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Ciencias aplicadas del comportamiento animal

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La postura de la cola predice brotes de mordeduras de cola a nivel de corral en lechones destetados

Helle Pelant Lahrmanna,ÿ , Christian Fink Hansen , Rick D'Eathb, María Erika Buscha, 1,
Bjorn Forkmanc
a
SEGES, Danish Pig Research Centre, Axeltorv 3, 1609 Copenhague V, Dinamarca
b
SRUC, West Mains Road, Edimburgo EH9 3JG, Reino Unido
C
Departamento de Veterinaria y Ciencias Animales, Universidad de Copenhague, Grønnegårdsvej 8, 1870 Frederiksberg, Copenhague, Dinamarca

INFORMACIÓN DEL ARTÍCULO RESUMEN

Palabras clave: La detección temprana de un brote de mordeduras de cola es esencial para reducir el riesgo de que los cerdos sufran daños graves en la
cerdos cola. Algunos estudios previos sugieren que la postura de la cola y las diferencias de comportamiento pueden predecir un próximo brote.
postura de la cola Por lo tanto, el objetivo del presente estudio fue investigar si se podían detectar diferencias en la postura y el comportamiento de la cola al
Cambio de comportamiento
nivel del corral entre los próximos corrales para mordeduras de cola (T-pens) y los corrales de control (C-pens). El estudio incluyó 2301
morderse la cola
cerdos destetados sin amputar en 74 corrales (media de 31,1 cerdos/corral; DE 1,5). Las colas se evaluaron tres veces por semana
Daño en la cola
(frescura de la herida, gravedad de la herida y longitud de la cola) entre las 07:00 h y las 14:00 h desde el destete hasta el brote de
mordedura de cola. Se produjo un brote (día 0) cuando al menos cuatro cerdos sufrieron daños en la cola, independientemente de la frescura de la herida
En promedio, 7,6 (DE 4,3) cerdos tenían la cola dañada (arañazos + herida) en T-pens el día 0. La postura y el comportamiento de la cola
(actividad, alimentación, exploración, compañero de corral y comportamiento dirigido por la cola) se registraron en T-pens y en corrales C
emparejados usando muestras de exploración cada media hora entre las 08:00 y las 11:00 h y entre las 17:00 y las 20:00 h en los días -3,
-2 y -1 antes del brote de mordedura de cola en los corrales en T. Además, para investigar si los cambios en la postura de la cola podrían
ser una medida para su uso en condiciones comerciales, la postura de la cola se registró mediante observación directa desde el exterior
del corral. Las observaciones en vivo se llevaron a cabo justo antes de la puntuación de la cola en cada día de observación hasta el brote.
Los resultados del video mostraron más colas colgadas/plegadas en los bolígrafos T que en los bolígrafos C en cada día de grabación (P
< 0,001). En los corrales T se colgaron más colas el día -1 (33,2%) que el día -2 (24,8%) y el día -3 (23,1%). Además, el número de cerdos
con la cola dañada el día 0 se correlacionó con la postura de la cola el día -1, con más colas colgando en corrales con 6–8 y > 8 cerdos
con la cola dañada que en corrales con 4–5 cerdos con la cola dañada (P < 0,001). Las observaciones en vivo de la postura de la cola en
T-pens también mostraron una mayor prevalencia de colas colgantes en el día 0 (30,0 %; P < 0,05) que en el día -3/- 2 (17,2 %), -5/-4
(15,4 %) y -7/-6 (13,0%). No se observaron diferencias en ninguno de los comportamientos registrados entre los bolígrafos T y los
bolígrafos C. En conclusión, las colas bajas parecen ser una medida prometedora y práctica para detectar el comportamiento dañino de
morderse las colas a nivel del corral, incluso cuando se utilizan observaciones en vivo. Sin embargo, no hubo cambios en la actividad, la
alimentación, la exploración o los comportamientos dirigidos a la cola antes de un brote de mordedura de cola.

1. Introducción
Se han observado daños en las colas de los cerdos debido a las mordeduras de cola
en muchos sistemas de alojamiento diferentes (Taylor et al., 2010; D'Eath et al., 2014).
Hoy en día, a la mayoría de los cerdos alojados en condiciones convencionales se les
corta la cola (EFSA, 2007), y la investigación muestra que el corte de cola reduce la
prevalencia del daño de la cola (Di Martino et al., 2015; Lahrmann et al., 2017).
Sin embargo, el corte de cola en sí plantea preocupaciones éticas y de bienestar, y la
Comisión Europea recomienda que los productores de cerdos reduzcan la necesidad de
cortar la cola al reducir los factores de riesgo asociados con las mordeduras de cola y
cambiar sus medidas de manejo (CE, 2016).
Si se van a alojar más cerdos con las colas intactas, es esencial que
se previene la mordedura de cola severa como se discute por D'Eath et al. (2016).
Además de reducir los factores de riesgo, un enfoque valioso para evitar brotes graves
de mordeduras de cola es detectar y detener el comportamiento dañino de mordeduras
de cola en sus primeras etapas (Schrøder-Petersen y Simonsen, 2001; D'Eath et al.,
2014).
Una revisión de Larsen et al. (2016) describieron algunos experimentos para
investigar si los cambios de comportamiento pueden predecir un brote de mordedura de
cola. Estos experimentos identificaron que los cambios en la postura de la cola y el nivel
de actividad podrían ser indicadores de un futuro brote de mordeduras de cola (Zonderland
et al., 2009; Ursinus et al., 2014). En un estudio, los cerdos con la cola entre las piernas
tenían un mayor riesgo de sufrir una herida en la cola 2 o 3 días después (Zonderland et
al., 2009), y Ursinus et al. (2014)

ÿ Autor de correspondencia.

