SALUDO POR EL 210 ANIVERSARIO DE LA FIRMA DEL ACTA DE INDEPENDENCIA

DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

Las luchas de los pueblos en el mundo contemporáneo demuestran su pasado libertario

y rebelde. La República Bolivariana de Venezuela no es ajena a esta verdad, el carácter
antiimperialista y el camino de dignidad que empezaron a consolidarse desde 1998 con
el arribo al gobierno de una opción popular representada por el comandante Hugo
Chávez Frías y la continuidad de este proceso conducido desde el año 2013 por el
presidente Nicolás Maduro Moros lo demuestran. Es decir, demuestran su heredad con
las luchas iniciadas por los pueblos liderados por Guaicaipuro, Francisco de Miranda,
Josefa Joaquina Sánchez, Juana Ramírez “La Avanzadora” y el gran Libertador Simón
Bolívar
Esas viejas y heroicas batallas como la de Carabobo hace dos siglos, así como la épica
jornada de Ayacucho hace 197 años no valdrían nada si esa continuidad por la lucha por
la libertad del pueblo y esa búsqueda de las dignidades sociales y humanas no tuvieran
como firme motor el hacer política para liberar, el hacer revolución para la construcción
de un nuevo mundo, el crear ciudadanía para mejorar las condiciones de vida. ¿No fue
el general Francisco de Miranda, quien fuera uno de los firmantes del Acta de la
Independencia de Venezuela el 5 de julio de 1811 representando a El Pao por la
provincia de Barcelona, el que dijo: “lograr el bienestar de la patria es la cúspide de la
felicidad humana”? Esas palabras vibran en los corazones y las mentes de todos los
venezolanos, bolivarianos y patriotas que entienden que esta lucha es por vocación de
servicio a la propia clase, al pueblo y por el pueblo. Pero no basta luchar como recordaba
en extraordinaria canción, el gigante Alí Primera, es importante entender junto con
Miranda que “el verdadero carácter de un patriota consiste en ser obediente a las leyes
de su país y miembro útil de la sociedad a la que pertenece”, es decir en luchar por la
transformación de la Patria y al mismo tiempo cambiar uno mismo en esa lucha para
mejor aportar. Pero aún eso no basta, Miranda también dijo: “Jamás he creído que pueda
construirse nada sólido ni estable en un país, si no se alcanza antes la independencia absoluta”.
Y esa es la gesta cuyo carácter se torna en la orden del día para nuestros pueblos, lograr la
independencia económica, la autonomía y el desarrollo de las propias fuerzas. Toda
independencia política se consigue con la independencia económica, por eso el imperialismo
sanciona, bloquea, hace boicot, para impedir aquello. Pero estamos seguros de que el pueblo
hermano de Venezuela no se rendirá. La sangre de los mártires y de los héroes y heroínas corre
por sus venas.

Por todo esto, queremos enviar a través de la compañera Cónsul de la República Bolivariana de
Venezuela en el Perú, Vivian Alvarado Linarez, un cálido abrazo al pueblo bolivariano que supo
dar siempre su mano solidaria para con los pueblos del Perú, antes durante la primera
independencia y ahora. Y con ese abrazo a ese digno pueblo, abrazo de hermandad y
agradecimiento, pero también de solidaridad permanente y revolucionaria, queremos fundirnos
en otro con el presidente Nicolás Maduro Moros, quien dirige con fortaleza y constancia los
destinos de su Patria.
Nos despedimos diciendo con Bolívar, “el que abandona todo por ser útil a su Patria, no pierde
nada y gana cuanto le consagra”. Y rubricamos con Chávez: “aquí estamos los hijos de Simón
Bolívar, de Guaicaipuro y de Túpac Amaru. Nosotros estamos resueltos a ser libres.”

Lima, 5 de julio de 2021

Martín Guerra

Primer Secretario de Izquierda Socialista