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 SUPERMAQUILLAJE
CÓMO OBTENER UN MAQUILLAJE NATURAL PARA EL DÍA Y
ESPECTACULAR PARA LA NOCHE EN APENAS 15 MINUTOS O
MENOS

© 2018 Claudia Arnello R.

Todos los derechos reservados. Queda rigurosamente prohibida, sin la

autorización escrita del titular del “Copyright”, bajo las sanciones
establecidas en las leyes, la reproducción parcial o total de esta obra por
cualquier medio o procedimiento, incluyendo fotocopias, grabación o
cualquier otro método mecánico o electrónico, el tratamiento informático
y la distribución de ejemplares de ella mediante alquiler o préstamo
públicos, excepto en el caso de pequeñas citas insertas en artículos
periodísticos y otros usos con fines no comerciales permitidos por la ley
de Copyright.

ISBN 978-1-7325882-0-2

Ebook ISBN 978-1-7325882-1-9

Primera Edición

Diseño de Portada por: German Creative • Formato para Ebook: Hynek

Palatin • Corrección de Textos: Alejandro Cisternas • Fotografías Modelo:
René de la Cruz | www.renedelacruz.cl • Fotografía Autora: Carlos
Damanee | www.damanee.com • Modelo: Carolina Verdugo • Asistente
de Maquillaje: Valeska Parraguez

EDITA: AMARANTA COMUNICACIONES SPA

www.claudiaarnello.com
 Para mi hija Julieta.
Y todas las supermujeres del mundo.
 CONTENIDOS
INTRODUCCIÓN
La supermujer
¿Qué es el Supermaquillaje?
CAPÍTULO 1
IDENTIFICANDO TUS SUPERPODERES
Poder 1: Tu tipo de piel
Poder 2: Tu tono de piel
Poder 3: Tus rasgos a potenciar
CAPÍTULO 2
CÓMO CONSEGUIR UNA PIEL SUPERHERMOSA
Desmaquillar
Limpiar
Exfoliar
Tonificar
Sérum
Contorno de ojos
Crema facial
Protector solar
Autobronceante
Mascarillas faciales
CAPÍTULO 3
LAS SUPERHERRAMIENTAS
Brochas de maquillaje
Otras herramientas
Cómo cuidar tus superherramientas
CAPÍTULO 4
EL SUPERMAQUILLAJE DE DÍA Y PARA TRABAJAR
Paso 1: Primer
Paso 2: Corrector
Paso 3: Base
Paso 4: Cejas
 Paso 5: Sombra de ojos
Paso 6: Delineador de ojos
Paso 7: Máscara de pestañas
Paso 8: Rubor o blush
Paso 9: Labial
Paso 10: Fijador
CAPÍTULO 5
SECRETOS PARA UN SUPERMAQUILLAJE DE NOCHE
Smokey eye
Contouring
Strobing
Pestañas postizas
CAPÍTULO 6
SUPERAPLICACIONES ESPECIALES
Embarazadas
Pieles maduras
Tatuajes
GLOSARIO DE MAQUILLAJE
AGRADECIMIENTOS
SOBRE LA AUTORA
Claudia Arnello es especialista en Marketing Personal para mujeres.
Fue Miss Chile Universo 1998 y modelo publicitaria. Ha trabajado en
medios de comunicación como conductora de televisión, radio y
medios digitales. Es titulada en Relaciones Públicas, con amplios
estudios de Marketing en Chile y EE.UU. Hoy dirige una exitosa
empresa, con la cual realiza seminarios, charlas y cursos de
Marketing Personal, tanto presenciales como online, a través de su
academia www.claudiaarnello.com
INTRODUCCIÓN
Si quieres aprender cómo maquillarte en apenas 10 o 15 minutos o
menos, ya sea para trabajar, para el día a día o para ir a una cena,
corrigiendo imperfecciones como manchas y ojeras, y te dure toda la
jornada sin que se corra ni quedes con la piel como cartón…, este
libro es para ti.

Como me imagino que este no es tu primer acercamiento al mundo

del maquillaje y tal vez has participado en algún taller, o te han
enseñado algunas técnicas o has buscado videos y tutoriales en
Internet, quiero decirte que si no has tenido éxito maquillándote, no
es tu culpa. Hay muchísima información que, a veces, te puede
llevar a confusión. De hecho, es precisamente ese exceso el que te
impide conseguir los resultados que quisieras.

Del mismo modo, si alguna vez pensaste que el maquillaje no es

para ti, que no eres lo suficientemente hábil o que requiere
demasiado tiempo (del cual, por cierto, no dispones, porque tu vida
es acelerada y llena de actividades, especialmente en las mañanas),
quiero que pongas esos temores en reposo. Tú puedes hacerlo.
Solo necesitas a la persona adecuada que te lo explique.

La publicidad y la industria de la estética quieren hacerte creer que

para ser bella necesitas comprar muchos productos y realizar
infinitos tratamientos de alto costo.

A ellos les conviene imponer estándares de belleza inalcanzables,

porque no les importan tus logros, ni les interesa que estés
satisfecha contigo misma. Solo quieren tenerte como clienta de por
vida para que compres más y más productos que en realidad no
necesitas. En cambio a mí sí me importas, y deseo con todo mi
corazón que te sientas y te veas como la mejor versión de la
maravillosa mujer que eres.

Para ello, he dedicado varios años de mi vida a ayudar a las

mujeres a potenciar su imagen personal. El maquillaje es una
herramienta con la cual podemos lograr resultados inmediatos en
nuestra apariencia. Si lo piensas bien, nuestro rostro es lo primero
que todos ven, y la verdad es que no siempre refleja cómo nos
sentimos. ¿Te ha pasado alguna vez que, estando sin maquillaje, te
han preguntado si estás enferma o si te sientes mal? Lo peor de
todo es que puede que en ese momento te sientas estupendo, pero
lamentablemente tu rostro dice lo contrario.

Por otro lado, hay días en que realmente nos sentimos mal o sin
energía, pero después de maquillarnos, cambiamos radicalmente, y
al mirarnos al espejo, instantáneamente nos empezamos a sentir
mejor, lo que no solo nos afecta a nosotras, sino que impacta de
manera positiva en todo nuestro entorno: familia, trabajo, seres
queridos… Todos se ven beneficiados con nuestro renovado estilo y
entusiasmo.

En mis talleres he visto transformaciones impresionantes, y no estoy

hablando solo de lo físico, sino de los cambios de actitud que tienen
mis alumnas al verse con un rostro descansado, fresco y luminoso,
totalmente natural y, lo mejor de todo, realizado con sus propias
manos.
Cuando nos vemos bien, nos sentimos preparadas para enfrentar
cualquier situación. Seguramente has notado que cuando no
alcanzas a maquillarte por la mañana, andas el resto del día
insegura o como escondiéndote de los demás. ¡Ni hablar de tener
un encuentro casual con alguien que nos importa!

A una amiga le pasó hace unos días. Me contó que la semana

anterior, mientras paseaba a su perro cerca de su casa, de pronto
se detuvo un auto cerca de ella. Al volante iba un tipo
extremadamente guapo, quien se asomó por la ventana para,
aparentemente, consultarle algo. “¡Menos mal que iba maquillada!”,
me dijo. Entonces ella, muy canchera, se acercó y le siguió el
cuento, intercambiaron teléfonos y quedaron de verse.

Hasta ahí todo iba bien. Pero solo un par de días después, mi amiga
fue de compras al supermercado y salió de su casa sin maquillaje,
con el pelo revuelto y con buzo. Y ley de Murphy. ¿A quién crees
que se encontró frente a frente en el pasillo de las bebidas? ¡Al
mismo guapetón que había conocido unos días antes!

Ella quería que la tierra se la tragara o que las bebidas cayeran

todas sobre su cabeza en ese instante. Pensó en darse la vuelta,
pero ya estaban frente a frente; no había nada que hacer más que
enfrentar la situación. Me contó que, al comienzo, él no la reconoció,
pero que a los pocos segundos, su cara de espanto lo dijo todo.

Yo sé que el tiempo es oro para nosotras las mujeres, y es la

primera razón para no maquillarnos. Eso, además de no saber cómo
hacerlo.

Sé que sueñas con verte y sentirte hermosa, descansada, fresca y

jovial, tanto en tu trabajo como en tu vida personal. Sé que enfrentas
grandes desafíos y que quieres conseguir cosas importantes para ti
y para tu familia. Lo sé porque yo misma lo experimenté. Por eso
escribí este libro, para mostrarte cómo tú puedes hacerlo de manera
sencilla y obtener resultados espectaculares en cosa de minutos y
para que evidencies que el maquillaje es una poderosa herramienta
de la imagen personal.

Si sigues el paso a paso de mi sistema de maquillaje, lograrás los

resultados que deseas. Pero eso no es lo único importante. Como
ya sabes, verte bien es mucho más que una mera banalidad. De lo
que en verdad se trata es de tu autoestima, de tener seguridad en ti
misma, de quererte y valorarte lo suficiente como para convertirte
cada día en la mejor versión de ti misma.
LA SUPERMUJER
Antes de profundizar en cómo realizar el Supermaquillaje, quisiera
hablar acerca de las supermujeres a las que va dirigido este libro.

En primer lugar, quiero dejar en claro que la supermujer es aquella

que encarna varios roles y realiza múltiples funciones a lo largo del
día y, además, las cumple de manera excepcional: es madre,
esposa, cocinera, limpiadora, cuidadora, educadora, chofer,
enfermera, cuidamascotas… y, por si fuera poco, tiene un trabajo
demandante, en el cual debe tratar con clientes, proveedores, jefes,
colegas, etc. Ella empieza a correr desde que abre los ojos por la
mañana, y deja de hacerlo solo cuando regresa a la cama a dormir.

A la supermujer no le basta con tener múltiples roles y funciones

que cumplir porque ella, además, quiere hacerlos todos bien. Desea
ser supermamá, superesposa, supercocinera, superdueña de casa,
superguapa, etc. Y todo esto, en las mismas 24 horas que tiene el
resto de los terrícolas. Todo un desafío, ¿no es cierto?

La supermujer hace todo con amor, y pretende que todo salga

perfecto. Sin embargo, el tiempo le juega en contra; le faltan horas
para hacer todo lo que se propone. Por eso, cuando tiene que elegir,
se posterga y se deriva a un segundo plano, empieza a descuidarse
y se olvida de sí misma. A veces pasan años hasta que se da
cuenta de que ya no es la misma, no se reconoce cuando se mira al
espejo. ¿Te sientes identificada?

Sé muy bien de lo que estoy hablando, porque yo también soy una

supermujer. Mi día empieza a las 5:00 horas, hago ejercicio, medito,
levanto a mi hija de 8 años y la ayudo a prepararse para ir al
colegio. Empiezo a trabajar a las 8:00 horas, respondo correos, voy
a una reunión, hago clases, grabo un video, estudio online y no paro
hasta que mi hija llega a casa y la ayudo con las tareas. En
ocasiones vamos al dentista, a un taller, a comprar algo que le hace
falta... llevamos a nuestra perrita al veterinario, voy a hacer las
compras al supermercado, a la ferretería para comprar un repuesto,
a conversar con el vecino porque tiene una filtración que humedeció
mi techo, llevo el auto a la revisión técnica, voy a la farmacia a
comprar las vitaminas de mi hija que se acabaron… también voy a
yoga, a hacerme la manicure, al cumpleaños de una amiga… Y
suma y sigue… Como verás, el tiempo también juega en mi contra.

Mi meta con este libro es ayudar a dos tipos de supermujeres.

Aquellas que son principiantes y no saben maquillarse, tendrán su

primer acercamiento al mundo de los productos cosméticos y
descubrirán qué alternativas ofrece el mercado, para qué sirven y
cómo se usan. Aprenderán cuáles son los productos más indicados
de acuerdo con su tipo de piel y colorido. Y, por supuesto,
aprenderán a maquillarse paso a paso de manera sencilla, con un
sistema que incorpora técnicas profesionales muy efectivas que se
aplican en cosa de minutos.
Para aquellas que se maquillan y están un poco más avanzadas,
este libro les aportará grandes secretos de belleza y maquillaje, lo
que les hará la vida más simple y ayudará a lograr aún mejores
resultados en tiempo récord.

El sistema de maquillaje que he creado es perfecto para todas las

mujeres, de todas las edades, colores, tipos de piel, etc. Está
diseñado para que cada una potencie su belleza natural con un
maquillaje profesional de una manera muy sencilla y en 10-15
minutos o incluso en menos tiempo.

Una vez que aprendas el Supermaquillaje, nunca más tendrás la

excusa del tiempo para no empezar tu día con tu mejor cara, y
descubrirás que algunas cosas maravillosas comenzarán a ocurrir.

En las primeras dos semanas de incorporar a tu vida las

rutinas de cuidados de la piel, esta se transformará y
comenzará a lucir el doble de homogénea y luminosa que
antes.
Podrás disimular ojeras, manchas y rojeces de manera
efectiva utilizando productos y técnicas profesionales.
 Tu maquillaje durará todo el día y no se correrá. Nunca más
sentirás que se absorbe y desvanece, porque conocerás los
secretos para que dure toda la jornada.
Lucirás hasta 5 o 10 años más joven y le dirás adiós a la base
que luce como cartón.
Y todo esto lo harás en 10-15 minutos o incluso menos tiempo.
Lo que contiene este libro me ha significado más de veinte años de
aprendizaje, y gracias a ello he realizado cientos de Talleres de
Automaquillaje a mujeres de todas las edades y nacionalidades. En
este libro solo comparto técnicas que funcionan.

Espero que lo disfrutes y que lo aprendido te ayude a verte y sentirte

como la maravillosa mujer que estás destinada a ser.
¿QUÉ ES EL SÚPER MAQUILLAJE?
El Supermaquillaje es un superpoder con el cual podrás verte y
sentirte espectacular en cosa de minutos.

Es una fórmula secreta que te permitirá maquillarte con resultados

naturales corrigiendo imperfecciones como ojeras, manchas y
rojeces en tu rostro de manera efectiva.

El Supermaquillaje es la combinación perfecta de técnicas que

utilizan las profesionales, con pasos simples y al alcance de todas
las mujeres. Al fin podrás conseguir los resultados que deseas
usando los productos que necesitas (lo justo y necesario) y sin
preocuparte de que los efectos se desvanezcan durante el día.

El Supermaquillaje está pensado para que dure largas jornadas y te

brinde la seguridad que necesitas para enfrentar cualquier situación,
tanto en tu vida personal como profesional.

Yo aprendí a maquillarme siendo muy joven. Empecé a trabajar

como modelo publicitaria a los 15 años de edad y tuve la fortuna de
protagonizar importantes campañas de prestigiosas marcas, tanto
en Chile como en el extranjero. Participé en cientos de comerciales
para televisión, fotografías publicitarias y desfiles de moda. Aprendí
los secretos de los profesionales a los cuales observaba y
preguntaba todo acerca de sus técnicas y productos favoritos.

Luego, el año 1998, fui elegida Miss Chile para el concurso Miss
Universo y tuve el privilegio de representar a mi país en Hawai.
Antes de viajar, me capacité con profesionales de una de las marcas
de maquillaje más prestigiosas para así obtener los mejores
resultados.

Muchas personas piensan que las misses cuentan con un grupo de

expertos que las asesora en su maquillaje, peinado y vestuario, pero
no es así. La verdad es que cada candidata debe saber hacer de
todo por su cuenta, tanto para los eventos sociales como para las
fotografías y la pasarela. Cada uno de estos maquillajes es distinto,
pues varía de acuerdo con el entorno, como las luces y
escenografía, y requiere de destreza y habilidad.

Si bien siempre disfruté mi trabajo como modelo, desde pequeña

tuve una visión de mí misma vestida con un traje de dos piezas y un
maletín (esta era la imagen de mujer ejecutiva hace más de veinte
años). Me gustaba la idea de ser una mujer de negocios,
empoderada y estilosa, por supuesto.

Ingresé a estudiar Relaciones Públicas. Luego de titularme, decidí

cumplir mis sueños y convertirme en una ejecutiva del mundo
empresarial.

En mis años de trabajo como modelo publicitaria, muchas veces

tuve que representar el papel de mujer de negocios. Las
vestuaristas me elegían unos trajes elegantes y a la moda, el
peluquero me hacía un peinado con ondas y volumen (digno de
comercial de champú) y el maquillador me dejaba natural con un
toque de color en los labios. Todo este proceso demoraba un par de
horas y requería de al menos tres o cuatro profesionales distintos
para lograr el resultado esperado: la ejecutiva perfecta.

Yo me miraba al espejo y soñaba con que ese momento algún día

se concretaría.

Cuando al fin me convertí en ejecutiva de verdad, me enfrenté a la

dura realidad. La intensidad del trabajo y el ritmo de vida acelerado
no me dejaban el tiempo suficiente para transformarme en esa
ejecutiva modelo que tenía en mi mente. Y todo se volvió aún más
difícil después de ser madre. Si antes el tiempo se me hacía escaso,
luego de la maternidad apenas alcanzaba a ponerme lo primero que
encontraba para luego salir corriendo.

En algún momento sentí una gran frustración por no poder llevar esa
vida de ensueño que había alimentado en mi mente por tantos años.
Y si bien contaba con todas las herramientas para poder hacerlo,
había algo en lo que estaba fallando.

Fue entonces cuando tuve una especie de revelación fashionista.

Siempre he admirado a Victoria Beckham, desde que encarnaba a
Posh en las Spice Girls. De hecho, me gustaba porque era la
elegante y sofisticada del grupo, algo así como la ejecutiva del
grupo pop. Victoria se caracterizaba por usar unas tenidas
ajustadas, siempre con zapatos de taco altísimos. En todas las fotos
y en distintas situaciones aparecía con sus stilletos: bajándose de
un auto, caminando por la calle, de paseo con sus niños, etc. Ella
lucía impecable a todo evento, jamás una mueca de incomodidad.
¿Cómo lo hará?, pensaba yo.

Hasta que un día Victoria apareció con unos pantalones anchos y

unas zapatillas bajas declarando en un medio que su ritmo de
trabajo como diseñadora de modas le exigía estar cómoda. ¡Ajá!
Victoria también era humana como yo.

Observé su nuevo look y descubrí que si bien ahora se vestía

distinto, ella seguía siendo elegante y estilosa… Y fue entonces
cuando todo me hizo sentido: el secreto está en adaptarse. Si yo era
capaz de tomar todos mis conocimientos profesionales de maquillaje
y los adaptaba a mi nueva realidad, podría lograr buenos resultados
sin necesidad de pasar horas y horas en ello.

Lo primero que hice fue definir los 10 pasos básicos de un

maquillaje de día para sentirse natural. Este se caracteriza por los
colores suaves y naturales (rosados, damascos, café, beige). El
objetivo es lograr un resultado tan sutil que parezca como si no nos
hubiésemos maquillado o solo hubiésemos aplicado un par de
productos.

Incluí todos los secretos que utilizan las profesionales para lograr
efectos fabulosos, en un paso a paso sencillo que se pudiera
realizar en la mañana cuando el reloj está en contra. El desafío
consistió básicamente en dos cosas: elegir los productos más
indicados y definir las mejores técnicas de aplicación.

Luego calculé el tiempo que me demoraba en realizar cada uno de

los 10 pasos y los registré. Lo importante era definir un orden de
prioridad. De esta manera podría realizar distintas combinaciones de
pasos de acuerdo con el tiempo disponible.

Así, si en 15 minutos ejecuto los 10 pasos, puedo tener una

alternativa en la cual me demore 10 minutos realizando menos
pasos, y otra aún más rápida de 6 minutos que considere menos
pasos aun.

Además, me di cuenta de que en la medida que la piel de mi rostro

esté en mejores condiciones, necesito menos productos para lograr
buenos resultados y el maquillaje luzca mejor. De esta manera, si
era capaz de crearme una rutina de cuidado para mi piel que me
tomara pocos minutos al día, no tendría que invertir tiempo y dinero
en tratamientos estéticos y de belleza. Es lo mismo que evitar largas
y costosas visitas al dentista con un cepillado de dientes diario y el
uso de hilo dental y enjuague bucal.

Luego de dos semanas de realizar mi rutina de cuidado de la piel,

esta empezó a verse más homogénea y luminosa. Solo necesitaba
algunos productos para conseguir excelentes resultados, sin invertir
tanto dinero, ya que las cantidades que se requieren están
pensadas para que duren tres meses.

Desde que puse en práctica mi sistema del Supermaquillaje, ya no

tengo excusas para no verme bien todos los días. Mi combinación
de pasos me permite estar lista en apenas cinco minutos, lo cual es
perfecto para esos días en que quiero dejar descansar mi piel.
Porque quiero ser muy honesta contigo: los fines de semana que me
quedo en casa no me apetece para nada maquillarme. Pero si voy a
ir a comprar al supermercado, me aplico uno o dos de los pasos
para sentirme cómoda y preparada para cualquier ocasión.

Puede que tú no admires a Victoria como yo, pero la idea de

adaptarse es aplicable a todas las supermujeres que corren todo el
día, y yo sé que si estás leyendo esto, es porque eres una de ellas.

Seguramente hoy en día te estés maquillando de la siguiente

manera: te aplicas un producto en tu casa, luego te pones otro en el
auto cuando te toca luz roja o en el metro/bus cuando se detiene, y
terminas de maquillarte a escondidas en el escritorio de tu trabajo.
Indudablemente, esta es la razón por la que no logras buenos
resultados: no estás usando los productos adecuados para ti y
sigues haciendo lo mismo una y otra vez. Ya lo decía Einstein: “Si
buscas resultados distintos, debes dejar de hacer siempre lo mismo”

El Supermaquillaje está especialmente pensado para mujeres que

tienen poco tiempo, como tú y como yo, y que quieren verse lo
mejor posible, para sentirse cómodas frente a cualquier
circunstancia. Además, las rutinas de cuidado son simples de
realizar y permiten ahorrar mucho tiempo y dinero en tratamientos
de belleza.

Este sistema no solo me ha funcionado a mí, sino también a cientos

de mujeres que ya lo están implementando. Tal es el caso de mis
alumnas, que en estos momentos están disfrutando de los
maravillosos resultados que obtienen día a día.

La única manera de sentirte cómoda y segura para enfrentar

cualquier situación durante el día es realizando un maquillaje rápido
y efectivo por la mañana, que disimule tus imperfecciones y resalte
tu belleza natural.
La única manera de realizar un maquillaje rápido, efectivo y con
resultados naturales es con un Supermaquillaje.
Como sabes, toda heroína cuenta con un plan de acción, y eso es
precisamente lo que haremos en este capítulo.

Si quieres obtener los mejores resultados en tu maquillaje, es

fundamental que utilices los productos indicados para tu tipo de piel
y que sepas elegir los colores que más te favorecen. Para ello, tanto
en el cuidado de tu piel como en tu maquillaje, es fundamental
escoger los cosméticos adecuados para ti.

Por ejemplo, ¿te has fijado que a veces la base de maquillaje se ve

craquelada, como tierra seca en pleno verano? Pues bien, esto
ocurre por falta de hidratación de la piel y se soluciona utilizando las
cremas correspondientes y eligiendo la base más pertinente.

Y, por el contrario, ¿has notado que en ocasiones la base de

maquillaje se ve oleosa y brillante? Esto sucede porque la piel es
grasa y no se están usando los productos correctos, tanto en
cremas como en maquillaje.

Conocernos y saber elegir los productos más convenientes para

cada una son claves para lucir un maquillaje hermoso y duradero.

Por lo tanto, lo primero que haremos será identificar tus

superpoderes. Estos son:

Tu tipo de piel
Tu tono de piel
Tus rasgos por potenciar
Para comenzar, descubriremos tu tipo de piel y sabremos si es seca,
grasa, normal o mixta.

Luego, identificaremos cuál es el tono de tu piel y descubriremos si

perteneces al grupo de invierno, verano, primavera u otoño. Esta
información te permitirá elegir los colores apropiados para tus
productos de maquillaje (base, rubor, labiales, etc.)
Y, posteriormente, identificaremos cuáles son los rasgos de tu rostro
que quieres destacar. Todas tenemos una belleza única y especial.
El secreto para vernos hermosas es reconocer aquello que nos
define y potenciarlo de la mejor manera. Por ejemplo, tus rasgos a
destacar podrían ser tus ojos, de mirada intensa y lindo color, o tus
labios definidos, o tus cejas perfiladas, etc.

Por último, identificaremos cuál es tu criptonita.

Las imperfecciones que quieres corregir.

Toda heroína tiene su lado débil y vulnerable, aquello que prefiere
disimular y que no le gusta tanto de sí misma. Por ejemplo, podrían
ser tus ojeras, muy oscuras y marcadas, que te hacen lucir cansada,
aunque no lo estés; o algunas manchas en el rostro o granitos y
rojeces producto de la rosácea.