Dirección de correo electrónico: hla@seges.dk (HP Lahrmann).

1
Dirección actual: Chr. Hansen Ltd., Bøge Allé 10-12, 2970 Hørsholm, Dinamarca.

https://doi.org/10.1016/j.applanim.2017.12.006 Recibido
el 18 de julio de 2017; Recibido en forma revisada el 5 de diciembre de 2017; Aceptado el 10 de diciembre de 2017
0168-1591/ © 2017 Elsevier BV Todos los derechos reservados.

Cite este artículo como: Lahrmann, HP, Applied Animal Behavior Science (2017), https://doi.org/10.1016/j.applanim.2017.12.006
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HP Lahrmann et al.
observaron niveles de actividad más altos antes de un brote de mordedura de cola. Estas
observaciones están respaldadas por otro pequeño estudio con seis corrales de mordeduras de
cola, lo que también sugiere que los cambios en la postura de la cola y el nivel de actividad
podrían predecir un brote de mordedura de cola (Statham et al., 2009).
Hasta ahora, solo unos pocos estudios menores han sugerido que los cambios en el
comportamiento ocurren antes de un brote de mordeduras de cola, ya sea a nivel de cerdo o de
corral. Si los cambios en el comportamiento y la postura de la cola se van a utilizar en un entorno
comercial como una señal de advertencia temprana de un brote de mordeduras de cola, es
esencial que estos puedan reconocerse a nivel del corral. En las granjas comerciales, los brotes
de mordeduras de cola se manejan a nivel del corral y, por lo general, no se detectarán las
diferencias individuales entre los cerdos en un corral. Si los cambios en el comportamiento
pueden predecir un brote de mordeduras de cola en las primeras etapas a nivel de corral, los
productores de cerdos podrían usar esta medida en sus inspecciones diarias de manejo para
identificar corrales en riesgo y tomar medidas para reducir el comportamiento de mordedura de
cola. Además, si ciertos comportamientos o posturas de la cola pueden predecir un brote de
mordedura de cola, esto abre la posibilidad de predecir futuros brotes de mordedura de cola
automáticamente mediante el uso de tecnología de sensores o cámaras (Larsen et al., 2016).
El objetivo del presente estudio fue investigar si se podían identificar diferencias en la
postura y el comportamiento de la cola a nivel de corral entre corrales cercanos a un brote de
mordeduras de cola y corrales con al menos siete días de distancia de un brote. El estudio se
llevó a cabo en un rebaño comercial con lechones destetados sin amputar.
2. Material y métodos
2.1. Consideración ética
Este experimento se llevó a cabo de acuerdo con las directrices del Ministerio de Justicia
danés, Ley No. 382 (10 de junio de 1987) y Leyes 333 (19 de mayo de 1990), 726 (9 de
septiembre de 1993) y 1016 (12 de diciembre de 2001). ) con respecto a la experimentación con
animales y el cuidado de los animales en estudio.
2.2. animales y vivienda
El estudio se llevó a cabo en una granja danesa comercial desde noviembre de 2015 hasta
febrero de 2016. Los sujetos fueron 2301 cerdos destetados mestizos DanAvl ((Landrace × Large
White) × Duroc) (7–30 kg) de cuatro lotes de parto diferentes con 55– 60 litros por lote y 555–623
cerdos por lote. Los cerdos nacieron en un sistema de maternidad en gallinero suelto (para
obtener detalles sobre el diseño del corral, consulte Pedersen et al. (2015)). El día 3 o 4 después
del nacimiento, a todos los lechones se les administraron inyecciones de hierro (Uni feron,
Pharmacosmos, Holbæk, Dinamarca), se tallaron los dientes y los lechones machos se castraron
quirúrgicamente (con el uso de analgesia a corto plazo). Desde aproximadamente los 14 días de
edad, a los lechones se les ofreció pienso sólido en el suelo. Dos días antes del destete, se
marcaron las orejas de los cerdos y se registraron sus sexos. Al destete, los lechones tenían
27,7 (DE 2,8) días y pesaban 5,8 (DE 1,5) kg. En este punto, fueron transportados a una
instalación de destete cerca de la unidad de cerdas.
Al destete, los cerdos se clasificaron por tamaño dentro del lote y se asignaron a corrales
nuevos con 31,1 (SD 1,5) cerdos/corral. Se perdió el registro del género para algunos cerdos
(2,1%). La distribución por género fue 49,9% (SD 9,4) machos castrados y 48,0% (SD 9,2)
primerizas por corral. Las cuatro salas experimentales constaban de 26 o 30 corrales y 18 o 20
de estos corrales se incluyeron en el experimento en cada lote. En total, se incluyeron 74 corrales
en el estudio. Corrales de 4,85 × 2,18 m (largo × ancho) con piso sólido de 7,1 m2 y piso enrejado
de hierro fundido de 3,5 m2 . Sobre el suelo macizo de la zona de descanso se colocó una
cubierta regulable de 2,16 m2 . Dos corrales adyacentes compartían un dispensador de alimento
seco con dos bebederos de niple, uno colocado a cada lado del dispensador de alimento
(MaxiMat, Skiold A/S, Sæby, Dinamarca).
Además, se colocó un suministro de agua separado (bebedero) al lado del dispensador de
alimento hacia el piso de listones. Cada corral estaba equipado con dos bloques de madera que
colgaban de una cadena, sin tocar el suelo.
Los corrales recibieron diariamente aproximadamente 350 g de paja finamente picada (Easy
Strø, Dansk Dyrestimuli, Nykøbing Mors, Dinamarca) en el
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piso sólido. La iluminación artificial se encendió desde las 0600 h hasta las 2200 h.
El sistema de ventilación se basó en el flujo de aire de presión negativa de las entradas de
aire de la pared en un lado del edificio (SKOV A/S, Glyngøre, Dinamarca). A la llegada de los
cerdos, la temperatura ambiente era de 24 °C y se redujo gradualmente a 19 °C el día 42. Se
colocaron tuberías de calefacción de piso controladas termostáticamente dentro del piso en el
área de descanso, lo que dio una temperatura de piso de 30 °C al inicio. de El estudio. El suelo
radiante se apagó el día 14.
Los cerdos fueron alimentados con tres dietas compuestas comerciales diferentes (acceso
ad libitum) de 7 a 30 kg a base de trigo, cebada, proteína de soya, harina de pescado (el último
ingrediente solo de 10 a 15 kg de peso corporal), minerales y vitaminas. Las dietas fueron
formuladas para cumplir con los requisitos nutritivos
Requisitos de los cerdos a esta edad y genotipo. La transición entre los compuestos del alimento
se realizó gradualmente durante un período de 7 o 14 días, dependiendo de la edad de los
cerdos. La edad de inicio de la transición de la dieta dependía del peso corporal promedio en el
corral. El experimento continuó hasta que se produjo un brote de mordedura de cola en un corral
o hasta que los cerdos se trasladaron al establo de finalización 6,5 semanas después del destete.
La salud de los cerdos fue monitoreada una vez al día por la mañana por el encargado del
ganado, y los cerdos con signos clínicos de enfermedad fueron tratados con antibióticos. Los
animales que no prosperaban y los cerdos con lesiones graves en la cola (faltaban más de la
mitad de la cola o se hinchaban como signo de infección) se trasladaron a corrales de hospitales.
Si ocurría un brote de mordeduras de cola (consulte la definición en 2.3 a continuación), se
añadían nuevos materiales de enriquecimiento a los corrales, y el mordedor o los mordedores se
retiraban del corral si podían identificarse. El corral abandonó el estudio en este punto y no pudo
volver a entrar en el estudio para usarlo como corral de control aunque las heridas de la cola se
habían curado. Se siguió de cerca la cicatrización de las heridas de la cola de los cerdos mordidos
en la cola para garantizar que las mordeduras de cola dañinas no
Seguir.
2.3. Puntuación de la cola y postura de la cola.
Del número total de animales experimentales, 2259 cerdos fueron puntuados en el establo
de maternidad y estos cerdos procedían de 222 litros. Desde justo después del destete, la
postura de la cola hacia arriba (rizada), hacia abajo (colgando) o metida (abajo y metida en el
cuerpo) y el daño de la cola se calificaron tres veces por semana (lunes, miércoles y viernes)
hasta que se produjo un brote de mordedura de cola. Después de un brote de mordeduras de
cola, las colas se puntuaron una vez por semana hasta el final del estudio (datos no mostrados).
Para evitar afectar la postura de la cola, la postura de la cola se puntuó desde fuera del corral
antes de que el observador entrara en cada corral para puntuar los daños en la cola. El daño de
la cola se evaluó y calificó utilizando el sistema de puntuación descrito en la Tabla 1.
2.4. Brote de mordedura de cola
Se produjo un brote de mordeduras de cola cuando al menos cuatro cerdos en un corral
(ÿ13 % de los cerdos) tenían una puntuación de daños en la cola de al menos una herida. El día
del brote de mordedura de cola se determinó en base a las tres puntuaciones de cola semanales.
El cuidador diario no registró ningún descanso de mordedura de cola durante las rutinas diarias
de manejo entre los días de puntuación de cola. Usamos una convención de numeración a lo
largo de este documento de modo que el día del brote es el día 0 y los días previos al brote son
-1, -2, -3 y así sucesivamente. Ocurrieron brotes de mordeduras de cola en 70 corrales, dejando
solo cuatro corrales sin un brote en todo el período de estudio (6,5 semanas).
2.5. Grabaciones de video
Se colocó una cámara de video superior (Dahua 2MP HD IR Dome, Dahua, Haarlemmermeer,
Países Bajos) sobre todos los corrales y se programó para grabar de 07:00 a 21:00 h desde el
destete hasta un brote de mordedura de cola.
Debido a la mala calidad de las grabaciones de video, el primer lote (18 bolígrafos) tuvo que ser
excluido del material de video, dejando 56 bolígrafos para análisis posteriores.
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Tabla 1 (1700–2000 h; datos no mostrados).

