Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
LA INVASION AL PERU
¿LA AVENTURA?:
Muchos han llamado a Francisco Pizarro Gonzáles un aventurero, han deslizado ideas sobre su valerosidad personal
en la consecución de sus ideas, aquél que visiona el norte y no teme, ni escatima nada en la consecución y realización
de sus planes. Más allá del elogio, no debe desconocerse todo el clima de conquista y búsqueda de nuevos horizontes
de tierras e indios que tamizaron la biografía de los ‘‘conquistadores’’.
EL PRIMER VIAJE:
Se realizó el 14 de noviembre de 1524, en el navío llamado ‘‘Santiago’’, con una tripulación que comprendía 112
hombres. Partiendo de Panamá lograron llegar hasta la región de los manglares en Colombia. A causa de las malas
condiciones del clima invernal y la falta de provisiones, murieron 32 tripulantes.
Casi exhaustos, se detuvieron en un puerto, que luego sería conocido como ‘‘Puerto del Hambre’’. Pizarro decidió
quedarse allí, mientras el navío, con algunos hombres, retornaba por alimentos a la Isla de las Perlas, que está cerca
de Panamá. En dicho puerto, sobrevivieron comiendo mariscos y palmitos; en ese trance perecieron más de 20 hombres.
El navío regresó con víveres después de 47 días Pizarro siguió al Sur y llegó a otro puerto. Los nativos, al ver a
‘‘Santiago’’, dejaron su poblado, refugiándose en la selva. Los españoles se internaron en el poblado y tomaron
provisiones, llamando al sitio el Fortín del Cacique de las Piedras. Al día siguiente fueron atacados sorpresivamente por
los naturales. Pizarro, al verse vencido, ordenó rápidamente la evacuación, rumbo a Panamá, llegando hasta el puerto
Chochama, que era un lugar situado a poca distancia del oeste de Panamá. Entre tanto, con la carabela ‘‘San Cristobal’’
y 70 hombres, Diego de Almagro había ido a socorrerlo, cruzándose en altamar ambos conquistadores. Siguiendo sus
huellas arribó hasta el Fortín del Cacique de las Piedras. Los belicosos nativos le salieron al encuentro y también
Almagro fue derrotado. En la lucha, Almagro perdió un ojo. Como represalia, hizo quemar el puerto, llamándose desde
ese momento ‘‘Puerto Quemado’’.
La expedición de Almagro se dirigió por mar hasta la desembocadura de un gran río al que llamaron San Juan.
Posiblemente esto ocurría el 24 de junio, pero no hallaron ningún rastro de Pizarro. De vuelta a Panamá, por fin
encontraron a Pizarro en Chochama, ahí Almagro recibe la orden de ir a Panamá a organizar la nueva expedición.
"Santiago", nombre de la embarcación navegada por Pizarro durante el primer viaje.
EL SEGUNDO:
Viaje Almagro salió de Panamá con dos carabelas y 110 hombres. Se unió a Pizarro en Chochama. Después de varias
penurias llegaron a la desembocadura del río San Juan y Pizarro decidió quedarse allí. Mandó un navío pequeño hacia
el Sur, al mando del piloto Bartolomé Ruiz, para que explorara. Otro navío dirigido por Almagro fue enviado de nuevo a
Panamá en búsqueda de hombres y provisiones.
El primer navío retornó luego de 70 días. Bartolomé Ruiz informó que había llegado a la zona denominada Manabí
(costa norte del Ecuador); confirmaría así la noticia de la existencia de su Imperio al encontrar una balsa de tumbesinos
en la bahía de San Mateo. Entre los nativos se encontraba Felipillo, quien con el correr del tiempo se haría famoso como
intérprete. Al regresar Almagro en la segunda embarcación y con provisiones, comenzaron el viaje hacia el Sur, llegando
a los poblados de Santiago, Atacames, y por último, la Isla del Gallo (costa sur de Colombia).
~2~
Pizarro se quedaría en dicha isla mientras que Almagro partía de nuevo a Panamá para informar al gobernador Pedrarias
sobre los acontecimientos. Grande fue la sorpresa de Almagro al encontrar a Pedro de los Ríos como nuevo gobernador,
al cual ofreció todos los obsequios traídos de la expedición. La esposa del nuevo gobernador, doña Catalina de
Saavedra encontró entre los obsequios un ovillo de algodón y dentro un papel con la siguiente copia:
TERCER VIAJE:
De vuelta en Panamá, Pizarro inició su tercer viaje el 20 de enero de 1531. Para ello contaba con tres navíos, 180
hombres, 37 caballos y perros. Después de navegar junto a las costas colombianas, los conquistadores llegaron hasta
la isla Puná en donde fueron recibidos cordialmente por el cacique Túmbala. Los españoles leyeron el requerimiento,
~3~
acto seguido comenzaron con los abusos y robos, lo cual ocasionó la lucha con los nativos en donde murieron 700
punaeños y 4 españoles.