Si quieres hacer tu maquillaje en poco tiempo todas las mañanas

por el resto de tu vida, entonces vale la pena invertir un poco de
tiempo y energía en este proceso de auto-conocimiento y
planificación. ¿Estás de acuerdo?
 Poder 1
Tu tipo de piel
La piel, el mayor órgano del ser humano, está en permanente
relación con los demás órganos de nuestro cuerpo y nos mantiene
alertas sobre eventuales disfunciones o enfermedades.

Las tres funciones básicas de la piel son: proteger, transmitir e

intercambiar. La piel nos protege de todos los contactos con el
exterior, nos transmite información del mundo por medio de
múltiples terminaciones nerviosas, del tacto, la temperatura y el
dolor. A través de ella, además, se producen numerosos
intercambios entre nuestro organismo y el exterior como, por
ejemplo, la síntesis de vitamina D, esencial para el crecimiento de
los huesos.

Existen distintos factores que determinan la piel que tenemos.

Básicamente, heredamos la piel de nuestros padres, tanto en su
color como en sus características. Sin embargo, la piel va
cambiando con los años, ya sea por el estilo de vida, el consumo de
medicamentos, la contaminación o el estado de ánimo. Por lo tanto,
es muy probable que tu piel de hoy sea distinta de aquella de hace
unos años y, seguramente, también lo será en relación con la que
tendrás a futuro. Cuida tu piel. De ti depende que esté en las
mejores condiciones.

Una piel hermosa está asociada a un estilo de vida saludable. Es

difícil que tu piel luzca

sana si tienes malos hábitos, como fumar, beber alcohol, tomar café
y comer frituras en exceso. Por el contrario, la incorporación de
buenos hábitos te ayudará a lucir radiante: ingiere agua en
cantidades importantes, duerme las horas suficientes, haz ejercicio,
protégete de los rayos solares y mantén una dieta balanceada.
LA IMPORTANCIA DE LA
ALIMENTACIÓN
La alimentación es esencial. Permanentemente estamos renovando
las células muertas de la superficie de nuestra piel. Estas nuevas
células se desarrollan gracias a nuestra ingesta de vitaminas,
minerales y una adecuada hidratación.

Para asegurar una alimentación que favorezca a tu piel, opta por

alimentos que contengan vitaminas A, C y E.

La vitamina A ayuda a prevenir el envejecimiento. La puedes

obtener de alimentos de origen animal, como pollo, pavo y pescado,
lácteos, y también de vegetales y frutas como zanahoria, brócoli,
espinacas, melón y mango.

La vitamina C le proporciona claridad a la piel y la puedes encontrar

en frutas y verduras ácidas, como naranjas, limones, kiwis, papayas
y pimientos.

La vitamina E protege nuestra piel del medioambiente y está

presente en nueces, semillas y hortalizas de hoja verde, como
espinacas y brócoli.

Por otra parte, el consumo de zinc te ayudará a reducir la

inflamación del cuerpo y puedes consumirlo en garbanzos, ajos y
chocolate amargo.

Sin duda, lo ideal es mantener una dieta balanceada que incluya

todos los nutrientes que necesitamos. Sin embargo, si tienes un
ritmo de vida acelerado y quieres asegurarte de consumir las
cantidades necesarias, también puedes ingerir estas vitaminas
mediante suplementos alimentarios en cápsulas.

Quiero recomendarte dos libros maravillosos, que a mí me han

ayudado al cuidado y mantención de una piel hermosa a través de la
alimentación:

El primero es del doctor Nicholas Perricone, prestigioso médico

dermatólogo estadounidense, conocido como el médico de las
estrellas, responsable de las maravillosas pieles que lucen
celebridades como Kate Hudson, Gwyneth Paltrow, Eva Mendes,
Julia Roberts y hasta la reina Letizia de España.

El libro Cómo prolongar la juventud fue número uno en ventas en

The New York Times y es conocido como el más importante sobre el
envejecimiento. En él, Perricone explica el impacto de la
alimentación en la salud y belleza de nuestra piel, y propone un
revolucionario programa antienvejecimiento, muy fácil de seguir, que
permite conseguir un cutis terso y una piel tonificada. Incluye,
además, varias dietas que ayudarán a que tu piel luzca lisa y
luminosa. Yo las probé, y logré resultados fantásticos en muy poco
tiempo.

El segundo libro es El fenómeno del aceite de coco, escrito por

Sergi Jover, especialista en nutrición bioenergética y quien es,
además, un mentor para mí. En esta obra conocerás todas las
virtudes del aceite de coco, que, además de aportar un delicioso
sabor a nuestras comidas, te ayuda a adelgazar, desintoxicar y a
embellecer la piel, el cabello y las uñas.
Aunque no lo creas, el aceite de coco es el producto estrella de
Hollywood. Celebridades como Jennifer Aniston, Oprah Winfrey,
Demi Moore, Elsa Pataky y muchas otras lo utilizan de todas las
maneras posibles: para cocinar, desintoxicar el cuerpo, cuidar el
cabello, la piel… Luego de leer este libro, dejé de utilizar el aceite
corriente en mis comidas y lo reemplacé por completo por aceite de
coco. También lo utilizo para el cabello, la piel y los dientes. Los
resultados son maravillosos; estoy segura de que te encantarán. El
libro, además, incluye 27 recetas para preparar en casa.

TIPOS DE PIEL DE ACUERDO A SU

ETNIA
Por muy distintas que seamos, todas queremos lucir una piel lisa,
luminosa y sin imperfecciones. Sin embargo, aunque anhelamos el
mismo resultado, la manera de lograrlo variará de persona en
persona, ya que cada tipo de piel requiere de distintos cuidados.

Como mencionamos anteriormente, la piel nos protege del ambiente

externo. Esto quiere decir que según el sitio en el que hayas nacido,
tu piel estará preparada para enfrentar el clima de ese lugar y
también determinará si será más clara o más oscura, más gruesa o
más delgada, más seca o más grasa... Cada tipo de piel tiene un
protocolo de cuidado distinto, basado principalmente en factores
como la irritación y la inflamación que presenta según su etnia.
 PIEL LATINA

La piel latina, por lo general, es de color canela. Sus pigmentos

naturales la benefician con una excelente protección natural a los
rayos solares. Tiende a ponerse dorada después de exponerse al
sol y, en invierno, se torna amarillo verdosa. Por otro lado, suele
presentar poros abiertos, espinillas y manchas. Muchas pieles
latinas tienen acné debido a la alta producción de sus glándulas
sebáceas. Hay pieles latinas en una gran variedad de tonos, que
abarcan desde el claro hasta el oscuro.
 PIEL MEDITERRÁNEA

La piel mediterránea es similar a la latina. Por lo frecuente es grasa,

lo que ayuda a retrasar la aparición de surcos y arrugas. Las
personas con este tipo de piel suelen tener ojeras oscuras de color
verdoso morado o verdoso café, las cuales se pueden maquillar con
corrector.
 PIEL DEL NORTE DE EUROPA

La piel del norte de Europa es pálida y tiende a sufrir deterioro a

causa del sol, y su falta de melanina provoca envejecimiento
prematuro. Sus glándulas sebáceas son menos activas, por lo tanto,
no suelen presentar acné o manchas. Es muy importante la
utilización de filtro solar.
 LA PIEL AFROAMERICANA

La piel afroamericana es rica en melanina y más gruesa que la

caucásica. Las mujeres con este tipo de piel deben elegir productos
hidratantes elaborados específicamente para ellas. Cuando se cuida
de forma adecuada, puede llegar a lucir tersa e iluminada hasta
pasados los 70 años. Existen distintas variaciones de tonos en este
tipo de piel. Por lo general, la piel del rostro es más oscura en la
frente y los contornos, y más iluminada en el centro y las mejillas. Es
importante tener esto en consideración al momento de aplicar
maquillaje para que el resultado sea lo más natural posible.
 LA PIEL ASIÁTICA

La piel asiática contiene más melanina que la piel del norte de

Europa, pero menos que la afroamericana. Este tipo presenta el
nivel casi perfecto de secreción sebácea, por lo que no manifiesta
problemas de sequedad ni acné. Quienes tienen esta piel tienden a
preocuparse de no elegir bases muy amarillas para no intensificar
este color. Sin embargo, deben tener cuidado de no elegir otros
tonos que sean muy distintos y las hagan lucir poco natural.
 LA PIEL MULTIÉTNICA

Y, por último, están las pieles multiétnicas, que pueden ser una
combinación de todas las anteriores. En estos casos, hay que poner
atención en las características predominantes.

De acuerdo a esta clasificación, determina tu tipo de piel:

Piel latina
Piel mediterránea
Piel del norte de Europa
Piel afroamericana
Piel asiática
Piel multiétnica

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TIPOS DE PIEL DE ACUERDO CON LA
INDUSTRIA COSMÉTICA
La industria cosmética ha agrupado los distintos tipos de piel según
las características de su manto hidrolipídico, el cual se basa en la
naturaleza de la emulsión que se forma sobre la superficie corporal
y su modo de actuación. Bajo este criterio, la industria agrupa los
distintos tipos de piel en: seca, normal, grasa, mixta y sensible.

La piel normal es lisa, con una textura regular. En general, no tiene

granitos ni otro tipo de imperfecciones. Este tipo de piel se
caracteriza por contar con buena circulación y elasticidad. En la
mañana, al despertar, no se siente tirante, sino que flexible y se
caracteriza por tener las mejillas ligeramente más secas, pero no en
exceso.

La piel seca es aquella que tiene un aspecto escamado. Además,

se siente tirante y rígida. Muchas veces presenta manchas y es muy
sensible a los cambios de las condiciones del tiempo. Las personas
de piel seca representan más edad de la que realmente tienen. Este
tipo de piel requiere especial atención en la hidratación.

La piel grasa se ve brillante debido a que desprende sebo,

especialmente en la “zona T” (frente, nariz y mentón). Este tipo de
piel presenta imperfecciones y poros abiertos. Su principal problema
son los puntos negros y granitos, que además la hacen ver sucia.
Quienes tienen este tipo de piel deben poner especial atención en la
limpieza y la exfoliación.

La piel mixta es casi similar a la piel normal y, además, es grasa

exclusivamente en la “zona T”. Hay expertos que consideran que la
piel mixta es la piel normal.

Por último está la piel sensible. Puedes tener cualquiera de los tipos
de piel que acabo de mencionar (normal, seca, grasa o mixta) y,
además, tu piel puede ser sensible.
Tu piel es sensible si suele reaccionar a distintos tipos de
productos, se irrita con facilidad, reacciona a los cambios de
temperatura y presenta sarpullidos y picores con frecuencia.
Quienes tienen la piel sensible, deben poner especial atención en el
uso de productos químicos que la hacen reaccionar.

Conocer tu tipo de piel es fundamental para que le des los cuidados

necesarios y con los productos adecuados. Revisa las cremas
faciales que estás usando y verifica que sean las correctas según tu
tipo de piel. El uso continuo de un producto indicado para otro tipo
de cutis puede tener consecuencias como resecamiento, aparición
de granos, enrojecimiento u opacidad. Manejar esta información
será fundamental cuando elijas la base de maquillaje ideal para ti.

Para identificar tu tipo de piel, puedes hacer la siguiente

prueba:

Con tu rostro limpio, humedece la piel de tu cara con agua

tibia y espera a que seque naturalmente.
Si tu piel al secarse se siente tirante, entonces es seca.
Si tu piel presenta leve grasitud en la zona T, tienes la piel
mixta.
Si tu piel queda elástica y con una sensación cómoda,
entonces es una piel normal.
Si tu piel presenta grasitud en varias zonas, quiere decir
que es grasa.
 Poder 2
Tu tono de piel
¿Te has fijado que hay ciertos colores que resaltan tu belleza, te
hacen lucir fantástica y hasta te suben el ánimo? ¿Y que otros te
apagan y te hacen lucir decaída y hasta enferma?

Esto ocurre porque cada una de nosotras tiene una paleta de

colores que potencia su belleza natural y que se relaciona con
nuestro color de piel, ojos y cabello. Utilizar los colores equivocados
equivale a autosabotear tu capacidad de verte hermosa.

El tono de piel puede ser claro, medio u oscuro, y varía con la

exposición solar cuando nos bronceamos, también con la
alimentación o con nuestra información genética.

El subtono va más allá de nuestra dermis, se encuentra en un nivel

más profundo y no varía. También se le conoce como “matiz”. Es
precisamente el subtono el responsable de que dos personas de piel
clara se vean muy distintas.

El subtono puede ser frío (color azul), cálido (color amarillo) o

neutro. Para identificarlo, generalmente uno debe observar las
venas que se ubican al interior de las muñecas. Si tus venas son
azuladas, quiere decir que tu subtono es frío. Si tus venas son
verdosas, tu subtono es cálido. Si no logras definir bien el color, tu
matiz es neutro.

A raíz de estas combinaciones se creó un sistema de colorimetría

llamado “Las cuatro estaciones”. Cada una de ellas cuenta con una
gama de colores sugeridos para potenciar la belleza de ese grupo.
Dos de las estaciones pertenecen al grupo de los tonos cálidos y,
las otras dos, al de los fríos. Luego cada uno de ellos se subdivide
en dos grupos de acuerdo a los subtonos.
CLASIFICACIÓN DE LAS ESTACIONES
INVIERNO
Quienes pertenecen a este grupo se caracterizan por tener una piel
fría, tal como beige frío, oliva claro, morena y negro azulado.
Presentan bastante contraste entre su piel, el cabello, los ojos y las
cejas. El cabello de las mujeres invierno es oscuro, al igual que sus
ojos. También suelen tener facciones bien definidas y rostros con
personalidad. Muchas veces presentan mandíbulas marcadas, lo
cual las hace ver con mucho carácter.

La mujer invierno suele ser la que presenta mayor problema de

ojeras y tono pálido en el rostro, por lo cual el maquillaje es muy
importante y logra mejoras considerables en el aspecto. El labial rojo
intenso es una carta casi segura para las mujeres invierno.
Considerando su naturaleza fría, los polvos bronceadores no son la
mejor opción para ellas.

Ejemplos de mujeres invierno: Angelina Jolie, Catherine Zeta Jones,

Halle Berry.
VERANO
Las mujeres de esta estación suelen ser de cabellos rubios muy
claros o rojizos, de pieles frías con tonos azulados, como beige frío
y beige rosado. Su aspecto es lo que conocemos como mujer
nórdica. Cuando se exponen al sol, suelen quedar rojas y les cuesta
lograr un tono bronceado. Les favorecen los colores neutros y agua,
también asociados a los colores románticos. En relación con el
maquillaje, les favorecen los tonos rosas pálido.

Ejemplo de mujeres verano: Michelle Pfeiffer, Renée Zellweger, Cate

Blanchett, Uma Thurman, Naomi Watts, Diane Keaton.
PRIMAVERA
Quienes pertenecen a este grupo se caracterizan por tener una piel
de tonalidad cálida que puede ser beige/durazno o beige/dorado. Se
broncean con mucha facilidad. Sus ojos son de color miel, verdes,
azules o turquesa. Su cabello es castaño en tonos rubios dorado y
rubios rojizo. Muchas veces tienen pecas en las mejillas. En cuanto
al maquillaje, les favorecen todos los tonos dorados y los polvos
bronceadores, así como una amplia gama de colores.

Ejemplos de mujeres primavera: Jennifer Aniston, Scarlett

Johansson, Jennifer López, Gwyneth Paltrow, María Sharapova,
Gisele Bündchen.
OTOÑO
Las mujeres de esta estación se caracterizan por tener una
tonalidad de piel cálida, oliva dorado o beige durazno. Su cabello es
castaño o castaño con reflejos dorados o rojizos. Sus ojos son café
oscuro, miel o claros. A este grupo pertenecen las mujeres de estilo
latino. Al exponerse al sol, se broncean con facilidad. En relación
con el maquillaje, les favorecen los colores tierra y anaranjado.

Ejemplos de mujeres otoño: Victoria Beckham, Julia Roberts, Sofía

Vergara, Eva Mendes, Gloria Estefan.
De acuerdo con estas clasificaciones, ubícate en un lugar
que cuente con luz natural y observa el interior de tus
muñecas. Si tus venas son azules, tu subtono será frío
(invierno o verano), y si tus venas son verdes, tu subtono
será cálido (primavera u otoño).

Una vez que hayas definido tu subtono, compara las

características físicas de cada grupo con las tuyas y define
a qué estación perteneces.

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 Poder 3
Tus rasgos a potenciar
Todas las mujeres, independiente de nuestra edad, nacionalidad u
ocupación, tenemos una belleza única y especial. Es muy
importante que sepamos reconocer esas características positivas
para poder potenciarlas.

Estas cualidades pueden variar de caso en caso. Para que te hagas

una idea de lo que estoy hablando, piensa en eso que siempre te ha
encantado de tu rostro o en aquello que los demás suelen
comentarte que les parece atractivo. Puede tratarse de tus ojos, de
tus pestañas, de tus labios, de tu nariz, de tu piel, etc.

Identifica cuál o cuáles son los rasgos más agraciados de tu rostro.

Es muy importante que lo tengas claro para que puedas sacarle
partido al maquillarte.

TU CRIPTONITA
Toda heroína tiene su lado vulnerable. Tú, yo, todas…

La criptonita representa aquellas imperfecciones que deseas

corregir. Son esos rasgos o características “menos agraciados”, que
menos te gustan de tu rostro o que no contribuyen al equilibrio
estético general.

Hay que ser muy cuidadosa en no confundir una característica

diferenciadora con una imperfección. Por ejemplo, existen narices
grandes que tienen mucha personalidad y hacen que una mujer se
vea interesante. Esto quiere decir que nada es “imperfecto” en sí
mismo, por eso me gusta más el concepto de equilibrio o armonía.

Para mí, los elementos más comunes que generan desarmonía en

un rostro son: las ojeras y las rojeces (rosácea y granitos). Las
ojeras, porque hacen lucir cansada a cualquiera y muchas veces
aumentan la edad. Las rojeces, porque una piel que no tiene una
apariencia homogénea hace que una persona se vea poco
saludable.

En mi caso, mis cejas y mi frente son mi criptonita. Tengo unas cejas

bastante despobladas y con una forma que me hace lucir entre triste
y cansada.

Una vez que identifiques tu criptonita, tendrás muy claro cuáles

serán tus prioridades al maquillarte. Yo, por ejemplo, siempre
maquillo mis cejas en primer lugar, porque solo con eso mi
expresión cambia muchísimo.

Tal vez en tu caso no existe algo que te desagrade en particular en

relación con tu rostro, ni tampoco que carezca de armonía. Si es así,
¡estupendo! Puedes enfocarte únicamente en potenciar tus atributos
y superpoderes.

Identifica cuál es tu criptonita y cuáles son tus superpoderes y

anótalos en el siguiente mapa de rostro:
Una piel hermosa es aquella que se ve saludable, homogénea e
iluminada.

Tener una piel saludable te significará utilizar pequeñas cantidades

de maquillaje y lograr buenos resultados sin tener que hacer
muchos esfuerzos, con lo cual ahorrarás mucho tiempo. Esto, sin
mencionar los beneficios de lucir la piel en su estado natural, como,
por ejemplo, cuando vamos a la piscina o cuando estamos en casa.

Como vimos en el capítulo anterior, la salud de la piel comienza en

el interior, alimentándonos correctamente, ingiriendo las dosis
necesarias de vitaminas y evitando malos hábitos como el
tabaquismo y el consumo de alcohol, cafeína, etc. Además,
debemos poner atención a los factores externos, principalmente al
clima, y también, aplicar cremas de acuerdo con nuestro tipo de piel.

En este capítulo veremos cuáles son los cuidados diarios que debes
tener con tu piel para que luzca radiante a corto y largo plazo. Es
fundamental que establezcas una rutina de belleza de acuerdo con
tu edad y tipo de piel; tómalo como una inversión en ti y en tu
imagen personal.

Como todo en la vida, para ver resultados es fundamental ser

constante. Te animo a que diseñes tu propia rutina de belleza y
hagas un compromiso contigo misma para cumplirla a todo evento,
aun en esos días en que llegues muy tarde a casa o estés muy
cansada.

En este paso a paso veremos cada uno de los cuidados que te

sugiero incorporar a tu rutina de belleza. Te explicaré en qué
consiste cada paso, cada cuánto tiempo debes hacerlo y cuánto
demora, para qué tipos de piel está indicado, qué productos existen
en el mercado y cómo se realiza. Te garantizo que una vez que
comiences con tu rutina de belleza, verás cambios notorios en tu
piel a partir de la primera semana.

¿Estás lista? ¡Manos a la obra!

 Desmaquillar
La limpieza es la base de una piel sana y hermosa, y retirar el
maquillaje es parte fundamental de la limpieza de tu rostro. Dormir
maquillada dificulta el proceso de regeneración de la piel y acelera
el envejecimiento. Se comienzan a acumular impurezas, de las
cuales surgen los puntos negros y las espinillas. Especialmente si
tienes piel grasa, ya que esta suele ser propensa al acné.

Yo tenía unos 13 años cuando leí una revista de mi mamá que decía
que por cada noche que uno duerme sin retirarse el maquillaje,
envejece un año. Yo era solo una adolescente entonces, pero esa
información se estampó en mi mente para siempre y, desde
entonces, tengo el hábito de desmaquillar mi rostro cada noche,
contra viento y marea.

Al desmaquillar, estás retirando no solo maquillaje, también células

muertas, contaminación ambiental y sudor; por eso es importante
que realices esta rutina aun cuando no te hayas maquillado. Retirar
todo esto es fundamental para que tu piel pueda respirar y
regenerarse.

Desmaquillar es muy importante para el cuidado de tus ojos y

pestañas. No retirar el maquillaje durante la noche puede producir
irritación y otros problemas oculares. Dejar tus pestañas con
máscara de manera continua hará que estas se deshidraten y se
vuelvan más débiles y finas. Con el tiempo se terminarán quebrando
y cayendo.

También debes retirar el maquillaje de tus labios, para que no se

resequen y agrieten producto de la deshidratación.

PRODUCTOS
Para retirar el maquillaje debes procurar utilizar productos que sean
“desmaquillantes”. No es lo mismo un desmaquillante que un
producto de limpieza, pues ambos tienen formulaciones diferentes,
pero son complementarios.

Los productos desmaquillantes poseen ingredientes liposolubles

especializados en disolver y retirar el maquillaje. Los de limpieza
contienen sustancias hidrosolubles, son más suaves y eliminan
suciedad de la piel, como polvo, exceso de sebo y polución.

Hay quienes prefieren usar productos naturales para retirar el

maquillaje, como aceite de oliva, aceite de coco, yogur, leche,
vaselina líquida, etc. La desventaja de estos productos es que no
disuelven lípidos, por lo tanto, actúan más como limpiadores que
como desmaquillantes.

Los desmaquillantes vienen en distintos formatos. Elige el que más

te acomode de acuerdo con tu tipo de piel. Si tu piel es grasa, evita
aquellos que contienen aceites.

DESMAQUILLANTES DE OJOS Y LABIOS:

Son productos creados específicamente para la zona de ojos y
labios, ya que el maquillaje diseñado para estas áreas es más difícil
de retirar, especialmente si utilizas máscaras de pestañas a prueba
de agua o labiales de larga duración. Estos tipos de desmaquillantes
son muy eficientes, ya que evitan tener que refregar la piel, y
además ayudan a prevenir la caída de las pestañas y la resequedad
de los labios.

En general, los desmaquillantes de ojos y labios son bastante

oleosos. Se aplican en pequeñas cantidades, dejando actuar por
unos minutos, para luego retirar con un disco de algodón húmedo.

Al finalizar, te recomiendo utilizar un tónico para eliminar el exceso

de grasitud.

LECHE DESMAQUILLANTE:
Es aconsejable para pieles sensibles o deshidratadas. En primer
lugar, porque tiene propiedades hidratantes y limpiadoras, y no
reseca la piel, como sí ocurre con los geles.
Además, arrastra todas las impurezas acumuladas
durante el día y no solo el maquillaje. Se retira con
discos de algodón húmedos y luego se aplica tónico.

La leche desmaquillante no es la más recomendable

para pieles grasas o con tendencia al acné.

GEL DESMAQUILLANTE:
Existe un gel para cada tipo de piel. El gel es ideal
para las pieles grasas, ya que deja una sensación
de limpieza y frescor. Se aplica sobre el rostro
húmedo, se masajea suavemente y se aclara con
agua. Luego puedes secar con una toalla.

Ojo: no confundas el gel desmaquillante, que es para retirar el

maquillaje, con el gel limpiador, que es para limpiar la piel.

