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Autor:

Rómulo Jaramillo Ramírez

Psicólogo Universidad del Valle

Escrito Semestre II

EL CAMINO DE NUESTRA CIVILIZACIÓN Y LA


CABALA
“Ahora uno se explota a sí mismo y cree que está realizándose”

Byung Chun Han

Vivimos tiempos tumultuosos, tiempos donde la vida cotidiana y la lógica convencional construidas a través
de siglos de desarrollo de nuestra civilización, están al borde del colapso debido a la forma de vida
depredadora que como sociedad hemos diseñado y construido, pese a que dependiendo de la mirada que
tengamos, también podemos decir que en muchos sentidos hemos avanzado de forma impresionante, tanto
que si una persona del pasado nos visitará hoy día, es probable que ni en sus más disparatados sueños, sea
capaz de concebir las experiencias posibles de nuestros mundo actual.

Desglosemos un poco: desde la comodidad que la modernidad aporta, y tomando en este momento en
consideración solamente lo físico y sensorial, es innegable que tenemos un “estilo de vida” más desarrollado,
más moderno por llamarlo así, donde por ejemplo, una persona de clase social promedio e incluso bordeando
las clases menos favorecidas, es casi seguro que vive desde lo físico en mejores condiciones que los mismos
reyes de diversos lugares del mundo en la época medieval o incluso en los inicios de la era industrial.
Tenemos servicios médicos al alcance casi de todos, podemos visitar lugares a gran distancia en tiempos
cortos, nos comunicamos y sabemos lo que ocurre alrededor del mundo casi que al instante, las condiciones
laborales son muchísimo mejores en gran parte de la población, muchas tecnologías como el celular son para
todos y estamos disfrutando de una gran socialización de lo tecnológico inmerso en todas las esferas de la
vida social, existen avances médicos impresionantes que han doblado nuestra longevidad, entre muchos otros
ejemplos.

Sin embargo, estamos deteriorando el planeta masivamente, abusamos y canibalizamos a nuestras especies
animales y vegetales sin control ninguno, hemos creado necesidades individuales y sociales superfluas y sin
base real que nos hacen consumidores compulsivos, nos explotamos a nosotros mismos para satisfacer dichas
necesidades y lo llamamos libertad y empoderamiento, hemos perdido la calidad del encuentro entre los seres
humanos siendo cada vez más insensibles y distantes, creemos en el desarrollo de un ego enardecido que cree
obtusamente que todo lo puede sin medir consecuencias como sinónimo de buen liderazgo, vivimos
polarizadamente desde ideas y estilos de vida de todo tipo incluyendo las creencias religiosas, hacemos la
guerra y la vemos en televisión como un espectáculo más haciendo apuestas de quien va a ganar, esto entre
muchos otros aspectos negativos que a diario vivimos. Por ejemplo, la pandemia actual covi-19.

Ante estas condiciones tan contradictorias cabría preguntarse, ¿qué es lo que hace que se presente tan
poderosa dicotomía? buscando comprender un poco esa fuerte paradoja de avance y a la vez caos, e incluso
retroceso, que innegablemente estamos como civilización comenzando a afrontar con una fuerza nunca antes
vista, nos encontramos que muchos se atreven a afirmar que vamos en dirección de la destrucción como
especie, mientras que para otros sin importar casi lo que ocurra, desde otra perspectiva, proponen que estamos
recorriendo un camino donde el fin ya está predeterminado hagamos lo que hagamos pero, la forma de
recorrer el camino es la que definitivamente no es predecible sino que ellas es altamente modificable y que
allí es donde estamos errando como sociedad y como individuos de la misma. Esta segunda propuesta
contempla incluso, que así como civilización nos extingamos, de una forma u otra seguiremos evolucionando
desde luego en otras condiciones, hasta llegar a donde debemos llegar. Y esa evolución aunque parta de un
proceso personal individual, sólo será posible en un contexto social global, es decir de la humanidad como
especie.

