Está en la página 1de 37

1

DERECHO CONSTITUCIONAL R o l a n d o T a m ay o y S a l m o r á n 2

SUMARIO: I. La legislación ‘constitucional’ y su eficacia. II.


La ineficacia y sus consecuencias. III. La validez de la cons-
titución. IV. El establecimiento del órgano constituyente
Grundnorm y “pacto social”. V. Los dioses y el gobierno de los
hombres. VI. El advenimiento de no/moj. VII. El significado
de no&moj. VIII. Fu/sij vs. no&moj. IX. Homo mensura y el
desvanecimiento de los dioses. X. La asunción del “estado de
naturaleza” y del “pacto social”. XI. Los clásicos modernos.
XII. La policitación3 de determinado orden jurídico. XIII. El
CONSTITUTIONAL CONSUMER RIGHT AND CONSTITUENT ACT

carácter consuetudinario del procedimiento. XIV. Quasi his-


toria. XV. Creación regular o irregular. XVI. La modificación
constitucional contra legem. XVII. Los elementos persisten-
CONSUETUDINARIO Y ACTO CONSTITUYENTE

tes en estos procedimientos. XVIII. Referencias.

E
Resumen
ste es el capítulo de un trabajo más ambi-
cioso, me propongo señalar de qué manera
el proceso consuetudinario de creación de
normas afecta el establecimiento, modi-
ficación o substitución de la constitución
(y, en general, de cualquier legislación), con objeto de
determinar el papel que juegan la consuetudo y la efi-

1 Parte de lo que aquí expongo apareció en mi artículo “El derecho


consuetudinario y la constitución”, en Tamayo y Salmorán, Rolan-
do (Ed.), Los cambios constitucionales, México, unam, Instituto de In-
vestigaciones Jurídicas, 1977; y en el capítulo XI: El establecimiento
de la constitución de mi libro: Introducción al estudio de la constitución,
México, cit., pp. 269- 292. Vid. etiam: Orozco Henríquez, J. Jesús, El
derecho constitucional consuetudinario, México, unam, Instituto de In-
vestigaciones Jurídicas, 1983.
2 Profesor investigador de la Universidad Nacional Autónoma de Mé-
xico. Correspondencia: Circuito Mario de la Cueva s/n, Investigación
en Humanidades, Ciudad Universitaria, Del. Coyoacán, 04510, Méxi-
co, Ciudad de México. Correo electrónico: irnerius@mx.inter.net.
3 Del latín pollicitatio (-onis): “Promesa que no ha sido aceptada toda-
vía”. Cf.: Diccionario de la Lengua Española, edición digital, Planeta,
2017.

22 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
cacia en estos procesos. En otras palabras, legislación constitucional padece de los
intento probar de forma plausible cómo mismos problemas que enfrenta la legisla-
se establece una constitución (material) y ción ordinaria,4 concretamente en lo que
cuáles son las relaciones que guarda con a su eficacia respecta.5 ¿Qué efecto pro-
el documento denominado: “constitución ducen los predicados de eficaz o ineficaz
escrita”. aplicados, correctamente, a la legislación
Palabras clave: Proceso consuetudinario, constitucional?
creación de normas, constitución escrita, Si partimos de la idea de que eficaz quie-
constitución escrita. re decir conformidad del comportamiento
con lo prescrito por una norma, entonces
Constitutional consumer right and una legislación es eficaz si la conducta de
constituent act los destinatarios se conforma con lo pres-
crito, por el texto legislativo, i.e., si obser-
Abstract van o aplican (ejecutan). Por lo contrario,
This is the chapter of a more ambitious una legislación no es eficaz cuando lo
work, I intend to point out how the custo- prescrito en la legislación no es observa-
mary process of creating standards affects do ni aplicado (ejecutado). Haciendo caso
the establishment, modification or substi- omiso de situaciones límite, se puede sos-
tution of the constitution (and, in general, tener que el texto legislativo que no es ob-
of any legislation), in order to determine servado ni aplicado (ejecutado) por nadie,
the role who play consuetudo and effecti- en ningún lugar, por un tiempo prolonga-
veness in these processes. In other words, do, pierde su validez: deja de ser norma.6
I try to prove plausibly how a constitution ¿Qué ocurre a la desaparición de la le-
is established (material) and what are the gislación por desuetudo (i.e., ineficacia)?
relationships it has with the document ca- Necesariamente se produce un cambio en
lled: “written constitution”.
Keywords: Customary process, creation 4 A este respecto es necesario insistir en que la rela-
ción que existe entre una disposición y los actos que
of standards, written constitution, writ- la aplican, es exactamente igual a la que ocurre en
ten constitution. cualquier otro momento del de la creación sucesiva
del orden jurídico.
5 “...quae ipsa [iura] sibi quaque civitas constituit, saepe
I. La “legislación constitucional” y su eficacia mutari solent vel tacito consensu...” (Inst. Just., 1, 2, 11
“... ut leges non solum sufragio leges latoris, sed etram
tacito consensu comnium per desuetudinem abrogen-
Por legislación constitucional se entiende tur” D. 1, 3, 32, 1 in fine).
6 Vid.: Kelsen, Hans. Reine Rechtslehre, cit., p. 10; (Id.
la constitución escrita o parte de ella (ex- Teoría pura del derecho, Buenos Aires, Editorial Uni-
cluyendo las declaraciones jurídicamen- versitaria de Buenos Aires, p. 24. Vid. etiam: Id., Ge-
neral Theory of Law and State, cit., p. 119; (Id. Teoría
te irrelevantes). Pues bien, la así llamada general del derecho y del Estado.)

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 23


el orden jurídico (originando un nuevo orden “jurídi-
DERECHO CONSTITUCIONAL co momentáneo”); en otras palabras: el orden jurídico
momentáneo anterior es sustituido por uno posterior.
Como expresa la célebre máxima: Lex posterior derogat
priora.
Quizás sea oportuno abundar sobre la distinción,
mencionada anteriormente, entre orden jurídico, pro-
piamente dicho y un orden jurídico momentáneo. Por
orden jurídico momentáneo entiendo “un subsistema
del orden jurídico total”. Para cada orden jurídico mo-
mentáneo existe necesariamente un orden jurídico
(total) que lo comprende. En tanto el orden jurídico
momentáneo son actos de creación y aplicación (eje-
cución) de normas, no existe un orden jurídico que no
contenga un sistema jurídico momentáneo. El dere-
CONSUETUDINARIO Y ACTO CONSTITUYENTE

cho es, insisto, un continuo de actos de creación y apli-


cación (ejecución) de normas, actos que son condición
de su existencia. No existen órdenes jurídicos que sin
que hayan sido puestos por actos de creación y segui-
dos u observados por actos de aplicación (ejecución).
La continuidad de un orden jurídico reside en el pro-
ceso de substitución de un orden jurídico momentáneo
a otro; proceso que no es más que el continuum de actos
de creación y aplicación (ejecución) de sus normas.
¿Cuál es el derecho que existe cuando una legislación
ha dejado de ser eficaz? ¿Cómo se puede determinar?
Es claro que el derecho que emerge después de que
una legislación deja de ser eficaz (por desuetudo) tiene
que haber sido puesto (creado) por un procedimiento
consuetudinario contra legem.

II. La ineficacia y sus consecuencias

Sobre el particular pueden señalarse dos diferentes si-


tuaciones: la ineficacia indirecta y la ineficacia directa.

24 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
a Ineficacia indirecta b. Ineficacia directa

Si tenemos en cuenta que una legislación Existe ineficacia parcial si parte de la


pertenece, a un orden jurídico, entonces constitución escrita (una o varias disposi-
resulta que una legislación es tal si, y solo ciones “constitucionales”) no es seguida u
si, el orden jurídico al cual dicha legisla- observada por los destinatarios ni hecha
ción pertenece, efectivamente existe. Esto, efectiva por los órganos de aplicación. Si
ab obvo, se aplica también a la legislación este es el caso deja de ser eficaz (o nunca
constitucional. En efecto, es condición de lo fue).
validez de la legislación constitucional La pérdida de la eficacia puede ser refe-
que el orden jurídico que propone exista rida solo a ciertas disposiciones de la le-
efectivamente, que sea un orden jurídico gislación, aunque el sistema al que tales
histórico, del cual tal constitución es, efec- disposiciones pertenece, sea mayormente
tivamente, su primer acto de creación. eficaz. Esta pérdida de eficacia puede pre-
Una legislación constitucional (consti- sentarse en dos formas:
tución escrita) es materialmente constitu-
cional, constitución, propiamente dicha (i) Cuando nunca se da acto alguno que
(i.e., conjunto de normas que establece el observe o aplique (ejecute) la disposición
primer acto creador de un orden jurídico), “constitucional” en cuestión. En este caso
si el orden jurídico que propone se aplica existe una ineficacia de origen.
y existe históricamente. En el resto de este (ii) Cuando la pérdida de eficacia se pro-
trabajo voy a asumir que la legislación duce después de que la disposición “cons-
constitucional es, o pretende ser, consti- titucional” ha sido eficaz durante cierto
tucional en sentido material. De esta ma- tiempo. En este caso existe una ineficacia
nera, si no existe un orden jurídico que la superveniente.
observe o aplique (ejecute), i.e., si no existe
un orden jurídico creado de conformidad Como quiera que la ineficacia se produz-
con las facultades que confiere la legisla- ca, nos encontramos con el problema si-
ción constitucional, entonces dicha legis- guiente: ¿Cómo determinar el derecho que
lación no será sino un texto, una hoja de existe a la desaparición de la legislación
papel (con mayor o menor relevancia po- “constitucional”? (o parte de ella) y, en par-
lítica); su función normativa desaparece, ticular, ¿cómo determinar las normas que,
¿qué hay entonces? por ausencia de la legislación ineficaz,
funcionan como constitución (material,
positiva) del orden jurídico?

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 25


Si la causa de la desaparición de la “le- III. La validez de la constitución
gislación constitucional” no es debida a la (algo sobre validez)
aparición de una “legislación constitucio-
nal” posterior, su desaparición (o parte de En las partes que preceden creo haber de-
ella), solo pudo haber resultado de un pro- mostrado que x (prescripción, precepto o
cedimiento consuetudinario (consuetudo instrucción) es n, norma jurídica válida (o,
contra legem), único procedimiento capaz no habiendo de otras, simplemente, nor-
de crear y derogar derecho (spriptum). El ma jurídica) si es parte de una secuencia
análisis de la pérdida de eficacia permite de facultamiento, de un orden jurídico
determinar que un derecho constitucional positivo. De esto se desprende que un acto
consuetudinario se generó paralelamente crea normas jurídicas si una norma jurí-
a la pérdida de eficacia de la “constitución dica faculta a un individuo −particular u
escrita” (o parte de ella). órgano (OR), e.g.: un juez− y si tal individuo
Si todo orden jurídico necesariamente (juez) dicta una sentencia observando y
tiene una constitución (material), la des- aplicando lo prescrito por tal norma para
aparición de la “constitución escrita” (o el ejercicio de las facultades así conferidas,
parte de ella) por no ser eficaz da paso, entonces, la norma que lo faculta es válida
eo ipso, a una constitución no escrita, i.e., (así fue considerada por el juez), ergo, fue
consuetudinaria (total o parcial). eficaz y solo porque es eficaz es válida.
Con el objeto de determinar cómo surge Es claro que este criterio de validez sis-
esta constitución no escrita permítaseme temática (en el sentido descrito) no con-
explicar, brevemente, primero, cómo se es- viene o no da cuenta de la “facultad” del
tablece una constitución (en sentido mate- órgano primario (constituyente) ni de la
rial). Por constitución material entiendo el validez de las prescripciones que este es-
conjunto de normas7 que establece el acto tablece, las cuales, por definición, no se
originario (constituyente) de un orden ju- conforman a ninguna norma jurídica.
rídico histórico, i.e., positivo, que existe. ¿Por qué este acto, el cual no se conforma
En segundo lugar, describir, sucintamen- a ninguna norma jurídica, se convierte
te, la función que en el establecimiento de en el acto constituyente del sistema? ¿Por
la constitución realizan la consuetudo y la qué las normas que establece son la cons-
eficacia. titución (material) de este orden? En otras
palabras, ¿de dónde deriva su validez el
acto constituyente? Voy a adelantar la res-
7 En el sentido de Unselbständige Rechtsnormen, i.e., puesta que explicito a continuación: esta
normas jurídicas no autónomas (vid.: Kelsen, Hans.
Reine Rechtslehre, cit., pp. 55-59; id., Teoría pura del de- deriva de su eficacia.
recho, cit., pp. 67-70).

