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UNIVERSIDAD YACAMBÚ

VICERRECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE HUMANIDADES

Trastornos y casos clínicos


Psicopatología de la niñez y adolescencia

Alumna: María Valentina Castillo


EXP. 193-00193
Docente: Carlos Bracho

Cabudare, Abril 2022


INTRODUCCIÓN

La salud mental incluye nuestro bienestar emocional, psicológico y social, esta


afecta la forma en que pensamos, sentimos y actuamos cuando enfrentamos la vida,
esta ayuda a determinar cómo manejamos el estrés, nos relacionamos con los demás y
tomamos decisiones. La salud mental es importante en todas las etapas de la vida,
desde la niñez y la adolescencia hasta la adultez y la vejez, a lo largo de la vida nos
vemos expuesto a situaciones que pueden afectarnos de manera significativa, como lo
es el caso de las enfermedades mentales o trastornos mentales los cuales son
afecciones graves que pueden afectar la manera de pensar, su humor y su
comportamiento.

Los trastornos mentales pueden ser ocasionales o de larga duración, pueden afectar
su capacidad de relacionarse con los demás y funcionar cada día. Los problemas
mentales son comunes, gran parte de las personas en el mundo son diagnosticadas
con alguna afección sin embargo, hay tratamientos disponibles para su mantenimiento,
para mitigar o eliminar síntomas que generen malestar en los individuos. Las personas
con trastornos de salud mental pueden mejorar y muchas de ellas se recuperan por
completo.

En esta oportunidad se dará conocimiento de algunas de las patologías que aquejan


al ser humano el cual es la identidad de género donde el autor Alfred Kinsey rompió
esta concepción dualista de las orientaciones sexuales al proponer un modelo según el
cual existen muchos grados intermedios entre la heterosexualidad y la
homosexualidad, es un tema que en la actualidad sigue causando curiosidad,
expectativas sobrevaloradas y lamentablemente causando malestar social ante el
panorama de aquellos que se aceptan, aquellos que no se aceptan y muchos más
aquellos que desafortunadamente son aislados por la sociedad.

es un tema difícil de abordar pero es necesario para su entendimiento además


permitirá concientizar y discernir las diversas diferencias que existen y que aquejan
aquellas personas que están bajo una transición personal no solo física si no psíquica
emocional y sobretodo social.
Desarrollo

Escala de Kinsey de heterosexualidad – homosexualidad

Cuando consideramos la condición sexual de las personas, pensamos en dos categorías: la


homosexualidad y la heterosexualidad, que pueden combinarse para formar la bisexualidad.
Sin embargo, ¿qué tan precisa es esta forma de clasificar las tendencias sexuales? ¿Existe
una diferenciación tan nítida y clara entre la homosexualidad y la heterosexualidad? Un hombre
llamado Alfred Kinsey rompió esta concepción dualista de las orientaciones sexuales al
proponer un modelo según el cual existen muchos grados intermedios entre la
heterosexualidad y la homosexualidad. Este gradualismo se materializó en lo que ahora se
llama la escala de Kinsey.

Desde el feminismo y los estudios de género asociados a la antropología, se defiende


mucho la idea de que, históricamente, la orientación sexual ha sido entendida como
comprensible desde dos posiciones: la heterosexualidad y la homosexualidad, siendo una la
negación de la otra. Estas dos opciones sexuales serían invenciones, artefactos creados por la
cultura y no mantenidos en la biología. No obstante, durante la primera mitad del siglo XX, el
biólogo y sexólogo Alfred Kinsey infligió graves heridas a esta concepción dicotómica de la
sexualidad. ¿Las razones? Durante 15 años realizó un extenso estudio que lo llevó a concluir
que las ideas de homosexual, bisexual y heterosexual son demasiado encorsetadas y
limitantes.

En pocas palabras, las personas que incluyó en su investigación no encajaban fácilmente en


los patrones de heterosexualidad: los estados intermedios de orientación sexual eran mucho
más comunes de lo esperado. Así, según Kinsey, existe todo un abanico de orientaciones
sexuales, una escala de grados que va desde la pura heterosexualidad hasta la pura
homosexualidad, pasando por varias categorías intermedias. En resumen, la escala de Kinsey
rompió la clasificación cualitativa para entrar en una descripción cuantitativa en la que las cosas
se miden como la temperatura se mide con un termómetro. La idea es que todos podemos
tener una parte bisexual, más o menos evidente y que, más que definir nuestra identidad, sea
una simple preferencia con umbrales o límites no siempre claros.