Tal vez esta dicotomía sea una versión más de la tradicional y eterna pelea del bien contra el mal según
muchas creencias, pero que para otras es solo cuestión de perspectiva, donde si nos ubicamos en un nivel de
comprensión más alto, el supuesto conflicto del bien contra el mal no es sino, dos caras de la misma moneda,
moneda que en sí misma es una visión integral, unificada del mundo en su totalidad.

Para la cábala, ese mal es parte intrínseca de la creación y su mensajero Satán es el ángel más leal y confiable
del creador ya que, inexorablemente siempre cumple su tarea que es, ingeniarse todas las formas posibles para
que nosotros aprendamos, para que nosotros salgamos de la zona de comodidad y revelemos cada vez más
una nueva LUZ. Es decir, no existe per se el mal, este no existe como tal en el mundo de la unidad pero en el
mundo de la dualidad e incluso desde el mismo Jojma cuando la intuición niega o trata de estar por encima de
la razón, ya se manifiesta como discordia entre el matrimonio alquímico de la Jojma y la Bina. Ese cruce de
fuerzas, esa tensión dinámica entre las distintas fuerzas de la creación es facilitada por la asimetría, para que
gracias a ello se dé el esfuerzo que implica voluntad de avanzar, de cambiar, de aprender, de integrar, de
incluir al otro y no desconocerlo o estar por encima del mismo.

Algunos como el físico hindú Ami Goswami hablan de jerarquías entrelazadas. En palabras sencillas, sería
como decir que hay dos elementos de igual categoría pero de condición distinta que, mutuamente se
retroalimentan y son interdependientes, y el uno no genera al otro pero coexisten y cada uno está como
semilla dentro del otro porque son generados por un principio superior que los contiene y en esencia los hace
iguales pero manifestados de forma diferente. Al mutuamente contenerse como semilla, uno no puede hacer
desaparecer al otro pero tampoco bajo ciertas condiciones, puede evitar su manifestación como forma más
relevante. La intención de romper el ciclo de entrada salida mutuo, generaría el concepto de mal que sería,
predominar sobre el otro.

Un ejemplo de ello es la pregunta de quién fue primero, si el huevo o la gallina. Y dependiendo de lo que
necesitemos, será uno o el otro; si quiero un huevo primero debo tener una gallina y si quiero una gallina,
primero debo tener un huevo. Entonces no hay un inicio absoluto para ninguno de los dos salvo que
recurramos a una instancia superior que defina que va primero, por ejemplo, en la creación sería la voluntad
de la consciencia creadora la que lo determina y en el caso nuestro, cotidiano, es nuestro deseo el que nos
hace recurrir a uno u otro como inicio del proceso. El lio sería si en nuestra ignorancia por ejemplo, nos
comiéramos todos los huevos y ya no quedaran ni para procrear gallinas o si, nos comiéramos todas las
gallinas y ya no se pudiera tener huevos, eso sería el mal, un intento de llevar el desbalance al terreno del
absoluto donde un punto eliminando el otro y se rompe la interdependencia.

Los cabalistas proponen que el Ein Sof es la condición primaria, causa superior sin jerarquía más allá de El
mismo, única, totalizante, sin tiempo ni espacio, incognoscible pero aproximable desde nuestras limitaciones,
causa de todo lo existente y hacia el cual vamos todas las manifestaciones y a la cual llegaremos en un
momento dado. Dentro de esto, la humanidad como parte de la manifestación de ese Ein Sof va hacia Él,
hacia su reencuentro como destino final predeterminado donde en este sentido no hay libre albedrío pero, en
la forma de recorrer ese camino si hay opciones para nosotros de poder determinar, en que forma queremos
experimentar individual y colectivamente ese recorrido, ese sería nuestro libre albedrío o por lo menos, la
opción que nos corresponde.

