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Investigación-acción participativa: una

metodología integradora del conocimiento


y la acción

Ana Mercedes Colmenares E.


Universidad Pedagógica Experimental Libertador (anamercedesc@gmail.com)

Recibido: 17 agosto 2011 | Aceptado: 16 junio 2012 | Publicado en línea: 30 junio 2012

INTRODUCCIÓN

Desde las últimas décadas del siglo XX, en la investigación en ciencias sociales, y en particular en
educación, se han producido cambios importantes que marcaron diferencias significativas en las
dimensiones ontológica, epistemológica, ética y metodológica. . Hasta mediados del siglo pasado,
la investigación social se enmarcaba estrictamente bajo un enfoque cuantitativo, guiado por el
método científico, propio de las ciencias naturales o duras, positivista, con características acordes
con dicho enfoque, como las relaciones sujeto-objeto. , experimentación, objetividad, verificación,
validez y fiabilidad como requisitos esenciales. Además, se presentan diferentes opciones para el
avance de la investigación en las ciencias sociales y humanas; Se está asumiendo paulatinamente
un nuevo enfoque cualitativo en los estudios realizados en educación, haciendo uso de un diseño
emergente, nuevo, flexible pero a la vez riguroso y sistemático, que ha permitido el avance del
conocimiento a través de la investigación cualitativa y que marca una distancia considerable con
enfoques anteriores.

Habermas (citado en Cifuentes, 2011), para explicar las formas de producir conocimiento, ha
propuesto una clasificación a la que denomina intereses, a saber: técnicos, prácticos y
emancipatorios. Teniendo en cuenta la clasificación de este autor, existen tres paradigmas:
empírico-analítico, con trascendencia técnica, con el objetivo de predecir y controlar; intereses
histórico-hermenéuticos, prácticos, con miras a ubicar y orientar, e intereses social-críticos o
sociocríticos, emancipadores o liberadores, propuestos para destapar y destruir. Cada uno de
estos paradigmas asume una visión ontológica, epistemológica, metodológica y ética que orienta
al investigador sobre cómo orientará el objeto de estudio, la realidad; cómo te relacionarás con el
conocimiento, cómo conocer esa realidad, incluso cómo presentarás los hallazgos que surjan de tu
investigación.
Sin embargo, cada paradigma amerita una metodología consistente que permita el desarrollo de
procesos investigativos; En la crítica social, el método está representado por la
investigación/acción o investigación acción participativa, que orienta los procedimientos, técnicas
e instrumentos de acuerdo con la visión ontoepistémica adoptada por el investigador.

TRANSITAR HISTÓRICO DE LA INVESTIGACIÓN-ACCIÓN PARTICIPATIVA (IAP)

la alternativa de cambio o transformación, y así lo reconoce Miguel Martínez (2009, p. 28) Según
Miguel Martínez (2009, p. 240), la investigación acción tiene dos vertientes: más bien sociológica,
desarrollada principalmente a partir de los trabajos de Kurt Lewin (1946/1992, 1948), Sol Tax
(1958) y Fals Borda (1970), y otra, más específicamente educativa, inspirada en las ideas y
prácticas de Paulo Freire (1974), Hilda Taba (1957), Lawrence Stenhouse (1988), John Elliot (1981,
1990) y otros. El desarrollo de la corriente sociológica en América Latina tiene su principal
representante en la persona del destacado sociólogo Fals Borda (1925-2008), quien dedicó la
mayor parte de su vida al estudio de las comunidades campesinas y cuyas conclusiones se reflejan
en la literatura que dejó. detrás. como legado para su país y el resto de Latinoamérica, así como
Europa, continente donde es reconocido por su importante aporte al desarrollo y desarrollo de
esta metodología.

la investigación participativa se definió de la siguiente manera: Asimismo, Fals Borda señala que en
este evento ya se delinearon las dos direcciones de la investigación-acción, una la llamó activistas
representados por el contingente latinoamericano y la otra representada por investigadores y
educadores canadienses. En cuanto a la tendencia educativa, se han desarrollado algunas
denominaciones, tales como: B. Investigación-acción participativa, educativa, pedagógica, en el
aula, según los autores que las practiquen. Colombia ocupa uno de los lugares privilegiados de
América Latina donde más se desarrolla esta corriente educativa; numerosos investigadores y
educadores, entre ellos Bernardo Restrepo, María Cristina Salazar, José Federman Muñoz Giraldo,
Josefina Quintero Corzo y Raúl Munévar Molina de la Universidad de Antioquia han desarrollado
un trabajo de investigación integral bajo los lineamientos de la investigación acción pedagógica.