26 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
La respuesta a este problema no es nece- tales secuencias, entonces no es acto cons-
sariamente difícil. En realidad, se encuen- tituyente: no crea nada que pueda ser re-
tra implícita en la descripción del orden conocido como perteneciendo a un orden
jurídico. jurídico.
En la descripción de una secuencia de De esta forma, cabe decir que ciertos ac-
facultamiento se advierte que esta no pre- tos son constituyentes si, y solo si, son el
supone un regresus ad infinitum. En tal se- primer acto de un orden jurídico positivo
cuencia los actos que facultan tienen un (histórico), más allá del cual no es posible
punto final: a1 es el acto primero, prima- remontar.
rio, de una secuencia de facultamientos, Ahora bien, ser primer acto de las secuen-
más allá del cual no es posible remontar; cias depende de que existan secuencias en
el acto con el que principia u origina la ca- las que funcione como acto primero (i.e.,
dena normativa. a1). Un acto es a1 solo dentro de las secuen-
Cualquier análisis correcto de acto cons- cias que comienzan con él. Si no hay se-
tituyente o constitución tiene, precisa- cuencias, no existe acto alguno que sea el
mente, que insertar estos eventos dentro primero; no existe acto que la origine.
de la cadena de actos de creación aplica- De conformidad con lo anterior en cual-
ción. Usando el aparato teórico de Ulises quier cadena normativa y, necesariamen-
Schmill, podría decir que una adecuada te, en las cadenas que forman un orden ju-
descripción de acto constituyente o cons- rídico total, existe un único acto primero,
titución requiere la “interiorización se- más allá del cual no es posible remontar:
mántica de estos conceptos dentro de la un acto primero, acto constituyente que,
noción de “norma jurídica” (en sentido topográficamente (valga la expresión) es
estático) o de “creación jurídica” (en sen- de fácil localización en los diagramas in-
tido dinámico), de otra forma no tendrían sertos. En el esquema que representa un
sentido”.8 orden jurídico, a1 es el acto en que, meta-
El análisis de una secuencia de faculta- fóricamente, el orden jurídico reposa: el
mientos revela que el acto constituyente acto constituyente. Esto puede expresarse
no se encuentra aislado o por fuera de la brevemente diciendo:
secuencia; el acto constituyente forma
parte de ella: es el primer acto de todas un acto x es a1 si es el primer acto de un
las secuencias de un orden jurídico. Si ese orden jurídico que existe.
acto no es parte (el punto de partida) de
Lo anterior, sin embargo, es solo parte de
8 Vide: Schmill, Ulises. Teoría del derecho y del Estado, la respuesta sobre la validez de la consti-
México, unam/itam/Editorial Porrúa, pp. 19-22 y 29-44.

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 27


tución material. Permítaseme completar establecidas por la constitución (i.e. n1).9
la respuesta. De esto se infiere que ciertas normas (Un-
Al explicar el condicionamiento sucesivo selbständige Rechtsnormen) son n1, la cons-
de los actos de facultamiento mostré que titución (material) de un orden jurídico, si
este se reduce a una relación entre los ac- n1 es eficaz, i.e., si se crea el orden jurídico
tos que crean una norma que faculta y los que n 1 propone.
actos que la observan y aplican (ejecutan). Esta respuesta no es sustancialmente
La progresión de una etapa a otra de este diferente a la que da Kelsen. Ciertamente,
condicionamiento sucesivo de faculta- sostiene que la validez de la constitución
mientos se produce cuando el así faculta- positiva (asumiendo que esta sea la prime-
do realiza los actos de conformidad con lo ra constitución histórica) deriva de una
dispuesto por la norma que faculta (por la norma fundamental no positiva: la Grund-
norma que faculta sus actos de aplicación). norm. Sin embargo, Kelsen aclara:
Pero la conformidad solo se presenta cuan-
do los actos facultados observan y aplican La norma fundamental (Grundnorm), se
(ejecutan) las normas que les facultan. De relaciona, de manera inmediata, con una
ahí que no sea inconsistente afirmar que x legislación determinada que ha sido efec-
es acto constituyente, si las prescripciones tivamente establecida, creada por consue-
que establece son seguidas por actos que tudo (Gewohnheit) o promulgada, que es
las observan y aplican, y si son observadas mayormente y en general eficaz y, medi-
y aplicadas las normas que estos actos de tamente, [eficaz] con [respecto al] orden
aplicación, a su vez, establecen y, así, las (jurídico) que ha sido creado de confor-
etapas ulteriores. De ahí se sigue que la efi- midad con esa constitución, el cual es, en
cacia es, no solo condición necesaria, sino, general, eficaz... La norma fundamental... no
también suficiente de la validez. es… producto de una libre invención. Si uno
De lo anterior se desprende que x es a1, presupone la norma fundamental, no es
acto constituyente (acto originario del por decisión arbitraria... Solo cuando se está
orden jurídico), si, y solo si, n1 (las pres- en presencia de una constitución eficaz, que
cripciones que este acto constituyente es- crea un orden jurídico positivo, se puede pre-
tablece) son hechas normas al ser obser- suponer una norma fundamental.10
vadas y aplicadas (ejecutadas), así como
observadas y aplicadas las normas crea- 9 “Por eso es rigurosamente exacto afirmar que un or-
den jurídico es positivo si se individualiza, y en tan-
das, directa o indirectamente, por el acto to que se individualiza” (Kelsen, Hans, Allgemeine
constituyente, mediante las facultades Staatslehre, op. cit., pp. 250; vide etiam: Teoría general
del Estado, op. cit., p. 327).
10 Reine Rechtslehre, op. cit., p. 204; vide, Teoría pura del
derecho, op. cit., pp. 208-209).

28 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
Si prestamos atención a esta última ora- dicho orden es creado y aplicado, el cual
ción claramente se entiende que el acto le- es en su totalidad eficaz.12
gislador y las prescripciones que estable-
ce, solo son acto constituyente y normas De ahí que, solo se asume una norma
constitucionales jurídicamente válidas, si, fundamental, cuando estamos en presen-
de conformidad con lo por ellas prescrito, cia de un orden jurídico eficaz, i.e. única-
se observan y aplican (ejecutan) por sus mente, cuando se satisface la condición
destinatarios. Ahora bien, si la eficacia es suficiente.
la única condición para que ciertos actos
sean constituyentes y las prescripciones IV. El establecimiento del órgano consti-
que este establece una constitución (mate- tuyente. Grundnorm y “pacto social”
rial) válidos, entonces la eficacia es condi-
a. ¿Perplejidad o ignorancia?
ción necesaria y suficiente de su validez.
Este segmento plantea una asombrosa (y,
En otras palabras: el hecho de la eficacia,
ciertamente reprobable) actitud. Muchos
prácticamente, faculta, al constituyente a
individuos “mesan sus cabellos y rasgan
establecer una constitución válida.
sus vestiduras” cuando “oyen” (porque
En otro lugar Kelsen declara:
nunca leen) que Kelsen postula una Grund-
norm (norma básica o fundamental), pre-
La eficacia de todo el orden jurídico es
supuesta, como punto de partida de la ex-
una condición necesaria para la validez
plicación del derecho eficaz (positivo).
de cada norma particular... [incluida la
Quizás quepa recordarles que la ciencia
constitución]. Son válidas... solo bajo la
postula (crea), presupuestos necesarios
condición que el orden (jurídico) en su
(axiomas, definiciones, teoremas) para
totalidad sea eficaz.11
la descripción y explicación racional de
sus objetos. Los matemáticos de la India
De manera contundente Kelsen, más
Antigua postularon la existencia del cero
adelante, afirma:
(aunque no nombrara ningún objeto) dan-
do origen a los números irreales, comple-
La norma fundamental de cualquier or-
jos e imaginarios; también postularon el
den jurídico positivo confiere… [validez]
número 24.1040 (veinticuatro por diez a la
únicamente a los hechos por los cuales
cuadragésima) como principio explicativo
de su cosmogonía.

11 General Theory of Law and State, op. cit., p. 119; vide


etiam, Teoría general del derecho y del Estado, op. cit.,
p. 139). 12 General Theory…, p. 120; Teoría general..., p. 141.

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 29


Thales de Mileto determinó la altura trodujo conceptos de volumen, distancia
de la pirámide de Keops introduciendo y, en particular, magnitudes matemáti-
el teorema de la “similitud de los triángu- cas. Resolvió el problema de la “manzana”
los”. Pitágoras postuló el claramente con- creando un nuevo objeto del conocimien-
traintuitivo teorema que lleva su nombre to: la gravedad (invisible, inodora, intan-
mostrando que la suma de los cuadrados gible, sin contacto corporal y que actúa a
construidos sobre los “catetos” es igual al distancia), la cual explicó mediante la Ley
cuadrado construido sobre la hipotenusa. de la gravitación universal.14
Euclides, para construir su Geometría pos-
tuló que el mundo puede explicarse als ob b. Resistencia
(como si) fuera de tres dimensiones. Po- Ciertamente, alguien dirá que esos ejem-
dríamos seguir con Zenón, con Eudoxo, plos en que se asumen o postulan princi-
con Arquímedes, quien postuló la “prime- pios o teoremas pertenecen al mundo de la
ra ley de la hidrostática”. ciencia (pensando que la ciencia se restrin-
Podría proseguir con genios árabes, ge a la matemática, a la física, o a la astro-
europeos del Renacimiento y más; sim- nomía, inter alia); pero en asuntos huma-
plemente agregaré a esta rapsodia “heu- nos ¡tiene que ser distinto! Pero no. Charles
rística”13 a Isaac Newton quien, en Trini- Darwin (el Newton de la biología) enterró
ty College, observó que una manzana se el mito de imago dei, el hombre cayó de su
desprendía del árbol. A diferencia de sus pedestal. El hombre y su comportamiento
congéneres, Newton no pensó en que las se conocen de la misma manera que el res-
manzanas eran “caíbles en sí”. Se pregun- to de los objetos de la ciencia.
tó ¿por qué se dirige hacia abajo?, ¿por qué Al superar la etapa del tropel, la especie
no sale disparada hacia un lado o hacia hommo crea cosas con significado: la cultura.
arriba? Se planteó un problema. Para re- Entre ellas se encuentra el vocabulario bá-
solverlo, asumió ciertos presupuestos: in- sico del comportamiento social y su “acep-
tación” mediante el único procedimiento
13 Del griego euri/skew: idear, inventar, ingeniar, en-
que permite hacer que unos hagan que los
contrar (Cf.: Liddell, Henry George & Scott, Robert, otros hagan u omitan. Este vocabulario
Greek-English Lexicon, op. cit., pp. 729-730); “heu-
ristic (noun): Scientific methods or techniques for básico produjo las “reglas” cuya “acepta-
research and learning; (ad.): related to, ‘a heuristic ción”, como quiera que esta sea (derrota,
assumption’, ‘a heuristic argument’”, Merriam-Web-
ster Dictionary, en Encyclopædia Britannica, Ultimate
Reference Suit, DVD, Edition, 2014. Vide etiam: “‘heu- 14 “Los cuerpos se atraen directamente proporcional
rística (nom. & ad.): Técnica o método científico de al volumen de su masa e indirectamente propor-
investigación’ y del sufijo: ‘tica’ (ad. rel.): lo relacio- cional al cuadrado de sus distancias (vide, Faller,
nado con la heurísitica’”. (Real Academia Española, James E. & Cook, Sir Alan H. “Gravity”, Newton’s Law
Diccionario de la lengua española, edición digital, of Gravity, en Encyclopædia Britannica, op. cit.; vide
2014). etiam ibidem: Westfall, Richard S., Newton, Sir Isaac.

30 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
sumisión, ingenuidad, conversión, pru- la costumbre y de la tradición oral.21 Qe/
dencia), pero, de una u otra manera “acep- mij conoce el destino que pende sobre los
tación”) genera creencias compartidas. dioses y los hombres; tal es la razón de que
las instrucciones que da Zeus a los reyes
V. Los dioses y el gobierno de los hombres reciban el nombre de qe/mistej, lo que, a
su vez, explica el hecho de que la conducta
a. Teogonías15
que coincide con el derecho se expresa por
Esto lo hizo, primeramente, el “animismo
la fórmula h# Qe/mij e0sti\.22
primitivo”; luego, las teogonías; después,
Las qe/mistej se convierten en el padrón
las cosmogonías. Se asumió (y se impu-
para evaluar y regular el comportamiento.
so) que las reglas de la vida social debían
Así, en Hesíodo y Píndaro, las Horas (ai9
su origen a un evento fabuloso, mágico.
W}rai), hijas de Qe/mij (de ahí qe/mistej),
Shamash, en famosa estela,16 entrega a
son las diosas del bien estar (orden), la jus-
Hammurabi las leyes para el pueblo de
ticia y la paz: Eu)nomi/a, Di/kh e Ei0rh/
Shamash. Los hebreos se convirtieron en
nh.23 No solo los hombres deben de confor-
el “pueblo elegido” mediante un “pacto de
marse con la voluntad de Zeus sino, tam-
alianza” celebrado entre Dios y Abraham,17
bién, todas las cosas del mundo. Así:
renovado en el Sinaí.18
La cosmogonía griega asumía que las qe/
el sol no podrá dejar el curso que se le ha-
mistej eran decretos de los dioses (Dio_j qe/
bía impuesto, pues en caso contrario las
mistej)19 y el monarca (basileu&j) recibía su
E0rinu&ej (las Furias vengadoras), servi-
cetro y con él las qe/mistej de Zeus, su pro-
doras de Di/kh lo castigarán.24
totipo celestial.20 Homero usaba la palabra
qe/mistej que parece significar ‘reglas’ o
Es necesario diferenciar la religión, o
‘regulación’ para designar la autoridad de
mejor dicho, las creencias religiosas y sus

15 Qeogoni/a, literalmente: “génesis de los dioses” (Cf.: 21 Ibid., pp. 20 y 55. Cf.: Liddell, op. cit., p. 361.
Liddell y Scott, op. cit., p. 361). “La teogonía es un in- 22 Vide Verdross, Alfred, La filosofía del derecho del mun-
tento de reducir todas las historias sobre dioses en do occidental (Abendlandische Rechtsphilosophie),
un sistema unitario”, Burnet, John, Early Greek Phi- México, unam, 1962, p. 10. Cf.: Liddell, op. cit., p. 361.
losophy, Nueva York, Meridian, 1964, p. 6. 23 Bréhier, Emile, Histoire de la philosophie, París, Press
16 Detalle de una estela proveniente de Susa, capital of Universitaires de France, 1965, t. I. Fasc. 1, p. 50.
Elam y capital administrativa del rey Darío I y sus 24 H#lioj ga_r ou)k u)perbh&setai metra ei0 de\ mh&,
sucesores desde 522 a. C. exhibida en el Museo del E0rinu&ej min Di/kej e0pikouroi e0ceurh&sousin.
Louvre. Heráclito, Frag. 94 (Diels, Hermann, Die Fragmente
17 Génesis, 15, 18; 17, 2-21. der Vorsokratiker Griechisch und Deutsch, Ed. Kranz,
18 Éxodo, 32, 15; 34, 1 y 10. Walther), op. cit., t. I, p. 96. En cuanto a la traduc-
19 Cf.: Liddell, y Scott, op. cit., p. 789. ción, sigo la de Kathleen Freeman (Ancilla to the
20 Vide: Jaeger, Werner W. Alabanza de la ley. Los orí- Pre-Socratic Philosophers: A Complete Translation of
genes de la filosofía del derecho y los griegos, Madrid, the Fragments in Diels, Fragmente der Vorsokratiker.
Instituto de Estudios Políticos, 1959, p. 21, n. 6 Oxford, Basil Blackwell, 1962, p. 31).

