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En ingeniería se suele decir que los buenos diseños son eternos. Esta máxima se puede aplicar
perfectamente a un elemento tan cotidiano y de un uso mundial como los bolígrafos Bic.
Desde su creación en 1949 apenas han sufrido modificaciones y, las que se han realizado, han sido
más un tema de seguridad que de diseño.
Marcel Bich, nacionalizado francés pero de origen italiano, disponía en el norte de París de un pequeño
taller dedicado a los artículos de escritura. En él, trabajaba para las marcas de escritura de la época,
arreglando y rellenando de tinta las estilográficas que se utilizaban por entonces.
Él ya tenía conocimiento de unos bolígrafos creados por el inventor húngaro-argentino Laszlo Biro. Bajo
el amparo de la société PPA, compró la patente y perfeccionó el bolígrafo, creando un cuerpo
transparente y con aristas de plástico, perfeccionó las piezas de metal de la punta y obtuvo, tras varias
pruebas, el espesor exacto de tinta para que esta fluyera con facilidad a través de la bola de la punta.
Se trataba de un producto sin fallos, muy económico y de un solo uso. Lo que hizo que tuviera una
gran acogida por parte de la sociedad y reportó grandes y, casi inmediatos, beneficios a la empresa de
Bich y Buffard.
Siendo ya un éxito en suelo francés y, ante una más que probable expansión a diferentes mercados
internacionales, en 1953 se recortó el nombre comercial de Bich a Bic.
El Bic Cristal es el bolígrafo más vendido en todo el mundo, y en 2004 se alcanzó la cifra de cien mil
millones de bolígrafos vendidos.
Bic lanzó en el mercado otros productos bajo la misma premisa de artículo de un solo uso y a bajo
coste, como las cuchillas de afeitar desechables o los mecheros.
Se dice que con la tinta de un bolígrafo Bic se podría escribir ininterrumpidamente durante tres
kilómetros
Bic en la actualidad
Además del original Bic cristal, la marca tiene en el mercado diferentes artículos que siguen la idea y el
lema del producto original: “para todos y en cualquier lugar”. Bic punta fina, bolígrafos de 4 colores,
bolígrafos de gel, lápices y pegamentos ya forman parte de la familia Bic
Los has utilizado mil veces pero seguramente no conocías su historia ¿Qué te parece?