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Cambio climático e instrumentos de política pública

Introducción

El cambio climático y los efectos que se han evidenciado en la actualidad


han sido una fuente de debate entre diferentes actores, entre académicos
(investigadores científicos de todas las áreas de la ciencia) preocupados por
los efectos que trae consigo en el desarrollo de la vida humana; entre
naciones que buscan revertir y controlar tales efectos mediante políticas
públicas; y entre diferentes empresas mediante el uso de estrategias
productivas para mitigar tales efectos (cabe mencionar que la industria o
empresas han participado en menor medida, aun cuando son parte
fundamental para revertir tales efectos). Puesto que, los efectos son cada
vez más agresivos con el planeta y afectando directamente a la calidad de
vida del ser humano.

El cambio climático no es un tema nuevo que evidencia los efectos drásticos


en el planeta, la primera vez que se habla de este tema es en 1968 en París
Francia con la Conferencia de la Biosfera en la que se habló la necesidad
de compatibilizar “utilizar y conservar los recursos”, tiempo después se
habló en la
Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente
Humano que se llevó acabó en 1972 en Estocolmo (Noruega), esta
conferencia fue resultado de la percepción social sobre los importantes
cambios en el clima del planeta a consecuencia del crecimiento económico,
ya que, en siglo XX, las sociedades del mundo desarrollado empezó a
percibir el agotamiento de los recursos naturales principalmente los de
origen fósil, asimismo, la sobreexplotación de los recursos naturales
(Labandeira, 2007).
A partir de la importancia que ha tenido el cambio climático en las últimas
décadas, en el presente ensayo se abordan las perspectivas que tiene la
academia y los órganos gubernamentales como la CEPAL en torno al
cambio climático.

Desarrollo

La actividad humana en el mundo actual contribuye al cambio climático, por


ejemplo, el desarrollo de las ciudades o bien el exceso consumo de
productos no renovables que con el paso del tiempo han provocado serios
problemas al planeta. Tal es el caso de la energía y la gasolina, su consumo
genera de la alguna manera un conjunto de externalidades negativas como
la contaminación atmosférica (CEPAL, 2016).

Desde la academia, García (2003) hace hincapié en el abordaje sobre la


economía ecológica, la cual afirma que la producción de bienes y servicios
realizados con alta tecnología y recursos no renovables tendrían que
replantearse para que su producción sea de carácter sustentable, con el fin
de disminuir los efectos en el cambio climático evidente con mayor
agresividad hoy en día. Por ejemplo, si es predominante el uso de la
gasolina para el transporte de las personas, ahora, tendría que replantearse
la idea de producir con electricidad o bien alguno producto orgánico como el
nopal o algunos cereales que son de utilidad para la producción de
biocombustibles, que son más amigables con el planeta.

La autora resalta que desde la economía ecológica se rescata aspectos de


la producción a partir de los recursos naturales disponibles y de su escasez,
dado que eso se ponen en tela de juicio para el ser humano, ya que su
calidad de vida está determinada con base a la existencia de un planeta
sano. Los recursos naturales son escasos y la producción de algunos
productos es altamente tóxica para el planeta.
En este sentido crítico en el siguiente párrafo se aborda la relación entre
crecimiento económico y el deterioro del medio ambiente en el marco de la
hipótesis de la curva ambiental de Kuznets.

La curva ambiental de Kuznets establece que “la relación entre el nivel de


ingreso per cápita y el deterioro de la calidad del medio ambiente se
representa por una curva con forma de U invertida indicando que los bajos
niveles de ingresos están correlacionados con el deterioro en el medio
ambiente, pero después de un punto de inflexión del ingreso per cápita, la
relación entre las dos variables se vuelve negativa, de esta manera la curva
ambiental de Kuznets explica que un mayor nivel de ingreso per cápita
corresponde a una disminución de la degradación ambiental” (Catalán,
2017: p.19). El autor argumenta que la degradación ambiental se da cuando
no existe desarrollo económico representado por el ingreso per cápita, dado
que las naciones que presentan estos niveles no tienen la estructura
productiva de bienes y servicios para conservar los recursos naturales y
quienes poseen dicha estructura son exclusivamente las naciones
desarrolladas.

