Varía tu oferta: Aunque tus panes rellenos de palta o huevo frito pueden ser

deliciosos, es posible que algunas personas quieran algo diferente. Prueba a

agregar algunos otros ingredientes a tus panes, como queso, tomate, jamón, entre
otros. También puedes ofrecer bebidas diferentes, como jugos naturales o café.

Aumenta tus precios: Si tus productos son buenos, quizás puedas aumentar un poco
los precios. Puedes comenzar aumentando unos céntimos para ver cómo reacciona la
gente y ajustarlos según sea necesario.

Mejora la presentación: La presentación de tus productos puede hacer una gran

diferencia en las ventas. Prueba a hacer que tus panes se vean más atractivos,
utilizando moldes o presentándolos de una manera más creativa. Asegúrate de que
todo esté bien limpio y ordenado.

Promociónate en línea: Hoy en día, la mayoría de las personas buscan información en

línea antes de comprar algo. Crea una página en Facebook o Instagram para tu
negocio y publica fotos de tus productos y horarios. También puedes publicar
ofertas especiales o descuentos para atraer a más clientes.

Amplía tus horarios: Si es posible, intenta ampliar tus horarios de venta. Puedes
considerar vender durante el almuerzo o la cena también. Si hay eventos cerca de tu
ubicación, como ferias o conciertos, podrías aprovecharlos para vender más.