Sistema de puntuación de lesiones en la cola.

puntuación de cola Descripción

2.7. Grabaciones de comportamiento

Gravedad del daño

No Sin lesión visible en la cola. La lesión anterior está curada Se registró el comportamiento en corrales que continuarían teniendo mordeduras de cola en
Pequeños arañazos Rasguños superficiales menores Herida visible y daño tisular el futuro (corrales T) y, según las observaciones del piloto, los corrales que se encontraban al
Herida La parte exterior de la cola casi ha sido mordida. Durante la
menos a siete días de un brote se utilizaron como corrales de control sin mordeduras de cola
Herida: el extremo de la cola se caerá curación, la punta de la cola se caerá.
de (corrales C) . Con base en las observaciones del estudio piloto, se decidió registrar el
comportamiento y la postura de la cola de los cerdos en los corrales T y C los días -3, -2 y -1 antes
frescura de la herida
costra intacta de un brote en los corrales T para buscar cambios que pudieran actuar. como advertencia temprana
La herida está cubierta con una costra dura y seca. La
Costra no intacta herida está cubierta con una costra, pero se ven grietas en la de mordeduras de cola. Una vez cada media hora, se registró el comportamiento de los cerdos
costra y sangre seca/tejido fresco. La piel está rota, sin costra, sin mediante muestreo de barrido instantáneo durante los períodos de alta actividad de 08:00 a 11:00
Herida fresca - no sangre, solo supuración.
h y de 17:00 a 20:00 h identificados en las observaciones piloto. El etograma se presenta en la
sangrado (llanto)
La lesión fresca y la sangre fresca son visibles.
Tabla 2.
Herida fresca - sangrando
Se produjo un brote de mordeduras de cola en 50 de los 56 corrales incluidos en el estudio
Longitud de la cola
de video. Para comparar las diferencias de comportamiento entre los grupos, los bolígrafos T y C
Intacto Cola de longitud completa