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 31


ritos, de las teogonías propiamente dichas. existen en una sociedad. Esto se debía
En las religiones, los dioses son objeto de muy probablemente al hecho de que, en
reverencia y adoración; en la teogonía, no. un principio, los dioses que gobernaban la
La Teogonía de Hesíodo es la mejor prue- naturaleza eran antropomórficos y vivían
ba de ello: es evidente que muchos de los dentro de una estructura social parecida a
dioses mencionados en ella nunca fueron la de los hombres.29 Fu&sij no era entonces,
adorados por nadie; algunos de ellos son más que una vasta metáfora de la po&lij.30
meras personificaciones de fenómenos Durante largo tiempo las teogonías
naturales o, inclusive, de pasiones huma- constituyeron la única respuesta al pro-
nas.25 “Por ejemplo, nadie adoró a W)kea- blema del comportamiento humano. Di/
no&j (Océano) ni a Thqu/j (Tethys) y aun kh era una diosa poderosa; ninguno podía
menos puede considerarse a Fo&boj (Páni- contrariar impunemente las bases sagra-
co) como dios en sentido religioso”.26 das de su autoridad:
La concepción que los primeros griegos
tienen de la naturaleza se debe, en gran implacable y venerada justicia [Di/kh],
medida, a las ideas que tenían de la con- de la que Orfeo […] dice que se encuentra
vivencia social. Los procesos naturales sentada junto al trono de Zeus vigilando
son descritos en términos tomados de la todo lo que les ocurre a los mortales.31
sociedad humana. En la antigüedad, la re-
gularidad y constancia de la vida humana Los dioses griegos son seres magníficos.
era, por mucho, más claramente percibi- El hecho de que las qe/mistej fueran esta-
da que la uniformidad de la naturaleza. blecidas por ellos hace que estas partici-
El hombre vivía en un círculo de reglas y pen de su magnificencia. Para todo griego
costumbres sociales rígidas, prácticamen- la palabra di/kaion que, originalmente,
te inalterables, inmóviles. En cambio, el significa: justo, lícito o, simplemente, de-
mundo que lo rodeaba era caótico,27 por recho, transmite una impresión de valor
tanto, había que “ordenarlo”. (moral) positivo. El campo que cubre di/
Fu&sij se encuentra sometida a un or-
den social similar al de la po&lij.28 La natu- 29 Los dioses griegos viven como seres suprahuma-
nos, pero de modo completamente parecido al de
raleza era entendida, básicamente, como los hombres y se hayan jerarquizados como en una
regida por reglas similares a aquellas que po&lij (vide, Schwab, G., Las más bellas leyendas de la
antigüedad clásica, Barcelona, Labor, 1955, p. 770).
30 Bréhier, Histoire de la philosophie, op. cit., p. 76.
25 Cf.: Burnet, John. Early Greek Philosophy, op. cit., p. 14. 31 Orpheus [Ps. Demosth.]. Frag, 14 (vide, Diels, Her-
26 Ibid., p. 14, n. 2. mann, Die Fragmente der Vorsokratiker..., op. cit.). La
27 Ibid., p. 9. versión que doy en español sigue mutatis mutandi,
28 Jaeger, Werner W., Paideia, los ideales de la cultura la versión inglesa de Kathleen Freeman, op. cit., p. 3.
griega, México, Fondo de Cultura Económica, 1971, Vide G. Giannantoni, R. Laurenti y otros, I presocrati-
p. 159. ci, t. I, p. 19.

32 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
kaion es coexistente al que cubre el valor Si A) gga&nke gobierna fu&sij, Di/kh, co-
(moral) implicado. Así, resulta verdadera- rolario de fu&sij, es fatal e ineluctable. “El
mente difícil para cualquier griego, soste- transgresor sufrirá porque U#brij (la infrac-
ner que la justicia (dikaiosu&nh) o lo jus- ción, la violencia, el ultraje) son persegui-
to (to\ di/kaion) pueda ser mero interés o dos inevitablemente por Di/kh. Todo acon-
conveniencia.32 tecimiento es kata_ fu&sei (por naturaleza),
justas. Por tanto, los hombres tienen que
b. Las cosmogonías respetar el equilibrio natural, puesto que es
Oi0koumh/nh (la tierra habitada) al origen, justo (to_ di/kaion) por naturaleza.
gobernada por dioses y demonios, paso a Las comunidades humanas, como todas
paso se emancipa de ese mundo mítico. las cosas, se encuentran sometidas a las
En la progresiva expansión del conoci- mismas reglas. El orden de las comunida-
miento racional, los dioses, de entes mi- des humanas es un di/kaion fu/sikon, (un
tológicos, fueron convertidos, paulatina- derecho impuesto por la naturaleza). De
mente, en fuerzas de la naturaleza. Este este modo, las reglas de la vida social que
proceso se observa desde las teogonías habían sido transportadas para explicar
de Hesíodo hasta la consolidación del ra- fu&sij, son convertidas en un orden inmu-
cionalismo sofístico. La necesidad apare- table y absoluto.
ce en el pensamiento presocrático como
una fuerza cosmológica, aún con resabios VI. El advenimiento de no/moj
míticos; pero, en el racionalismo jonio,
A comienzos del siglo VII a. de C. se obser-
alcanza su culminación en Leucipo y De-
va un desarrollo de po&leij que devienen
mócrito, donde agga&nke deviene simple-
ricas y poderosas. Las más brillantes son
mente una fuerza natural inanimada.33 En
Mileto, Efeso y Halicarnaso. Ciertas islas,
este orden de ideas, Aristófanes escribe:
como Samos, guardan un lugar impor-
tante. Estas po&leij habían conocido un
A) ggan&ke llena las nubes con vapor y
régimen monárquico, consuetudinario,
gobierna los movimientos por los cua-
constituido por la costumbre (h]qoj) y la
les… causan truenos; el autor… ya no es
tradición (no&mima).
Zeus… sino la rotación celeste.34
A fines de este mismo siglo, sin embargo,
aparecieron nuevas condiciones que con-
32 Cf.: Guthrie, W.K.G., A History of Greek Philosophy, ducirían a la destrucción de estas monar-
Cambridge, University Press Cambridge, 1969, t. III,
pp. 92 y 94. quías homéricas y de la concepción mítica
33 Ibid., p. 100.
34 Oi ne/foi (Las nubes), 376 y ss. (Aristophanes, trad. al sity Press, Cambridge, Mass. [Loeb Classical Classical
inglés por Benjamin Bickley Rogers, Harvard Univer- Library, vol. 3]). Vide, Guthrie, A History of…, op. cit.

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 33


del mundo. El fenómeno de la stenoxwri/ se encontraban en un estado de i0sono-
a35 es, por ejemplo, uno de esos aconteci- mi/a (igualdad). De ahí que, si querían esta-
mientos que se encuentran en el origen blecer reglas o pautas de comportamiento,
del gran movimiento de colonización que era necesario recurrir a un instrumento,
habría de convulsionar a todo el mundo más que natural: artificial y humano.
griego.36 Los emigrantes o colonos (oi1kis- Pues bien, estas pautas o reglas de com-
tai/) tuvieron que proceder a la creación portamiento fueron establecidos por los
de nuevas instituciones. Sin embargo, a oi1kistai/ mediante no&moi (leyes), cuyo
los oi1kistai/ se les presenta un problema nombre designa, primordialmente, la for-
aparentemente insuperable. Las po&leij ma escrita de las reglas positivas, sin las
que recién abandonaron, todo (incluyen- cuales no podían existir las po&leij recién
do hombres e instituciones) se encontraba fundadas.
sometido a un di/kaion fusiko&n. Se era
rey o súbdito; ciudadano o esclavo, “por VII. El significado de no&moj
naturaleza”. Conducirse así era justo, i.e.,
“Para los hombres de los tiempos clásicos
conforme a derecho, puesto que natural.
con no&moj se nombra algo nomi/zetai,
Pero, entre los oi1kistai/ (grupo de deshe-
i.e. creado, practicando o mantenido como
redados que evadían el régimen de deudas
(jurídicamente) correcto”.37 Al principio,
e hipotecas) no se encuentran, obviamente,
como señalé, existía la vieja creencia en su
ni reyes, ni magistrados; no había, en suma,
origen divino: “En los poetas trágicos las
entre ellos alguien que, de acuerdo con el
no&moi son inequívocamente de origen
di/kaion fusiko&n, tuviera alguna caracte-
divino”. Así, en Sófocles se lee: “Olimpo
rística que le permitiera mandar sobre los
es [su] único creador, ninguna naturale-
demás. En virtud de que los oi1kistai/ eran
za humana mortal pudo hacerlos nacer”.38
o, mejor, habían sido, todos, súbditos sin
Asimismo, en Eurípides: “[...] puesto que
privilegios, deudores, quizás delincuentes,
nosotros los mortales adoptamos las no&-
moi de los dioses”.39
35 Literalmente, estrechez, falta de espacio (Cf.: Liddell
Sin embargo, pasajes como estos no re-
y Scott. Greek-English..., op. cit., p. 744.
36 Nuevas condiciones conducirían a la desaparición velan propiamente que las no&moi, como
de este orden, primero, en Jonia y, después, en toda
Grecia. A finales del siglo VII a. de C., la moneda actividad legislativa consciente, fueran
hace su aparición; la división del trabajo entre la de origen divino, sino que existían ciertos
ciudad y el campo se acentúa y la comercialización
de los productos agrícolas produce una revolución mandatos divinos no escritos (frecuente-
en el régimen de las tierras. Esto provocó la ste-
noxwri/a (la falta de tierras, que no es solo debida al
crecimiento demográfico). Vide, Mossé, Claude. His- 37 Guthrie, A History of…, op. cit., p. 55.
toire des doctrines politiques en Grèce, París, Presses 38 O.T. 863 y ss. Cf.: Guthrie, p. 77.
Universitaires de France, 1969. pp. 7 y ss. 39 Ion, 442, Cf.: Guthrie, pp. 77 y 78.

34 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
mente designadas con el término de no/ sofista Hippias –refiere Xenofonte– se ad-
mima,40 y que no eran sino las antiguas qe/ mite que no&moi son pactos (su&nqesiai,
mistej). o bien, su&nqh/xai) celebrados por los
El uso posterior de no&moi es bastante propios ciudadanos sobre lo que debe ha-
significativo. Por no&moi entienden los cerse, los cuales pueden ser enmendados o
griegos: “obra consciente de legisladores” derogados; no son por naturaleza.44
(Solón, Dracón, Licurgo, Clistemnes). En No&moj no es algo que el hombre en-
un principio, legislar, aunque una activi- cuentra al develar el orden cósmico, sino
dad humana, al principio se consideraba que es establecida en la asamblea del pue-
inspirada por la divinidad. Era vieja creen- blo mediante una decisión mayoritaria,
cia, sometida a intensa crítica en la época adoptada después de confrontar opinio-
del Iluminismo Sofístico. Ciertamente, nes contradictorias de los hombres.45
dice Guthrie:
VIII. Fu/sij vs. no&moj
no necesitamos suponer que cuando Pe-
El carácter predominantemente artificial
ricles invitó a Protágoras a redactar la
y humano de no&moj planteaba el proble-
constitución para la nueva colonia de
ma de la relatividad46 o mutabilidad de las
Turio, ambos hubieran creído, realmen-
reglas de la vida social. Lo “justo” consiste
te, que Protágoras actuaría bajo inspira-
en conformarse a las reglas de la po&lij, i.e.
ción divina.41
las antiguas qe/mistej. Esta situación sufre
una seria variación con el advenimiento
El tercer significado –el más extendi-
de no&moj; di/kaion significa, entonces,
do–42 de no/moj es “acuerdo entre los hom-
“conformidad con las leyes establecidas
bres”. Las no/moi son meras convenciones
por la asamblea”. Di/kh, a partir de enton-
(ai su&nqesiai, o bien su&nqh/xai); en este
ces, se sabe una cuestión de convención
sentido, deben su existencia a un acuerdo
humana.47 “Lo ‘lícito’ y lo justo son lo mis-
de la comunidad.43 Este carácter conven-
mo”.48 Deja de ser absoluta y necesaria; la
cional no es incompatible con ser resul-
diversidad de po&leij y no/moi demues-
tado de actividad legislativa consciente.
tran lo contrario.
En una conversación de Sócrates con el

44 Xenophon, Memo, 4. 4.12 y ss; Cf.: 4.6.6.


40 Ibid., p. 77. 45 Vide, Verdross, La filosofía del…, op. cit., p. 32.
41 Idem. 46 Idem.
42 Cf.: Pohlenz, M., “Anonimus peri\ no/mon”, en Na- 47 Cf.: Guthrie, op. cit., p. 111.
chrichten der königlischen Gessellshaft der Wisseens- 48 Sócrates en Xenophon, (Memo, 4. 4, 12-13). En este
chaften, Ph. hist. Klasse, Gotinga, 1924, pp. 19-37, ci- mismo sentido Lysias: a)nqrw&poij prosh/kei no/
tado por Guthrie, op. cit., p. 75. mow? o(ri/sai to_ di/kaion. Vide: Guthrie, op. cit., p.
43 Cf.: Guthrie, pp. 76 y 78. 111.

