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INFORME DE LABORATORIO N°11

“MATERIA ORGÁNICA DEL SUELO”

CURSO:
EDAFOLOGÍA

ESTUDIANTE:
NATALIA SANTIAGO CACHAY
LUCIA QUINTANA MEJIA
ARIANA ANCCO ALARCON
RENZO IBIAS COLLAVINO
NATALIA PINILLA ANGELES

PROFESOR:
EDGAR MARCELINO TARMEÑO

CARRERA:
INGIENERÍA AMBIENTAL

LIMA – PERÚ
2022 – II
I. Presentación

En el siguiente informe se basa en la materia orgánica que se encuentra en el suelo.

Se sabe que actualmente la materia orgánica es una pieza fundamental para el desarrollo

agrícola, además esta contine 5% de nitrógeno total, no obstante, existen la presencia de

otros elementos que son beneficiosos para las plantas como el magnesio, azufre, etc.

(Anónimo,1988). Hay que resaltar que en el desarrollo o evolución de la materia orgánica

se presentan dos fases las cuales son la humidificación y la mineralización, en la primera

fase se da de manera rápida esto gracias a la presencia de microorganismos que se

encuentran en el suelo en donde actúan como materia orgánica (Gros & Domínguez,

1992).

Se conoce que la materia orgánica ayuda en el mecanismo de absorción de sustancias

peligrosas, un ejemplo se da cuando la capacidad de suelo puede adsorber los compuestos

químicos como los clorofenoles las cuales aumentan con el contenido en materia orgánica

(Vangestel, 1996).

II. Marco teórico

Materia orgánica (MO)

Los autores denominan a la materia orgánica (Navarro et al., 1995) a la parte

orgánica que cumple un papel esencial en el suelo. Es un conjunto de sustancias

constituidas por restos vegetales y otros organismos que está constantemente en

transformación y síntesis. Contiene aproximadamente un 5% de nitrógeno, por lo que su

valor en el suelo se puede calcular multiplicando por 20 su contenido en nitrógeno total

(Gros y Domínguez, 1992).


La cantidad de materia orgánica del suelo depende de la vegetación, el clima, la

textura del suelo, el drenaje del mismo y de su laboreo. Los suelos minerales con mayor

contenido de materia orgánica son normalmente los suelos de praderas vírgenes. Los

suelos de bosques y aquellos de climas cálidos tienen una menor cantidad de materia

orgánica. (Pascual, R. y Venegas, S., s/f).

Humus

Se define como materia orgánica transformada y alterada. Constituye un conjunto

muy complejo de compuestos orgánicos amorfos de color oscuro sometidos a un

constante proceso de transformación por la acción de los microorganismos bajo

condiciones aerobias y anaerobias. Desde el punto de vista químico en el humus se

encuentran sustancias heredadas del material original estabilizadas en el suelo,

compuestos transformados por procesos de hidrólisis, oxidación/ reducción y compuestos

sintetizados por los microorganismos. Dentro de él se definen un grupo de sustancias

llamadas sustancias húmicas. Frecuentemente materia orgánica y humus se emplean

como términos sinónimos. (Dorronsoro, C., 2016).

Reservorios de materia orgánica en el suelo

Los reservorios de materia orgánica en el suelo se pueden dividir en tres partes:

Materia orgánica activa, materia orgánica lenta y materia orgánica estable.

La materia orgánica activa tiene un tiempo de rotación de meses a años e incluye

componentes como microorganismos del suelo que están involucrados en tiempos de

rotación aún más rápidos. Se compone principalmente de residuos vegetales recientes que

se encuentran en las primeras etapas de descomposición y de organismos del suelo. Este

depósito activo de MO es muy importante para la liberación de nutrientes y ayuda a


desarrollar un depósito lento de MO en el suelo. (Esmaeilzadeh, J. y Gholamalizadeh, A.,

2014).