La historia de la escala de Kinsey


Si esta concepción de la sexualidad es hoy provocativa, pueden imaginarse lo que significó
defender la escala de Kinsey durante las décadas de 1940 y 1950. El estudio, basado en miles
de cuestionarios entregados a una amplia variedad de hombres y mujeres, desató una feroz
controversia y despertó una fuerte oposición de las instituciones conservadoras. Sin embargo,
precisamente, sus ideas se difundieron rápidamente por todo el mundo, y sus escritos y
pensamientos fueron traducidos a muchos idiomas. El llamado Informe Kinsey, dividido en dos
libros, Comportamiento sexual del hombre (1948) y Comportamiento sexual de la mujer (1953),
contenía datos que cuestionaban lo que se sabía sobre la sexualidad humana y la naturaleza
misma del género.

Con base en esa información proporcionada por 6 mil 300 hombres y 5 mil 940 mujeres,
Kinsey concluyó que la heterosexualidad pura es extremadamente rara o casi inexistente, y
esto sólo debe tomarse como un concepto abstracto que permitiría construir una escala con
dos extremos. Lo mismo sucedía con la homosexualidad pura, aunque esta idea no era tan
inaceptable por razones obvias. Esto significó que las identidades masculina y femenina se
construyeron en el marco de una ficción y que muchos comportamientos considerados
“desviados” eran, de hecho, normales.

Descripción de la Escala

La escala diseñada por Kinsley tiene 7 niveles desde la heterosexualidad hasta la


homosexualidad, e incluye la categoría en la que encajarían las personas que no experimentan
la sexualidad.

Los grados son:

0. Exclusivamente heterosexual

1. Principalmente heterosexual, con contactos homosexuales esporádicos


2. Predominantemente heterosexual, aunque con contactos homosexuales más
esporádicos
3. Bisexual
4. Predominantemente homosexual, aunque con contactos heterosexuales más que
esporádicos
5. Principalmente homosexual, con contactos heterosexuales esporádicos
6. Exclusivamente homosexual
X - Asexual, el individuo no presenta atracción sexual

La escala de Kinsey en ese momento ofrecía una perspectiva diferente sobre lo que es la
mente humana, especialmente en lo que se refiere a la sexualidad. Tradicionalmente, la
división sexual del trabajo y los roles de género han fomentado una visión muy dicotómica de lo
que significa ser hombre y mujer, y esta línea de investigación desafió esta clasificación tan
cerrada. Por ello, a lo largo de los años, los estudios de género han utilizado la influencia de
esta escala para indicar cómo la heteronormatividad, que sitúa la heterosexualidad en el centro
de lo que se considera normal, es una construcción social demasiado simplista e injustificada,
que sirve para ejercer presión social sobre las minorías, situado fuera de esta orientación
sexual normalizada.

Kinsey no hizo una escala de siete grados porque creyera que la cantidad de pasos reflejaba
cómo funcionaba la sexualidad, sino porque pensó que era una buena manera de medir algo
que en realidad es fluido y no tiene discontinuidades. Es por ello que su obra ha tenido un
impacto significativo en la filosofía occidental, cambiando la forma en que entendemos las
orientaciones sexuales y teniendo un impacto positivo en los movimientos por la igualdad y la
lucha contra la discriminación de las personas homosexuales. Sin embargo, el debate sobre la
naturaleza de las orientaciones sexuales y si pueden entenderse como un continuo o como
categorías estancadas aún prevalece. En realidad, este debate no ha sido puramente científico,
pues las implicaciones sociales y políticas de la escala de Kinsey sobre la sexualidad la
convierten en una herramienta ideológica.

