Introducción:

Contexto, Lemuel y los consejos de su madre.

Este versículo viene de las lecciones de una madre sabia hacia su joven hijo, a este punto de la
lección, él sabe la clase de mujer que debe buscar como compañera de toda una vida, y nosotras
hemos tomado su modelo como normas para nuestras vidas. Ahora nuestra madre preocupada
por el futuro de su hijo y que sabe qué es lo más importante en su vida, habla acerca de lo que ES
y qué NO ES hermoso en una mujer.

Proposición:

¿Quiénes de aquí no tiene curiosidad por saber qué es hermoso a los ojos de Dios?

¡¿A qué se le llama verdaderamente hermoso?!

Cuerpo:

Esto conoceremos a través del consejo de una madre a la vida de su joven hijo para que considere
lo que en realidad y verdaderamente es hermoso en una mujer (tomando como parámetro los
ojos de Dios). Nos hace reconocer, nos da las razones, nos hace ver su recompensa y sus
retribuciones.

 ¡Reconoce! ¿CUÁL SI? ¿CUÁL NO?

Proverbios 31:30

Vemos un contraste entre la mujer de la que debe de tener cuidado para no caer, y de la que
tiene que buscar para hallar.

Hemos escuchado frases como: ¡No todo lo que brilla es oro! ¡No todo es lo que parece! ¡Lo
barato cuesta caro!

Ella no quiere que se equivoque y tome una mala decisión cayendo en una mentira.

Nosotras no nos equivoquemos en nuestra búsqueda de la verdadera belleza teniendo una idea
equivocada de la misma…

 Razones: ¿PORQUÉ?

NO es HERMOSO a los ojos de DIOS

Gracia: belleza de una personalidad, sus actos o manera de hablar.

Hermoso-hermosura: tiempo en que todo está en su mejor y más encantadora apariencia.

Porque su gracia, es decir, la belleza de su personalidad sus actos o su manera de hablar son
ENGAÑOSOS. La gracia es atrayente y fascinante pero no puede jamás producir gozo, ni nos
resuelve la vida. (Pr. 7:21; 21:6)

Y su hermosura, su belleza superficial es pasajera y se desvanece, no es nada más que vapor.

Estas son engañosas y hasta peligrosas. A pesar que todos aprecian la belleza de las formas, la
belleza física es transitoria y pasajera.

SI es HERMOSO a los ojos de DIOS

Temor: Cuando se usa en relación a una persona *Yare sugiere la frase de “temor reverente”, es
más que una simple actitud, es la actitud con que una persona reconoce el poder y la condición de
la persona a la que se reverencia y se le rinde debido respeto. Con este significado, la palabra
puede implicar sumisión en una debida relación ética con Dios. “el ángel del Señor le dijo a
Abraham: “ya conozco que temes a Dios, pues no me rehusaste a tu hijo, tu único”. Génesis 22: 12

Ya hemos mirado sus manos y escuchado su mensaje, pero ahora vamos a echar un vistazo en su
interior. Para ver que es lo que la hace funcionar. ¿De dónde proviene su amor? ¿Cuál es la fuente
de su generosidad… misericordia… su inagotable energía? ¿Qué la guía, le da propósito y define
sus objetivos? ¿Qué le permite ser una roca sólida? ¿Dónde encuentra la motivación profunda
para dedicarse a tales nobles esfuerzos durante toda una vida? ¿Qué la hace tan hermosa a los
ojos de Dios?

¡La Clave de lo que ES y HACE es Dios mismo!

¡Porque la mujer hermosa de Dios lo AMA, ella TEME al Señor!

¡Su fuente es el Señor, su tiempo con él, su amor por él, su obediencia al plan y propósito de
Dios para su vida!

AMAR: Marcos 12:30; Juan 14:21, 15:10; 1 Corintios 13. La mujer hermosa de Dios disfruta de una
preciosa relación personal con Dios creciente a través de su Hijo, Jesucristo.

(PARA ESTO DEBEMOS)

PROGRAMAR TIEMPO: Salmos 27:4; 29:2. ¿Cómo podemos alimentar nuestra entrega al Señor y
ser así más hermosas a sus ojos? Concentrémonos más en nuestro carácter interior que en
nuestra apariencia externa. En vez de preocuparnos por la ropa, el peinado, o cómo arreglar la
casa, debemos preocuparnos por expresar el carácter santo que nos imparte Dios, mientras
permanecemos en su presencia.
Así es que ella está continuamente en su presencia, es decir, cada día de su vida. Porque para
realizar la tarea a la cual fue llamada necesita buscar al Señor.

