado por las contribu-
empezaron a priorizar aspectos psicodinámi- ciones de la milicia estadounidense y la
cos, integrando una terminología distinta a la Administración de Veteranos tras las Segunda
usual en su práctica clínica. Así pues, la Guerra Mundial (APA, 2022b). Aun así,
proliferación de la confusión nosológica junto existían diferencias notables y significativas
con la gran influencia psicodinámica y psico- entre los esquemas de clasificación del CIE-6
analítica llevaron a que el Comité de Nomen- y el DSM-I, y no fue hasta publicaciones
claturas y Estadísticas de la APA, en 1948, posteriores que lograron un acercamiento más
pospusiera los cambios al manual para solicitar equilibrado (Kawa & Giordano, 2012).
sugerencias para las modificaciones. Después
de las revisiones necesarias, fue sometido al DSM-II (1968)
Consejo de la APA en 1950 el Manual
Estadístico y Diagnóstico de los Trastornos Aun con los esfuerzos realizados para
Mentales (DSM-I) para su publicación final en clasificar los trastornos mentales y acercarse a
1952 (Grob, 1991). una nosología psiquiátrica unificada, no existía
una aceptación generalizada del listado de
DSM-I (1952) trastornos provistos por el CIE-6 (OMS, 1948)
y el CIE-7 (OMS, 1957). Fue por esto que la
El propósito principal de su creación fue OMS patrocinó una revisión extensa para
reportar información estadística de hospitales atender esta problemática; el proceso fue
estatales de los Estados Unidos considerando dirigido por el psiquiatra Erwin Stengel (APA,
2022b). Mientras la comunidad internacional elaborado usando como base los criterios
producía el CIE-8 (OMS, 1968), la encomienda diagnósticos para la investigación psiquiátrica
principal para la APA fue la actualización del de Feighner et al. (1972) y su modificación
DSM para que fueran compatibles (Gruenberg, subsecuente, los “Criterios Diagnósticos de
1969). El DSM-II fue publicado en 1968 y fue Investigación” (RDC, por sus siglas en inglés)
notable, desde su introducción, el interés por (Fischer, 2012).
implementar terminología psiquiátrica. Los
cambios en el campo en las décadas de los 50 Otro de los aspectos controversiales que
y 60, así como las preocupaciones sobre marcó la evolución de los paradigmas de la
adquirir un lenguaje legítimo e internacional se época de esta edición fue la remoción oficial
ven reflejados en el manual (Fischer, 2012). El del término “neurosis”, aunque esta enmienda
trabajo colaborativo entre la OMS y psiquiatras fue parcialmente realizada. Después de
estadounidenses se evidenció en el claro intensos debates en la comunidad científica se
acercamiento al alineamiento entre el DSM-II y incluyó el término “trastorno neurótico” como
el CIE-8 (Kawa & Giordano, 2012). No una medida de reestructuración y reorganiza-
obstante, la ronda de revisiones que llevó a ción de previos trastornos conceptualizados
estas publicaciones no consideró las recomen- bajo términos psicodinámicos (Kawa &
daciones de Stengel, por lo que el DSM-II fue Giordano, 2012). Del mismo modo, la remoción
muy similar al DSM-I, pero con la remoción del oficial y permanente de la categoría
término psicodinámico “reacción” (APA, “homosexualidad” del DSM-II fue una de las
2022b). Aunque las ideas psicodinámicas se enmiendas de mayor impacto para el DSM-III
mantuvieron en el manual, el retiro del término (aunque este cambio ya se había decidido por
“reacción” fue un buen inicio para evolucionar votación en la APA desde la séptima impresión
a un sistema ateórico (Fischer, 2012). del DSM-II en 1973) (Mayes & Horwitz, 2005).
listado de propuestas revolucionarias que revisarlo para que fuera compatible con el CIE-
Spitzer pactó con todas las partes y fueron 9, sus alcances llegaron a especialidades
aceptadas por la APA (Tyrer, 2018). médicas más allá de la psiquiatría, identifi-
cando problemas que provocaron que esta vez
Del mismo modo que las ediciones fuera el CIE-9 el que hiciera esfuerzos para ser
anteriores, el desarrollo del DSM-III se realizó compatible con el DSM (Fischer, 2012).