Falta la parte exterior Falta la parte exterior de la cola.

se emparejaron aleatoriamente dentro del lote. Los cerdos en corrales pareados provenientes del
Falta más de la mitad < 1 cm a la Falta más de la mitad de la cola. mismo lote de parto fueron analizados en las mismas fechas y se alojaron en la misma habitación
izquierda de la cola Queda menos de 1 cm de la cola.
en el período de destete. Un bolígrafo podría aparecer como T-pen y C-pen según el inicio del

Hinchazón brote de mordedura de cola en el corral y el resultado del emparejamiento aleatorio. Para que un
No Sin hinchazón corral estuviera en el grupo de corrales de control disponibles, el corral tenía que estar al menos a
Sí Cola roja hinchada que indica una infección
siete días de un futuro brote de mordedura de cola. Con base en el emparejamiento aleatorio, se
extrajeron 24 bolígrafos diferentes como bolígrafos C. Por lo tanto, en promedio, un C-pen se
emparejó dos veces con un T-pen en un rango de uno a siete emparejamientos por C-pen dentro
2.6. Estudio piloto
del lote. Si se eligió el mismo corral como corral de control para corrales con un brote de mordedura
de cola el mismo día, los datos del corral de control solo ingresaron al análisis estadístico.
Para determinar el método de muestreo para el estudio principal, se realizó un estudio piloto
usando grabaciones de videos de 10 corrales con brotes de mordeduras de cola. Se registraron
muestras de escaneo del comportamiento de los cerdos y la postura de la cola (de acuerdo con el
una vez.
etograma en la Tabla 2) los días -13, -10, -7, -4, -3, -2 y -1 antes del brote (día 0) cada media hora
desde las 0700 h hasta las 2100 h para determinar si se pueden determinar cambios en la actividad
y la postura de la cola y cuándo se pueden esperar los cambios. La inspección visual de los
2.8. análisis estadístico
resultados del estudio piloto sugirió un cambio en la actividad y la postura de la cola en los últimos
tres días antes de un brote, pero no antes (no se muestran los datos). Además, los resultados de
Los análisis estadísticos se realizaron utilizando SAS Enterprise Guide 7.1 (SAS Institute Inc.,
este estudio piloto mostraron altos niveles de actividad durante las horas de la mañana (08:00 a
Cary, NC, EE. UU.) con un nivel de significación de P < 0,05 y un nivel de tendencia de P < 0,10.
11:00 h) y al final de la tarde.
La pluma fue la unidad experimental en los análisis estadísticos del comportamiento y la postura
de la cola.

Tabla 2

Etograma de comportamientos registrados en video (modificado según Zonderland et al., 2011).

Comportamiento Descripción

Cerdos de pie o sentados

De pie/caminando Los cerdos están parados o moviéndose sobre sus cuatro patas.
Sesión Cerdos sentados. El cuerpo está sostenido por los cuartos traseros y las patas delanteras son rectas.

Cerdos en dispensador de alimento

Nariz en canal Cerdos con la nariz en el comedero.

Cabeza contra alimentador Cerdos a menos de un lechón de distancia del comedero con la cabeza orientada hacia el comedero. La cabeza no está en el comedero y los cerdos no están hojeando el suelo.

Parece que los cerdos están esperando para tener acceso al alimento.
Aléjese del comedero Cerdos a menos de un lechón de distancia del comedero sin tener la cabeza en el comedero. La cabeza está orientada lejos del alimentador.
Alimentación de piso sólido de nariz Cerdos que tocan, olfatean, hozan o lamen el piso sólido a una distancia de un cerdo del comedero.

Cerdos en bebedero
Bebe o huele el bebedero Cerdos con la nariz en el bebedero o cerdos con la cabeza cerca del bebedero olfateando, tocando, hojeando o mordiendo el bebedero.

Cerdos olfateando enriquecimiento, piso o compañero de corral

Enriquecimiento de la nariz Tocar, oler, hozar o morder el enriquecimiento.
Nariz piso sólido Tocar, oler, hozar o lamer el piso sólido.
Tarima de tarima Tocar, olfatear, hozar o lamer el suelo de rejilla.
Región de la cola de la nariz/extremo trasero del cerdo Tocar, oler, hozar, masticar o morder la región de la cola o el entorno inmediato.
Nariz compañero de pluma, cuerpo Tocar, olfatear, hozar, masticar o morder otra parte del cuerpo además de la región de la cola.
cola en la boca Masticar, chupar o morder la cola de un compañero de corral.

Postura de la cola en cerdos de pie

cola rizada La cola es rizada.
Cola metida/cola colgante Cola colgando o metida en el cuerpo.
cola otro Otra postura de la cola no incluida en las anteriores, por ejemplo, sobresalir.
Cola no mostrada La postura de la cola no es visible.

