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Imaginación Sociológica – C.

Wright Mills

Los hombres habitualmente no relacionan sus inquietudes con las contradicciones


institucionales. No poseen la cualidad mental esencial para percibir la interrelación del hombre
y Ia sociedad, de la biografía y de la historia, del yo y del mundo. La plasmación de la historia
rebasa la habilidad de los hombres para orientarse de acuerdo con valores preferidos.

Mills expresa que “la imaginación sociológica nos permite captar la historia y biografía y la
relación entre ambas dentro de la sociedad. Esa es su tarea y promesa” Al hablar de la tarea y
promesa se refiere a la sociología y su promesa de lo que debe aportarle a la sociedad.

Mills habla de la diferencia entre inquietud (malestar que perjudicará a un sujeto en particular,
que debe resolverse de manera privada) y problema (asuntos que afectan a un sistema y grupo
de personas más grande, que debe resolverse de manera pública ya que está relacionado a lo
estructural y se debe analizar a quiénes dan respuesta dentro de la sociedad).

Es importante identificar qué valores se encuentran amenazados y exteriorizados, sea porque


se amenazan los valores individuales del sujeto, o los valores de la sociedad o un colectivo de
personas, de aquí se desprende la diferencia entre una inquietud o un problema social.

Por ejemplo, en una sociedad de 100.000 habitantes, si 100 no tienen empleo se pueden
identificar las inquietudes de cada uno, en cambio si son 70.000 los desempleados, hay un
problema desde la institución de empleo y debe solucionarse de manera colectiva. Los valores
amenzados están vinculados a una institución, y se pone en crisis porque lo vemos amenazado
y no responde a las necesidades o forma de vida del conjunto social.

La imaginación sociológica va a desarrollar la capacidad de la razón, es decir, analizar la


información que tenemos, nuestro contexto, lo que está sucediendo, y poder desarrollar
interpretaciones lúcidas y llegar a soluciones lo más objetivas posibles. Si carecemos de ésta
cualidad, no se podría distinguir entre inquietud y problema.

La imaginación sociológica permite comprender el escenario histórico en cuanto a su


significado para el interior y para la trayectoria exterior de diversidad de individuos. Permite
tener en cuenta cómo los individuos son falsamente conscientes de sus posiciones sociales.
Darse cuenta de la idea de estructura social y usarla con sensatez es poseer imaginación
sociológica.

El primer fruto de esa imaginación es que el individuo puede comprender su experiencia y


evaluar su propio destino localizándose a sí mismo en su época; de que puede conocer sus
propias posibilidades si conoce las de los individuos que se hallan en sus circunstancias. Se
espera con ésta cualidad que el hombre capte lo que está ocurriendo en el mundo y en ellos
mismos como puntos de las intersecciones de la biografía y de la historia en la sociedad.

Sin embargo, es importante distinguir racionalidad de razón. Como dicho por Mills “el hombre
con racionalidad pero sin razón”, expresando la importancia de diferenciar éstas dos, y
entender que racionalidad se refiere a una automatización de los actos, la falta de reflexión
ante mi entorno y contexto. La racionalidad es necesaria varias veces, pero llevada al extremo
se pierde la capacidad de identificar problemas en la sociedad, por esto se habla de desarrollar
la razón, que es una facultad que nos permite reflexionar sobre nuestro contexto y en base a
eso tomar las decisiones adecuadas.

Cuando tenemos que empezar a replantear que nuestras decisiones están definidas por el
entorno y no por nosotros, debemos apelar a la razón para reformular aquello que
entendemos como únicas opciones dadas. Aquel que no sea capaz de desarrollar la razón se
convierte en lo que Mills define comoRobot Alegre, un sujeto apático que racionaliza todos sus
actos y no le interesa la reflexión de su realidad y no se vincula ni con los valores amenazados.

Con racionalización podemos referirnos también al modo en que un individuo llega


sistemáticamente a regular sus impulsos y sus aspiraciones, su modo de vivir y sus modos de
pensar, con estricto apego a las “reglas y estatus de la organización”. La organización social se
apropia de la razón de los humanos. La razón, por lo contrario, es la capacidad de formular
nuevas opciones y pensar. Por ello cuanto más racionalizado uno se encuentre, menos
alternativas piensa, reformula. La razón nos proporciona libertad.

Cuando se habla de Verdad, lo que menciona Mills es que si uno logra la capacidad de
reflexión, lo que se hace es aproximarse lo más posible al verdadero origen o problemas de mi
contexto y poder elegir con mayor libertad, a pesar de que la verdad tiene una carga subjetiva,
debido a que el sujeto realiza ésta búsqueda y por lo tanto tendrá su carga ideológica
incorporada que le permitirá encontrarse con sus valores y pensar las opciones a formular, y
retroalimentar la imaginación sociológica para llegar a la libertad, aquella capacidad de
formular las opciones posibles y desarrollar la oportunidad de elegir.

La distinción más fructuosa con que opera la imaginación sociológica es quizás la que hace
entre las inquietudes personales del y los problemas públicos.

Se presentan inquietudes en el carácter de un individuo y en el ámbito de sus relaciones


inmediatas con otros; tienen relación con su yo y con las áreas limitadas de vida social que
conoce directa y personalmente. Una inquietud es un asunto privado, los valores amados por
un individuo le parecen a éste que están amenazados.

Muchas veces las inquietudes que tenemos no pueden ser formuladas porque no entendemos
el contexto en el que estamos, y muchos problemas estructurales no son resueltos.

Los problemas trascienden el individuo y tienen que ver con la organización de las
instituciones de una sociedad. Un problema es un asunto público, se advierte que está
amenazado un valor amado por la gente.

Cuando la gente estima ciertos valores y no advierte ninguna amenaza sobre ellos experimenta
bienestar. Cuando estima valores y siente que están siendo amenazados experimenta una
crisis, y si ello afecta a todos sus valores siente pánico. Cuando no se estima ningún valor ni se
perciben amenazas se experimenta la indiferencia, si ésta indiferencia afecta a todos los
valores se experimenta la apatía. Si no se estima ningún valor, pero se percibe alguna
amenaza se experimenta el malestar.