en coordinación con el CIE-9 (publicado en
1975); después de varios años de esfuerzos y DSM-III-R (1987)
con resultados innovadores se publicó el DSM-
III en 1980 (APA, 2022b). Los avances en el A tan solo tres años de la publicación del DSM-
conocimiento de los trastornos mentales eran III, en 1983, se inició su revisión. Esta vez el fin
notables para este entonces. Esto fue fue reexaminar la utilidad del manual desde
evidenciado por el alto número de categorías una perspectiva clínica, principalmente por
de trastornos mentales que se elevó de 182 aquellos diagnósticos no probados (por
(contenidos en el DSM-II) a 265 en esta ejemplo, “niño atípico”) y para integrar la
edición, incluyendo el espectro de la esquizo- experiencia clínica a los diagnósticos
frenia que se ampliaba de 14 a 18 categorías establecidos por la investigación (Fischer,
(Kawa & Giordano, 2012). Además, el DSM-III 2012). Evidencia empírica en muchos trabajos
contaba con casi 500 páginas, en comparación de investigación puso de manifiesto las fallas
con las 119 y 132 de sus predecesores DSM-I en los criterios diagnósticos del DSM-III, por lo
y DSM-II respectivamente (Kawa & Giordano, que las autorías decidieron actualizarlos
2012). (Blashfield et al., 2014). Spitzer y colegas
(1990) crearon entrevistas clínicas estructura-
A diferencia de las descripciones cortas de das para apoyar la medición de varios as-
los pasados manuales, el DSM-III incluía pectos diagnósticos de los trastornos mentales
criterios diagnósticos para especificar cada que fueron incluidas en el DSM-III-R. Así pues,
categoría, descripciones de perfiles demográ- después de las revisiones y correcciones
ficos y diferencias entre una categoría y otra; pertinentes, fue publicado el DSM-III-R en
todo expuesto de manera amplia (Blashfield et 1987 (APA, 2022b) con un total de 253 catego-
al., 2014). Otros cambios revolucionarios en rías, de las que 174 se definían utilizando
esta edición fueron: 1) el uso de listas de criterios diagnósticos (Blashfield et al., 2014).
verificación de características de los diagnósti-
cos (a diferencia de las comparaciones proto- La tendencia a especificar los criterios
típicas del DSM-I y DSM-II), 2) proveyó la operacionalmente se hizo más pronunciada,
definición de trastorno mental, y 3) introdujo el añadiendo información acerca de la preva-
sistema multiaxial (cinco ejes para atender las lencia, comorbilidad, diferencias por sexo y
áreas de: síndromes clínicos y códigos V; edad, entre otros (Kawa & Giordano, 2014). El
trastornos de personalidad y destrezas DSM-III-R conservó en su estructura el sistema
académicas; trastornos físicos; severidad de multiaxial, el uso de criterios diagnósticos y la
estresores psicológicos; nivel de funciona- organización en familias de trastornos
miento adaptativo) (Fischer, 2012). La publica- mentales del DSM-III, sin embargo, su sistema
ción del DSM-III representó un giro revolú- de clasificación cambió significativamente en
cionario en la historia de la psiquiatría sus especificaciones y detalles, convirtiéndolo
americana, llegando a ser considerado como no solo en una versión revisada sino en un
“el consenso final” por haber logrado facilitar el nuevo sistema de clasificación (Blashfield et
uso de un lenguaje común entre profesionales al., 2014). Entre estos aspectos más precisos,
de la salud y mostrando el favor incluso de detallados y expandidos están las modifica-
exponentes de la tradición psicodinámica ciones al sistema multiaxial, destacándose el
(Kawa & Giordano, 2012). El impacto del DSM- cambio en el Eje V que, en esta versión
III fue tal, que, aunque su objetivo inicial fue utilizaba una Escala de Funcionamiento Global
(APA, 1987). Esta versión también se los diagnósticos tuvieron modificaciones, solo
distinguió por continuar los pasos para algunas fueron significativas si las
despatologizar la homosexualidad, eliminando comparamos con el DSM-III-R (Fischer, 2012).
