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Señor presidente, mediante su honorable investidura la delegación de Níger se dirige a este Consejo

de seguridad para dar su postura sobre el tópico en cuestión.

Es de público conocimiento de que la agresión militar de Rusia a Ucrania está teniendo un efecto
directo a la seguridad alimentaria y en la asequibilidad de los alimentos en el mundo.

El mundo mira con preocupación cómo las consecuencias de la guerra en Ucrania pueden acelerar
una crisis mundial de alimentos. Rusia y Ucrania exportan alrededor del 50% de los cereales que
necesitan el Norte de África y Oriente Próximo. El este de África es aún más dependiente y casi el total
del grano importado proviene de Moscú y Kiev.

Por tal motivo, en esta difícil coyuntura mundial es aún más urgente promover un enfoque de la
política alimentaria basado en los derechos, a fin de atender las necesidades de mil millones de
pequeños agricultores de todo el mundo, muchos de los cuales, aunque parezca increíble, no tienen
suficiente que comer. Este enfoque también debe tener en cuenta los derechos y necesidades de los
consumidores pobres, en especial las mujeres y los niños, que padecen hambre en medio de la
abundancia.

A menos que se efectúen cambios amplios e innovadores en nuestras políticas alimentarias a tal
situación, veremos propagarse el hambre por todo el mundo una vez más, como lo hizo la peste en la
época medieval. La vergonzosa realidad es que, pese a que disponemos de los conocimientos y los
medios financieros y tecnológicos para impedirlo, la mitad de la población humana padece unos
niveles de desnutrición y pobreza totalmente incompatibles con su dignidad y sus derechos
intrínsecos. Esto no sólo es vergonzoso, sino que, por utilizar la terminología religiosa, es un verdadero
pecado.

Finalmente, proponemos a esta Comunidad Internacional buscar y mantener la paz, siempre


mediando el uso de la palabra, así como lo sugiere la carta de la ONU, evitando poner en riesgo a la
falta de alimentos a todo el mundo. Paz no es ausencia de guerra sino también de condiciones que nos
conduzcan a ella. Entre todos podemos lograr superar este conflicto; ¡que nuestros compromisos no
queden en meras palabras!

Muchas Gracias.

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