Ese avance implica que nuestro estado de conciencia se va amplificado en el proceso, de forma consciente e
inconsciente, buscando alcanzar una nueva condición conocida como el estado de Mesías que no es un
salvador, una persona encarnada sino, un estado de CONCIENCIA INDIVIDUAL Y COLECTIVO donde
como generó humano, seguiremos avanzando hacia el reecuentro con la consciencia creadora no como
confrontación de bueno y malo sino, como desarrollo de lo bueno a lo mejor y así sucesivamente. Es la era de
Luz y de la Paz Mundial de la cual muchos se ha hablado.

LOS CINCO MUNDOS DE LA CABALA

Acorde a los Maestro de la Cábala, existen 5 mundos (otros proponen 4), y su estudio es fundamental porque
implica la concepción más amplia acerca del universo y todo lo existente dentro él, porque nuestro universo
es sólo una parte del UNO, del TODO MAYOR y UNICO. Y dentro de esta concepción nosotros, los
humanos como especie en evolución somos una parte muy particular del mismo por lo tanto, la construcción
de nuestra sociedad al ser resultado nuestro es igualmente, una parte muy particular que evoluciona con
nosotros.

EIN SOF

Utilizar palabras para definir algo es limitarlo, sin embargo en nuestra condición es la herramienta de trabajo
que tenemos para intentar conocer o acercarnos a ese algo. Las palabras nos sirven de envase para las ideas o
intuiciones que nuestra mente atrapa de Atzilut, que son arquetipos los cuales debemos operacionalizar para
que en nuestro mundo dual, podamos trabajar con ellos.

El Ein Sof es la condición primaria, única, es el UNO, donde de hecho no hay una forma real de definirlo
porque eso es limitarlo, sólo tenemos aproximaciones. En EL todo sucede, todo está, no hay tiempo ni
espacio, EL no está en todas partes porque ES todas partes, EL no tiene tiempo porque EL ES más que el
tiempo, el principio y el fin pero sin principio ni fin.

En su interior surge por su voluntad, por llamarlo así, un profundo deseo de autoexplorarse y hacer manifiesto
su propio potencial pero, siendo ÉL TODO eso no es posible así que dentro de SI MISMO surge lo que
podríamos llamar en términos nuestros, el primer movimiento que por lógica nuestra debe ser una
autocontracción porque, al ser ÉL TODO no existe como tal el vació dentro de ÉL, que es donde se podría
manifestar el desarrollo de su potencial y por ende, debe crearlo…

Ese movimiento interior para crear ese vació es una autocontracción, es una especie de recogerse en SI
MISMO…pero, y hacia dónde? Hacia un punto central pero que no es en realidad un punto central como lo
concebimos físicamente, es un estado de conciencia diferente al anterior en que se encontraba. En cosmofísica
se dice que antes del punto inicial de nuestro universo, si existía un un movimiento en las fuerzas o
condiciones primigenias, que nosotros no conocemos como operaban es decir, no conocemos las leyes que en
ese estado regían pero que si existían, y esto es debido a que somos producto de esas leyes. El no conocerlas
no pone en tela de juicio su existencia.

A mi modo de entender, así dicen los grandes Maestro de la Cábala que ocurrió en un comienzo la creación de
este universo, esto referenciado desde nuestra perspectiva donde requerimos de tiempo y espacio para
comprender algo pero, en el Ein Sof no hay comienzo sólo sucede todo simultáneamente, es decir, aún está
sucediendo, aún está pasando y aún está por pasar, por lo tanto la creación total sigue ocurriendo por siempre.

Incluso algunos físicos que hablan del origen del actual universo, lo hacen en términos que para nosotros son
difíciles de asimilar pero en gran medida se asemejan mucho a los conceptos cabalísticos. Por ejemplo
manifiestan que “en el comienzo hubo una explosión. No una explosión como las que conocemos en la tierra,
en la que parten de un centro definido y se expanden hasta abarcar una parte más o menos grande del aire
circundante, sino una explosión que se produjo simultáneamente en todas partes, llenando todo el espacio
desde el comienzo y en la que toda partícula de materia se alejó rápidamente de toda otra partícula” (Teven
Weinberg, Los 3 primeros minutos del universo).