Argentina también ve una importante investigación sobre el desarrollo de metodologías de


investigación conductual participativa, especialmente en educación de adultos, realizada por
Marta Iovanovic. En los años 70 se evidencia el resurgimiento de esta metodología. Una razón
citada por Carr y Kemmis (citado por Suárez, 2002) es la demanda de docentes como profesión.
También hay interés en los procesos prácticos y deliberativos. Aunado a esto, se agudiza la crisis
de la investigación social, dando paso a nuevas formas de entender la sociedad y con ello el
conocimiento educativo. El intérprete entra en escena y la voz del participante es un privilegio.
Todo ello favorece el surgimiento de una nueva fase de investigación-acción. Suárez agrega que
durante este mismo período histórico en el Reino Unido, John Elliot y Clem Adelman
protagonizaron un proyecto llamado Teaching Ford. Lawrence Stenhouse estuvo a cargo del
proyecto de humanidades. Juntos, estos investigadores han dado un gran impulso a un
renacimiento renovado de las metodologías de investigación-acción en el campo de las ciencias de
la educación.

RASGOS DISTINTIVOS

La investigación acción participativa o investigación-acción es una metodología que exhibe algunas


características específicas que la distinguen de otras opciones bajo un enfoque cualitativo. Entre
ellos, se puede señalar el método de acercamiento al objeto de estudio, la intención o propósito,
el comportamiento de los actores sociales involucrados en la investigación, los diversos
procedimientos desarrollados y los resultados alcanzados.

“al analizar la investigación en educación, como en muchos otros campos, parece que una gran
mayoría de investigadores prefieren investigar sobre un problema en lugar de investigar para
resolver un problema”, agregando que la investigación acción sirve para ambos propósitos. 28)
señala que la investigación acción se diferencia de otras investigaciones en los siguientes aspectos:
a) Requiere la actuación como parte integrante del propio proceso investigativo. Asimismo,
Antonio Latorre señala que los objetivos de la investigación acción son: mejorar y/o transformar la
práctica social y/o educativa, buscando una mejor comprensión de esta práctica y articulando
constantemente investigación, acción y educación; Acercarse a la realidad vinculando cambio y
conocimiento, además de convertir a los docentes en protagonistas de la investigación.

De igual forma, los actores sociales se convierten en activos exploradores, participando en la


identificación de necesidades o potenciales problemas a investigar, en la recolección de
información, en la toma de decisiones, en procesos de reflexión y acción. De lo dicho en las líneas
anteriores, se puede concluir que la investigación acción conjunta tiene características muy
específicas que la distinguen de otros enfoques metodológicos y la hacen más viable para
transformar realidades sociales. 28), son cuatro las características que tiene esta metodología, a
saber: circularidad, recursividad, ya que pasos similares tienden a repetirse en una secuencia
similar; la participación, en tanto los participantes se convierten en investigadores y beneficiarios
de resultados y decisiones o propuestas; cualitativa, porque se trata más de lenguaje que de
números, y reflexiva, ya que la reflexión crítica sobre el proceso y los resultados es parte
importante de cada ciclo.

Formas de organizar la investigación (fases, etapas, momentos, ciclos)

Los investigadores que siguen este método han desarrollado una serie de pasos, etapas,
momentos o fases que se distinguen por sus nombres; Sin embargo, su esencia sigue los principios
fundamentales que nos dejó Kurt Lewin en su clásico triángulo investigación-acción-aprendizaje,
las etapas incluyen diagnosticar, construir planes de acción, ejecutar dichos planes y reflexionar
constantemente sobre los involucrados en el proceso. investigación que permite redimensionar,
reenfocar o repensar nuevas acciones en respuesta a las reflexiones realizadas. Por su parte,
Stephen Kemmis (1988) identifica dos ejes, a los que denomina estratégicos, de acción y reflexión;
y organizacional, involucrando la planificación y la observación, ambas comprendidas en cuatro
fases o momentos interrelacionados y definidas como planificación, acción, observación y
reflexión. Como seguidor de esta metodología, presento cuatro fases en mis proyectos de
investigación, a saber: Fase I, descubrimiento del tema; la Fase II, representada por el desarrollo
conjunto de un Plan de Acción para continuar la investigación; La fase III consiste en la
implementación del plan de acción y la fase IV, la culminación del estudio, en la que se
sistematizan, clasifican y generan planteamientos teóricos, que pueden servir de guía para nuevos
ciclos de investigación, creando una relación binominal entre conocimiento y acción. , procesos.
contribuir a la potenciación de las transformaciones esperadas; Por supuesto, todas estas fases
están unidas por constantes procesos reflexivos de todos los investigadores involucrados.