La materia orgánica lenta tiene un tiempo de rotación que varía de años a décadas.

La condición física de un suelo y la capacidad de amortiguación de nutrientes están

fuertemente influenciadas por esta reserva de materia orgánica de renovación lenta. El

grupo lento también es una fuente de nutrientes que incluyen nitrógeno y fósforo. Incluye

materiales descompuestos, residuos y productos microbianos que se protegen mediante

procesos físicos (por ejemplo, en el interior de los agregados del suelo) y bioquímicos.

(Esmaeilzadeh, J. y Gholamalizadeh, A., 2014).

La materia orgánica estable consta de material que tiene cientos o miles de años.

A veces, este estanque se llama estanque pasivo o humus. Es un depósito altamente

resistente a la descomposición, que influye en la capacidad de intercambio catiónico del

suelo y es importante en los procesos físicos como la agregación. La cantidad de MO

estable no está fuertemente influenciada por las prácticas de manejo recientes y tiende a

aumentar con el aumento de la concentración de arcilla en el suelo. Sin embargo, las

prácticas de gestión como la eliminación de residuos, la quema, la labranza y los cultivos

de cobertura pueden tener efectos a largo plazo en las cantidades relativas y absolutas de

MO estable. (Esmaeilzadeh, J. y Gholamalizadeh, A., 2014).

Microorganismos en el suelo

La actividad biológica de los suelos es la resultante de las funciones fisiológicas

de los organismos y proporciona a las plantas superiores un medio ambiente adecuado

para su desarrollo. Pero la exigencia de los microorganismos edáficos en energía,

elementos nutritivos, agua, temperaturas adecuadas y ausencia de condiciones nocivas es

similar a la de las plantas cultivadas. (Julca-Otiniano, A. et al 2006).


Los suelos contienen una amplia variedad de formas biológicas, con tamaños

muy diferentes, como los virus, bacterias, hongos, algas, colémbolos, ácaros, lombrices,

nemátodos, hormigas y, por supuesto, las raíces vivas de las plantas superiores

(Fassbender, 1982; Wild, 1992).

La mayoría de los microbios en el suelo existen en condiciones de inanición y,

por lo tanto, tienden a estar en un estado latente, especialmente en suelos labrados. Las

bacterias son los primeros microbios en digerir nuevos residuos orgánicos de plantas y

animales en el suelo y estas pueden ser divididas en dos categorías. Las bacterias

aeróbicas asimilan alrededor del 5 al 10 por ciento del carbono, mientras que las

bacterias anaeróbicas solo asimilan del 2 al 5 por ciento, dejando atrás muchos

compuestos de carbono de desecho y utilizando de manera ineficiente la energía

almacenada en la MO. Los hongos generalmente capturan más energía a medida que

descomponen materia orgánica, asimilando del 40 al 55 por ciento del carbono. Las

poblaciones de microorganismos cambian rápidamente en el suelo a medida que se

agregan, consumen y reciclan productos de MO. Los microbios, a su vez, construyen

MOS y almacenan los nutrientes del suelo. (Esmaeilzadeh, J. y Gholamalizadeh, A.,

2014).

Importancia de la materia orgánica

El humus tiene efecto sobre las propiedades físicas del suelo, formando

agregados y dando estabilidad estructural, uniéndose a las arcillas y formando el

complejo de cambio, favoreciendo la penetración del agua y su retención, disminuyendo

la erosión y favoreciendo el intercambio gaseoso. Cuando se refiere al efecto sobre las

propiedades químicas del suelo, los autores mencionan que aumenta la capacidad de

cambio del suelo, la reserva de nutrientes para la vida vegetal y la capacidad tampón del
suelo favorece la acción de los abonos minerales y facilita su absorción a través de la

membrana celular de las raicillas. (Anónimo, 1988; Graetz, 1997).