DESMAQUILLANTE BIFÁSICO:
Es un producto conformado por dos fases: una acuosa y otra
oleosa. La acuosa siempre se deposita abajo, ya que la oleosa tiene
un peso menor y se mantiene encima. Para que actúe
correctamente, es necesario que las dos fases se junten, por lo
tanto, antes de usarlo hay que agitarlo, con lo cual ambas partes se
emulsionan. Después, cuando está bien mezclado, se utiliza como
un desmaquillante normal, extendiéndolo con un disco de algodón.

Una de las ventajas de los desmaquillantes bifásicos es que suelen

ser efectivos para retirar la máscara de pestañas. Al finalizar, se
recomienda utilizar un tónico para retirar el exceso de aceite. Es
recomendable para pieles secas y normales, pero no para mixtas ni
grasas.

AGUA MICELAR:
El agua micelar es un producto multiusos que limpia, tonifica e
hidrata la piel. Lo empezaron a usar las francesas en los años 90
para combatir los efectos del agua corriente de París, y hoy en día
se ha convertido en una tendencia mundial.

Es una solución líquida, parecida al agua, con unos activos que

ayudan a limpiar la piel, llamados tensio-activos no iónicos, que
mezclados con agua forman unas partículas o esferas de tamaño
nanoscópico llamadas micelas. Estas esferas minúsculas están
formadas por dos polos opuestos: uno hidrófilo, con afinidad por el
agua, y el otro lipófilo, con afinidad por las grasas.

Las partículas micelares limpian la piel de forma eficaz, por su

acción magnética frente a las impurezas. Capturan la grasa y la
suciedad, eliminándolas de la piel instantáneamente. Por esta razón,
no es necesario frotar. Sin embargo, no es muy efectiva para retirar
máscara de pestañas a prueba de agua ni labiales de larga
duración.

Se utiliza sobre un disco de algodón con movimientos circulares, sin

aclarar. Se aplica con pequeños toquecitos, retirando suavemente;
así, las micelas “se abren” y “absorben” la suciedad”. El agua
micelar no se debe usar como tónico, sino como limpiador.

En las pieles sensibles el agua micelar es la mejor opción, ya que es

el método de limpieza más delicado.

También se recomienda el agua micelar en la piel que padece de

acné y se está tratando con ácido retinoico, tanto oral como tópico,
ya que suele estar especialmente sensible y con tendencia al
enrojecimiento

Casi todas las marcas actualmente tienen su agua micelar, cada una
completamente diferente a las otras. Elige una según tu tipo de piel.

TOALLITAS DESMAQUILLANTES:
Las toallitas desmaquillantes son una solución
rápida para cuando disponemos de poco tiempo,
son fáciles de transportar y económicas. Sin
embargo, no son la mejor solución para el día a
día.

Las toallitas desmaquillantes están saturadas de

productos químicos, los que permiten una fácil
eliminación del maquillaje. Si después de usarlas
no utilizas un limpiador, estos residuos químicos
se quedarán en tu piel y, sumados al alcohol que
contiene la gran mayoría, harán que tu piel se
irrite y reseque en el corto plazo.

Además, las toallitas desmaquillantes contienen conservantes, los

que les permiten estar abiertas durante meses sin que aparezcan
hongos ni bacterias. Los conservantes pueden ocasionar alergias y
dermatitis.

Te sugiero que utilices las toallitas desmaquillantes solo en casos de

emergencia y que prefieras unas que no contengan alcohol. Por
último, no olvides limpiar tu rostro después de usarlas.
RUTINA DE BELLEZA:
DESMAQUILLAR
Realiza esta rutina para desmaquillar tu rostro todas las noches
antes de acostarte.

Periodicidad: una vez por día

Tiempo estimado: 5 minutos
Implementos:

Desmaquillante de ojos y labios

Desmaquillante de rostro
Agua micelar o tónico
Círculos de algodón

APLICACIÓN:
Paso 1: Coloca una pequeña cantidad (Medida Nº 2) de
desmaquillante de ojos sobre la palma de tu mano. Con los
dedos anular y medio, humedece tus pestañas favoreciendo la
penetración del producto y haz lo mismo con los labios. Deja
actuar mientras realizas el siguiente paso.
Paso 2: Pon una pequeña cantidad (Medida Nº 2) de
desmaquillante de rostro sobre la palma de tu mano.
Distribuye sobre el resto del rostro: frente, mejillas, nariz,
mentón y cuello.
Paso 3: Humedece dos círculos de algodón con agua micelar
o agua facial. Con un círculo en cada mano, retira el producto
de los ojos, labios y rostro realizando movimientos suaves y
circulares que vayan desde el centro del rostro hacia el inicio
del cabello. Utiliza los círculos de algodón por ambos lados. Si
es necesario, emplea uno o dos círculos adicionales.
El siguiente paso es la LIMPIEZA.
 Limpiar
La razón por la cual una piel se ve luminosa, es porque refleja la luz.
Para que esto ocurra, la superficie de la piel debe estar lisa. Piensa
en cómo se comporta la luz sobre un espejo versus lo que ocurre
ante una superficie de cemento. Al ser la superficie de un espejo
completamente lisa y uniforme, la luz rebota y se refleja;, en cambio,
la superficie del cemento es irregular y porosa, por ende, los rayos
se absorben. Lo mismo ocurre con tu piel. Para que tu piel refleje la
luz, debe estar lo más lisa y uniforme posible, lo cual se consigue
manteniéndola limpia.

Existe el mito de que lo mejor para lavar la piel es el agua. Pero lo

cierto es que se trata solo de eso, un mito. El agua nos permite
higienizar, pero cuando hablamos de limpiar, nos referimos a algo un
poco más profundo; el objetivo es eliminar grasa, suciedad y células
muertas y, para esto, el agua no es suficiente.

El propósito de la limpieza es remover bacterias, suciedad,

transpiración, restos de productos y grasitud que genera nuestra piel
naturalmente. Debemos limpiar la piel de nuestro rostro idealmente
dos veces al día: en la mañana y en la noche o, al menos, una vez
al día.

La primera limpieza se realiza en la mañana para eliminar restos de

cremas y tratamientos que hayamos aplicado en la noche, además
de la transpiración y grasa que nuestro cuerpo genera al dormir.
Tener la piel limpia favorece la absorción de las cremas y
tratamientos que aplicamos por la mañana. Te recomiendo que
realices esta limpieza durante la ducha, así ahorrarás tiempo.

La segunda limpieza se realiza en la noche, después de

desmaquillarte y antes de acostarte. Esto ayudará a que tus cremas
y tratamientos de noche penetren en tu piel de manera óptima. Si no
te has maquillado, debes realizar la limpieza de todas maneras para
eliminar contaminación, polvo y transpiración.
PRODUCTOS:
Hoy en día, el mercado ofrece productos de limpieza en distintos
formatos. Elige uno de acuerdo con tu tipo de piel y en el formato
que te resulte más cómodo.

Jabones de rostro:
Los jabones de rostro limpian en profundidad y dejan una
sensación de limpieza y frescura. En general, los jabones son
ideales para las pieles grasas. Para limpiar el rostro, no utilices
jabones para el cuerpo ni tampoco jabones antibacteriales,
pues afectan la protección natural de tu piel, además de
dejarla seca y tirante.
Para que dure más tiempo, guárdalo al interior de una
jabonera; si lo dejas al interior de la ducha, se disolverá con el
agua rápidamente. Elige formulaciones adecuadas a tu tipo de
piel.
Para aplicarlo, primero debes humedecer tu rostro con agua
tibia. Luego, moja el jabón y frótalo vigorosamente entre tus
manos y, posteriormente, distribuye la espuma sobre tu rostro.
Realiza suaves movimientos circulares evitando los ojos.
Limpiador en gel:
El gel se convierte en espuma al aplicarlo en el rostro
humedecido. Esta formulación está especialmente diseñada
para disolver la grasitud, pero conservando las capas
protectoras naturales de la piel. Es ideal para pieles mixtas y
grasas.
Leche limpiadora:
 Las leches de limpieza son livianas. Aquellas formuladas a
base de agua limpian sin dejar residuos. Además de limpiar,
contienen emolientes y aceites, lo cual las hace ideales para
pieles normales y secas.
Crema limpiadora:
Son más densas que una leche limpiadora, aunque de todas
maneras son livianas y flexibles. Para retirarlas se necesita un
algodón o paño humedecido. Se recomiendan para pieles
secas y normales.
Bálsamo limpiador:
Los bálsamos limpiadores son similares a las leches de
limpieza, aunque además contienen acondicionadores y
humectantes. No son muy recomendables para pieles grasas.
Aceite limpiador:
Los aceites limpiadores contienen fórmulas enriquecidas con
aceites esenciales. Cada día tienen más adeptas, por su
suavidad y características antienvejecimiento. Se recomienda
su uso en pieles normales a secas.
Para aplicarlo, primero se calienta una pequeña cantidad entre
las manos, la cual se distribuye sobre el rostro realizando
movimientos circulares. Luego se humedece el rostro con
agua tibia hasta formar una espuma jabonosa. Finalmente, se
retira con un paño o algodón húmedo.

RUTINA DE BELLEZA: LIMPIEZA

Realiza esta rutina de limpieza cada mañana al ducharte y al
finalizar el día después de desmaquillarte. Si no te aplicaste
maquillaje, hazla de todas maneras para limpiar tu rostro de la
suciedad ambiental.

Periodicidad: diaria (mañana y noche)

Tiempo estimado: 1 minuto
Implementos:

Gel de limpieza
Esponja de limpieza (opcional)

APLICACIÓN:
Paso 1: Humedece el rostro con agua tibia.
Paso 2: Deposita una pequeña cantidad de gel limpiador en la
palma de tu mano (Medida Nº 2). Distribúyela por todo el
rostro, cuello y pecho.
Paso 3: Masajea suavemente con los dedos realizando
movimientos circulares, hasta formar espuma.
Opcional: Para lograr una limpieza un poco más profunda,
puedes utilizar una esponja de limpieza que sea suave y no
abrasiva. Haz con la esponja el mismo movimiento que harías
con los dedos. Te recomiendo comprar esponjas desechables
y cortarlas en varios pedacitos para que uses un trozo solo un
par de veces y luego lo reemplaces por otro. De esta manera
evitarás que la esponja acumule hongos y bacterias.
Paso 4: Aclara con agua tibia.
El siguiente paso es la EXFOLIACIÓN.
 Exfoliar
La exfoliación permite eliminar todas las células muertas
acumuladas en la piel y proporcionarle al cutis una mayor suavidad
y brillo, además de ayudar a disimular las cicatrices y las marcas.
Con la exfoliación, la piel del rostro puede realizar su proceso de
regeneración celular correctamente, lo que da como resultado una
dermis mucho más oxigenada y humectada.

Este procedimiento reactiva la microcirculación sanguínea, lo cual

ayuda también a eliminar líquidos acumulados y a prevenir la
hinchazón. Además, reduce la producción excesiva de sebo y evita
la aparición de brillos en el rostro. Y, como si fuera poco, permite
que las cremas y tratamientos penetren por completo.

Es muy importante no exagerar en la cantidad de veces que te

exfolias, ya que podrías perder el equilibrio de tu piel. Por lo general,
con una o dos veces por semana será suficiente. Elige un exfoliante
de acuerdo con tu tipo de piel.

PRODUCTOS:
Existe una amplia variedad de productos exfoliantes en el mercado,
con distintas características y propiedades. Los gránulos pueden ser
de origen natural: azúcar, sal, bambú y semillas de frutas, o bien de
origen sintético.

Al comprarlo, fíjate que la malla de gránulos sea pareja. Es decir,

que no haya unos granitos más grandes que otros, ya que esto
podría resultar muy abrasivo e irritar tu piel.
RUTINA DE BELLEZA: EXFOLIAR
Realiza esta rutina de exfoliación después de la limpieza facial.

Periodicidad: Una vez por semana. Piel sensible cada 15 días.

Pieles secas: bastará con una exfoliación semanal haciendo
uso de un exfoliante suave.
Pieles grasas: dos veces a la semana para eliminar el exceso
de grasa.
Pieles sensibles: una vez cada 15 días con un exfoliante
hipoalergénico.
Tiempo estimado: 1 minuto
Implementos:

Exfoliante

APLICACIÓN:
Paso 1: Humedece tu rostro con agua tibia.
Paso 2: Coloca una pequeña cantidad de exfoliante en la
palma de tu mano (Medida Nº 2), y luego distribúyela con tus
dedos sobre todo el rostro y cuello, evitando los ojos.
Paso 3: Masajea suavemente realizando movimientos
circulares. Pasa también sobre los labios para retirar los
cueritos y mantenerlos suaves. Incluye el cuello, sobre todo si
está más oscuro que la piel de tu rostro.
Paso 4: Aclara con agua tibia.
El siguiente paso es aplicar TÓNICO.

La manera de aplicar los productos es siempre comenzar

por el más liviano y terminar con el más denso. Por lo
tanto, el tónico se aplicará en primer lugar, luego el sérum,
seguido por el contorno de ojos, la crema facial y, al último,
el factor solar.
 Tonificar
El tónico ayuda a estimular la circulación de la piel y a remover
células muertas y la grasitud. También ayuda a restaurar el pH
natural, aporta frescura y brinda una textura lisa a la piel. Además,
minimiza la apariencia de los poros abiertos.

Se utiliza principalmente antes de aplicar las cremas de día y

después de desmaquillarse. También es muy útil en el verano,
cuando nuestra piel tiende a estar más oleosa de lo normal y atrae
con mayor facilidad la suciedad y las bacterias.

PRODUCTOS:
Existen distintos tipos de tónicos, con variados ingredientes. La
diferencia suele presentarse en la cantidad de alcohol que
contienen. Aquellos que poseen mucho alcohol, tienden a ser
astringentes y secan la piel, lo cual es bueno para las pieles grasas,
pero no así para las pieles secas.

Los tónicos astringentes contienen agua, humectantes, antisépticos

y hasta 60 por ciento de alcohol. Estos tónicos son secantes y
adecuados solo para pieles muy oleosas, o bien para aplicarlos en
zonas muy específicas.

Los tónicos refrescantes son suaves y contienen agua y

humectantes, como glicerina o agua de rosas y muy poquito alcohol
(menos del 10 por ciento). Estos humectantes evitan que la piel se
deshidrate. Este tipo de tónicos son ideales para pieles normales,
secas y sensibles.

Debes elegir el tónico adecuado a tu tipo de piel.

RUTINA DE BELLEZA: TÓNICO
Utiliza tónico después del limpiador facial.

Periodicidad: diario (mañana y noche).

Tiempo estimado: 30 segundos
Implementos:

Tónico
Disco de algodón

APLICACIÓN:
Paso 1: Rocía una pequeña cantidad de tónico sobre un disco
de algodón hasta que quede humedecido, pero no mojado en
exceso.
Paso 2: Pasa el algodón por todo el rostro, ojos y cuello, con
movimientos suaves desde el interior hacia el crecimiento del
cabello.
Opcional: También puedes colocar una pequeña cantidad de
tónico directamente sobre la palma de tu mano y distribuirla
por tu rostro y cuello con la ayuda de tus dedos, sin necesidad
de usar un algodón. Este tipo de aplicación te ayuda a
economizar producto, ya que, al usar algodón, gran parte del
tónico es absorbida por este.
El siguiente paso es aplicar SÉRUM.
 Sérum
El sérum facial es un concentrado que aporta una mayor hidratación
a la piel, en conjunto con distintas sustancias que ayudan a combatir
los signos del envejecimiento o las manchas. Contiene una gran
cantidad de ingredientes activos y muy alta concentración, lo que
permite obtener resultados visibles en poco tiempo.

Al aplicarlo, el aspecto de la piel mejora

instantáneamente y sus ingredientes activos actúan
durante todo el día. Su textura no oleosa deja la piel
suave, con un efecto terciopelo, como una segunda
piel.

Gracias a su textura acuosa, es fácil de absorber y

aplicar. Normalmente, se necesita una cantidad muy
pequeña de producto, por lo que duran bastante. En
general, los efectos se ven a partir de la tercera
semana de uso.

Se recomienda su uso habitual a partir de los 30

años, pues durante esta etapa comienzan a hacerse
evidentes los primeros signos del envejecimiento, lo
que hace necesario el uso de productos específicos
que actúen de forma más profunda y completa
sobre la piel. Se recomienda su uso dos veces al
día, en la mañana y en la noche, o solo en la noche,
que es cuando el producto puede actuar sobre la
piel al dormir, potenciando sus efectos. Es muy
importante que después de aplicarlo selles con una crema de día o
de noche, ya que, de lo contrario, el sérum se evaporará y no hará
efecto.

PRODUCTOS:
Existen distintos tipos de sérum, muchos de ellos para tratamientos
específicos. Elige el que más se ajuste a tus necesidades. Se
recomiendan para todos los tipos de piel. Incluso se pueden utilizar
en las pieles grasas, ya que su textura no es oleosa y se absorbe
rápidamente.

También hay algunos sérum con color, lo cual no tiene mucho

sentido, ya que sobre él es necesario aplicar una crema para que no
se evapore.

RUTINA DE BELLEZA: SÉRUM

Utiliza sérum facial después del tónico y antes de la crema.

Periodicidad: diaria (mañana y noche)

Tiempo estimado: 1 minuto
Implementos:

Sérum facial

APLICACIÓN:
Paso 1: Pon una pequeña cantidad (Medida
Nº 1) de sérum sobre la palma de tu mano.
Paso 2: Esparce por el rostro suavemente,
desde el centro hacia el crecimiento del
cabello, con la ayuda de tus dedos anular y
medio. Extiende hacia el cuello. Evita la zona
de los ojos.
El siguiente paso es aplicar CONTORNO DE OJOS.
 Contorno de ojos
La zona del contorno de ojos es la piel más fina de todo el cuerpo,
con un grosor de 0,004 - 0,005 mm, aproximadamente, al menos
cinco veces más delgado que el resto de la piel del rostro. Además,
es la zona más seca del cuerpo debido a que cuenta con menor
cantidad de glándulas sudoríparas y sebáceas.

De todos modos, la piel del contorno de ojos

está expuesta a todo tipo de factores externos, al
igual que el resto del cuerpo. Adicionalmente, es
una zona que se ve afectada principalmente por
las contracciones musculares que efectuamos
para expresarnos.

Por todas estas razones, es importante darle un

cuidado específico, sobre todo si tiendes a
gesticular bastante. Se recomienda el uso de
crema para el contorno de ojos especialmente
después de los 30 años.

La crema de contorno de ojos descongestiona, estimula la

microcirculación y evita que se acumulen las toxinas.

PRODUCTOS:
Existen distintos tipos de productos para el contorno de ojos y para
muchas necesidades: los hay antiedad para quienes tienen líneas
más marcadas; con efecto lifting para lograr un efecto más liso; con
activos descongestionantes para bajar la hinchazón de las bolsas; y
calmantes para pieles sensibles.

También existen en distintos formatos: gel o en crema, en tubos, en

pequeños potes y en aplicadores con roll-on. Estos últimos sirven
para realizar un masaje descongestivo. Elige el que más se adecúe
a tu necesidad.
RUTINA DE BELLEZA: CONTORNO DE
OJOS
Utiliza después del sérum y antes de la crema de día/noche.

Periodicidad: diaria (mañana y noche)

Tiempo estimado: 1 minuto
Implementos:

Contorno de ojos

APLICACIÓN:
Paso 1: Coloca una pequeña cantidad (Medida Nº 1) de
contorno de ojos sobre la yema del dedo anular de una mano.
Paso 2: Presiona con la yema del dedo anular de la otra mano
para que ambos queden con la misma cantidad de producto.
Paso 3: Ubica las yemas sobre el borde externo del ojo,
tocando el hueso; luego avanza por toda la órbita del ojo hacia
el centro del ojo. Evita la zona lagrimal, que es más delicada, y
distribuye dando suaves golpecitos por debajo del ojo y en la
zona de las líneas de expresión.
Paso 4: Si lo deseas, puedes poner una pequeña cantidad
sobre el párpado superior justo sobre la ceja. Evita el párpado
móvil, porque el producto puede acumularse en el pliegue y
producir irritación.
Paso 5: Masajea la zona con la yema de los dedos dando
pequeños golpecitos, hasta que el producto se haya absorbido
por completo.
 Si tu problema son las bolsas de los ojos, lo mejor
que puedes hacer es aplicar compresas frías por 15
minutos sobre esa zona. Puedes usar cucharas
guardándolas unos minutos en el congelador o bien
puedes usar rodajas de pepino muy frío.

El siguiente paso es la CREMA FACIAL.

 Crema facial
Para que la piel del rostro luzca hermosa, es fundamental hidratarla
y nutrirla de acuerdo con los requerimientos correspondientes a la
edad y al estado de la piel. Con el paso del tiempo las necesidades
van cambiando, por lo tanto, es fundamental utilizar cremas que
aporten lo que la piel necesita en cada periodo específico en el que
se encuentra.

20 años: Prevención y protección

30 años: Revitalización
40 años: Corrección
50 años y más: Reestructuración
La piel de los 20 años es naturalmente tersa y luminosa. A partir de
los 30 años, la actividad celular comienza a bajar sus niveles de
producción al menos en un 30 por ciento. A los 40 años aparecen
signos marcados de líneas de expresión y arrugas, flacidez y
deshidratación. Desde los 50 años en adelante, las fibras se
desorganizan y la piel pierde su estructura; es necesario
recomponer el entorno.

La crema de día debe ser ligera y no oleosa para favorecer la

aplicación de maquillaje. Muchas veces cuenta con protección solar
para proteger la piel del rostro de los rayos UV durante el día. En
general, se recomienda que la crema de día sea más bien hidratante
que humectante. La crema hidratante aporta mayormente agua, y es
de textura más liviana. La crema humectante aporta aceites, y su
textura es más densa y oleosa, lo cual no es muy favorable para el
maquillaje.

La crema de noche es de tratamiento, está pensada para actuar de

manera intensiva mientras dormimos. Suele contener emolientes
que son fotosensibles, por lo tanto, es ideal para aplicarse mientras
no estamos expuestas a la luz. Además, suele ser más densa, ya
que debe trabajar arduamente para favorecer la producción de
colágeno y elastina. Como es más pesada y contiene tantos
ingredientes, generalmente deja la piel muy brillante, por lo tanto, no
es intercambiable con la crema de día.

PRODUCTOS:
Existen distintas opciones, dependiendo de la necesidad: según la
edad y el tipo de piel, las hay regenerativas, hidratantes, nutritivas,
efecto lifting, iluminadoras, etc. Elige una crema de día y una crema
de noche de acuerdo con tu edad y con tu tipo de piel.

Las pieles normales son equilibradas y saludables, por lo cual se

pueden usar cremas hidratantes, que aportan agua y aceites
livianos, especialmente indicadas para pieles normales.

Para las pieles sensibles se debe optar por una alternativa

hipoalergénica y libre de fragancias. En el caso de las pieles mixtas
y grasas, la mejor alternativa es una crema no comedogénica y sin
aceites para evitar la formación de puntos negros y espinillas.

Para las pieles secas se debe privilegiar una crema que devuelva la
humedad y los nutrientes.

RUTINA DE BELLEZA: CREMA FACIAL

Utiliza después de aplicar sérum y contorno de ojos.

Periodicidad: diaria (crema de día en la mañana y crema de

noche antes de dormir)
 Tiempo estimado: 1 minuto
Implementos:

Crema de día

APLICACIÓN:
Paso 1: Utiliza una pequeña cantidad (Medida Nº 2) y aplícala
en distintos puntos de tu rostro: frente, pómulos, nariz, mentón
y cuello.
Paso 2: Con la yema de tus dedos distribuye de manera
uniforme y suavemente desde el interior del rostro hacia el
exterior. Evita el contorno de los ojos y los párpados
Paso 3: Apoya las palmas de tus manos extendidas de
manera vertical sobre tu rostro, abarcando las mejillas. Luego
haz lo mismo de manera horizontal, incluyendo frente y
mentón. Finaliza con la zona del cuello. Realiza este
movimiento para ayudar a la penetración del producto.
Paso 4: Lava tus manos después de aplicar la crema, sobre
todo si después vas a maquillarte. Así evitas transferir
bacterias a tu rostro.

Utiliza solo la cantidad de producto que se indica. Hoy en

día las formulaciones de las cremas cuentan con gran
tecnología y están diseñadas para actuar efectivamente en
pequeñas cantidades. Ten presente que ¡no porque
apliques más crema, esta hará más efecto!
 Protector solar
Todos los tipos y colores de piel son vulnerables
al perjuicio de los rayos ultravioleta. La
sobreexposición solar es muy contraproducente
para la salud y belleza de tu piel, ya que la
envejece de manera prematura y aparecen
manchas, líneas y su textura se torna dispareja.
La exposición prolongada puede causar incluso
cáncer a la piel. En la medida de lo posible,
intenta evitar los rayos solares directos en tu rostro utilizando
anteojos y sombrero.