Mills expresa que La Promesa de las ciencias sociales y la sociología es de poder poder llevarle
a los sujetos de una sociedad la mayor información posible para poder utilizar la imaginación
sociológica, desarrollar la razón y elegir con libertad. Los sujetos están limitados por las órbitas
que vivimos y los comportamientos automatizados, y allí es donde las ciencias sociales tienen
como rol llevarnos a la diferenciación de los contextos para poder aportar a la sociedad y
retroalimentarnos de las decisiones tomadas.

Cree que la primer tarea del sociólogo consiste en poner en claro los elementos del malestar e
indiferencia contemporáneos, esta es la demanda central que le hacen los otros trabajadores
de la cultura. Es a causa de esto por lo Mills cree que las ciencias sociales son el común
denominador del período cultural, y la imaginación sociológica la cualidad mental más
necesaria de la vida cultural.

Mills enumera tres papeles en los que podría actuar el investigador social:

- El rey filósofo: hacer rey al “hombre de razón”. Muchos investigadores no aceptan la


razón como un valor social cuando se la considera en relación con los hechos de poder.
La idea va en contra de la democracia porque es una aristocracia de talento.

- El consejero del rey: el investigador social individual tiende a perder su autonomía


moral y su racionalidad de independencia para dejarse llevar por las tendencias de la
sociedad. Es difícil interpretar este papel sin perder integridad.

- Permanecer independiente: Hace su propio trabajo y elige sus propios problemas. Nos
lleva a pensar la ciencia social como un aparato de inteligencia pública interesado por
los problemas, las inquietudes y las tendencias de nuestro tiempo. Se reconoce como
parte de la sociedad y se ubica dentro de ella convirtiéndose en un hombre político. Su
tarea trasciende intelectualmente el ambiente en el que vive.

En otras palabras, se trata de aquellos que tiene poder y lo saben (rey), aquellos cuyas
acciones tienen consecuencias y requiere responsabilidad (consejero), y aquellos que carecen
de poder y cuyo conocimiento se limpia a su ambiente cotidiano (independiente).

Sociedad, Estructura Social y Sociología – Osvaldo Gagliardo

La sociología hace un análisis para entender la relación entre los sujetos, y comprender que a
partir de ese análisis y comprender esas relaciones, se pueden modificar las sociedades. Esto
último es considerado tanto una opción como un derecho.

La sociología tiene como objetivo principal aportar a que los individuos y grupos de una
sociedad accedan a la mayor cantidad de opciones para decidir su presente y su futuro,
sosteniendo que para poder influir positivamente en las condiciones de vida propias, el
conocimiento social es imprescindible.

Ese conocimiento genera el diagnóstico social, y ésa base se aplican las medicinas sociales,
que son las decisiones económicas y políticas. Éstos diagnosticos pueden ser tanto acertados
como desacertado, teniendo la posibilidad de favorecer o perjudicar a un conjunto social. En
éste marco, el rol de los científicos sociales es aportar datos e información relevante para
interpretar la realidad social y definir aquel diagnóstico.
Entender cómo se estructura la sociedad forma parte de los objetivos de la sociología. Las
organizaciones sociales comparten creencias y valores, y tienen la necesidad de ordenarse
estableciendo criterios y regulaciones, la necesidad de establecer y ordenar recursos, y la
necesidad que tienen los grupos de ordenarse y agruparse.

Esto último es por naturaleza y en el caso de los seres humanos es imprescindible por dos
cuestiones básicas: la física, que comparten con el “reino animal” (sexuales, alimenticias, de
supervivencia) y la psicológica, que les aporta sus rasgos distintivos “humanos”.

En base a esto, se distingue el plano físico-biológico y el plano simbólico-emocional. El


primero corresponde a lo que nos vincula a los animales, la supervivencia, la alimentación, la
reproducción y más. El simbólico-emocional se instaura con la ley del incesto, lo que genera la
inauguración del proceso cultural, es decir donde abandonamos el agrupamiento animal e
inauguramos la sociedad humana.

La fuerza contenida del instinto sexual generó la energía humana cultural, que llamamos
“libido”, aquella que los humanos canalizamos a través del trabajo, el motor que impulsa el
desarrollo cultural. Y a partir de ésta energía, se genera la organización del aparato psíquico.

La consecuencia de la ley de prohibición del incesto trajo un ordenamiento social y produjo un


impacto en la sociedad en la generación de la psiquis, que permite ordenar los pensamientos
en dos fases, la capacidad de imaginar (proyectar, imaginar y trabajarlo y construirlo) y la
capacidad de simbolizar (reemplazar una cosa por otra, asignarle significado a un artefacto
relacionado con aspectos culturales, historia y experiencias de una sociedad). El sujeto
construye vínculos a través de su base afectiva.

Un grupo social tiene necesidades tanto primarias (tiene que ver con la supervivencia, la
necesidad de satisfacer la sed por ejemplo) como secundarias (qué escojo como líquido para
satisfacer la sed).

Lo que se obtienen son cuatro sistemas que se encargan de dar respuesta a éstas necesidades.
Por un lado está el sistema cultural que da respuesta a los valores, teniendo como labor
reproducirlos y mantenerlos. El sistema político que plantea el ordenamiento social. El sistema
económico que administra los bienes y un sistema de relaciones que ordena las características
que tienen los vínculos de los actores que conforman la sociedad.

En base a esto, uno puede reconocer éstas características en distintos grupos sociales, pero la
forma que se organiza están basadas en los grupos sociales que la conforman, las
características de la sociedad, su relación con el medioambiente y el contexto en el que se
construyeron.

Al análisis de la sociedad se puede realizar desde un aspecto sincrónico (cuando lo


consideramos quieto o inmóvil) o diacrónico (cuando está en movimiento). Desde lo sincrónico
se puede entender qué piezas conforman a la sociedad y cómo están ordenadas, y desde lo
diacrónico, el funcionamiento, objetivos que persiguen y su evolución. Éstos tipos de análisis
permiten entender cómo se conforman los sistemas y cómo es la relación entre los distintos
sistemas como el político con el económico por ejemplo.
La Construcción Social de la Realidad – Berger & Luckmann

“Todo desarrollo individual del organismo está precedido por un orden social dado, o sea, que
la apertura al mundo es intrínseca a la construcción biológica del hombre y siempre precedida
por el orden social” esto quiere decir que las instituciones van a ser quienes van a dar pie a
éstas pautas y comportamientos de los sujetos, y seremos nosotros los que transmitimos y
seguimos éstas pautas.

