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Introducción.

Los inventarios son una parte importante del activo circulante de las empresas de
carácter mercantil el cual para su correcta utilización es necesario contar con
conocimientos específicos acerca de los métodos para llevar a cabo la correcta
valuación de los inventarios tomando en cuenta el tipo de mercancía que es parte
del giro principal de la entidad, vendo estos conocimientos se puede llegar a tener
un increíble crecimiento en la empresa si se organiza correctamente el inventario
de la misma; Pero esto también es importante reconocer la clasificación de activos
qué son parte de la entidad y que tengamos en cuenta en como pueden ser
organizados y aplicados para el bien de la empresa de tal manera que nuestro
crecimiento se base en los derechos y beneficios que ya tenemos aplicados
tomando en cuenta los costos debidos y así lograr utilidades por medio del giro
principal de la empresa y así provocar un crecimiento constante y controlado de la
entidad.
Existe para esto una variedad de operaciones las cuales ayudan a conocer tanto
el valor de los inventarios como él costó y la depreciación de los activos, todo esto
mediante métodos diversos los cuales se aplican según las decisiones que se
tomen en la empresa eligiendo el método que puede ayudar más al progreso de
las actividades mercantiles de la empresa. Para ello Es necesario conocer a fondo
cada uno de los métodos de valuación de inventarios, por ello en esta
investigación se dan a conocer los conceptos y operaciones qué se refieren a
estos temas de manera que puedan ser de ayuda para todo aquel que requiera
mantener un uso adecuado de los inventarios de cualquier empresa.
CONTROL INTERNO DE INVENTARIOS.

Los inventarios representan uno de los principales recursos de que dispone la


empresa. Es muy importante tener un adecuado abastecimiento de inventarios pues de
ellos depende las actividades primarias para las que se constituyó la empresa, con esto
realizar operaciones de compraventa y por lo consecuente concluirán en utilidades y
proporcionaran el flujo de efectivo con lo que se reiniciará el ciclo financiero de la
empresa.

¿QUÉ SON LOS INVENTARIOS?

Los inventarios son activos no monetarios sobre los cuales la entidad ya tiene los
riesgos y beneficios.
I.- Adquiridos y mantenidos para su venta en el curso normal de las operaciones de una
entidad;
II.- En proceso de producción o fabricación para su venta como productos terminados;
III.- En forma de materiales a ser consumidos en el proceso productivo o en la
prestación de servicios.
La NIF C-4 agrega que los inventarios comprenden artículos comprados y que
se manejan para ser revendidos esta es una primera opción, en segunda los
inventarios también se consideran artículos producidos y en proceso de fabricación por
la entidad, incluyendo las materias primas y otros materiales en espera de ser
utilizados en dicho proceso. En caso de un prestador de servicios, sus inventarios
incluyen los costos de servicios, sobre los cuales la entidad aun no reconoce al
correspondiente ingreso.
La mercancía que está sujeta a la compraventa y constituyen el objetivo principal
de las actividades primarias y normales de cualquier empresa, deben tener una
correcta valuación tanto del costo de ventas y al inventario final, es decir:
1.- Correcta valuación de costo de ventas, el cual se ha de enfrentar a los
ingresos del periodo y aparecerá dentro del estado de resultados, disminuyendo el
importe de las ventas netas, para determinar la utilidad bruta.
2.- Correcta valuación del inventario final, que se presentará dentro del activo a
corto plazo en el estado de posición financiera.

TIPOS DE INVENTARIOS

• Inventario inicial: es el inventario que refleja la cantidad de existencias


que una empresa tiene al comienzo del ejercicio contable. coincide con el
inventario final del ejercicio anterior.

• Inventario final: es el inventario que refleja la cantidad de existencias que


una empresa tiene al comienzo del ejercicio contable. Coincide con el
inventario final del ejercicio anterior.

• Inventario físico: Es contar, medir y anotar todas y cada una de las


diferentes clases de bienes o mercancías que se hallen en la fecha de
inventarios.
• Inventario de productos terminados: todas las mercancías que un
fabricante ha producido para vender a sus clientes. Son artículos
completos, que pueden venderse o bien utilizarse en los artículos que se
están fabricando.

• Inventarios en tránsito: Se utilizan con el fin de sostener las operaciones


para abastecer los conductos que ligan a la compañía con sus proveedores
y sus clientes respectivamente. Existen porque el material debe de moverse
de un lugar a otro.

• Inventario de materia prima: Representa las existencias de los insumos


básicos de materiales que habrán de incorporarse al proceso de fabricación
de una compañía.

• Inventario de productos en proceso: Son existencias que se tienen a


medida que se añade mano de obra, otros materiales y demás costos
indirectos a la materia prima, la que llegará a conformar por un componente
de un producto terminado; mientras no concluya su proceso de fabricación,
ha de ser inventario en proceso.

FORMULAS DE ASIGNACION DE COSTOS.

Costos identificados

El costo de los inventarios de partidas que normalmente no son


intercambiables entre sí y de artículos o servicios producidos y segregados para
proyectos específicos debe asignarse utilizando la identificación específica de sus
costos individuales.
La identificación específica significa asignar los costos a partidas individuales del
Inventario. Este es el tratamiento apropiado para partidas que se segregan para
un proyecto específico, sin tomar en cuenta si esas partidas fueron compradas o
producidas por la entidad. Sin embargo, la identificación específica de los costos
es inapropiada cuando en el inventario hay grandes números de partidas que
normalmente son intercambiables entre sí, ya que en estas circunstancias, el
procedimiento de seleccionar partidas que permanecerán en los inventarios puede
utilizarse para lograr efectos predeterminados en la utilidad o pérdida.

Costos promedios

De acuerdo con la fórmula de costos promedios, el costo de cada artículo


debe determinarse mediante el promedio del costo de artículos similares al inicio
de un periodo adicionando el costo de artículos similares comprados o producidos
durante éste. El promedio puede calcularse periódicamente o a medida en que
entren nuevos artículos al inventario, ya sea adquiridos o producidos.