A los 3 meses de haber llegado a Puná, los españoles siguieron su viaje hacia Tumbes, la cual era una provincia que
se encontraba dividida entre los seguidores de Huáscar y Atahualpa (Guerra Civil en el Tahuantinsuyo). El jefe
tumbesino le lamaba Chirimasa, él y los seguidores de Huáscar dieron la bienvenida y su apoyo, pues los creían dioses
(Viracochas) que venían a castigar al usurpador Atahualpa, quien había destruido su ciudad. Era el mes de abril de 1532
cuando los españoles se establecieron en Tumbes. El 1 de mayo de 1532 partieron de Tumbes, atravesando Poechos
con la ayuda de los caciques tallanes. Los españoles fundarán la primera ciudad española el 15 de julio de 1532, en el
valle de Tangarará, con el nombre de San Miguel, ciudad que fue después removida hacia las orillas del río Piura,
llamándose definitivamente San Miguel de Piura.
EL DESENCUENTRO DE CAJAMARCA:
Teniendo noticias Pizarro, que el Inca Atahualpa se encontraba en Cajamarca emprendió el viaje a dicha ciudad el 24
de septiembre de 1532 desde San Miguel de Piura. Llegando a Cajamarca el 15 de noviembre, Pizarro no ingresó a la
ciudad, quedándose en las alturas de Shicuana, al noroeste del valle. Al saber que el Inca se encontraba en los baños
de Cunoc (Baños del Inca), envió una comisión al mando de Hernando de Soto para invitar al Inca a una entrevista. El
Inca dio permiso a los españoles de ubicarse dentro de la ciudad y aseguró su asistencia al día siguiente para
entrevistarse. Tanto Atahualpa y Pizarro buscaban un plan para derrotar, al contrario.
Pasado el mediodía del 16 de noviembre de 1532, Atahualpa hacía su ingreso a la plaza de Armas de la ciudad, seguido
de un gran cortejo. Apareciendo el padre Vicente de Valverde, leyó el requerimiento ante Atahualpa, luego hizo alcanzar
el Evangelio al soberano, el cual sin tener un conocimiento del documento se deshizo de él. Dada la señal por Valverde
las huestes españolas comenzaron la matanza, pues el ejército del Inca se encontraba en los cerros al mando del
general Rumi Ñahui, como lo había propuesto el propio Inca Atahualpa, quien terminó siendo capturado por Pizarro.
Preso, el Inca ofreció colmar un cuarto con objetos de plata en cambio de su libertad; los españoles aceptaron y dieron
su palabra de dejarlo en libertad. Los tesoros, efectivamente, durante un año, comenzaron a llegar a Cajamarca. Dos
expediciones sobresalieron en la recolección de tesoros, la que se encaminó hacia Jauja y el Cusco y la segunda dirigida
por Hernando Pizarro, que atravesó toda la costa hasta llegar a Pachacámac. El 13 de mayo de 1533 se empezó a
fundir el tesoro de Atahualpa y para el 18 de junio del mismo año, se comenzaba a ‘‘repartir el tesoro entre los
conquistadores. Pero de nada le valieron a Atahualpa estos pagos. Para legalizar su ejecución fue acusado de haber
ordenado la muerte de su hermano Huáscar, habiendo dado la orden desde su propia prisión; de practicar la idolatría y
la poligamia; y de haberse sublevado contra los españoles. Fue condenado a morir en la hoguera, pero la pena fue
modificada luego de haberse bautizado en manos de Valverde. Tomando el nombre de Francisco fue sometido entonces
a la pena del garrote (atado a un palo y muerto por asfixia) el 26 de julio de 1533. Durante sus funerales, hermanas y
mujeres del difunto se suicidaron ahorcándose con sus propias trenzas para seguir en su ‘‘segunda vida’’. En setiembre
de 1533, Pizarro se encaminaba de Cajamarca hacia el Cusco.’’
EL INEXPLICABLE FINAL:
Resulta difícil comprender por qué un Estado como el Inca (aún cuando se encontraba en plena guerra civil entre
Huáscar y Atahualpa) en todo su esplendor económico, social y cultural fue derrotado por un grupo insignificante de
conquistadores españoles.
El historiador sanmarquino Waldemar Espinoza Soriano, ha elaborado hasta cinco teorías que intentan explicar las
causas de la derrota del Imperio Inca:
✓ La lucha entre las divinidades andinas e hispanas, en la cual el apóstol Santiago resultó vencedor.
✓ La superioridad tecnológica de los españoles.
✓ El absolutismo exagerado del Estado inca y el resentimiento que generó su expansionismo en los señoríos locales.
✓ La división de las panacas reales del Cusco, que conformaban dos bandos: uno que apoyaba a Huáscar y el otro a
Atahualpa.
✓ Las contradicciones políticas entre la etnia dominante inca (cusqueña) y las regiones intervenidas, conquistadas y
subyugadas por la fuerza.
DESAFIO