Universidad Tecnológica de El Salvador

Facultad de Ciencias Sociales

Escuela de Antropología
Ética
Maestro Joaquín Ernesto Aparicio Pacheco MPE

¿Qué son los valores morales y cuáles son sus características? (con ejemplos)
https://www.youtube.com/watch?v=ZWavKWydxg8

Los valores morales son aquellas pautas de comportamiento que permiten una convivencia
armónica, así como el desarrollo de la dignidad humana, pues de forma ineludible al tener valores
morales los individuos —y, en consecuencia, las sociedades— serán conducidas hacia el camino
del bien.

Los valores son una serie de normas que regulan la actuación de una comunidad y de los
individuos que la conforman. Estos permiten diferenciar lo que está bien de lo que está mal, lo
bueno de lo malo. En cuanto a los valores morales en específico, se trata de valores absolutos
que están relacionados con el bien y el mal. Dependen del marco cultural de cada sociedad, por
lo que se van modificando con el paso del tiempo.

Influyen directamente en la formación del individuo desde temprana edad, por lo que
normalmente los valores suelen ser transmitidos a través del árbol genealógico y las vivencias
del entorno en el que se desarrolla cada quien. Cada ser humano decide de forma individual vivir
según un marco de valores morales, por lo que esa decisión la toma de forma libre e
independiente. Dicha disposición lo llevará a tener un desempeño mucho más humano y será
una mejor persona.

Los principales valores morales son los siguientes:

El amor. Es quizá el valor más excelso porque pone de manifiesto una serie de actitudes de
especial importancia hacia otro ser, dado que reviste un altísimo desinterés personal.
La amistad. Es cuando entre dos personas o un grupo de personas existe un vínculo afectivo
desinteresado que les permite establecer una relación armoniosa.
El agradecimiento. Es esa actitud que se tiene para dar un reconocimiento oportuno ante un
beneficio que se está obteniendo, es mostrarse agradecido. Este valor se refleja en el hecho de
reconocer y apreciar con honestidad el esfuerzo que hacen unas personas en pro de generar
bienestar en otras.
El respeto. Implica aceptar y valorar a un objeto, una circunstancia o a una persona, incluyendo
a uno mismo. Actuar bajo el valor impide menospreciar o lastimar al otro, pues se actúa siempre
bajo un genuino sentido de consideración.
La bondad. Es la cualidad que tiene un ser humano de ser bueno, de demostrarle a los demás y a
su entorno que puede actuar a favor de ellos demostrando gentileza y con un elevado desinterés.
La generosidad. Es la actitud mediante la cual se entrega sin esperar nada a cambio con el
objetivo de ayudar a quien lo necesite.
La humildad. Es la cualidad de ser modesto ante lo que se tiene y lo que se es como un ser
humano. Parte de una noción de respeto por el otro y de una imagen propia ajustada a la
realidad.
La honestidad. Es una cualidad a través de la que la persona actúa alejada de la mentira y el
engaño, por lo cual es transparente en sus comportamientos y apegada siempre a la verdad y a
su defensa.
La justicia. Es el comportamiento bajo el cual la persona es justa o equitativa dado que parte de
la racionalidad y de la equidad. Como los valores morales son pautas de comportamiento que
permiten distinguir el bien del mal y obrar en consecuencia, una persona que sea generosa con
los demás a través de obras de caridad y también apoye al que lo requiera, que tome decisiones
justas y que viva siempre apegada a la verdad es una persona que actúa bajo valores morales.
El coraje. Una persona demuestra coraje cuando decide llevar a cabo una acción sin importar su
alta dificultad o el temor que le produzca. Este valor moral es de gran utilidad para la subsistencia,
pues tiene relación directa con enfocarse y esforzarse en cumplir los objetivos de vida que nos
planteamos.
El autocontrol. Se trata de otro de los valores morales más importantes en el contexto de una
sociedad. Cultivar el autocontrol implica evitar palabras y/o acciones impulsivas que puedan
generar disputas y malentendidos entre los miembros de una comunidad. En la medida en que
cada persona dé prioridad a reflexionar en lugar de reaccionar impulsivamente, será posible
evitar situaciones de conflicto.