Y en cuanto a su efecto sobre las propiedades biológicas, favorece los procesos

de mineralización, el desarrollo de la cubierta vegetal, sirve de alimento a una multitud

de microorganismos y estimula el crecimiento de la planta en un sistema ecológico

equilibrado. Estos efectos de la materia orgánica también han sido sugeridos por otros

autores. (Anónimo, 1988; Graetz, 1997).

Descomposición de materia orgánica y humificación

Cuando la materia orgánica se degrada, en la primera fase de mineralización crea

productos simples, al continuar el proceso y con ayuda de los microorganismos se

producen los complejos orgánicos conocidos como sustancias húmicas. La primera

etapa tiene una degradación principalmente microbiana de los polímeros orgánicos que

forman constituyentes monoméricos (fenoles, quinonas, aminoácidos y azúcares). Los

materiales más resistentes como la lignina se mantienen, pero se cambian levemente

para transformarse en humus. (Pascual, R. y Venegas, S., s/f).

Reacción de humificación directa:

Materia orgánica + O2 --> CO2 + H2O + humus

En la segunda etapa se polimerizan los componentes restantes mediante

reacciones químicas espontáneas o mediante procesos de autooxidación y oxidación, los

cuales son catalizados por enzimas microbianas.

III. Metodología

• Determinación del contenido de materia orgánica


1. Pesamos el crisol vacío

2. Pesamos 5 g de nuestro

suelo

3. Se coloca en la mufla a 450°C por 12 horas

4. Dejar enfriar el crisol y

pesarlo

5. Determinar el peso de las cenizas

6. Determinar el porcentaje de MO

• Determinación del contenido de materia orgánica con agua

oxigenada

1. Colocar en 3 placas Petri, 3

fracciones de nuestro suelo,

materia orgánica y suelo con

materia orgánica
2. Agregar suficiente agua

oxigenada en cada placa

3. Observar si hay señales de

burbujas que indiquen M.O.

en nuestro suelo

• Influencia de la M.O. sobre la densidad aparente del suelo

1. Pesar 20 g de nuestro

suelo

2. Colocar los 20 g en la

pobreta y calcular la

densidad aparente

3. Pesar 19 g de suelo y 1 g

de materia orgánica

4. Colocar lo pesado en la

probeta y calcular la

densidad aparente
5. Pesar 18 g de suelo y 2

gramos de materia

orgánica

6. Colocar lo pesado en la

probeta y calcular la

densidad aparente

7. Comparar los resultados

• Influencia de la M.O. sobre la retención de agua sobre el suelo

1. Pesar 15 g de suelo + 5 g

de materia orgánica y 20 g

de solo suelo

2. Mezclar los 15 g suelo

con los 5 g de materia

orgánica

3. Medir 100 ml de agua

destilada
4. Colocar en un embudo

papel filtro junto al suelo

solo y en otro embudo

colocar el suelo + M.O.

5. Agregar el agua y dejar

filtrar por 24 horas

6. Pesar las muestras

IV. Resultados

CONTENIDO DE MATERIA ORGÁNICA

𝑴. 𝑶(𝒈) = 𝑷𝒆𝒔𝒐 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒎𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒂 𝒅𝒆 𝒔𝒖𝒆𝒍𝒐 − 𝑷𝒆𝒔𝒐 𝒅𝒆 𝒍𝒂𝒔 𝒄𝒆𝒏𝒊𝒛𝒂𝒔