Primeras entradas primeras salidas (PEPS)


La fórmula “PEPS” se basa en la suposición de que los primeros artículos
en entrar al almacén o a la producción son los primeros en salir; por lo que las
existencias al finalizar cada ejercicio quedan reconocidas a los últimos precios de
adquisición o de producción, mientras que en resultados los costos de venta son
los que corresponden al inventario inicial y a las primeras compras o costos de
producción del ejercicio.
El manejo físico de los artículos no necesariamente tiene que coincidir con
la forma en que se asigna su costo y para lograr una correcta asignación bajo la
fórmula PEPS deben establecerse y controlarse capas del inventario según las
fechas de adquisición o producción de éste.

CAMBIO DE FÓRMULA DE ASIGNACIÓN DEL COSTO Y DE MÉTODO DE


VALUACIÓN DE INVENTARIOS.

El cambio de un método de valuación de inventarios, sin que cambie la


fórmula de asignación del costo, debe tratarse prospectivamente, ya que el efecto
del cambio no genera efectos importantes, pues si se utiliza el método del costo
estándar, su resultado siempre debe aproximarse al costo real.

Inventarios incorporados a otros activos.

Algunos inventarios pueden incorporarse en otras cuentas de activo; por


ejemplo, los inventarios utilizados como un componente de inmuebles, maquinaria
y equipo construidos por la propia entidad. Los inventarios incorporados de esta
manera en otros rubros del activo deben reconocerse como costo de ventas o
gasto durante la vida útil de esos activos a través de su depreciación o
amortización, de acuerdo con la
NIF particular correspondiente.

CONTROLES INTERNOS DE INVENTARIOS

CONTROL INTERNO DE INVENTARIOS


El control interno de inventarios y el costo de ventas está vinculado con las
actividades de compra, fabricación, distribución, venta y consignación.
Un adecuado control interno exige que los inventarios sean debidamente
pedidos, recibidos, controlados, segregados, usados, contados físicamente,
embargados y facturados. Lo anterior para asegurar la corrección de los
inventarios y costo de ventas, incluyendo su adecuada valuación a costos.
Ejemplo de estos aspectos, en forma enunciativa pero no limitativa, son los
controles internos en cuanto a:

I. Autorización del método de valuación seleccionado por la empresa

En términos generales, por su importancia, la autorización de los métodos de


valuación de los inventarios y del costo de venta a cifras históricas y actualizadas,
deberá ser otorgada por la dirección de la empresa.
II. Segregación adecuada de las funciones de autorización, custodia y
registro.

La segregación de las funciones relativas a inventarios, tales como adquisición,


recepción, almacenaje y equipaje, evita que un departamento o persona controle
todas las fases de una transacción o controle los registros contables relativos a
sus propias funciones. La segregación también propicia una vigilancia permanente
entre los departamentos o personas involucradas en una misma transacción.

III. Registro oportuno de la inversión en inventarios y del pasivo


correspondiente.

El registro oportuno de las inversiones en inventarios, incluyendo en su caso, el


pago anticipado de los proveedores y aquellos que están en tránsito, tienen como
objeto asegurar que se están registrando en su totalidad dichas inversiones y
obligaciones dentro del periodo contable.

IV.- Registro oportuno de todos los embarques y, en su caso, su facturación,


incluyendo la contabilización del correspondiente costo de ventas.

El establecimiento de normas pre numeradas facilita el control y la


capacitación oportuna en registros contables de los embarques y, en su caso, el
registro de la factura y del costo de ventas, asegurando así la corrección de los
créditos al rubro de inventarios por estos conceptos y los movimientos correlativos
a otras cuentas afectadas por estas transacciones (clientes, ventas, costo de
ventas, comisiones e impuestos, etc.) dentro del periodo correspondiente.
Asimismo, deberán existir los controles necesarios para otro tipo de embarques,
tales como envíos para maquila, consignación a vistas, etc.

V.- Control de las devoluciones.

La existencia de controles para el manejo de las devoluciones debe permitir


asegurar que las mismas sean procedentes, estén debidamente autorizadas,
valuadas y oportunamente registradas dentro del periodo al que correspondan.

VI.- Custodia física adecuada de los inventarios

Debe existir custodia física y acceso restringido a zonas de almacenaje,


producción y embarques, con el propósito de establecer e identificar, claramente la
responsabilidad del personal involucrado en el manejo físico de estos bienes.

VII.- Inventarios físicos

Debe existir una planeación adecuada de la toma periódica de los


inventarios físicos, así como de su recopilación, valuación y comparación con
registros contables, incluyendo la investigación y ajuste oportuno de las
diferencias resultantes, deberá planearse en forma adecuada y llevarse a cabo
periódicamente un conteo de los inventarios propios y de terceros para constatar
su existencia.

VIII.-Procedimientos adecuados para el registro y acumulación de elementos


de costo.

La contabilidad debe captar información correcta y oportuna sobre la


acumulación de los elementos del costo de adquisición y en su caso, de los
productos, (incluyendo transferencias internas) para asegurar la adecuada
valuación de los inventarios y la determinación del costo de ventas del ejercicio,
así como la actualización de los mismos.

IX.-Registros adecuados para el control de existencias y anticipos a


proveedores.

El mantenimiento de registros auxiliares de las existencias en tránsito, en


los almacenes de la empresa, en consignación o en poder de terceros, así como
de los anticipos otorgados a los proveedores, representan controles que, mediante
la verificación por recuentos físicos, confirmaciones, etc. Ayudan a determinar la
existencia y adecuada valuación de los inventarios, así como para investigar el
origen de las diferencias, mermas, etc.

X.- Registros adecuados para el control de las existencias propiedad de


terceros en almacenes de la empresa.