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 35


Sobre este particular comenta W. Greenleaf: las cuales son puras convenciones”.52 No&-
moj se opone, así, como obra convencio-
Los viajes de descubrimiento revelaron nal (o contractual) a la naturaleza.53
numerosos sistemas diferentes de lici- Los términos fu&sij y no&moj son cla-
tud y de moralidad, ninguna de las re- ves en el pensamiento griego. En autores
glas [i.e. no/moi] era absolutamente rí- antiguos dichos términos no eran necesa-
gida… A ninguna de [ellas]… tan infinitas riamente incompatibles, antitéticos; pero
en contenido como en diversidad, se po- en la temática intelectual del siglo v, eran
dría atribuir una autoridad permanen- considerados opuestos y mutuamente ex-
te... En este sentido se consideraban me- cluyentes: “lo que existía por no&moj, no
ramente relativas, habiendo nacido para existía por fu&sij”;54 i.e., lo que existe kata_
enfrentar las necesidades de un pueblo no&mon (i.e., jurídicamente), no existe
en particular en un espacio y tiempo de- kata_ fu&sei, “por naturaleza”). Esta opo-
terminados.49 sición fue una concepción corriente en el
siglo v. Así surgió la hipótesis de que frente
Así, los patrones y pautas de moralidad a la legalidad de la naturaleza existía otra;
y legalidad no pueden ser por naturaleza; precisamente establecida por no&moi.
sino son claros productos de la voluntad Esto se evidenció por la existencia de di-
humana cambiante y relativa. ferentes derechos positivos en diferentes
Eurípides, muerto en 411 a. de C. no cesó po&leij; la manifiesta inconsistencia y va-
de marcar el carácter humano, provisio- riedad de no&moi era aplastante eviden-
nal y convencional de las reglas de la vida cia. El carácter convencional de no&moj
social.50 se oponía a a)na&gkh (la necesidad) que
Lo justo o lo injusto –sostiene Arquelao– rige la naturaleza.
no son por naturaleza, sino por la ley El carácter artificial de no&moj es cons-
convencional.51 tantemente evidenciado por el pensa-
miento griego del siglo v. Así, por ejemplo,
Se ve bien –dice Claude Mossé−, cómo Antifón, dice: “La justicia [di<kaiosu/nh]
pudo, entonces, nacer la idea de que la consiste en no transgredir las leyes (no&-
naturaleza tiene sus propias leyes, que no moi) de la po&lij… las cuales son acuerdos
son las de la convivencia de los hombres,

49 Greenleaf, W. H., Order, Empiricism and Politics. Two


Traditions of English Thought, 1500-1700. Oxford,
Oxford University Press, 1964, pp. 197-199, citado
por Guthrie, op. cit., p. 59. 52 Mossé, Claude. Histoire des doctrines …, op. cit., p. 24.
50 Guthrie, op. cit., p. 71. 53 Bréhier, Emile, Histoire de la…, op. cit., p. 74.
51 Diógenes Laertio, Filoso&fwn bi/oi, II, 16. 54 Guthrie, op. cit., p. 55.

36 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
artificiales, carecen de la ineluctabilidad … peri\ me\n qew=v ou&k e1xw ei0de/nai,
natural”.55 ou1q70w)j ei0si0n ou&k ou1q70o(poi=oi/ tinej
Igualmente, Aristófanes no deja de seña- i0de/an.
lar su carácter arbitrario:56 “la legislación Protágoras de Abdera60
no tiene nada que ver con la naturaleza,
[aquélla] es siempre artificial...”.57 Los grie- Es importante señalar que estos proble-
gos, en cierto sentido, consideraron esta mas solo podían ser perceptibles dentro de
distinción como un triunfo de la razón. un avanzado desarrollo cultural. Por su-
En Grecia –comenta Ernest Barker− hubo puesto, solo en el marco de un desarrollo
en cualquier momento varias y diferentes espiritual acentuado es posible plantearse
po/leij, coexistiendo y en íntimo contacto. cuestiones sobre el comportamiento hu-
Los hombres, al ver tantas interpretacio- mano y la comunidad política. La irrup-
nes en uso, fueron forzados a plantearse el ción del conocimiento científico (episth/
problema de la verdadera naturaleza de la mh) y su continua expansión fue el gran
po/lij.58 movimiento que preparó el humanismo
del siglo v.
IX. Homo mensura y el desvanecimiento Cuando se supera la concepción mítica
de los dioses del mundo (y de la vida social se empeza-
ron a sentir los beneficios de una ciencia
Panton xrema&twn me/tron e0sti\n
de la cultura y conducta humanas. Las
a!nqropoj, tw~n me\n o!ntwn w)j e1stin,
máximas ancestrales de conducta no fue-
tw~n de\ ou)k o!ntwn w)j ou)k e1stin
ron seriamente cuestionadas sino hasta
Protágoras de Abdera59
que la antigua concepción de la naturale-
za había sido superada.61
Con los sofistas se prosigue y, en cierto
sentido, se consolida el movimiento inte-
55 Cf.: OP 1364, frag. 1 (Papyrus Fragments), 44A, Diels,
Hermann. Die Fragmente der…, op. cit., p. 346. Cf.: Gu- lectual62 que habría de expandir el mundo
thrie, op. cit., p. 108.
56 Cf.: Guthrie, p. 114.
de la explicación racional a todas las áreas
57 Cf.: Ibid., p. 115.
58 Barker, E., Greek Political Theory. Nueva York, Rout- 60 Frag. 4, Diels, op. cit., t. II, p. 265: “Sobre los dioses no
ledge-Taylor & Francis Group, 1918/2010, pp. 4-5. tengo la posibilidad de saber si existen o no existen,
59 Frag. 1, Diels, Hermann, Die Fragmente der…, op. cit., ni tampoco qué forma tienen, oponiéndose a esto
p. 263: “De todas las cosas el hombre es la medida; muchas cosas: la obscuridad del tema y la brevedad
de las que son, por lo que son; de las que no son, de la vida humana”. La versión que doy en español
por lo que no son”. La versión que doy en español sigue mutatis mutandi la versión inglesa de K. Fre-
sigue mutatis mutandi la versión alemana de Diels; eman, op. cit., p. 126. Vide, Hermann. Die Fragmente
la versión de Maria Timpanaro Cardini citada en G. de…, op. cit., la versión de Maria Timpanaro Cardini
Giannantoni (Ed.), I presocratici, op. cit., t. II, p. 891. citado en Giannantoni, G., op. cit., t. II, p. 894.
Vide, Freeman, Kathleen, Ancilla to the Pre-Socratic…, 61 Burnet, John, Early Greek Philosophy, p. 1.
op. cit., p. 125. 62 Jaeger, Werner W., Paideia, los ideales…, op. cit., p. 263.
del saber (incluyendo las instituciones una nueva convención que establezca una
sociales, e.g., no&moj). Con el movimien- opinión distinta.65
to sofístico el logro de la racionalidad es Con ello el establecimiento de reglas (i.e.
prácticamente irreversible. La afirmación de normas) queda desvinculado del orden
de la razón y voluntad humanas es formu- natural. Desde entonces, el establecimien-
lada con plena conciencia: “De todas las to, aplicación, sustitución, estimación o
cosas el hombre es la medida…”.63 Con ello crítica de las reglas o normas sociales re-
se da el primer humanismo y el primer re- clamaron una explicación autónoma: una
lativismo jurídico filosófico de la historia ciencia de la po&lij. Esta ciencia habría de
occidental. construirse con la ética y, posteriormen-
La raíz de esta doctrina [está contenido] te, con la jurisprudencia. “La ciencia de
en la conocida frase: homo-mensura, i.e., la la po&lij es una ‘teoría del Estado’; pero,
medida de todas las cosas la proporciona también… una teoría moral y una teoría
el conocimiento, la razón del hombre. El jurídica”.66
mundo es inteligible gracias a la razón y
es la razón la que crea y modifica las ins- X. La asunción del “estado de naturaleza”
tituciones sociales. Esta divisa comprende y del “pacto social”
las decisiones políticas. Idea que está rati-
Un momento significativo es cuando los
ficada en otra frase que Platón atribuye a
hombres “asumen” concepciones más
Protágoras:
plausibles y universales para dar cuenta
del origen de las diversas y distintas co-
En la medida en que una po&lij se con-
munidades humanas, haciendo abstrac-
sidera justa y buena a un hombre, lo es…
ción de las diferentes culturas. Esta es la
pero solo mientras el hombre [y los que
idea de un estado anárquico de naturale-
le siguen] conserva esa opinión.64
za; hipotético pacto o convenio entre los
hombres para limitar sus inclinaciones,
Con este argumento Protágoras expre-
apetitos o pasiones naturales y establecer
só: que es la decisión del hombre la que
un gobernante67 que centralizara el uso le-
determina cuál debe ser el contenido del
gítimo de la fuerza.
derecho. El derecho es el resultado de las
convenciones de los hombres y este dere-
cho se mantendrá hasta en tanto no exista
65 Verdross, Alfred, La filosofía del derecho, op. cit., pp.
33-34.
66 Barker, Ernest, Greek Political Theory, op. cit., p. 7.
67 Del latín gubernare y este del griego kuberna&w:
63 Loc. cit. guiar, conducir, diciendo qué hacer (Cf.: Liddell y
64 Platón, Theaetetus, 166d. Scott, Greek-English Lexicon, op. cit., p. 1004).
En tiempos primigenios, de acuerdo con “delitos”, “bajezas”? Estas expresiones no
la teoría, los individuos nacieron dentro tendrían significado sin un aparato semán-
de un estado de naturaleza anárquico tico que así los califique; aparato semánti-
(cruel o no; pero anárquico), los cuales, co, que solo existe, si se presuponen ciertas
haciendo uso de la razón, establecieron una premisas que lo hacen posible: asumir un
sociedad y un gobierno por medio de la ce- Dios, un orden jurídico válido o una moral
lebración de un hipotético pacto o contra- positiva.
to entre ellos. Cabe subrayar que para que se adscriban
Aunque ideas harto similares pueden, significados a los actos humanos, prime-
con claridad, remontarse hasta los sofistas ramente tiene que haberlos. No existen
y otros filósofos griegos, como ya vimos, pecados en sí, sino conductas pecadoras;
las teorías más influyentes en la jurispru- tampoco delitos en sí, sino conductas ilí-
dencia y en la teoría política tuvieron su citas; en fin, no existe mala in se, sino solo
mayor presencia en los siglos xvii y xviii y mala prohibita. Existen solo los significa-
están asociadas a los ingleses, Thomas Ho- dos que los aparatos semánticos (míticos,
bbes y John Locke y al ginebrino Jean-Ja- religiosos o racionales) adscriben a tales
cques Rousseau. Lo que distingue a estas conductas. Solo los actos humanos, pue-
teorías era el propósito de entender la au- den recibir, racionalmente, tales califi-
toridad política sobre la base del interés cativos. No existen aves pecadoras, peces
individual y su “aceptación” racional. delincuentes, tampoco nematelmintos o
Estas teorías, inter alia, se proponían anélidos que cometan bajezas o no cum-
demostrar que el gobierno organizado de plan sus promesas.
una sociedad civil, el cual, sin duda era un Es necesario tener presente que son
estadio superior comparado con las serias únicamente los hechos los que reciben
desventajas de un hipotético estado de na- significados de esta índole (válido, lícito,
turaleza, caracterizado por ausencia abso- legítimo, deudor, contumaz, et sit cetera).
luta de gobierno y autoridad.68 Un ejemplo contundente, harto común,
¿Qué significan los actos fuera de una es señalar que todo poder “legítimo”, para
comunidad? Nada. Pues bien, es necesario serlo tuvo que ser, primera y necesaria-
asumir ciertas hipótesis para pensar en mente, poder de facto. Así, todo orden ju-