Los conservadores lo ven como una amenaza a los valores familiares nucleares
tradicionales y una herramienta de la ideología de género (aunque en realidad se puede
defender sin apegarse a este patrón de pensamiento) y los colectivos LGTBI lo ven como un
buen marco conceptual desde el que puedes estudiar la sexualidad de una manera menos
rígida de lo habitual. Ahora bien cambiando el enfoque del estudio de la homosexualidad
Además, esta escala de orientaciones sexuales minimiza la idea de pura homosexualidad y
heterosexualidad, reduciéndolas a entelequia, reduce la presión social para caer en estas dos
categorías. En cualquier caso, la escala de Kinsey ayudó a sentar un precedente; el fenómeno
a estudiar ya no es la homosexualidad, considerada como una anomalía o un alejamiento de lo
que se consideraba “lo natural”.
Ahora lo que se está estudiando es cómo interactúan la homosexualidad y la
heterosexualidad, la relación entre ambas. Antes sólo se investigaba “una rareza”, pero hoy
tratamos de entender el continuo con dos polos.

Diferencia entre transgénero y disforia de género en la adolescencia

Transgénero o de género no conforme

La experiencia de ser una persona de género no conforme significa que el género de la


persona al nacer (género asignado) no coincide con la manera que se siente sobre sí mismo
(su género afirmado). El género se expresa a través de la propia personalidad, apariencia y
comportamiento, típicamente como masculino o femenino. La no conformidad de género puede
manifestarse desde los dos o tres años de edad, cuando los niños se dan cuenta de la noción
de género y pueden afirmar “no, soy un niño” o “no, soy una niña”.

Explorar diferentes maneras y expresiones de género es una parte normal del desarrollo
durante la infancia. Los niños pequeños suelen interpretar a personajes favoritos de un género
diferente, o disfrutan jugando a disfrazarse. La mayoría eventualmente termina asumiendo la
identidad de su género asignado. Para algunos niños y adolescentes, el género sigue siendo
fluido. A menudo, estos se identifican como no binarios o de género no conforme. Algunos
adolescentes no conformes con su género, cuando son pequeños, no se asocian con la
expresión de género masculina o femenina en cosas como ropa, juguetes, actividades y
preferencias de amistad. Se mantienen neutrales, y en algunos casos nunca desarrollan una
identidad marcada como femenina o masculina.

Otros se presentan típicamente como hombres o mujeres cuando son pequeños y


sorprenden a sus padres cuando más adelante declaran su género afirmado, explica Paul
Mitrani, MD, PhD,psiquiatra de niños y adolescentes del Child Mind Institute. “Los padres
pueden venir a ti y decir: “No entiendo. A ella le encantaban los vestidos y las muñecas y todas
esas cosas, y de repente nos dice que es un hombre transgénero”. Los jóvenes que son
transgénero (o trans) sienten profundamente que desean ser, o son, de un género diferente del
que les fue asignado al nacer. No solo quieren vestirse, actuar y ser aceptados como el otro
género, sino que pueden sentirse extremadamente incómodos en sus cuerpos. Algunas
personas transgénero (aunque no todas) quieren cambiar su cuerpo, a través de la terapia
hormonal o la cirugía, para alinearse con su identidad de género. Las niñas que hacen la
transición para convertirse en varones son hombres transgénero. Los adolescentes que hacen
la transición para convertirse en mujeres son mujeres transgénero.

La terminología en torno a la no conformidad de género está evolucionando rápidamente.


Los términos que podrían usar los adolescentes incluyen género queer, no binario, género
fluido, agénero, dos espíritus, demimujer, demihombre. Pero la definición de estos términos
puede variar para diferentes personas. La Dra. Woodward señala que es importante que los
padres y los médicos acepten las etiquetas que los niños eligen para sí mismos, en lugar de
imponerles sus propias etiquetas o sacar conclusiones precipitadas acerca de dónde terminará
la identidad del niño o adolescente. A menudo, el primer paso que quieren dar es un cambio de
nombre que refleje un género diferente (o ningún género).

Disforia de género

Ser transgénero o de género no conforme no es una condición de salud mental en sí misma,


y no todos los niños que cuestionan o cambian su género sufren de angustia emocional
significativa. Sin embargo, para la mayoría de los niños la desconexión entre su género
experimentado y su género asignado puede resultar en una angustia aguda llamada disforia de
género. Estos niños sienten una aversión marcada hacia su anatomía sexual, un fuerte deseo
de ser de un género diferente y un fuerte deseo de ser tratados como de ese otro género.