Existen distintos tipos de rayos solares: UVA, UVB y UVC.

Los rayos UVA son de onda larga y están presentes durante todo el
día. Estos pueden ser muy dañinos, ya que atraviesan nuestra
epidermis y dermis afectando la regeneración celular, y pueden
ocasionar cáncer.

Los rayos UVB son de onda mediana. Su mayor intensidad se

produce entre las 10 a. m. y las 2 p. m., especialmente cerca de la
línea del ecuador. Sus rayos atraviesan nuestra epidermis y llegan
hasta la dermis ocasionando arrugas y rompiendo nuestros vasos
capilares. Los vidrios protegen nuestra piel de los rayos UVB.

Los rayos UVC son de onda corta. La capa de ozono los absorbe y
filtra, sin embargo, debido a su adelgazamiento, pueden afectarnos
en la medida que su efecto se va acumulando en el tiempo.

El factor solar es un producto creado para protegernos de los rayos

ultravioleta, que pueden resultar dañinos para nuestra piel. Su
composición está hecha para autodestruirse antes de que el rayo
alcance a tocar nuestra piel y su efecto dura de 2 a 3 horas. Por lo
tanto, si vas a estar expuesta de manera directa al sol, debes
retocarlo para asegurar la continuidad de su protección.
Utiliza protector solar que te proteja de ambos rayos, UVA y UVB, y
que cuente con filtro SPF de 15 a 30 según la época y tiempo de
exposición al sol. Para el rostro existen pantallas solares de SPF 50
y más.

Hoy en día la mayoría de los productos cosméticos incluyen

protección solar: bases de maquillaje, polvos, cremas de día, etc.
Para quienes trabajan en lugares cerrados y no están expuestas al
sol de manera directa, estos protectores pueden ser suficientes. Sin
embargo, si vas a estar largas horas en el exterior o si tienes una
condición de cuidado especial (como rosácea u otro tipo de
sensibilidad dermatológica), se recomienda que utilices pantalla
solar.

El efecto pantalla que protege la piel de la radiación solar se ve

alterado o se anula si se mezcla el factor solar con otros cosméticos.
Por esta razón, los bloqueadores solares se aplican al último para
no perder su eficacia frente a sol. Si lo aplicas antes que los otros
productos (tónico, sérum, contorno de ojos, crema de día), este
actuará como barrera y no dejará que los activos de los otros
productos penetren en tu piel.

Hoy en día existe una gran oferta de filtros solares para rostro que
no contienen brillo y son compatibles con el maquillaje.

Utiliza anteojos que cuenten con 100 % de protección

solar UV.
Evita las camas solares.
Si tienes piel sensible, evita los factores solares que
contengan tretinoína (Retin-A, Stevia-A, Retisol-A,
RejuvaA, Renova, ácido de vitamina A), ya que secan la
piel. Además, procura que sean hipoalergénicos y sin
fragancias.
Si tienes la piel grasa, usa factores solares que no
contengan aceite, para no obstruir tus poros.
RUTINA DE BELLEZA: FACTOR SOLAR
Utiliza factor solar después de la crema de día.

Periodicidad: Cada 2 horas de exposición directa al sol.

Tiempo estimado: 1 minuto
Implementos:

Factor solar

APLICACIÓN:
Paso 1: Utiliza una pequeña cantidad (Medida Nº 2) y aplícala
en distintos puntos de tu rostro: frente, pómulos, nariz, mentón
y cuello.
Paso 2: Con la yema de tus dedos distribuye de manera
uniforme y suavemente desde el interior del rostro hacia el
exterior. Evita los ojos.
Paso 3: Apoya las palmas de tus manos extendidas de
manera vertical sobre tu rostro, abarcando las mejillas. Luego
haz lo mismo de manera horizontal, incluyendo frente y
mentón. Realiza este movimiento para favorecer su absorción.
Finaliza con la zona del cuello.
Paso 4: Lava tus manos después de aplicar la crema, sobre
todo si después las vas a usar para aplicar maquillaje. Así
evitas transferir bacterias a tu rostro. Además, el factor solar
suele secar las manos.
Paso 5: Vuelve a aplicar cada dos horas.
 Autobronceante
Los autobronceantes imitan el bronceado natural que adquirimos
con el sol y nos ayudan a conseguir un aspecto más saludable,
disimulando imperfecciones y logrando una apariencia de piel más
lisa. Actúan sin entrar en contacto con los rayos solares, por lo
tanto, son seguros, no provocan fotoenvejecimiento y evitan arrugas
y manchas.

A diferencia de cuando nos bronceamos al sol, los autobronceantes

actúan solo a nivel de la superficie de la piel, sin afectar la
producción de melanina. Contienen una sustancia no dañina,
llamada dihidroxiacetona (DHA), que se obtiene por fermentación de
la glicerina a partir de las plantas de remolacha o caña de azúcar.
Esta sustancia, al entrar en contacto con el aire, se une con los
aminoácidos de la epidermis y la piel se oscurece.

El tono que se obtenga variará de persona a persona, dependerá de

la cantidad de aminoácidos y también del pH de quien se aplica el
autobronceante. Las pieles secas tienden a tomar más color que las
pieles grasas.

PRODUCTOS:
Elegir el autobronceante adecuado puede ser una decisión difícil, ya
que existe el temor de quedar con un color poco natural.
Afortunadamente, hoy en día la tecnología de los autobronceantes
ha mejorado mucho y el resultado ahora no es un color naranja ni
tanto olor, como años atrás.

Mi consejo al momento de elegir el tuyo es no escatimar en gastos y

preferir una marca conocida. También te recomiendo probarlos en
otro sector de tu cuerpo, por ejemplo, en un brazo, antes de
aplicarlos en tu rostro.

Los autobronceantes vienen en distintos formatos: crema, gel y

spray. Muchas veces incluyen hidratantes para lograr mejores
resultados.

RUTINA DE BELLEZA:
AUTOBRONCEANTE
Utilízalo para ocasiones especiales o cada vez que quieras tener un
tono más saludable en el rostro. Si tienes un evento especial y
quieres lucir un bronceado fantástico, aplícalo con varios días de
anticipación para que puedas manejar el tono del color.

Los efectos del bronceado se empiezan a ver entre 1 y 5 horas

después de aplicar el producto, y duran entre 5 y 7 días,
dependiendo del tipo de piel y de su nivel de hidratación.

Idealmente, aplícalo en la noche, tanto si lo usarás en el rostro como

en el cuerpo. Si vas a maquillarte, úsalo al menos unas 5 horas
antes.

Periodicidad: Cada vez que quieras obtener un tono

bronceado.
Tiempo estimado: 2 minutos
Implementos:

Autobronceante
APLICACIÓN:
Paso 1: Prepara tu piel exfoliándola previamente. Siempre que
apliques autobronceante debes hacerlo sobre una piel limpia y
sin maquillaje.
Paso 2: Vierte una pequeña cantidad de autobronceante
(Medida Nº 2) primero sobre la palma de tu mano. Del mismo
modo, si usas el formato en spray, rocía una cantidad sobre tu
mano, ya que no debe aplicarse directamente sobre el rostro.
Paso 3: Con la ayuda de tus dedos, distribuye el
autobronceante por tu rostro de manera uniforme. Cuida de
que no se acumule en los pliegues de la nariz. Ten especial
cuidado en zonas como las cejas. Evita la acumulación, ya que
se puede producir un exceso de color.
Para un resultado natural, no olvides pasar por las orejas, la
línea entre el cabello y la frente, y también en la parte que
separa las orejas del rostro. Extiende hacia el cuello y el
escote. Evita la zona de los párpados.
Paso 4: Lava muy bien tus manos con agua y con jabón.
Utiliza un cepillo de uñas para las palmas y los dedos.
Paso 5: Espera a lo menos 10 minutos antes de vestirte para
que no vayas a teñir tu ropa.
Paso 6: Deja actuar un par de horas y evalúa si es necesario
aplicar una segunda capa para intensificar el tono obtenido.

Si por equivocación te queda el rostro manchado, puedes

emparejarlo realizando una suave exfoliación justo sobre
esa zona. También puedes efectuar un masaje con jugo de
limón sobre la mancha. Procura hacerlo con suavidad para
no resecar tu piel.
 Mascarillas faciales
Las máscaras faciales aportan un beneficio extra a los cuidados
diarios. Para mí son parte de un regaloneo que me hago una vez
por semana. En esos 20 minutos me desconecto de todo, me relajo
y dejo que mi piel reciba un cariñito adicional.

Además logran efectos significativos en poco tiempo. Sirven para

regenerar la epidermis, vigorizar tejidos cansados y atenuar las
arrugas. La piel queda suave y renovada.

Existen distintos tipos de máscaras faciales. Hay para todo el rostro

o para sectores localizados. Algunas se preparan con ingredientes
naturales en casa, y otras las ofrecen las compañías de cosméticos.

Si eres de las que sufren con las bolsas bajo los ojos, puedes verte
muy beneficiada con las mascarillas descongestivas específicas
para esa zona.

PRODUCTOS:
Existen distintos tipos de máscaras faciales de acuerdo a cada
necesidad. Ellas pueden aportar descongestión, luminosidad,
hidratación, firmeza, nutrición, etc. Sus formatos también son
variados: las hay de papel, en crema y gel. Elige la más adecuada
según tu tipo de piel.

Si tienes piel normal y resistente, puedes beneficiarte de una

mascarilla hidratante con aporte de vitamina C.

Si tu piel es grasa con tendencia al acné, prefiere una mascarilla con

ácido glicólico, el cual controlará la producción de sebo, cerrará los
poros abiertos y disminuirá la cantidad de puntos negros.

En pieles sensibles y enrojecidas, es recomendable aplicar

máscaras faciales calmantes.

RUTINA DE BELLEZA: MASCARILLA

FACIAL
Aplica la máscara facial después de la limpieza y exfoliación.
Relájate y disfruta mientras dure su aplicación. Si tienes un evento
especial, es recomendable que la realices un día antes y no en las
horas previas.

Periodicidad: 1 vez por semana

Tiempo estimado: 10 a 30 minutos
Implementos:

Mascarilla facial

APLICACIÓN:
Paso 1: Limpia, exfolia y aplica tónico en el rostro.
Paso 2: Aplica la mascarilla de acuerdo con las instrucciones
del envase. Evita colocar en los párpados y contornos de los
ojos.
Paso 3: Tiéndete, relájate y deja actuar por el tiempo indicado
en el producto.
Paso 4: Retira la máscara según las indicaciones del envase.
Paso 5: Limpia el rostro con agua tibia. Aplica tónico, sérum,
contorno de ojos y crema facial.

TIEMPOS RUTINAS DE BELLEZA

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material desde www.supermaquillajelibro.com
A todas las mujeres nos encantan los productos de maquillaje, más
aun cuando vienen en esos hermosos estuches, tienen brillos y ricas
texturas. Cuando los vemos en un escaparate son una tentación
para cualquiera. ¡Dan ganas de llevárselos todos!… aunque ni
siquiera sepamos para qué sirven algunos de ellos.

Cada día aparecen nuevos productos que pretenden mejorar y

simplificar el proceso del maquillaje. Muchos son realmente útiles y
otros, solo buenas ideas o lindos envoltorios. Existen herramientas
básicas para maquillarnos. Una vez que aprendas para qué son y
cómo se utilizan, podrás reconocer la potencial utilidad de nuevas
herramientas.

En este capítulo veremos cuáles son las herramientas más comunes

que se utilizan para maquillar. Comenzaremos con una amplia
variedad de brochas, luego continuaremos con otros utensilios que
facilitan la aplicación del maquillaje y, por último, veremos cómo
cuidarlos para que te duren mucho tiempo en buen estado.
 Brochas de maquillaje
Las brochas o pinceles de maquillaje son mucho más que un
artículo bonito y suave. Ellas pueden hacer la gran diferencia,
incluso si eres de las que se maquillan con pocos elementos.

El mercado es muy amplio y encontrarás de todas las calidades y

precios. Si las cuidas bien, te pueden durar muchos años. Por ello,
te recomiendo que las veas como una inversión. Comienza
comprando las que más uses. Elige brochas de marcas de
maquillaje profesionales. También puedes encontrar otras de buena
calidad a precios convenientes en tiendas especializadas.

Para reconocer la calidad de las brochas, debes

sentir la suavidad de sus pelos en tu piel. Si los
pelos son ásperos o poco flexibles, o se
despeinan o caen con facilidad, significa que no
son de buena calidad. Por último, el mango debe
ser cómodo para manipularla. Fíjate en su
tamaño y grosor, prueba el movimiento que
harías con ellas para testear su comodidad al
usarla.

En general, las brochas que vienen con los productos de maquillaje

son muy pequeñas. Te recomiendo que no las uses para aplicar
productos, ya que no lograrás buenos resultados. Déjalas solo para
realizar retoques durante el día si es necesario.

Las brochas se dividen en las de pelo natural y de pelo sintético.

Estas últimas son un poco más duras que las de pelo natural y
absorben menos producto, pero arrastran mejor los maquillajes de
base oleosa, lo cual permite tener mayor control y precisión en
productos cremosos, siendo ideales para aplicar delineador líquido o
gel, corrector y labiales.

Las brochas de pelo natural son generalmente de pelo de caballo,

cabra, ardilla o marta cibelina. Estas son mucho más suaves y se
recomienda su uso para los maquillajes en polvo y sombra de ojos.

Ahora bien, el mercado de manufactura de las

brochas con pelo natural es muy grande y no todas
las empresas cumplen con las reglamentaciones
que protegen a los animales. En los tiempos
actuales, de mayor conciencia por el valor y
bienestar de los animales, deberíamos preferir las
de pelos sintéticos.

De acuerdo con cifras recientes entregadas por Michele Thew,

Gerente Ejecutiva de Cruelty Free International, más de 115
millones de animales en todo el mundo son víctimas de
experimentos o sacrificados cada año por la industria cosmética. Tú
puedes contribuir al cambio prefiriendo productos que cuentan con
la certificación de “No testeados en animales”.

Los productos que no son testeados en animales cuentan

con una certificación Cruelty Free, que se caracteriza por el
dibujo de un conejito. Búscalo en tus productos y así
contribuirás a la protección de los animales.

Actualmente, existen alternativas sintéticas muy buenas que,

además, son antibacterianas y aptas para personas alérgicas al pelo
natural. La empresa japonesa Toray fabrica y distribuye para todo el
mundo una fibra sintética de excelente calidad. Cuando compres
brochas, pregunta de qué material son sus fibras, y si son de Toray,
estarás llevando las mejores. Ojo, no las vayas a confundir con el
Taklon, que es otra fibra sintética mucho más económica, a la cual
se le conoce habitualmente con el nombre de nailon.

Puedes identificar el pelo natural del sintético a través de tus

sentidos. Utilizando el tacto, percibirás que las de pelo natural son
mucho más suaves. A través de la vista, puedes observar si su color
es natural (las de color artificial son sintéticas). Por medio del oído,
puedes fijarte en el sonido que emiten al pasar el dedo sobre las
fibras: si casi no hacen ruido y se mueven lentamente, son
naturales.

Ahora te voy a mostrar cuáles son los tipos de brochas que existen y
para qué se usan. Las brochas están diseñadas de acuerdo con su
forma y grosor, pensando en el área en el que serán utilizadas. Sin
embargo, no existe una regla ni nada por el estilo. Una vez que
conozcas las brochas y sus usos, podrás elegir las que más te
acomoden.

TIPOS DE BROCHAS
1. BROCHA PARA CORRECTOR:
Esta brocha tiene forma de paleta y es angosta para lograr
precisión. Se utiliza para aplicar corrector debajo de los ojos y para
ciertas zonas específicas que se deseen corregir.

2. BROCHA LENGUA DE GATO:

Esta brocha se utiliza para aplicar base líquida. Se caracteriza por
ser plana, con forma de paleta y bordes redondeados.

3. BROCHA MOFETA:
También se le llama brocha para pulir y se caracteriza por tener
unos pelos más largos que otros. Originalmente, fue creada para
aplicar brillitos, pero también se utiliza para la base líquida. Úsala
realizando movimientos circulares a fin de lograr una película muy
liviana de base, ligera y natural. El secreto está en utilizar solo las
fibras que sobresalen y no apoyarlas por completo sobre la piel.
Personalmente, me encantan los resultados; solo debes saber
utilizarla para lograr el mejor acabado.

4. BROCHA PARA SOMBRA DE OJOS:

Por lo general, tiene el ancho suficiente para cubrir la mitad del
párpado. Puedes encontrar esta brocha en distintos grosores. Su
forma suele ser como una paleta recta o con los bordes
redondeados, lo cual permite difuminar el maquillaje sin dejar líneas
marcadas.

5. BROCHA PARA CEJAS:

Esta brocha tiene forma de paleta más angosta; sus fibras son
cortas y rígidas. Puede tener un corte recto o en diagonal, lo cual la
hace ideal para perfilar y rellenar las cejas utilizando sombra para
cejas. También se puede usar para delineado de ojos.

6. GOUPILLÓN:
Esta es una palabra francesa y significa “rociador”. En maquillaje se
utiliza para referirse al cepillo que habitualmente viene incorporado
como aplicador en las máscaras de pestañas. Este cepillo es una
herramienta que sirve para ordenar cejas y pestañas.
7. PEINETA PARA CEJAS:
Es una pequeña peineta que se utiliza para peinar las cejas.

8. BROCHA KABUKI:
La palabra kabuki proviene de Japón y significa “fuera de lo común”.
Esta brocha se caracteriza por tener un mango corto. Es gruesa,
muy suave y de bordes redondeados. Tiene múltiples usos, desde
aplicación de polvos, bronceadores hasta rubor.

9. BROCHA DE RUBOR:
Es una brocha mediana, suave y con los bordes redondeados. Se
utiliza para las mejillas y para aplicar iluminadores y polvos.
10. BROCHA ANGULADA:
Es una brocha mediana que tiene un corte en diagonal. Es ideal
para realizar contorno, ya que permite perfilar las mejillas y el
mentón. También sirve para aplicar rubor.

11. BROCHA PARA POLVOS:

Esta es una brocha gruesa, muy suave y redondeada. Es ideal para
aplicar polvos, ya que abarca grandes superficies del rostro.
También se puede usar para aplicar bronceador en zonas amplias,
como el cuello, escote y hombros.

12. BROCHA PARA LABIOS:

Es un pincel muy delgado y sus fibras son rígidas en forma de punta
redondeada. Es ideal para aplicar labial con mayor precisión.

13. BROCHA PARA DELINEADOR LÍQUIDO/GEL

PARA OJOS:
Es un pincel con pocas fibras, lo cual permite realizar trazos muy
delgados. Es ideal para aplicar delineador líquido y en gel.
14. BROCHA ABANICO:
Es una brocha plana con las fibras dispuestas en un semicírculo,
similar a la forma de un abanico. Se utiliza principalmente para
barrer o limpiar los polvos de sombra de ojos que hayan caído sobre
nuestro rostro. Se pasa suavemente, con poca presión, para que los
polvos vuelen fuera de tu rostro. También hay quienes la utilizan
para aplicar bronceador o brillo sobre el escote y hombros.
 Otras herramientas
1. ESPONJAS:
Las esponjas son muy necesarias, ya que se utilizan para difuminar
la base y realizar correcciones, tal como si fuese una “goma de
borrar”.

Hay esponjas desechables, que vienen en cantidades de 10 o más.

Si las usas solo tú, puedes reutilizarlas 2 o 3 veces y luego tirarlas a
la basura.

También están las esponjas con forma de gota, conocidas como

“Blender” (mezclar). Estas son reutilizables; solo debes lavarlas para
mantenerlas limpias. Antes de usarlas, se humedecen con agua
para lograr mejores resultados. Hay de distintos precios y calidades.

Por último, está la Silisponge, esponja de silicona transparente con

forma ovalada. Su principal característica es que no absorbe el
maquillaje y es fácil de limpiar, lo cual la hace más higiénica.
2. BORLA PARA POLVOS:
Es del tamaño de la palma de una mano, muy suave y agradable al
tacto. Antiguamente las mujeres la usaban para retocar su
maquillaje. Actualmente se utiliza para aplicar polvos translúcidos.
Se puede lavar y reutilizar.

3. ENCRESPADOR:
Es una herramienta muy práctica para encrespar las pestañas. Los
hay de plástico y de metal. Tienen una gomita de silicona que se
debe cambiar al menos cada 6 meses. Úsalo siempre antes de
aplicar la máscara de pestañas, de lo contrario, estas podrían
quedar pegadas al encrespador y quebrarse o caerse.
Cuchara: También hay muchas mujeres que prefieren encrespar sus
pestañas con una cucharita de té o café. Si sabes hacerlo, puedes
lograr una curvatura muy natural. Procura mantenerla limpia y sin
restos de máscara de pestañas.

4. PINZAS:
Las pinzas son un accesorio indispensable para perfilar las cejas y
retirar vellos en el rostro. Son de acero inoxidable y tienen la punta
afilada para poder atrapar los vellos con precisión. Las pinzas que
tienen la punta en diagonal son más fáciles de manejar. Las que
terminan en punta son para retirar vellos pequeños.

Vale la pena invertir en unas pinzas de buena calidad, ya que te

harán el trabajo mucho más simple y rápido. Las de marca
Tweezerman han sido premiadas, cuentan con garantía y se
encuentran en prácticamente todos los países.

5. ESPEJO CON AUMENTO:

Es muy útil contar con un pequeño espejo que tenga aumento. Te
servirá cuando utilices la pinza y también para ver detalles de tu
maquillaje, más aún si no tienes muy buena vista.

6. COTONETES DE ALGODÓN:
También conocido como hisopo, bastoncillo, cotonito, varita o varilla
de papel, es un instrumento comúnmente utilizado para la limpieza
del conducto auditivo. También se usa con fines cosméticos para
realizar correcciones de maquillaje en áreas pequeñas, como
distintos sectores de los ojos. Es muy útil que siempre cuentes con
algunos cotonetes, ya que te pueden sacar de apuros en alguna
emergencia.

7. COSMETIQUERO:
Es importante que guardes tus maquillajes y herramientas en un
mismo lugar. Así podrás mantener tus productos ordenados y al
alcance de la mano, lo cual te ahorrará mucho tiempo. Existen
cosmetiqueros de distintos tamaños y formas.
Fíjate en que el material sea lavable o fácil de limpiar. Los
maquillajes suelen soltar mucho polvo y todo se ensucia con mucha
facilidad. Elige el que más se acomode a tus necesidades. Te
recomiendo guardar las brochas en un estuche separado para
protegerlas mejor y que no se ensucien ni despeinen.
 Cómo cuidar tus
superherramientas
Como vimos anteriormente, es recomendable invertir en materiales
de calidad, ya que están en contacto directo con nuestra piel y,
además, en el caso específico de las brochas, afectan directamente
sobre el resultado de nuestro maquillaje.

Para mantener tus brochas higienizadas, debes limpiarlas una vez a

la semana con algún limpiador de brochas, y una vez por mes o
cada dos meses debes hacerlo más profundamente utilizando agua
y jabón. A continuación, veremos dos efectivas maneras de limpiar
tus brochas.

LIMPIEZA CON LIMPIADOR DE BROCHAS

En el mercado encontrarás limpiadores de brochas de distintas
marcas, precios y tamaños. Todas las marcas profesionales de
maquillaje cuentan con uno.

También puedes hacer tu propio limpiador; solo necesitarás alcohol

isopropílico y un envase con difusor en spray.

El alcohol isopropílico es un compuesto químico usado,

principalmente, para limpiar pantallas de computadores y discos
compactos. Puedes encontrar alcohol isopropílico en ferreterías
especializadas y en empresas de artículos de computación. Su
precio es de unos USD 5 por litro. Con 1 litro tendrás limpiador de
brochas para mucho tiempo.

Para limpiar tus brochas también necesitarás una toalla o papel

absorbente. Si usas una toalla, te recomiendo que la dejes solo para
esto, ya que, con el uso, se irá manchando y es probable que la
suciedad no salga con el lavado.

Implementos:
 Limpiador de brochas o alcohol isopropílico
Una toalla

APLICACIÓN:
Paso 1: Rocía una pequeña cantidad (2 o 3 puf) de limpiador
de brochas o alcohol isopropílico sobre las cerdas de la
brocha.
Paso 2: Pasa las cerdas de la brocha sobre la toalla o papel
suavemente y cuidando de no deformarla. Sigue el sentido de
las cerdas.
Paso 3: Repite las veces que sea necesario, hasta que la
brocha quede limpia.
En pocos minutos, la brocha se secará y quedará limpia y
desinfectada, lista para ser usada al instante. Asegúrate de que esté
seca antes de ponerla en contacto con tu piel.

No dejes remojando las brochas en este líquido, ya que su

composición es muy fuerte y hará que el pegamento de la base se
despegue y las cerdas se caigan.

