En segundo lugar, consideramos que no es correcto hacer justicia por mano propia, porque

es un acto negativo, los dolores o sufrimientos no son considerados sanciones legítimas

para los delincuentes en el país, ya que con esta acción surgen sentimientos de ira o de

odio, y esos sentimientos no es el tipo de justicia que se debe aspirar. Sarruta (2016) nos

menciona que “Son acciones de carácter privado y al margen de la ley, donde la autoridad

no tiene participación. El linchamiento siempre se traduce en la tortura física, aunque no

siempre finaliza con la muerte del receptor de la víctima” (Serruta Barriga, 2016, p.14).

Por lo tanto, de la cita, comprendemos que es un acto extremo y no representa la verdadera

intención para aplicar la justicia, ya que estos hechos mayormente se caracterizan por

golpizas y humillaciones, además debemos reconocer la igualdad entre los ciudadanos,

nunca podemos hacer entender a golpes a una persona, es por eso que el reconocimiento

igualitario es el modo pertinente a una sociedad democrática sana, y tomando actitudes

cómo “justicia por mano propia” nunca tiene efectos educativos, ni para los adultos y mucho

menos para los niños.

References

Serruta Barriga, S. V. (2016). Chapa tu choro: justicia por propia mano o ineficacia

de la justicia ordinaria. http://repositorio.unap.edu.pe/handle/UNAP/9560