Para ejemplificarlo con una metáfora, así como lo han hecho muchos místicos a través del tiempo,
supongamos que un círculo en un papel es el todo, que en este caso los borde del círculo son un límite debido
a nuestra limitada percepción, y si todo lo que hay en ese círculo se recoge iría a dar al centro donde
automáticamente se crearía un punto focal, un punto de convergencia, y ese punto focal sería el receptor, el
contenedor de todo lo que había alrededor de el, es decir, sería la vasija que recibe todo…

EL ADAM KATMON

El Adam Katmon es entonces el plan original de la creación que nace concomitante con la voluntad de la
creación por parte del Ein Sof. Siendo el plan original es la matrix que contiene en sí misma todo acontecer,
sin espacio ni tiempo, solo proceso de realización. Y este es el primer universo, el del Hombre Universal no el
hombre individual que socialmente conocemos.

Este punto central nace entonces con el propósito de recibir, es una vasija universal, por ello todo nace para
recibir sin embargo, en ese primer momento la fuerzas que ingresan en ese recogimiento son tan poderosas
que chocan con las fuerzas de la vasija contenedora, que igualmente son poderosas al infinito pero no tanto
como las del Ein Sof mismo que ingresan, y en ese primer momento, las dos fuerzas chocan y explotan, la una
por dar la otra por recibir, y se produce el rompimiento de las vasijas que terminan ocultando la luz
primordial.

En nuestro caso, el género humano es vasija que recibe del Creador pero es dador para el sistema social que
construye junto con otra diversidad de conciencias, y en este sistema también se construye gracias a la
interacción con otros seres, es en esa construcción social que adquiere sentido su día a día trascendente, de ahí
que se dice que “el otro es tú otro tú; has a tú hermano lo que quieres que te hagan; ama al otro como a ti
mismo”.

Por eso, el verdadero místico se conoce por la calidad de interacción que logra con el mundo que lo rodea en
todas sus manifestaciones, y es en este mundo donde se prueba, conoce y evoluciona, es en el Reino físico
donde se manifiesta pero esa manifestación viene permeada por Zeir Anpin que es toda su subjetividad que
debe ser adecuadamente desarrollada y probada en ese mundo físico y relacional con otros seres.

Podemos decir entonces, que el género humano aquí en este proceso es el dador y la fisicalidad es la vasija
contenedora pero, la construcción social es el tejido de conciencia energía intermedia entre ellos dos, y es en
la dinámica de esas fuerzas donde se mide la evolución o la destrucción del uno, del otro o de todos, lo cual
en otro sentido también es evolución sin importar el resultado final. Se nos ha dado el poder como hijos del
creador de dar, de entregar, y debe existir algo que nos reciba donde podamos ejecutar nuestro poder y ese es
el reino Maljut, pero el sistema intermedio, lo social es el que nos va a dar la medida de que es lo que estamos
en verdad construyendo. De ahí que la destrucción actual a la que estamos sometiendo nuestro planeta y
nuestra civilización, pasa por ese tamiz social, y antes de que algo sea manifestado en lo físico, de alguna
manera, ya ha pasado y se gestado no solo en los mundos superiores de nuestra conciencia individual sino, en
los mundos relacionales según la forma en que concibamos y abordemos nuestras interacciones con el mundo
que nos rodea, con los otros.

Mirándolo desde otra óptica, el choque de las primeras densidades, la del dador y receptor, se presenta porque
las fuerzas contenedoras creyeron cada una de forma individual, ser capaces de recibir, resistir y redireccionar
las fuerzas que ingresaban, es decir, actuaron de forma independiente, egoísta, no tuvieron en cuenta las otras
y cómo en conjunto podían hacer mejor su tarea, y eso las llevó a reventarse es decir, no hubo socialización
del proceso entre ellas sino egoísmo, faltó que la una se pusiera en el lugar de la otra y mutuamente trabajaran
en su propósito.