𝑴. 𝑶(𝒈) = 𝟓𝒈 − 𝟒. 𝟖𝟓𝒈

𝑴. 𝑶 (𝒈) = 𝟎. 𝟏𝟓𝒈

𝑴. 𝑶(𝒈)
𝑴. 𝑶(%) = 𝒙𝟏𝟎𝟎
𝟓𝒈

𝟎. 𝟏𝟓𝒈
𝑴. 𝑶(%) = 𝒙𝟏𝟎𝟎
𝟓𝒈

𝑴. 𝑶(%) = 𝟑%

CONTENIDO DE CARBONO ORGÁNICO

𝑴. 𝑶 (𝒈) = 𝑪(𝒈) 𝒙 𝟏. 𝟕𝟐𝟒


𝟎. 𝟏𝟓𝒈 = 𝑪(𝒈) 𝒙 𝟏. 𝟕𝟐𝟒

𝑪(𝒈) = 𝟎. 𝟎𝟖𝟕𝒈

𝑴. 𝑶 (%) = 𝑪(%) 𝒙 𝟏. 𝟕𝟐𝟒

𝟑% = 𝑪(%)𝒙𝟏. 𝟕𝟐𝟒

𝑪(%) = 𝟏. 𝟕𝟒%

CONTENIDO DE M.O. Y C DE LAS 4 MESAS

Mesa 1 Mesa 2 Mesa 3 Mesa 4

%M.O. 2.12% 1% 3% 2.7%

%C 1.2297% 0.58% 1.74% 1.566%

DETERMINACIÓN DE DENSIDAD APARENTE

𝑚𝑎𝑠𝑎 (𝑔)
𝐷ensidad aparente =
𝑣𝑜𝑙𝑢𝑚𝑒𝑛 (𝑚𝑙)

20 𝑔
𝐷𝑒𝑛𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒 𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 𝑠𝑜𝑙𝑜 = = 1.48
13.5 𝑚𝑙

20 𝑔
𝐷𝑒𝑛𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒 𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 𝑦 𝑀. 𝑂. (19: 1) = = 1.14
17.5 𝑚𝑙

20 𝑔
𝐷𝑒𝑛𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒 𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 𝑦 𝑀. 𝑂. (18: 2) = = 1.08
18.5 𝑚𝑙

𝑑𝑎
%𝑃 = (1 − ) 𝑥100
𝑑𝑟

1.48
%𝑃 = (1 − ) 𝑥100 = 44.56 %
2.67

CAPACIDAD DE RETENCIÓN DE AGUA


• Suelo solo (20 g)

Peso del suelo húmedo = 26.1 g

Peso del suelo seco = 18.5 g

𝐶𝑎𝑝𝑎𝑐𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒 𝑟𝑒𝑡𝑒𝑛𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑎𝑔𝑢𝑎 (𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 𝑠𝑜𝑙𝑜)

26.1 − 18.5
=( ) ∗ 100
18.5

𝐶𝑎𝑝𝑎𝑐𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒 𝑟𝑒𝑡𝑒𝑛𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑎𝑔𝑢𝑎 (𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 𝑠𝑜𝑙𝑜) = 41.08%

• Suelo y materia orgánica (15 g + 5 g)

Peso del suelo + M.O. húmedo = 26.2 g

Peso del suelo + M.O. seco = 15.55g

𝐶𝑎𝑝𝑎𝑐𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒 𝑟𝑒𝑡𝑒𝑛𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑎𝑔𝑢𝑎 (𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 + 𝑀𝑂)

26.2 − 15.55
=( ) ∗ 100
15.55

𝐶𝑎𝑝𝑎𝑐𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒 𝑟𝑒𝑡𝑒𝑛𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑎𝑔𝑢𝑎 (𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 + 𝑀𝑂) = 68.49%

V. Conclusión

Se puede concluir de acuerdo con los resultados que, nuestro suelo cuenta con un

3% de materia orgánica, la cual la clasifica como deficiente en materia orgánica. Esto se

evidenció no solo en los resultados, sino también al agregarle agua oxigenada a nuestra

muestra de suelo, ya que se pudo observar presencia de espuma al reaccionar con el

peróxido de hidrógeno y, por ende, un ligero hinchamiento. Además, nuestro suelo

contiene un porcentaje de carbono de 1.74%. Asimismo, en la determinación de densidad

aparente, los resultados se vieron influenciados por la cantidad de materia orgánica