el término “homosexualidad egodistónica” El grupo de trabajo del DSM-IV tuvo una
(incluido en el DSM-III) (Fischer, 2012). alianza colaborativa con las personas
creadoras del CIE-10 (1993), resultando en
DSM-IV (1994) una mayor congruencia entres sistemas
clasificatorios (APA, 2022b). Cabe destacar
En 1988 (a tan solo un año de la publicación que, desde el anuncio de los preparativos para
del DSM-III-R), ya se iniciaban los esfuerzos la publicación del DSM-IV, hubo objeciones y
de la APA para preparar el DSM-IV. Esta protestas, destacándose las del psiquiatra
versión del manual estuvo a cargo del Zimmerman (1989), quien resaltó lo problema-
reconocido psiquiatra Allen Frances, quien, al tico de haber publicado tres manuales en doce
momento de esta publicación, es profesor y años y por la insuficiencia del tiempo de
presidente emérito del Departamento de investigación para reflejar cambios sustan-
Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento de ciales. Estas y otras inquietudes –como el
la Facultad de Medicina de la Universidad de cuestionar los esfuerzos persistentes por hacer
Duke. La intención esta vez era sustentar con el CIE y el DSM compatibles siendo tan
la mayor cantidad de evidencia científica y diferentes– nunca fueron respondidas adecua-
empírica los diagnósticos, ya que, en el DSM- damente por los líderes de las revisiones del
III-R, aun utilizando los criterios de Freighner y manual (Fisher, 2012).
el RDC, la mayoría eran resultado de opiniones
de expertos (Fischer, 2012). Así pues, en DSM-IV-TR (2000)
1994, después de seis años de trabajo de
investigación que involucró a más de mil Aunque se suponía que el DSM-IV no tuviera
personas y organizaciones profesionales, y modificaciones en los criterios diagnósticos
luego de extensas revisiones de literatura que hasta el 2010 (año proyectado para la
sentaron bases empíricas firmes para su publicación del DSM-5), la APA decidió
modificación, se publicó el DSM-IV (APA, actualizar el texto asociado a cada diagnóstico
2022b). Se realizaron más de 150 revisiones debido a los avances en las investigaciones
de literatura y además se condujeron ensayos ocurridas de 1992 a 1998 (Fischer, 2012). Este
de campo que consistían en entrevistas, fue publicado en el 2000, con correcciones
encuestas, grabaciones y otros estudios menores en la redacción de los criterios
enfocados en analizar los criterios alternativos relacionados a los trastornos del desarrollo,
propuestos (Widiger et al., 1991). tics y parafilias (APA, 2000) y con cambios en
la sección de “características asociadas” que
El resultado fue un aumento en las integraban hallazgos asociados a pruebas de
categorías diagnósticas a 383, de las que 201 laboratorio, edad, cultura, género, curso y
se definían usando criterios diagnósticos; prevalencia (First & Pincus, 2002). Para evitar
además, la cantidad de páginas aumentó a 886 confusión de ser considerada una versión
(Blashfield et al., 2014). Debido a la amplitud revisada del DSM-IV, la APA decidió nombrarlo
de las revisiones de literatura, pruebas de DSM-IV-TR (Texto Revisado) para hacer la
campo y estudios realizados previo a su distinción de una versión que revisaba solo el
publicación, se añadieron cinco volúmenes texto (First & Pincus, 2002). Esta versión no
para incluir esta evidencia científica, conocidos estuvo exenta de controversias, múltiples
como “Libros de Referencias” (Source Books), profesionales cuestionaron si las razones para
que daban apoyo al DSM-IV (Fischer, 2012). una nueva edición eran justificables o si
Esta versión tuvo múltiples cambios en los pudieron haber publicado las actualizaciones
conjuntos diagnósticos y en sus descripciones en boletines informativos o impresiones
(APA, 2022b), sin embargo, aunque casi todos subsecuentes del DSM-IV. Además, resaltaron
las cuantiosas ganancias millonarias que contenido de las 947 páginas del manual
obtiene la APA con el lanzamiento de cada abarcaba 541 categorías diagnósticas de las
manual dejando reflexiones abiertas a todo tipo que 151 se definían usando criterios