El concepto de institución puede corresponder tanto a aquellas entidades físicas que


reconocemos, pero también un concepto desvinculado de lo tangible sino que corresponde al
concenso social que significa una institución, el concenso que hacemos como sociedad en
cómo desenvolvernos frente a situaciones. Las instituciones a pesar de ser concensos de la
sociedad, se pueden replantear.

Cuando se habla de institución puede ser no sólo la institución educativa que conocemos, sino
también la institución educación, y institución saludo, que representan que como sociedad
definimos que ésta es la mejor forma de resolver determinada necesidad o problema. Las
instituciones controlan el comportamiento humano estableciendo pautas definidas que
canalizan la forma de hacer las cosas.

Toda actividad humana está sujeta a la habituación. Todo acto que se repite con frecuencia
crea una pauta que luego puede reproducirse con economía de esfuerzos y que ipso facto es
aprehendida como pauta por el que la ejecuta.

La institucionalización aparece cada vez que se da una tipificación recíproca de acciones


habitualizadas por tipos de actores. Dichas acciones siempre se comparten y son accesibles a
un grupo social.

Para la sociología la raíz de dos características claves que tiene una institución son la
historicidad y el control. La primera establece que si ésta institución no se repitió a lo largo del
tiempo, no se convalidó, y la forma de convalidarla es que se siga reproduciendo de la misma
forma, y cuanto mayor historicidad tiene mayor peso tiene en la sociedad ésta institución, y
cuánto más tiempo se sostiene más difícil es replantearla, por ejemplo la institución
matrimonio o familia. Mientras que la segunda mantiene que las instituciones controlan el
comportamiento humano para volvernos más predecibles en base a las pautas que establecen.

El proceso de institucionalización aparece cada vez que se da una tipificación recíproca de


acciones habitualizadas por los actores. Es importante notar que las instituciones se
incorporan y validan a lo largo de la vida, y para que haya una internalización de una
institución dada alguien nos la debe haber presentado.

Ésta internalización es la interpretación de una pauta que se nos muestra, y reconocemos que
es de ésta manera, abandonando la acción de adquirir una institución de forma automatizada
y creyendo que es la única viable.

La objetivación de aquella institución se refiere a la simbolización de la práctica, donde las


instituciones son una actividad humana objetivada. Cuanto menor es la internalización de la
institución por parte del sujeto, más permeable es a la objetivación de la misma.
Por último, se le denomina externalización a la puesta en práctica de las pautas habitualizadas
y que ahora el sujeto responde llevando a cabo acciones específicas. Un ejemplo de ésto es el
saludo con puño implementado en la pandemia, donde previo a ésta, si saludaba de ésta
forma le resultaría raro a la gente, pero por el contexto presentado, hubo una internalización,
objetivación y externalización de la práctica, completando el proceso de institucionalización de
la práctica mencionada. La externalización y la objetivación son momentos de un proceso
dialéctico continuo.

La conciencia reflexiva superpone la lógica al orden institucional. Sobre el lenguaje se


construye el edificio de la legitimación, utilizándolo como instrumento principal. El lenguaje
objetiva las experiencias compartidas y las hace accesibles a todos los que pertenecen a la
misma comunidad lingüística.

Dentro del proceso de institucionalización, dentro de aquellas que formamos parte tenemos
un rol definido. Los roles van a ser la función a cumplir dentro de la institución, y no va a estar
limitado a un rol por persona necesariamente (se puede ser docente y estudiante en
simultáneo en la institución educación). El rol permite predecir el comportamiento del sujeto
determinando sus pautas de comportamiento y conformando un orden institucional.

Éstos roles adquiridos producen modificaciones en el comportamiento e ideología del sujeto.


El desempeño del “rol” representa el “rol” mismo. Algunos lo representan simbólicamente.

El origen de los roles reside en el mismo proceso fundamental de habituación y objetivación.


Los roles aparecen cuando se inicia el proceso de formación de un acopio común de
conocimiento que contenga tipificaciones de comportamiento, proceso que es previo a la
institucionalización.

Un concepto importante es la reificación. Esto sucede cuando una práctica o institución se


objetiva a tal punto que ya no se piensa como construida y reproducida por el hombre sino
como algo natural que el hombre no participó de su convención “así fue es y así fue dado”.
También puede ser visto como un concepto de deidad, como si “esto es y siempre fue así, y no
debe cambiar”.

La reificación es la aprehensión de fenómenos humanos como si fueran cosas, y se puede decir


que el mundo reificado es, por definición, un mundo deshumanizado donde el hombre no
ejerce ningún control. Puede describirse como un paso extremo a la objetivación. Los roles
pueden reificarse al igual que las instituciones.

La reificación es la acción de bloquear la posibilidad de replantear las instituciones y se


genera una limitación social de plantear soluciones a malestares sociales. Si el matrimonio lo
convalidamos como la única unión existente entre sujetos, está siendo reificado. Teniendo en
cuenta que solamente podían participar sujetos heterosexuales, hubo un malestar como
sociedad que llevó a que se cuestione y se produzcan cambios en la institución, pero cuanto
más fuerte és y más perdura en la historia, más difícil es de cuestionarla y replantearla.

Si yo defino que el hombre no es el que la puso en la sociedad, el hombre no es quien la puede


modificar, naturalizando que es la única forma de hacerlo.
Hay una dialética entre el sujeto y sociedad, el sujeto no es si no es en sociedad y la sociedad
no es si no es mediante los sujetos, dando pie al proceso de socialización.

El proceso de socialización comienza desde el nacimiento, donde el individuo está


predispuesto a ser sujeto y socializado. El individuo inicia un proceso de socialización apenas
está en contacto con el entorno de familia, en donde se produce la primera etapa de
socialización, la socialización primaria.

En éste contexto el niño es permeable ya que nace sin una pre carga social, entendiendo que al
entrar en una familia lo que vemos es el único mundo que percibimos y la única forma de
hacer las cosas. Esto lleva a la conclusión de que el individuo, luego de ésta etapa de
socialización, está sujeto a una previa formación ideológica que nos prefigura la información
que tenemos de familia.