Cuando no pueden ser aceptados con el género al que sienten que pertenecen, o cuando
son acosados o victimizados, corren un alto riesgo de desarrollar depresión y ansiedad, así
como incurrir en autolesiones y tendencias suicidas. Su estado de ánimo puede ser muy bajo,
señala la Dra. Woodward, y esa suele ser la razón por la que las familias llevan a sus hijos con
un profesional. “Algunos saben que los problemas se derivan del género o la sexualidad, y
otros no tienen idea”, dice. Un estudio de adolescentes transgénero (página en inglés) encontró
que más del 50 por ciento de los hombres transgénero y casi el 30 por ciento de las mujeres
transgénero informaron un intento de suicidio.

E incluso cuando las familias los apoyan, puede ser una transición muy difícil tanto para el
adolescente como para los padres. Si su hijo de género no conforme está mostrando señales
significativas de angustia y está teniendo dificultades en la escuela, con los amigos o en otras
áreas de funcionamiento, puede ser muy importante obtener ayuda de un profesional de la
salud mental que tenga experiencia con adolescentes transgénero y de género no conforme.
DIFERENCIAS

Disforia de Genero Transgénero

 Sensación de incomodidad o angustia que  Transgénero y no conformes con su


pueden sentir las personas cuya identidad género pueden experimentar disforia de
de género difiere del sexo asignado al género en algún momento de sus vidas.
nacer o de las características físicas Pero no todas las personas se sienten
relacionadas con el sexo. afectadas. Algunas personas transgénero
y no conformes con su género se sienten
a gusto con sus cuerpos, ya sea con
intervención médica o sin ella.

Trastorno dismorfico corporal en jóvenes

El trastorno dismorfico corporal es una afección que hace que la gente crea que hay partes
de su cuerpo que son muy feas. La gente con este trastorno se pasa horas focalizada en lo que
cree que está mal de su aspecto físico. Muchas veces al día, hacen cosas para fijarse en su
aspecto físico, corregirlo o arreglarlo, cubrirlo o hacer preguntas a los demás sobre él. Se
obsesionan con defectos o imperfecciones que carecen de importancia o que pasan
desapercibidos para los demás.

Signos y los síntomas del trastorno dismorfico corporal

 Las personas con este trastorno están extremadamente centradas en su aspecto


físico.
 Les cuesta mucho dejar de pensar en las partes de su cuerpo que les disgustan.
 Se centran en cosas específicas: como una espinilla que les ha salido en la piel, la
forma o el tamaño de su nariz, ojos, labios, orejas o manos.
 Su aspecto físico las altera.
 La gente con esta afección está preocupada, estresada y ansiosa debido a su
aspecto físico casi todo el tiempo.
 Revisan o corrigen su aspecto físico.
 La gente con trastorno dismórfico corporal tiene una fuerte necesidad de fijarse en su
aspecto físico una y otra vez.
 Por ejemplo, se fija en su aspecto físico mirándose a menudo al espejo, preguntando
a los demás qué aspecto tiene o "corrigiendo" o "arreglando" lo que le disgusta
muchas veces al día.
 Intentan que no las vean.
 Algunas personas con trastorno dismórfico corporal se sienten tan mal con su
aspecto físico que no quieren que las vean.
 Se pueden quedar en casa, estar siempre a solas o bien usar maquillaje, gorros o
ropa para taparse las partes del cuerpo que les disgustan.
 Algunas personas con trastorno dismorfico corporal evitan mirarse al espejo porque
les resulta demasiado estresante.
 Tienen una imagen falsa de su aspecto físico.
 Las personas con trastorno dismórfico corporal no ven su cuerpo tal y como es, ni
como lo ven otras personas.
 Las imperfecciones en que ellas se centran son cosas menores, que apenas se
notan y que hasta pueden pasar desapercibidas para los demás.
 Ellas están seguras de que son feas, aunque no sea verdad que lo sean.

Diagnostico del trastorno dismórfico corporal

Un profesional de la salud mental (terapeuta o psicólogo) que entienda el trastorno


dismórfico corporal y que tenga experiencia en él lo puede diagnosticar. Los profesionales de la
salud mental hacen preguntas y escuchan atentamente las respuestas para saber si una
persona tiene un trastorno dismórfico corporal u otro tipo de trastorno.