de debates (Blashfield et al., 2014; Fischer, diagnósticos (Blashfield et al., 2014). Cabe
2012). destacar que, además de incorporar nuevos
trastornos (como el de Trastorno Disruptivo del
DSM-5 (2013) Estado de Ánimo), la remoción de otros (como
el duelo en los trastornos depresivos) y los
El desarrollo del DSM-5 (APA, 2013a) inició en cambios en el uso del lenguaje y terminología
el 1999 y, antes de su lanzamiento oficial en el (como retraso mental a discapacidad
2013, fueron publicados varios borradores intelectual) (Regier et al., 2013), el haber dado
para obtener comentarios y sugerencias de acceso al borrador del manual a la opinión
profesionales de salud mental alrededor del pública -generando más de 11,000
mundo (Blashfield et al, 2014). El equipo de comentarios y críticas- fue una iniciativa sin
trabajo incluyó 13 grupos compuestos de precedentes que fortaleció su publicación
líderes en campos de la medicina y la salud (APA, 2013b). Otro aporte importante del
mental, además, había miembros que DSM-5 fue el acercamiento a la sensibilidad
representaban más de 90 instituciones cultural. Se añadió el capítulo “Formulación
académicas y de salud mental internacionales Cultural” donde se incluyó un instrumento para
(APA, 2013b). La meta de este manual era evaluar de forma sistemática los aspectos
crear un sistema de clasificación que fuera culturales. De este modo, habría una mayor
congruente con la biología molecular, las precisión diagnóstica al considerar los
neurociencias cognitivas y afectivas y la significados de las experiencias particulares de
psicometría (Blashfield et al., 2014). También cada individuo según su diversidad cultural.
buscaba lograr un mayor alineamiento con la
siguiente edición del CIE (que ya estaba en Allen Frances, pasó de ser el líder y
proceso de revisión por varios líderes que eran principal promotor del DSM-IV, a ser
miembros simultáneos de la fuerza de trabajo antagonista y crítico ferviente del DSM-5. De
tanto del CIE como del DSM-5), integrando el manera impetuosa y persistente, dejó saber
contexto cultural a los criterios diagnósticos y sus firmes posturas en diferentes foros
hacerlo más compatible internacionalmente (nacionales e internacionales) sobre lo que él
(Regier et al., 2013). consideraba una patologización de la vida
cotidiana. Esto lo explicó ampliamente en su
Participaron más de 300 profesionales para libro “Saving Normal” (Frances, 2013a). Ahí
brindar asesoría externa, comités científicos, expone su postura claramente opuesta a
clínicos y de salud pública, así como etiquetar erróneamente la cotidianidad
organizaciones que se aliaron a la agenda de humana con una “inflación diagnóstica” (se
investigación como la Organización Mundial de añadieron alrededor de 160 categorías del
la Salud y el Instituto Nacional de Salud Mental DSM-IV al DSM-5). Además, señala una
(APA, 2013b). Aunque el DSM-IV hacía la tendencia a intervenciones psicofarmacológi-
aclaración de que las categorías diagnósticas cas innecesarias, obviando las capacidades
no se deberían asumir como unas de límites naturales de autocompensación y resistencia
absolutos (que dividen un trastorno y otro), el que tiene el cerebro humano y que nos han
uso estricto categórico daba la impresión de mantenido cuerdos durante millones de años.
que los trastornos psiquiátricos eran unitarios. También resalta los beneficios multimillonarios
Teniendo esto en consideración, el DSM-5 que la industria farmacéutica obtiene de cada
intentó evolucionar en este particular incluyen- etiqueta arbitraria que se otorga a la condición
do aspectos dimensionales junto a los cate- humana, mal nombrada “enfermedad”
góricos, expandiendo el número de especi- (Frances, 2013a).
ficadores y subtipos (Regier et al., 2013). El
La APA, en respuesta a las preocupaciones Uno de los avances más grandes del DSM-
de su matrícula y de profesionales de la salud 5-TR es la actualización de términos utilizados
mental, desarrollaron varios comités para en el capítulo de Disforia de género por unos
revisar asuntos relacionados a la cultura, raza, más culturalmente sensibles y menos estigma-
TABLA 1.
