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perinatales y embriología.
Los cuidados paliativos perinatales son aquellos a los que se debe acudir en caso
de que el paciente traiga consigo una enfermedad en la que se sabe que no podrá
vivir mucho tiempo y lo único que queda es darle un tratamiento para que el tiempo
que le quede de vida, pueda permanecer sin dolor, optimizando su calidad de vida
y así pueda descansar e irse lo más cómodo posible, estos cuidados no incluyen
solo al recién nacido, si no también a sus familiares, sobretodo a los papás, durante
estos cuidados se lleva un seguimiento psicológico ya que es complicado este duelo
muy largo y duro por el que tienen que pasar, fueron varios meses en la espera de
su hijo, llenos de esperanzas e ilusiones puestos en el y resulta bastante complicado
lidiar con esta pérdida.
El personal de salud que tratará esto con ellos debe de tener bastante empatía hacia
los padres y familiares, tener una mentalidad dura y sensible al mismo tiempo para
poder ayudar, si la persona a cargo de estos cuidados hacia el paciente y la familia
es demasiado sensible, lo único que traerá como consecuencia es que transmita
este sentimiento a los familiares y estén aun más tristes por su pequeño, o si al
contrario el personal de salud es muy frio o duro, y no tiene este tacto hacia los
familiares, resultará muy incomodo para ellos, por eso, debe de existir un equilibrio
entre ser empáticos y sensibles a la situación pero también saber manejar la
situación de dolor y tristeza, durante este proceso debe de existir la bioética para
poder apoyar al paciente y familiares en cuanto a lo que ellos decidan hacer, un
ejemplo es en cuestiones religiosas, habrá muchos pacientes de religión católica
que decidan bautizar o rezar una oración al recién nacido en cuestión antes de su
partida y el doctor o quien esté ahí debe apoyar su decisión y colaborar en lo que
los familiares le pidan.
Al igual que se debe de tener la virtud de la paciencia, personas en esas situaciones,
no tienen noción de como están tratando a las personas de su alrededor o si lo que
dicen puede afectar a los demás, ellos están desesperados, tristes, desconcertados
de pensar ¿Por qué a mi?, ¿Por qué mi hijo?, a veces se encuentran enojados con
la vida o con ellos mismos y se debe de comprender esa parte, somos seres
humanos con muchas emociones que a veces en momentos donde no hay dolor,
no sabemos controlarlas, no imagino como puede estar una persona mentalmente
durante ese duelo tan doloroso y triste.
Se debe intentar proporcionar todas las facilidades que requieran los familiares para
estar con el recién nacido para que puedan estar con el hasta su ultimo latido si
ellos así lo prefieren, esto les da la confianza y un poco de tranquilidad a los padres
o familiares.
Después del lamentable fallecimiento del paciente, se debe seguir llevando este
control psicológico de los papás, hermanos u otros familiares a los que les esté
afectando la pérdida ya que hay diversos trastornos de salud que derivan del estado
mental de las personas, por ejemplo, la anorexia, la anemia, etc. Los familiares se
encuentran tan devastados que no les importa comer o su salud en general por lo
cual es importante seguir llevando este proceso por lo menos 13 meses después
del trauma.
Es importante que los doctores estén preparados para todo tipo de situaciones,
sobretodo en estas que son difíciles de tratar y llevar un buen acompañamiento
hacia la familia del paciente, así como los cuidados paliativos correctos hacia el
paciente en cuestión.