En éste ámbito predomina la familia y el afecto y esto hace que la ideología que se forma en
éste proceso sea muy difícil de cambiar, debido a que es lo primero que veo y que interpreto
que es como tal y la única forma de hacer las cosas. Somos fieles a lo que nos viene dado.

La conciencia retiene solamente una pequeña parte de la totalidad de las experiencias


humanas, parte que una vez retenida se sedimenta, vale decir que esas experiencias quedan
estereotipadas en el recuerdo como entidades reconocibles y memorables. También se
produce una sedimentación intersubjetiva cuando varios comparten una biografía común.

Un sujeto no se puede entender adecuadamente si se los separa del contexto social particular
en que se formaron. La autoproducción del hombre es siempre, y por necesidad, una empresa
social. Los hombres producen juntos un ambiente social con la totalidad de sus formaciones
socioculturales y psicológicas. Su humanidad y sociabilidad están entrelazadas.

Hay un quiebre entre la socialización primaria y secundaria que es el otro generalizado, donde
los agentes socializaciones primarios que eran nuestros padres, pasan a generalizarse y ser
otros agentes que no representan la única respuesta a las pautas de vida dadas. En ésta
instancia también el sujeto deja de ser el total para pasar a ser algo más general, dando pie a la
socialización secundaria.

En el proceso de socialización secundario, que no termina nunca, como sujetos comenzamos a


atravesar instituciones que no son solamente la familia donde hay otras convalidaciones de
pautas y una nueva perspectiva de lo que está bien y mal.

El sujeto incorpora y compara conceptos con otros instituciones y mundos que fueron
socializados de otra manera, que nos van a articular con nuestra socialización conceptos como
lo pueden ser las pautas de comportamiento. Estos intercambios cuestionan o deforman las
premisas de la socialización primaria, conformando nuestra ideología a lo largo de las primeras
etapas de la vida.

El sujeto es sujeto porque está sujeto a su ideología. El sujeto no es si no es mediante su


ideología y todo lo que hacemos está condicionado y definido por la ideología que tenemos.
Ideología y Aparatos Ideológicos del Estado – Althusser

La ideología pasa a ser el sistema de ideas y representaciones que domina el espíritu del sujeto
o grupo social. Los sujetos están condicionados por la ideología al momento de accionar.

Según Marx, la estructura de toda sociedad está constituída por todos los niveles articulados
por la superestructura (donde distinguimos la jurídico-político que constituye el derecho y el
Estado, y la ideológica que representa la religión, moral e ideologías) y la infraestructura (base
económica, unidad de fuerzas productivas y relaciones de producción).

Éstas dos coexisten y se vinculan entre sí. La infraestructura da forma y modela a la


superestructura y aquellas instituciones, mientras que la segunda y su ideología dominante
mantiene la infraestructura. La infraestructura le da sustento a las superestructura, pero sin
ésta superestructura la infraestructura no puede sostener ese ciclo.

Dentro de la infraestructura, tenemos la reproducción de las fuerzas de producción, o las


fuerzas productivas, y la reproducción de los medios de producción, que serán reproducidas
por la dinámica que se da con las superestructuras en las que se encuentran los aparatos del
Estado. Esto simboliza la forma que tienen las superestructuras e infraestructuras de mantener
la base económica.

Las relaciones de producción se dan en ámbitos educativos (escuelas) y formadores de


ideología (iglesia) mediante el traspaso de información a través de las instituciones. Las
condiciones de producción son el marco normativo de las relaciones de producción y están
dadas por los aparatos represivos del estado (normas y leyes).

Dentro de los aparatos de Estado de la superestructura diferenciamos el Aparato Ideológico


del Estado y el Aparato Represivo del Estado.

El Aparato Represivo del Estado se encarga de asegurar la reproducción de condiciones de


producción, determinando las condiciones (límites y sanciones) necesarios para que la
producción se siga reproduciendo. Establecen las normas y sanciones que rigen la sociedad y
son de carácter público porque afectan a toda la sociedad. Éstos aparatos se rigen en base a la
ideología dominante que tiene el poder del Estado.

El Aparato Ideológico del Estado conforma instituciones que forman a los sujetos sociales y se
encarga de la reproducción de las relaciones de producción, es decir cuáles son los roles del
sistema productivo para que las relaciones se sigan reproduciendo. Transmiten valores,
creencias y prácticas. Cuando un sujeto se institucionaliza y pasa por distintas instituciones
dentro de la socialización, absorbe las pautas del comportamiento dentro de éstos aparatos
ideológicos. Es de carácter privado debido a que tienen posturas independientes, por lo cual
las relaciones de producción se van a reproducir de diferente manera.

En otras palabras, el segundo instala la ideología dominante, y el primero reprime en los casos
en que los sujetos se aparten del cumplimiento de las normas que esa ideología sostiene. Son
imprescindibles en cualquier tipo de estructura social y es imposible la convivencia entre
sujetos sin un consenso de normas de convivencia.
Es importante distinguir que todos los aparatos ideológicos tienen condiciones de represión,
mientras que los aparatos represivos también operan con ideología.

La ideología es el sistema de representaciones (ideas, creencias, conceptos) que los sujetos


incorporan a través de los aparatos ideológicos (familias, clubes, iglesias) de manera tanto
consciente como inconsciente, transformando conductas y actitudes del sujeto.

La ideología según Althusser es una representación de la relación imaginaria de los sujetos con
sus condiciones reales de existencia, es decir, cómo nosotros entendemos esa realidad de
carácter imaginario que imaginamos en función de todos los valores y conceptos que
incorporamos dentro de la sociedad.

Althusser conceptualiza la ideología como un sistema de representaciones que se imponen a


los individuos y forma y transforman su conciencia, incidiendo en sus creencias, actitudes y
conductas. Una de las funciones básicas de este sistema, es la constitución de los individuos
en sujetos sociales.

La mayor parte de la adquisición de ideología es de manera inconsciente, producido dentro del


reservorio inconsciente. Durante la socialización nos sometemos a un proceso de incorporar
pautas que conforman nuestra forma de entender la vida, conformando la ideología del sujeto.
A partir de ahí, la mayor parte de la adquisición es inconsciente.