Cuando existen mercancías propiedad de terceros en consignación, en


custodia, etc., se requiere de controles físicos, documentales y en registros que
capten oportunamente sus entradas y salidas de los almacenes, con el propósito
de distinguirlas de las propias.

XI.- Comparación periódica de la suma de los registros auxiliares con el


saldo de la cuenta de mayor correspondiente.

Con el propósito de asegurar la corrección de la cifra total de inventarios, es


necesario verificar periódicamente la igualdad entre el saldo de la cuenta de mayor
y la suma de registros auxiliares e investigar y ajustar, en su caso, las diferencias,
previa la correspondiente autorización.

XII.-Comprobación de los inventarios físicos por personal interno


independiente.
Es conveniente que personal distinto de quien autoriza, custodia, registra y
tenga acceso a los almacenes lleve a cabo comprobaciones de que los inventarios
físicos han sido efectuados adecuadamente desde su planeación hasta el ajuste
en registros contables.

XII.- Procedimientos para determinar la pérdida de valor de los inventarios y


el registro de las estimaciones correspondientes.

En atención de que pueden presentarse perdidas de valor de los inventarios


en el proceso de las operaciones de la empresa deben existir procedimientos
permanentes que permitan identificar las existencias con estos problemas, lo que
dará lugar, previos los estudios y autorizaciones correspondientes, a correcciones
en su valuación mediante estimaciones o cancelaciones.

XIV.- Adecuada protección a la entidad mediante la contratación de seguros


y fianzas.

Una medida complementaria de control interno, desde el punto de vista de


la protección de los inventarios, lo constituye un adecuado plan de seguros y la
contratación de fianzas de fidelidad del personal que maneja estos bienes.

XV.- Sistemas de información sobre cifras actualizadas.


Es necesaria la existencia de sistemas de información que, para la
determinación y registro de los efectos de la inflación, que incluyan:
o Medios que permitan asegura que se actualicen todos sus inventarios.
o Con respecto a los costos de reposición, debe existir expediente de
cotizaciones actualizadas y un archivo de compras donde se puedan
localizar los precios recientes, estudios de costo de reposición.
Incluyendo la integración de elementos por elementos del costo.
o En los casos en que se apliquen índices generales o específicos de
precios, la empresa deberá mantener expedientes en los cuales se
documenten los análisis por antigüedad, cálculos y los índices utilizados,
así como la evidencia de que estos se han obtenido de una fuente
apropiada.
En relación al costo de ventas deben existir elementos objetivos y
verificables que permitan determinar los costos actualizados al momento
de su venta.
o Separación de funciones en cuanto a la preparación, supervisión y
aprobación de la información actualizada.
o Verificación del adecuado y oportuno registro de las cifras actualizadas
en los libros de contabilidad.
Propiedades, Planta y Equipo

De acuerdo a Rodríguez (2006: 67), propiedad, planta y equipo “son los


recursos materiales e inmateriales, que han sido adquiridos para prestar unos
servicios a la empresa, con la finalidad de que esta pueda desenvolverse en sus
actividades y no para ser vendidos”.

Díaz y Vásquez (2013:137), señalan “este rubro consiste en una serie de


activos clasificados como no corrientes, porque se espera su utilización durante un
periodo mayor a doce (12) meses”. En este se ubican los equipos de transporte,
transformación, mobiliario, y demás bienes tangibles utilizados en las operaciones
de las entidades.

Según Méndez (2011), las propiedades, planta y equipo son activos tangibles
que se llevan a cabo para su uso en la producción, o suministro de bienes o
servicios, para arrendarlos a terceros, o para propósitos administrativos, y se
espera que sean utilizados durante más de un período. En efecto, se derivan las
siguientes:

Propiedades: dominio o propiedad, es el derecho de poseer exclusivamente


una cosa y gozar y disponer de ella, sin más limitaciones que las establecidas por
la ley o por la voluntad del propietario

Planta: Se refiere a construcciones generalmente grande para vivienda u


otros usos cimentada sobre un terreno.

Equipo: Es la colección de utensilios, instrumentos y aparatos especiales que


acompañan el trabajo de operarios, organizados para un fin determinado
En general, se puede decir que la propiedad, planta y equipos son los activos
tangibles que posee una empresa para su uso en la producción o suministro de
bienes y servicios, arrendamientos a terceros o propósitos administrativos, y se
esperan usar durante más de un periodo económico.

Méndez (ob.cit), determina que los elementos que conforman las


propiedades, planta y equipo son de mucha importancia en las entidades debido a
que contribuyen a la generación de ingresos por parte de la empresa, además con
el paso del tiempo la cantidad de estos activos que puede adquirir una empresa
puede llegar a ser significativa, lo cual tiene repercusiones en la forma de realizar
sus operaciones. Las propiedades, plantas y equipos comprenden:

 Terreno: precio de costo de los lotes de tierra donde se encuentran construidos los
edificios y también los terrenos donde no hay construcción.
 Edificios: representa los valores que la empresa posee en casas, locales, edificios
y toda clase de construcciones terminadas.
 Muebles y enseres: muebles y enseres de propiedad de la empresa,
contabilizados a precio de costo.
 Equipo de oficina: comprende los equipos adquiridos por la empresa, como
máquinas de escribir, sumadoras, calculadoras y otros equipos necesarios para la
buena marcha 

del negocio, registrados a precio de costo.


 Computadores y equipos de tecnología: Representa el valor de los computadores,
microcomputadores y equipos de tecnología de propiedad y al servicio de la
empresa.
 Maquinaria y equipo: equipos adquiridos por la empresa y destinados a la
producción.
 Vehículos: Vehículos de propiedad de la empresa, destinados al transporte de
personas o carga.
 Entre otros.

