INSTITUTO TECNOLOGICO DE BOCA DEL RIO

Alumno: Celedonio Lara Braulio Genaro

Materia: Ingeniería de Costas II

Tema: 2.- Dunas

Subtema: 2.2 Estabilización de Dunas

Profesor: Juan Ramon Herrera Muñoz

Fecha: 24/octubre/2022
2.2 Estabilización de Dunas

La estabilización de las dunas de arena es una práctica de gestión costera diseñada para prevenir la
erosión de las dunas de arena. Las dunas de arena son características comunes de los entornos
costeros y desérticos. Las dunas proporcionan hábitat para plantas y animales altamente
especializados, incluidas especies raras y en peligro de extinción. Pueden proteger las playas de la
erosión y reclutar arena para las playas erosionadas. Las dunas están amenazadas por la actividad
humana, tanto intencionada como no intencionada (ver robo de arena y extracción de arena). Países
como Estados Unidos, Australia, Canadá, Nueva Zelanda, Reino Unido y Holanda operan
importantes programas de protección de dunas.

La estabilización de las dunas implica múltiples acciones. La plantación de vegetación reduce el

impacto del viento y el agua. Las cercas de arena de madera pueden ayudar a retener la arena y
otros materiales necesarios para un ecosistema de dunas de arena saludable. Los senderos
protegen las dunas de los daños causados por el tráfico peatonal.

La ubicación de la duna limita los tipos de plantas que pueden prosperar allí. Las dunas de la playa
consisten en el foredune, el lado en ángulo que mira hacia el océano, la llanura de arena en la parte
superior de la duna, que puede o no estar presente, y el backdune, el lado en ángulo que mira en
dirección opuesta al océano.
Flora Foredune

Las plantas que prosperan en el foredune deben ser tolerantes a la niebla salina, los vientos fuertes
y el entierro al soplar / acumular arena. La vegetación típica incluye Ammophila arenaria, Honckenya
peploides, Cakile maritima y Spartina coarctata.

Flora de backdune

Las plantas que prosperan en la amplia llanura de dunas y backdune crecen juntas en parches
densos denominados tapetes de dunas que mantienen unida a la duna. La vegetación típica de la
llanura y dunas incluye Hudsonia tomentosa, Spartina patens, Iva imbricata y Eregeron glaucus. Las
especies introducidas pueden competir con las plantas nativas y alterar la vida animal,
convirtiéndolas formalmente en "especies invasoras".
Etapa de arbusto

Las especies anteriores son plantas herbáceas. Después de que se hayan enraizado y se hayan
desarrollado completamente, puede comenzar una segunda etapa, la " etapa de arbusto ". Durante
esta fase, se pueden plantar plantas más grandes con sistemas de raíces más profundos. Algunos
ejemplos son Empetrum nigrum, Ilex vomitoria y Vaccinium ovatum . La etapa arbustiva suele ser la
fase final y puede durar períodos de tiempo cortos o largos dependiendo de las condiciones
microclimáticas, como la distancia a la costa, la disponibilidad de agua subterránea o los efectos de
la niebla salina.

Manejo costero

Una sola playa se puede dividir en segmentos con diferentes propietarios. Conseguir un acuerdo
entre todos los propietarios complica el proceso de estabilización de las dunas. Sin un acuerdo,
algunas partes de la duna pueden quedar sin plantar, mientras que otras albergan plantas
visualmente atractivas que hacen poco por estabilizar la duna. La vegetación inconsistente, conocida
como gradiente fragmentado o desacoplado, puede crear puntos débiles en la duna que limitan su
efectividad contra inundaciones e incluso su existencia continuada.
Las playas de propiedad pública, que se encuentran en estados de EE. UU. Como California y Hawái
y en otras jurisdicciones, presentan la oportunidad de administrar sistemáticamente, o administrar
mal, las playas y las dunas que las acompañan.