presente, ya que nuestro suelo tuvo una densidad aparente de 1.48 g/ml. Mientras que las

dos muestras restantes, mezcladas con materia orgánica, presentan densidades de 1.14

g/ml y 1.08 g/ml, respectivamente. Esto es debido a que la primera muestra contiene solo
1 g de M.O., mientras que la segunda muestra contiene 2 g de M.O., por esto se concluye

que a mayor contenido de M.O., la densidad aparente es menor. Por último, el porcentaje

de retención de agua de nuestro suelo solo es de 40.08%. Por otro lado, cuando

mezclamos nuestro suelo con materia orgánica, el porcentaje aumenta, siendo 68.49% el

resultado final, esto evidencia que la materia orgánica incrementa la capacidad de

retención de agua, evitando así la desecación y contracción del suelo en cuestión.

VI. Discusión de resultados

En la primera experiencia realizada con el uso de la mufla se determinó el

porcentaje de MO en nuestra muestra de suelo la cual fue de 3%. Julca-Otiniano (2006)

señala que un suelo agrícola posee 5% de MO. Para este valor el dato obtenido es inferior;

sin embargo, teniendo en cuenta el tipo de clima de costa donde se espera valores de MO

muy pequeños es una señal de que el suelo se estaba trabajando regularmente bien. A

pesar de ello, conociendo estos datos se esperaría mayor cantidad de abonado previo a

cada siembra o hacerlo en intervalos más cortos para así poder lograr el 5% recomendado

para un buen desarrollo de los cultivos.

En la segunda experiencia trabajada en el laboratorio, se realizó una comparación

de la reacción del suelo frente a la agregación de peróxido de hidrógeno, se observó una

mayor presencia de espuma conforme la concentración de MO aumentaba. A pesar de

ello, en nuestra muestra recolectada se evidenció una pequeña reacción la cual se

apreciaba con el hinchamiento del suelo. Esto a causa de la enzima catalasa la cual se

encuentra en la MO y se encarga de la descomposición del peróxido de hidrógeno en

oxígeno y agua lo que da origen a la aparición de burbujas y del hinchamiento (Corona et

al., 2015). Debido al hinchamiento podemos afirmar que nuestro suelo presenta una

cantidad regular de MO.


Respecto a la influencia del suelo respecto a la capacidad de retención de agua y

la densidad aparente podemos afirmar que si influye positivamente; no sólo a través de la

observación en los diferentes procesos que se hicieron en el laboratorio. Sino también, a

nivel cuantitativo ya que el suelo con mayor contenido de MO presentó mayor capacidad

de absorción de agua por ende un aumento de sus microporos. Porta y López (2010)

señalan que la MO reduce el riesgo de sellado y encostramiento; además de aumentar la

porosidad del suelo aumentando su densidad aparente. Estos datos conseguidos pueden

viabilizarse con los obtenidos por otros autores como Acevedo et al. (2014) y Murray et

al. (2011) que indicaron a través de sus investigaciones un aumento en la CC y una

disminución en la densidad aparente.

Respecto a la densidad aparente, Acevedo et al. (2011) observó una disminución

de esta propiedad; sin embargo, en relación con la densidad total no notó algún cambio.

Asimismo, la MO también tiene influencia sobre las propiedades químicas del

suelo como la CE, CIC, pH (Silva, 1998). Respecto a la CIC, se da debido a que la MO

presenta una gran capacidad de retención de cationes intercambiables. Por lo que

podríamos afirmar que si evaluáramos el suelo con mayor concentración de MO

obtendríamos valores diferentes en muchas de sus propiedades.

VII. Recomendaciones

Para la aplicación de MO se recomienda agregarla en un suelo húmedo, entre los

meses de primavera y verano donde se espera un clima más cálido para la liberación de

los nutrientes de la planta. Asimismo, es recomendable colocarlo dependiendo del estado

en el que se encuentre y al clima de la zona ya que este afectará su descomposición.

