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~Capítulo uno~

-Tienes que casarte y lo sabes deja de ser una egoísta y piensa en el reino- dijo la reina fuera
de la habitación de la princesa

-No me casare aún, ni siquiera tengo dama de compañía y así quieres que conozca hombres?
Que clase de madre eres?- la princesa dijo quejándose

-Oh ¿Quieres una dama de compañía? Pues tendrás una- dijo la reina alejándose de aquella
puerta mientras se escuchaban sus pasos resonando por el pasillo

La princesa dio un suspiro de alivio al darse cuenta que ya se había ido su madre, no
soportaba la presión que le ponía su madre para casarse, no entendía porque tenía que
casarse con aquellos idiotas que venían a pedir su mano, no es como que me importara pero
¿Porque solo son hombres? No me importa realmente pero una mujer me pediría en
matrimonio algún día

-Necesito salir a tomar aire- la princesa dijo mientras se alejaba de su habitación para dirigirse
al jardín donde estaban sus hermosas flores que plantó y cuidaba como si fueran un pequeño
bebé

La princesa pensaba que si se iba lejos tal vez no la obligarían a casarse con un imbécil,
probablemente encontrará a la mujer se sus sueños aquella chica alta de cabello negro, pero
solo era su imaginación. Después de un rato pensando eso se dio cuenta que estaba
oscureciendo necesitaba entrar

-Vaya pensé que estarías en tu habitación-

Se escuchó detrás de ella

-Madre!, qué encantadora sorpresa pensé que habías salido- al voltear se dio cuenta que su
madre no estaba sola, había una mujer atrás de ella

-Como sea, entra tengo que presentarte a alguien- paso al lado de ella sin decir nada más, ni
siquiera dignarse a mirarla

Sin quejarse solo las siguió al ver hacia enfrente, miro a aquella mujer misteriosa, era muy alta
pero tenía una capucha no sabía cómo era su cara y la curiosidad la estaba matando hasta que
por fin llegaron al castillo, por estar tan distraída con aquella mujer misteriosa no se había dado
cuenta que su madre le estaba hablando

-Maldición Amalia ¿Escuchaste lo que dije?- la reina miraba furiosa a la princesa

-Perdón madre me distraje- la princesa Amalia dijo por fin mientras sus mejillas se tornaban
color carmesí al darse cuenta que la mujer misteriosa se había percatado que la miraba

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-Ugh Amalia porque eres así? Como sea ella será tu dama de compañía preséntate por favor-
la reina suspiró enojada

-Por cierto ella fue parte de nuestros caballeros pero ahora será tu dama de compañía así que
ella podrá protegerte así que ya no te quejaras de que los guardias estén contigo siempre-
menciono la reina con un sonrisa

La mujer misteriosa se quitó la capucha y con una sonrisa me tendió la mano para saludarla
pero me di cuenta que aquella mujer se incaba

-Un gusto princesa soy Niz su nueva dama de compañía espero y llevarme bien con usted-
depósito un beso en mi mano y levantándose mientras me guiñaba el ojo

-El gusto es mío Niz- mis mejillas se tornaban carmesí de nuevo al ver su altura y su cabello
negro brillante ella era muy hermosa

-Bueno señoritas es tarde, les quería decir que en lo que la habitación de la señorita Niz está
terminada que probablemente sea mañana dormirá contigo- la reina mencionó mientras me
miraba a los ojos

Por educación no repliqué ni nada pero era la primera vez que iba a convivir con alguien que no
conocía mayormente hablaba con mi madre y sirvientes del castillo pero jamás con alguien
más, ni siquiera hablaba tanto con mi padre me percaté que la señorita Niz me esperaba para ir
a dormir me miraba con esos ojos color esmeralda al igual que aquél vestido que llevaba

-Princesa Amalia ¿Nos vamos?- me observaba tan seria que asentí porque no me salían las
palabras ella era tan intimidante, al entrar a la habitación ví que ahora tenía dos camas bueno
al menos no dormiré con ella aunque igual mi madre no lo hubiera permitido alguien del pueblo
durmiendo con la realeza será algo que dejaría en ridículo mi Reino, de hecho es algo
arriesgado dormir en la misma habitación y más porque es mujer es algo mal visto el que mujer
y mujer duerman juntas

-Princesa la reina me dijo que tenía que ducharse antes de cenar ¿Quiere que prepare sus
cosas?-

-No es necesario y aunque seas mi dama de compañía no tienes porque estar conmigo todo el
tiempo casi soy una adulta puedo hacerlo por mi misma- al terminar de decir eso Niz me
observo y de repente sonrió cosa que me dio escalofríos ya que su sonrisa parecía algo
maliciosa mientras se me acercaba y tomó mi mentón haciendo que la mirara

-Cariño de verdad crees que estoy aquí porque quiero? Tú madre me va a pagar por protegerte
y estar contigo obviamente solo estoy por el dinero así que cállate- soltó mi mentón y se alejó

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de mí, de nuevo mi rostro era carmesí por esa mujer, de verdad era intimidante claramente me
sonrojaba por miedo

-Duchate ya trajeron todo- Agh otra mujer molesta con la que tengo que vivir hasta que me
case

-Por cierto princesa su madre me mencionó que sus sirvientes están algo ocupados ya que en
este momento hay muy pocos no podrán ayudarla a ducharse probablemente a vestirse si pero
si usted desea puedo ayudarla yo-

-Ma bañaré yo sola no necesito tu ayuda- intenté sonar seria pero creo que no funcionó