En general, las propiedades, planta y equipo representan el conjunto de


bienes de naturaleza tangible adquiridos, construidos o en proceso de
construcción cuya permanencia en la empresa va más allá de un ejercicio
económico, los cuales son destinados para el desarrollo del giro normal de las
operaciones del negocio y que por lo tanto no están destinados para la venta.
Tomando en cuenta a Rodríguez (2007), la propiedad, planta y equipo son
activos tangibles que se llevan a cabo para su uso en la producción, o suministro
de bienes o servicios, para arrendarlos a terceros, o para
propósitos administrativos, y se espera que sean utilizados durante más de un
período, dentro de los que se tienen.

Por otro lado, Rodríguez (2004: 67), propiedad, planta y equipo “son los
recursos materiales e inmateriales, que han sido adquiridos para prestar un
servicio a la empresa, con la finalidad de que esta pueda desenvolverse en sus
actividades y no para ser vendidos”. De esta manera se caracterizan porque:

 Son propiedad de la empresa, es decir, estos han sido facturados bajo la


denominación jurídica de la empresa y no bajo el nombre de algún socio o
empleado en particular.
 Son de naturaleza permanente, quiere decir que se adquieren con la finalidad de
que tengan una vida útil por un largo periodo de tiempo, y que solo dejarán de ser
propiedad de la empresa en caso que se así se requiera.
 Están destinados para el uso de las operaciones propias de la empresa y no para
la venta, esto señala que son adquiridos para hacerlos participes del proceso de
producción, de servicios o de venta y no para proporcionarlos a los clientes.
 Tienen cierto valor considerable, relacionado al valor de recuperación que los
activos fijos tienen en caso que se necesite de su reposición, de su venta o
cuando ya no se requiera de su uso dentro de las operaciones de la empresa.

Categorías de propiedad, planta y equipo

Partiendo del criterio de algunos autores como Méndez (2011), Robert (2000)
y Rodríguez (2004); para efectos contables, la propiedad, planta y equipo se
clasifica en tres categorías: activos no depreciables, activos depreciables, activos
agotables e intangibles.
    Activos no depreciables

Por regla general, toda la propiedad, planta y equipo se deprecia, pero


existen algunas excepciones, por lo que existen unos pocos activos fijos que no
son susceptibles de depreciar. De acuerdo a Méndez (2011), como la depreciación
es el reconocimiento de un gasto producto de la utilización de un activo, cuando
este no está en condiciones de ser utilizado, naturalmente no será depreciado.

Según Méndez (2011), los activos no depreciables son aquellos que, por su
naturaleza, al ser usados en la producción de bienes y servicios o por el paso del
tiempo, no sufren pérdida de su valor ni desgaste, por ende, son activos de
vida útil ilimitada o que se encuentran aún en proceso de construcción o de
montaje y que no se pueden depreciar pues todavía no se encuentran en
operación. Dentro de los activos no depreciables se tienen:

 Construcciones en curso. Todo activo comienza su proceso de desgaste o pérdida


de valor contable, a partir de la fecha en que la empresa comienza a usarlo para
los fines del negocio, y no desde la fecha de la compra, fabricación o construcción
como a veces se cree.
 Maquinaria y equipo en montaje. Cuando la maquinaria que compra o fabrica la
empresa para su propio uso aún no ha entrado en el proceso productivo porque
apenas se está montando, instalando o armando, no es depreciable, pues se
considera que, si la compañía no comienza a utilizarla, tal maquinaria no sufre
desgaste ni deterioro.
 Terrenos. Esta cuenta representa el valor de los terrenos o predios propiedad de
la entidad donde están construidas las edificaciones del ente económico, así como
los destinados a futuras ampliaciones o construcciones para uso o servicio del
mismo, por tanto, representan el precio de costo de los lotes de tierra donde se
encuentran construidos los edificios y también los terrenos donde no hay
construcción.

Según Robert (2000), los activos no depreciables son aquellos activos fijos
que por no estar operando o no están generando ingresos porque a la fecha de
presentación del balance, se encuentran todavía en la etapa de construcción o
montaje como, por ejemplo: terrenos, construcciones en curso, maquinaria y
equipo en montaje o en tránsito.

En resumen, los activos no depreciables son aquellos que no sufren


desgaste o demérito por el uso a que son sometidos y que por tanto no pierde un
precio, al menos contablemente.

Activos depreciables

La mayoría de la propiedad, planta y equipo utilizada por una empresa es


depreciable, en efecto, cuando sufren desgasto o deterioro por el uso a que son
sometidos o por el simple transcurso del tiempo, hacen parte de los activos
depreciables. Tomando en cuenta a Robert (2000), los activos depreciables
son aquellos que al ser usados en la producción de bienes y servicios pierden su
valor, ya sea por la acción de factores naturales o al volverse obsoletos por los
avances tecnológicos, por ejemplo:

Construcciones y edificaciones. Los edificios físicamente conforman una sola


unidad con el terreno sobre el cual están construidos. Sin embargo, para efectos
contables es necesario separar el uno del otro, al menos teóricamente.

Maquinaria y equipos. Corresponden a este rubro todos aquellos dispositivos


que utiliza la empresa para producir los bienes y servicios que comercializa.

Equipo de oficina. Esta cuenta registra los costos históricos de todos los


equipos de oficina, sean mecánicos o electrónicos, además de los muebles y
enseres de propiedad de la entidad, los cuales se utilizan en el desarrollo normal
de sus operaciones.

Equipo de transporte. Corresponden a este grupo los vehículos, que tienen


una vida legal normal de 5 años, es decir, que su desgaste es más acelerado que
el de la maquinaria, se destaca que, mientras mayor sea la vida legal de un activo
menor será su depreciación anual; mientras menor sea la vida legal de un activo,
mayor será su depreciación anual.