Ten presente que el alcohol isopropílico es un compuesto químico

que requiere de precauciones. Jamás lo pongas en contacto directo
con tu piel y guárdalo en un lugar alejado de los niños.

LIMPIEZA DE BROCHAS CON AGUA

La otra manera de limpiar las brochas es lavándolas con agua. Este
procedimiento toma más tiempo y, además, requiere de al menos un
día completo para su secado, ya que las brochas se deben secar al
aire. No utilices el secador para acelerar el proceso, ya que se
deformarán.

Puedes usar distintos productos para lavar las brochas. Los más
comunes son champú de bebé, jabón de glicerina, lavalozas y aceite
de oliva. Independiente del ingrediente que elijas, te recomiendo que
le agregues una pequeña cantidad de lavalozas, el cual actuará
como desinfectante.

APLICACIÓN:
Paso 1: Sobre la palma de tu mano coloca una pequeña
cantidad de producto para limpiar, humedece la brocha con
agua tibia y haz girar las cerdas con suavidad hasta que esté
impregnada de producto.
Paso 2: Continúa realizando el movimiento y observa cómo el
maquillaje comienza a diluirse.
Paso 3: Enjuaga la brocha con agua tibia hasta eliminar todo
residuo. No sumerjas la brocha en agua, ya que se puede
despegar el pegamento que mantiene las cerdas unidas a la
base.
Paso 4: Estruja con una toalla y peina la brocha en el sentido
original de sus cerdas.
Paso 5: Déjalas secar al aire libre en el borde de una mesa.
No las ubiques sobre una toalla, ya que podrían contraer
hongos. Tampoco utilices secador para acelerar el proceso, ya
que el viento podría deformar la forma original de las cerdas.

CUIDADO Y LIMPIEZA DE OTRAS

HERRAMIENTAS
Borla para polvos:
Existen opciones muy económicas en el mercado, lo cual
permite hacer de este accesorio algo desechable. Sin
embargo, si has decidido invertir en una borla de mejor
calidad, puedes lavarla con agua y champú de bebé, de la
misma manera que las brochas. También puedes meterla a la
lavadora junto con tu ropa delicada.
Esponjas:
Las esponjas tipo “Blender” están hechas de silicona y son
reutilizables. Las de buena calidad pueden lavarse muchas
veces antes de tener que eliminarlas. En general, te darás
cuenta de la calidad por su valor. Por esta razón existe una
gran diferencia de precios en este producto. Si vas a utilizar
este tipo de esponjas, debes ser muy cuidadosa en su
limpieza, ya que pueden acumular bacterias.
Encrespador de pestañas:
Cuando limpies tus brochas, aprovecha de limpiar también tu
encrespador de pestañas.
Debes poner atención en dos puntos: primero, en la parte
metálica, donde suelen acumularse restos de máscara de
pestaña. Limpia con un poco de limpiador de brochas y retira
con un papel absorbente.
También debes observar el estado de la gomita, la cual se
debe cambiar aproximadamente cada 6 meses. En general,
los encrespadores traen unas gomitas de recambio. Guárdalas
en algún lugar que recuerdes para reemplazarlas cuando
corresponda.
Pinzas:
Las pinzas van perdiendo filo con el uso. A medida que se van
gastando, te será cada vez más difícil manipularlas. Puedes
llevarlas a un afilador de cuchillos. Marcas como Tweezerman
vienen con garantía de por vida e incluyen el afilado cuando
sea necesario.

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material desde www.supermaquillajelibro.com
¡Llegó el momento de ponernos manos a la obra!

Hagamos un pequeño resumen de lo que hemos visto hasta ahora.

En el Capítulo 1 hablamos sobre los tipos de piel de acuerdo a su
etnia y a su composición lipídica (piel seca, normal, mixta y grasa).
Idealmente, ya sabes cuál es el tuyo y, además, a qué grupo de
colorimetría perteneces.

Con esta información, ya sabes qué productos son los más

adecuados para ti y cuáles son los colores que más te favorecen
para obtener un buen maquillaje. Recuerda que puedes descargar
de forma gratuita los tests de colorimetría y tipos de piel en el sitio
web www.supermaquillajelibro.com

En el Capítulo 2 revisamos los beneficios de tener una piel

naturalmente hermosa y de qué manera podemos cuidarla
incorporando distintas rutinas de belleza que harán que tu cutis se
vea luminoso y saludable. Además, repasamos el paso a paso de
cada una de esas rutinas y vimos como en cosa de minutos puedes
lograr una gran diferencia en el estado de tu piel.

Luego en el Capítulo 3 analizamos los tipos de brochas que existen

y para qué se usan, así como también otras herramientas que se
utilizan en el maquillaje de forma habitual.

Con todo lo anterior, ya estarás en perfectas condiciones de pasar a

la acción y comenzar a implementar el método del Supermaquillaje.
LAS BASES DEL SUPERMAQUILLAJE
El Supermaquillaje es un sencillo y efectivo método que he creado
para las supermujeres que trabajamos, somos mamás y corremos
todo el día de un lado para otro, razones por las que disponemos de
poco tiempo para aplicarnos un maquillaje que nos dure toda la
jornada, no se corra ni se desvanezca durante el día.

Todo un desafío, ¿cierto?

El Supermaquillaje hará todo esto por ti y más. Este sistema me ha

funcionado a mí y a cientos de mujeres que han aprendido a
maquillarse conmigo. Sé que a ti también te encantará y que
revolucionará tu vida para mejor.

Este sistema se basa en las técnicas que utilizan los maquilladores

profesionales, aunque adaptadas a una versión que se ajusta a la
disponibilidad de tiempo que tenemos la mayoría de las mujeres.

El Supermaquillaje se aplica en 10 pasos que te ayudarán a

conseguir resultados efectivos en tan solo 15 minutos.

Los 10 pasos son los siguientes:

1. Primer
2. Corrector
3. Base
4. Cejas
5. Sombra de ojos
6. Delineador de ojos
7. Máscara de pestañas
8. Rubor
9. Labial
10. Fijador
Ahora bien. No todas necesitamos hacer los 10 pasos siempre y, de
hecho, hay muchas mujeres a las que, por ejemplo, no les gusta
delinear sus ojos y otras a las que no les agrada aplicar base. En
estos casos, esos pasos pueden ser omitidos sin problema.

Lo que sí es importante es asegurarte de maquillar aquello que, por

muy leve que sea, produzca un gran cambio en tu aspecto. Y para
eso, es crucial saber identificar cuál es tu punto débil o, como yo lo
llamo, tu criptonita.

LA CRIPTONITA
¿Recuerdas que al comienzo de este libro identificamos tu
criptonita?

Tu criptonita es tu debilidad en lo que a maquillaje se refiere. Para la

gran mayoría, su criptonita son las ojeras, que les da un aspecto de
cansadas. Para otras, su criptonita es la rosácea, que hace que su
piel se vea poco uniforme. También hay quienes tienen como
criptonita sus cejas, porque casi no tienen vellos y sin maquillarlas
su expresión las hace verse decaídas o hasta mayores. Y así
sucesivamente…

Nuestra criptonita nos ayuda a priorizar los pasos en el

Supermaquillaje. De esta manera, puedes tener distintos paso a
paso, basados en el tiempo de que dispongas y también en aquello
que es prioridad para ti, que indudablemente puede ir variando.

Por ejemplo, en mi caso, mi criptonita son las cejas. Mi aspecto

cambia mucho al maquillármelas. Cuando tengo una reunión y
dispongo de tiempo, realizo mi Supermaquillaje de 10 pasos, lo cual
me ocupa 15 minutos. En otras oportunidades, hago solo 7 pasos,
en 10 minutos. Y los fines de semana, en los que estoy más
relajada, ejecuto apenas 4 pasos en solo 5 minutos.

Pero estas tres versiones incluyen el paso de maquillar las cejas, ya

que de esta manera me aseguro de cubrir mi necesidad número
uno, con lo cual logro grandes cambios estéticos.

En este capítulo te explicaré en qué consiste cada uno de los pasos,

qué productos utilizar y cuál es la técnica para lograr los mejores
resultados. Una vez que los aprendas, podrás comenzar a
combinarlos y hacer tus propias versiones de acuerdo al tiempo con
que cuentes.

EL MAQUILLAJE DE DÍA
El maquillaje de día se caracteriza por su naturalidad. El resultado
que buscamos es vernos como si no nos hubiéramos maquillado o
nos hubiésemos maquillado muy poco. Para lograr esto,
utilizaremos colores neutros, rosados y damascos, y dejaremos de
lado los tonos azul, verde y violeta, que son más nocturnos.

Este maquillaje neutro y clásico es ideal para ir al trabajo, como

también para las actividades sociales del día a día. Por ello, lucir un
maquillaje natural es coherente con ir de compras, recoger a los
niños del colegio o tomar un café con las amigas.

En poco tiempo y con pocos productos podemos hacer

transformaciones maravillosas en nuestro rostro: disimular ojeras,
manchas, rojeces y mucho más. No necesitas a una maquilladora
profesional para hacer estas maravillas; tú misma puedes aprender
a maquillarte y lograr los resultados que desees.

La práctica hace al maestro. Practica cada día y verás cómo

obtendrás mejores resultados.

Estoy emocionada por ti y por los resultados que vas a conseguir.

¿Estás lista para comenzar?

Excelente. ¡Ahí vamos!

SUPERMAQUILLAJE DE DÍA
ENCRESPADO DE PESTAÑAS
Antes de comenzar a maquillarte, te recomiendo encrespar tus
pestañas utilizando un encrespador o una cucharita. Si lo haces
después, podrías pasar a llevar tu maquillaje.

Las pestañas deben quedar con una curvatura leve que haga lucir la
mirada más despierta. Procura no encresparlas demasiado porque
después será difícil aplicar la máscara de pestañas de manera
uniforme.

Hay quienes tienen las pestañas naturalmente onduladas y otras

que se han realizado una ondulación permanente o lifting de
pestañas. En estos casos, el encrespado no será necesario.

Encrespar las pestañas te tomará un par de segundos, pero tu

aspecto cambiará muchísimo.
 1. Primer
Antes de maquillarte, recuerda limpiar e hidratar tu rostro tal como
vimos en el Capítulo 2. Para que tu maquillaje luzca y dure todo el
día, tu piel debe encontrarse en las mejores condiciones.

El paso inicial en el maquillaje de día es aplicar primer.

¿Qué es el primer? Es una palabra en inglés y su traducción en

castellano es prebase. Se utiliza para uniformar la piel y reducir la
apariencia de poros abiertos. También se usa para fijar el maquillaje,
brindándole una duración extra de dos a tres horas. Es ideal para
trabajar y para eventos especiales en que queremos lucir un
maquillaje espectacular durante toda la jornada. Si alguna vez has
sentido que el maquillaje se evaporó o que la piel lo absorbió,
usando primer nunca más tendrás esta experiencia.

El primer deja una película aterciopelada y es de

efecto inmediato. Prácticamente todas las marcas
cuentan con este producto. Es transparente o de
color piel, lo cual no influye en el resultado, ya que
su propósito no es aportar color. Existen de distintos
tipos, algunos tienen la textura de un gel, en cambio
otros son líquidos y se aplican con spray; elige el
que más se adapte a tus necesidades. También los
hay para potenciar la luminosidad, dar efecto mate o
de poros cerrados.

La mayoría de los primer se pueden usar en todo el

rostro. También existen algunos que son específicos
para ojos y labios. Al aplicarlos en los párpados,
ayudarás a aislar la sombra de ojos del sebo
producido por la piel, el cual hace que la sombra se
acumule en los pliegues. Aplicar primer en los labios
te ayudará a que el labial dure por más tiempo.
Para mí, el primer es un producto básico que todas deberíamos
tener. Las mujeres jóvenes y aquellas que tienen una piel en buenas
condiciones pueden usarlo sin necesidad de aplicar base. Yo
prefiero utilizarlo los fines de semana sin aplicar base para que mi
piel descanse y respire.

APLICACIÓN
Tiempo estimado: 30 segundos

Materiales:

Primer
Brocha lengua de gato, brocha mofeta o dedos.
Paso 1: Coloca una pequeña cantidad de primer (Medida Nº 2)
en la mano.
Paso 2: Esparce de forma homogénea por todo el rostro y el
comienzo del cuello. Incluye los párpados y los labios.
Paso 3: Fíjate que esté bien difuminado y que no queden
acumulaciones de producto en ninguna parte. Debes obtener
una capa casi imperceptible; tu piel debe verse suavizada y sin
brillo.
 2. Corrector
El siguiente paso es muy importante, ya que ahora realizaremos las
correcciones necesarias para que la piel de tu rostro luzca pareja y
uniforme. No todas necesitamos hacer las mismas correcciones. Las
más comunes son las ojeras, rojeces (como rosácea y granitos) y
manchas en la piel producidas por el sol, la edad y los embarazos.

Muchas mujeres tienen problemas con este paso, pues intentan

corregir todo tipo de imperfecciones con el producto equivocado, por
lo que en lugar de disimular las ojeras, solo consiguen acentuarlas.

Para hacer correcciones de todo tipo, se necesitan dos tipos de

productos: corrector y concealer.

El concealer es de color piel, tiene una consistencia liviana y logra

ocultar ciertas imperfecciones, pero no corrige colores. Por esta
razón, si una ojera es muy oscura, con tonos azulados o verdosos,
no logrará disimularla.

La mayoría de las mujeres utiliza concealer para realizar

correcciones, pero no logran los resultados que desean
sencillamente porque este producto no es lo suficientemente
cubritivo para hacerlo.

En general, el concealer es complementario al corrector y se aplica

sobre este para lograr un color parejo y natural. Solo cuando las
ojeras o manchas son muy suaves, logra taparlas.

Elige un concealer que sea de un tono igual o más claro que el de tu

piel, pues además te iluminará. Para lograr un resultado natural, el
concealer debe mezclarse perfectamente con tu piel.

Los correctores son de distintos colores (verde, amarillo, violeta,

naranja, etc.), tienen una textura más gruesa y se utilizan para
neutralizar distintas tonalidades en la piel. Cada uno de ellos
funciona sobre la base de la rosa cromática corrigiendo el tono
contrario. Es decir, para corregir ciertas imperfecciones de tonalidad
en la piel, es necesario utilizar el color que las anula.

Veamos los colores de corrector más comunes:

Naranja: se utiliza para corregir de manera efectiva las ojeras

azuladas y grisáceas. También es efectivo para corregir
manchas oscuras y pecas.
Verde: se emplea para neutralizar el color rojo, presente en la
rosácea y en los granitos.
Amarillo: se usa para las ojeras violeta y azules, y también
para iluminar la mirada.
Violeta: se aplica para corregir zonas amarillas y naranja.
Rosado: corrige el tono amarillento en pieles claras y medias,
y aporta un efecto saludable y descansado.
Blanco: más que corregir, ilumina. Se puede utilizar para crear
volúmenes y elevar ópticamente zonas hundidas del rostro.
Debes tener presente que una imperfección puede tener distintos
tonos al mismo tiempo, lo cual hará necesario aplicar dos, tres y
hasta cuatro colores de corrector diferentes para lograr neutralizarla.
Esto ocurre, por ejemplo, con los hematomas. Cuando nos damos
un golpe, el hematoma tiene un color más cercano al violeta, pero
pronto luce azulado con naranja y, más tarde, verde con amarillo.

Lo mismo puede ocurrir con las tonalidades de las ojeras. No todas

son iguales ni tienen la misma intensidad. Debes experimentar hasta
que encuentres la combinación de colores perfecta para tu caso en
particular.

Hoy, prácticamente todas las marcas de maquillaje ofrecen una

amplia gama de correctores y concealers. Te recomiendo que
inviertas en productos de calidad. Por lo general, las marcas
profesionales de maquillaje ofrecen las mejores alternativas.

Un corrector de calidad se caracteriza por su efectividad, ya que se

requiere una pequeña cantidad de producto. Un corrector de mala
calidad no será muy cubritivo y tendrás que aplicar varias capas
para ver resultados, con lo cual es muy probable que el producto se
termine acumulando entre las líneas de expresión y finalmente no
logres un aspecto natural.

Un concealer de buena calidad se testea probando cómo se mezcla

con tu piel. Si logra integrarse de manera natural, es perfecto. Si el
resultado es artificial, entonces no es el adecuado.

Puedes encontrar correctores y concealers en crema y líquidos. El

formato no afectará el resultado. Pruébalos y elige el que más te
acomode.

APLICACIÓN:
Tiempo estimado: 2 minutos
Materiales:

Correctores
Concealer
Dedos, esponja o brocha paleta pequeña de corrector.
Brocha de polvos o kabuki

Paso 1: Identifica las zonas que quieres corregir: ojeras,

manchas, rosácea, granitos, etc.
Paso 2: Elige el (o los) colores de corrector que corresponda
para anular lo que quieres ocultar. Por ejemplo, para corregir
rojeces, usarás el color verde.
Paso 3: Aplica el corrector en pequeñas cantidades sobre la
zona por corregir. En el caso de las ojeras, comienza en el
interior del ojo, cerca del lagrimal.

Paso 4: Esparce el corrector sobre toda la zona oscura. Luego

utiliza tus dedos o una esponja para difuminar. Al hacerlo,
realiza movimientos muy suaves para que el corrector penetre
en la piel.
Según el color de corrector que hayas utilizado, quedarás con
el rostro de colores casi verde, naranja o amarillo. No te
asustes, es parte del proceso.
Paso 5: Limpia la brocha que usaste con el corrector,
utilizando un paño o papel absorbente y elige un concealer
color piel, del mismo tono o uno más claro que el color natural
de tu piel.
Paso 6: Aplica una capa ligera de concealer encima de todas
las correcciones que realizaste en el rostro.
Paso 7: Difumina suavemente el concealer utilizando una
esponja o tus dedos. Procura que se integre con el corrector
sin arrastrarlo. En este paso deben desaparecer las zonas de
color verde, naranja o amarillo. Tu rostro tiene que lucir un
color de piel uniforme.
Las correcciones de los volúmenes son más complejas, por ejemplo,
las espinillas. En estos casos ayúdate con una brocha cilíndrica, con
la que puedas realizar correcciones más precisas cuidando de que
no se acumule el producto alrededor. Es muy fácil que el producto
se salga con el roce. En estos casos, te recomiendo que apliques
polvos entre el corrector y el concealer, lo cual ayudará a que el
producto se fije mejor.
 3. Base
La base es muy importante en el maquillaje, aunque,
lamentablemente, suele tener mala fama, porque muchas mujeres
temen quedar “estucadas” o como usando una máscara.

Efectivamente, algunas bases de maquillaje no se ven para nada

naturales y eso ocurre por distintos motivos. Uno de ellos tiene que
ver con el estado de la piel. Si no está limpia e hidratada y la base
elegida no es la indicada, el resultado será poco satisfactorio.

Otra razón está relacionada con la calidad del producto. Existen

infinitas opciones de marcas y formatos de bases, pero para lograr
un resultado natural, debes elegir el tipo de base que se ajuste a tu
tipo de piel y un color de acuerdo con tu tono.

TIPOS DE BASE DE MAQUILLAJE:

Base fluida:
Es de formulación líquida. Se trata de una
base hidratante que suele aportar un poco
de brillo. Su capacidad para cubrir es de
media a alta. Es ideal para pieles normales,
secas y muy secas. También se
recomienda para pieles con líneas de
expresión, ya que su acabado es más
natural.
Base compacta:
Es más densa que la base líquida, por lo
cual también sirve para hacer correcciones.
Ayuda a matizar y es ideal para pieles mixtas y grasas. Es de
aplicación sencilla, y permite retocarla fácilmente durante el
día.
Base mousse:
Es de fácil aplicación, suave y aterciopelada al tacto. Logra un
efecto matizador, pues el mousse se transforma en polvo. Por
lo general, su formulación es libre de aceites, lo que la hace
ideal para pieles mixtas y grasas. Su capacidad para cubrir es
media, no apta para hacer grandes correcciones. No es
recomendable para pieles secas, ya que puede marcar en
exceso las líneas de expresión.

Base en barra:
Se caracteriza por ser muy fácil de aplicar. Existen opciones
para todos los tipos de piel, pero en general se recomienda
para pieles mixtas y grasas. Tiene gran capacidad de
cobertura y se puede aplicar directamente desde la barra, lo
cual es muy cómodo si no usas corrector. De lo contrario,
pasar la barra directamente sobre las correcciones podría
arruinar todo el trabajo previo.
Base en polvo:
Viene en el mismo formato que los polvos translúcidos, pero
su formulación incluye pigmentos que la hacen más efectiva.
Por lo general, es de origen mineral, lo que es ideal para pieles
grasas, ya que absorben la grasa que produce la piel durante
el día. Tiene un acabado muy natural y es fácil de aplicar, pues
al ser en polvo, no se acumula. Te recomiendo aplicarla con
una brocha kabuki realizando movimientos circulares en
distintos sentidos para lograr los mejores resultados.
BB Cream:
Las BB Cream surgieron en Alemania para las pieles
sensibles. Su nombre viene de Blemish Balm, lo cual se puede
traducir como “bálsamo para las imperfecciones”.
Las BB Cream son más ligeras que las bases de maquillaje,
por lo tanto, su capacidad para cubrir es de baja a media. Son
fáciles de usar. Tienen hidratantes y humectantes para tratar la
piel durante el día. Muchas de ellas tienen efecto mate, y la
mayoría incluye factor solar. Son ideales para quien quiera
ahorrar tiempo y no requiera realizar correcciones mayores.
Existen distintas opciones para todo tipo de piel.
CC Cream:
Su nombre viene de Color Correcting Cream (crema correctora
del color). Es la versión más cubritiva de las BB Cream, pero
son un poco menos ligeras. A diferencia de las BB Cream, las
CC Cream incluyen correctores de color para neutralizar
imperfecciones de la piel.
DD Cream:
Su nombre significa Daily Defense (protección diaria). Las DD
Cream brindan los mismos beneficios de hidratación que las
BB Cream, más la capacidad de corrección de las CC Cream.
Además, incluyen tratamiento para las arrugas y líneas de
expresión. Se recomienda su uso a partir de los 30 años. Si
bien las DD Cream no reemplazan el uso de sérum, según el
caso, podrían ser utilizadas en reemplazo de la crema de día.
Sérum de Tient:
Los Sérum de Tient o Foundation son muy ligeros, livianos y
de fácil aplicación. Son ideales para los que tienen piel normal,
seca y extraseca y quieren lograr un efecto nude. Son de
cobertura baja a media. Para lograr mayor efectividad, puedes
aplicar una segunda capa.
Corrigen imperfecciones y, a la vez, realizan un tratamiento
durante todo el día. Aportan principios activos como la
vitamina C, retinol, péptidos e ingredientes antioxidantes. La
mayoría contiene factor solar.
 Su presentación, por lo general, es en
frasco de vidrio y se aplica con un gotario.
Este sistema evita que el producto entre en
contacto con el exterior, lo que protege sus
componentes activos. No lo confundas con
el sérum de tratamiento que aplicamos
antes de la crema, ya que se trata de
artículos distintos. El Sérum de Tient es
maquillaje y reemplaza el uso de la base.

APLICACIÓN
Tiempo estimado: 2 minutos
Materiales:
Base de maquillaje
Polvos translúcidos sueltos
Para base líquida, mousse y en crema: brocha para base,
lengua de gato, mofeta, esponja o los dedos.
Para base en polvo: brocha kabuki.

Paso 1: Deposita una pequeña cantidad (Medida Nº 2) de

base sobre tu mano o sobre una superficie plana. Impregna la
brocha con producto.
Paso 2: Ubica pequeñas cantidades en distintos sectores de tu
rostro: frente, mejillas, nariz, mentón.
 * Base en polvo: con la brocha kabuki, realiza suaves
movimientos circulares en un sentido y en el contrario para que el
producto penetre en forma pareja.

Paso 3: Difumina suavemente desde el interior del rostro hacia

el exterior. No olvides los orificios de la nariz, orejas, borde del
cabello y base del cuello. Evita aplicar sobre las cejas.

Paso 4: Fija la base de maquillaje con polvos translúcidos de

color piel claro. Estos harán que la base dure más tiempo y
reducirán el brillo. Personalmente, para el día prefiero usar
polvos translúcidos sueltos, pues el resultado es más ligero y
natural.
Los polvos translúcidos compactos son ideales para la noche,
ya que son más densos y se notan más, pero de noche
podemos usar más maquillaje sin problemas. También son
perfectos para llevarlos en la cartera y hacer retoques durante
el día.
Es importante que los polvos sean de un color lo más parecido
a tu tono de piel. No uses tonos bronceados, ya que la
finalidad es sellar la base de maquillaje y no aportar color.
Con una brocha kabuki, coloca una cierta cantidad de polvos
en la frente, las mejillas y el mentón. Impregna sobre todo el
rostro favoreciendo su absorción. Luego de un minuto, retira el
exceso de polvos con un movimiento de barrido desde el
interior del rostro hacia el exterior. Tu piel quedará lisa y sin
brillo.
 * Base en polvo: no requiere sellar con polvos translúcidos.