La ideología verifica una estructura profundamente inconsciente. Esto sin embargo no quiere
decir que es inmaterial, sino al contrario, puede ser material. No es una cuestión teórica.
Mediante ella se definen conductas concretas y prácticas.

La ideología propiamente dicha es privada, independiente del orden del Estado. Sin embargo,
cuando hablamos de una ideología de ámbito público, nos referimos a una ideología
dominante que afecta de una misma manera a todos.

Tenemos una parte sin comprender de aquellas pautas de comportamiento incorporados


debido a que lo tenemos en el reservorio inconsciente. Es imaginario porque hay una parte de
las pautas que, sin saberlo, no lo conozco, actuando como mediador entre sujeto y realidad.

El sujeto se socializa en el proceso de socialización primario dentro de su marco familiar,


incorpora los contenidos psicológicos básicos con los que estructura su aparato psíquico y se
perfila su estructura de personalidad. De ésta manera, se genera la formación de la ideología
durante el proceso de socialización del sujeto.

Esto le da pie a la relación imaginaria, que establece que la ideología es una construcción
entre la relación real y la relación imaginaria del sujeto con su entorno, es decir, cómo éste ve
la realidad y un imaginario que arma sobre esa realidad.

La relación imaginaria y el reservorio inconsciente permiten entender la realidad de la manera


que hayamos formado nuestra ideología. Según los valores que incorporo como propios es
cómo voy a interpretar la realidad, y se diferencia de persona en persona.

Carácter material de la ideología va a determinar las conductas del sujeto. Representa la


materialización de la ideología, es decir aquellos actos que realizan los sujetos en función del
inconsciente y consciente que pueden tener de la ideología. La materialización de la ideología
no siempre va a coincidir con el sistema de valores que se verbaliza, y mediante la
materialización de esos áctos que demuestran la ideología del sujeto, es que la ideología se
puede interpretar.

El carácter histórico de la ideología plantea que, según Althusser, no tiene historia propia,
sino que es eterna y omnihistórica, trasciende su propia historia porque la ideología siempre
está por fuera de ella y sólo existe a través de la historia de los sujetos.

El Diseñador – C. Wright Mills

Un diseñador que posee la cualidad de la imaginación sociológica probablemente pueda


desarrollar su disciplina de manera más consciente y reflexiva, entendiendo de mejor manera
las reales necesidades de la sociedad utilizando al diseño como principal herramienta. Si el
diseñador es consciente de que viene como sujeto cargado de una ideología, entiende que su
trabajo incluye la ideología que el diseñador posee. Mills que establece que el diseñador es un
operador cultural.

Mills expresa que hay un cambio del sistema productivo que comienza en la Segunda Guerra
Industrial pero se produce el mayor quiebre y termina de explotar luego de la WW2. El sistema
productivo comienza a sobrepasar la demanda de la sociedad, entonces lo que precisa éste
sistema para mantenerse y no tener pérdidas es generar consumo en la sociedad, y que el
consumo se debe apresurar, generando necesidades inexistentes en la sociedad para evitar las
pérdidas. Se da un pasaje de foco de la producción a la distribución.

Mills distingue entre Aparato Cultural y Aparato Comercial. El aparato cultural reúne todas las
organizaciones y actividades enfocadas a lo artístico intelectual y científico, dentro de esto
Mills ubica al diseñador dentro de su entorno natural. El aparato comercial logra coptar al
diseñador, en un rol similar a un agente de marketing, ya que es capaz de utilizar sus
conocimientos culturales y crear falsas necesidades en lugar de satisfacer las existentes. De
ésta manera, el aparato cultural funciona como un accesorio del aparato comercial para lograr
éstos fines mencionados.

Mills posiciona al diseñador en el lugar de estrella debido a que se encarga de desarrollar


estrategias para inculcarle a la gente lo que necesita. Sin embargo, Mills profesa que el
diseñador se debe al aparato cultural y al uso de su imaginación sociológica, utilizando sus
conocimientos de manera honesta y responsable, haciendo uso de la razón y siendo
consciente de su rol e influencia dentro de la sociedad.

Desde éste rol que le asigna al diseñador, Mills difunde los valores del artesano, proponiendo
volver a éstos valores para romper con la dinámica deshonesta enfocada estrictamente en el
aparato comercial y la creación de falsas necesidades en la sociedad. No se refiere a volver a la
artesanía en sí, sino en retomar sus valores, en darle valor al proceso y que el diseñador sea
consciente del mismo para que trascienda cuando el producto sea terminado, se incorpore en
la sociedad y transforme a los sujetos.
Cultura Social del Producto – Medardo Chiapponi

Chiapponi le asigna al diseño un rol no sólo proyectual, sino que uno estratégico como actor
relevante dentro de la política. Expresa que hay una visión tradicional del diseño industrial en
la cual genera innovaciones parciales en productos y servicios, sin ser un rol relevante,
pensamiento que hoy en dia ya cambió y mientras Chiapponi escribía estaba cambiando.

Éste cambio no sucedió previamente ya que la innovación era comprendida desde solamente
lo tecnológico y el determinismo tecnológico, una teoría que expresa que la tecnología se
genera a sí misma, dejando al diseño como una variable secundaria dentro del desarrollo
tecnológico.

Chiapponi en cambio propone que si se tiene una visión más sistémica del desarrollo de un
producto para entender que el diseño obtenga un rol más importante, debido a que existen
factores extra en la innovación que no son la tecnología, evoluciones económicas, culturales,
ambientales. Desde ésta perspectiva el diseño tiene un rol fundamental en el desarrollo de la
innovación tecnológica.

Dentro de los factores que caracterizan la innovación son la investigación (cómo tiene un lugar
importante en la innovación), los tiempos del proceso (pueden ser saltos disruptivos, o ser
incrementales donde de a poco producen cambios en un sector productivo), el grado de
incidencia en el contexto económico, su valor social, y su dimensión social e histórica.

El diseño según Chiapponi puede participar en distintos ámbitos de cambios en el desarrollo


de la innovación, sea como innovaciones estructurales, formales, funcionales, tecno-
productivas, administrativas y más, debido al carácter acumulativo de la innovación, tomando
conocimientos previos y aplicados a nuevas innovaciones. Esto le permite al diseño tener un
rol protagónico.