Tratamiento del trastorno dismórfico corporal

 Terapia cognitivo-conductual.

La terapia cognitiva-conductual es un tipo de psicoterapia, puede ayudar a las personas con


trastorno dismórfico corporal a aprender que lo que piensan afecta a cómo se sienten, en este
enfoque terapéutico, las personas aprenden a darse cuenta de sus ideas, también aprenden a
poner a prueba o a rebatir las ideas que les hace sentirse mal, y aprenden que pueden cambiar
la forma en que ven su propio cuerpo. Poco a poco y con mucho apoyo, la terapia cognitivo-
conductual enseña a centrarse menos en los defectos, y los pacientes aprenden a dejar de
estar tan pendientes de su aspecto físico para corregirlo.

 Medicación

Los medicamentos que ayudan a que la serotonina funcione bien se usan para tratar el
trastorno dismórfico corporal, a veces se conocen como medicamentos ISRS (inhibición
selectiva de la recaptación de serotonina). Los medicamentos ISRS pueden ayudar a la gente a
obsesionarse menos con su aspecto físico y a sentirse menos angustiada, con menos angustia,
pueden avanzar más en la terapia cognitivo-conductual, la mayoría de las veces, los
medicamentos y la terapia cognitivo-conductual se usan conjuntamente para tratar el trastorno
dismórfico corporal.

 Psicoeducación

Se inicia el tratamiento con una intervención educativa destinada a informar al paciente y a


sus familiares sobre el propio trastorno así como los tratamientos disponibles y sus posibles
consecuencias.

 Terapias de tercera generación

Como el mindfulness o la realidad virtual, por ejemplo, para realizar relajación o exposición a
entornos que pueden resultar, inicialmente, muy ansiógenos y que, a medida que avanza la
terapia, van resultando menos ansiógenos.

 Tratamiento farmacológico

Los fármacos de elección suelen ser los antidepresivos y, especialmente, ya que suelen
mejorar los síntomas nucleares del TDC los antidepresivos tricíclicos como la clomipramina
como de segunda elección ante su mayor posibilidad de efectos secundarios.

Causas del trastorno dismórfico corporal

Todavía hay mucho que aprender sobre las causas exactas del trastorno dismórfico
corporal. Pero los expertos creen que los siguientes factores pueden desempeñar un papel en
su desarrollo:

 Los genes. Este trastorno puede ser hereditario en cierta medida. Se tiende a dar por
familias.
 La serotonina. La serotonina es una sustancia química normal y necesaria que se
encuentra en el cerebro. La escasez de serotonina ayuda a explicar por qué ocurre
este trastorno.
 Diferencias cerebrales. Los estudios han demostrado que algunas áreas del cerebro
son diferentes y funcionan de una forma diferente en las personas con trastorno
dismórfico corporal.

El trastorno dismórfico corporal no está provocado por algo que haya hecho el paciente o
que hayan hecho sus padres. Se trata de un problema de salud mental que requiere
tratamiento. El trastorno dismórfico corporal no es culpa de nadie.

¿Cómo vive una persona que tiene un trastorno dismórfico corporal?

Las ideas y las preocupaciones que forman parte de un trastorno dismórfico corporal ocupan
gran parte del tiempo del paciente y consumen su energía. Con este trastorno, la persona
nunca está satisfecha con su aspecto físico, a pesar de lo que le digan los demás. Debido al
trastorno dismórfico corporal, suelen evitan salir con sus amigos, ir a su centro de estudios,
trabajar o hacer actividades normales de la vida cotidiana. Esto puede hacer que se sientan
solas, tristes y deprimidas. Algunas buscan tratamientos u operaciones que no necesitan, con
la esperanza de "corregir sus defectos". Pero estos tratamientos no alivian ni mejoran el
trastorno dismórfico corporal. Puede ser muy duro darse cuenta de que el problema que tienen
no reside en el aspecto que tienen. Es la forma falsa de verse a sí mismas donde reside su
problema.

