Está en la página 1de 2

Flúor

Desde algunos años atrás la odontología ha asumido un rol preventivo mas activo que en el
pasado, esto es gracias a una nueva filosofía llamada odontología minimamente invasiva, donde
el tratamiento no invasivo, se basa en un cambio lógico en el ambiente bucal que favorecerá la
remineralización, mediante agentes que lo permitan. Entre estos agentes de prevención, se
encuentra el uso del flúor, la cual es la medida más difundida en los últimos años y presenta una
mayor repercusión en la prevención de la caries dental.
Teniendo en cuenta lo anterior el flúor se encuentra en la naturaleza en un estado único de
oxidación, el cual lo encontramos usualmente presente en los tejidos duros como las piezas
dentarias del ser humano, debido a su afinidad con el calcio. Por otro lado los fluoruros van a
aumentar la resistencia del esmalte y a la vez reprimir el proceso carioso; tienen como acción
evitar considerablemente la desmineralización y de igual manera estimular la remineralización
del esmalte modificando la hidroxiapatita del esmalte en fluorapatita, siendo este más resistente a
la desmineralización. Sin embargo, las propiedades del flúor se les atribuyen a 3 mecanismos de
acción:
1. Favorece la remineralización, incorporándose a los cristales de fluorapatita, generando
una superficie más resistente.
2. Inhibe la desmineralización, ingresando a la estructura de los dientes simultáneamente
con la pérdida de minerales del esmalte durante el ataque ácido.
3. Inhibe la función bacteriana, ya que tiene acción sobre el crecimiento del biofilm
bacteriano como agente bactericida
Teniendo en cuenta la importancia del fluor como mecanismo de prevención ante la caries
dental, este posee diversas vias de administración o topificacion como lo son; por medio de
Vía sistémica, el cual, incluye el agua fluorada que contienen aproximadamente 0.7 -1.2 mg,
otros tipo de alimentos, el cual el fluor es absorbido rápidamente en la mucosa del intestino
delgado y del estómago,. Una vez absorbido, el flúor pasa a la sangre y se distribuye en los
tejidos, depositándose preferentemente en los tejidos duros;. Por otro lado también tenemos
la via de tipificación las cuales son la primera vía de prevención en la odontología, estas
actúan principalmente en el esmalte recién erupcionado en las zonas más porosas, menos
estructuradas, en la lesión blanca por caries, así como en el proceso carioso avanzado y en
dientes con diferentes grados de fluorosis. entre estas presentaciones tenemos:
1. Pastas fluoradas: Son uno de los vehículos de administración de fluoruos tópicos más
importantes en la prevención de la caries dental. Para su adecuada utilización debemos
conocer las partes por millón (ppm) que contiene y la cantidad a aplicar en el cepillo en
cada uso según la edad del paciente y los factores de riesgo de caries. Las últimas
recomendaciones de la AADP (American of Pediatric Dentistry) hablan del uso de 1000
ppm de fluoruros con una cantidad raspada para los menores de dos años. De dos a seis
años entre 1000-1450 ppm y una cantidad similar a una lenteja, y para mas de seis años
1450 ppm y un centímetro de cantidad. Siempre con la supervisión de un adulto.
2. Geles: Flúor fosfato acidulado (APF) 1’23%, que equivale a 12.300ppm o 12’3mg/ml de
gel. Al entrar en contacto con el diente disuelve parte mínima de la capa del esmalte y
hace que el calcio se una al flúor formando fluoruro de calcio amorfo, más resistente al
ataque acido. También esta el fluoruro de sodio (NaF) que presenta una concentración del
0,9% que supone una proporción de flúor de 9.040 ppm y es una alternativa al APF ya
que no altera las restauración de composite ni las coronas/carillas de porcelana. Se aplica
con cubetas desechable usando 2 ml como máximo por cubeta durante 1-4 minutos Los
geles están totalmente contraindicados en niños menores de seis años. Puesto que la
deglución de 5ml supone un riesgo potencial de intoxicación. Para estos casos es más
aconsejable el uso de barnices.
3. Barniz: Prolongan el tiempo de contacto con el diente. Son fáciles de aplicar y el riesgo
de deglución es bajo. Los barnices más usados son los que contienen fluoruro de sodio
(NaF) al 5% que equivale a 22.600 ppm o 22’6mg/ml, y difluorosilano al 0,7% con 7000
ppm de fluor. Se aplican con pincel en muy pequeña cantidad, entre 0’3 y0’5 ml, por lo
que el riesgo de intoxicación es nulo con estas cantidades.

Asi mismo, es importante destacar que El flúor es un componente esencial en la prevención


primaria de la caries dental, sin embargo, el fluoruro, por encima de una concentración umbral,
es tóxico; ya que, el consumo excesivo de fluoruros durante un período prolongado en diversas
formas tiene como resultado fluorosis dental, el cual, que conduce a múltiples cambios en el
esmalte en desarrollo alterando su estructura. En los casos leves se observan áreas opacas de
color blanco calcáreo, en los casos moderados las manchas pueden ser parduscas y en los casos
severos el esmalte es frágil lo que puede llevar a fractura y pérdida de tejido. Por ello, es
indispensable determinar las necesidades de cada individuo, e identificar y conocer las diferentes
presentaciones del flúor, de esta forma evitar las exposiciones toxicas.

Bibliografía
Mendo Hernandez, C. Nivel de conocimiento sobre el uso del flúor en odontología en cirujanos
dentistas del distrito de La Esperanza, 2018.
Cántaro, N. Y. M., Pereyra, Y. M., Catacora, L. A. C., Torres, E. R. M., Laura, A. A., & Nina, M.
S. C. (2021). Flúor y fluorosis dental. Revista Odontológica Basadrina, 5(1), 75-83.
Martínez Cántaro, N. Y. ., Machaca Pereyra, Y., Cervantes Catacora, L. A. ., Mamani Torres, E.
R. ., Laura, A. A., & Chambillo Nina, M. S. . (2021). Flúor y fluorosis dental. Revista
Odontológica Basadrina, 5(1), 75–83. https://doi.org/10.33326/26644649.2021.5.1.1090

También podría gustarte