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ELECCIÓN O NOMBRAMIENTO, REGISTRO, REMOCIÓN Y CONTRATACIÓN

DEL REVISOR FISCAL PRINCIPAL Y SUPLENTE

GRUPO - 03

DOCENTE

VALLEDUPAR

2023
INTRODUCCIÓN

La institución de la Revisoría fiscal es un apoyo de vital importancia para las entidades que

ejercen la inspección, vigilancia y/o control de las sociedades mercantiles; sus funciones le han

sido asignadas por mandato legal, tales como las de velar por el cumplimiento de las leyes y

acuerdos entre los particulares (Estatutos Sociales y decisiones de los Órganos de

Administración), y dar fe pública, lo cual significa entre otros, que su atestación y firma hará

presumir legalmente, salvo prueba en contrario, que el acto respectivo se ajusta a los requisitos

legales, lo mismo que los estatutarios. Tratándose de balances, se presumirá además que los

saldos han sido tomados fielmente de los libros y reflejan en forma razonable la correspondiente

situación financiera en la fecha del balance (artículo 10º de la ley 43 de 1990)

Basándose en la importancia de la revisoría fiscal y en la labor que ejercen quienes pertenecen a

este campo, el presente trabajo pretende informar sobre la forma en que las empresas deben

adoptar un revisor fiscal principal y el suplente, basándose en la normativa que sobre estos recae

en el momento de su elección, registro, contratación y remoción.


DESIGNACIÓN DEL REVISOR FISCAL PRINCIPAL Y SUPLENTE

Elección revisor fiscal principal

A. Por disposición del artículo 204 del Código de Comercio “La elección de Revisor Fiscal

se hará por la mayoría absoluta de la Asamblea o de la Junta de Socios. En las

comanditarias por acciones, el Revisor Fiscal será elegido por la mayoría de votos de los

comanditarios. En las sucursales de sociedades extranjeras lo designará el órgano

competente de acuerdo con los estatutos.”

B. Es importante tener en cuenta que la designación de Revisor Fiscal en las sucursales de

sociedades extranjeras debe recaer únicamente sobre persona natural con residencia

permanente en Colombia al tenor de lo exigido por el numeral 6 del artículo 472 del

Código de Comercio.

C. En virtud de lo dispuesto en el numeral 2 del artículo 79 del Estatuto Orgánico del

Sistema Financiero” En todas las entidades con participación oficial la designación del

Revisor Fiscal estará a cargo de la asamblea general de accionistas. En las entidades que

sean o estén sometidas al régimen de empresa industrial y comercial del Estado, en que

las funciones de la asamblea general de accionistas las cumpla la junta o el consejo

directivo, la designación del Revisor corresponderá al Gobierno Nacional, a través del

presidente de la República y el ministro de Hacienda y Crédito Público”.

Suplente del revisor fiscal

A. No existe en el Código de Comercio norma que específicamente obligue a las sociedades

a tener Suplente del Revisor Fiscal. Existen algunas disposiciones que hacen referencia a
los suplentes en forma genérica y por interpretación se deduce que la figura existe y así lo

han entendido las superintendencias y las sociedades en cuyos estatutos si es clara la

obligación de tener suplente del Revisor Fiscal en la mayoría de los casos (Código de

Comercio arts. 164, 187 núm. 4, 215, 349, 358 núm. 5, 420 núm. 4).

B. El artículo 7 de la Ley 73 de 1935 norma imperativa que perdió su vigencia, disponía: “el

Revisor tendrá un suplente que lo reemplazará en sus faltas absolutas, temporales o

accidentales”.

C. La elección del Revisor Fiscal Suplente tendrá que hacerse de la misma forma y con los

mismos requisitos que la elección del Revisor Fiscal Principal, es decir dando aplicación a

los artículos antes citados y por lo tanto tendrá que ser designado por la Asamblea

General o la Junta de Socios.

CONCEPTO REVISOR FISCAL PRINCIPAL Y SUPLENTE SEGÚN EL CTCP

El Consejo Técnico de la Contaduría Pública aprobó el siguiente concepto:

1. Es necesario que las sociedades que están obligadas a tener Revisor Fiscal, tengan Revisor

Fiscal Suplente, en este evento puede darse alguna de las siguientes combinaciones:

a. Principal y Suplente(s) sean personas naturales.

b. La Principal persona natural y el Suplente persona jurídica.

c. La Principal persona jurídica y el Suplente persona natural.

d. Principal y Suplente sean personas jurídicas distintas.

2. En todo caso, cuando el Revisor Fiscal sea persona jurídica ésta deberá nombrar a un Contador

Público para desempeñar PERSONALMENTE el cargo en los términos del artículo 215 del
Código de Comercio y 4 de la Ley 43 de 1990, el cual se informará a la Asamblea General o a la

Junta de Socios en la reunión en que se designe al Revisor Fiscal del período correspondiente.

3. Cuando el Revisor Fiscal Suplente sea una persona jurídica debe tenerse en cuenta:

A. La misma persona jurídica no puede ser Revisor Fiscal Principal y Revisor Fiscal

Suplente al mismo tiempo, por cuanto se desvirtuará la naturaleza de la suplencia porque

habiendo vacancia en la principal habría vacancia en la suplencia automáticamente.

B. La persona jurídica que sea designada Revisor Fiscal Suplente(s) deberá dar, por analogía,

aplicación a lo dispuesto en el artículo 215 del Código de Comercio, esto es nombrar a un

Contador Público para que desempeñe el cargo en las faltas temporales o definitivas del

Revisor Fiscal.