Pero también, la fuerza de ingreso no controló, no midió sus fuerzas porque no tuvo en cuenta las condiciones
de la vasija receptora, en ese momento no se puso en el lugar de ellas, solo se limitó a ejercer todo su poder,
toda su fuerza desplegada, y ese factor de interacción y comprensión primaria al fallar, contribuyó igualmente
a la ruptura posterior de la vasija receptora, es decir, en ese acto creador las dos pares participantes tuvieron
un aprendizaje con el que no contaban aunque en el fondo sabemos que si lo sabían.

Ese aprendizaje es interaccional, representado en la metáfora de Adán y Eva; podemos llamarlo lo social
cuando se hace extensivo a múltiples interacciones de múltiples niveles de conciencia. Son las diversas
relaciones que entrelazan los opuestos, los complementarios, los divergentes, generando la posibilidad de un
fluir en conjunto a pesar de sus debilidades inherentes, pero que al fluir es capaz de sobreponerse a escenarios
y situaciones que probablemente no habían sido previstas o calculadas previamente, y además sobrepasa la
mera individualidad. Desde el comienzo, lo social es un tejido fundamental de la existencia e incluso es parte
del conocimiento adquirido como Daat o tal vez lo complementa a otro nivel, tal vez un Daat de Conjunto
diría yo.

UNIVERSO DE ATSILU

Conocido como el segundo universo, es importante tener presente que su formación ocurre simultáneamente
con el anterior es decir, cuando enumeramos y marcamos paso a paso Ein Sof, Adam Katmon y Atzilut, es
sólo para efecto de nuestra comprensión pero en realidad no ocurre así porque el hombre primordial y Atzilut
pertenecen a la conciencia primaria del Ein Sof y están inmersos en EL en una cercanía tal que hacen parte de
su esencia totalizante. Es muy difícil para nosotros entender esto en simultaneidad, coexistencia y además sin
tiempo ni espacio.

Es un poco parecido a lo que manifiestas los físicos cuánticos que dicen que en el primer segundo nuestro, de
reloj, sucedió la creación de toda la materia original que posteriormente iba a poblar el universo conocido y
que a los 6 segundos adicionales, todo el universo estaba ya creado, los demás 13.500 millones de años de
existencia del mismo son el viaje de la diversas energías dentro de la creación ya realizada. Pero también
dicen que, la bola de fuego original no contenía todo, sino que había un campo, un fluido presente en todo el
universo recién en formación y que desde esa bola de fuego se fue densificando la energía hasta ir creando lo
que conocemos hoy día como el universo actual.

En ese primer segundo, dicen que se crearon eras de desarrollo y que la actividad del naciente universo en ese
primer segundo fue más poderosa y cuantitativamente fue mayor que todo lo que ha ocurrido en los siguientes
13.500 millones de años, es decir, concebir que en un segundo del reloj nuestro se haya dado más actividad
que la experimentada en toda nuestra existencia como especie humana y como universo, es muy difícil de
comprender y de asimilar.

Por eso en Atzilut tampoco hay tiempo y espacio. Es un estado de condición primaria perteneciente a las
tensiones internas inherentes a esa condición. Pero desde él, se genera, emana nuestro universo. Y como
contiene esa semilla, contiene todo lo que se manifieste en el universo de Briá, por eso es arquetípico puro,
captado por intuición pero falto de operacionalización.

UNIVERSO DE BRIA

Después de ese primer tzimtzum Alef, se presenta la segunda autocontracción del universo, el tzimtzum Bet,
que es donde se genera la explosión que forma nuestro universo actual. Corresponde al Big Bang.

Aquí luz primaria entra con más freno es decir con más densidad, y la vasija receptora también ejerce más
control en su recepción, es decir pone límites a su capacidad de limitar para desde ese punto, permitir que el
vació reciba LUZ de una densidad un poco más moderada, así emana una nueva dimensión conocida como
universo de Bria.