Gestión de dunas costeras

Las dunas de arena costeras bordean miles de kilómetros de costa en todo el mundo. Están
formadas por colinas de arena continuas y onduladas que se mantienen unidas por una vegetación
de dunas de arena especialmente adaptada. Estas plantas tienen adaptaciones que les permiten
sobrevivir en hábitats de dunas de arena, estas incluyen adaptaciones a un sustrato en movimiento
que cubre y descubre sus raíces, adaptación a la desecación, a vientos fuertes que llevan sal y
arena y a cambios violentos temperaturas.

Las dunas de arena costeras se formaron durante un tiempo de bajo nivel del mar donde la arena y
los sedimentos de la playa quedaron expuestos y, junto con vientos suficientes, esta arena se
transportó hasta la cara de la playa mediante un proceso conocido como saltación .Una vez que el
viento suficiente (> 15 km / h) moviliza las partículas de arena, quedan atrapadas en la vegetación o
arrastran la madera en la parte posterior de la playa, la arena continúa acumulándose entre la
vegetación y, con el tiempo, se acumulan lentamente las dunas que vemos hoy. . Las dunas de
arena tienen un propósito importante al proteger las áreas del interior de la intrusión de agua costera.
Son capaces de absorber el impacto y proteger las áreas del interior de las tormentas de alta energía
y actuar como una barrera resistente a las fuerzas destructivas del viento y las olas.
Impactos humanos

En general, se observa que las dunas costeras son muy sensibles a cualquier cantidad de
actividades humanas. También se entiende que las dunas costeras deben tener una interacción
limitada con los humanos para su protección y supervivencia. En todo el mundo, las dunas costeras
se están erosionando y bajo presión debido al aumento de la pérdida de sedimentos debido al
aumento de las actividades humanas costeras.

Por ejemplo, en los últimos 30 años, principalmente debido al turismo, casi el 75% de las dunas
costeras del Mediterráneo se han dañado o destruido. Los impactos humanos pueden expandirse de
efectos adversos menores a altamente significativos. Los efectos menores incluyen el pisoteo de
peatones, la construcción de senderos y pistas para vehículos todo terreno, hasta los más
significativos que incluyen la construcción de carreteras, aparcamientos, casas y el uso de dunas de
arena para la extracción de agua subterránea, la conversión de dunas de arena en tierras para
agricultura, silvicultura, eliminación de residuos y minería de dunas de arena.
Restauración y protección

Una de las primeras cosas que debe buscar un administrador costero al establecer la gestión de las
dunas de arena es determinar la causa principal de la pérdida de sedimentos y, a partir de ahí, tomar
decisiones sobre cómo minimizar la causa y cómo restaurar las dunas de arena de manera
adecuada. En Nueva Zelanda, la principal causa de la erosión de las dunas ha sido la pérdida de
vegetación de arena y esto significa que el manejo de las dunas consiste principalmente en
estabilizar los sistemas de dunas mediante la técnica “suave” de replantación y protección de la
vegetación de dunas nativa.

Se aconseja que las dunas no deben restaurarse con la plantación de especies exóticas y los
administradores deben apuntar a usar solo especies autóctonas de un área, originalmente Nueva
Zelanda usó vegetación de dunas exótica de rápido crecimiento llamada hierba marram para
estabilizar las dunas de arena erosionadas. Más tarde se descubrió que esta especie exótica creaba
dunas de arena muy altas y empinadas que eran cada vez más susceptibles al clima de alta energía
de tormentas de Nueva Zelanda. También se hizo evidente que la vegetación de dunas nativa de
Nueva Zelanda fue superada por esta especie introducida, lo que causó problemas biológicos. En la
actualidad, existe un gran impulso para erradicar la hierba marram, ya que ahora está clasificada
como una especie de plaga en Nueva Zelanda, y los administradores costeros fomentan la
plantación de las dos especies autóctonas, pingao (Desmoschoenus spiralis) y spinifex (Spinifex
sericeus) como estas dos especies crean dunas de ángulo bajo, fuertes y estables.
La restauración de los sistemas dunares que han sido alterados se consigue mediante la eliminación
de las causas que han conducido a su alteración y utilizando técnicas de reconstrucción topográfica
y repoblación con vegetación autóctona. Puesto que las dunas costeras son unos sistemas muy
dinámicos, los objetivos de restauración se pueden cumplir en un plazo breve, del orden de pocos
años.

