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LIBER PORTA LUCIS

Sub Figura X

A∴A∴
Publicación de Clase A

Este libro es una narración del envío del Maestro por la A.'. A.'. y una
explicación de su misión.
1. Contemplo una pequeña esfera oscura que gira en un abismo de
espacio infinito. Es pequeña, en medio de una miríada de grandes
esferas; es oscura, en medio de una miríada de esferas luminosas.

2. Yo, que comprendo en mí mismo lo grande y lo pequeño, lo que brilla y


lo que está oscuro, he mitigado el brillo de mi indecible esplendor,
exhalando a V.V.V.V.V. como un rayo de mi luz, como un mensajero a la
pequeña esfera oscura.

3. Entonces V.V.V.V.V. tomó la palabra y dijo:

4. Hombres y mujeres de la Tierra, he venido a vosotros desde los Tiempos


Inmemoriales, desde el Espacio que está más allá de vuestra visión; y os
traigo estas palabras.

5. Pero ellos no le escucharon, porque no estaban preparados para


recibirlas.
6. Pero algunos hombres escucharon y comprendieron, y es por ellos que
este Conocimiento será dado a conocer.

7. Por lo tanto, el más pequeño de ellos, el siervo de todos ellos, escribe


este libro.

8. El escribe para aquellos que están preparados. Así se conoce si uno


está preparado, si está dotado de determinadas facultades, si está
cualificado, por su nacimiento, por su riqueza, por su inteligencia o por
algún otro signo manifiesto. Y los que sirven al maestro han de juzgarlos
por su discernimiento.

9. Este Conocimiento no es para todos los hombres; pocos, en verdad, son


los llamados, pero de estos menos son los escogidos.

10. Esta es la naturaleza de la Obra.

11. En primer lugar, sobre esta tierra hay muchas y diferentes condiciones
de vida. En todas ellas hay alguna semilla de dolor. ¿Quién puede
escapar a la enfermedad, la vejez y la muerte?

12. Hemos venido a salvar a nuestros prójimos de estas cosas. Porque hay
una vida intensa, de conocimiento y bienaventuranza absoluta, que
todos ellos desconocen.

13. Esta vida la alcanzamos aquí y ahora. Los adeptos, los siervos de
V.V.V.V.V. la han alcanzado.

14. Es imposible describiros los esplendores de aquello que han alcanzado.


Poco a poco, conforme vuestros ojos se vayan abriendo, os
desvelaremos la gloria inefable del Camino de los Adeptos, y su meta sin
nombre.

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15. Así como un hombre, que sube una montaña escarpada, se pierde a la
vista de sus amigos del valle, así es para el adepto. Ellos dirán: Se ha
perdido entre las nubes. Pero él se regocijará en la luz del sol que está
por encima de ellos, y ascenderá a las nieves eternas.

16. O como un estudiante que aprende alguna lengua secreta de los


antiguos, sus amigos dirán: «¡Miren! Pretende leer este libro. Pero no
hay quien lo entienda: es absurdo.» Más él disfruta con la Odisea,
mientras que ellos leen libros vanos y vulgares.

17. Te llevaremos a la Verdad Absoluta, a la Luz Absoluta, a la


Bienaventuranza Absoluta.

18. Muchos adeptos a través de los tiempos han intentado hacer esto; pero
sus palabras han sido tergiversadas por sus sucesores, y una y otra vez
el Velo ha vuelto a caer sobre el Santo de los Santos.

19. A ti que todavía vagas en la Corte del Profano, aún no podemos


revelártelo todo; pero comprenderás fácilmente que las religiones del
mundo no son más que símbolos y velos de la Verdad Absoluta. Así
también las filosofías. Para el adepto, que ve todas estas cosas desde
arriba, le da igual escoger entre Buda y Mahoma, entre el Ateísmo y el
Teísmo.

20. La multiplicidad cambia y pasa; el uno permanece. Como la madera, el


carbón y el hierro, se queman todos juntos en una gran llama, cuando el
horno está muy caliente; así ocurre en el alambique de esta alquimia
espiritual, si el Zelator sopla suficientemente sobre su horno todos los
sistemas de la tierra se consumen en un Conocimiento.

21. Sin embargo, así como no se puede hacer fuego sólo con hierro, al
principio un buscador puede seguir un sistema, y otro buscador puede
seguir otro.

22. Por consiguiente, nosotros, que estamos sin las cadenas de la


ignorancia, miramos atentamente en el corazón del buscador y le
conducimos por el camino que más le conviene a su naturaleza, hasta el
fin último de todas las cosas, la realización suprema, la Vida que mora
en la Luz, sí, la Vida que mora en la Luz.

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