-En realidad no es pregunta de todos modos soy tu dama de compañía no tienes que ponerte
nerviosa y más porque tengo prometido- realmente no sé porque mencionó a su prometido no
es como que yo creyera que le gustan las mujeres solo me pongo nerviosa porque apenas nos
conocemos y ella se ve mayor que yo, no tanto como unos 4 o 5 años más que yo

-No, me bañaré sola tampoco pregunté si te quieres bañar báñate después primero seré yo-
por primera vez en mucho tiempo hablé cómo si fuera mala eso es muy emocionante y genial,
necesito bañarme rápido ya será la hora de cena y mi madre me va a matar si no bajo
temprano para saludar al hombre que vive aquí, mi padre…

-Princesa deje un conjunto en su cama por favor no tardé falta media hora para la hora de
cena- detrás de la puerta del baño se oía es voz la voz que me dijo que era comprometida pero
no entiendo aún porque lo dijo ¿Y si cree que me gustan las mujeres? Eso sería una catástrofe
en el reino y de nuevo perdería mi dignidad aparte es obvio que me gustan los hombres jamás
estaría con una mujer

Por fin terminé de bañarme me dirigí a la habitación estaban las sirvientas esperándome
supongo que para vestirme no miraba a Niz por ningún lado supondré que ella ya está
duchándose me preguntó si estará enojada conmigo aunque si lo estuviera no creo que lo
mostraría sería algo grosero y ella parece ser muy seria quiero suponer que aunque es alguien
del pueblo cuando fue parte de nuestros caballeros aprendió sobre lo básico de la etiqueta
aunque fue algo grosero que me tomara del mentón y aún estoy enojada por que mencionara a
su prometido es algo innecesario.

-Princesa terminamos debería bajar al comedor su dama de compañía la espera fuera- dijo una
de las sirvientas la cuál camino hacia la puerta para que yo pudiese pasar al salir ví a Niz con
un vestido color dorado y con su cabello ahora recogido parecía una muñeca de porcelana
ahora que podía observar su cara sus facciones son bastante lindas si ella fuera de la nobleza
probablemente tendría bastantes propuestas de matrimonio camine para que podamos
dirigirnos al comedor no charlamos todo era un silencio para mi algo incómodo pero para ella
parecía que le no le importaba eso me alegraba creo bajamos escaleras y aún así por todo el
camino ella no dijo nada hasta que llegamos al comedor

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-Su majestad acompañe a la princesa así que me retiró- Niz saludo a mi madre y después de
marchó del comedor cuando se fue no me quedaba nada más que saludar a mi padre el
saludar a mi madre para mi no era nada molesto amo a mi madre pero mi padre es algo más
molesto que nada y casi no convivo con él lo cual es aún más extraño

-Padre un placer cenar con usted esta noche a qué se debe que hoy cene con nosotras el
Emperador tiene una agenda algo ocupada- intenté sonar amable pero creo que fui grosera mi
madre y hermana me miraban como si tuviste algo en la cara

-Quería pasar tiempo con mis hijas antes de que te cases y claro necesito estar con mi esposa
es hermosa- su comentario me hizo incomodar bastante no lo de casarme si no que dijo sobre
mi madre si ella es hermosa pero él jamás está con ella si no se trata sobre trabajo él tiene
varias concubinas y la mayoría ya tienen hijos con él aunque aún así yo soy la heredera el
compromiso de mi madre fue hecho sin que ella quisiera ella odia a mi padre por eso es que
me tiene tanta paciencia para escoger a un esposo -¿Por qué debo casarme? Puedo ser
emperatriz sin necesidad de un esposo se supone que soy la heredera- mi madre tosió
incómoda al igual que mi hermana -No seas descortés hermana- pude ver que mi hermana
tenía miedo de nuestro padre ella intentaba ser perfecta delante de él -Déjala solo no sabe que
no se puede gobernar sin un hombre- mi padre se miraba molesto por lo que dije creo que más
de lo usual pero nada que no pueda arreglar yendo a ver sus amadas concubinas.

Al terminar de comer hice una reverencia a mis padres y salí del comedor por fin el ambiente
era muy incómodo no quería ver más a mi padre por hombres como él no quiero casarme como
que no se puede gobernar sin un hombre se que yo seré la primera mujer heredera del trono y
que mi padre quiere que me casé para que un hombre se encargué de lo "importante" creo que
el odia el solo tener hijas claro que yo era la única opción como heredera el no a tenido ningún
hijo varón y soy la hija mayor de la emperatriz actual el claramente no puede hacer que el hijo
de una concubina sea emperador a menos que se case con la concubina pero que clase de
idiota dejaría a una buena emperatriz por una simple concubina.

-¿Señorita está lista para dormir?- Las palabras de Niz me hicieron dar cuenta que ya estaba
en mi habitación cuánto rato puedo llevar pensando que clase de persona soy solo esperó que
Niz no se haya dado cuenta -Si estoy lista- los sirvientes llegaron a ayudarme a poder quitarme
el vestido es difícil quitarse un corset sola cuando terminaron se retiraron pude ponerme la ropa
para dormir Niz también se recostó en su cama pero ella quedó dormida de inmediato la
observé hasta que por fin cerré mis ojos ella es muy linda hasta durmiendo aunque creo que no
le agrado.

Es el primer capítulo de una historia que se me ocurrió mientras dibujaba un pareja de chicas
aunque espero que les guste tarde días escribiendo