Dentro de las posibilidades de innovación para el diseño es fundamental la polinización, que


trata de llevar de un lugar a otro diversos conocimientos, donde el diseñador adapta un
conocimiento previo a un nuevo contexto debido a su visión proyectual.

Según Chiapponi, los actores privados, manifiesta que éstos sólo atienden innovaciones que
prometen ingresos en un corto tiempo. Si bien esto en parte es cierto, se deja de lado que
parte del proceso que permite que una empresa innove está dado por la generación de
conocimiento y tecnología, y tampoco considera cómo se transmite tal conocimiento a la
empresa. Esto lo que significa es que a mediano plazo las empresas no son tan competitivas
como Chiapponi supone.

Por otro lado, los actores públicos son los encargados de buscar y promover el desarrollo de la
innovación. También, son los encargados de generar los sistemas de innovación y generar
leyes y regulaciones que promuevan la innovación, dando derechos y garantías para aquellos
que invierten en la innovación.

Chiapponi distingue al financiamiento como actor clave en la innovación, identificar quién va a


ser el encargado de ésta etapa es de gran importancia. También menciona de abrir la “Caja
Negra” (concepto de Rosemberg), forma de entender la tecnología como una caja negra donde
pongo algo y sale otra cosa. Por ejemplo, pongo conocimiento y sale una patente. Pero si
abrimos la caja negra, descubrimos que no todo conocimiento es patentable, que no toda
patente genera beneficios y más.

También reflexiona sobre la investigación y desarrollo, donde además de lo añadido arriba,


habla de la relación entre competidores. Éstos procesos de investigación conjunta entre
competidores son denominados innovaciones abiertas y surgen como consecuencia de que
varias empresas líderes no tienen la capacidad de desarrollar nuevas tecnologías, entonces se
juntan empresas para producir avances en los conocimientos.

Entre las políticas públicas de innovación dentro de las empresas, algunas se centran en las
que produzcan mayor rentabilidad, sea por reducción de costos de producción, de controles,
reglamentos y más. También, hay empresas que quieren que se haga fácil el desarrollo de
nuevas innovaciones, si no hay políticas públicas que promuevan la innovación, no va a haber
infraestructura para que las empresas puedan innovar.

Dentro de las políticas públicas de innovación Chiapponi atribuye a las empresas como
principal usuario de éstas y al diseñador dentro de un rol fundamental en la producción de
políticas públicas debido a que sabe cómo satisfacer al usuario que son las empresas.

Conciencia Sustentable – Paulina Becerra

Becerra establece que “el proceso de diseño puede ser entendido como un proceso cultural
mediante el cual el diseñador interpreta la realidad y carga el producto de valores culturales y
sociales a través de su configuración”. El proceso de diseño es un proceso ideológico que carga
al producto de ideología de sus propios valores y se los entrega a la sociedad, retomando el
concepto de Mills que establece que el diseñador es un operador cultural.

El concepto del diseño dual comprende entender al diseño como resultado (aquellos
artefactos y sistemas obtenidos como resultado del proceso de diseño) y el diseño como
proceso (aquellas metodologías que nos permite llegar al producto).

Becerra tiene una visión sistemática de diseño ya que para solucionar problemáticas es
fundamental de manera integral. Esto se debe a que Becerra entiende al producto final como
una estructura compleja que no se puede abordar de una sola manera, sino que tenemos que
abordar y entender todo lo que rodea ésta problemática, vinculando el concepto de Mills que
el uso de la imaginación sociológica va a permitir solucionar un problema real.

El diseño estratégico es la metodología que el diseño usa para entender todas las variables de
una problemática para así crear una estrategia y un proceso, y de ésta forma llegar a un
resultado.

Los grandes sistemas tecnológicos son aquellos que buscan resolver los problemas
mencionados, y se caracterizan por contar con componentes relacionados, por lo que
cualquier cambio en uno afectará al resto, formando un sistema. Son los artefactos técnicos,
organizaciones, recursos naturales, artefactos legislativos, son todos los recursos que le
permiten al diseñador solucionar la problemática.
Los grupos sociales relevantes son grupos, instituciones o individuos relacionadas al artefacto
específico, de manera directa o indirecta. El diseñador debe conocer quienes forman parte del
problema para solucionarlo, entendiendo que cada grupo está relacionado en el mismo
artefacto de manera distinta y cómo se van a relacionar con la solución propuesta.

Para entender la doble flexibilidad interpretativa debemos considerar el debate con los
grupos sociales relevantes en nuestra posición de diseñador de hasta donde estoy
interpretando el problema y cuándo voy llegando a la solución. Ésta flexibilidad ocurre cuando
debato con los grupos sobre la solución ofrecida. Ésta flexibilidad tiende a cero cuando ambas
partes se ponen de acuerdo, y la dinámica socio técnica da respuesta al problema.

El diseño como proceso de construcción de valor se vincula con el concepto de que la


ideología se materializa a través de actos, objetos o servicios donde el diseñador carga valores
ideológicos y símbolos. El diseño genera lenguajes y estos son intercambios de mensajes que
se reflejan en los productos. Cualquier artefacto es un vehículo ideológico.

Cuando hablamos de sustentabilidad lo que se busca es que el desarrollo de diseño utilice los
recursos humanos, naturales y tecnológicos de manera equilibrada para reducir un impacto,
sea material o ambiental, que empeore la calidad de vida de las generaciones futuras.

El modelo sustentable de diseño que desarrolla Becerra tiene a la esfera social que
representa el bienestar humano, la esfera ambiental que representa el equilibrio del
planeta y la esfera económica que representa las ganancias de las organizaciones. El
conjunto de esferas ambientales, económicas y sociales es lo ideal, y que hará que el
producto perdure en el tiempo.

El rol político del diseñador menciona que todo lo que hace el diseñador a la hora de
solucionar una problemática, desde que se piensa hasta que se materializa la idea, todo lo que
hace es política, porque estamos decidiendo algo a la sociedad desde nuestros valores. El
compromiso político del diseñador implica no solamente conciencia de los problemas sociales,
sino que cualquier práctica materializada debe tener un sentido de identidad ya que se basa en
una postura genuina de la realidad.

