El documento cuenta la historia de Andrés Pérez, un inmigrante venezolano en Perú. Dejó a su familia en Venezuela para buscar mejores oportunidades de trabajo en Perú, donde recibió una oferta de trabajo en una mina a través de una amiga. A pesar de las dificultades como la xenofobia y su primo que lo abandonó, Andrés continuó trabajando y pudo enviar dinero a su familia. Luego encontró trabajo como taxista y formó una nueva familia en Perú con una mujer peruana con quien tend
El documento cuenta la historia de Andrés Pérez, un inmigrante venezolano en Perú. Dejó a su familia en Venezuela para buscar mejores oportunidades de trabajo en Perú, donde recibió una oferta de trabajo en una mina a través de una amiga. A pesar de las dificultades como la xenofobia y su primo que lo abandonó, Andrés continuó trabajando y pudo enviar dinero a su familia. Luego encontró trabajo como taxista y formó una nueva familia en Perú con una mujer peruana con quien tend
El documento cuenta la historia de Andrés Pérez, un inmigrante venezolano en Perú. Dejó a su familia en Venezuela para buscar mejores oportunidades de trabajo en Perú, donde recibió una oferta de trabajo en una mina a través de una amiga. A pesar de las dificultades como la xenofobia y su primo que lo abandonó, Andrés continuó trabajando y pudo enviar dinero a su familia. Luego encontró trabajo como taxista y formó una nueva familia en Perú con una mujer peruana con quien tend
- Mensaje: Aprovechar todas las buenas oportunidades que se te
presentan en la vida. - Intención: Entretener - Historia: Lo que informo en esta crónica, es como el señor Andrés, afronta sus dificultades, a pesar de dejar a su familia en Venezuela, pera poder buscar un mejor futuro para él y para ellos. El momento con más dramatismo es cuando su primo decide dejarlo solo, y Andrés opta por quedarse. Y el cierre de la crónica, es que pudo tener una estabilidad, puede ayudar a su familia a pesar de la distancia, y pudo tener una familia en Perú, gracias a oportunidad que le dio la vida.
Desde la situación de Venezuela, cada día hay más inmigrantes en Perú.
Personas buenas, personas malas. Todos con el fin de poder tener una buena estabilidad de vida. De la buena forma y de la mala forma. Conocí al señor Andrés Pérez, que en el 2017 ingresó al Perú. Pero pongámonos en contexto, él trabajaba en una industria petrolera en Venezuela, le iba bien, o al menos podía sustentar a su familia, no estaba solo, él y sus hermanos pudieron cargar con todo el peso que tenían encima por la fuerte crisis. Con el paso de los años, la situación empeoró. Lo que hizo la gente, fue salir del país, para buscar algo mejor. El señor Andrés recibió una llamada de una amiga muy cercana a él, era venezolana y ya se encontraba trabajando en el Perú. Ella le dijo que necesitaban personal para trabajar en una empresa de minería por un periodo de tiempo asignado por la misma empresa. Andrés llamó a su primo hermano, para decirle que es una buena oportunidad, y que deben aprovechar para poder sacar adelante a su familia, y sin duda alguna, vinieron al Perú. Desde ese entonces empezó un nuevo camino. Ver el mundo de otra forma. Cargar con peso de la xenofobia que existe en el Perú. A pesar de las dificultades Andrés y su primo, siguieron trabajando. Pasaron dos años, y su primo no aguantó más. No quería continuar en ese trabajo, no se adaptó. Se regresó a Venezuela dejando a Andrés solo, él se quedó pensando en qué hacer, ya que su primo era su mano derecha, por un momento pensó en regresarse con él, pero no se rindió, pudo continuar solo y cumplir sus tres años trabajando en la empresa de minería, y pudo mandarle dinero a su familia en Venezuela. Cuando terminó con ese trabajo en el 2020, siguió buscando otro, como toda persona que quiere salir adelante. Hasta que encontró una asociación de taxis en Lambayeque, en la que pudo trabajar con un auto alquilado. Se adaptó rápido a su nuevo trabajo, y nunca dejó de lado a su familia. Conoció a una mujer peruana, y poco a poco se fueron enamorando. Hasta que, en el 2021, recibió la noticia de que será Papá. El señor Andrés muy contento, llamó a su familia, y ellos nunca le dieron la espalda, lo motivaron a seguir adelante. La meta a la que quiere llegar el señor Andrés, es traer a su familia de Venezuela, para poder viajar a otro país con ellos y con su nueva familia peruana. Todo esto se pudo dar gracias a una llamada de la amiga del señor Andrés.