Ejemplos:

1. Inés, 14 años, llega a consulta por presentar apatía, disforia, ansiedad y un malestar
clínicamente significativo en las áreas personal, académica, familiar y social. De
hecho, Inés ya ha dejado de realizar muchas de sus actividades agradables y
cotidianas y cada vez se muestra más alejada de todo y de todos, cambiando,
incluso, su forma de vestir. A pesar de la preocupación inicial de sus padres acerca
de la posibilidad que Inés estuviera iniciando una anorexia, lo cierto es que presenta
otro cuadro; trastorno dismórfico corporal.
2. Julián es un chico de 17 años, quien presenta angustia, ansiedad y apatía
clínicamente significativo debido a su apariencia corporal, se percibe como una
persona sin atractivo físico inferior al resto de sus compañeros por lo que inicia
rutinas de ejercicio extremas que en ocasiones le generan lesiones, ya no frecuenta
a realizar actividades con sus amistades ya que esta enfocado en sus rutinas de
ejercicio, sus amigos se encuentran preocupados ya que Julián es un chico sano con
apariencia ajustada a su edad y de hecho es uno de los mas atractivo entre sus
amigos, sin embargo este se percibe de un modo distinto que desencadena ansiedad
y depresión en ocasiones debido a su extenso esfuerzo y que refiere no estar a gusto
con los resultados.

Estudio de casos:

Caso I

Juan, un chico de 14 años de edad, acude a consulta con su madre, con una apariencia y
peso acorde a su edad, fue referido por Educadores, Tiene un hermano de (5ª), convive con
padre (44ª) y madre (34ª). Cursa 2do de bachillerato y la madre reporta que, por primera vez se
ha retirado de clases, y que está muy preocupada por el comportamiento de su hijo: tiene
peleas con compañeros de la misma institución. Desobedece las normas dentro del aula, como
levantarse en plena clase, hablar mucho. Dificultades para esperar en una fila a la hora de
comer o entrar a los salones, discute con los profesores y se niega a realizar actividades.

 Desde hace 8 meses Juan tiene peleas con sus compañeros de clase; en los 2 últimos
meses se han hecho más frecuentes y es más agresivo.
 Desafío a las normas y órdenes de los profesores desde hace más de 6 meses
 En el entorno familiar, desde hace 6 meses, se niega diariamente a cumplir con sus
obligaciones de la casa, es desafiante, y ha amenazado físicamente a su hermano, sin
que se hayan producido agresiones.
 No da la impresión de consumo de sustancias tóxicas.

1. ¿Cuál es su Hipótesis diagnóstica?

De acuerdo a los datos suministrados por el caso se puede inferir que el sujeto de estudio
cumple con criterios característicos de F91.8 Trastorno disocial (312.8)

2. ¿Qué otra información requiere para corroborar su hipótesis?

Se requiere realizar entrevista individualizada y familiar para exploración de los posibles


detonantes de los síntomas en manifiesto, criterios diagnósticos del DSM que permita
categorizar la condición del paciente además referir al paciente a un neurólogo para que realice
estudios pertinentes por posible irritabilidad cerebral.

3. ¿Qué otra información es requerida para evaluar el nivel de funcionamiento del


menor?
 Entrevista
 Examen mental
 Aplicación de Batería de test Psicométricos y test Proyectivos
 Informe descriptivo del docente
 Informe descriptivo del neurólogo

Caso II

Patricia M. una Joven de 17 años de edad, acude a la consulta «obligada» con sus
padres porque ha sufrido una importante pérdida de peso en los últimos seis meses. Además,
según verbatum de los padres tiene estados de ánimo cambiantes: y una alteración en el
estado de ánimo: la notan más triste, irascible y aislada.

Antecedentes familiares:

Madre (43 a) presenta hipotiroidismo, hace dieta estricta desde hace 3 años, En 2020
precisó ayuda psicológica tras la muerte de su madre. El padre (56 a) presenta sobrepeso.