Cuando Todos Diseñan – Ezio Manzini

“Nuestro mundo es el que nosotros construímos y al que le dotamos de significado”.

Manzini habla de la importancia y rol de la innovación social en el diseño, que está centrada
en desarrollos que promueven el bienestar social y tienen que ver con nuevas formas de
participación ciudadana, mejorar condiciones ambientales, mejorar el sector educativo y más.
Ésta innovación social se vincula con los nodos de las redes socio-técnicas a un cambio rápido
de tanto los sistemas técnicos como los sociales.

Distingue el modo convencional del diseño y el modo característico del diseño. El primero
está centrado en la tradición y plantea a que se le pueda dar respuestas a los procesos a través
de una tradición del diseño a través de haber vivido los problemas. El segundo está centrado
en las capacidades de las personas, las de sentido crítico y práctico, la creatividad. La
integración de las tres permite hacer posible soluciones previamente inexistentes.
Éste modo característico tuvo un rol importante para que el diseño tenga un rol de
importancia en el desarrollo. La crítica que se le hace al modo convencional es que las
tradiciones, a medida que se pierden, necesita volver a negociar y decidir entre las múltiples
opciones disponibles, haciendo que no sea lo mejor para solucionar problemas actuales.

Manzini a la hora de hablar qué es el diseño cita a Simon y llega a la conclusión de que el
diseño es una herramienta solucionador de problemas, pero que éstos no se pueden
solucionar sin una generación de sentidos y valores. Al momento de solucionar el problema,
se crea sentido, impactando en la sociedad en el modo que se solucionan las cosas.

También, distingue al diseño difuso (características inherentes que tiene cualquier sujeto por
ser miembro de una sociedad para llevar a cabo un proceso de diseño) y el diseño experto
(centrado a las personas capacitadas que se formaron para llevar a cabo el proceso). Esto tiene
que ver con las capacidades que tienen los profesionales en caso de expertos como las
capacidades inherentes al hombre que tiene para diseñar.

Manzini plantea que el diseño experto hoy en dia se está generando y se necesitan nuevos
conocimientos. Entonces por un lado plantea que los profesionales de diseño tienen nuevas
herramientas que permiten llevar a cabo actividades de codiseño, y que los diseñadores tienen
una cultura y saber hacer específica que se formó a lo largo del tiempo.

En éste marco de nuevos conocimientos es relevante la investigación de diseño, donde el


énfasis está en que hoy los problemas que aborda el diseño no son los mismos que se
solucionaban con los modos de diseño anteriores y no alcanza sólo con el saber hacer. Hay que
investigar nuevos procesos y formas de abordar problemas, de forma interdisciplinaria o no.

Según Manzini el diseño como investigación es una herramienta que permite formar nuevos
conocimientos, y la investigación de diseño, el proceso tradicional, permite sistematizar toda
esa información y generar un repositorio de conocimiento que permita a los actores tomar
aquella información disponible.

De ésta forma, Manzini crea un mapa del modo de diseño, donde a


partir de las categorías planteadas generó cuatro dimensiones para
agrupar a los actores que participan en el proceso:

Las organizaciones de base (se agrupan por fines políticos/ideológicos


para solucionar problemas, no tienen mucho manejo proyectual de diseño), los activistas
culturales (grupos que promueven la difusión de cultura y colaboran con las organizaciones de
base para instalar un tema y generar demanda de aquél, tienen un mejor manejo de las
herramientas de diseño), las agencias de diseño y comunicación (empresas u organizaciones
dedicadas a servicios de diseño que tienen un conocimiento proyectual experto que está
volcado a la comercialización de productos, son los encargados de proporcionar sentido más
que resolver problemas) y las agencias de diseño y tecnología (existen estríctamente para
solucionar problemas enfocados en el usuario, tienen un conocimiento experto y hacen
participar a los actores vinculados al problema).

Mientras las de diseño y comunicación proporcionan sentido y están más alejadas del
problema y comunidad, las de diseño y tecnología están directamente vinculadas aquellos.
Cuando vemos cómo se da la práctica y la resoluciones de problemas a través del diseño,
aparece una cultura emergente, donde el diseño difuso se empieza a acercar al profesional, al
empezar a consultarlo y aprender de ello, mientras que el experto se acerca a la difusa y el
sentido que difunde que debe entender para solucionar el problema, logrando entender en
base al intercambio qué sentido se le va a dar a la solución de éste problema. Las culturas de
diseños emergentes se caracterizan por sus prácticas innovadoras y la creación de sentido.

Se puede entender entonces, que la única forma de solucionar el problema es generar una
solución técnica que sea valorada por las comunidades y que tenga un sentido cultural y
socialmente afectado. Por lo tanto, resulta evidente que ésta es la única forma de asegurar
que la solución técnica obtenida sea cultural y socialmente aceptable para los sujetos y
comunidades beneficiados por aquella.

Para que todo esto suceda, según Manzini, hay que generar una cultura de una sociedad
sostenible, haciendo que el diseño se involucre de una manera mucho más relacionada con el
contexto y su comunidad afectada. Según él, le asigna a la sociedad sostenible tres variantes
de diseño, la del diseño como creador de lugares, el diseño como activista y la al diseño como
fabricación.

Esto nos lleva a analizar cómo se articula la innovación social en el diseño, que se manifiesta a
través de reconocer las capacidades inherentes del sujeto para diseñar, escucharlo y participar
en un proceso de co-diseño que genera un debate social que termina formando redes en las
que la sociedad termina decidiendo o impone el cambio, ya no sólo se contrata un profesional
para tomar decisiones sino para guiar hacia el lado correcto.

Por lo tanto, dentro de los resultados de la innovación social tenemos que:

- El proceso de diseño pasa a ser más complejo, la visión que se tiene del problema es más
grande y donde los actores que participan son varios.

- Las iniciativas de diseño tienen un tiempo y actividad finita, y si bien participan los actores
involucrados en la problemática, la diferencia entre el proceso de diseño y la iniciativa es que
si bien el primero plantea un cambio más grande y rupturista, las iniciativas planifican acciones
concretas que van a permitir impactar en la forma de vida de los actores involucrados.