Así las cosas, es viable que la asamblea elija a una firma para que asuma el cargo de revisor

Fiscal principal y a otra firma o persona natural para revisor fiscal suplente.

Inscripción del revisor fiscal principal y suplente en la cámara de comercio.

Una vez la asamblea aprueba el nombramiento del revisor fiscal, ese nombramiento debe

registrarse en la cámara de comercio conforme se aprecia en el artículo 163 del código de

comercio:

«La designación o revocación de los administradores o de los revisores fiscales previstas en la ley

o en el contrato social no se considerará como reforma, sino como desarrollo o ejecución del

contrato, y no estará sujeta sino a simple registro en la cámara de comercio, mediante copias del

acta o acuerdo en que conste la designación o la revocación.


Las cámaras se abstendrán, no obstante, de hacer la inscripción de la designación o revocación

cuando no se hayan observado respecto de las mismas las prescripciones de la ley o del contrato.

La revocación o reemplazo de los funcionarios a que se refiere este artículo se hará con el

quórum y la mayoría de votos prescritos en la ley o en el contrato para su designación.»

Remoción del revisor fiscal

En todo caso, el nombramiento y remoción del revisor fiscal deberá constar por escrito, por

medio del acta de la junta de socios, puesto que es una función que le compete exclusivamente al

órgano social de cada sociedad. Si llegase a renunciar el revisor fiscal o a ser removido de su

cargo, le corresponderá a la asamblea general de accionistas o en su defecto a la junta de socios

reunirse de forma extraordinaria, para realizar la elección de un nuevo revisor fiscal, o para

aquellas sociedades que no se encuentran obligadas por ley a tener revisor fiscal, deberán elevar

la petición ante el registro mercantil del domicilio de la sociedad, quien se encargara de eliminar

el cargo o en su defecto de remover al antiguo revisor fiscal del registro de la sociedad.

Como se señaló anteriormente, esta decisión deberá constar por acta, bien sea de nombramiento

de nuevo cargo o en su defecto de la decisión de los socios de eliminar o remover del cargo al

revisor fiscal si este no llegase a renunciar, entonces, se deberá notificar ante el registro mercantil

de esta decisión adoptada, de no hacerlo en un término de 30 días, posterior a la salida del revisor

fiscal, este tendrá la posibilidad de efectuar el respectivo registro en Cámara de Comercio, en

donde se entenderá que ya no se encuentra en la obligación de seguir ejerciendo sus funciones o

alguna responsabilidad directa con la sociedad.

Lo que debe analizarse son las razones por las cuales es removido, de no existir justa causa se

entendería que quien lo remueve deberá pagar las indemnizaciones correspondientes que se
incluyen en el acuerdo contractual entre la copropiedad y el revisor fiscal, y otras

responsabilidades administrativas y civiles que se deriven de ello.

Contratación del revisor fiscal

En lo que concierne a la contratación del revisor fiscal; el Min trabajo establece que en la ley

laboral no existe restricción ni prohibición alguna para la contratación del revisor fiscal mediante

un contrato de trabajo, razón por la cual puede efectuarse su contratación por el modelo de

contrato de trabajo que el empleador considere pertinente, o por la figura civil del contrato de

prestación de servicios.

Y en lo concerniente a la función que desempeña el Revisor Fiscal, tenemos:

• Dictamina los estados financieros. Actividad que realiza a través de la sistemática revisión

de todos y de cada uno de los componentes que configuran la información financiera.

• Rendir informes oportunos a las entidades públicas que hacen control sobre la empresa

privada en la cual ejerza la Revisoría Fiscal.

• Dar el visto bueno o autorizar con su correspondiente firma los balances, anexando el

correspondiente dictamen.

Fiscalizar que se lleven de forma correcta:

✔ La contabilidad.

✔ Las actas de las reuniones de las asambleas, juntas de socios y juntas directivas.

✔ Los documentos de la correspondencia y los comprobantes de cuentas.

✔ Inspeccionar cuando lo considere necesario la contabilidad de la empresa.


Estas funciones que son responsabilidad exclusiva del Revisor Fiscal, las ejerce tanto en las

empresas de carácter privado como en las de naturaleza pública.

En síntesis, la contratación de un Revisor Fiscal siempre estará acorde a los estatutos de la

sociedad comercial que lo contrate y en concordancia con el Artículo 212 del Código de

Comercio incurrirá en delito penal si aprueba inexactitudes en el ejercicio de su función de velar

por el buen desempeño de la organización en la cual trabaje.

Así mismo el Artículo 213 del mismo Código lo faculta en el sentido de poder intervenir en la

revisión de los documentos que el considere deba de revisar con la finalidad de poder autorizar la

información que presenta la empresa ante sus superiores como a las autoridades competentes que

así lo ameriten, de donde se deriva su carácter de independencia y de no subordinado.

La única excepción existente frente a lo anterior, radica en el hecho de que dada la no

obligatoriedad de una empresa a tener revisoría fiscal, este podrá tener una relación de

subordinación frente a sus contratantes y de igual manera su independencia se verá limitada por

el tipo de relación que establezca en el contrato de trabajo.


CONCLUSIÓN

En cuanto a los elementos normativos que regulan y que están vinculados con la responsabilidad

social, se pudo evidenciar que el revisor fiscal debe ser un profesional responsable, con principios

éticos que aporte prestigio a la profesión, siendo integral y aportando a la evolución y

sostenibilidad de las empresas, cumpliendo a cabalidad con las normas que regulan la profesión.

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