Descripción de la conducta:

Patricia empezó a verse gorda desde hace unos 9 meses (peso 66 kilogramos, estatura
1,62 cms). Actualmente peso: 42 kgrms. Desde niña ha sido caprichosa en la comida: no come
cuando no le gusta la comida: sopas, ensaladas, y come en demasía cuando le gusta: pasta,
torta. Es emocional, cuando está preocupada no come porque “le duele la barriga” cuando esta
triste deja de comer, cuando está ansiosa come varias veces fuera de comidas, come de
manera muy desordenada e impulsiva. Decidió comenzar una dieta de 1200 cal, pero le
costaba mucho cumplirla; cuando conseguía restringir el consumo, se daba «atracones» de
carbohidratos y perdía el control. Hace unos 6 meses, decidió hacer una dieta a base de
proteínas y llegó a pesar 49 kg, pero no ha podido parar, tiene miedo a engordar otra vez.
Durante la entrevista con la paciente a solas, ésta explicaba que, además de la pérdida
de peso, estaba muy agobiada mentalmente pensando en la alimentación y en su propio
cuerpo. Sabe las calorías de todo lo que come.

Importante distorsión de la imagen corporal. En los últimos meses estaba más triste,
apática, aislada socialmente e irascible, sobre todo en casa, lo único que le proporcionaba
bienestar eran los estudios, a los que dedicaba todo su tiempo: es muy rígida, y autoexigente.

Mantiene una buena relación con la familia, aunque últimamente tiene más conflictos con
su madre porque está más pendiente de ella durante las comidas. La adolescente insiste en
que sus padres son exagerados, porque ella “lo único que hace es cuidarse para no ponerse
gorda”

1. ¿Cuál es su Hipótesis diagnóstica?

De acuerdo a los datos suministrados por el caso se puede inferir en base a los síntomas y
comportamientos expuestos la sujeto de estudio cumple con criterios característicos de F45.2
Trastorno dismorfico corporal (300.7).

2. ¿Qué otra información requiere para corroborar su hipótesis?

Se requiere la aplicación de instrumentos psicométricos y proyectivos para corroborar dicha


hipótesis.

3. ¿Qué otra información es requerida para evaluar el nivel de funcionamiento del


menor?

El examen mental es base para identificar el funcionamiento del sujeto, partiendo de los
datos obtenidos tanto del examen mental como de la entrevista y los test, se puede inferir el
nivel de afección de la paciente, posteriormente se refiere con un especialista para que le
realice una evaluación médica y por consecuente al tener una prescripción se trabaja con la
corriente cognitivo conductual para mitigar los comportamientos y conductas que generan daño
en la paciente.
III Parte. Presentación del caso

Datos personales y familiares del paciente

Se presenta el caso de Thomas Rodríguez, adolescente de 16 años de edad quien acude a


consulta en compañía de sus padres a razón de estar presentando ataques de pánico desde
hace 8 meses y en los últimos 2 meses se han agravado, presentándose con mayor intensidad
y frecuencia. Los ataques se presentan generalmente por la ansiedad producida al ser
expuesto a entornos sociales.

Antecedentes médicos y psicológicos

Thomas ha sido un chico que desde pequeño ha gozado de buena salud sin embargo en la
niñez asistió a consulta psicológica en pocas oportunidades en compañía de su madre ya que
presentaba cada vez que salía un conducta desproporcionada que generaba gran
preocupación en los padres, este al ser llevado al colegio o a fiestas infantiles presentaba
sudoración, temblores, mareos, malestar estomacal, enrojecimiento, llanto, elevación en la
frecuencia cardiaca, razones por las cuales sus padres prefirieron no forzarlo y dejar que
progresivamente se fuese aislando de los ámbitos sociales. Con gran dificultad ha llevado sus
estudios, sus calificaciones en evaluaciones presenciales son deficientes a comparación de
aquellas que debe hacer a distancia.

Antecedentes familiares

Su madre Carlota Sanabria de 40 años de edad, es una mujer saludable sin antecedentes
clínicas, presenta conductas estables, en tiempo pasado trabajo en la visita médica donde
conoció a su actual esposo el padre de Thomas quien es Alberto Rodríguez de 42 años de
edad, se conocen estando en un centro de salud ella llevaba una línea de medicamentos para
el dolor neurótico y el lleva actualmente la línea del dolor con medicamento para enfermedades
como la soriasis, Alberto es un hombre adulto que en su infancia fue diagnosticado con
ansiedad lo trato durante un tiempo prolongado y actualmente su ritmo de trabajo se ajusta a su
estilo de vida.