Características de los valores morales

Los valores morales, y en general todo el marco de valores, tienen una serie de propiedades
comunes que pueden fácilmente ser identificables con el objetivo de diferenciar los valores de
otras pautas de comportamiento. El cumplimiento de estas características suele ser muy
marcado, pero no necesariamente deben darse todas para considerar la norma como un valor.
Estas principales características son las siguientes:

Están vinculados con las emociones humanas fundamentales. Los valores morales se caracterizan
porque están directamente relacionadas con las emociones más esenciales de los seres humanos.
Dentro de esta categoría se encuentran el amor, la lealtad, la culpa y la rabia, entre otras.

Son abstractos. Esto es así porque son constructos mentales que parten de la interpretación
sobre las cosas, considerando el marco cultural del individuo, así como sus propias experiencias
de vida.

Son trascendentales. Estas pautas de comportamiento permiten discernir “lo bueno” de “lo
malo”, por lo que dan sentido a la vida misma y persiguen la trascendencia de los humanos.

Son individuales y colectivos. Aunque suene contradictorio, hay ciertos valores cuya
manifestación será colectiva (en el marco de una sociedad), mientras que otros serán una visión
más personal según el punto de vista de cada individuo.
Son jerárquicos. Los valores morales funcionan con estructura de prioridades debido a que cada
persona y cada sociedad los organiza de acuerdo con su importancia, colocando en la cúspide de
la pirámide aquellos que son más relevantes para la configuración de las acciones y actitudes.

Son históricos. Los valores son el resultado de un proceso de evolución y madurez de las personas
y de las sociedades. Es por esto que son elementos fundamentales en la constitución de la cultura
de la gente. Pueden ser diferentes según cada cultura. Dado su carácter histórico, los valores
morales varían dependiendo de la sociedad en la que estos se expresen. A pesar de que hay
elementos generales, cada cultura desarrolla sus propias nociones de lo que es correcto o
incorrecto, y a partir de dichas nociones se construye un sistema de valores morales que
responde a ello.

Son reconocidos como relevantes. Este tipo de valores se caracteriza por basarse en las
emociones humanas más esenciales. Por esto, las personas en general reconocen la
preponderancia de estos valores sobre otros. Se trata de valores que hacen referencia a
sentimientos básicos para la coexistencia; por ello es sencillo que el conjunto de seres humanos
los considere de gran importancia.

Pueden derivarse de la religión. Las religiones se caracterizan por contener lineamientos y

directrices relacionados con cómo deben comportarse las personas que se identifican con dicha
religión. Este código suele definir lo que está bien y lo que está mal según la creencia en cuestión,
por lo que pueden considerarse fuente de valores morales que funcionan como una guía que
condiciona el comportamiento de los individuos.

Dado que la religión está estrechamente vinculada con la cultura de una determinada sociedad,
el código de comportamiento también variará dependiendo del contexto específico. Por ejemplo,
es por ello que algunas religiones consideran correcto vivir en poligamia mientras otras lo
consideran incorrecto.

¿Cómo se forman los valores morales?

El marco de valores de un individuo o de una sociedad se va construyendo paulatinamente,

mediante el paso del tiempo. Esto significa que no son pautas que viven en el código genético de
los individuos, sino que se van moldeando con el cúmulo de experiencias a lo largo de la vida.

En este sentido, los valores morales se transmiten de generación en generación, lo que pone en
evidencia la importancia de la educación en valores tanto en el seno de la familia como en el
ámbito escolar, ya que ambos entornos son los círculos primarios de aprendizaje de los seres
humanos. Otra fuente en la que un individuo se va nutriendo de los valores es en la práctica de
alguna religión o corriente espiritual, ya que influye en gran medida en cómo una persona debe
comportarse según sea el marco referencial de dicha congregación.
De igual forma pasa cuando la persona se afilia a alguna organización o agrupación; en este
momento sus valores personales deben congeniar y adaptarse al marco de valores del grupo para
que pueda estar a gusto y desarrollar sentido de pertenencia.

Reestructuración. Ante todo esto es importante señalar que el marco de valores se puede ir
modificando y reordenando a medida que se tiene mayor experiencia de vida. Esto se debe a que
en el camino el efecto del modelaje de los demás y así como el del entorno van alterando este
esquema y consiguen adaptarlo al momento histórico, así como a las circunstancias de cada
individuo.