Es esencial, en cualquier proyecto de restauración, establecer cuáles son los objetivos a alcanzar,
siendo deseable que las actuaciones realizadas consigan recuperar la estructura (composición de
especies) y funcionamiento (procesos sedimentarios y ecológicos), de forma que el sistema dunar
restaurado mantenga una situación de equilibrio dinámico acorde con las características
sedimentarias y ecológicas de su entorno.

Los proyectos de regeneración de dunas se inician con un estudio detallado de la evolución

geomorfológica del sistema dunar y de su uso a lo largo de las últimas décadas. Además, es
importante determinar la situación actual de los elementos ecológicos, geomorfológicos y de presión
humana que actúan sobre el sistema. Esto permitirá diseñar las futuras fases de actuación. El diseño
se realizará en función del uso posterior que vaya a recibir la zona restaurada.

Técnicas de ingeniería convencional

Son actuaciones en las que la reconstrucción de la topografía dunar se realiza mediante el aporte de
arena con maquinaria.

La fuente de arena puede estar o no en el sistema dunar objeto de la actuación. Suele emplearse
este tipo de técnicas cuando el objetivo de la reconstrucción dunar es la protección de algún
elemento de gran valor económico, social, cultural (como, por ejemplo, los yacimientos
arqueológicos), e incluso natural, situados en primera línea de costa.
Generalmente, son actuaciones realizadas en plazos de tiempos breves (días-semanas), limitadas
en el espacio y que requieren una elevada inversión económica. El impacto ambiental es elevado en
aquellas zonas que actúan como fuente de arena y en los emplazamientos de las nuevas dunas.

Técnicas ecológicas

Son actuaciones en las que, una vez eliminado o reducido a rangos compatibles el factor o factores
que han conducido a la degradación dunar, se procede a la instalación de sistemas de “ayuda” que
permitan su reconstrucción mediante procesos naturales. Es una acción relativamente lenta, cuyos
resultados se obtienen a medio plazo.

Son actuaciones muy poco costosas, en las que la inversión realizada es muy pequeña en relación
con los resultados que se obtienen, que, en general, son buenos. No obstante, puesto que se trata
de obras en las que es la propia naturaleza la que realiza la mayor parte del esfuerzo (el viento
transporta la arena, la vegetación se establece y extiende su cobertura, etc.), los resultados no se
aprecian al terminar la actuación sino al cabo de cierto tiempo, dependiendo de varios factores, entre
ellos, la climatología, la dinámica sedimentaria, la efectividad de la protección, etc.
Los efectos negativos de la frecuentación humana se resuelven mediante sistemas de protección,
siendo los más empleados pasarelas peatonales de acceso a las playas, cerramientos en
ecosistemas dunares y eliminación del tráfico rodado sobre las dunas.

La información al ciudadano cumple un importante papel en las actuaciones de protección y

recuperación de espacios litorales, pues éste no suele tener conocimiento del daño que está
produciendo, siendo un caso muy claro el perjuicio que produce el pisoteo sobre la duna. Por otro
lado, la divulgación de las actuaciones llevadas a cabo consigue una comprensión y aceptación de
los trabajos que se realizan, haciéndole al final cómplice y colaborador, lo que aumenta
considerablemente el éxito de la restauración.
REFERENCIAS

https://hmong.es/wiki/Sand_dune_stabilization https://hmong.es/wiki/Sand_dune_stabilization

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