El plan de parto consiste en una manifestación por escrito acerca de las preferencias de la

embarazada/familia, a tener en cuenta para el momento del parto (deseos, preferencias, miedos,
dudas, forma de afrontarlo, necesidades concretas, etc).

Estas expresiones deben ser flexibles ya que deben adaptarse a las circunstancias cambiantes del
proceso, y realistas en base a las posibilidades del entorno al que corresponda. Se trata de un
documento dinámico que puede modificarse hasta el mismo día del parto.

Es una buena instancia para reflexionar sobre el proceso, comunicar preferencias, orientar a los
profesionales en base a la atención deseada, etc. El momento quizá más apropiado para empezar a
pensar en el plan de parto es en torno a las semanas 28 y 32. (1)

Puede incluir información del tipo: “Contar con la posibilidad de poner música suave, luz tenue y
llevar al sanatorio algunas pertenencias que te hagan sentir cómoda y te sientas en tu hogar (fotos,
adorno, manta, etc), crear tu espacio. Poder contar con métodos de alivio del dolor no
farmacológicos, como moverte libremente, utilizar la pelota de pilates, ducha de agua tibia, masajes,
etc. Que se te informe y se solicite tu consentimiento informado ante cualquier procedimiento a
realizarse a ti o a tu bebé. Poder tener contacto piel con piel con tu bebé al momento del nacimiento
y la posibilidad de amamantarlo en ese momento. Que se realice el corte oportuno del cordón
umbilical.” (2)

Cada plan de parto es particular y no hay un formato rígido a seguir. Cada mujer/familia puede
decidir lo que desean.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

(1) Recuperado de: https://www.natalben.com/parto/que-es-un-plan-de-parto-y-para-que-

sirve-plan-de-parto
(2) Recuperado de: https://nacerhoy.uy/plan-de-parto-o-plan-de-nacimiento/