Actualización del lenguaje asociado a la disforia de género.
diagnóstico debe conferirse 12 meses después atención clínica” códigos diagnósticos para
de la muerte de la persona allegada; conducta suicida y autolesión no suicida. El
contrastando con los 6 meses que exige el propósito de esta inclusión es proporcionar a
CIE-11 (Maercker et al., 2013). los profesionales de la salud mental un listado
sistemático que permita documentar y registrar
Finalmente, el 7 de noviembre de 2020, la estas conductas en los expedientes clínicos de
Asamblea de la APA aprobó la inclusión del pacientes. Anteriormente no existía una forma
TDP en el DSM-5-TR (Maercker et al., 2013). de incluir estas conductas dentro de la
El TDP se une a la familia diagnóstica de los impresión diagnóstica. Los códigos añadidos
trastornos relacionados con traumas y factores son los siguientes: (a) Comportamiento suicida
de estrés, donde figuran el trastorno de estrés actual, encuentro inicial; (b) Comportamiento
postraumático y el trastorno de estrés agudo. suicida actual, encuentro posterior; (c)
Las principales características del TDP son: 1) Antecedentes de conducta suicida; (d)
una respuesta de duelo persistente durante Autolesiones no suicidas actuales; y (e)
más de 12 meses (6 meses para un niño o Historial de autolesiones no suicidas.
niña), 2) síntomas que interrumpen
significativamente el funcionamiento diario de Cambios Menores
una persona, y 3) experiencias que no pueden
atribuirse a otra condición, como el trastorno En términos de diagnósticos clínicos, el
depresivo mayor o el trastorno de estrés DSM-5-TR únicamente cuenta con un
postraumático (ver DSM-5-TR). trastorno nuevo, un trastorno que se
reincorpora y los nuevos códigos para
Conducta Suicida y Autolesión No Suicida conducta suicida y autolesión no suicida. No
obstante, hubo cambios menores en varios
El DSM-5-TR incluyó dentro de la sección trastornos del manual. La Tabla 2 presenta un
“Otros problemas que pueden ser objeto de resumen de algunos de estos cambios.
TABLA 2.
Descripción y justificación de los cambios menores del DSM-5-TR.
Discapacidad intelectual (trastorno del Trastorno del desarrollo intelectual Alinear la terminología con la utilizada en el
desarrollo intelectual) (discapacidad intelectual) CIE-11.
Criterio A del Trastorno del espectro autista: Criterio A del Trastorno del espectro autista: Puntualizar que se requiere “todo lo
“Deficiencias persistentes en la comunicación “Deficiencias persistentes en la comunicación siguiente” y evitar que se entienda como
social y en la interacción social en diversos social y en la interacción social en diversos “cualquiera de los siguientes”.
contextos, manifestado por lo siguiente, contextos, manifestado por todo lo siguiente,
actuales o pasados…”. actuales o pasados…”.
Cuarto ejemplo de Otro trastorno del Cuarto ejemplo de Otro trastorno del No dar a entender que el material delirante
espectro de la esquizofrenia especificado: espectro de la esquizofrenia especificado: de la pareja dominante provee contenido
“síntomas delirantes en la pareja del “síntomas delirantes en el contexto de la para el delirio de la persona, y no sugerir que
individuo con trastorno delirante”. relación con un individuo con delirios el ejemplo se reduce exclusivamente a una
prominentes”. relación romántica.
Leve: Se cumplen los criterios sintomáticos
No aplica. El DSM-5 no incluía mínimos para un episodio maníaco. Los especificadores del DSM-5 solo tenían
especificadores para los episodios maníacos. Moderado: Aumento muy significativo de la sentido si el episodio actual es un episodio
actividad o deterioro del juicio. depresivo mayor. Los que tenía el DSM-5
Grave: Se requiere una supervisión casi permanecen en el DSM-5-TR como
continua para evitar daños físicos a sí mismo especificadores de episodios depresivos.
o a otros.
Criterio D del Trastorno de depresión mayor: Criterio D del Trastorno de depresión mayor: Explicar mejor la relación entre los episodios
“El episodio de depresión mayor no se “Al menos un episodio depresivo mayor no se depresivos y los trastornos psicóticos, y
explica mejor por un trastorno explica mejor por el trastorno esquizoafectivo clarificar que este criterio es aplicable a
esquizoafectivo, esquizofrenia, un trastorno y no se superpone a la esquizofrenia, al cualquier episodio depresivo (actual o
esquizofreniforme, trastorno delirante, u otro trastorno esquizofreniforme, al trastorno pasado).
Trastorno depresivo persistente (distimia) Trastorno depresivo persistente La distimia, según definida en el DSM-IV, no
puede incluir un episodio depresivo mayor en
ningún momento de los dos años. Mantener
el término distimia sería contradictorio.