Ese ingreso de las ondas expansivas, que es el generador del universo de Bria igualmente se manifiesta con un
poder inmenso. En el momento en que las fuerzas que provienen de Atzilut desean ingresar, deben bajar su
nivel de densidad, de intensidad de onda. Esto se logra por la limitación impuesta tanto por el emisor como
por el receptor; se produce entonces por el nivel de la limitación, una explosión descomunal que nosotros
conocemos como el Big Bang. Ese Big Bang al nacer bastante controlado hace que se genere el espacio y el
tiempo, teniendo en cuenta que llenar de Luz todo el vació correspondiente a la contracción original genera el
espacio, y la ralentización en la velocidad de las ondas, su densificación provoca que aparezca el tiempo. A su
vez, la ralentización en las ondas generadas, es lo que hace que se manifieste la materia posteriormente.
Así nace Bria, el universo actual en que nosotros nos movemos.

Este universo nace con un propósito, y es hacer la corrección del primer universo donde el dar y el recibir por
falta de coordinación generó la destrucción de la vasija; aquí el Ein Sof da y cumple su deseo de dar pero
viene controlado, la vasija recibe y cumple su deseo primario con que fue creada que es recibir pero, lo hace
controladamente, la vasija también recibe para satisfacer el deseo de dar del Ein Sof y a su vez, la vasija logra
cumplir su deseo de ser como el Ein Sof es decir, poder ejercer el derecho a dar y lo hace dando su Luz al
universo creado donde el espacio y el tiempo son los que le facilitan el escenario para lograr hacerlo.

Para poder cumplir con el propósito de dar, aprender y corregir, lo cual implica tener libre albedrio para
aprender y corregir, este nuevo universo o universo actual tiene el tiempo que es el que regula en que
momento el resultado de una acción se manifiesta es decir, es gracias al tiempo que toda acción generada
antes de recibir la consecuencia permite a la conciencia evolucionante, seguir un curso o cambiarlo para
obtener un resultado diferente, esa es la porción de libre albedrio que nos corresponde que en últimas es
aparente porque sin importar el camino que tomemos siempre llegaremos al objetivo primario, que es retornar
a la luz original, de ahí no nos podemos salir y el plan general o matrix así lo contempla. No tenemos libre
albedrio real pero tenemos una ilusión pragmática del mismo que nos permite vivir y aprender, es decir,
apropiarnos del viaje.

Sin embargo, este tiempo de viaje como se realiza en un mundo donde existe el tiempo tendrá un momento
donde el de viaje terminará, porque somos un mundo finito para este proceso particular pero infinito para los
procesos venideros. Somos el mundo de las formas donde la forma es finita porque siempre se termina y
luego se transforma, es una ilusión pero las formas en su conjunto son infinitas en posibilidades de expresión
incluyendo la opción de no forma que hace parte de ella misma.

Aquí también nace nuestra alma, la Nechama con una misión muy especial, de encontrar y sacar a relucir la
LUZ primaria del Ein Sof que quedo oculta en las cascaras de las vasijas rotas y que están dispersa y oculta en
este universo, para permitirle así su retorno a la fuente primaria desde donde comenzará un nuevo ciclo.

UNIVERSO DE YETZIRA

Este es emanado desde el universo de Bria y se le conoce como universo de formación, similar a la idea que
en nuestra mente va ganando forma para luego pasar a su materialización, que es el universo siguiente.

En Briá las densidades de onda ya son más bajas y esto facilita que la separación entre ellas sea más definida,
surgiendo las polaridades o estados manifiestamente contrarios pero intrínsecamente iguales en esencia, es el
mundo de la dualidad.