3
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2.8.1. datos de vídeo Cuadro 3

El porcentaje de colas hacia abajo (suma de colas colgadas y metidas), cerdos en el Frecuencia y distribución del daño en la cola (%), desglosado por daño en la cola intacta y daño cuando

dispensador de alimento (suma de todos los comportamientos registrados en el dispensador de falta parte de la cola al destete y en el día del brote de mordedura de cola (día 0).

alimento; Tabla 2), cerdos que realizan un comportamiento exploratorio (suma de: enriquecimiento
de la nariz + piso sólido de la nariz + nariz piso enrejado; Tabla 2), los cerdos que realizan un Puntuación de cola Al destete (establo de Brote de mordedura de cola (día
comportamiento dirigido al compañero de corral y un comportamiento dirigido por la cola (suma parto) 0)

de: cola en la boca y región de la cola de la nariz; Tabla 2) se calcularon como el porcentaje de
No. % No. %
cerdos de pie en cada exploración. Los datos sobre cerdos en el bebedero no se analizaron
debido a la baja prevalencia. El porcentaje de cerdos de pie se calculó como la proporción de Sin lesión en la 2131 94.3 1706 76.2
cerdos en el corral. La actividad global se calculó como el porcentaje de cerdos de pie y cola Longitud intacta y...
sentados en el corral. Rasguños, costra intacta 69 3.1 15 0.7
Rasguños, costra no intacta 17 0.8
Herida, costra intacta Herida, 57 2.5 311 13.9
Las diferencias en el comportamiento y la postura de la cola entre los corrales T y C se 90 4.0
costra no intacta Herida fresca,
analizaron mediante el procedimiento de modelo mixto lineal generalizado (GLIMMIX) con grupo no sangra Herida fresca, sangra 21 0.9
(bolígrafos T frente a corrales C), hora del día (mañana frente a tarde), día antes del brote ( día
2 0.1 38 1.7
-1, -2 y -3), días posteriores al destete (día 9–17, día 18–26, día 27–35, día 36–45) como efectos
fijos y pares de pluma (T-pen con C-pen ) como un efecto aleatorio. La interacción estuvo Falta la parte exterior de la cola
y...
presente entre el grupo y el día con respecto al porcentaje de resultado de colas hacia abajo.
Herida, costra intacta 18 0.8
Todas las demás interacciones entre el grupo y los efectos fijos no fueron significativas en los
Herida, costra no intacta 7 0.3
análisis y se eliminaron de los modelos. Herida fresca, no sangra 5 0.2
Herida fresca, sangra
Intacta, la parte externa de 6 0.3
la cola se caerá 5 0.2
2.8.2. Cola dañada en cerdos y postura de la cola (video)
Efecto del número de cerdos con colas dañadas el día 0 (categorización a nivel de corral:
Total 2259 100 2239 100
4–5 colas lesionadas, 6–8 colas lesionadas o > 8 colas lesionadas) sobre el porcentaje de colas
caídas según la observación en video el día -1, - 2 y -3 se analizaron usando GLIMMIX con a
Algunos cerdos fueron trasladados a corrales de hospitales o murieron entre la puntuación de la cola al
colas dañadas el día 0, el día antes del brote y la hora del día como efectos fijos y la pluma destete y el día 0.
como efecto aleatorio. Los resultados se presentan como media, ± SE.
3.1. Cambios en el comportamiento previo a un brote (Video)

2.8.3. Observaciones en vivo (postura de la cola) El porcentaje de colas caídas (suma de: colas colgantes y metidas) y el porcentaje de

La puntuación de la cola y las observaciones en vivo de la postura de la cola se realizaron cerdos activos registrados en los corrales T y C se presentan en la Fig. 1. Había más colas

tres veces por semana (los lunes, miércoles y viernes). Por lo tanto, dependiendo del día de la caídas en los corrales T que en los corrales C (P < 0,001). Esta variable se vio afectada por la

semana del brote de mordedura de cola, el registro previo de la postura de la cola se realizó dos interacción entre el grupo y el día antes del brote con más colas caídas el día -1 que el día -2 y

o tres días antes. Por lo tanto, en el modelo estadístico, la postura de la cola en los días -2 y -3 el día -3 en los corrales T, y más colas caídas el día -1 que el día -2 en los corrales C- corrales

se agrupó en una categoría denominada día -2/-3. Se utilizó el mismo principio de categorización (P < 0,05), pero no hubo diferencia entre los corrales C los días -1 y -3 o entre los días -2 y -3.

para el día -4/-5 y el día -6/-7. Las observaciones en vivo de la postura de la cola fueron No hubo diferencia entre grupos (corrales T vs C) y días en el porcentaje de cerdos activos (Fig.

analizadas por GLIMMIX con mediciones repetidas en el nivel del corral y el número de cerdos 1).

activos y el día como efectos fijos.

Los resultados de las grabaciones de video de los cerdos en el comedero, los cerdos
olfateando el piso/enriquecimiento, los cerdos olfateando el cuerpo de los compañeros de corral
o los cerdos involucrados en un comportamiento dirigido por la cola se presentan en la Tabla 4.
2.8.4. Características de la víctima, categorización del peso y origen de la camada
El día anterior al brote no influyó significativamente en ninguno de los comportamientos
Los cerdos que fueron puntuados con una herida en la cola o un rasguño al menos una vez
registrados, pero hubo tendía a ser un comportamiento más dirigido a la cola en T-pens (P = 0.06).
después del destete se caracterizaron como víctimas (variable binaria). Los cerdos dentro del
La Fig. 2 muestra la asociación entre la postura de la cola en el día -1, -2, -3 y cerdos con
corral se clasificaron en cuatro grupos de peso (percentiles 25) según el peso al destete. El
la cola dañada en el día 0. En el día -1 más colas colgaban en los corrales con brotes de
riesgo de convertirse en víctima de mordedura de cola se analizó utilizando GLIMMIX con sexo,
mordeduras de cola más graves con 6–8 y > 8 cerdos con cola dañada en comparación con
víctima al destete, origen de la camada y categoría de peso al destete como efectos fijos. La
corrales de brotes con 4–5 cerdos con cola dañada el día 0 (P < 0,001). No se observaron
pluma y el lote se incluyeron como efectos aleatorios. La correlación entre el peso medio al
diferencias en la postura de la cola entre estos diferentes grupos en el día -2 y -3. Además, más
destete (media) a nivel de corral y el inicio de un brote de mordeduras de cola (días después del
colas colgaban el día -1 que los días -2 y -3 en corrales con 6–8 y > 8 cerdos con colas dañadas
destete) se analizó utilizando el procedimiento de correlación (Proc CORR).
(P < 0,001). No se observaron diferencias en la postura de la cola entre días en corrales con 4
o 5 cerdos dañados en la cola el día 0.

