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INTRODUCCIÓN Vamos a trabajar la oración más importante para los cristianos, el padre nuestro a través
del juego.
OBJETIVOS - Comprender que no solo son palabras que recitamos, si no que tienen significado.
- Rotuladores, permanentes,
- Pegamento
- Tijeras
- Papel continuo
DESARROLLO DE LA SESIÓN
EXPERIENCIA
Al comenzar la actividad se les hará una serie de preguntas para posicionarnos en el tema que
vamos a tartar. ¿Cuál es la oración más importante para los cristianos? ¿Cuál es su origen? ¿Te
sabes la oración? ¿Quién nos enseña a rezar? ¿Nos ponemos todos los días en las manos del padre
para que se haga su voluntad? Lo más importante… ¿conocéis la oración del padre nuestro?
Cuando entremos al lugar donde nos toque, nos colocaremos en círculo compartiendo nuestra
opinión y experiencia sobre rezar. Les diremos a los niños que la actividad está enfocada en el
Padre Nuestro pero que vamos a analizarlo de una manera diferente que será plasmándolo en un
papel continuo entre todos de la manera que sea mientras que todos participen, pero se vea
claramente la oración (tipo comic, viñetas...)
Para acabar, leeremos un fragmento de la biblia y rezaremos juntos el padre nuestro.
REFLEXIÓN
Les animamos a expresar sus pensamientos y sentimientos hacia el acto de orar. ¿Rezas cuando
estás solo, cuando te sientes mal, cuando te sientes bien…? ¿Te sientes cómo cuando rezas?
Dejamos que den su opinión sin juzgarles. Al terminar les explicamos que la oración es una forma
de dialogar con Dios. Cuando recitamos una oración llamamos al señor, que nos acompaña en
nuestra tarea.
“Aconteció que estaba Jesús orando en un lugar, y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo:
Señor, enséñanos a orar, como también Juan enseñó a sus discípulos. Y les dijo: Cuando oréis, decid:
Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad,
como en el cielo, así también en la tierra. 3 El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. 4 Y perdónanos
nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todos los que nos deben. Y no nos metas en
tentación, más líbranos del mal.
COMPROMISO
Aprender a rezar, buscar unos minutos durante el día en los que reunirse con Dios a través de la
oración. Pueden dar gracias, pedir perdón o pedir por alguien a quién estimen. El sábado siguiente
compartiremos si han cumplido su compromiso y cómo se han sentido.
EVALUACIÓN DE LA ACTIVIDAD