La Fase I, relacionada con la identificación de un asunto temático, puede realizarse buscando


retroalimentación, aportes y consideraciones de investigadores interesados; Además, se practican
diagnósticos sistemáticos y sistemáticos, que permiten recopilar la información necesaria para
esclarecer el tema o problema especificado. El desarrollo colaborativo de un plan de acción, como
la Fase II, implica varias reuniones con las partes interesadas para identificar las acciones de
consenso que el grupo considera más adecuadas para abordar la situación identificada o los
problemas existentes en el área de actividad. conocimiento en una comunidad, una organización,
en fin, en una realidad elegida. La Fase III corresponde a la implementación del plan de acción que
se elaboró en forma conjunta con anterioridad y representa las acciones encaminadas a lograr
mejoras, transformaciones o cambios que se consideren oportunos.

Por último, pero no menos importante, también no terminal, la Fase IV incluye un proceso de
reflexión permanente, durante el desarrollo de la investigación, además de la sistematización,
codificación, categorización de la información y consolidación de los informes de investigación
individuales que proporciona. relatos de las acciones, reflexiones y transformaciones propiciadas
durante la investigación. […] el sujeto investigado es un auténtico co-investigador, participando
activamente en la formulación del problema a investigar (que será algo que le influya e interese
profundamente), en la información que se obtenga en esta materia ( que determina todo el curso
de la investigación), en los métodos y técnicas a utilizar, en el análisis e interpretación de los datos
y en las decisiones sobre qué hacer con los resultados y qué acciones tomar. programado para el
futuro. Desde el planteamiento de Miguel Martínez, y en el que coinciden algunos seguidores, se
demuestra una de las grandes diferencias que caracteriza a esta visión metodológica, en que el
actor social investigado se convierte en investigador activo de sus propias acciones, con miras a
conocerlo. y cambiarlos. Participan en diferentes procesos, en la toma de decisiones y en acciones
específicas que se desarrollarán durante la investigación; Además, los resultados de la
investigación se convierten en insumos para mejorar y/o cambiar sus propias prácticas sociales o
educativas. En definitiva, los autores coincidieron en considerar las reflexiones como el proceso
básico para desarrollar pasos, etapas o momentos de un estudio bajo esta metodología
transformadora y de cambio social.
INTEGRACIÓN DEL CONOCIMIENTO Y LA ACCIÓN A TRAVÉS DE LA IAP

Estos aspectos son los pilares centrales de esta metodología de construcción de conocimiento y
consecuente acción, orientada a generar profundos procesos autorreflexivos en los actores
sociales participantes. IAP es una forma de que dos procesos participen y coexistan. Saber y
actuar. Conocer, analizar y comprender mejor las realidades, problemas, necesidades, recursos,
capacidades, posibilidades y limitaciones en las que se encuentran inmersos, por tanto, obra a su
favor. Conocer esta realidad nos permite reflexionar, planificar y ejecutar acciones encaminadas a
mejorar y transformar los aspectos que necesitan cambiar. Así, apoya la sensibilización, los
supuestos de acción concreta y oportuna, el empoderamiento, la movilización colectiva y la
consecuente acción transformadora. b) El comportamiento no es sólo el fin último de la
investigación, sino que también representa una fuente de conocimiento en sí misma, mientras que
la investigación es en sí misma una forma de intervención. c) Participación significa que no sólo los
investigadores profesionales están involucrados en el proceso, sino también la comunidad
receptora del proyecto. Este es visto no como un simple sujeto de estudio sino como un sujeto
activo que contribuye a conocer y transformar su propia realidad. La forma correcta en que
Eizagirre y Zabala describen los componentes básicos que dan vida al proyecto IAP es muy
elocuente para identificar cómo integrar los procesos de comportamiento y participación a través
de esta metodología de investigación. La acción en sí misma "representa una fuente de
conocimiento". Cifuentes (2011) reconoce a Fals Borda como uno de los principales
representantes de la metodología IAP. Señala que a partir de la creatividad y el diálogo, el
conocimiento debe transformar la realidad y volverse más pertinente a los métodos innovadores
de trabajo educativo. Agrega que Fals Borda afirmó que desde la investigación y la acción social se
puede promover con rigor el proceso perpetuo de construcción del conocimiento, desarrollar
instrumentos y buscar su continuidad (evaluación, control y seguimiento). Cifuentes (2011) señala
que IAP vincula acción y conocimiento porque ``el conocimiento efectivo se genera en la acción''
(p. conocimiento dialéctico (acción, reflexión, teoría, práctica social)). Es un instrumento, no el fin.
Este marco comprende, entre otras cosas, el proceso de observación desde la propia experiencia
que produce un verdadero conocimiento de la realidad en estudio, la participación crítica de los
colaboradores como miembros activos dentro de cada estudio, y el estudio se caracteriza por la
reflexión continua. Un umbral para generar cambios, transformaciones o mejoras. La integración
de la teoría y la práctica en su conjunto, la pertinencia del diálogo en el que se comparten
experiencias críticas de forma conjunta, se comparte información y comprensión a través de
actitudes de comprensión sobre el comportamiento y el conocimiento de todos los que participan
en la investigación.