Y para realizar este proceso, Yetzirá tiene que conocer, manejar y orientar sus densidades de onda que se
relacionan son las 6 sefirot que le corresponden, donde adicionalmente también actúa la sefirot de Daat que es
el conocimiento adquirido y que permite a las otras aprender a trabajar coordinadamente. Es en este escenario
donde nuestra conciencia desde la subjetividad propia de ella, al nacer en el mundo de las ilusión de las
formas y del cambio perenne, debe aprender a integrar por el camino del medio las fuerzas del pilar de la
izquierda y de la derecha, que son las fuerzas del dar y recibir en este nivel. Es un fractal del mundo superior
en el mundo interior de nuestra subjetividad que se da en el universo de Zehir Anpin. Si logramos con la
ayuda de Daat convertimos en el centro y orquestar adecuadamente las fuerzas de dar y recibir, con una nueva
conciencia, ganaremos la posición central, la del Padre Creador, seremos como ÉL y podremos ascender a
otros niveles de comprensión.

Aquí nosotros debemos aprender a conocernos como seres individuales pero, es en la relación con el otro
donde sabemos a ciencia cierta que tanto hemos aprendido o no, que tanto hemos avanzado o no. Esa es la
verdadera tensión o confrontación que nos sire de medida.
Aquí, el componente social como constructor del tejido invisible de apoyo y desarrollo de todas las
conciencias evolucionantes se hace fundamental, porque en sus constantes tensiones y distensiones es donde
se aprende a convivir con el otro, a ser inclusivos, a reconocer, respetar y aceptar la diferencia, donde el
AMOR por el bienestar del otro sin perder mi identidad y mi propio valor se hace piedra fundamental de
nuestro desarrollo. Aquí entendemos que, la evolución es un acto de adecuada coordinación y entrega entre
todos, sin distingos de ningún tipo y donde uno solo de nosotros que se quede, no permitirá que el todo
avance como debe ser, por eso, hay aprendizaje no solo individual sino social y transgeneracional que es el
que permite que de forma invisible para el ojo convencional, se transmita el saber social y colectivo, que va
ingresando en el Daat personal para permitirnos avanzar como especie. Si yo tengo mucho Daat en mi
estructura interna pero no soy capaz de llevarlo al escenario de lo social, ya tengo un problema porque no
estaría contribuyendo adecuadamente a ese desarrollo colectivo. Y en lo colectivo debo incluir todo mi
entorno que se compone de las conciencias a todo nivel, no solo mis congéneres humanos.

De allí que mi participación en lo social, arranca primero por la construcción de mi propia conciencia, el
desarrollo adecuado de mi propia alma que en este nivel se conoce como Ruaj pero que con cada mínima
acción que realizo, siempre va a impactar en lo social y por lo tanto va a impactar en lo que ocurre en mi
mundo alrededor. Así como haces una cosa haces todas las demás. El movimiento de una mariposa en un
lugar de la tierra puede ocasionar un terremoto en un lugar contrario y equidistante de donde ocurre.

UNIVERSO DE ASIA

El universo de Asia es la vasija final, viene emanado de Yetzirá pero es el único que no es emanador, su
función es servir de vasija, de receptáculo para reflejar la esencia de lo que ha recibido, por eso es el más
duro, el de ondas más densas, es el espejo que nos muestra realmente que tenemos de fondo cuando hacemos
algo, es el máximo maestro junto con Satán que es el Ángel que nos educa y su herramienta está siempre
dispuesta, el mundo de Asia.

Aquí aparece la materia como la conocemos aunque ya sabemos gracias a la física cuántica, que no hay nada
material, todo es campos de ondas condensados donde las partículas elementales se agrupan alrededor de
campos electromagnéticos dando la sensación de solidez para nosotros. Nunca podemos agarrar nada
material, nos contactamos con otro campo de energía y entre fuerzas de atracción y repulsión generamos la
sensación de contacto físico para nosotros porque para partículas como los neutrinos, lo que es aparentemente
denso para nuestra percepción, para ellos casi literalmente no existe, para el neutrino casi todo es espacio
vacío con una que otra interferencia que en el camino se puede encontrar.