Para Méndez (2011), “los activos depreciables son aquellos que, por el
deterioro causado por el uso, las acciones de factores naturales, la obsolescencia
por avances tecnológicos, los cambios en la demanda de bienes y servicios a cuya
producción o suministro contribuyen a que pierdan su valor; de forma más
específica dentro de los activos depreciables se tienen”

En resumen, los activos depreciables son aquellos que con el paso del
tiempo se deterioran por lo general poseen una vida útil la cual es dada por la
empresa.
Activos agotables

De acuerdo a Méndez (2011), “los activos agotables representan los recursos


naturales de propiedad de la empresa y su cantidad disminuye de acuerdo al
tiempo que dura su explotación, su valor histórico se conforma por el valor de
adquisición, más todas las erogaciones incluidas en la exploración y todos los
rubros que aumenten su valor”

Para Robert (2000), los activos agotables representan los recursos naturales
controlados por el ente económico, su cantidad y valor disminuyen en razón y de
manera con mensurable con la extracción o remoción del producto. En este
sentido, el valor histórico de estos activos se conforma por su valor de adquisición,
más las erogaciones incurridas en su exploración y desarrollo, ejemplo de los
activos agotables: las minas, las canteras, pozos artesanos, yacimientos, entre
otros.

En resumen, los activos agotables son aquellos bienes representados por los


recursos naturales no renovables, que al cumplir los fines para los cuales fueron
adquiridos disminuyen su valor por la cantidad de producto que de él se extraiga.
Se puede decir que la propiedad, planta y equipos está conformada por los
activos tangibles que posee una empresa para su uso en la producción o
suministro de bienes y servicios, arrendamientos a terceros o propósitos
administrativos, y se esperan usar durante más de un periodo económico; razón
por la cual ameritan un adecuado control interno y manejo por parte de las
organizaciones.

También se tienen los activos intangibles, los cuales no serán tratados en


este trabajo.

Control interno de las propiedades, planta y equipo

En cuanto al control interno, Blanco (2007:92), señala “es un proceso


efectuado por la junta de directores de una entidad, gerencia y otro personal,
diseñado para proveer razonable seguridad respecto de logro de objetivos”. Es
decir, es una expresión que se utiliza para describir las acciones que adoptan las
autoridades superiores de una empresa o entidad para evaluar y dar seguimiento
a las operaciones financieras o administrativas.

Para Mantilla y Cante (2005), el control interno es un sistema contable que


comprende los métodos de procedimientos y recursos utilizados por una entidad,
para seguir las huellas de las actividades financieras y resumirlas de forma útil
para quienes toman las decisiones, debido a ello, existen dos tipos de controles
internos: administrativos y contables:

El control interno administrativo, no está limitado al plan de la organización y


procedimientos que se relaciona con el proceso de decisión que lleva a la
autorización de intercambios, sino que se relaciona con la eficiencia en las
operaciones establecidas por el ente.
El control interno contable comprende el plan de la organización y los
registros que conciernen a la salvaguarda de los activos y a la confiabilidad de los
registros contables. Estos tipos de controles brindan seguridad razonable:

 Los intercambios son ejecutados de acuerdo con autorizaciones generales o


específicas de la gerencia.
 Se registran los cambios para: mantener un control adecuado y permitir la
preparación de los estados financieros.
 Se salvaguardan los activos solo acezándolos con autorización.
 Los activos registrados son comparados con las existencias.

En general, el control interno es un instrumento de gestión que se emplea


para proporcionar una seguridad razonable de que se cumplan los objetivos
establecidos por la entidad, para esto comprende con un plan de organización, así
como los métodos debidamente clasificados y coordinados, además de las
medidas adoptadas en una entidad que proteja sus recursos, propenda a la
exactitud y confiabilidad de la información contable, apoye y mida la eficiencia de
las operaciones y el cumplimiento de los planes, así como estimule la observancia
de las normas, procedimientos y regulaciones establecidas.

El derecho sobre la propiedad no es requisito esencial para reconocer el


control. Sin embargo, en la Norma Internacional de Contabilidad N° 38 Activos
Intangibles (2008), se puede encontrar una definición más clara y completa para
entender este concepto y las implicaciones que tiene. En su párrafo 13, establece
que “una entidad controlará un determinado activo siempre que tenga el poder de
obtener los beneficios económicos futuros que procedan de los recursos
que subyacen en el mismo, y además pueda restringir el acceso de
terceras personas a tales beneficios”.

Esto quiere decir que, el control de los activos implica que necesariamente
deben cumplirse dos requisitos. El primero consiste en  que la entidad posea el
poder para controlar los beneficios económicos  incorporados al activo y utilizarlos
para sus propios fines, situación que  generalmente está soportada por derechos
legales o contractuales, sin  que esto sea un requisito indispensable para que
exista control, tal y  como lo establece el marco conceptual, y adicionalmente, para
que exista  control, la entidad debe poseer la capacidad para negar o limitar el
uso  que terceros puedan hacer a los mencionados beneficios económicos.
Para Romero (2006:206), el control incluye el “derecho de usar, el derecho
de disfrutar, el derecho de disponer y el derecho de propiedad”. Sin embargo, la
propiedad legal del activo deja de ser esencial para su reconocimiento, ya que a
pesar de ser ésta la que generalmente otorga el control del activo a la entidad,
puede existir control sin que haya tal condición sobre los activos (como es el caso,
por ejemplo, de una operación de arrendamiento financiero), cumpliéndose así con
la característica secundaria de esencia sobre la forma, que constituye parte de la
fiabilidad de la información financiera.

En este sentido, el Marco Conceptual para la Elaboración y Presentación de


Estados Financieros (2008), presenta varios ejemplos de hechos que suceden
dentro de una entidad, que, por ser controlados, independientemente de su forma
legal, pudieran ser considerados activos:

    La venta de un activo a un tercero, cuando existen acuerdos que aseguren a la


entidad que puede continuar disfrutando de los beneficios económicos
incorporados al activo vendido.