3. Resultados

Ocurrieron brotes de mordeduras de cola en 70 de los 74 corrales. El día del brote de
mordeduras de cola (día 0), en promedio 7,6 (SD 4,3; rango 4-27 cerdos/corral) cerdos en T-pen
tenían daño en la cola (arañazos y heridas). La distribución de las puntuaciones de la cola al
destete y el día 0 se muestra en la Tabla 3. Al destete, el 5,7 % de los cerdos que aún tenían la
cola de largo completo (sin partes de la cola mordidas) fueron calificados con daños en la cola
(arañazos y heridas). ), mientras que el día 0 (día del brote de mordeduras de cola) el 23,8%
presentaba una herida o un rasguño. El día del brote de mordedura de cola (día 0), la mayoría
de las colas dañadas aún estaban en su totalidad (el 1,8 % había perdido la parte exterior de la
cola). En promedio, los brotes de mordeduras de cola ocurrieron 26,6 días después del destete
(SD 11,0, rango: 9–49 días) en T-pens.
3.2. mañana vs tarde
Más cerdos estaban activos (40,0 % frente a 34,8 %, ± 0,78 (SE), P < 0,001), más cerdos
estaban en el comedero (18,1 % frente a 15,1 %, ± 0,26, P < 0,001) y más cerdos realizaron un
comportamiento exploratorio (30,6 % vs 27,9%, ± 0,65, P < 0,001) por la tarde/noche que al
final de la mañana. Pen-mate (4,2 % frente a 4,0 %, ± 0,13, P = 0,70) y el comportamiento
dirigido a la cola (0,9 % frente a 1,0 %, ± 0,11, P = 0,28) no difirieron entre las grabaciones de
la mañana y la tarde.

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Fig. 1. Porcentaje de rabos colgantes y porcentaje de cerdos activos en corrales T y

corrales C el día -3, el día -2 y el día -1 antes de un brote de mordeduras de cola (14
muestras escaneadas cada media hora 0800–1100 h y 1700 –2000 h en vídeo). Los
datos se presentan como LSmeans (± SE).
Los diferentes superíndices a y b representan diferencias significativas de P < 0,05 entre
días en T-pens. X e y representan diferencias significativas de P < 0,05 entre días en
corrales C.
***
= P < 0,001 y ns (no significativo) representan diferencias dentro
día entre C-pens y T-pens.

Tabla 4
Porcentaje de cerdos en el comedero y porcentaje de cerdos involucrados en comportamiento exploratorio,
comportamiento dirigido por el compañero de corral y comportamiento dirigido por la cola en el día -3 (d -3),
-2 (d -2) y -1 (d -1) ) antes de un brote de mordedura de cola en T-pens y C-pens.
Se observaron cerdos con una herida/rasguño en la cola. No se encontraron diferencias entre
sexos en el riesgo de ser víctima de mordedura de cola (F1,2094 = 2,51; P = 0,11). Hubo una
fuerte tendencia a que el peso al destete influyera en el riesgo de ser víctima de mordeduras
de cola (F3,2091 = 2,50; P = 0,06). Los cerdos más grandes (percentil 25 superior) en un corral

T-bolígrafos C-bolígrafos SE P-valor tendían a ser puntuados más a menudo con daños en la cola que los cerdos más pequeños.

d -3 d -2 d -1 d -3 d -2 d -1 Día de grupo

Los cerdos procedían de 222 camadas diferentes en el establo de maternidad.

Cerdos en 16,5 16,5 16,1 17,1 16,8 17,0 0,4 0,16 0.75
Los cerdos con rasguños o heridas en la cola se originaron en 88 camadas diferentes (128
dispensador de alimento, %

Comportamiento 29,8 29,3 28,4 29,6 29,1 29,3 0,95 0,86 0.52 cerdos: rango de 1 a 4 cerdos por camada) y los cerdos con heridas en la cola se originaron
exploratorio, % en 47 camadas (59 cerdos, rango: 1 a 3 cerdos por camada). La posibilidad de convertirse en
Comportamiento dirigido por 4.2 4.0 4.3 3,8 3,9 4,1 0,34 0,53 0,65
víctima en el período de destete no se vio afectada por el origen de la camada en la unidad de
compañeros de redacción, %

Cola dirigida 0,88 1,2 1,16 0,91 0,73 0,91 0,11 0,06 0.54
parto (F220,1941 = 0,87, P = 0,91). Además, los resultados mostraron que los cerdos con una

comportamiento, %
lesión en la cola al destete podrían tener un mayor riesgo de convertirse en víctimas de
mordeduras de cola en comparación con los cerdos sin una lesión en la cola al destete
(F1,2096 = 3,4, P = 0,07).
3.3. Cambios en la postura de la cola en T-pens (observaciones en vivo)