En nuestra costa se recomienda agregar un aproximado de 20 000 Kg por hectárea

de cultivo y aportar mayor cantidad dependiendo del desarrollo del cultivo y del tipo de

suelo que presente que por lo general en este caso será arenoso (Barber, s/f). Además, en
el caso del rabanito se recomienda agregar MO con alto contenido de boro y así permitir

al cultivo desarrollarse bien y evitar problemas cloróticos, deformes y fragilidad en las

hojas; la deficiencia de este nutriente puede causar un agrietamiento de las raíces y una

coloración pálida.

VIII. Anexos

CUESTIONARIO

1. Mencione algunas propiedades del suelo que son afectadas por la materia orgánica

El color el suelo, retención de agua, combinación con minerales arcillosos, quelación, pH,

intercambio catiónico, solubilidad.

2. Explique en qué cosiste el proceso de humificación de la materia orgánica.

El proceso de humificación es la formación del humus, su proceso se da mediante tres fases. La

primera fase es la degradación de las moléculas, esta fase consiste en la degradación de las

macromoléculas de los restos orgánicos a formas más sencillas y cortas; la segunda fase es la

oxidación de los compuestos aromáticos con formación de quinonas; la última fase es la

condensación, polimerización y fijación de nitrógeno. Además, el proceso de humificación es

responsable de la acumulación de la materia orgánica en el suelo mientras que la mineralización

conduce a su destrucción.

3. ¿Qué es mineralización y que factores influyen en su velocidad?

La mineralización es el paso de nitrógeno orgánico a nitrógeno inorgánico, este se da debido a

la acción de los microorganismos del suelo por factores como temperatura, precipitación o pH

influyen en su velocidad.

4. Complete el siguiente cuadro:

REGION COEFICIENTE DE MINERALIZACION


Costa 0.1%
Sierra (Valle interandino) 2%
Sierra (Puna) 1%
Selva alta 3%
Selva baja 4%
5. La capa arable (20 cm) de un suelo franco de Jauja (3400 m.s.n.m.) presenta 2.4% de

materia orgánica. ¿Qué cantidad de nitrógeno mineral es disponible por hectárea

anualmente?

𝑐𝑎𝑝𝑎 𝑎𝑟𝑎𝑏𝑙𝑒 = 100 ⋅ 100 ⋅ 0.2 ⋅ 1.4 = 2800 𝑇𝑀

𝑀𝑂 = 2.4%

𝑀𝑂 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑐𝑎𝑝𝑎 𝑎𝑟𝑎𝑏𝑙𝑒 = 2.4% ⋅ 2800 = 67.2𝑇𝑀

𝑁𝑜𝑟𝑔á𝑛𝑖𝑐𝑜 = 5%  ⋅ 67.2

𝑁𝑜𝑟𝑔á𝑛𝑖𝑐𝑜 = 3.36  <> 3𝑇𝑀

6. Si tenemos un terreno de cultivo con una capa arable (20 cm) de un suelo franco en la

localidad de Tarma (3200 m.s.n.m.) presenta 2.5% de materia orgánica. ¿Qué cantidad

de nitrógeno mineral es disponible por hectárea anualmente?

𝐶𝑎𝑝𝑎 𝑎𝑟𝑎𝑏𝑙𝑒 = 100 ⋅ 100 ⋅ 0.2 ⋅ 1.4 = 2800 𝑇𝑀

𝑀𝑂 = 2.5%

𝑀𝑂 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑐𝑎𝑝𝑎 𝑎𝑟𝑎𝑏𝑙𝑒 = 2.5% ⋅ 2800 = 70 𝑇𝑀

𝑁𝑜𝑟𝑔á𝑛𝑖𝑐𝑜 = 5%  ⋅ 70

𝑁𝑜𝑟𝑔á𝑛𝑖𝑐𝑜 = 3.5  <> 4𝑇𝑀

IX. Bibliografía

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