Descripción del funcionamiento general

Durante la valoración su apariencia no estaba acorde se mostró descuidado su actitud fue


evasiva, esquiva con deseos de culminar presenta pensamiento patológicos ya que refiere que
el ambiente está a un nivel muy caliente que le falta el oxígeno, presenta inhibición social,
demuestra sentimiento de inferioridad, evita el contacto visual, su discurso es pobre y que
refiere sentir miedo sentirse humillado por lo que diga o por como actué, presenta una
personalidad introvertida, su funcionamiento social es bajo.

Descripción de la conducta problema (parámetros)

Actualmente Thomas ha presentado los síntomas antes mencionados más acentuados


debido a que este por motivos del confinamiento a razón de la pandemia se aisló en su
totalidad del mundo externo su vida era fluida en casa con su familia y parecía todo marchar
muy bien sus estudios habían mejorado ya que este los llevaba en su totalidad a distancia, pero
ahora que debe retomar su vida académica a modo presencial ha estado bajo altos niveles de
estrés que han generado con mayor frecuencia la ansiedad en manifiesto al verse expuesto
nuevamente entornos sociales.

Hipótesis diagnóstica

De acuerdo a los datos suministrados por el caso se puede inferir en base a los síntomas y
comportamientos expuestos el sujeto de estudio cumple con criterios característicos de F40.1
Fobia social (300.23)
Conclusión

La adolescencia constituye una etapa vital de transición entre la niñez y la edad


adulta con límites temporales imprecisos. De hecho, no existe una edad específica de
inicio y final, dado que comienza con la llegada de la pubertad y culmina cuando se ha
alcanzado la madurez mental, la adolescencia posee ciertas características generales,
sin embargo, cada adolescente lo afronta de manera diferente, hacer frente a toda una
serie de retos que se concretan en el desarrollo físico, el descubrimiento de la
identidad, el desarrollo intelectual, la conquista de la autonomía personal y el desarrollo
de la conciencia moral. Por tanto este proceso de la adolescencia como sus
características y retos propios y peculiares existe y son reales, pero la manera de
manifestar esa realidad cambia de unas personas a otras.

Desde la niñez vamos forjando patrones de conducta pero en la adolescencia


cuando y tenemos cierta autonomía manifestamos con mayor claridad las posibles
situaciones que nos pueden estar generando un descontento ya sea por algo físico o
emocional, es por esto la importancia de este estudio ya que por medio de la presente
se logra tener conocimiento de algunas patologías sus característica la forma en cómo
se padece y como debe ser esta tratada o abordada, como lo es el caso de la identidad
de género, o aquellas personas que presente o padezcan angustia al no estar
identificados con su sexo biológico asignado.

El estudio de las diversas patologías nos lleva como estudiantes en formación a


maxificar el aprendizaje y a identificar entre sus criterios las diferencias que existen en
ocasiones al tener un estrecho parecido, el estudio de la salud mental es de suma
importancia porque afecta significativamente la salud física y esta debe ser detectada
tratada y proporcionar higiene y mantenimiento para reducir el margen de padecer
alguna de ella que comprometa su calidad de vida.
Referencias

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[Documento en línea]. Disponible:
https://www.vibetv.mx/moda/20220128/escala-de-kinsey-orientacion-sexual/
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Miller C. (S.f). Transgénero y disforia de género. [Documento en línea]. Disponible:


https://childmind.org/es/articulo/los-ninos-transgenero-y-la-disforia-de-genero/
[Consultado 2022, Abril 17].

Revista digital KidsHealth / para Adolescentes. Trastorno dismórfico corporal.


[Documento en línea]. Disponible:
https://kidshealth.org/es/teens/body-image-problem.html#:~:text=Las%20personas
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[Consultado 2022, Abril 17].

DSM-IV TR. Trastorno disocial. [Documento en línea]. Disponible:


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https://www.cppm.org.ar/wp-content/uploads/2015/06/DSMIV.pdf [Consultado 2022,
Abril 17].

DSM-IV TR. Trastorno fobia social. [Documento en línea]. Disponible:


https://www.cppm.org.ar/wp-content/uploads/2015/06/DSMIV.pdf [Consultado 2022,
Abril 17].

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