De manera similar a los hallazgos de las observaciones en video, las observaciones en
vivo de la postura de la cola mostraron que había más colas hacia abajo el día del brote (día
0) en comparación con los días anteriores al brote -2/-3, -4/-5 y -6/-7 (P < 0,05; Fig. 3) en T-
pens.
3.4. Efecto del peso al destete
No se observó correlación entre el peso promedio al destete a nivel del corral y el tiempo
de inicio (días posteriores al destete) de un brote de mordeduras de cola (R = 0,03, N = 70, P
= 0,8).
3.5. Víctimas
Desde el destete hasta el día del brote de mordedura de cola, 650 diferentes
4. Discusión
Investigamos si un futuro brote de mordeduras de cola podría predecirse a nivel de corral
en función de los cambios de comportamiento en los días -3, -2 y -1 antes de un brote (día 0).
Los resultados mostraron más colas colgantes en futuros corrales para mordeduras de cola
(corrales T) que en corrales sin mordeduras de cola (corrales C) en los tres días de registro. El
porcentaje de cerdos con la cola hacia abajo casi se duplicó (según las grabaciones de video)
en corrales cercanos a un brote de mordeduras de cola en comparación con los corrales de
control. Las observaciones directas de la postura de la cola mostraron la misma tendencia, con
más colas colgando en los corrales de mordedura de cola el día del brote de mordedura de
cola en comparación con antes. El gran aumento en las colas al nivel del corral podría hacer
que la medida sea aplicable para su uso en granjas comerciales. En promedio, se estimó que
las grabaciones directas de la postura de la cola tomaron