Notarás que tu rostro quedará sin brillo y que tu piel se ve más

uniforme. Es muy importante este paso, ya que es la manera de
asegurarnos de que la base durará todo el día en su lugar. Además,
al sellar estarás evitando el brillo en exceso.
 4. Cejas
Las cejas, junto con ser el marco de los ojos, le otorgan expresión al
rostro. La forma de maquillar las cejas va cambiando según la
moda. En los años 20, se delineaban muy delgadas y levemente
caídas, dando una expresión de pena. En los años 30, se usaron las
cejas delgadas y muy arqueadas. En los 70, aparecieron las cejas
pobladas de Brooke Shields y Madonna. Y luego, en los 90,
volvieron otra vez las cejas delgadas. Hoy en día se usan más bien
gruesas, un poco arqueadas, como dando una mirada interesante, y
no tan peinadas.

Para que las cejas luzcan perfectas se debe buscar un equilibrio

entre su forma, espesor, longitud y color.

La ceja está compuesta por 3 partes de espesor variable: el inicio,

que es la más gruesa, tiene un espesor de 8 mm; el punto de altura,
que es la zona más alta y está ubicada entre el centro del iris y el
borde del ojo, mide 5 mm; y el extremo, que es la zona externa,
mide entre 1 o 2 mm, aproximadamente. El espacio entre la ceja y el
ojo debe ser del mismo tamaño que el iris.

Para dibujar la forma de las cejas, debemos trazar una línea que
comienza en la aleta de la nariz y pasa por el lagrimal. Ese punto
nos indicará el inicio de la ceja. Luego trazamos una línea que va
desde la aleta de la nariz y pasa por el rabillo del ojo. Así
obtendremos el final de la ceja.
Antes de maquillarlas, es importante que se encuentren perfiladas,
de lo contrario será muy difícil darles forma y podrían quedar
demasiado gruesas. Si no sabes depilarte las cejas con pinza,
busca a alguien experta en perfilado. Por lo general, un perfilado
debería durar casi 1 mes, y luego solo tienes que retocarlo.

Para maquillar las cejas, te recomiendo utilizar una sombra de cejas

del mismo color de tu cabello. Esta logra un resultado mucho más
natural que el lápiz de cejas, que muchas veces queda demasiado
marcado.

Las sombras de cejas, a diferencia de las de ojos, se caracterizan

por ser de un polvo micronizado. Esto quiere decir que está hecho
para quedar fijo en el lugar, no como la sombra de ojos que es más
liviana y volátil.

Elige el color de sombra de cejas que sea más parecido al vello de

tus cejas, y recuerda que todas tenemos una forma de rostro
distinto, por lo tanto, lo más importante es buscar la armonía en
nuestras proporciones.

Para finalizar, puedes usar un fijador de cejas. Por lo general, vienen

en un envase similar a la máscara de pestañas y son como un gel
transparente. El fijador de cejas te ayudará a peinarlas y a
mantenerlas ordenadas por más tiempo.

APLICACIÓN
Tiempo estimado: 2 minutos
Materiales:
Polvo de cejas
Brocha de cejas
Fijador de cejas

Paso 1: Aplica una pequeña cantidad de sombra para cejas

comenzando en el interior y continuando hacia el exterior.
Realiza pequeños trazos siguiendo el sentido del crecimiento
del vello. Rellena los espacios que puedan estar vacíos y
dibuja la forma de la ceja que quieres lograr.

Paso 2: Si es necesario, repite aplicando un poco más de

producto. Anda de menos a más. La sombra para cejas suele
ser muy pigmentada, por lo que es mejor repasar que retirar
exceso de producto. Si te equivocas, puedes usar una esponja
para suavizar y hacer correcciones.
Paso 3: Aplica fijador de cejas siguiendo la forma del
crecimiento del vello, desde el centro hacia el borde externo.
 5. Sombra de ojos
Para el maquillaje de día usaremos sombras de ojos en tonos
neutros, tales como el beige, café, damasco y rosado. Esta gama de
tonos resaltará tu mirada, independiente del color de tus ojos. Si
estos son marrones, estas tonalidades quedarán muy bien, al igual
que si son verdes o azules. Recuerda que el maquillaje de día se
caracteriza por su naturalidad. No utilices sombra azul, verde ni
violeta; deja esos colores para la noche.

En general, las paletas de sombras vienen con cuatro o más colores

complementarios, lo que no quiere decir que los usaremos todos a
la vez. Para el maquillaje de día emplearemos solo dos. Elige los
tonos de acuerdo a tu vestuario y a la intensidad que quieras darle a
la mirada.

Tal vez quieras lograr un look supernatural y no utilizar sombra, lo

cual es completamente válido. Recuerda que el Supermaquillaje
consiste en elegir la combinación de pasos ideal para ti.

La sombra de ojos puede ser opaca o con brillo. Si bien hoy se usan
mucho los brillos, para el maquillaje de día te recomiendo que
emplees sombras opacas, o bien combines una opaca y una
brillante. Utilizar dos tonos brillantes para el día puede resultar poco
natural.

El formato de la sombra puede ser en polvo o en crema. En general,

las sombras en polvo son más fáciles de difuminar y muy
recomendables para las pieles grasas, ya que las sombras en crema
son más aceitosas y tienden a acumularse en los pliegues de los
párpados.

En el maquillaje de día usaremos dos colores: una sombra clara y

una oscura. La sombra clara tiene la función de expandir (o hacer
crecer) y la oscura, de disminuir.
A continuación, te mostraré la técnica que yo utilizo y que llamo la
aplicación en “V”.

Se trata de oscurecer los extremos y dejar el párpado móvil claro

para lograr el efecto “almendrado”. Sé que a muchas mujeres les
resulta difícil aplicar la sombra de ojos, pero esta técnica te resultará
sencilla; solo tienes que practicarla hasta que la domines. Esta
forma de aplicar la sombra favorece más a los ojos pequeños o
caídos.

APLICACIÓN
Tiempo estimado: 2 minutos
Materiales:

Sombra de ojos en tonos naturales (uno claro y uno oscuro)

Brocha de ojos

Paso 1: Elige dos colores en la paleta de sombras, uno claro

para la base del párpado y uno oscuro para dar profundidad.
Paso 2: Con la brocha de ojos, aplica la sombra clara en todo
el párpado, de extremo a extremo, desde el lagrimal hasta la
línea imaginaria que se produce entre el rabillo del ojo y el final
de la ceja. Y desde arriba, pegado a las cejas, hasta abajo, en
todo el párpado móvil junto a la línea de las pestañas.
Paso 3: Limpia la brocha sobre un papel y con la punta de ella
o con una más pequeña, dibuja una “V” en una diagonal que
comienza en el rabillo del ojo y finaliza a la altura de la mitad
del párpado, abarcando hasta 1/3 del párpado desde el borde
externo hacia el interior, tal como se observa en la siguiente
imagen. Utiliza poca cantidad de sombra para que no te quede
el ojo manchado.
 * Nota: si tu párpado está levemente caído, es recomendable que
dibujes la “V” sobre la piel que sobresale. Al oscurecerlo, estarás
reduciendo su volumen y lograrás disimularlo.

Paso 4: Difumina suavemente desde el exterior hacia el

interior siguiendo la misma forma y cuidando de no oscurecer
el párpado móvil. Debes difuminar hasta que el dibujo de la “V”
haya desaparecido y solo se vea una sombra más oscura en
ese sector.

Para los ojos pequeños, es recomendable usar más

sombra clara, y un poco de oscura para dar forma.
En el caso de los ojos grandes, se recomienda usar
más sombra oscura para disminuir el volumen.
Cuando los ojos están muy juntos, se recomienda
ubicar la sombra oscura solo en los extremos para
alargarlos.
Cuando los ojos están muy separados, se recomienda
hacer lo contrario, es decir oscurecer en el centro cerca
del lagrimal y aclarar los extremos.
 6. Delineador de ojos
El delineador de ojos se usa para intensificar la mirada, para crear la
ilusión óptica de un ojo más grande, más pequeño o más
almendrado, y también se utiliza para corregir la línea del ojo en el
caso de que su forma sea descendente o ascendente.

Hay a quienes no les gusta usar delineador y prefieren un look más

natural. Recuerda que el Supermaquillaje te permite elegir los pasos
que quieras y necesites.

Existen delineadores en lápiz, líquidos y en gel. También se pueden

delinear los ojos utilizando sombra de ojos. El delineador en lápiz
otorga un resultado más natural, aunque no es muy recomendable
para pieles grasas, porque suele correrse con facilidad. El
delineador líquido tiene mejor fijación y no se corre, pero requiere de
buen pulso y destreza manual para lograr un trazo recto. Los
delineadores en gel son como los líquidos, pero un poco más
maniobrables.

En cuanto al color, personalmente prefiero el café para el día, ya

que logra un resultado mucho más natural y, al igual que ocurre con
los tonos de las sombras, favorece a todos los colores de ojos. Hay
delineadores café oscuro que logran la misma intensidad que el
negro, pero sin ese aspecto tan duro. El delineador negro puede ser
muy dramático para el día, endurece la mirada y aumenta la edad
de quien lo usa, más aún si es líquido.

Como el maquillaje de día debe ser lo más natural posible, el

delineador cumple la función de intensificar la mirada y corregir la
forma de los ojos. La línea que haremos será sutil, con poco
protagonismo, por tanto, no será ni muy gruesa ni muy larga, solo lo
justo para lograr la forma e intensidad precisas.
APLICACIÓN
Tiempo estimado: 1 minuto 30 segundos
Materiales:

Delineador en lápiz color café

Brocha de delineador (solo si usas delineador en gel)

Paso 1: Aplica delineador sobre el párpado superior, pegado a

las pestañas, desde el borde externo del ojo hacia el interior,
realizando una línea que se va haciendo más pequeña a
medida que se acerca al lagrimal.
Paso 1 Opcional: Aplica delineador en el párpado inferior, bajo
la línea de las pestañas y pegado a ellas, desde el borde
externo hacia el interior, llegando solo hasta la mitad del ojo.
Ojos pequeños: dibuja la línea solo hasta la mitad del
ojo, tanto en la línea superior como inferior. No uses
delineador en la línea de agua porque los achicará.
Ojos grandes: delinea también en el interior del ojo,
sobre la línea de agua, para disminuir el volumen.
Ojos caídos: delinea en el párpado superior dibujando
la línea mucho más gruesa en el borde externo que en
el interno.
Ojos ascendentes: si su tamaño es pequeño, traza
una línea en el párpado inferior, por debajo de la línea
natural, ampliando y alargando el ángulo externo del
ojo.
 7. Máscara de pestañas
Las pestañas son símbolo de femineidad y desde hace miles de
años las mujeres han deseado lucirlas largas, abundantes y
onduladas. La industria de los cosméticos ha desarrollado distintas
tecnologías para satisfacer la necesidad de lucir unas pestañas de
alto impacto. En el mercado existen distintas alternativas para
obtener mayor volumen, alargarlas o con efecto de pestañas
postizas.

Existen dos tipos de formulaciones: normal y a prueba de agua. La

máscara de pestañas normal se retira con facilidad al
desmaquillarse, lo cual es muy cómodo. Lamentablemente, al menor
contacto con el agua, se corre, por tanto, no está indicada para usar
en la piscina o en los días de lluvia. Además, este tipo de máscara
tiende a hacer que las pestañas se bajen.

La máscara de pestañas a prueba de agua tiene mayor fijación,

además mantiene las pestañas arriba, sin que se caigan con el peso
de la máscara. Su desventaja es que es difícil de retirar y no sale
con cualquier producto desmaquillante; solo lo hace con los
especialmente diseñados para este tipo de máscara. Por lo tanto, es
muy importante que encuentres un producto eficiente para
removerla, de lo contrario, puedes pasar largo rato refregando tus
ojos para quitártela y, además, perder varias pestañas en el intento.

Las encontrarás de varios colores: negra, café, verde, azul, violeta o

incolora. Los tonos que más se utilizan para el día son el café y el
negro.
APLICACIÓN
Tiempo estimado: 2 minutos
Materiales:
Máscara de pestañas

Paso 1: Agita el envase de la máscara de pestañas, retira el

aplicador y remueve el exceso de producto de la punta.
Paso 2: Ubica el cepillo en el borde externo del párpado
superior, justo en el crecimiento de las pestañas, y realiza un
pequeño movimiento en el lugar masajeando la base de las
pestañas; después continúa hasta la punta. Esta técnica hará
que la base de tus pestañas quede con mayor cantidad de
máscara que las puntas, favoreciendo que no se caigan y
estén arriba durante todo el día. Luego avanza un poco en
dirección hacia el interior del ojo y repite el movimiento. Hazlo
hasta llegar al lagrimal.
Paso 3: Ordena las pestañas con el mismo cepillo.
Paso 4: Repite dos a tres veces, de acuerdo con la intensidad
que quieras lograr.
Paso 5 Opcional: Con el resto de máscara que aún quede en
el cepillo, pasa suavemente por las pestañas inferiores.
Ojos muy juntos: aplica máscara de pestañas solo
desde el borde externo hasta la mitad del ojo.
Ojos muy grandes: no apliques máscara de pestañas
en el párpado inferior.
Ojos globulosos o saltones: aplica poca máscara de
pestañas.
 8. Rubor o blush
El propósito del rubor es brindar una apariencia saludable, juvenil y
fresca a tu rostro. El rubor se aplica sobre las mejillas y debe verse
natural. No confundas el rubor con el bronceador. Este último se
aplica sobre todo el rostro para brindar un aspecto bronceado a la
piel.

Existen distintos colores de rubor; en general, se dividen en tonos

rosado y damasco. Elige el que más se adecúe a tu tipo y tono de
piel. Los cutis claros se ven mejor con rosado y los oscuros, con
damasco.

La mayoría de los rubores vienen en polvo, pero también los hay en

crema. Si tienes la piel grasa, los rubores en polvo son más
indicados para ti. Y si tienes la piel seca, el rubor en crema puede
aportarte un aspecto hidratado y luminoso.

El rubor se puede aplicar en forma horizontal u oblicua, lo que

dependerá de la forma de tu rostro.
APLICACIÓN
Tiempo estimado: 1 minuto
Materiales:
Rubor
Brocha de rubor

Paso 1: Para ubicar el punto exacto donde debe comenzar la

aplicación de rubor, tienes que sonreír. Al hacerlo, tus pómulos
se levantarán y es precisamente en ese punto más alto en el
que debes empezar.
Paso 2: Luego avanza con la brocha suavemente hacia el
borde externo de tu rostro, en dirección oblicua ascendente, y
difumina.
Paso 3: Haz lo mismo en la otra mejilla.
Paso 4: Comprueba que ambos lados estén iguales. Fíjate si
es necesario repetir la aplicación. Si el rubor quedó muy
marcado, puedes retirar el exceso pasando suavemente una
esponja.
No apliques rubor en otros sectores del rostro, como
frente y mentón. Para lograr el resultado natural que
buscamos, debes hacerlo solo en las mejillas.

Rostro alargado o estrecho: aplica rubor en forma

horizontal.
Rostro triángulo invertido: aplica el rubor en la zona
más externa de las mejillas. Utiliza como referencia el
borde externo del iris hacia las sienes.
Rostro cuadrado y redondo: aplica blush en forma
oblicua ascendente para alargar el rostro.
 9. Labial
El labial se utiliza para resaltar los labios con color o brillo. Solo
basta con aplicar una pequeña cantidad para vernos más radiantes
de inmediato.

Existen infinitas opciones de colores de labial. Durante el día puedes

usar desde colores nude hasta rojos intensos. La suavidad de este
maquillaje te permite jugar con los tonos de labial. Elige un color de
acuerdo a tu tono de piel y que, además, esté en sintonía con tu
vestuario. Solo ten precaución con los colores oscuros cercanos al
negro, ya que son demasiado intensos y se asocian más a la vida
nocturna.

Hay labiales brillantes y opacos. En general, es una cosa de moda.

Los labiales brillantes aportan más frescura y rejuvenecen. También
vienen en distintos formatos, ya sea en barra, en crema o en pote.
Los labiales en barra son los más fáciles de aplicar y permiten
realizar retoques rápidos durante el día.

Para aplicarlos con mayor precisión, se recomienda utilizar una

brocha de labios, la cual te permitirá delinear y rellenar mejor.
Además, es más higiénico si compartes el labial.

En este paso también puedes usar un delineador de labios para

darles forma. Es muy útil para hacerlos lucir más gruesos o más
delgados según sea el caso. El delineador también tiene la ventaja
de crear un muro de contención para el labial, ayudándolo a
mantenerse en el lugar sin correrse, ya que muchas veces el labial
viaja a través de los pequeños surcos de nuestros labios.

Existen muchas opciones de colores de delineadores de labios. Te

recomiendo tener al menos uno que sea color nude, lo más parecido
al color de tus labios, que te servirá para perfilarlos y se mimetizará
con todos los colores de labial que uses.
Por último, te sugiero usar un brillo labial para darles un toque fresco
y coqueto. Uno básico es el brillo de labios transparente, que, al
igual que el delineador nude, te servirá para utilizar con todos los
colores de labial.

APLICACIÓN
Tiempo estimado: 1 minuto y 30 segundos
Materiales:

Delineador de labios
Labial
Brillo de labios
Brocha para labios

Paso 1: Con el delineador, perfila tus labios siguiendo su

contorno natural.*
Paso 2: Utiliza la brocha de labios para aplicar el labial.
Primero, dibuja el borde siguiendo la misma línea que hiciste
con el delineador. Luego rellena los labios con la brocha para
labios.

Paso 3: Con la misma brocha de labios, aplica una pequeña

cantidad de brillo transparente en los labios superior e inferior.
Labios delgados: con el delineador de labios, perfila el
contorno por fuera de la línea natural. Prefiere colores
claros para lograr el efecto de mayor volumen.
Labios gruesos: delinea el contorno de los labios por
dentro de la línea natural. Inclínate por tonos que no
sean muy intensos ni brillantes.
Boca pequeña: para alargar la boca, delinea los
extremos de los labios, unos milímetros más allá de la
línea natural de las comisuras.
Boca grande: perfila los labios con delineador sin llegar
hasta el borde externo, donde están las comisuras.
 10. Fijador
El fijador de maquillaje brinda un acabado duradero a tu maquillaje.
Es ideal para usar en el día a día, para que tu maquillaje dure toda
la jornada, y en eventos especiales. Si utilizas primer y fijador, y
además evitas tocarte el rostro durante el día, podrás estar tranquila
de lucir un maquillaje impecable por largas horas y solo necesitarás
retocar un poco el exceso de brillo del rostro (si hace calor) y los
labios (después de comer).

Existen fijadores que se aplican con spray y logran una bruma muy
sutil, ligera y casi imperceptible. Otros se aplican con rociador y
consiguen una bruma un poco más gruesa y consistente que a
veces deja el rostro mojado por unos minutos, hasta que se seca.

Los fijadores de maquillaje son aptos para todo tipo de piel, sin
embargo, si tu piel es seca, debes fijarte que no contengan alcohol.

Al finalizar el día, es muy importante que lo retires junto con tu

maquillaje antes de irte a dormir. Ten en cuenta que el fijador de
maquillaje actúa dejando una capa transparente de fijación sobre tu
piel, al igual como lo hace una laca en el cabello. Por tanto, si no lo
quitas, impedirás que tu piel respire con normalidad y terminará
secándose.

También existen fijadores naturales que se pueden fabricar en casa

utilizando glicerina o aloe vera. Si te inclinas por estas alternativas,
debes considerar que los productos naturales se conservan en buen
estado por poco tiempo y tendrás que renovarlos cada dos o tres
semanas.
APLICACIÓN
Tiempo estimado: 30 segundos

Paso 1: Una vez que hayas finalizado tu maquillaje por

completo, ubica el rociador a una distancia de, al menos, 20
cm de tu rostro.
Paso 2: Aplica una suave bruma sobre todo tu rostro.
Paso 3: Evita tocar tu rostro y deja que se seque con el aire.

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TIEMPOS MAQUILLAJE DE DÍA
Nosotras las supermujeres realizamos diversas funciones y
cumplimos distintos roles, todo en un mismo día. Por esta razón, es
muy probable que después de haber llevado a los niños al colegio,
hacer la rutina en el gimnasio, tener una reunión de negocios, ir al
supermercado y pasear al perro… tengamos una cena de noche en
la que queramos lucir fenomenales.

Y como nosotras solemos andar con el tiempo justo, solo

disponemos de apenas unos minutos para convertirnos en la versión
sexy, audaz e interesante que se encuentra escondida en alguna
parte de nuestro ser y está a la espera de ser explotada.

Entonces, cual Mujer Maravilla que entra en una cabina telefónica y

se trasforma en heroína, así mismo tenemos que recurrir a nuestros
supersecretos para transformar nuestro maquillaje de día en un
espectacular maquillaje de noche. Y todo, como siempre, en cosa
de minutos.
EL MAQUILLAJE DE NOCHE
Una vez que sabes cómo hacer un maquillaje de día, producir uno
de noche será muy sencillo.

El maquillaje de noche se caracteriza por ser más intenso que el de

día, es más excitante y permite experimentar con texturas y colores.
También posibilita aplicar capas más gruesas de productos sin
temor a vernos sobremaquilladas. Esto ocurre porque la luz artificial
es mucho más suave que la natural. La luz eléctrica baja la
intensidad de los colores, por lo que necesitamos intensificar los del
maquillaje para que se noten más. Si usamos un maquillaje de día
durante la noche, nos veremos pálidas y deslavadas.

En el maquillaje de noche se destacan principalmente los labios o

los ojos. Un maquillaje de día puede transformarse rápidamente en
uno de noche aplicando un labial de color más intenso y
oscureciendo la sombra de ojos. Además, dependiendo de la
ocasión, podemos usar pestañas postizas y aplicar brillos para dar
un toque más glamoroso.

A continuación, veremos en qué consiste el paso a paso de un

maquillaje de noche. Si lo ejecutas desde el comienzo, seguiremos
los mismos 10 pasos del Supermaquillaje, pero le haremos algunas
pequeñas modificaciones en cuanto al uso de productos y forma de
aplicarlos.

Si quieres transformar tu maquillaje de día en uno de noche,

veremos cuáles son los pasos que puedes incorporar para lograr un
resultado de alto impacto en poco tiempo. Las técnicas que veremos
son smokey eye, contouring, strobing y aplicación de pestañas
postizas.

¿Estás lista para sacar a relucir tu lado más sexy?

Muy bien. ¡Ahí vamos!

PASO A PASO DEL MAQUILLAJE DE
NOCHE
Para realizar un maquillaje de noche desde el comienzo,
seguiremos los mismos 10 pasos que en el maquillaje de día, pero,
en algunos casos, le haremos pequeños cambios que te explico a
continuación:

Paso 1: PRIMER
Utiliza primer para asegurar que tu maquillaje dure toda la
noche y se mantenga impecable por largas horas.
Paso 2: CORRECTOR Y CONCEALER
En la noche puedes usar correctores más gruesos, como
aquellos que vienen en barra.
Paso 3: BASE
Si lo deseas, puedes usar una base de maquillaje que cubra
más.
Sella con polvos translúcidos compactos, los cuales tienen un
acabado un poco más grueso que los polvos sueltos, pero
igualmente serán imperceptibles durante la noche. Es
importante que apliques polvos en todo el rostro para prevenir
que se asome el brillo de la “grasitud” que aparece en la zona
T, especialmente si vas a estar en un lugar caluroso o si vas a
bailar. Lleva los polvos en tu cartera para retocar durante la
velada.
Paso 4: CEJAS
Maquilla tus cejas como lo vimos en el maquillaje de día. Si lo
deseas, puedes intensificar el color y hacerlas un poco más
gruesas para profundizar la mirada.
Utiliza un fijador de cejas para mantenerlas ordenadas toda la
noche. El fijador de cejas es como una máscara de pestañas
transparente. Se aplica sobre las cejas siguiendo la forma del
crecimiento de los vellos y se deja secar. No las toques
durante la noche.
Paso 5: SOMBRA DE OJOS
La sombra de ojos que se utiliza en el maquillaje de noche es
de colores más intensos que en el maquillaje de día. Si usas
colores cálidos (marrón, damasco, rosado) debes recargarla o
elegir una sombra satinada. Si usas colores fríos (azul, verde,
violeta), se notarán mucho más.
Si tu maquillaje es de fiesta, como de Año Nuevo, puedes usar
colores más intensos y sombras nacaradas bajo el arco de la
ceja para lograr un efecto de mayor altura del párpado.
Paso 6: DELINEADOR DE OJOS
Reemplaza el delineador café por uno negro en lápiz, líquido o
en gel. También puedes usar otros colores si lo deseas.
El trazo de la línea puede ser más grueso y más largo, incluso
como Cat-Eye.