- El trabajo en coaliciones define al trabajo que se da con los actores para generar un entorno
más amplio y favorable para conseguir los resultados deseados.

- El trabajo para coaliciones significa el trabajo que se da con los actores no formados
participantes o con experiencia en diseño difuso para promover y potenciar las habilidades
que tengan de diseño.

En general, lo que propone Manzini como resultados de la implementación de conceptos de


innovación social en el diseño, es generar una cultura en la que se trabaje a partir del co-
diseño, reconociendo a los actores que participan en el proceso y que los expertos deben
moderar éste proceso, y reconocer la capacidad del sujeto social para resolver problemas a
pesar de no formarse con disciplinas proyectuales.
Desglobar el Diseño – Arvind Lodaya

Lodaya reflexiona sobre los aspectos económicos del diseño, donde hay un nivel de desarrollo
occidental que está centrado en los valores que proponen los países centrales, y él lo plantea
como algo no viable debido a que lo que se proponen éstos no tienen relación con los países
extranjeros. Entonces, si el desarrollo responde a culturas extranjeras, los procesos de
innovación van a quedar descontextualizados.

A partir de esto, reúne y cuestiona el nivel de desarrollo tenemos, cómo esto afecta a la
industria local y qué tipo de innovaciones hacer de acuerdo al contexto. Compara la calidad de
vida entre países desarrollados de subdesarrollados y plantea contradicciones que dicen que
mientras las economías más desarrolladas (norte) buscan tecnologías más eficientes y
sustentables, los subdesarrollados (sur) tienen que usar tecnologías más baratas, probadas y
generalmente no tan eficientes.

Los países dominantes tienen una idea de una abundancia eterna, donde hay desarrollos y se
vuelven ricos, mientras que los subdesarrollados tratan de subirse a la misma senda, pero al
volverse algo insostenible se profundiza la brecha entre las dos.

Lodaya reflexiona sobre el crecimiento y desarrollo. Piensa que en el contexto de abundancia


eterna, cuál es el rol que debe cumplir el diseño? Lodaya cuestiona si el rol del diseñador debe
ser en su gran mayoría la búsqueda del cremiento económico y critica el rol del diseñador
como generador de consumo en el sentido de qué tan viable sigue siendo hoy en dia.

En cuanto a la sustentabilidad, según él el diseño crea valor, pero no es el valor que debe tener
el diseño. Crea valor comercial y valor de uso, pero que los desarrollos del sector empresario
no tienen riesgos económicos, diseñar una silla o un auto y no cambian el modelo de consumo
ni el paradigma de uso. De ésta manera opina que se mata la capacidad de innovación que
tiene el diseño.

Para cambiar esto último, propone cambiar el foco del empresario en las ONG, ya que están
dispuestas a desarrollar proyectos estratégicos a largo plazo con más riesgo y mayor capacidad
de desarrollo. Pero si se alejan tanto del mainstream del diseño y cambiar el paradigma, cómo
impacta esto en un desarrollo de un modelo productivo?

Lodaya cree que las ONG pueden desarrollar proyectos que promueven el desarrollo social y
sostenible en lugar de las empresas que buscan los retornos económicos rápidos. Esto se
complementa a la visión de innovación de Chiapponi.

En base a esto, plantea que el arte ayuda a tener un pensamiento creativo no convencional
que impone el sistema productivo. Esto se contrapone al pensamiento con el cual se formó,
que el diseño tenía como fin generar negocios, y si no los generaba, se los acerca más al arte.

Los valores empresarios centran su lógica en los intereses económicos, mientras que lo que
propone Lodaya es una agenda que vincula lo social, lo económico y una serie de problemas
que no suelen ser abordados por una empresa. Entonces, dejar la agenda de problemas a
solucionar el diseño solo para satisfacer el pensamiento comercial es un gran problema y
atenta contra el desarrollo del conocimiento.
Para solucionar esto, Lodaya plantea una serie de soluciones. Una de éstas es comprender la
economía política del diseño, es decir, quien gana o quien pierde cuando se hace uso del
diseño, qué pasa con el impacto acumulativo, la sociedad y el medioambiente.

Cuestiona el crecimiento y el desarrollo, preguntando si hay una sola manera de crecer y


cuestiona si el crecimiento entre países centrales y extranjeros se tiene que dar de la misma
forma. Si nosotros no cuestionamos, tomamos una idea de desarrollo de países centrales y sus
sistemas de valores, haciendo uso del “contrabando de ideología”. Lodaya se opone a la visión
única del desarrollo, y que globalización no significa únicamente traer el modelo occidental.

También, propone revisar y reorientar la pedagogía del diseño, creyendo que es el principal
responsable de provocar cambios para fomentar sustentabilidad. Revisar el método y
plantearlo desde un pensamiento sistémico que vaya más allá de los objetivos comerciales de
las empresas.

Implementa la idea de reflexionar y consolidar antiguas habilidades o nuevas habilidades para


equiparnos, critica el proceso del diseñador cuando no reflexiona ni busca hacer de ése
problema una solución sostenible y lo hace de manera automática. Promueve el desarrollo del
individuo, que él define como gente con capacidad de poder adaptarse y acostumbrarse a lo
incierto donde no hay siempre una única respuesta, se debe ser flexible en la forma de abordar
y entender los problemas.

Habla de la importancia de lo espiritual, es decir, la relación entre el cambio que vos querés y
la fortaleza espiritual para llevar a cabo éste cambio. Se basa en el carácter, templanza,
espíritu, perseverancia y no está vinculado a la religión. Menciona la importancia de alterar lo
convencional y unir fuerzas con visionarios, relacionandonos con otro tipo de disciplinas y
profesionales que aporten a otro punto de vista.

Pregona no trabajar de manera aislada, reconocer las diferencias entre acuerdos y


desacuerdos, la aceptación del error y la exclusión del miedo.

Le da importancia a dar una base a la red, es decir, encontrar enfoques multidisciplinares para
dar una solución al desarrollo, y entender que muchos de los casos de innovaciones social que
generan crecimiento y dinamizan la economía no salieron del pensamiento corporativo, sino
que de uno creativo que luego pasó a transformarse en un negocio.

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