Entonces, el mundo denso de Asía que no es generador sino solo receptor y que sirve de molde para que
aquello que contiene lo moldee, es siempre el reflejo de lo que ocurre en nuestras realidades más internas, es
el gran ocultador de la LUZ por eso aparenta ser oscuro pero en el fondo es absolutamente brillante como la
LUZ. Un ejemplo es el fotón, que existe sin tener masa, y se da en lo profundo del átomo como cuando un
electrón salta de un nivel a otro, se libera un fotón, es decir que en el fondo de todo, todo es LUZ.

Y si todo es LUZ y la oscuridad es sólo aparente, y si no podemos agarrar nada solo generamos interferencias
de capos electromagnéticos, entonces que es nuestra realidad? Es una organización aparente y temporal de
estructuras basadas en campos de ondas que al ser interferidas se colapsan, y eso que se colapsa está acorde a
la conciencia que interfiere con ellas. Nuestra realidad es una creación mental masiva (de muchas conciencias
interactuantes a diversos niveles) donde, todas esas conciencias vibran en funciones de onda diversas, algunas
son similares o que ocupan un rango cercano e interfieren el campo conjuntamente, entre sí, lo que precipita
una realidad temporal compartida. Aquí cae lo social, lo construido entre todos como civilización, dado lo
cual la misma es posible reorientarla para que la experiencia compartida entre todos en su temporalidad, sea la
mejor y cada vez avance de un estado de estar muy bien a estar aún mejor.
Entonces nuestra civilización al ser un campo construido y compartido entre todos, es responsabilidad del
conjunto de las conciencias participantes y requiere de un referente de orden o jerarquía mayor, que la Cábala
propone que es el Ein Sof como único absoluto por lo tanto no es subjetivo sino que es lo único OBJETIVO
que realmente existe, los demás si son todos relativos.

Ese referente servirá de guía para tomar el camino de acción, por ello el que nosotros podamos acceder de
forma personal y directa a acercarnos a la conciencia del Ein Sof (desde luego, entrenándonos para no
quemarnos ante tanta LUZ) es una BENDICIÓN que nos permite tener siempre un norte y un sentido de
movimiento hacia dónde dirigirnos así hayamos extraviado el camino, y lo más importante, no nos hace
depender de nadie sino de nuestro propio esfuerzo y de la forma en que cada uno construya su relación con
esa Conciencia Suprema. Ejemplo de ello son las mentes elevadas de los grandes místicos e iniciados de todas
las religiones y creencias del mundo, cuyos postulados resultan ser universales y no privativos o aplicable
solo a los grupos donde se manifestaron en su momento.

Y ya para finalizar, considero que a medida que más y más LUZ vaya llegando al nivel de Asia, como este no
es emanador sino facilitador y espejo del proceso que entra, va a llegar un punto donde por decirlo así, se irá
saturando de tanta LUZ y probablemente sentirá el deseo de dejar de ser solo receptor y deseara poder
entregarla a algo, que al no existir más allá de él, su entrega la hará al Ein Sof mismo a traves de Keter que es
la Corona de ingreso pero también de salida y retroalimentación de todo el sistema. De ahí que a Keter se
llega por Maljut. Es decir, se iniciaría tal vez un nuevo universo ya corregido en sus condiciones actuales y
generador o semilla de otro, en un nuevo nivel de conciencia diferente. Será acaso otro tzimtzum, otro big
bang? Será esto lo que muchos místicos dicen que para encontrar a Dios es necesario ir a lo más profundo de
la materia?

RÓMULO JARAMILLO

Psicólogo

Universidad del valle


BIBLIOGRAFIA

SABAN, MARIO JAVIER. “Los secretos de Dios”. España, 2020, Jojmá Ediciones

SABAN, MARIO JAVIER. “La cábala. La psicología del misticismo judío”. Barcelona, 2016. Editorial

Kairos.

ROELLI, CARLO. “El orden del tiempo” Barcelona, 2018. Editorial Anagrama

WEINBERG, STEVEN. “Los tres primeros minutos del universo”. Editor digital Broncolin, 1977

KRAMARZ, FABIOLA. “Kabbalah práctica”. Buenos Aires, 2016. Editorial Kier

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