Paso 7: MÁSCARA DE PESTAÑAS

Aplica máscara de pestañas color negro. Puedes hacer varias
pasadas para lograr mayor volumen y que se vean un poco
más dramáticas.
Utiliza pestañas postizas si lo deseas. Más adelante en este
mismo capítulo veremos cómo ponerlas.
Paso 8: RUBOR
Intensifica el color de tus pómulos usando un color de blush
más fuerte que el que usas durante el día.
Paso 9: LABIAL
Atrévete con un color más sexy, como un rojo intenso o un
fucsia. También puedes usar colores oscuros: morado, azul y
negro (dependiendo del estilo que quieras lograr).
Si prefieres emplear colores más claros, la combinación
perfecta es con unos ojos recargados o Smokey Eye.
Utiliza brillo labial para finalizar.
Paso 10: FIJADOR
Aplica fijador de maquillaje en todo el rostro para asegurar una
duración extra.
 Smokey eye
El smokey eye consiste en dar un efecto ahumado al ojo, tal como
su significado en inglés. Este efecto de humo se puede conseguir
con distintas tonalidades de sombra (café/beige, morado/rosado,
azul/celeste, etc.), pero la más usada es negro/gris.

Esta técnica se ha realizado de distintas maneras desde los años

20. En ese entonces, la moda era llevar un smokey eye con ojos
redondos. En los años 80 también se usó, pero con un toque más
alargado, simulando a un felino. Hoy se utiliza en la vida nocturna y
en las pasarelas para crear un look interesante, sexy y elegante.

Para tu smokey eye necesitarás al menos 3 colores de sombra: un

color claro para la base, un color medio y un color oscuro, por
ejemplo: beige-gris-negro. Hoy las marcas de cosméticos ofrecen
las paletas de sombras de ojos con los tonos ya definidos, incluso
varias indican que son para el smokey eye.

Existen distintas maneras de aplicar esta técnica. La que te

mostraré a continuación es la que yo realizo y pienso que a ti
también te puede resultar muy bien.

APLICACIÓN
Tiempo estimado: 5 a 7 minutos
Materiales:
Sombra de ojos en tres distintos tonos más una sombra
satinada.
Delineador negro en lápiz
Brocha de ojos mediana (2) y delgada (1)

Paso 1: Primer
Aplica primer en los párpados para que la sombra no se corra
y dure toda la jornada.
Paso 2: Sombra base (clara)
Con la brocha de ojos (2), aplica una sombra clara color piel o
beige en todo el párpado, incluyendo el párpado móvil y el
párpado superior.

Paso 3: Sombra media

Con la misma brocha (2), aplica la sombra de ojos media (gris)
en todo el párpado móvil, desde el lagrimal hasta el borde
externo del ojo.
Paso 4: Delineador de ojos
Con un delineador negro en lápiz, haz una línea en el párpado
superior pegado a las pestañas. Procura que la línea sea más
delgada en la medida que se acerca al lagrimal y más gruesa
hacia el rabillo del ojo.
Paso 5: Sombra oscura
Con la brocha (2), aplica la sombra más oscura dibujando una
“V” horizontal en el borde externo del párpado superior y luego
difumina hacia el centro, pasando sobre el delineador. Revisa
qué tan intenso queda el color y, si es necesario, vuelve a
aplicar.
 Con una brocha de ojos más delgada (1), aplica una
pequeña cantidad de sombra oscura en el párpado
inferior, muy pegado a las pestañas.

Paso 6: Delineador de ojos

Delinea los ojos utilizando el delineador negro en lápiz, por
dentro en toda la línea de agua y por fuera pegado a las
pestañas, desde el lagrimal hasta el rabillo del ojo.
Paso 7: Sombra clara satinada
Opcional: Puedes aplicar un toque de sombra clara satinada
en el interior del ojo, pegado al lagrimal. Solo una pequeña
cantidad que aporta en punto de luz.
Paso 8: Máscara de pestañas
Aplica máscara de pestañas (color negro) en una o varias
capas según sea tu preferencia.
 Contouring
En inglés contouring significa contorno. Se trata de una técnica de
maquillaje que utiliza la luz y la sombra para crear efectos ópticos
que contornean el rostro. Con ella se pueden cambiar las facciones
significativamente, sin necesidad de intervenir de manera invasiva.
Muchas figuras de la televisión la utilizan y logran efectos visuales
que solo se podrían conseguir con cirugía plástica. Con el
contouring se puede afinar un rostro redondo, enderezar, adelgazar
o respingar una nariz, disimular la papada, achicar la frente,
agrandar o reducir el mentón, etc.

Si bien esta técnica años atrás solía ser de uso exclusivo de los
maquilladores profesionales, hoy se ha masificado a tal punto que
es parte de la rutina de maquillaje de muchas mujeres que quieren
resaltar sus rasgos o disimular ciertas imperfecciones de su rostro.

El principio básico del contouring es aplicar un color oscuro para

generar sombra en la zona que queremos disminuir, y un color claro
para dar luz y volumen en la zona que queremos aumentar. Muchas
veces no es necesario aplicar ambos, ya que con uno solo se
genera el otro por defecto, lo cual dependerá básicamente del color
de piel.

Para el contouring existen paletas en polvo y en crema. Puedes

elegir la que te resulte más fácil de manipular. Cuando es en polvo,
esta técnica se lleva a cabo después de la base y antes del rubor.
En el caso de la crema, puede hacerse antes de la base para lograr
un resultado más sutil, o después de ella para un efecto más
notorio. En ambos debe finalizarse sellando con polvos.

El contouring es una técnica que se puede emplear tanto para el

maquillaje de día como para el de noche, pero se utiliza más para
veladas nocturnas, pues al aplicar una capa adicional de maquillaje
durante el día, el resultado podría ser no tan natural.
APLICACIÓN CONTOURING

APLICACIÓN
Tiempo estimado: 3 a 7 minutos
Materiales:
Paleta de contouring
Brocha de contouring
Esponja

Afinar el rostro y hacerlo lucir más delgado:

Tono oscuro: para ubicar el punto exacto donde irá el primer
trazo, hunde las mejillas para que tus pómulos queden en
relieve de manera evidente. En la zona hundida aplica el tono
oscuro en un trazo oblicuo ascendente que comienza a la
altura de la mitad del rostro. Luego relaja las mejillas y
oscurece el contorno de los pómulos en forma paralela a la
línea del cabello. Al finalizar la aplicación, tendrás una forma
como letra “L”.
Tono claro: aplica en el sector de los pómulos, justo dos dedos
sobre la hendidura. Difumina para que se vea natural.

Achicar la frente:
Tono oscuro: dibuja un cintillo sobre la frente, pegado al borde
del cabello, yendo de extremo a extremo hasta donde finalizan
las cejas, luego difumina.
Tono claro: aplica luz en el centro de la frente, por sobre la
altura de las cejas.
Enderezar una nariz chueca o afinar para que se vea más
delgada:
Tono oscuro: traza dos líneas paralelas en ambos costados de
la nariz, dejando el centro con un espacio recto, y luego
difumina.
Tono claro: traza una línea recta sobre el tabique de la nariz.
Para ensanchar una nariz muy delgada, aplica luz en forma
paralela en ambos bordes de ella.
Enangostar las aletas de la nariz:
Tono oscuro: sombrea las aletas de la nariz en ambos
costados de manera natural.
Tono claro: aplica luz en la punta de la nariz.
Respingar la nariz:
Tono oscuro: sombrea justo debajo de la nariz.
Tono claro: ilumina la punta de la nariz.
Disimular la papada:
Tono oscuro: sombrea justo debajo de la mandíbula, dejando
claro el borde donde está el hueso. Oscurece toda la zona de
volumen donde se encuentra la papada y difumina hacia el
cuello hasta que se convierta en nada.
Tono claro: ilumina justo por sobre el hueso de la mandíbula.
Para finalizar, aplica polvos translúcidos para fijar el maquillaje
y bajar el brillo. Luego aplica rubor como de costumbre.
 Strobing
Esta palabra en inglés alude a los destellos, reflejos y brillos en
general. En el maquillaje, se trata de una técnica que ilumina el
rostro aportando luminosidad, con lo cual se consigue un aspecto de
piel radiante. Con el acabado de esta técnica se pretende simular
una piel ligeramente humedecida o irisada que la haga lucir
saludable y humectada.

Hasta hace pocos años hacíamos todo lo posible por lograr un

efecto mate en la piel. Nos alejábamos de cualquier brillo que
pudiera hacernos lucir con “grasitud”. Con el tiempo, hemos
aprendido la diferencia entre luminosidad y brillo. Actualmente, esta
técnica se utiliza tanto para el maquillaje de día como para el de
noche.

El secreto para obtener el mejor resultado con el strobing radica en

dos cosas. Primero, en saber aplicar la luz en los puntos exactos
para lograr el efecto de piel humectada y que no parezca
transpiración. Segundo, elegir los tonos de iluminador adecuados
para el día y para la noche, ya que los tonos excesivamente
nacarados pueden verse poco elegantes al mediodía.

El strobing se emplea siempre al finalizar el maquillaje, después del

rubor y antes de aplicar el fijador de maquillaje. Hay una amplia
variedad de colores de iluminadores. En general, puedes preferir los
tonos rosados y damasco para la zona de los pómulos, y los
amarillos y blancos para la línea del centro del rostro. Para las pieles
morenas se recomiendan los tonos cobre, bronce y dorados, y evitar
los plateados muy iridiscentes.

Sin duda que el mejor strobing que existe es tener una piel
iluminada de manera natural, lo cual puedes lograr manteniéndola
limpia e hidratada. No dejes de leer el Capítulo 2 sobre cómo cuidar
tu rostro con rutinas de belleza que lo harán lucir radiante.
APLICACIÓN
Tiempo estimado: 1 a 3 minutos
Materiales:
Iluminador
Brocha mediana para iluminadores en polvo.
Esponja o los dedos para iluminador en crema.
Para obtener los mejores resultados, aplica los puntos de luz en
lugares específicos, siguiendo la forma de una cruz. Recuerda
utilizar pequeñas cantidades para lograr un resultado sutil.

Línea vertical: comienza aplicando iluminador siguiendo una línea

vertical que va en el centro de tu rostro.

Punto 1: Aplica el primer punto de luz en la frente, justo sobre

la altura de las cejas.
Punto 2: Traza una delgada línea de iluminador sobre el
tabique de la nariz.
Punto 3: Haz un punto de luz sobre el arco de cupido de los
labios. Este punto es opcional, pues algunas mujeres
consideran que puede confundirse con transpiración.
Punto 4: Ubica el último punto de luz en el centro del mentón.
Línea horizontal: aplica iluminador sobre el punto más alto de
los pómulos, justo encima del hueso.
 Pestañas postizas
Las pestañas largas y abundantes embellecen nuestros ojos y
hacen que la mirada se vea cautivadora e irresistible. Todas
quisiéramos tener unas pestañas extensas y tupidas de forma
natural, pero la mayoría de las veces no es así.

Desde la antigüedad las pestañas han sido tema para las mujeres.
En Roma, allá por los años 700 antes de Cristo, se usaban las
pestañas gruesas, copiosas y encrespadas. En esos tiempos no se
trataba solo de un asunto de moda. El filósofo romano Pliny escribió
que las pestañas se caían por exceso de sexo, razón por la cual las
mujeres se las ingeniaban fabricando una pasta hecha de corcho y
kohl para probar su castidad ante la sociedad.

Durante el Romanticismo apareció la primera máscara de pestañas,

creada por Eugene Rimmel, que estaba compuesta de polvo de
carbón y jalea de vaselina. Pese a que era levemente tóxica, causó
sensación entre las mujeres.

A comienzos del siglo XX, la protagonista de la película muda

Intolerancia, dirigida por David Wark Griffith, usó las primeras
pestañas postizas hechas de cabello natural pegado a un trozo de
terciopelo. Desde entonces, las estrellas de Hollywood comenzaron
a usarlas para intensificar su mirada.

A partir de la década de los 50 se introdujo el material plástico en su

fabricación, y en el 2000, Corea comenzó a fabricarlas con una
tecnología refinada y de manera masiva. En la actualidad existen
todo tipo de variedades para elegir. Hay pestañas permanentes que
duran hasta dos meses, otras removibles que se utilizan solo una
vez para complementar el maquillaje.

Las pestañas postizas no son fáciles de poner, ya que se requiere

mucha paciencia y buen pulso. Las primeras veces debes disponer
de bastante tiempo. Con la práctica puedes mejorar tu técnica. De
todas maneras, te recomiendo dejarlas para ocasiones en las que
quieras lucir espectacular.

En la categoría de pestañas postizas removibles, existen las

siguientes opciones:

Tiras completas: Estas son las más comunes, pero las más
difíciles de poner, pues se requiere de muy buen pulso para
que queden bien, no se noten y parezcan naturales.
Existen de distintas longitudes y espesores, de acuerdo a las
necesidades de cada una. Se utilizan en ocasiones especiales
para darle un toque glamoroso a tu look.
En racimo: Son agrupaciones de tres pestañas. Sirven para
acentuar la mirada y son una buena solución para quienes
tienen pelones sin pestañas. Para pegarlas en el lugar preciso,
es necesario usar una pinza. Se ubican desde la mitad del
párpado hacia afuera para lograr una mirada más abierta.
También se pueden usar solo en el rabillo del ojo, con lo cual
se consigue alargarlo.
De fantasía: Este tipo de pestañas se utilizan para fiestas de
disfraces, como Halloween y carnavales. Son de colores,
plateadas o con plumas. Su objetivo es llamar la atención y
crear un look que no pase desapercibido.

Las pestañas postizas pueden causar infecciones oculares

y alergias, por lo que es muy importante que las retires y
desmaquilles tus ojos antes de dormir. Para saber si eres
alérgica al pegamento, haz una prueba poniendo una
pequeña cantidad sobre tu muñeca durante 24 horas.

APLICACIÓN DE PESTAÑAS DE RACIMO:

Materiales:

Pestañas postizas de racimo

Pegamento de pestañas postizas
Pinzas
Delineador de ojos

Paso 1: Con las pinzas, coge un racimo de pestañas desde la

mitad y aplica pegamento en la base. Deja secar por 30
segundos.
Paso 2: Pega el racimo junto al rabillo del ojo en el borde
externo del párpado, lo más junto que puedas a tus pestañas
naturales.

Paso 3: Pega el siguiente racimo avanzando hacia el interior

del ojo y continúa pegando los demás en esa dirección hasta
la mitad del ojo, o hasta el lagrimal. Puedes poner la cantidad
de racimos tan juntos o espaciados como quieras. Para lograr
un efecto de mayor volumen, ubícalos muy juntos. Ordena las
pestañas con la ayuda de una peineta de pestañas y déjalas
secar por unos minutos para que se fijen bien.
Paso 4: Pasa un delineador en lápiz o gel en la base de las
pestañas para lograr un aspecto más unificado.
APLICACIÓN DE PESTAÑAS POSTIZAS DE TIRA
Y FANTASÍA:
Materiales:

Pestañas postizas de tira o fantasía

Pegamento de pestañas postizas
Pinzas
Peineta de pestañas
Delineador de ojos

Paso 1: Antes de colocarlas, mide el largo de las pestañas

postizas con tu ojo y determina hasta dónde llegarán. Si es
necesario, corta lo que sobre.
Paso 2: Aplica el pegamento en toda la base de las pestañas
postizas sin que se acumulen excesos. Deja secar por 30
segundos antes de pegarlas en el párpado. Si las pegas de
inmediato, se podrían resbalar.
Paso 3: Con la ayuda de una pinza, empieza a pegarlas en el
párpado móvil, junto a las pestañas naturales, partiendo por el
interior, luego la mitad y finalmente el exterior del ojo.
Paso 4: Presiona las pestañas postizas suavemente contra las
naturales para que se integren.
Paso 5: Para dar una apariencia más natural, pasa un
delineador en lápiz o en gel por el borde de las pestañas. Así
emparejarás las pestañas postizas con las naturales y podrás
corregir si quedó algún grumo de pegamento.

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El cambio es lo único permanente en esta vida. Nuestra piel y
nuestras facciones se van modificando con el tiempo y las distintas
vivencias. Cada una de estas etapas requiere adaptación, y el
maquillaje va acompañándonos en este proceso.

Sea cual sea el momento en el que te encuentres, abraza tu

presente, enamórate de quien eres y proponte comenzar a brillar
desde tu individualidad. Olvídate de los prototipos de belleza que
nada tienen que ver con la realidad, no te fuerces a cumplir un rol
determinado ni tampoco encarnes un personaje que no te queda
cómodo.

Valora la autenticidad, la experiencia y lo vivido. Haz que tu historia

se refleje en el brillo de tu mirada y en la amplitud de tu sonrisa.
Conéctate con lo mejor de ti y proyéctalo al mundo; transmite esa
belleza única que emana de tu ser.

Disfruta el momento en que te encuentras, porque en algún

momento pasará. Toda etapa es de dulce y agraz; concéntrate en la
parte llena del vaso.

En este capítulo veremos cómo realizar un maquillaje acorde a las

características de la piel en distintas etapas de la vida. Recuerda
basarte en los 10 pasos del Supermaquillaje, y ten presente las
consideraciones que veremos a continuación.
EMBARAZADAS
El cuerpo de las mujeres cambia con el embarazo en todos los
aspectos. No solo crece la barriga, sino que, además, se alborotan
las hormonas y nuestra piel lo deja en evidencia. Rojeces, estrías y
manchas son algunas de las señales menos gratas. Tantos cambios
nos hacen sentir ajenas a nuestro propio cuerpo.

Sin embargo, esta época es maravillosa y debemos hacer lo posible

por mantenernos conscientes de que apenas dura unos meses.
Tenemos que enfocarnos en el lado más amable de la vida y
reconocer que, pese a ciertos malestares comunes, el embarazo
también nos hace lucir resplandecientes y luminosas.

Durante este período es muy importante mantener una alimentación

adecuada para no subir de peso en exceso y evitar grandes
estiramientos en la piel, comer varias raciones de proteínas para
favorecer la producción de nuevas fibras musculares y evitar la
flacidez pos-parto, tomar bastante líquido, así como también ingerir
frutas y verduras para mantener los índices de hidratación.

Cuida tu piel efectuando tus rutinas diarias de limpieza y nutrición.

Es probable que tengas que hacer algunos ajustes, como aumentar
las dosis de hidratante o cambiarte a fórmulas para pieles grasas.

Protégete especialmente del sol, sin importar la estación del año, ya

que en esta etapa la piel es más sensible al fotoenvejecimiento y
propensa a sufrir alteraciones en la pigmentación. Para disimular
estos cambios de color, realiza la técnica de corrección para
uniformar los distintos colores con tu maquillaje que revisamos en el
paso 2, Corrector, del Supermaquillaje. También aplica correcciones
en tus ojeras cuando veas que comienzan a evidenciarse.

El maquillaje de día es perfecto para cuando estamos embarazadas.

Selecciona la cantidad de pasos que necesites para lograr el
maquillaje natural que deseas. En esos días en que sientas que te
falta color y luminosidad, utiliza rubor e iluminadores. Haz un
compromiso contigo misma de ser la mujer embarazada más
hermosa y resplandeciente que existe en ti.
PIELES MADURAS
El paso del tiempo se ve reflejado en nuestra piel. Eso es evidente,
pero está en cada una llevar los años con dignidad, poniendo por
delante la experiencia y sabiduría adquiridas. Hoy, más que nunca,
ser mayor no es sinónimo de dejar de ser atractiva, sensual o sexy.

En este mismo momento en que estoy escribiendo, pienso en la

ceremonia Nº 90 de los premios Óscar, y se me viene a la mente la
elegancia de Meryl Streep envuelta en un vibrante vestido rojo; Jane
Fonda, a los 80 años, espléndida con un vestido blanco ajustado y
un rostro sonriente; ni hablar de Rita Moreno, quien a sus 86 años
lució fabulosa el mismo vestido strapless que ocupó en la gala de
1962 cuando ganó el premio a mejor actriz de reparto por la película
West Side Story.

En estos tiempos, tenemos todo a nuestro favor para vernos

hermosas más allá de la edad: existe alta tecnología, tanto en los
productos cosméticos como en los procedimientos de belleza. Y si a
esto le sumamos el brillo único de nuestro mundo interior, el
resultado no puede ser sino de alto impacto.

Si bien lucir fabulosa siendo mayor es totalmente posible, nadie ha

dicho que sea fácil. El cuidado de la piel se vuelve esencial y, en
cuanto al maquillaje, elegir los productos correctos hace una gran
diferencia.

La piel madura comienza a partir de los 35 años. Sin embargo, la

edad biológica no siempre va de la mano con la edad de la piel.
Existen distintos factores biológicos y de experiencias de vida que
influyen en el estado de la dermis.

La piel madura se caracteriza por ser más delgada y carente de

tonicidad y firmeza. Tiende a secarse con mayor facilidad, pierde el
color y presenta poros más abiertos. Aparecen manchas asociadas
a la edad, arrugas profundas y el tono de la piel se pone amarillento.
Con el paso de los años, se desacelera el metabolismo, las células
se regeneran lentamente y disminuye la producción de colágeno.
Como la vascularización responsable del tono rosado saludable de
la piel es más lenta, hay menos secreciones sudoríparas y
sebáceas, con lo cual aumenta el resecamiento. Estos son factores
internos propios de la edad. También debemos considerar los
factores externos, tales como el tabaquismo, sol, climas adversos y
mala alimentación.

Prevenir el envejecimiento de la piel es fundamental a medida que

pasan los años, ya que todos los daños son acumulativos. Por esta
razón es tan importante que incorpores tus cuidados faciales como
una rutina, día tras día.

En relación con el maquillaje, es posible atenuar arrugas, flacidez,

falta de color y de luminosidad. Lo más importante es no usar
productos que cubran en demasía, pues son muy pesados y marcan
aún más las arrugas. El maquillaje debe ser muy natural, de lo
contrario, tiende a envejecer el rostro.
MAQUILLAJE PIEL MADURA PASO A PASO
Básate en los 10 pasos del Supermaquillaje y considera las
siguientes sugerencias:

1. Primer
Aplica primer para lograr una piel uniforme, más lisa y
aterciopelada. El primer te ayudará a reducir la apariencia de
las arrugas y líneas de expresión.
2. Corrector
Utiliza un corrector que sea ligero. Cubre las manchas y
luego aplica un concealer del mismo tono de tu piel o un poco
más claro.
3. Base
Prefiere una base líquida, idealmente que tenga efecto de
luminosidad o de piel satinada. Aplícala con la brocha mofeta.
Esta te ayudará a lograr una capa ligera con un acabado
pulido.
Sella con polvos translúcidos sueltos, los cuales fijarán tu
maquillaje de manera liviana.
4. Cejas
Recuerda que las cejas dan la expresión al rostro y, en las
mujeres maduras, son determinantes.
Procura que tus cejas estén bien perfiladas y no existan
vellos en lugares en que no corresponda. Idealmente, te
recomiendo que una profesional realice tu perfilado y se
encargue de mantenerlo una vez por mes. Una profesional
sabrá darle la forma más apropiada a tus cejas de acuerdo
con tu rostro.
Maquilla tus cejas utilizando sombra para cejas en un color
medio o claro, de acuerdo con el color de tu cabello. No
utilices lápiz para delinearlas, pues quedarán muy marcadas
y te harán lucir mayor. Tampoco las maquilles con tonos muy
oscuros, porque se verá exagerado y poco natural.
5. Sombra de ojos
 Utiliza sombras de ojos en tonos suaves y mate. Aléjate de
los brillos porque acentuarán las arrugas de tus párpados. Te
recomiendo usar sombras en polvo y no en crema, ya que
estas últimas suelen acumularse entre los pliegues de los
ojos.
6. Delineador de ojos
Prefiere un delineador en lápiz, que es más fácil de maniobrar
cuando la piel del párpado está suelta y logra resultados más
naturales. No uses delineadores líquidos ni en color negro
porque endurecen demasiado la mirada y aumentan la edad.
Los colores café y gris son ideales.
7. Máscara de pestañas
Aplica máscara de pestañas en pequeñas cantidades.
Prefiere el color marrón porque suavizará tu mirada y te dará
un aspecto rejuvenecido.
8. Rubor
Aplica rubor en colores cálidos y difumina bien. Prefiere el
rubor en polvo antes que en crema; este último podría verse
muy brillante y poco natural.
9. Labial
Con el paso de los años los labios tienden a perder definición.
Perfílalos con un delineador lo más parecido al color de tus
labios o al tono del labial. Utiliza un labial que no sea muy
oscuro; los tonos burdeos y marrón hacen ver mayor. Es ideal
que el labial no sea opaco y tenga un poco de brillo. De lo
contrario, aplica brillo transparente.
10. Fijador
Sella tu maquillaje con una bruma de fijador para que dure
todo el día.
Strobing: Puedes aplicar esta técnica para dar
luminosidad a tu rostro. Realiza toques de luz en
pequeñas cantidades. Procura elegir tonos cálidos,
jamás plateados ni blancos, los cuales se pueden ver
muy artificiales.
Contouring: Si vas a aplicar contouring, déjalo para el
maquillaje de noche, pues en el día la piel podría verse
muy recargada.
TATUAJES
Los tatuajes son mucho más que una moda, y hoy son parte de la
identidad de muchas mujeres. Las vemos de diversas edades
luciendo tatuajes de todo tipo de diseños en diferentes sectores del
cuerpo.