    Los procedimientos tecnológicos, producto de actividades de desarrollo llevadas a


cabo por la entidad sin patentar, siempre que la entidad controle los beneficios
económicos que se esperan de ellos.

Según Marcotrigiano (2011:83), respecto al control manifiesta “se ha dejado


atrás la creencia de que un activo sólo podría reconocerse como tal cuando se
tuviera la propiedad legal del mismo”.  En fin, los activos constituyen
esencialmente beneficios económicos futuros para la entidad, siempre y cuando
ésta ejerza control y se beneficie de ellos; debido a ello, las formalidades jurídicas
y legales pueden ser vistas como guías generales para identificar la sustancia
económica de las transacciones.
En el concepto contenido dentro del marco conceptual, el control sobre
el beneficio económico futuro asociado al activo se encuentra por encima de la
propiedad legal que pueda tenerse sobre el mismo, asegurando así la coherencia
con respecto a la característica de esencia sobre la forma, que hace que la
información sea fiable.
En general, para que exista control la entidad sobre las propiedades, platas y
equipos, se debe tener la capacidad de garantizar el uso de los beneficios
económicos para sus propios fines y de restringir el acceso de terceros a los
mismos.

Sistema de control interno de la propiedad, planta


y equipo

Para Chiavenato (2006:411), un sistema se define como “un conjunto de


elementos interdependientes e interrelacionados con grupo de unidades
combinadas que forman un todo organizado”. En este sentido, es considerado
como un conjunto de componentes que interaccionan entre sí con el propósito de
lograr el objetivo para el cual fue diseñado, atendiendo las necesidades y
requerimientos de la organización, dentro de los cuales se tienen los sistemas de
control interno y manejo de propiedad, planta y equipo.

De acuerdo a Cepeda (2003), el sistema de control interno conforma el


conjunto de planes y métodos adoptados por una empresa con el fin de asegurar
que los activos estén debidamente protegidos. En consecuencia, está entrelazado
con las actividades operativas de la entidad y existe por razones empresariales
fundamentales, aparte de ser una política de gerencia y siendo una exigencia
constitucional y legal, se constituye en las directrices principales de cualquier
empresa para modernizarse, cambiar y producir los mejores resultados, con
calidad y eficiencia.

Visto lo anterior, se puede deducir que el sistema de control interno es


primordial en las empresas, por la seguridad que presta para el buen desarrollo de
las tareas diarias, se convierte en algo necesario, para decidir hacia donde deberá
dirigirse los mayores esfuerzos durante su examen y si presenta debilidades se
puede incidir en su mejoramiento.
Objetivos del sistema de control interno de
la propiedad, planta y equipo

Tomando en cuenta a Rodríguez (2004), Mantilla  y Cante (2005), el sistema


de control interno y manejo de la propiedad, planta y equipo, constituye el conjunto
de medidas que toma la organización con el fin de proteger sus recursos contra el
despilfarro, el fraude o el uso ineficiente, asegurar la exactitud y la confiabilidad de
los datos de la contabilidad y de las operaciones financieras, asegurar el
cumplimiento de las políticas normativas económicas de la entidad y evaluar el
desempeño de todas las divisiones administrativas y funcionales de la entidad; por
tanto, se determinan los siguientes objetivos:

Protección de los activos

Según Rodríguez (2004), la protección de los activos es uno de los fines más
importantes del control interno ya que por medio de un adecuado sistema de
control interno, será posible evitar pérdidas, fraudes, errores, desperdicios e
ineficiencias, de igual forma podrá preverse contingencias que pudieran afectar los
recursos organizacionales.

Con motivo de que los activos de la organización, constituyen los principales


recursos para generar utilidad y un adecuado sistema de control interno, debe
prever medidas de vigilancia y comprobación que se establezcan desde antes de
la adquisición de los activos, pasando por su custodia, conservación y
mantenimiento, hasta su baja (por retiro o venta).
Para Mantilla y Cante (2005), este objetivo se relaciona a las medidas
adoptadas por la administración para prevenir o detectar operaciones no
autorizadas, acceso no autorizado a recursos o, apropiaciones indebidas que
podrían resultar en pérdidas significativas para la entidad, incluyendo los casos de
despilfarro, irregularidades o uso ilegal de bienes o recursos públicos.  En general,
los controles para la protección de activos no están diseñados para cautelar las
pérdidas derivadas de actos de ineficiencia gerencial, como, por ejemplo, adquirir
equipos innecesarios o insatisfactorios.

    Promoción de la confiabilidad de informes


financieros
De acuerdo a Rodríguez (2004), la revisión del control interno se asocia con
los ingresos y gastos. Actualmente se reconoce la existencia de una importante
finalidad el control interno, consiste en la prevención de pérdidas y la elaboración
de información contable y administrativa precisa en todas las áreas funcionales de
la empresa.

Dada las necesidades de control interno, éste debe abarcar a toda la


organización, por tanto, se requiere de información contable y administrativa
exacta y confiable, para ser utilizada en la toma de decisiones. No sólo por un
continuo proceso de verificación y análisis de los informes, de los registros que de
ellos se derivan, así como de las fichas de control, podrá la dirección superior
depositar su confianza en la información que le es presentada.

Según Mantilla y Cante (2005), este objetivo tiene relación con las políticas,
métodos y procedimientos dispuestos por la administración para asegurar que la
información financiera elaborada por la entidad es válida y confiable, al igual que
se revela razonablemente en los informes. Una información es válida porque se
refiere a operaciones o actividades que ocurrieron y que tienen las condiciones
necesarias para ser consideradas como tales; en tanto que una información
confiable es aquella que merece la confianza de quien la utiliza.