(ACEPTEMOS EL…)

PLAN DE DIOS: Proverbios 31. Debemos rehuir a las pasajeras vanidades y perseguir en cambio la
belleza eterna del Señor. Esos son los intereses propios de la mujer que teme al Señor. Ese temor
es el que santifica cada parte de nuestras vidas y muestra la majestad interior de nuestro Dios que
se encuentra en el centro mismo de nuestra persona. Ella sabe que al Señor le complace que le
tomen en serio y obedezcan con seriedad a su Palabra. Por eso toma tiempo con la Palabra de
Dios dispuesta a obedecer. Una mujer que teme al Señor es alguien cuya entrega espiritual a Dios
es completa.

¿Qué diferencia hace todo esto? Esta mujer busca agradar a Dios, no a los ojos de los hombres.
Por tano no le es ni será tropiezo la ingratitud, el desgaste, las murmuraciones, el rechazo, las
ideas y o pensamientos de este mundo, sus ojos están atentos a los de su Dios quién la observa
cada día de su vida, con el objetivo de agradarle en todo momento. Es decir que, nuestro amor
supremo por Dios le da energía a nuestra conducta y carácter y nuestro amor por los demás.
Nuestra fe en Dios genera, anima y adorna la belleza de nuestra estatura moral y la utilidad de
nuestras vidas.

 Su Recompensa

Proverbios 31:30

Un corazón rebelde al plan y propósito de Dios jamás encontrará satisfacción y felicidad, sino
insatisfacción y tristeza, porque la desobediencia trae vergüenza y dolor (por el pecado y sus
consecuencias).

Los adornos de alabanza de Dios están reservados para la mujer que cree a Dios y se sujeta a su
voluntad. (Debemos buscar la alabanza de Dios, no la de los hombres).

Por los frutos de tomar las mejores decisiones. Porque a través de su vida reconocemos que no
hay nada mejor que obedecer al Señor. ¡Sus decisiones en obediencia al Señor nunca la harán
avergonzarse o equivocarse, sino tener una vida segura y fructífera! La bendición de su Dios está
sobre su vida…

 ¡Su Retribución, su paga!

Proverbios 31:31
Para otras despierta celos, llamándola a ella como una simple ama de casa, apocada, esclava,
diciendo que es una lástima tanto desperdicio de talento y capacidad en solo su casa para con los
suyos. Éste pensamiento no podría estar más lejos que el de Dios.

El fruto de sus manos, recibe el resultado de todo su trabajo. (No nos cansemos de hacer el bien
porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos) ¡Denle el crédito por sus logros! ¡Denle todo lo
que ella ha logrado! ¡Denle todo aquello por lo que ha trabajado con tanta diligencia! ¡Denle el
fruto de sus manos, la cosecha de toda una vida de esfuerzo con amor! ¡Denle la ganancia que ella
merece, los bienes por los que ha trabajado, la reputación que ha establecido, el matrimonio que
ha alimentado, el hogar que ha construido, la vida de familia que ha cultivado, el futuro por el cual
se ha esforzado! Una Cosecha de alabanzas.

Alabanza de sus hechos, la alaban por sus obras que a su vez también la alaban a ella (si hubiera
silencio, y no se pronunciare palabras de alabanzas, la mujer que es hermosa a los ojos de Dios
recibirá el honor que merece, sus obras son su monumento a su nombre)… esta mujer es
reconocida por sus esfuerzos, su generosidad, que parecían pasar desapercibidos. Pero vemos que
sus obras son públicas, reconocidas y aclamadas. ¡Su entrega al ministerio y su apoyo a su esposo
cumpliendo su rol son necesarios y dignos de alabar por las personas fuera del hogar por lo cual
son grandemente bendecidos!

Conclusión:

¿Qué belleza escoger? ¿La que es hermosa a los ojos de Dios?

¡¿Creeré a la verdad o seguiré una mentira?!

Decisión:

Decidamos agradar a sus ojos en obediencia total a su voluntad y plan para con nuestras vidas.
¡¡¡Permitamos que el Señor embellezca nuestra alma y todo nuestro ser por completo!!!