Los tatuajes están hechos para mostrarse, sin embargo, hay

ocasiones en que queremos disimularlos, ya sea porque deseamos
que el vestuario tenga mayor protagonismo o porque no queremos
desviar la atención a ese punto por razones laborales u otras.

En el año en que fui Miss Chile, apenas se estaban empezando a

usar los tatuajes y aún existían ciertos prejuicios al respecto. Yo
tenía (y aún tengo) un tatuaje en la espalda sobre el omóplato
izquierdo. Para evitar que se generara una discusión al respecto, lo
cubrí con maquillaje y no fue tema. Salvo hasta después de la
coronación, cuando luego de recibir tantos abrazos de felicitaciones,
el maquillaje se corrió y apareció mi tatuaje. Al otro día los
periódicos me llamaron “la Miss del tatuaje” y se especuló si estaría
en riesgo mi participación en el Miss Universo.

Afortunadamente, no pasó nada y, cuando llegué al concurso

internacional, me encontré con muchas misses que lucían tatuajes
en distintos sectores del cuerpo.
Si quieres maquillar un tatuaje para que no se vea, considera el
siguiente paso a paso:

Paso 1: Prepara la piel

Realiza una limpieza de la zona por maquillar. Aplica tónico e
hidratante.
Paso 2: Primer
Aplica primer sobre la zona del tatuaje.
Paso 3: Corrector
Utiliza un corrector muy “cubritivo”, especial para camuflaje, y
aplícalo de a poco, dando pequeños toques con tus dedos o
con la ayuda de una brocha. Para difuminar, puedes usar tus
dedos o una esponja. Fíjate que los bordes se mimeticen con
el resto de la piel de manera natural.
Aplica la cantidad de capas que sean necesarias hasta cubrir
el tatuaje por completo.
Si no tienes un producto de camuflaje, puedes aplicar una
primera capa de corrector naranja y, sobre ella, aplica
concealer de color piel.
Paso 4: Polvos
Sella la corrección aplicando polvos translúcidos con una borla
para que penetre mejor.
Paso 5: Fijador
Aplica una bruma de fijador de maquillaje para que dure todo
el día.

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 COMPARTE LO APRENDIDO
¡Espero que hayas disfrutado leyendo este libro tanto como yo al
escribirlo!

Quiero felicitarte por haber llegado hasta aquí. El solo hecho de

haber adquirido este libro habla de tu decisión de ser la mejor
versión de ti.

Ahora es momento de pasar del aprendizaje a la acción. Recuerda

que es muy importante practicar y ser constante, solo así podrás
perfeccionar tu técnica y lograr mejores resultados cada vez.

Si quieres profundizar lo aprendido conmigo, te invito a participar en

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Además, si te gustó este libro, estaré muy agradecida si dejas tu

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igual que tú, a aprender cómo obtener un maquillaje natural y una
piel hermosa para el resto de sus vidas.

Gracias por invertir este tiempo conmigo.

Claudia Arnello
A
Abanico
Es una brocha de maquillaje cuya forma se caracteriza por ser plana
y semicircular. Está compuesta por distintas capas de pelo
superpuestas entre ellas. Se utiliza para retirar excesos de
maquillaje sobre el rostro.

Acné
Es una enfermedad crónica inflamatoria de la piel, asociada
principalmente a la adolescencia. Se manifiesta con la aparición de
espinillas en el rostro, cuello, espalda, pecho y hombros.

Aerógrafo
Es una herramienta con forma de lápiz o pistola. Se utiliza para
aplicar maquillaje en forma de bruma, pulverizándolo y usando el
aire como vehículo. Se obtiene un resultado muy natural, razón por
la cual su uso es muy popular en televisión y cine.

Alcohol isopropílico
Se utiliza para limpiar brochas de maquillaje y otros artículos como
CD, pantallas de computador y cristales. Se evapora muy rápido, sin
dejar residuos. Es una alternativa económica a los limpiadores de
maquillaje.

Aplicación
Es el término que se emplea para poner maquillaje, ya sea con una
brocha, esponja o utilizando los dedos.

Autobronceante
Producto cosmético para broncear la piel de manera rápida y
segura, sin la necesidad de exponerla al sol. Existen formatos en
crema, spray y aceites.

B
Base
En inglés se le conoce como ‘foundation’. Es un producto de
maquillaje color piel, que se utiliza en toda la superficie del rostro
para unificar la apariencia del cutis y disimular imperfecciones.

BB Cream
Corresponde a las siglas en inglés de Blemish Balm que significa,
bálsamo para imperfecciones. Permite ahorrar mucho tiempo en el
maquillaje, porque con una sola aplicación aporta hidratación,
corrección y color. Su origen es alemán; posteriormente fue
popularizado por Corea.

Baking
Término en inglés cuya traducción literal es ‘hornear’. En el
maquillaje se utiliza para la aplicación de polvo translúcido en
grandes cantidades para después dejarlo reposar durante 10 a 20
minutos. El objetivo es que el maquillaje se funda con el propio calor
de la piel y obtener un resultado totalmente integrado y natural.

Beauty
Término en inglés que significa ‘belleza’.

Biselada
Una brocha biselada es aquella que tiene sus pelos con un corte
oblicuo. Se utiliza principalmente para aplicar sombra de cejas.

Blender
En inglés significa ‘mezclar’, y en maquillaje se refiere a la esponja
de silicona con forma de gota, ideal para difuminar corrector y base.

Blush
Palabra en inglés que significa ‘ruborizarse’ o ‘sonrojarse’, y se
refiere al producto que conocemos como rubor o colorete, con el
cual acentuamos el color de los pómulos.

Bolsas en los ojos

Es el volumen que se forma debajo de los ojos producto de la
acumulación de líquido, generalmente ocasionado por el cansancio
y la falta de sueño.

Brochas de maquillaje
Son los pinceles que se utilizan para aplicar los distintos productos
de maquillaje.

Bronzer
Término en inglés que significa ‘bronceador’. Se utiliza para los
productos que otorgan un aspecto bronceado o tostado, similar al
que se obtiene al exponerse al sol.

Burgundy
En inglés significa ‘borgoña’. Es una denominación colectiva para
referirse a los colores característicos de los vinos provenientes de la
zona de Borgoña en Italia. Es una variante del color vino, que se
encuentra en productos cosméticos, como labiales, esmaltes de
uñas, y prendas de vestuario.

C
CC Cream
Corresponde a las siglas en inglés de Color Correcting. Es un
producto de maquillaje, similar a las BB Cream, que aporta mayor
cobertura de imperfecciones, ya que en su composición contiene
pigmentos naranjas, verdes o violeta para neutralizar los tonos en la
piel.

Cleanser
Término en inglés que significa ‘limpiador’.

Colorete
Es el producto de maquillaje que aporta color a los pómulos y le
otorga un aspecto saludable al rostro. Se le conoce también como
rubor o blush.

Concealer
Palabra en inglés que significa ‘cancelar’. Es un producto de
maquillaje color piel que se utiliza para disimular leves
imperfecciones en el rostro que no requieran de un pigmento de
color.

Contouring
Palabra en inglés que significa ‘contornear’. Es una técnica de
maquillaje basada en la luz y la sombra que se utiliza para perfilar el
rostro.

Corrector
Producto de maquillaje que se usa para disimular imperfecciones de
color en el rostro. Los correctores son de colores naranja, verde,
rosado, amarillo, etc. Se aplican según la rosa cromática de colores.

Cosmético
Es la denominación que se les da a todos los productos de higiene
corporal destinados a embellecer y potenciar la apariencia. Son de
composición química, sintética o natural.

Cruelty free
Término en inglés que significa ‘libre de crueldad’. En cosmética se
utiliza para referirse a los productos que cumplen con las
certificaciones que protegen a los animales al eliminar la práctica de
los laboratorios de experimentar sobre ellos durante su proceso de
elaboración.

Cuenca del ojo

Corresponde a la zona de la órbita del ojo donde se aloja el globo
ocular. En maquillaje se suele acentuar la zona superior para
intensificar la mirada y otorgarle mayor expresividad.

D
DD Cream
Siglas en inglés para referirse a Daily Defense, que significan
‘defensa diaria’. Se trata de un producto similar a las BB Cream y
CC Cream, que además contiene activos que previenen el
envejecimiento y protegen de las radiaciones solares.

Delineador
Producto de maquillaje que se utiliza para definir el contorno de
alguna zona del rostro creando distintas ilusiones estéticas, por
ejemplo, ojos y labios.

Desmaquillar
Es la acción de retirar el maquillaje del rostro mediante productos
liposolubles e hidrosolubles, como aceites y cremas.

Depotar
Palabra en inglés que significa ‘depositar’. En maquillaje se utiliza
para la acción de traspasar un producto de un recipiente a otro, por
ejemplo, reubicar un labial desde su envase original a una paleta de
maquillaje.

Difuminar
Técnica de maquillaje que consiste en frotar los colores para que
pierdan nitidez y disminuyan su contorno y claridad utilizando
brochas, esponjas o los dedos. Se realiza para lograr un aspecto
natural e integrado.

E
Esponja
Es una herramienta de estructura porosa y elástica que se utiliza en
cosmética con variados propósitos, como difuminar maquillaje y
exfoliar la piel.

Exfoliar
Técnica cosmética que busca dividir o separar las impurezas y
células muertas de la piel mediante la utilización de láser, crema o
gel.
F
Fijador de maquillaje
Producto que se aplica mediante una bruma para otorgar un sellado
que brinde duración al maquillaje.

Flushing facial
La palabra en inglés flushing significa ‘ponerse rojo’. El flushing
facial es el enrojecimiento que se produce por dilatación de los
vasos capilares frente a situaciones puntuales (incomodidad social,
calor/frío, alcohol, menopausia, emociones, fármacos, etc.) o por
predisposición genética. Se puede tratar con láser.

Flawless
Término en inglés que significa ‘perfecto’. En maquillaje se utiliza
para referirse al acabado uniforme que otorga un producto
cosmético.

Frost
Término inglés que significa ‘escarcha’. En maquillaje se utiliza para
referirse a aquellos productos que otorgan un acabado satinado o
perlado.

G
Glitter
Término en inglés que significa ‘resplandecer’. En maquillaje se
refiere a aquellos productos que otorgan brillo y un efecto de
destello.

Gloss
Término en inglés que significa ‘brillo’. En maquillaje se utiliza para
referirse a los brillos labiales, transparentes y de colores.

Glossy
Término en inglés que significa ‘brillante’. En maquillaje se refiere a
una técnica que busca un acabado brillante o húmedo en el rostro
para otorgar relieve y frescura asociados a la juventud.

Goupillon
Término francés que significa ‘rociador’. En maquillaje se utiliza para
referirse al cepillo con el cual se aplica la máscara de pestañas.
También se usa para peinar las cejas.

H
Herramientas de maquillaje
Son todos aquellos instrumentos metálicos o plásticos que se usan
con las manos para embellecer el rostro mediante la aplicación de
maquillaje y otros productos cosméticos.

Hidratar
Restablecer el grado de humedad normal de piel utilizando cremas,
bálsamos u otros productos cosméticos.

I
Iluminador
Producto de maquillaje que aporta luz a la piel, realzando el
volumen y dándole mayor notoriedad.

Iluminar
Realzar el volumen de una zona del rostro mediante la aplicación de
algún producto cosmético que aporte luz o brillo.

J
Jumbo
Término inglés que significa ‘grande’. En maquillaje se utiliza para
referirse a los delineadores gruesos y de textura cremosa que, en
lugar de emplearse para contornear, cumplen la función de rellenar.

K
Kabuki
Palabra de origen japonés que significa ‘fuera de lo común’. En
maquillaje se utiliza para el tipo de brocha que tiene el mango corto
y abundantes y suaves pelos. Se utiliza para aplicar polvos,
bronceadores e iluminadores.

Kajal
Palabra de origen hindú. Es un polvo negro obtenido del hollín u otra
sustancia que se utiliza desde tiempos ancestrales para delinear los
ojos y protegerlos del exterior: viento, suciedad, luz, etc. La versión
actual tiene distintos ingredientes naturales y viene en formato de
lápiz delineador de ojos con una textura suave pero firme.

Kohl
Palabra de origen árabe. Es un cosmético a base de galena molida
y otros ingredientes utilizado en el Oriente para oscurecer párpados
y pestañas. Puede ser de color negro o gris.

En la actualidad viene en formato de lápiz blando, de consistencia

suave. Se utiliza para el efecto smokey eye.

L
Labial
Producto de maquillaje que se utiliza para aportar color y textura a
los labios. Su composición consta de pigmentos, aceites y
emolientes; es de textura cremosa y suave. Existen labiales con
brillo y mate.
Lagrimal
Zona del ojo que se encuentra en el ángulo formado entre los
párpados y la nariz.

Lengua de gato
Brocha de maquillaje con pelos tupidos y aplastados de punta
redondeada. Se utiliza para aplicar bases líquidas.

Limpiador
Producto cosmético utilizado para remover impurezas de distintas
superficies, tanto de la piel como de las herramientas de maquillaje.

Línea de agua del ojo

Superficie del ojo que se ubica al interior de la línea de las pestañas.

M
Make up
Término en inglés que significa ‘maquillaje’.

Mate
Acabado sin brillo, aterciopelado y suave. Se usa para referirse
tanto a la característica de un producto cosmético como al resultado
aplicado en la piel.

Matificante
Efecto que logra un resultado uniforme y sin brillo.

Máscara de pestañas
Producto cosmético usado para realzar el color, volumen y largo de
las pestañas. Su envase es tubular e incluye un pincel para su
aplicación. Los pinceles pueden variar en relación con su forma y
grosor de las cerdas.

Mascarilla facial
Tratamiento que consiste en una capa de productos químicos o
naturales aplicada sobre el rostro con un fin estético.
Mineral
El maquillaje mineral es una alternativa cosmética natural
compuesta de dióxido de titanio y óxido de zinc. Contiene pigmentos
puros y posee propiedades antibacterianas y curativas; es ideal para
las pieles grasas.

Mofeta
Brocha que lleva este nombre por su parecido a la cola del pequeño
mamífero. Esta brocha se caracteriza por sus fibras bicolores. La
mitad de las cerdas son más cortas que las otras. Fue concebida
para aplicar polvos brillantes, pero se utiliza también para dar un
efecto de pulido a la base de maquillaje.

Moisturizer
Palabra en inglés que significa ‘hidratante’. Se utiliza en productos
cosméticos para rostro y cuerpo.

N
Nude
Palabra en inglés que significa ‘desnudo’. En maquillaje se refiere a
los tonos color piel y beige.

O
Ojeras
Alteración del color de la piel que se ubica por debajo de los ojos, en
el párpado inferior, producida por exceso de melanina y por la
dilatación de los vasos capilares más superficiales de la piel. Se
presenta en situaciones de cansancio. También son hereditarias.

Oil free
Término en inglés que significa ‘libre de aceite’. Se utiliza en
productos cosméticos para indicar que su composición no es oleosa.
P
Pancake
Palabra en inglés que significa ‘panqueque’. En maquillaje se utiliza
para referirse a un tipo de base compacta elaborada con aceite y
cera. Se aplica con una esponja humedecida para lograr una capa
gruesa muy cubriente.

Párpado superior o móvil

Membrana de piel movible que cubre y protege los ojos. Se mueve
al abrirlos y cerrarlos. Se divide en interno, medio y externo.

Párpado inferior
Membrana de piel ubicada en la zona inferior del ojo.

Peel off
Término en inglés que significa ‘despegar’. En cosmética se utiliza
para las mascarillas y distintos productos que se aplican y forman
una película, se dejan actuar y luego se retiran de una pasada,
como una cinta adhesiva.

Perfilar
Marcar de forma precisa, por ejemplo, las cejas.

Perlado
Que tiene reflejos brillantes, blancos o grises, como las perlas.

Pestañas postizas
Cabello sintético o humano que se adhiere al párpado para acentuar
las pestañas naturales. Existen de distintos tipos, largas y de
colores, con efecto natural y de fantasía.

Pigmento
Palabra de origen latino que significa ‘sustancia que da color’. Los
maquillajes de pigmento son polvos sueltos que crean suspensión,
poseen altas concentraciones y tienen una fuerte adherencia a la
piel.
Polvos translúcidos
Producto de maquillaje de color piel o blanco. Se utilizan para bajar
el brillo, dar un efecto mate al rostro y para sellar el maquillaje,
brindándole mayor duración. Existen en formato suelto y compacto.
Los polvos translúcidos sueltos logran una película más delgada y
natural, se aplican con una borla o con una brocha gruesa de
maquillaje. Los polvos translúcidos compactos son ideales para la
noche y para retocar el maquillaje durante el día. Su envase suele
incluir una esponja o pequeña borla.

Primer
Producto de maquillaje, también conocido como prebase, que se
utiliza después de la crema de día y antes de la base de maquillaje.
Es de color piel o transparente. Se aplica en pequeñas cantidades
en todo el rostro, los ojos y los labios. Brinda mayor duración al
maquillaje y otorga un acabado aterciopelado a la piel.

R
Rabillo del ojo
Zona del ojo ubicada en el ángulo externo.

Rimel
Producto de maquillaje también conocido como máscara de
pestañas. Su nombre proviene de Eugene Rimmel, empresario
francés que en el siglo XIX creó, fabricó y comercializó la primera
máscara de pestañas no tóxica.

Rosácea
Es un trastorno inflamatorio crónico que se manifiesta con
enrojecimiento facial, debido a vasos sanguíneos rotos, y pequeñas
protuberancias como espinillas. Se presenta en pieles sensibles y
produce escozor y ardor. No hay que confundirla con el
enrojecimiento que se da en forma puntual frente a ciertos
estímulos, también conocido como flushing facial.

Rubor
Producto de maquillaje que simula el rubor natural, ese color rojizo
que se produce de forma natural en las mejillas como reacción a
ciertas emociones.

S
Satinado
Efecto de superficie brillante que presentan algunos productos de
maquillaje o su aplicación en la piel.

Serum
Palabra en inglés que significa ‘suero’. Se trata de un concentrado
cosmético de textura muy ligera, que contiene productos activos y
actúa en las capas más profundas de la piel, reparando
intensamente. Se utiliza antes de la crema facial.

Shimmer
Palabra en inglés que significa ‘resplandor’. En maquillaje se refiere
a aquellos productos que aportan brillo y luminosidad.

Silisponge
Término en inglés que combina las palabras silicon y sponge, que
en español significan ‘silicona’ y ‘esponja’. Se trata de un tipo de
esponja cosmética con forma de pastilla de jabón aplastada y
transparente. Se utiliza para aplicar base de maquillaje líquido y se
caracteriza por lograr un acabado parejo y sin rayado.

Smokey Eye
Técnica de maquillaje que consiste en oscurecer el contorno de los
ojos utilizando sombras de ojos oscuras para lograr un efecto de
mirada profunda, sensual y misteriosa.

Sombra de ojos
Producto de maquillaje que se utiliza para dar color y distintos tonos
a los párpados superiores e inferiores. Existen sombras de ojo en
distintos formatos: polvo, crema, lápiz y roll-on.
SPF
Siglas en inglés que corresponden a Solar Protection Factor o, en
español, ‘factor de protección solar’. Corresponde al índice de
protección frente a la radiación ultravioleta B, que es la que produce
quemaduras y cáncer a la piel según un método estandarizado que
establece la reglamentación europea.

Strobing
Término en inglés que significa ‘estroboscópico’. Es una técnica de
maquillaje que consiste en aplicar iluminador en puntos específicos
del rostro para lograr un efecto de piel saludable e iluminada.

T
Tightlining
Término en inglés que combina las palabras tight y lining, que en
español se traduce como ‘delineado ajustado’. Se trata de una
técnica de maquillaje que consiste en delinear la línea de agua
superior (por el interior del párpado superior, pegado a las pestañas)
para lograr el efecto de una mirada más intensa y, a la vez, muy
natural.

Tipo de piel
Categorías de piel basadas en sus características biológicas y en la
forma como reaccionan al medio ambiente. Tradicionalmente, de
acuerdo a la industria cosmética, se dividen en: normal, grasa, seca
y mixta. Cada piel es distinta según su origen étnico: latina,
mediterránea, del norte de Europa, afroamericana, asiática y
multietnia.

Tonificar
Corresponde a la acción de aplicar un tónico sobre la piel con el
objetivo de hidratar, descongestionar, cerrar los poros, remover
impurezas o reacondicionar la piel. Existen tónicos químicos y
naturales para cada tipo de piel.

Tono
Las pieles tienen un matiz de color claro, mediano y oscuro.
También hay subtonos, que dividen cada uno de los tipos anteriores
en cálidos (amarillo), fríos (azules) y neutros. Además, existen los
grupos de colorimetría personal: invierno, verano, primavera y
otoño. Esta clasificación te guiará al momento de elegir los colores
que resaltan tu belleza natural.

V
Visagismo
Término que proviene de la palabra francesa visage que significa
‘rostro’. El visagismo es el estudio de los rasgos faciales de una
persona y considera las líneas que forman los huesos faciales, la
fisonomía de la nariz, su perfil, etc. El visagismo permite potenciar la
belleza de una persona al momento de definir el maquillaje y
peinado que más la favorecen.

W
Waterproof
Término en inglés que significa ‘a prueba de agua’. Se utiliza en la
industria cosmética para indicar que un producto no es hidrosoluble,
es decir, que no se correrá al entrar en contacto con la humedad. Se
utiliza, por ejemplo, en las máscaras de pestañas y los
bloqueadores solares.

Water resistant
Término en inglés que significa ‘resistente al agua’. Se utiliza en la
industria cosmética para identificar un producto con cierta tolerancia
al agua, como la transpiración y las lágrimas, pero no garantiza una
resistencia completa, como para nadar en una piscina.
AGRADECIMIENTOS
Escribir un libro es una tarea solitaria, sin embargo, se requiere de
un gran equipo para lograr que efectivamente salga a la luz de la
manera que uno lo ha visualizado.

Quiero agradecer en primer lugar a mi hija Julieta, por su paciencia

durante estos meses en que estuve pegada al computador, gracias
por apoyarme en realizar mi propósito de vida. También quiero
agradecer a mi madre que está en el cielo, sentí su compañía y
apoyo durante este proceso y estoy segura que debe sentirse muy
orgullosa, porque sabe que esto es algo que estaba destinada a
hacer. Gracias a Rosita, por cuidar a mi hija con tanto amor y por
darme la tranquilidad para que yo pudiera trabajar y concentrarme.

Gracias a Chandler Bolt por enseñarme cómo rayos se escribe un

libro y especialmente a Marcy Pusey, mi coach en todo este
proceso.

Gracias a todo el equipo que hizo posible que este libro sea hoy una
realidad. A Daniel Brown, quien junto a su equipo de Book Design
logró darle forma a lo que tenía en mi mente. A Alejandro Cisternas,
quien hizo una maravillosa corrección de textos y me aportó valiosos
comentarios. A Carolina Verdugo, una talentosa actriz a quien tengo
mucho cariño, gracias por aceptar ser mi modelo en el paso a paso
de maquillaje. A René de la Cruz, gran fotógrafo de moda, gracias
por tu profesionalismo y simpatía única. A Valeska Parraguez, mi
asistente de maquillaje quien aportó con su talento, tanto en las
fotos como en los contenidos de este libro.
Agradezco a mis mentores, quienes me han enseñado a expandir la
mente y pensar en grande, gracias a T. Harv Eker, Jeff Walker, Eben
Pagan.

Quiero agradecer a mis queridas amigas del alma, esas

maravillosas mujeres que me apoyan y llenan de amor cada día.

Finalmente, agradezco de corazón a todas las mujeres que han

participado alguna vez en mis talleres, cursos y seminarios. Gracias
a las personas que han colaborado en mis eventos y a todos mis
joint venture partners. Sin ustedes, nada de esto sería posible.