un aparato semántico interpretativo i.e., rídico convirtió ciertas prescripciones (o
en “lector” del sentido de las conductas. textos) en normas válidas conviniendo su
De otra manera, ¿cómo habría “pecados”, observancia y aplicación. ¿Es eso difícil de
entender?
68 “Social contrat (Covenat)”, en Encyclopædia Britanni-
ca, op. cit.
Individuos que participan de los mismos haga); por creer en las bondades de su fi-
rituales y comparten el mismo credo, for- nalidad, por razones prudenciales (evitar
man una e/kkhsi/a: todos son cófrades, la sanción) o cualesquiera otras. Quizás
hermanos; creen en un mismo panteón convienen o aceptan un orden jurídico
(así, los egipcios, sumerios, griegos, roma- porque las únicas alternativas serían de-
nos) o en un solo Dios (hebreos, musul- rrocarlo, escapar de su ámbito de aplica-
manes). ¿No acaso es infinitamente más ción o, más fácil: suicidarse. Pero, siempre
complicado imaginar entes metafísicos son ellos (no existen otros) quienes, en
(pancreatores, omnipotentes, omniscientes última instancia, convienen o aceptan el
y, peor aún, misericordiosos) dueños del derecho que les rige.
universo, que en un simple postulado heu- En la base de cualquier orden jurídico
rístico que dice “cuando ciertas prescrip- positivo determinado se encuentra, así,
ciones sean observadas y aplicadas (ejecu- una convención o aceptación, manifiesta
tadas) se tendrá por derecho positivo todo solo en actos de conducta humana (actos
el orden jurídico que propone”? de habla, conductas u omisiones). Son pre-
En el curso de las explicaciones que cisamente a la realización de estos hechos
preceden se puede observar que el orden de conducta a los que llamamos “eficacia”.
jurídico (su creación y funcionamiento) La ocurrencia de estos hechos es lo que
es una cuestión de hechos sociales: voli- hace que un dictum (scriptum o non scrip-
ciones y actos humanos. Ahora bien, si tum) adquiera el significado de norma vá-
en una determinada comunidad rige un lida. Un ejemplo inobjetable es la validez
conjunto de normas y si estas son estable- dada a las prescripciones del primer acto
cidas por actos humanos, entonces, puede constituyente. Estas no pueden ser jurídi-
decirse, que las normas jurídicas de una camente válidas sino hasta que se aplican
comunidad son aquellas que, en última y solo porque se aplican.
instancia, han sido convenidas, aceptadas Si esto es así, como es el caso, entonces la
por los miembros de la comunidad. Cierta- eficacia funciona no es solo como condi-
mente, ‘convenir’ y ‘aceptar’ no son actos ción necesaria, sino, también, como con-
psíquicos, sino expresiones que significan dición suficiente de las normas jurídicas
“actos de los miembros de la comunidad (i.e., del derecho).
que, por cualquier circunstancia que sea, El hecho de pertenecer a una comuni-
observan o aplican el derecho”. dad, y no a otra, implica “aceptar” (en el
Puede ser por interiorizar el conteni- sentido aquí descrito) el orden jurídico de
do del mandato o prescripción; simpati- dicha comunidad. Esta pertenencia presu-
zar con el grupo dominante (haga lo que pone la participación mayor o menor (aún
meramente pasiva) en el mantenimiento comience a Ilustrar y hasta el momento
del derecho de esa comunidad. Tomando no he encontrado respuesta en ninguna
en consideración que todos los que perte- parte.
necen a una misma comunidad “aceptan”
lo mismo, entonces puede decirse que La respuesta de Kant es contundente (di-
“convienen” en aceptar un mismo orden rigiéndose a la intención subliminar del
jurídico (el cual se mantiene en razón de la clérigo), ilustración significa “la salida del
realización de tales actos). Vuelvo a insistir hombre de la minoría de edad (Unmündi-
que esta convención no es una comunión gkeit)”. Tiene que emancipar. Esta eman-
de voluntades psíquicas, la convención a cipación se interpreta como autonomía
la que me refiero es la convergencia de he- para utilizar la mente asonar. Lo que es
chos de conducta humana que, por cual- imposible conseguir con dejadez o cobar-
quier razón que sea, convienen en tener día, Sapere aude: ten la audacia de servirte
un mismo derecho. tu propio entendimiento. Esta es la divisa
de ilustración. La idea kantiana es no de-
XI. Los clásicos modernos jarte indoctrinar.70
La ilustración fue un movimiento y un
Banwortung der Frage: was ist Aufklärung?69
estado mental. El término, si bien repre-
Immanuel Kant
senta una fe en la historia intelectual de
Europa, sirve para designar programas
Traeré a colación algunos pasajes que no
de reforma; delinea objetivos específicos
causan tanto estupor (salvo a las iglesias):
para criticismo y propuestas para la ac-
las hipótesis heurísticas que explican el
ción. La significación especial de la Ilus-
origen del Estado (i.e., del derecho).
tración radica en su combinación de prin-
Kant en el recién mencionado es la res-
cipios y pragmatismo. Contrariamente a
puesta a la pregunta “¿Qué es la Ilustra-
otros términos usados por los historiado-
ción?”, que planteó el escéptico (o malé-
res para describir un fenómeno que ven
volo) clérigo Johhann Friederich Zöllner,
más claramente que sus contemporáneos.
quien decía:
El término “Ilustración” fue usado y que-
Esta pregunta sea tal vez tan importan-
rido por todos aquellos que afirmaban el
te como la pregunta: ¿qué es la verdad?
poder de la razón para liberar al hombre
[y] tiene que ser respondida antes que se
de creencias y motos indoctrinados. Revi-
69 Respuesta a la pregunta: ¿Qué es la Ilustración? en sando la experiencia, en 1784 (Banwortung
el Periódico Berlinischen Monatsschrift, 2, febrero
1784, pp. 481-494 dando respuesta a la pregunta que
plantéo el clérigo Johan Friedrick Zölner: was ist Au- 70 Kant, Immanuel, disponible en http//de.wikipedia.
fklärung? (¿Qué es la Ilustración?) org/wiki/Imanuel Kant.
der Frage: was ist Aufklärung?), Immanuel son, más que acontecimiento históricos,
Kant afirmaba que la emancipación de la funciones explicativas:
superstición e ignorancia constituía la ca-
racterística esencial de la Ilustración.71 Es −dice Max Weber refiriéndose a la
Esta idea de la asunción de una conven- teoría de Hobbes− una utopía racional,
ción o presuposición de un “pacto social” un concepto límite puro e ideal. Su fun-
(the covenant) son significativas en la filo- ción es heurística y su valor se mide en
sofía política de los modernos. Al respecto, la fecundidad de investigaciones y de las
dice Ernst Cassirer: interpretaciones que hace posible. Esta
descripción −concluye Weber− convie-
Um zu einer wirklichen Wissenschaft vom ne, punto por punto, o casi, a la descrip-
Staate zu gelangen: dazu ist nichts anderes ción de Hobbes.74
erforderlich, als die kompositive und reso-
lutive Methode, wie Galilei sie in der Physik Hobbes expresamente indica que nunca
zur Geltung Gebracht hat, auf the Politik su existió tal estado de naturaleza:
übertragen. 72
Para llegar a una ciencia efectiva del Es- It may peradventure be thought, there was
tado no necesitamos más que del méto- never such a time, nor conditions of warre
do compositivo y resolutivo que Galileo as this; and I believe it was never generally
aplicó a la física y que ahora [i e., en la so, over all the world… However, it may be
Ilustración] se aplica a la política. Tam- perceived what maner of life there would be,
bién aquí, para lograr un entendimiento where there were no common Power to fear…
del todo, es necesario volver a los ele- But though there has never been anytime,
mentos, a las fuerzas que originalmente wherein particular men were in a condi-
los juntaron y a las fuerzas que las man- tion of warre one against another...75
tienen unidas.73
74 Gesammelte Aufsätze zur Wissenschaftslehre. Die Ob-
En efecto, los conceptos de estado de jektivität sozialwissenschaftlicher und sozialpolitischer
Erkenntnis, pp. 190 y ss., citado por Polin, R., Politi-
naturaleza y contrato social hobbesianos que et philosophie chez Thomas Hobbes, París, Presses
Universitaires de France, 1953, p. 89).
75 Traduzco: “Puede por ventura ser pensado que no
hubo tal tiempo, ni condiciones de guerra como este;
y pienso que en general nunca fue así en todo el mun-
71 Russell Richards, Geofrey, “The Enlightenment” y do… Sin embargo, puede ser percibido qué forma de
“The Aufklärung” en Europe, History of Encyclopædia vida sería donde no hubiera un Poder común que te-
Britannica, op. cit. mer… Sin embargo, aunque nunca hubo en ningún
72 Die Philosophie der Aufklärung, Hamburgo, Felix tiempo en que [el] hombre particular estuviera en
Meiner Verlag, 1932, p. 267. condiciones de guerra” (Thomas Hobbes of Malmes-
73 Para la traducción sigo de cerca la versión de Euge- bury. Leviathan.Or the Matter, Forme & Power of a
nio Ímaz: Filosofía de la Ilustración, México, Fondo de Commonwealth Ecclesiastical and Civil, Part. I, Cap.
Cultura Económica, 3.ª ed., 1972, 7.ª ri., 2008, p. 283. XIII: Of the natural condition of mankind, as con-
Este estado de rivalidad, de lucha y de na: no es necesario −dice Rousseau− hacer
miedo es interrumpido por el contrato caso de las investigaciones con las cuales
−the covenant−, que substituye el meca- se puede entrar en materia sobre el asun-
nismo natural por un mecanismo social to, por medio de las verdades históricas:
artificial. Pero no es el contrato mismo el valgámonos solamente de razonamientos
que interesa a Hobbes, sino la consecuen- hipotéticos y condicionales.78
cia que de él se desprende. Producto de un En otro lugar dice:
cálculo analítico, el contrato resuelve un
problema conceptual; no soluciona una Existe, pues, la necesidad lógica de un
situación histórica. El contrato (the cove- contrato social, la “necesidad de retroce-
nant) revela el principio del Estado; no su der a una convención primitiva”.79
origen histórico. Hobbes lo funda en la ra-
zón y no en los hechos... El contrato social El estado de naturaleza y el contrato ori-
aparece así... como el fundamento mismo ginario constituyen, en Immanuel Kant, el
de la edificación de todo Estado civil.76 camino hipotético que va a conducirnos al
El contrato social de Rousseau tiene la “Estado civil” y al derecho positivo. Al res-
misma función explicativa que el cove- pecto, Kant insiste, particularmente, sobre
nant de Hobbes. El contrato del que habla el hecho de que el estado de naturaleza no
Rousseau: es una conclusión desprendida de la histo-
ria. No es la historia la que nos ha enseña-
[pone fin a un] estado que no existe más, do que, antes de la aparición de un poder
que posiblemente nunca existió y que legislativo externo, los hombres no cono-
probablemente no existirá jamás, pero cen otra máxima [más] que la violencia,
del cual es necesario tener una idea pre- sino que resulta a priori, de la idea racional
cisa para formarse una idea de nuestro de un Estado que no es lícito, sino hasta el
presente estado.77 establecimiento de un Estado jurídico.80

