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Los heraldos negros - Exposición

El poema liminar o introductorio, que da el nombre al poemario, anuncia los temas y el tono del
conjunto. Fue escrito en 1917, cuando Vallejo tenía 25 años. Consta de cuatro cuartetos en donde
predominan los versos alejandrinos. Es sin duda la composición más famosa y recitada del poeta.

En el poemario Los heraldos negros, publicado en julio de 1919 (y no 1918, como se indica en el libro
original), Vallejo reunió 69 textos, escritos entre 1915 y 1918, que evidencian la evolución del autor
desde un modernismo decadentista, hasta la creación de una poética sumamente personal. Las
diversas secciones del libro van marcando esa evolución: Plafones ágiles (11 poemas), Buzos (4), De
la tierra (10), Nostalgias imperiales (13), Truenos (25) y Canciones de hogar (5).

Más que un poema de desolación es un poema sobre la incertidumbre que padece el ser humano
cuando le busca un sentido a su existencia. El título es una evocación de los mensajeros de la
muerte, los cuales, obviamente, solo pueden anunciar el dolor. El motivo principal del poema gira en
torno al dolor humano incompresible e inexpresable, ese dolor que se levanta desde lo más
recóndito del ser humano y se hace visible desde el primer verso del poema a través de la imagen de
los «golpes»: «Hay golpes en la vida tan fuertes. ¡Yo no sé!»

De seguido, este dolor tan significativo se equipará, a través de una serie de imágenes sugestivas,
con la furia divina, con bárbaros devastadores, con los heraldos negros. Sin lugar a dudas, el
sentimiento predominante en el poema es el dolor, que se asemeja a una caída, por eso la imagen
de un pozo donde se acumulan el sufrimiento y la culpa. Pero ¿de dónde sale ese dolor? De Dios o
del destino, no importa la respuesta, pues el ser humano no puede comprender su origen. De ahí
que en la cuarta estrofa se presente la imagen de los «ojos locos» que se vuelven para mirar lo
irremediable e incomprensible. El alma es el pozo donde queda el dolor y la mirada es el lugar donde
ese dolor se ha vuelto culpa.

Vallejo, en este poema, busca la razón de ser del dolor que, a cada instante, ahoga la existencia del
ser humano. Y llega a la conclusión de que no hay una respuesta al dilema existencial. El poema
revela este círculo vicioso desde su estructura misma. En concreto, podrían resumirse las ideas
fundamentales de este poema por medio de tres puntos:

 La existencia del ser humano conlleva el hecho de tener que sufrir acontecimientos
dolorosos que, aunque son pocos, dejan una huella indeleble en todas las personas, incluso
en aquellas cuyo ánimo es más fuerte para soportar las adversidades.
 Estas adversidades que debemos soportar los seres humanos se relacionan con el odio de
Dios, la destrucción sin medida, el augurio de la muerte y la decepción de las creencias
religiosas y la consecuente pérdida de la fe.
 Ante esto, el ser humano no encuentra ningún consuelo, pues lo vivido no sirve ni de excusa
ni de paliativo para lograr afrontar la adversidad.

En conclusión, «Los heraldos negros» es un poema en que el dilema humano se presenta en toda su
magnitud y en que el sentido de la existencia del ser humano es cuestionado brutalmente por el
asomo de la duda, la desesperanza y el sinsentido.

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