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aproximadamente 1-2 min por pluma. El uso de cambios en la postura de la cola, como
una medida de un futuro brote de mordeduras de cola, podría brindar a los agricultores una
herramienta para detectar el brote en sus primeras etapas, detener el comportamiento
dañino y, por lo tanto, evitar daños más severos en la cola.
Los resultados de las grabaciones de video en los corrales de mordeduras de cola
informaron un 33 % de colas caídas el día anterior al brote (día -1). Esto fue más alto que
en el día -2 y -3. Las observaciones en vivo de la postura de la cola en corrales para
mordeduras de cola mostraron el mismo aumento en las colas desde el día -3/-2 hasta el
día 0 con un aumento del 17 % al 30 % de colas colgantes. La semejanza entre las colas
hacia abajo el día 0 (observación en vivo) y el día -1 (observación en video) está respaldada
por Larsen et al. (2016), quien sugiere que el cambio en la postura de la cola de rizada a
colgante ocurre antes de un brote, porque los cerdos experimentan dolor en la cola incluso
en las etapas previas a la lesión del comportamiento dirigido a la cola. La hipótesis de que
la postura de la cola predice la mordedura de la cola está respaldada por los hallazgos que
informan que los cerdos individuales con la cola hacia abajo y sin daños en la cola tenían
una mayor probabilidad de tener una herida en la cola 2 o 3 días después (Zonderland et
al., 2009). La cola bajada podría ser el intento de los cerdos de proteger la cola y evitar
morder más.
Estudios previos han demostrado una correlación entre la actividad y la mordedura de
cola con una mayor actividad en corrales de mordedura de cola (Statham et al., 2009;
Ursinus et al., 2014). Nuestros resultados no respaldan estos hallazgos, pero las diferencias
entre los estudios podrían tener varias causas. En el estudio de Statham et al. (2009), el
aumento de actividad previo a un brote solo se observó en corrales con brotes severos. Se
produjo un brote grave cuando se veía sangre y al menos dos cerdos tenían daños graves
en la cola (pérdida parcial de la cola). Esto puede indicar que los cambios en la actividad
son útiles para detectar brotes de mordeduras de cola en toda regla y no como una señal
de advertencia temprana de un brote inminente. El hallazgo está respaldado por el hecho
de que dentro de los corrales de mordeduras de cola no ocurrieron cambios en el nivel de
actividad desde el día -3 hasta el día -1 en el presente estudio. Sin embargo, otros
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Fig. 2. Porcentaje de rabos caídos el día -3, -2 y -1 según el número de cerdos
con rabo dañado el día 0. Los corrales se clasificaron en tres grupos; 4–5 (37
corrales), 6–8 (15 corrales) o > 8 (19 corrales) cerdos con cola dañada el día 0.
Letras minúsculas diferentes a y b indican una diferencia significativa de P <
0,001 entre corrales durante el día. Las letras A y B mayúsculas diferentes
indican una diferencia significativa entre los días dentro
grupo.
razones también podrían explicar las diferencias entre nuestros resultados y estudios
previos (Statham et al., 2009; Ursinus et al., 2014). En primer lugar, nuestro estudio se
realizó en lechones destetados, mientras que Ursinus et al. (2014) y Statham et al. (2009)
observaron cambios en la actividad antes de un brote en los finalizadores. En segundo
lugar, registramos la actividad como el porcentaje de cerdos de pie y sentados, mientras
que en los otros dos estudios citados se incluyeron cerdos activos tumbados o sentados en
la medida de la actividad. Solo incluimos cerdos de pie/sentados en la medida de actividad,
porque queríamos una medida de actividad que el encargado del ganado pudiera
implementar en su rutina diaria de manejo. Una tercera razón para la diferencia entre los
estudios mencionados anteriormente podría deberse al momento en que se registró la
actividad. Registramos actividad al final de la mañana y al final de la tarde/noche y, como
en otros estudios, los cerdos se volvieron más activos por la tarde (Costa et al., 2013;
Lahrmann et al., 2014). Es posible que las diferencias en la actividad entre los corrales de
mordedura de cola y los corrales de control hayan sido más pronunciadas durante los
períodos de descanso diario. Un estudio informó que el comportamiento de morderse la
cola aumentó la inquietud de los cerdos (Zonderland et al., 2011). Esta inquietud puede ser
más difícil de detectar en los períodos del día, donde los cerdos normalmente están activos
de acuerdo con su ritmo de actividad diurno.
De acuerdo con estudios previos, no se observaron diferencias en el comportamiento
exploratorio hacia el suelo o los compañeros de corral entre los corrales de mordedura de
cola y los corrales de control (Statham et al., 2009; Ursinus et al., 2014).
Además, el porcentaje de cerdos en el comedero tampoco difirió, esto está de acuerdo con
Wallenbeck y Keeling (2013).
Nuestros resultados mostraron un porcentaje creciente de colas caídas con un número
creciente de cerdos con colas dañadas. Esto respalda aún más la correlación entre la
postura de la cola y la mordedura de cola. De manera similar, Zonderland et al. (2009)
informaron a nivel de cerdos que los cerdos con la cola colgando/metida el día del brote de
mordedura de cola tenían en mayor medida una herida en la cola
Fig. 3. Porcentaje de colas caídas evaluado mediante una observación en vivo
(lado del corral) el día -7/-6, -5/-4 y -3/-2 antes de un brote de mordedura de cola
y el día del brote de mordedura de cola (día 0). Los diferentes superíndices (a,
b) representan una diferencia significativa de P <0,05.
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en comparación con los cerdos con una cola rizada.
En los corrales de control, en promedio, entre el 15 y el 17 % de las colas estaban caídas.
Estos números indican que las colas colgantes no siempre están dañadas. Con base en la
experiencia obtenida de la recopilación de datos, se puede especular que la postura de la cola
está influenciada por las actividades de los cerdos. Al observar a los cerdos, tuvimos la impresión
de que los cerdos que buscaban en el suelo tenían más probabilidades de tener la cola colgando
en comparación con los cerdos que caminaban. También parecía que las colas a menudo estaban
hacia abajo cuando los cerdos se detenían después de correr, y luego de un rato, las colas se
enroscaban de nuevo si no estaban dañadas. La postura de la cola de acuerdo con el
comportamiento de los cerdos no se registró en el presente estudio, y se necesita más investigación
para comprender cómo las diferentes actividades afectan la postura de la cola.
Se observaron lechones dañados en la cola en 88 camadas (2,6 % heridas y 3,1 % marcas
de mordeduras) en la unidad de parto justo antes del destete. A modo de comparación, el 9,2 %
de los cerdos tenían heridas en la cola y el 36,9 % tenían marcas de mordeduras al destete en un
experimento holandés con cerdos sin amputar (Ursinus et al., 2014). Se encontró una tendencia,
que las víctimas de mordeduras de cola en el destete tenían un mayor riesgo de convertirse en
víctimas de mordeduras de cola más adelante en el período de destete.
Esto contrasta con el estudio de Ursinus et al. (2014), quienes no encontraron tal correlación. En
general, estos resultados indican que no es probable que se puedan predecir futuras víctimas de
mordeduras de cola en función del daño en la cola en el período previo al destete.
Los cerdos más grandes de un corral (percentil 25) fueron víctimas con más frecuencia que
los más pequeños (percentil 25), lo que está de acuerdo con algunos hallazgos previos (Van de
Weerd et al., 2005; Zonderland et al., 2011), pero en contraste con Munsterhjelm et al. (2016),
quienes no encontraron esta diferencia. Taylor et al. (2010) sugirieron que los cerdos más pesados
son a menudo los primeros en comer en los períodos activos, lo que podría hacerlos más
expuestos al comportamiento de mordedura de cola de otros cerdos hambrientos y tal vez
inquietos.
En el presente estudio, no encontramos diferencias en el sexo entre las víctimas.
Como se discutió por Lahrmann et al. (2017) existen inconsistencias entre estudios, cuando se
evalúa el riesgo de convertirse en víctima en función del sexo.
El presente estudio se realizó en condiciones comerciales en una manada, pero los autores
creen que los cambios en la postura de la cola podrían ser un indicador de un futuro brote de
mordeduras de cola, independientemente del entorno de alojamiento. Creemos que sí, ya que es
probable que la reacción de las víctimas al dolor en la cola desencadene el cambio en la postura
de la cola de rizada a colgada/metida, como lo discutió Larsen et al. (2016).
5. Conclusión
El porcentaje de colas colgantes casi se duplicó en los corrales cercanos a un brote de
mordedura de cola (día -1), en comparación con los corrales a siete días o más de un brote. En
los corrales cercanos a un foco colgaban más colas el día -1 que el día -2 y el día -3. Estos
cambios en la postura de la cola, basados en observaciones de video, fueron respaldados por la
observación en vivo de la postura de la cola que mostró casi el mismo aumento en el porcentaje
de colas colgantes desde el día -3/-2 hasta el día 0. Además, los resultados mostraron que en los
corrales de brotes a mayor número de cerdos con rabo herido el día 0 hubo más rabos colgantes
el día -1. Los cambios en el nivel de actividad, el comportamiento exploratorio o el comportamiento
dirigido por los compañeros de redacción no eran evidentes antes de un brote. En conclusión,
nuestros resultados indican que las colas bajas podrían ser una medida prometedora y práctica
para detectar el comportamiento dañino de morderse las colas a nivel del corral antes de que el
comportamiento cause un daño severo en la cola.
Conflicto de intereses
Los autores declaran no tener conflictos de intereses.
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Fondos
Este trabajo recibió financiación de The Danish Pig Levy Foundation y Innovation Fund
Dinamarca, y el trabajo de SRUC fue apoyado por la División de Servicios Analíticos y Ciencias
Rurales y Ambientales del Gobierno Escocés.
Agradecimientos
Los autores desean agradecer a los empleados de la pocilga "Krannestrup" en Dinamarca y
a los técnicos de investigación Hans Peter Thomsen y Mimi Lykke Eriksen del Centro Danés de
Investigación de Cerdos SEGES por su ayuda con este estudio. Además, agradecemos a Danielle
Kjerulff Pedersen por ayudar con las grabaciones de comportamiento y a Mai Britt Friis Nielsen
por ayudar con los análisis estadísticos.
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