Aún cuando el autor haya comprobado la hipótesis de la curva ambiental de


Kuznets, la cual establece que a mayor desarrollo económico menor
deterioro ambiental y viceversa, habría que reflexionar sobre el papel y la
voluntad que tiene la industria para modificar sus procesos industriales en
un pro de bienestar del planeta. Al respecto, se evidencia a las economías
de los Estados Unidos y China, dado que son las naciones que más
contaminan el planeta.

Desde órganos gubernamentales, la Comisión Económica para América


Latina (CEPAL) y otros organismos gubernamentales de carácter
internacional como la Comisión Europea, Cooperación Alemana, española y
francesa, ponen énfasis en el cambio climático originado principalmente por
las emisiones de las actividades realizadas por el ser humano que se
evidencia en aumento de la temperatura media global, modificaciones en el
clima, alza en el nivel del mar.

De acuerdos a los efectos presentados recientemente, el cambio climático


es uno de los grandes retos del siglo XXI para diversas economías del
mundo. Tales efectos se podrían controlar mediante la adaptación a las
nuevas condiciones y la instrumentación de los procesos de mitigación de
los gases de efecto invernadero, para que se logre esto, es de vital
importancia la participación de todos los actores (industria, gobierno y
población en general) y la realización de fuertes esfuerzos que impondrán la
necesidad de redefinir el estilo de desarrollo en un nuevo marco de
desarrollo sustentable y sostenible (CEPAL, 2014).

Asimismo, la CEPAL realiza un estudio en el año 2016 entorno al cambio


climático, políticas públicas y demanda de energía y gasolinas en América
Latina, con el fin de evidenciar que aspectos productivos también están
contribuyendo al cambio climático y tomar medidas de política pública en
pro de una mejora en el medio ambiente.

Desde la óptica de este estudio, se encuentra que el crecimiento


económico en la región Latinoamericana estará acompañado
inevitablemente de un alto crecimiento en el consumo de energía y gasolina,
esto implica desafortunadamente efectos negativos en el planeta
evidenciados por la contaminación atmosférica principalmente entre otros
efectos como el efecto invernadero. Asimismo, la dinámica de los precios en
la gasolina como en la energía refleja que estos bienes son insustituibles en
el transporte privado y en el escaso proceso innovativo en la región latina
(CEPAL, 2016), es decir, aún cuando los precios de estos productos se
eleven no se dejaran de consumir aun cuando sus efectos sean graves para
el planeta y que un impuesto a estos bienes no será suficiente para evitar su
crecimiento en su consumo y ende un efecto agresivo en el planeta.
Con base a los resultados obtenido en la CEPAL (2016), habría que
replantearse políticas publicas entre las diferentes naciones que conforman
América Latina y el mundo entero direccionadas en construir escenarios y
estimar impactos en el uso excesivo de estos productos. Los efectos que
provocan diferentes acciones en planeta hoy en día podrían ser irrevertibles
en el futuro.

Conclusiones

El cambio climático en las últimas décadas se ha evidenciado de manera


agresiva en el planeta y en la calidad de vida de todo ser vivo, diversos
actores han indagado las causas de su presencia con el fin de revertir y
controlar dichos efectos.
La academia como órganos gubernamentales como la CEPAL afirman que
el origen del problema esta en la forma de producir bienes y servicios y que
estos pueden ser revertidos con el esfuerzo total de todos los actores
(Empresas, gobierno y población en general), de otra manera no se lograría
los objetivos planteados, ya sea por el cambio de estructuras productivas
más amigables con el planeta o con la implementación de políticas públicas
en pro de una mejora en el planeta.

Bibliografía

García, T. M. (2003) “Apuntes de economía ecológica”, Boletín económico


de Información Comercial Española (ICE), (2767), 69-75.

Labandeira, X., C. J. León y M. X. Vázquez (2007) “Economía ambiental”.


Pearson Prentice Hall. Capítulo 7: La sustentabilidad del desarrollo
económico.
Catalán, H. (2014) “Curva ambiental de Kuznets: implicaciones para un
crecimiento sustentable”, Economía Informa, 389, 19-37.
CEPAL (2014) “La economía del cambio climático en América Latina y el
Caribe Paradojas y desafíos del desarrollo sostenible”. (LC/G.2624),
Santiago, Chile.
Galindo, L. M., J. Samaniego, J. E. Alatorre, J. Ferrer y O. Reyes (2015)
“Meta-análisis de las elasticidades ingreso y precio de la demanda de
gasolina: Implicaciones de política pública para América
Latina”, Revista CEPAL, 117(2), 7-25.

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