Medición del cumplimiento de la organización

El cumplimiento refiere a la acción y efecto de cumplir con determinada


cuestión o con alguien. En tanto, por cumplir, se entiende hacer aquello que se
prometió o convino con alguien previamente que se haría en un determinado
tiempo y forma, es decir, la realización de un deber o de una obligación (Definición
ABC, 2012),

En este sentido, el cumplimiento marca de alguna manera el camino del éxito


o no de las empresas, porque en tanto y en cuanto cumpla con sus obligaciones,
tal situación hará que la mismo pase a ser una compañía que inspirará confianza a
sus potenciales inversores por llevar efectivamente un cumplimiento en sus
obligaciones.

Según Rodríguez (2004), partiendo de la premisa de que no se puede


mejorar aquello que previamente no se ha medido, la cual se debe tener presente
al momento de pensar en identificar, formular y evaluar los indicadores; ninguna
función representa mejor el espíritu de la administración moderna que la de
control, puesto que la misma ayuda a la empresa a medir su nivel  de
cumplimiento, implicando el examen de las operaciones financieras,
administrativas y económicas  de la organización, para determinar que se han
realizado conforme a la normatividad legal, reglamentaria y estatutaria.

Eficiencia de las operaciones

De acuerdo a Mantilla y Cante (2005), uno de los objetivos del sistema de


control interno es mejorar la eficiencia de las operaciones de la empresa,
está relacionado con la misión o razón fundamental de la existencia de las
empresas, fortaleciendo sus objetivos estratégicos. Para cumplir este objetivo
cada área de la empresa establece objetivos específicos y para asegurar su logro,
debe proceder a gestionar los riesgos, definidos como la probabilidad que un
evento o acción afecte adversamente a la entidad.

Según Rodríguez (2004), es necesario saber lo que se está logrando


actualmente en el proceso operativo hacia los objetivos establecidos; además, en
esta información debe considerarse la solución a las necesidades presentes en el
lugar, tiempo y gente adecuada. Por tanto, sólo así se pueden obtener las bases
adecuadas para determinar desviaciones, establecer, comparar y analizar las
acciones correctivas a realizarse u otro tipo de acción administrativa.
   Cerciora miento de adhesión a políticas generales

Para Rodríguez (2004), las políticas son parte de la planeación, requieren


desde el punto de vista del control, algunos requisitos para su práctica eficiente,
eficaz y efectivo.  De esta manera tanto las políticas establecidas como los
procedimientos y programas, servirán en forma efectiva a la función de control, ya
que no se presentarán confusiones e interpretaciones erróneas.

Según Mantilla y Cante (2005), este objetivo hace referencia al seguimiento


de políticas que aseguran el adecuado uso de la propiedad, planta y equipo,
consistente en las disposiciones establecidas en las leyes y reglamentos, así
como concordante con las normas relacionadas con el rubro en estudio.

Procedimientos de control interno y manejo de


la propiedad, planta y equipo

Con el paso del tiempo la cantidad de propiedad, planta y equipo que puede
adquirir un mismo ente económico puede llegar a ser significativa. Por tal motivo,
es conveniente que desde el mismo comienzo de sus operaciones, se establezcan
procedimientos para lograr un adecuado control interno de la información
relacionada con los mismos. (Mantilla y Cante, 2005).

De acuerdo a Mantilla y Canté (2005), las empresas deben elaborar los


procedimientos de control interno, ya que son la base primordial para poder
desarrollar adecuadamente sus actividades, establecer responsabilidades,
información, medidas de seguridad y objetivos. En efecto, constituyen los
fundamentos específicos que, basados en la eficiencia demostrada y su aplicación
práctica en las actividades financieras y administrativas, son reconocidas en la
actualidad como esenciales para las empresas.
Para Whittington y Kurt (2000), Mantilla y Cante (2005), y Rodríguez (2007),
dentro de los controles aplicados a la propiedad, planta y equipo; se tienen los
siguientes:

Registro

De acuerdo a Mantilla y Cante (2005), el sistema de control interno y


manejo de propiedad, planta y equipos prevé la implementación y seguimiento de
registros adecuados para cada activo en particular; desde el momento de su
adquisición y durante toda su permanencia, hasta su salida definitiva, de manera
que permita su fácil y segura ubicación en todo momento; así como las
informaciones fundamentales respecto al mismo.

Para Rodríguez (2007), los registros de propiedad, planta y equipo deberán


ofrecer las siguientes informaciones: descripción de la propiedad; número de serie
del fabricante ,modelo, número, y cualquier otra identificación de importancia;
fuente de recursos con que fue adquirida la propiedad, incluyendo número de
donación u otra fuente de aportes; el título de propiedad; fecha de adquisición y
costo; localización, uso, condición de la propiedad y fecha en que la información
fue reportada; y costo de adquisición por unidad. 

Placas o etiquetas de                identificación

El control interno y manejo de la propiedad, plata y equipo cada vez es más


importante para que las empresas puedan identificar sus activos muy fácilmente
mediante un lector de código de barras. De ahí la importancia de colocar una
etiqueta o placa de identificación en cada activo, aunque a veces se lleva a cabo
con marbetes metálicos o de poliéster con códigos de barra.

De acuerdo a Mantilla y Cante (2005), las  etiquetas o placas de


identificación simplifica los controles futuros de inventario a partir de la utilización
de lectores de códigos estándar, por tanto, es recomendable que en una empresa
se diseñen tarjetas de identificación para cada uno de estos activos, en las que
debe figurar su código, ubicación, costo histórico, fecha de adquisición,
depreciación acumulada, y todos los desembolsos que la empresa realice sobre
estos activos a lo largo de su vida útil como reparaciones, mantenimiento,
adiciones, entre otros.