78 Cf. Idem (sección que se encuentra entre el Preface


Rousseau se sirve del estado de natura- y la primera parte).
leza y del contrato social como criterios o 79 Vide Rousseau, Jean Jacques, Contrato social, libro I,
capítulos V y VI.
esquemas de interpretación y es ahí donde 80 Cf. Kant, Immanuel. Metaphysische Anfangsgründe
reside el valor metodológico de la doctri- der Rechtslehre, en Kant, Mikes International 2001-
2005, en línea http://www.federatio.Org/mi_bibli/
BartokGyorgy_Kant.pdf, II, 1. 2. Staat und Illegalität.
cerning their felicity, and misery, Cap. XIII: Sec. The Reimpresión de la edición de Könisberg, Friedrich
incommodities of such a War, Parts. 3-4). Nicolovius, 1797. Existe versión en línea en español:
76 Polin, Politique et Philosophie…, op. cit., p. 93. Principios metafísicos de la doctrina del derecho, II,
77 Cf. Rousseau, Jean Jacques. Discours sur l’inegalité 1.ª secc. 2: Estado de ilegalidad. http://www.libros-
[Preface] de Rousseau. Œuvres complètes, París, Aux dehumanidades.net/html_bura/ficha/arams/title/
Éditions du Seuil, 1967 (Collection l’intégral). principiosmetafísicosdeladoctrinadelderecho.
La hipótesis del “estado de naturaleza” si, y solo si, x es habitualmente
tiene por única misión hacernos com- obedecido84
prender la posibilidad de una voluntad
común que no se cumple más que como En otras palabras: los actos de x son los
voluntad estatal,81 “todo Estado debe ser actos constituyentes de un orden jurídico
considerado como si estuviera deducido siempre que las prescripciones que esta-
de un contrato original”.82 blece sean habitualmente obedecidas (i.e.,
Pues bien, la presunción de la Grund- sean eficaces).
norm, presunción condicionada por los ac-
tos de observancia y aplicación (ejecución) XII. La policitación85 de determinado
de lo prescrito por el “constituyente”, res- orden jurídico
ponde mutatis mutandi al concepto roma-
Todo acto que prescribe pretende ser obe-
no de una publica sponsio o de un contrato
decido. Cuando estas prescripciones son
social como fundamento del Estado. “En el
establecidas, sus autores esperan que lo
fondo −dice Kelsen− se trata de la misma
que ordenan, prohíben y permiten sea
necesidad teórica que permite compren-
obedecido (i.e., observado y aplicado). Aho-
der como relaciones jurídicas una serie de
ra bien, si los actos que prescriben esperan
situaciones fácticas. […] En último térmi-
ser seguidos u obedecidos, entonces estos
no, toda integración social no es posible
actos proponen el establecimiento de un
sino en virtud de un compromiso”.83
determinado derecho; proponen el esta-
Esta convención permite determinar
blecimiento de un específico orden jurídi-
cuál es el órgano que constituye; deter-
co. Detrás de todo acto que prescribe, exis-
minación que puede ser descrita por la si-
te la propuesta de un específico derecho.
guiente fórmula:
84 Esta formulación debe mucho al concepto de so-
x es Rex (primer legislador, berano de John Austin (vide, The Province of Juris-
prudence Determined, Nueva York, Burt Franklin,
órgano constituyente) 1970, reimpresión de la edición póstuma: Londres,
Dumond, 1861, p. 169. The Uses of the Study of Juris-
prudence, en The Province of Jurisprudence Determi-
ned and The Uses of the Study of Jurisprudence, Hart
81 Gesammelte Aufsätze zur Wissenschaftslehre. Die Ob- (Intr.), Indianapolis, Hackett Publishing Company,
jectivität sozialwissenschaftlicher und sozialpolitischer Inc., 1998, reimpresión de la edición de Weidenfeld
Erekentnis, pp. 190 y ss., citado por Polin, R., Politique & Nicholson, Londres, 1954/1971, pp. 370-371). Para
et philosophie chez Thomas Hobbes, París, Presses Uni- una breve explicación de la doctrina de John Austin,
versitaires de France, 1953, p. 89, núm. 1). vide, capítulo IV, “Teoría del derecho de John Austin”
82 Kant, Immanuel. Rechtsphilosphie Reflexionen, Hands- de mi libro Juris Prudentia: More geométrico. Dogmá-
chrittlicher Nachlas, núm. 7641, p. 568, citado por Vla- tica, teoría y meta teoría jurídicas, México, Fontama-
chos, A., La pensée politique de Kant, París, Presses ra, 2013, pp. 115-141.
Universitaire de France, 1962, p. 329. 85 Del latín policitatio(onis): Promesa que no ha sido
83 Kelsen, Hans, Allgemeine Sttatslehre, op. cit., pp. 250 y aceptada todavía. Cf.: Diccionario de la lengua espa-
324; id., Teoría general del Estado, op. cit., pp. 327 y 413. ñola, edición digital, 2014.
Esta propuesta produce una disyunción los que decidirán, comportándose de con-
inescapable, que puede mostrarse así: formidad, si establecen el orden jurídico
contenido en Di.87 En suma, la propuesta
[D0] Pi [Di] es dirigida a aquellos que pueden estable-
cer el orden jurídico propuesto.
Donde D0 nombra el statu quo (cualquier La disyunción:
momento de un orden jurídico o, bien, el
momento jurídico “cero”); Pi, el acto que [D0] Pi [Di]
propone cierto derecho; lo que se encuen-
tra entre los corchetes, Di, indica el conte- tiene que resolverse.88 Su solución corres-
nido de la propuesta, i.e., un nuevo dere- ponde a todos sus destinatarios. ¿Cómo se
cho así propuesto. manifiesta la aceptación de los destinata-
Esta expresión gráfica se lee: ‘preservar rios? A través de su conducta; la cual no
el statu quo, comportándose como hasta puede ser sino consuetudo (i.e., constitu-
entonces: (jurídicamente: D0) o, bien, com- yen los actos jurídico-creadores de dere-
portándose como prescribe Di, el derecho cho consuetudinario).
propuesto por Pi, substituyendo el dere- Esta propuesta puede venir de grupos más
cho hasta entonces existente.86 o menos informes, ser dispersos o heterogé-
A este respecto es importante señalar neos; provenir de la creencia de una profe-
que la propuesta que contiene Di no ne- cía, o bien, de las arengas de un líder; pero
cesita presentarse de manera explícita, es siempre ser el segundo disyunto que presu-
decir, hecha de manera a informar o con- pone una innovación anarco derogante.
vencer. Esta propuesta puede ser explícita Toda creación o innovación jurídica se
o implícita, brusca o imperceptible, vio- inicia, siempre y necesariamente, con la
lenta o pacífica, et sit cetera; pero siempre propuesta de un determinado derecho
es un acto que propone establecer un nue- (i.e., de un cierto derecho). Sin embargo,
vo derecho. para crear o innovar jurídicamente no
¿A quiénes se dirige esa propuesta? La basta con proponer, es necesario que la
pregunta no tiene más que una respuesta: propuesta sea aceptada para que la crea-
se dirige a todos aquellos cuya conducta
puede observarla o aplicarla (ejecutarla), 87 En un sentido más restringido podría decirse que la
propuesta se dirige inmediatamente a aquellos que
i.e., todos aquellos que se encuentren den- se encuentran en posición de aplicarla.
88 Puede, sin embargo, darse una situación anómala
tro de sus ámbitos de aplicación. Son ellos (no del todo conforme a la lógica proposicional)
consistente en la secesión de la comunidad, unos
86 La sustitución de D0 por Di es resultado de que, por manteniendo el statu quo; otros, adoptando la nueva
definición, Di es diferente de D0; son disyuntos recí- juridicidad, i.e., el nuevo derecho (como en el caso
procamente excluyentes. de secesión de estados).
ción (total o parcial); es necesario hacerla permite explicar un conjunto de compor-
eficaz. Todos los miembros de la comuni- tamientos humanos como actos de crea-
dad (y los no miembros): conquistador, ción y aplicación del derecho positivo. Por
usurpador, un tratado de paz (armisticio) convención entiendo el conjunto de com-
impuesto por el enemigo, o bien un órga- portamientos que hacen posible un siste-
no de la comunidad internacional, pue- ma jurídico propuesto.
den proponer; pero solo los destinatarios En efecto, los miembros de una comuni-
pueden hacer efectiva tal propuesta (sea dad convienen en establecer la normati-
por convencimiento, por conveniencia o vidad propuesta por x, comportándose de
por la fuerza). modo a instalar el sistema que x propone.
Dicha convención no es un consenso de Esto es lo que, en este contexto, significa
voluntades psíquicas, sino una hipótesis obediencia habitual (para usar palabras
que nos permite explicar la creación ju- de John Austin):90 actos de aplicación cuya
rídica.89 Una heurística asunción que nos realización (por la razón que sea) hacen
que x se convierta en rex (primer legislador
89 Pero, permítaseme insistir que este “querer” o del sistema, i.e., en el constituyente) si es
“aceptación” del individuo no alude a una voluntad
psíquica. Esta aceptación, no es más que el resul-
el acto que establece un orden jurídico, o
tado del condicionamiento sucesivo de los eventos sustituye uno anterior. Puede darse el caso
jurídicos en virtud del cual se aceptan los actos
condicionantes si se realizan los actos de aplica- que tal propuesta sea hecha por el propio
ción que aquellos condicionan. La aceptación ficta rex. En cuyo caso puede proponer un cam-
que explica la creación convencional del orden ju-
rídico, no tiene nada que ver con el querer causal, bio total o un cambio parcial del sistema
compuesto de instintos, apetitos y deseos. Voluntad
psíquica y voluntad jurídica significan cosas radical ya sea por vía regular o por vía irregular.
y diametralmente diferentes. “La voluntad jurídica
−afirma Kelsen− no designa, como por error se sos- Puede suceder que alguien acepte un cierto sistema
tiene frecuentemente un hecho psíquico real que de normas jurídicas realizando los actos de aplica-
constituya un objeto del conocimiento de la ciencia ción y desearlos psíquicamente. Algún otro, a conse-
causal, sino un instrumento del conocimiento jurí- cuencia de haber realizado actos de aplicación, acep-
dico normativo..., su diferencia decisiva con el con- ta el mismo sistema de normas, sin que este orden
cepto psicológico de la voluntad se convierte en un jurídico haya sido jamás objeto de su preocupación.
medio lógico”. Hauptprobleme der Staatsrechtslehre, De la misma forma, puede ocurrir que alguien reali-
Wisconsin, Scientia, 1911, p. xliii; Vide etiam, Proble- ce actos de aplicación y, sin embargo, no simpatizar
mas capitales de la teoría jurídica del Estado, México, en nada con tal derecho. La pertenencia a una deter-
Porrúa, 1987, p. xliii. La voluntad jurídica puede minada comunidad puede constituir para los indi-
coincidir con el querer psíquico, pero, también, viduos motivo de orgullo, de satisfacción, de indife-
puede estar en franca contradicción con él. El que- rencia, de resignación, de indignación, de odio; pero
rer jurídico es tan diferente del querer psíquico que, el hecho de realizar los actos jurídicos que aplican
por un lado, se puede deber sin querer lo debido, es las normas del sistema, es el momentum (o momenta)
decir, sin desearlo psíquicamente, y, por otro lado, en que se acepta, el orden jurídico que aplica.
se puede querer sin que lo querido sea normativa- 90 Austin, The province of Jurisprudence Determined, para
mente debido, “Ich kann sollen, ohne das Gesolte zu esta cita manejo la edición de Hart: The province of
wollen, d.h. zu meinen swecke zu machen, und ich Jurisprudence Determined and the Uses of the Study of
kann wollen ohne das sollen” (Kelsen, Hauptproble- Jurisprudence, Indianapolis, Hackett Publishing Co.
me der…, op. cit., p. 65; id., Problemas capitales de…, op. Inc. 1998, reimpresión de la edición de Weidenfeld
cit., p. 55). and Nichelson, Londres, (1954) 1971, p. 194.
Si los miembros de la comunidad aceptan obediencia reiterado, por la mayor parte de
la propuesta de x, los actos de x se convier- la comunidad establece una pauta de con-
ten en actos de Rex1. De esta manera los ducta, cuyo desvío provoca una reacción
miembros de una comunidad establecen hostil por parte de los miembros del gru-
convencionalmente su derecho. po (aplicada por ellos o por las instancias
establecidas para tal efecto). Esta norma
XIII. El carácter consuetudinario del consuetudinaria creada por la obediencia
procedimiento habitual hacia x, quien puede mantenerse
como Rex0 o convertirse en Rex1 o, si fuera
De todas la propuestas posibles solo una
el caso, en Rex2 o en Rexn. Esto puede for-
se convertirá en el acto originario del or-
mularse simplemente como sigue:
den jurídico de dicha comunidad.91 Es po-
sible que tal disyunto sea aplicado por un
(∃ P i) y si los Or(s) ≈ Pi ⇒ NC [Di]92
grupo importante de destinatarios y re-
chazado por otros, de forma duradera. Es-
Esquema que se lee: existe una propues-
tos casos son casos de secesión. En el pro-
ta jurídica Pi y si los Or(s) (incluyendo órga-
ceso mediante el cual rex se convierte en
nos y particulares) ≈ Pi observan o aplican
el constituyente, no existe legislación que
Pi, entonces se crea la norma consuetudi-
prescriba que x es rex; este procedimien-
naria NC que establece Di.
to, simplemente otorga el carácter de acto
De lo anterior se sigue que la propuesta
jurídico creador a un individuo cuando es
Pi se convierte en a1 (el acto constituyente)
habitualmente obedecido.
y Di, en n1, en la(s) primera(s) norma(s) de
Ahora bien, observando con atención
una cadena de facultamientos sucesivos.
este procedimiento uno se percata que en-
Si damos por hecho los actos consue-
caja perfectamente en la descripción del
tudinarios de creación tendríamos lo si-
procedimiento consuetudinario. El ele-
guiente:
mento material se compone de los actos
NC [Di]
humanos que constituyen la aceptación
convencional, conditio sine qua non de la
Expresión simbólica se lee: “existe una
creación consuetudinaria. El hábito de
norma consuetudinaria que establece: [Di].
Lo que equivale deónticamente a ‘compór-
91 Es indispensable subrayar que con la creación con-
vencional de los sistemas de normas jurídicas no tense como prescribe Rex (i.e. el primer
pretendo justificar un determinado procedimiento
de creación y reprobar otros. La convención, repito, constituyente)’”.
es simplemente la hipótesis que nos permite explicar
el establecimiento del órgano constituyente de un or- 92 Como no puede haber ningún equívoco, puede eli-
den jurídico y de su creación sucesiva (Vide, Sobre el minarse el operador existencial (∃ N C) como se ha
sistema jurídico y su creación, México, unam, p. 28). hecho anteriormente.

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 47


Esta aceptación convencional que acep- XIV. Cuasi historia
ta una propuesta realiza mutatis mutandi
el concepto de obediencia habitual de John Como señalé anteriormente a finales del
Austin; mutatis mutandi, la Grundnorm siglo vii se presentaron en Grecia ciertas
de Kelsen; mutatis mutandi, la “regla de condiciones que dieron origen al gran
reconocimiento” de Hart. Todas estas tesis movimiento de colonización. La moneda
suponen necesariamente actos humanos hace su aparición, la división del trabajo
que hacen eficaz el sistema que el “consti- entre la ciudad y el campo.
tuyente” propone. Es posible pensar que la falta de tierras
Esta norma consuetudinaria tiene, para y el régimen de las hipotecas obligó a un
usar la terminología de Walter Heinrich, grupo de labriegos y pastores de Etolia, a
una función delegante.93 En efecto, dicha establecerse en tierras de Anatolia (Asia
norma consuetudinaria no tiene más fun- Menor). El problema que se plantea a los
ción que habilitar o facultar (en el caso oi)kistai/ (fundadores, colonizadores) es
convertir) las “propuestas normativas” de que entre ellos, como señalé en segmento
un individuo (o grupo de individuos) en anterior, no se encuentra, ningún indivi-
normas jurídicas válidas (e.g., n1). Es me- duo que, por estirpe o renombre, deposi-
diante este procedimiento consuetudina- tario de las qe/mistej.94 No había nadie que
rio que los actos de x se convierten en el tuviera alguna característica que lo ha-
primer acto constituyente del orden jurí- bilitara para mandar sobre los demás: se
dico. De la misma forma, se designa o, más encontraban todos en estado de igualdad
claramente, se faculta al órgano constitu- (isonommi/a).
yente. Para mostrar un ejemplo, permíta- Ahora bien, si como es el caso, varias
seme colapsar la historia y recomponer (lo po&leij fueron fundadas, entre las cuales
menos posible) los hechos. bien puede estar a la que nos referimos
¿cómo hicieron los oi)kistai/ para estable-
cer sus normas e instituciones? Denomi-
nemos al momento en que se encuentran
los oi)kistai/: “momento cero” (i.e., D0), en
el cual no hay normas ni autoridades, (si-
93 “Man hat vielmehr drei in ihrer strucktur
sehr verschjedense Relationen zwischen Ge- tuación que bien puede satisfacer las hi-
wohneitsrecht und Gesetzesrecht auseinander
zu halten, die wir als delegierendes... Gewohn- pótesis conocidas como “estado de natu-
heistsrech”. Heinrich, Walter, “Zur Prob-
lematik des Gewohnheistsrechts”, en Recueil
d’études sur les sources du droit en l’honneur de 94 Vide supra, Teogonía. Vide etiam, El excursus. La ju-
Francois Gény. Les sources générales des systèmes risprudencia griega en mi libro Elementos para una
juridiques actuels, París, Librairie du Recueil teoría general del derecho, México, Themis, 1998, pp.
Sirey, s/a, t. II, p. 292. 431-449.