La participación activa y crítica de los actores sociales durante el desarrollo del proceso heurístico
permite programar, ejecutar, replantear o redirigir la toma de decisiones sobre las acciones
estudiadas experimentando, analizando y reconociendo las dificultades, debilidades y
contradicciones en el campo y propuestas de acción resultantes y perspectivas de cambio social.
La acción comunicativa se torna ineludible en la generación de propuestas, el establecimiento de
canales horizontales de comunicación entre los diversos actores sociales y entidades involucradas
en la experiencia, el procesamiento y posterior difusión de la información generada en la
investigación.

BREVE RELATORÍA DE EXPERIENCIAS INVESTIGATIVAS CON IAP

Durante la primera década del siglo XXI acumulé cierta experiencia investigadora. Clasificamos
estas experiencias en tres tipos. experiencia docente en el aula, estudios de posgrado y estudios
dentro de proyectos organizacionales. Experiencia Educativa en el Aula: Durante los años antes
mencionados, he tenido experiencias desafiantes con estudiantes en los cursos que dirijo en la
Universidad, y con docentes compartiendo actividades de formación continua. Experiencia
educativa con pares docentes: dos cursos ofrecidos tanto por la Universidad Universidad
Libertador (UPEL) Formador de Docentes como por la Universidad Centro Occidental Lisandro
Alvarado (UCLA) utilizando Plataformas con Fines Educativos, tengo experiencia investigativa. Bajo
los Lineamientos para la Metodología Conductual de la Investigación Participativa. Durante dos
meses, moderé foros y chats de evaluación del aprendizaje y hablé con profesores del
departamento de formación docente. Mientras tanto, reflexionamos sobre cómo hemos
desarrollado la discusión y la participación que conducen a la retroalimentación del conocimiento
y cómo hemos desarrollado prácticas de evaluación. Cosas a mejorar, elementos a incorporar,
experiencias de otros docentes, instituciones, reseñas de latitud, referencias bibliográficas
actualizadas, etc. Durante y al final del desarrollo de la experiencia, se recogieron testimonios
tanto escritos como orales para describir los cambios en el pensamiento de los docentes sobre las
visiones de evaluación del aprendizaje y las estrategias de evaluación, y para integrar nuevas
formas de asumir las funciones de sus evaluadores.

Investigación con fines de titulación

Entre 2005 y 2008, como parte de mi doctorado, desarrollé un proyecto de investigación


denominado "Evaluación Formativa: Una Perspectiva de Investigación para la Formación Docente
en un Ambiente Virtual de Aprendizaje". La investigación tuvo como objetivo crear enfoques
teóricos para apoyar el concepto de evaluación formativa en un entorno virtual de aprendizaje.
Fue desarrollado a través de un curso en línea llamado "Evaluación del aprendizaje en un entorno
virtual" realizado por un grupo de co-investigadores. En la dimensión ontológica, la realidad social
fue asumida como una interacción dialógica y dialéctica generada por los procesos de reflexión-
acción-reflexión. El itinerario de investigación nos encaminó a consolidar una nueva visión de la
evaluación del aprendizaje desde la perspectiva del aprendizaje y, por tanto, a concretar
estrategias de evaluación y procesos participativos acordes con entornos virtuales caracterizados
por su énfasis. como protagonista de su propio aprendizaje y el dominio de los procesos de
autoevaluación y evaluación entre pares apoyados en los mecanismos de metacognición,
autorregulación y autonomía.
Proyectos institucionales