Según Wilcatec Soluciones Empresariales (2012), “la etiqueta de


identificación por cada propiedad, planta y equipo debe ser única, debe
mostrar claramente, el logotipo de la empresa, de la misma manera debe llevar un
código o número que identifique el activo y también el código de barras para
lectura mediante escáner óptico y posterior control en puntos de seguridad, en
caso de ser necesario, estas etiquetas o placas pueden ser de: plastisol, acero
inoxidable, aluminio y poliéster; descritas en el siguiente cuadro”
 Mayor auxiliar

Según Mantilla y Cante (2005), en el mayor general se debe tener una


cuenta auxiliar por cada clase de propiedad, planta y equipo que contenga el
mayor número de información para su fácil localización e identificación como son:
nombre del activo, número de identificación, lugar donde se encuentra, fabricante,
fecha de instalación, costo de la compra, otros costos incidentales, los datos sobre
depreciación como valor de desecho, monto a depreciar y cualquier otra
información necesaria.

De acuerdo a Rodríguez (2007), cuando una empresa debe controlar una


gran cantidad de activos fijos, se recomienda el uso de un libro mayor auxiliar, en
el que se guarda información detallada sobre cada activo fijo. El mayor auxiliar
consiste en un registro separado para cada unidad de activo, si es adecuado,
facilita el trabajo al analizar las adiciones y retiros, al verificar la depreciación y el
gasto de mantenimiento y al comparar autorizaciones.

En general, es recomendable comparar periódicamente el saldo del libro


mayor auxiliar con las cuentas de control del libro mayor general, de esta manera
los libros mayores auxiliares son muy útiles a la hora de determinar los gastos por
depreciación, completar formularios de impuestos y seguros, o de registrar la baja
de activos fijos.

Inspección física
De acuerdo a Mantilla y Cante (2005), la inspección física consiste en examinar la
propiedad, planta y equipo, con el objetivo de hallar características físicas
significativas para determinar cuáles son normales y distinguirlas de aquellas
características anormales; es decir, es la inspección y relevamiento físico de
activos fijos en uso, donde los rubros inspeccionados usualmente son: terrenos,
edificios, instalaciones industriales, maquinarias, hardware, mobiliario, vehículos,
entre otros.

A criterio de Rodríguez (2007), algunos de los parámetros que se consideran


en la inspección física son los siguientes:

 Número de rótulo.
 Denominación por catálogo.
 Marca, modelo y número de serie.
  Principales características técnicas y descripción de sus partes componentes.
 Local, sector o área donde presta servicio.
 Centro de costo.
 Rubro contable.
 Estado de servicio (en operación, en stand by, obsoleto).
 Clasificación asegurable (asegurable, no asegurable, excluible).

En este sentido, se deben realizar inspecciones físicas periódicas, con la


finalidad de constatar la real existencia de la propiedad, planta y equipo que
aparecen en los registros, determinar posibles diferencias y las causas de las
mismas; así como establecer responsabilidades en los casos que proceda.

Según Mantilla y Cante (2005), los resultados de la inspección física de la


propiedad, planta y equipo, se reconcilian con los registros de contabilidad, en
efecto, cualquier diferencia entre las cantidades resultantes de la inspección física,
y las que muestren los registros de contabilidad deben investigarse para
determinar las causas de las diferencias. En general, la inspección física permite a
las empresas obtener de manera directa toda la información relativa a cada uno de
los activos fijos y bienes de control.

Fichas de control
Según Rodríguez (2007), la ficha de control es el impreso que se utiliza para
medir o controlar algún proceso que se esté llevando a cabo en la empresa. Para
Mantilla y Cante
(2005), es un documento (ficha) en el cual se especifican las características técnicas o físicas del
activo, cuya función es llevar un registro o historial de todos sus movimientos o incidencias.
En este caso, cada cuenta general de propiedad, planta y equipo debe ser desglosada en fichas
que indicarán el movimiento de la misma.

Es decir, las fichas de control son una herramienta utilizada para facilitar el trabajo
dentro de una empresa a fin de chequear el movimiento de las operaciones de
entrada y salida de la propiedad, planta y equipo.
Levantamiento físico.
Levantamiento físico de inventario.
Es una forma de verificación física que consiste en constar la existencia o
presencia real de los suministros insumos, repuestos y otros bienes o materiales
almacenados, apreciar su estado de conservación y condiciones de seguridad.

Levantamiento de propiedades planta y equipo.

El levantamiento físico de inventario de bienes muebles deberá realizarse cuando


menos cada seis meses. El levantamiento físico de inventario de bienes muebles
se podrá realizar por usuario o por espacio ocupado.

Se entenderá por levantamiento físico de inventario de bienes muebles por


usuario, aquel en el que se verifique de manera individual el (los) bien (es)
asignado (s) en el resguardo. Se entenderá por levantamiento físico de inventario
de bienes muebles por espacio ocupado, aquel en el que la circulación del
inventario se realice de manera perimetral o en línea recta.

El resultado del levantamiento físico de inventario de bienes muebles, deberá


notificarse por escrito al titular del área en donde se haya realizado la verificación.
La notificación al área de la dependencia para el levantamiento físico de inventario
de bienes muebles, deberá realizarse cuando menos con tres días de anticipación.
Ejemplo de levantamiento físico.
Conclusión.

Tras realizar la investigación Hemos llegado a la conclusión de Lo que implica el


mantener un inventario bien organizado y evaluado correctamente según los
métodos de valuación de inventarios los cuales nos ayudan a entender
completamente cuál es el valor por el cual debemos tomar en cuenta nuestras
mercancías a la hora de realizar las operaciones mercantiles de manera correcta.
También es importante el conocer adecuadamente las propiedades de planta y
equipo con las cuales se cuentan en la empresa para realizar adecuadamente las
actividades empresariales diarias haciendo uso de la información referente a las
propiedades de planta y equipo las cuales pueden marcar la diferencia a la hora
de tomar ciertas decisiones.
Bibliografía
Fuentes bibliografías.

(ROMERO, 2012)

(NIDIA, 2012)

(GUADALUPE, 2011)

(PUBLICOS, 2013)

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