48 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
raleza” de Hobbes95 o de Rousseau,96 o bien,
el primer día de la creación en Bentham.97 En este último supuesto, la propuesta de
Pensemos ahora en la solución más sen- Agelaos se convierte en el primer acto del
cilla. Imaginemos que entre ellos existe orden jurídico Da (i.e., en a1). La investidu-
un individuo llamado Agelaos que preten- ra de Agelaos no sería sino una instancia
de mandar sobre los demás. Así, Agelaos, de la fórmula “x es Rex (primer legislador,
dirigiéndose a sus coterráneos, dice “etó- ‘constituyente’) si, y solo si x (en el caso,
lidas compórtense: Da”; aquí es claro que Agelaos) es habitualmente obedecido”.
Da representa lo que Agelaos quiere de los Ciertamente, el problema que pudieron
etólidas). Esta situación plantea a los etóli- enfrentar lo etólidas pudo haber sido más
das la siguiente alternativa: complicado. Supongamos que no es solo
Agelaos quien propone el establecimiento
[D0] Pa [Da] de cierto derecho, sino que, además, Épafos
dice: “Etólidas compórtense De” y, a su vez,
mantener el momento jurídico cero o, Klimene dice: “etólidas compórtense Dk” y,
bien, seguir la conducirse conforme pro- en fin, Meleagro dice: “etólidas compórten-
pone de Agelaos (i.e., Pa). Si los etólidas ig- se Dm” (Sin olvidar que puede haber etólidas
noran a Agelaos y mantienen la situación que se comporten, o quieran comportarse
jurídica cero, entonces no se produce nin- D0). Esta situación plantea a los etólidos
guna innovación jurídica. una alternativa del orden siguiente:
Pero, si por lo contrario, los etólidas obe-
decen a Agelaos, observando y aplicando (((0 [0]) Pa [Da]) Pe [De]) Pk [Dk]) Pm [Dm])
(ejecutando) Pa, dando origen al orden
jurídico Da, entonces, eo ipso, los etólidas mantener el momento D0 (cero) o, bien,
“asumen” (aunque no lo expliciten) un seguir la normatividad Da , propuesta por
presupuesto heurístico ineludible: Agelaos; o la nomatividad De , propuesta
por Épafos; o la normatividad Dk, propues-
“hay que comportarse como lo prescribe ta por Klimene, o bien, seguir la normati-
Agelaos”. vidad Dm, propuesta por Meleagro.
Si asumimos que los etólidas establecen
95 Vide supra, Hobbes. una comunidad política llamada “Etolió-
96 Vide supra, Rousseau.
97 Cf.: Of Laws in General (Ed. Hart), op. cit. Apareció
polis”, entonces alguno de los individuos
nueva edición de esta obra de Bentham: Of the Li- mencionados, solo uno, será el primer le-
mits of the Penal Branch of Jurisprudence, editado por
Philipp Schofield. Edición traducida al español: De gislador, y solo uno de los derechos pro-
los límites de la rama penal de la jurisprudencia (tr.
Rolando Tamayo), México, unam, 2016.
puestos, su derecho positivo. De entre Age-

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 49


laos, Épafos, Klimene y Meleagro, ¿quién bien, los actos que aplican o se conforman
deviene en primer legislador de Etoliópo- a D0 (un orden jurídico en cualquier mo-
lis? Aquel que es habitualmente obedecido mento), en tanto aplican u observan lo
por los etólidas. prescrito en D0 proporciona, así, el crite-
Supongamos que, por el contrario, los rio que nos permite determinar qué actos
etólidas actúan Dk, “comportándose como son “regulares “ y qué actos no. De esto
prescribe la propuesta de Klimene, enton- se sigue que todos los actos que se produz-
ces, eo ipso, los etólidas asumen un presu- can de conformidad con el procedimiento
puesto ineludible: ‘hay que comportarse previsto, serán actos jurídicos “regulares”
como lo prescribe Klimene’. En este últi- y, por consiguiente, entidades de un deter-
mo supuesto, la propuesta de Klimene se minado orden jurídico:98 el orden jurídico
convierte en el primer acto (a1) del orden fundado por Rex.
jurídico Dk. Al igual que el establecimiento de N1, su
Pensemos ahora en un orden jurídico mantenimiento es producto de un proce-
cualquiera, el cual se compone de una dimiento de creación jurídica que ignora
constitución legislada de diversos tipos, la legislación. En efecto, el mantenimien-
tratados, reglamentos, precedentes, et- to de N1 es producto de un procedimiento
cétera. ¿Qué ocurre cuando la propuesta consuetudinario, cuyos elementos y re-
contenida, en una constitución legislada sultados son exactamente los mismos que
o en cualquier instrumento deja de ser he descrito anteriormente. Podría decirse
seguida por actos que la apliquen u obe- que es el mismo procedimiento: Mientras
dezcan? La respuesta es simplemente, no Rex sea habitualmente obedecido: que N1
se crea el orden jurídico propuesto en ese sea mayormente eficaz, el orden jurídico
instrumento. de la comunidad será el que Rex estable-
Cabe señalar que el “momento cero” ció; de la misma forma, la base del sistema
puede representarse en cualquier orden es una “costumbre delegante” que prescri-
jurídico momentáneo de un orden jurídi- be, “compórtense como lo ordena Rex”.
co positivo.

98 Es importante señalar que los sistemas jurídicos


XV. Creación regular o irregular
contienen –lo reconozcan o no– criterios de iden-
tidad que nos permiten identificar como entidades
a. El mantenimiento de D1 del sistema a los actos anulables: aquellos actos que
son, provisionalmente, entidades del sistema mien-
Establecida la norma consuetudinaria NC: tras son sustituidos por actos regulares no anula-
bles. Existe pues, en todo sistema jurídico una perte-
“compórtense como prescribe Rex”, sus nencia provisional para ese género de actos. Sobre
prescripciones se convierten en los actos este respecto, vide, Kelsen, “La garantía jurisdiccio-
nal de la constitución” (La justicia constitucional),
constituyentes del orden jurídico. Ahora pp. 484-485 (Anuario).

50 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
b. La substitución de N1 qué manera la propuesta contenida en los
La interrupción de la aplicación prevista actos irregulares puede llegar a modificar
origina lo que comúnmente se ha llama- la normalidad existente.
do “irregularidad”. Son actos irregulares Pensamos en un momento cualquiera de
aquellos que no se conforman con lo esta- un orden jurídico establecido e imagine-
blecido o prescrito en el sistema jurídico mos cualquier acto jurídico irregular que
previsto (en última instancia, por el pri- pretende establecer una normatividad di-
mer acto condicionante del sistema, esto ferente. Ahora bien, todo comportamien-
es por A1). Por tanto, los actos irregulares, to jurídicamente irregular plantea a los
al no conformarse con lo que N1 dispone, destinatarios del orden jurídico (al igual
no pertenecen la sistema del cual N1 es su que en el caso anterior) una disyuntiva del
fundamento. tipo siguiente:
El problema de la irregularidad no se
agota con señalar qué actos son ajenos al D1 P* [D*]
sistema la irregularidad no tendría nin-
gún sentido si se limitara a indicar los Mantener el orden jurídico D1 o bien ad-
actos ajenos al orden jurídico previsto. El herirse a la propuesta P* de establecer el
verdadero problema de la irregularidad orden jurídico D*.
consiste en explicar de qué manera los ac- La propuesta P* es un acto irregular, por-
tos irregulares (actos contra legem, desuetu- que no sigue lo prescrito por D1 para modi-
do, insurrección, et sit cetera) pueden llegar ficar el orden jurídico. La propuesta P* es
a sustituir, total o parcialmente, el orden un acto anarco derogante que busca ser se-
jurídico considerando.99 Esto es, ver de guido con objeto de instalar D*, un orden
jurídico diferente.
99 La determinación de la conformidad o inconfor-
midad de un acto con las normas jurídicas que le
No obstante el lugar que pretenda ocu-
preceden pueden ser, sin embargo, un problema par en el condicionamiento sucesivo, e
bastante complicado. En particular cuando existen
procedimientos destinados a garantizar la regula- independientemente del mayor o menor
ridad del procedimiento previsto de creación. En
estos casos habrá que distinguir entre la regulari-
número de elementos que puedan llegar
dad o irregularidad que resulta de la conformidad acompañarlo, el comportamiento irre-
o no conformidad de un acto con las normas que lo
regulan y la regularidad o irregularidad que resul- gular constituye una propuesta de una
ta del procedimiento de control de regularidad, en nueva normatividad que busca ser segui-
donde un acto prima facie regular, puede ser decla-
rado irregular por decisión del órgano de control. da o continuada. Tal propuesta, en cierto
El procedimiento de control, al declarar regular o
irregular un cierto acto, puede llegar a modificar el
sistema jurídico previsto (Cf. Sobre el sistema jurídico co. Por el contrario, el sistema busca, en gran me-
y su creación, op. cit., p. 102). dida, que sus cambios se produzcan regularmente
Ciertamente, la substitución irregular no constitu- mediante procedimientos previstos de creación
ye la única forma de sustitución del sistema jurídi- jurídica.

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 51


modo, niega o contradice, parcial o total- otro, entonces puede decirse que los des-
mente, la normatividad existente. tinatarios, insisto, aceptan (hacen posible)
La disyunción que plantea el acto jurí- una normatividad y no otra. Los destina-
dico novedoso tiene que resolverse. Esta tarios, al continuar y establecer la norma-
solución corresponde a los miembros de tividad propuesta en un cierto orden jurí-
la comunidad.100 Aquí, como en el caso dico, quieren o aceptan esa normatividad
anterior, la opción de los destinatarios se y no otra. Ahora bien, si los destinatarios
manifiesta a través de su comportamien- quieren lo mismo; es decir, si aplican los
to: obedeciendo o aplicando la propuesta mismos actos, entonces puede afirmar-
contenida en cualquiera de los disyuntos, se que convienen en establecer un cierto
es decir, establecido el orden jurídico de orden jurídico. Es esto lo que, a mi juicio,
cualquiera de las propuestas. debe entenderse como el carácter conven-
Imaginemos que a N1 (conjunto de pres- cional de la creación jurídica.
cripciones de Rex) se opone un conjunto
de prescripciones irregulares, −queridos c. El caso de México
por un grupo de individuos−. De esta for- Lo anterior puede perfectamente verifi-
ma, los destinatarios del orden jurídico carse con cualquier sustitución de un or-
enfrentan la disyunción referida que ha- den jurídico por vía revolucionaria. Pen-
brán de resolver con su comportamiento. semos, por ejemplo, en el caso de México,
Esto es, aplicar u observar lo dispuesto durante la vigencia de la Constitución de
por D1, rechazando la normatividad pro- 1857, a consecuencia de los graves sucesos
puesta por P*, o bien, obedecer o aplicar de la Decena Trágica y los asesinatos del
P* substituyendo parcial o totalmente el presidente Madero y del vicepresidente
orden jurídico establecido. Pino Suárez. Caso analizado detallada-
¿Qué ocurre con la propuesta rechaza- mente por Ulises Schmill, de quien tomó
da? Esta pierde o no adquiere −según el las siguientes líneas. Primeramente, Sch-
caso− el carácter de norma de un orden mill transcribe acertadamente la sucinta
jurídico positivo. descripción de Charles Cumberland:
De lo anterior se infiere que si los desti-
natarios aplican u observan la propuesta De acuerdo con la Constitución [de 1857],
contenida en un evento jurídico y no en las renuncias del presidente y del vice-
presidente dejaban como sucesor al mi-
100 Ciertamente, puede darse el caso de que algunos nistro de Relaciones Exteriores, Pedro
destinatarios sigan N1 [a] y que otros siguan P* pro- Lascuráin; pero este debía asumir el
duciendo dos órdenes jurídicos diferentes; tal po-
dría ser el caso de una secesión triunfante, de una cargo y rendir la protesta de rigor ante
guerra de independencia, etcétera.

52 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
la Cámara de Diputados. En este punto
se cifra el problema de la legalidad de Algunos gobernadores otorgaron inme-
Huerta, aún en el caso en que la renun- diatamente su reconocimiento a Huerta,
cia de Madero se acepte como válida. En otros guardaron prudente y temeroso si-
cuanto la Cámara acepto las renuncias, lencio y solo uno, el de Coahuila, Venus-
muchos de sus miembros abandonaron tiano Carranza, adoptó una actitud de
el recinto: es sudoso que hubiera el quó- completo rechazo. El 18 de febrero de
rum requerido para escuchar la protesta 1913, Venustiano Carranza, en su calidad
de Lascuráin como presidente. Al cabo de gobernador del Estado de Coahuila,
de unos minutos, Lascuráin nombró a dirigió una circular a todos los funciona-
Huerta Ministro de Gobernación y en rios de la Federación y de los Estados, en
seguida renunció. Para ser legales, cada la que daba a conocer sucintamente los
uno de estos pasos debió ser aprobado motivos que lo llevaron a realizar el acto
por la Cámara de Diputados, pero con- de invalidación del nombramiento de V.
forme esas acciones se sucedían, el nú- [sic] Huerta como presidente…102
mero de diputados disminuía. Aún so-
bre bases legales técnicas, el gobierno de Después de transcribir el contenido de la
Huerta fue un gobierno ilegal.101 circular, Schmill señala que “a iniciativa
de Venustiano Carranza, el XXII Congreso
A continuación, Ulises Schmill comenta, del Estado, Libre, Independiente y Sobera-
transcribo: no de Coahuila emitió el Decreto 1421” de
dos artículos que transcribe:
El 18 de febrero de 1913 el general Victo-
riano Huerta envía a todos los goberna- Artículo 1.º Se desconoce al general Vic-
dores de los Estados locales de la Repú- toriano Huerta en su carácter de Jefe del
blica el siguiente escueto telegrama: Poder Ejecutivo de la República, que dice
él le fue conferido por el Senado y se des-
“Autorizado por el Senado he asumi- conocen también todos los actos y dispo-
do el Poder Ejecutivo, estando el pre- siciones que dicte con ese carácter.
sidente y su gabinete bajo arresto”. Artículo 2.º Se conceden facultades ex-
traordinarias al Ejecutivo del Estado en
101 Cumberland, Charles, La Revolución mexicana. Los todos los ramos de la administración Pú-
años constitucionalistas, México, Fondo de Cultura
económica, 1992, pp. 24-25. Tomado de la transcrip- blica, para que suprima lo que crea con-
ción que hace Schmill en su libro Las revoluciones. veniente y proceda a armar fuerzas para
Teoría jurídica y consideraciones sociológicas, Madrid,
Trotta, 2009 (Colección Estructuras y Procesos. Se-
rie Derecho), p. 35. 102 Schmill, Ulises, op. ul. cit., pp. 35-36.