En él desarrollamos actividades con el objetivo principal de generar procesos para la comprensión


de la práctica evaluativa del personal docente de la UPEL-IPB. Entre sus objetivos específicos se
encuentra la aplicación de un proceso de diagnóstico para conocer las voces de los actores
sociales, sus necesidades específicas en este ámbito, además de generar procesos de reflexión
permanente en relación a sus acciones evaluativas. Entre las actividades más relevantes
desarrolladas en este proyecto se encuentran espacios de reflexión sobre la práctica evaluativa
desplegada con diferentes grupos de docentes en diferentes departamentos de nuestra casa de
aprendizaje; de igual forma con la Comisión de Evaluación Institucional, integrada por
representantes de cada departamento.

El segundo proyecto se denomina “Cambiando el tamaño de la investigación como eje rector de la


praxis educativa en la Universidad Pedagógica Experimental del Libertador, Institut Luis Beltrán
Prieto Figueroa”. Para la implementación de este proyecto hemos implementado lo que
denominamos Sala de Interformación en Investigación, inicialmente organizada y dirigida a
docentes que gestionan cursos en el eje heurístico Curricular de todas las especialidades, tales
como Observación, Investigación Introductoria, Investigación Educativa y Ejecución de Proyectos, y
luego socializado a todos los docentes de nuestra Universidad. Durante el proceso de encuentro,
los docentes realizaron varios productos, como artículos para revistas científicas y diarios
regionales; organizan presentaciones, diseñan proyectos y forjan caminos de investigación para
aplicar a la Coordinación de Investigación, entre otras cosas.

APROXIMACIONES CONCLUSIVAS

La IA ha mostrado dos tendencias principales: la sociológica, con su principal exponente


latinoamericano, el sociólogo colombiano Orlando Fals Borda, quien la denominó Investigación
Acción Participativa (IAP), con un marcado interés por el trabajo social, el estudio de las
comunidades, los movimientos sociales , guerrilleros, entre otros; y por otro lado, la tendencia
educativa, cuyo desarrollo más relevante se encuentra en los años sesenta en Europa,
principalmente en España e Inglaterra; Entre sus principales representantes se encuentran: John
Elliott, Wilfred Carr, Stephen Kemmis, Lawrence Stenhouse y Robin MacTaggart. En Colombia,
aunado al desarrollo de la IAP, con el interesante y profundo trabajo impulsado por Fals Borda, se
ha desarrollado una variante de la investigación-acción conocida como Classroom Action Research,
con temas de estudio específicamente relacionados con las situaciones complejas que se viven. en
el aula, desde la perspectiva de los actores sociales involucrados, quienes, al activar procesos de
reflexión y autocrítica sobre su actuar en el aula, logran mejoras, cambios y transformaciones
profundas de sus prácticas y las convierten en prácticas educativas legítimas, con los efectos
positivos resultantes en la vida institucional cotidiana. La investigación-acción, la investigación-
acción participativa o la investigación-acción en el aula, según la corriente elegida para abordar
una realidad en investigación, representa fases, etapas o momentos importantes para el adecuado
empoderamiento de los investigadores y co-investigadores. , para que se lleve a cabo una
investigación sistemática, rigurosa, crítica y legítimamente académica, como fue el enfoque
original de Kurt Lewin, el padre de esta metodología.

La implicación activa de los protagonistas del estudio, junto con los procesos de reflexión crítica y
el interés por promover transformaciones sociales, marca una de las grandes diferencias de esta
metodología frente a otras dentro del enfoque cualitativo. La investigación acción participativa
promueve la integración del conocimiento y la acción, ya que permite a los usuarios participar,
conocer, interpretar y transformar la realidad en estudio a través de las acciones que ellos mismos
proponen como alternativas de solución a los problemas propuestos identificados por los propios
actores sociales. y cuyo principal interés es provocar cambios y transformaciones definitivas y
profundas. Por lo tanto, creo que este método de investigación promueve procesos profundos de
reflexión y autorreflexión, fomenta la acción duradera y logra cambios y transformaciones reales
en el pensamiento de los actores sociales involucrados.

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