Trastorno de ansiedad social (fobia social) Trastorno de ansiedad social El término fobia social no proporciona
ninguna utilidad clínica en la actualidad.
Criterio A.2 de PTSD en niños: “Nota: No Eliminado. La nota es redundante, el criterio A.2 ya
incluye sucesos que solamente se han visto requiere que los sucesos se experimenten
en medios electrónicos, televisión, películas o presencialmente.
fotografías”.
Especificadores de duración del Trastorno de Especificadores de duración del Trastorno de El criterio E del trastorno de adaptación
Adaptación: Adaptación: indica lo siguiente: “Una vez que el estresor o
Agudo: Si la alteración dura menos de 6 Agudo: Este especificador puede utilizarse sus consecuencias han terminado, los
meses. para indicar la persistencia de los síntomas síntomas no persisten durante más de 6
Persistente (crónico): Si la alteración dura 6 durante menos de 6 meses. meses adicionales”. Este cambio pretende
meses o más. Persistente (crónico): Este especificador clarificar la aparente contradicción entre el
puede utilizarse para indicar la persistencia criterio E y el especificador de duración de 6
de los síntomas durante 6 meses o más. Por meses o más en respuesta a un estresor
definición, los síntomas no pueden persistir crónico.
durante más de 6 meses tras la finalización
del factor de estrés o sus consecuencias. Por
lo tanto, el especificador persistente se aplica
cuando la duración de la alteración es
superior a 6 meses en respuesta a un
estresor crónico o a un estresor que tiene
consecuencias duraderas.
Trastorno de conversión (Trastorno de Trastorno de síntomas neurológicos Trastorno de conversión está dejando de ser
síntomas neurológicos funcionales) funcionales (Trastorno de conversión) utilizado por investigadores y clínicos, y no es
un término etiológicamente neutro.
Primer ejemplo del Otro trastorno alimentario Primer ejemplo del Otro trastorno alimentario Clarificar que la presencia de consecuencias
o de la ingestión de alimentos especificado, o de la ingestión de alimentos especificado, fisiológicas no significa que el diagnóstico
anorexia nerviosa atípica: “Anorexia nerviosa anorexia nerviosa atípica “Anorexia nerviosa sea el de anorexia nerviosa
atípica: Se cumplen todos los criterios para la atípica: Se cumplen todos los criterios para la
anorexia nerviosa, excepto que el peso del anorexia nerviosa, excepto que el peso del
individuo, a pesar de la pérdida de peso individuo, a pesar de la pérdida de peso
significativa, está dentro o por encima del significativa, está dentro o por encima del
intervalo normal”. intervalo normal. Los individuos con anorexia
nerviosa atípica pueden experimentar
muchas de las complicaciones fisiológicas
asociadas a la anorexia nerviosa.”.
Hoy, nueve años después de la publicación Por su parte, Allen Frances (2013b), líder
del DSM-5, tenemos a la mano un DSM-5-TR de la fuerza laboral del DSM-IV, opinó (tras la
con cambios mínimos en términos clínicos que publicación del DSM-5) que una revisión no
no justifican para nada el lanzamiento de una implica necesariamente una mejor versión y
nueva edición. Más aun, cuando las críticas a alerta sobre las repercusiones socioeconómi-
otros ejemplares del DSM o las propuestas cas de hacer cambios basados en información
para mejorarlo no siempre son tomadas en imprecisa. También alertó que cambiar un solo
consideración para ediciones subsecuentes criterio diagnóstico afecta significativamente la
(Blashfield et al., 2014). Por dar un ejemplo, prevalencia, tratamiento, prescripciones y
podemos señalar los “intocables” trastornos de costos, tanto para pacientes como para el
la personalidad que se mantienen intactos sistema de salud pública. En el caso del DSM-
desde el DSM-IV-TR, a pesar de los esfuerzos 5-TR no se esperan grandes repercusiones
tanto del Grupo de Trabajo sobre Trastornos socioeconómicas dado que no tenemos a la
de la Personalidad del DSM-5 –quienes mano una mejor o peor versión del DSM, sino
propusieron cambios radicales en esta que prácticamente tenemos la misma versión
sección– como de muchos investigadores y anterior con un solo diagnóstico incluido.
académicos (Sperry, 2016).