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 53


coadyuvar al sostenimiento del orden irregular, que pretende convertirse en el
constitucional de la República.103 primer acto de un nuevo orden jurídico: es
un acto revolucionario.105 En efecto, como
Como puede observarse la XXII Legis- es de explorado derecho, la Constitución
latura del Estado de Coahuila (entidad fe- de 1857, no facultaba a los gobernadores
derativa), emitió el Decreto Número 1421 de los Estados o a las legislaturas locales
por el cual, primeramente, desconoce el a revisar, anular o a sustituir los actos de
nombramiento del presidente de la Repú- la autoridad federal ni, mucho menos, a
blica y, acto seguido, concede facultades levantarse en armas para ejecutar tales
extraordinarias al jefe del Ejecutivo del decisiones. El Decreto 1421 de la XXII Le-
Estado con el propósito de “armar fuerzas gislatura de Coahuila, así como los actos
para coadyuvar al sostenimiento del or- de Venustiano Carranza, son actos irregu-
den constitucional de la República”. lares (no aplican ni observan ninguna dis-
De acuerdo a la constitución entonces posición local o federal del orden jurídico
vigente, no corresponde a ninguna enti- entonces existente); son actos revolucio-
dad federativa el control de la constitucio- narios en la medida en que pretenden sus-
nalidad de los actos de órganos federales. tituir, por vía irregular, el orden jurídico
Tampoco tienen facultades para levantar existente con objeto de instalar uno nuevo;
un ejército (“armar fuerzas”) para deponer el orden provisional revolucionario; orden
a un presidente cuya designación conside- que va desde la emisión del Decreto 1421
re irregular. mencionado, hasta la promulgación de la
Analizando con atención el acto realiza- Constitución vigente el 1.º de mayo de 1917.
do por la XXII Legislatura del Estado de
[se individualiza]; ello nos permite afirmar que el
Coahuila, se tiene que convenir que es un acto de instauración de un orden efectivo es un acto
creador de normas… La consideración de que un
acto “irregular” (no puede referirse a nin- conjunto de normas forman un orden [jurídico] se
guna norma positiva anterior, salvo a la encuentra basada en la observación empírica que
se individualiza [se aplica] o –concluye Schmill− lo
norma del derecho internacional que esta- que es lo mismo, que es eficaz”. Las revoluciones. Teo-
ría jurídica y consideraciones sociológicas, op. cit., pp.
blece el principio de eficacia).104 Dicho acto 34, 37 y 38 (los corchetes y el énfasis son míos); vide
etiam, El sistema de la Constitución mexicana, Méxi-
103 Ibid. pp. 36-37. co, Manuel Porrúa, 1971, pp. 68 y ss.
104 El principio de eficacia según el cual un orden jurí- Este argumento de Schmill sirve para confirmar el
dico tiene que ser eficaz para ser válido, es una nor- hecho de que la eficacia funciona no solo como con-
ma positiva del derecho internacional. De acuerdo dición necesaria, también suficiente de la validez.
con el derecho internacional, una autoridad efecti- En la medida que hay “actos subsecuentes” hay efi-
vamente establecida (habitualmente obedecida) es cacia. Existe aquí −como dice Schmill− “una lógica
la autoridad legítima y sus disposiciones derecho irrefragable”.
positivo (desde el punto de vista del derecho inter- 105 En el primer acto del orden jurídico reducido y pro-
nacional). Sobre este particular señala Schmill: “… visional de la revolución (vide, Las revoluciones. Teo-
debe observarse que se ha dictado una norma… y ría…, pp. 31-42, præsertim, p. 34; vide etiam, El sistema
que subsecuentemente es cumplida y confirmada de la…, pp. 55-81, præsertim: p. 69).

54 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
De esta forma, la aparición del multicita- nales consuetudinarias al lado de la legis-
do decreto planteó, a los destinatarios del lación constitucional escrita y “rígida”.
orden jurídico mexicano de la disyunción El esquema de la disyunción es el mismo
ya mencionada, a saber: solo que se trata de una modificación par-
cial. La solución de la disyunción, como
D1 P* [D*] siempre, corresponde a los destinatarios.
Si estos “deciden” comportarse como pres-
observar la Constitución de 1857 o bien cribe D 1 (haciendo caso omiso del com-
aceptar la propuesta (constitucionalista) portamiento irregular, el cual podría ser
que instala un régimen revolucionario. considerado un ilícito) o dando ocasión a
Esta disyunción se resolvió a favor del or- que el procedimiento de control de la re-
den jurídico revolucionario.106 En efecto, gularidad (legalidad o constitucionalidad)
la revolución constitucionalista fue in- lo anule. En este último caso, no modifica
crementando su ámbito personal de vali- la constitución vigente (no habiendo sido
dez (aumentan seguidores y sometidos). para el sistema previsto un acto sin efec-
Asimismo, fue incrementando su ámbito to o anulable). Si, por el contrario, el acto
espacial de validez a medida que fue do- irregular es aplicado u observado (por ac-
minando más partes del territorio nacio- tos subsecuentes) por no haberse seguido
nal, así hasta que el orden revolucionario los sistemas de control de la regularidad
triunfante fue mayormente eficaz. o no obstante estos, entonces el acto irre-
gular (no importa el lugar que ocupe en la
XVI. La modificación constitucional cadena de validez, si es seguido por actos
contra legem de aplicación, esto es, si se individualiza)
modifica irregularmente los criterios de
La modificación irregular de la constitu-
membresía del sistema, esto es, se modifi-
ción no solo se realiza cuando el orden
ca el criterio que la constitución establece
jurídico que establece es sustituido. La
para reconocer los actos jurídicos que la
constitución también se modifica irregu-
aplican.107
larmente cuando lo que establece no se
aplica o no se aplica y se realiza una con- 107 “La única respuesta completamente satisfactoria a
este problema, parece ser la que proporciona Kel-
ducta diferente. Este último es un caso sen, que señala que, si el derecho consuetudinario
bastante extendido en el que se puede ob- existe al lado del derecho legislado, la constitución
(en sentido material) tiene que instituir a las cos-
servar la presencia de normas constitucio- tumbres como un hecho creador de derecho”. (Bray-
brooke, E., “Custom as a Source of English law”, en
Michigan Law Review, vol. 50, 1951, p. 91); Cf., Kelsen,
106 A favor del movimiento constitucionalista, cuya efi- Teoría general del derecho y del Estado, op. cit., p. 148.
ciencia se impuso, también, sobre los otros órdenes En el mismo lugar, Kelsen agrega “pero la constitu-
jurídicos reducidos o revolucionarios. ción misma puede, en todo o en parte, ser no escri-

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 55


Si esto es así, si el acto irregular devie- XVIII. Referencias
ne parte del orden jurídico, este acto tiene
que poseer en la constitución un criterio Barker, E., Greek Political Theory, México, Fon-
que nos permita incluirlo y reconocerlo. tamara, 2013.
Una vez incluido y reconocido será regu- Braybrooke, E. K., “Custom as a Source of
larmente aplicado por actos subsecuentes English law”, en Michigan Law Review.
con lo cual se sustituye parcialmente el Bréhier, E., Histoire de la philosophie, París,
sistema anterior (tanto por lo que toca a Press Universitaires de France, 1965.
sus entidades como en lo que respecta a Burnet, J., “La teogonía es un intento de redu-
los criterios de identidad los criterios de cir todas las historias sobre dioses en un
identidad establecidos en la Constitución). sistema unitario”. Early Greek Philoso-
Al sustituirse irregularmente los procesos phy, Nueva York, Meridian, 1964.
de creación de normas del sistema, este se Cumberland, C., La Revolución mexicana. Los
modifica y, con él, los criterios de identi- años constitucionalistas, México, Fondo
dad que la constitución establece. de Cultura Económica, 1992.
Diógenes, Laertio, Filoso&fwn bi/oi, cit., II, 16.
XVII. Los elementos persistentes en Faller, James E. & Cook, Sir Alan H., “Gravity”,
estos procedimientos Newton’s, Law of Gravity, en Encyclopæ-
dia Britannica, Encyclopædia Britannica
En todos los casos expuestos se advierte Ultimate Reference Suite, DVD, 2014.
que existen dos elementos persistentes, la Freeman, K., Ancilla to the Pre-Socratic Philoso-
propuesta de una determinada normativi- phers. A Complete Translation of the Frag-
dad y la adhesión o aceptación convencio- ments in Diels. Fragmente der Vorsokati-
nal. Estos elementos funcionan de acuer- ker, Oxford, Basil Blackwell, 1962.
do con la fórmula: “x es Rex si, y solo si, x Gény, F., París, Librairie du Recueil Sirey, s/a, t.
es habitualmente obedecido”. II: Les sources généarles des sytèmes juridi-
ques actuels.
Gesammelte Aufsätze zur Wissenschaftslehre.
Die Objectivität sozialwissenschaftli-
cher und sozialpolitischer Erekentnis.
ta, ser derecho consuetudinario. De esta manera, Giannantoni, G. [Ed.] I presocratici, Roma/Bari,
podría ser debido a la costumbre que la costumbre
fuera un hecho creador del derecho” (vide etiam, Laterza, 1975.
Kelsen, “La garantía jurisdiccional de la constitu- Guthrie, W.K.G., A History of Greek Philosophy,
ción”, tr. propia, en Anuario Jurídico, México, unam,
Instituto de Investigaciones Jurídicas, año I, 1974, Cambridge, University Press Cambrid-
pp. 469-515 (reimpresa en forma de libro: La garan-
tía jurisdiccional de la constitución (La justicia consti- ge, 1969.
tucional), op. cit., pp. 510-511, Anuario).

56 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A
Hart, H. L. Laws in General. Kelsen, H., La garantía jurisdiccional de la cons-
Hart, H. L., The province of Jurisprudence Deter- titución (La justicia constitucional)
mined and the Uses of the Study of Juris- Kelsen, H., Reine Rechtslehre, Teoría pura del
prudence, Indianapolis, Hackett Publi- derecho, Buenos Aires, Universitaria de
shing Co. Inc. 1998. Buenos Aires.
Hermann, Die Fragmente der Vorsokratiker Kelsen, H., Reine Rechtslehre, Teoría pura del
Griechisch und Deutsch, Weidmann (Ed. derecho.
Kranz, Walther), 1972. Kelsen, H., Teoría general del derecho y del Es-
Hobbes, T., Leviathan, or the Matter, Forme & tado.
Power of a Common-wealth Ecclesiasticall La Biblia, Éxodo, 32, 15; 34, 1 & 10.
and Civil. La Biblia, Génesis, 15, 18; 17, 2-21.
Hobbes, T., Politique et philosophie chez, París, La filosofía del derecho del mundo occidental
Presses Universitaires de France, 1953. (Abendlandische rechtsphilosophie),
Ímaz, Í. (tr.), Filosofía de la ilustración, México, México, unam, 1962.
Fondo de Cultura Económica, 3.ª ed., Las revoluciones. Teoría jurídica y consideracio-
2008, 7.ª reimpresión, 1972. nes sociológicas, Madrid, Trotta, 2009.
Jaeger, Werner W. Paideia, los ideales de la cul- Liddell, G. y Scott, R., Greek-English Lexicon.
tura griega, México, Fondo de Cultura Meinen Verlag, F., Philosophie der Aufklärung,
Económica, 1971. Hamburgo, 1932.
Jaeger, Werner W., Alabanza de la ley. Los orígenes Mossé, C., Histoire des doctrines politiques en
de la filosofía del derecho y los griegos, Ma- Grèce, París, Presses Universitaires de
drid, Instituto de Estudios Políticos, 1959. France, 1969.
Kant, I., en Wikipedia, recuperado de http// Platón, Theaetetus, 166d.
de.wikipedia.org/wiki/Imanuel Kant. Polin, R., Politique et philosophie chez Thomas
Kant, I., Rechtsphilosphie Reflexionen, Hands- Hobbes, París, Presses Universitaires de
chrittlicher Nachlas, núm. 764. France, 1953, Principios metafísicos de
Kelsen, H., “La garantía jurisdiccional de la la doctrina del derecho.
constitución”, (La justicia constitucio- Real Academia Española, Diccionario de la len-
nal)”, trad. propia, en Anuario Jurídico, gua española, edición digital, actualiza-
México, unam, Instituto de Investigacio- ción 2014.
nes Jurídicas, año I, 1974. Rechtslehre, R., Teoría pura del derecho.
Kelsen, H., Allgemeine Staatslehre, Teoría gene- Rousseau, J. J., Discours sur l’inegalité [Prefa-
ral del Estado. ce] en Rousseau, Œuvres complètes, París,
Kelsen, H., Hauptprobleme der Staatsrechtslehre. Aux Éditions du Seuil, 1967.

AÑO 3, NÚMERO 4 • ENERO - JUNIO 2019 57


Russell Richards, G., “The Enlightenment” y Tamayo, R., Juris Prudentia: More geométrico.
“The Aufklärung” en Europe, History of, Dogmática, teoría y meta teoría jurídicas,
Encyclopædia Britannica, Ultimate Refe- México, Fontamara, 2013.
rence Suite, DVD, 2014. Tamayo, R., El sistema jurídico y su creación.
S. a., Berlinischen monatsschrift, 2 de febrero, México, unam, 1976.
1784. Verdross, A., La filosofía del derecho del mundo
Schmill, U., El sistema de la constitución mexica- occidental (Abendlandische rechtsphilo-
na, México, Manuel Porrúa, 1971. sophie).
Schmill, U., Teoría del derecho y del Estado, Mé- Vlachos, A., La pensée politique de Kant, París,
xico, unam/itam/Porrúa. Presses Universitaire de France, 1962.
Schwab, G., Las más bellas leyendas de la anti- Westfall, Richard S., Newton, Sir Isaac.
güedad clásica, Barcelona, Labor, 1955.
Tamayo, R., “El excursus: La jurisprudencia
griega”, Elementos para una teoría gene-
ral del derecho.

58 R E V I S TA E S P E C I A L I Z A D A E N I N V E S T I G A C I Ó N J U R Í D I C A

También podría gustarte