Por último, ¿es necesaria la compra del
DSM-5-TR para el ejercicio clínico de la
https://psychiatry.org/psychiatrists/practic https://www.cdc.gov/nchs/data/icd/10cmg
e/dsm/educational-resources uidelines_2013_final.pdf
American Psychiatric Association. (2022c). Decker, H. S. (2013). The making of DSM-III®:
The people behind DSM-5-TR. A diagnostic manual's conquest of
Educational Resources. American psychiatry. Oxford University
https://www.psychiatry.org/File%20Librar Press.
y/Psychiatrists/Practice/DSM/DSM-5- Feighner, J. P., Robins, E., Guze, S. B.,
TR/APA-DSM5TR- Woodruff, R. A., Jr, Winokur, G., & Munoz,
ThePeopleBehindDSM.pdf R. (1972). Diagnostic criteria for use in
American Psychiatric Association. (2022d). psychiatric research. Archives of General
Facts about DSM-5-TR. Psychiatric News. Psychiatry, 26(1), 57–63.
https://doi.org/10.1176/appi.pn.2022.03.3 https://doi.org/10.1001/archpsyc.1972.01
.28 750190059011
American Psychiatric Association. (2022e). First, M. B., & Pincus, H. A. (2002). The DSM-
DSM-5-TR section III. Educational IV Text Revision: Rationale and potential
Resources. impact on clinical practice. Psychiatric
https://www.psychiatry.org/File%20Librar services, 53(3), 288–292.
y/Psychiatrists/Practice/DSM/DSM-5- https://doi.org/10.1176/appi.ps.53.3.288
TR/APA-DSM5TR-SectionIII.pdf Fischer, B. A. (2012). A review of American
American Psychiatric Association. (2022f). psychiatry through its diagnoses: The
Coding and recording procedures. history and development of the Diagnostic
Educational Resources. and Statistical Manual of Mental
https://www.psychiatry.org/File%20Librar Disorders. The Journal of Nervous and
y/Psychiatrists/Practice/DSM/DSM-5- Mental Disease, 200(12), 1022-1030.
TR/APA-DSM5TR-Coding.pdf https://doi.org/10.1097/NMD.0b013e3182
American Psychiatric Association. (2022g). 75cf19
Attention to culture, racism, and Frances, A. (2013a). Saving normal: An
discrimination in DSM-5-TR. Educational insider's revolt against out-of-control
Resources. psychiatric diagnosis, DSM-5, Big
https://www.psychiatry.org/File%20Librar Pharma, and the medicalization of
y/Psychiatrists/Practice/DSM/DSM-5- ordinary life. William Morrow.
TR/APA-DSM5TR- Frances, A. (2013b). The new somatic
AttentiontoCultureRacismandDiscriminati symptom disorder in DSM-5 risks
on.pdf mislabeling many people as mentally ill.
Angel, K. (2012). Contested psychiatric BMJ (Clinical research ed.), 346, f1580.
ontology and feminist critique: 'Female https://doi.org/10.1136/bmj.f1580
sexual dysfunction' and the Diagnostic García-Zabaleta, O. (2018). Los problemas y
and Statistical Manual. History of the limitaciones del DSM-5. Dilemata, 27(1),
Human Sciences, 25(4), 3-24. 367-391.
https://doi.org/10.1177/09526951124569 Grob, G. N. (1991). Origins of DSM-I: A study
49 in appearance and reality. The American
Blashfield, R. K., Keeley, J. W., Flanagan, E. Journal of Psychiatry, 148(4), 421–431.
H., & Miles, S. R. (2014). The cycle of https://doi.org/10.1176/ajp.148.4.421
classification: DSM-I through DSM-5. Gruenberg, E. M. (1969) How can the new
Annual Review of Clinical Psychology, 10, diagnostic manual help? International
25–51. https://doi.org/10.1146/annurev- Journal of Psychiatry, 7, 368-374.
clinpsy-032813-153639 Kawa, S., & Giordano, J. (2012). A brief
Centers for Disease Control and Prevention. historicity of the Diagnostic and Statistical
(2013). ICD-10-CM official guidelines for Manual of Mental Disorders: Issues and
coding and reporting. implications for the future of psychiatric